Entro en el templo y veo a un orco y un humano, me acerco a ellos
- Urk busca a Grimm, ¿sabeis quien es Grimm?
Mire a mi alrededor por si alguien respondiía o mostraba señales de saber de quien hablaba, después miré a las dos personas que tenía enfrente
Balo siguió mirando fijamente a los ojos. Los entrecerró unos segundos y luego negó con la cabeza. No le importaba mucho que hiciese o que buscase aquel orco, aunque claramente prefería su compañía.
- Tu orco, ¿tu fuerte? Urk buscar a Grimm, después Urk ir a una misión peligrosa, ¿tú querer ir con Urk?
Balo hace una extraña mueca. Balo ser orco más fuerte. Matar humanos... dice con una sonrisa malvada tras lo cual ríe profúndamente.
¿Grimm? Dice Néstor echando un ojo al listado de nombres. Me temo que no, aquí no ha venido ningún Grimm a apuntarse. Al menos no con ese nombre.
Luego miró a Balo, ¡Ey! ¡Aquí no se viene a matar a nadie! ¿Entendido? Se considera que la gente es suficientemente responsable como para saber cuando parar el combate. ¡Además tampoco sanamos a nadie! ¡No altruistamente hablando!
Pero si vosotros dos queréis combatir, tendréis que esperar a la tarde, que es cuando todos los participantes vendrán. Mientras tanto, os tocará esperar.
- Urk no luchar, Urk tener trabajo que hacer, Urk buscar a Grimm
Si no estaba ahí, quizas pudiera buscarlo en el templo de Boccob, en algun lugar tendría que estar, ese hombre estaba asustado de verdad, por lo que debio pasar hoy o ayer, no hace tanto, no podría haber salido de la ciudad tan pronto y herido, tendría que haber curado sus heridas...
Pues aquí no está. No puedo ayudarle, lo lamento.
Se me acababan las ideas, no estaban en los templos, ¿donde podía estar? Las tabernas, seguramente estaría descansando, yo venía de una, así que me dirigiría a la otra, me gire sin decir nada y me fui a La Pezuña en la Boca
Me pico solo yo ya que solo he puesto pensamientos, no he dicho nada
Edita máster: Ya, pero has hecho acciones y es mejor postear siempre para todos los presentes en la escena.
Balo dejo que aquel decrépito horco se fuera. Mejor estar sin él... a saber que perseguiría aquel bastardo! Simplemente se sentó con los brazos cruzados y esperó la hora de la matanza...
Nestor miró al orco que se había sentado allí. ¡Pero no te quedes ahí parado! ¡Aún hay mucho día por delante y queda mucho tiempo! Hasta la hora de la arena puedes hacer muchas cosas, incluído tratar de convencer a otros combatientes de que se inscriban. ¿Qué te parece si te das una vuelta y tratas de traer más adeptos a este templo?
Hmmmmpf... dijo resignado el orco. El don de la palabra no iba con él, pero igual tenía razón aquel idiota y podía meterse en líos. No tenía porque esperar hasta que anocheciera para combatir. Así que Balo simplemente se dio la vuelta e hizo un gesto con leve con la mano, parecía una despedida, pero con una delicadeza que contrastaba con la rudeza del orco. Parecía estar riéndose de aquel hombrecillo. Balo puso rumbo a La Dríada bailarina, esperando ver dríadas bailando en alguna especie de baile erótico.
Voy a La Dríada bailarina (Taberna)
Un muro de piedra de casi dos metros y media de altura rodea este edificio de piedra. Los tejados están cubiertos de tejas de color sangre, y los laterales de la elevada estructura consisten en enormes pilares tallados para representar a diversos hombres y mujeres luchando, cada uno armado con un arma diferente o realizando alguna proeza de fuerza. Como si estas esculturas no bastasen para definir la función del edificio, un gigantesco disco de piedra con el símbolo de Kord pende sobre las puertas gemelas de roble de su fachada
Todos los lugares dedicados a las deidades me parecen imponentes. Claro está que algunos más que otros y este no se quedaba corto. Me distraigo un poco observando las figuras y sus acciones y admirando lo diferentes que pueden llegar a ser los templos.
Busco a alguien a quien pueda preguntar, no parece que haya mucha gente en ese lugar, y sin duda alguna si han pasado Dimdel y Mordrogaht por aquí (cosa que comienzo a dudar) sabrán de ellos.
¿Hola? Estoy buscando a dos compañeros, me han dicho que han podido pasar por este lugar. Un caballero de fiera mirada y bigote inolvidable y un Gnomo parlanchín, tal vez solo hayan pasado un instante a preguntar algo...tal vez sepan de ellos...
Ha sido un error separarme tanto de ellos. Había pensado quedarme solo un poco más retrasado, pero al final se me hizo demasiado tarde. ¿habrán ido a buscar alguna taberna?. Lo bueno es que en la de los lagartos seguro que no están...
Pues lo lamento, pero por aquí no han pasado. Pero ese caballero del que hablas, ¿no estaría interesado en participar en nuestra arena? ¡E incluso usted mismo, parece muy hábil en combate! ¿Qué le parece la idea?
Mmm, me temo que tengo que encontrarlos...-digo como respuesta. Aunque lo de la arena...he escuchado algunas cosas por ahí, tal vez sea interesante y seguramente Mordrogath y Dimdel estén ya cenando.
¿En qué consiste exactamente la arena?¿Se combate a primera sangre o algo así?¿hay...algún tipo de premio?
Sin el caballero cerca, siento que quiero explorar otras posibilidades. Tengo que llevar las flores para recibir el pago, pero tal vez pueda llenar la bolsa un poco más con esto de la arena...
En cuanto el sol se ponga y estemos en pleno Ocaso. Los combatientes que se hayan apuntado a la arena, vendrán a participar en él.
Se organizarán combates de uno contra uno, y perderá aquél que se rinda el primero. La intención es que nadie caiga en el combate, pues no ofrecemos curaciones de forma gratuita. De hecho ahí estaba el negocio de todo aquello. Así que, cada uno debe ser consecuente con sus limitaciones y saber cuando parar. El que logre derrotar a su rival, se llevará un premio de 10 piezas de oro. Y si hay más participantes, podrá enfrentarse contra otros ganadores.
Si quieres participar tendrás que apuntarte allí. Dijo señalando una capilla dentro de la catedral. Todo está permitido en este tipo de combates. Dijo con una sonrisa emocionado porque uno más se animara a aquel torneo.
Por una parte siento la "obligación" de encontar a mis amigos. Llevar las flores y embolsarnos una buena suma de dinero. Pero por otra parte me pica la emoción de todo aquello. No es que me crea un buen combatiente pero...diez monedas de oro a cambio de alguna magulladura que podía sanar en unos días.
Sin duda alguna me siento más atrevido que cauteloso.
Está bien, me apuntaré para participar esta noche. miro otra vez la decoración del lugar un poco de acción no me vendrá mal
No pienso que todo aquello pueda llegar a nada grave y Mordrogaht y Dimdel seguro que estarán cenando algo decente y caliente, así que ya tendré tiempo para encontrarlos.
Ale...me apunto a combatir. Tengo que seguir mi espiritu de caotico neutral ;) y total, no creo que esten muy preocupados por mi :P
¡Perfecto, pues ve a la capilla de allí, apunta tu nombre y ya podrás irte! ¡Te esperaremos en cuanto se ponga el sol!
¿Cenar? ¡Si aún estamos en la hora de la comida!
A veces me maravilla lo bien que llevas a los dos PJs... de hecho me planteo si Ap0 (mordrogath) sabe que eres el mismo. XD
Me dirijo a apuntarme donde me han indicado con una sonrisa. Me emociona pensar en lo de esta noche, así que cuando pongo mi nombre lo miro durante un instante satisfecho.
Vendré en cuanto caiga el sol
Dicho esto, pienso en entregar las plantas, comer algo para llenar mi estómago y buscar a mis compañeros para contarles lo del combate.
Leí en la escena de paso del tiempo lo de que el sol caia...y me imaginé que estaba más bajo!!, pero vamos, que si es hora de comer menor!
Bueno, me dirijo hacia el gremio de Alquimistas a toda prisa para entregar las flores y luego buscar un lugar para comer.
Un muro de piedra de casi dos metros y media de altura rodea este edificio de piedra. Los tejados están cubiertos de tejas de color sangre, y los laterales de la elevada estructura consisten en enormes pilares tallados para representar a diversos hombres y mujeres luchando, cada uno armado con un arma diferente o realizando alguna proeza de fuerza. Como si estas esculturas no bastasen para definir la función del edificio, un gigantesco disco de piedra con el símbolo de Kord pende sobre las puertas gemelas de roble de su fachada