Partida Rol por web

Balakia pudo conciliar o no un sueño tranquilo, pero desde luego el lecho era quizá el mas comodo que había provado hasta la fecha, tanto por el colchon, como por la climatización y la limpieza. En cualquier caso a la mañana siguiente, el despertador sonó y despertó a Balakia con el tiempo suficiente para prepararse. Podría conseguir un desayuno en la sala comun, donde habia una maquina de café y otra con algo de bollería, aunque eso podría recordar a la joven evocadora, que para la comida tenía dos opciones, ir al comedor donde por un precio razonable daban una buena comida, o ir a comprarla y prepararla en su departamento, pero eso sería a la hora de comer.

La sala número tres de entrenamiento esta dentro del ala de los cabalistas, pero fuera de la escuela de evocadores, estas distintas salas de entrenamientos son usadas por todas las escuelas del ala, aunque normalmente estan asignadas de antemano, salvo cuando se quieren hacer entrenamientos en comun varias escuelas a la vez.

Una vez en la sala de entrenamiento Balakia pudo ver a unas diez personas mas o menos, todas ellas con el traje de evocador al igual que ella. Aquel pabellón era bastante amplio, y había muñecos de entrenamiento en un lateral hechos de distintos materiales y formas, tambien puertas a varias salas de almacén. Tambien en un cuadrado hacia la izquierda hay un enorme proyector de hologramas que de momento permanecía apagado.

Todos los presentes parecen alumnos, Elena, o quien fuese a dirigir ese entrenamiento no había llegado, aun era pronto. Muchos hablan entre si, tambien alguno que otro hecha una mirada indiscreta a Balakia.

Balakia no sabría determinar cuándo fue la última vez que había dormido en algo merecedor de llamarse "cama", de hecho, no sabríaa determinar cuándo había sido la última vez que había hecho algo merecedor de llamarse "dormir".

Siempre alerta, siempre a escondidas, tratando de evitar ser descubierta por las hordas de demonios mientras al mismo tiempo trataba de reponer energías... abandonarse al sueño era un lujo que no podía permitirse en las ruínas de Nueva York, tan sólo una cabezada traidora escasos minutos tras encontrar un lugar enrevesadamente escondido y para nada cómodo, cálido o apetecible.

Precisamente por aquello, la oportunidad de poder echarse sobre un colchón limpio y mullido sin tener que estar en alerta máxima para averiguar por dónde le vendría el siguiente ataque hizo que cayera rendida y descansara toda la noche del tirón sin ni si quiera moverse de la postura con la que se había tumbado inicialmente.

Por supuesto aquello se notó a la mañana siguiente. Al levantarse, la mirada de la muchacha había recuperado aquella profundidad algo mística y sus ojos volvían a presentar un aspecto cristalino, como dos pedacitos azules de hielo, libres al fin del velo de agotamiento que los había entelado el día anterior. De nuevo se movía con gracilidad y sin a rrastrar los pies... de modo que se acicaló un poco, vistió su recién adquirido uniforme de evocadora y se encaminó hacia la sala de entrenamiento Nº3 con tiempo de sobra como para llegar allí seis o siete minutos antes de las diez de la mañana.

Cuando llegó a su destino, vio que ya había puñado decente de evocadores, diez no era muchos pero le parecía bien, en su opinión, mejor cuanto menos caras tuviera que aprenderse... por otro lado, a menos gente, más concentrado sería el avance.
Se detuvo unos pasos nada más entrar, apoyando el peso del cuerpo en una pierna en lugar de ir a hablar con nadie en concreto... pese a que no le pasaron desapercibidas las miradas casuales que cayeron sobre ella, no parecieorn importarle, simplemente miró contranquilidad los alrededores, identificando la sala.

Al parecer quien fuera a entrenarles aquella mañana aún no había llegado así que se limitaría a esperar, tampoco tenía muchas ganas de acercarse a hablar con nadie.

La puerta de la sala se abrió, la mayoría de los presentes no había visto nunca a la maestra Eva, pero no era dificil imaginarse que era ella.

-Muy bien, atentos todos, tenemos dos invitados al entrenamiento de hoy, ella es la maestra Eva de la escuela de psiquicos, y el es otro alumno nuevo, y dado que no es el unico comenzaremos por repasar las cuestiones mas básicas.

Luego me giro a psiquicos.

-Explicaré un par de cosas, la sala es vuestra.

Acto seguido me acerco al grupo de evocadores.

-Bien, cada uno de vosotros está en esta escuela por una habilidad natural para manejar y transformar parcialemente la energía del cuerpo, esta energía generalmente se materializa como agua, hielo, fuego y electricidad. Lo primero y mas importante que debeis tener en cuenta son las afinidades de vuestros objetivos, podría decirse que los opuestos son fuego/hielo y agua/electricidad, los ataques elementales al elemento contrario causarán mas daños a vuestros objetivos, y en caso de que no sean afines a ningun elemento el daño no variará. Crear la acumulación de energía en las manos no es complicado, pero si saber tratarla para que no nos dañe a nosotros mismos.

Me acerco a uno de los muñecos de la sala y comienzo a crear en mis manos una bola de fuego.

-Como podeis ver hasta que la energía no está totalmente acumulada el fuego no resulta peligroso, pero una vez acumulada...

Termino el hechizo y hago un rapido movimiento para lanzarla contra el muñeco.

-Debe ser lanzada inmediatamente si no quereis quemaros o que se desestabilice y salga hacia cualquier lado menos a donde quereis. Los guantes de vuestros trajes os protegerán de parte del daño en caso de que mantengais demasiado tiempo la energía en las manos, pero aun asi no os confieis.

Mis manos se cruzan a mi espalda y dejo espacio libre para que se coloquen ante los muñecos, los cuales estan a 20 metros de distancia.

-Bien quiero que cada uno lance el hechizo ofensivo que mejor se le dé contra los muñecos de entrenamiento. Adelante.

Observo con atención, sobretodo a la nueva alumna.

Era curioso comprobar el grado de satisfacción que alcanzaba Elena con la sola exhibición de sus poderes, en cualquier caso se de sobra lo que significo para ella, aunque ella no sepa lo que significa para mi.

Una vez está ocupada con sus "clases", hablo solo para Adirael.

-Es Elena, la maestra de la escuela de evocadores.

Digo consciente de que no se ha presentado.

-Vamos, haremos algo mas entre tenido.

Camino aun cogiendole de la mano hasta el fondo de la sala, donde había enormes cajas de metal de aproximadamente metro y medio cúbico. A unos 20 metros de aquellas tres cajas me detengo.

-Con la practica, descubriras que la "Energía Oscura" que es la que mueve a los demonios, emite un patrón de onda rojo, si te concentras podras ver ese aura rojiza a su alrededor. Todos los seres vivos de la tierra emiten un patron de onda azul, eso te ayudará a diferenciar a tus objetivos antes incluso de verlos.

Bien, quiero que me digas que hay en esas cajas, concentrate.

Le miro casi de reojo esperando su respuesta.

Balakia giró la cabeza en cuanto escuchó el sonido de la puerta al abrirse... en efecto era quien se esperaba, pero no venía sóla. El chico del día anterior que habían recogido en el convoy junto a si misma también apareció detrás de ella, y la otra... la otra no sabía quien era, hasta que Elena la presentó lo cual provocó que las cejas de la joven de cabello azabache se enarcaran ligeramente con un ribete de curiosidad.

"Joder... casi parece más joven la profesora que el alumno"

Al parecer eran invitados, y al parecer el número de psiquicos era bizarramente pequeño pero aquello no era asunto suyo así que se limitó a centrar su atención en lo que estaba diciendo la maestra de evocadores... "demostración" incluida, y no precisamente con una chispita de fogueo.

La gracia fue cuando aquella mujer soltó que ahora era su turno.

Balakia acababa de llegar el día anterior a Elysium y en una condición bastante pobre... pero aun así le iban a exigir desde el primer día por supuesto, no se había equivocado en esperarse aquello. Desde luego su potencia de disparo había visto días mejores pero eso era algo irremediable.

Se acercó al muñeco que le correspondía y levantó la palma de la mano a la altura del rostro, como si la estuviera mirando pero con expresión concentrada. Al cabo de unos segundos comenzaron a saltar pequeñas chispas blancas de las puntas de sus dedos que zigzaguearon brincando de uno a otro y en un par de segundos más, el número de ellas se había multiplicado, triplicado y cuadruplicado haciendo que se formara una esfera entre azulada y blanca de la que de vez en cuando brincaban pequeños chisporroteos. Era intensamente luminosa, tanto, que para quien no estaba acostumbrado resultaba molesta a los ojos.

La muchacha giró la palma y sacudió el brazo hacia adelante con un movimiento seco en cuanto la bola estuvo formada. Un rayo salió disparado de su mano iluminando y devorando la distancia que la separaba del dummy en lo que dura un pestañeo.
La descarga se estrelló contra su objetivo explotando en un sinfín de de partículas diminutas como trocitos de cristal de hielo que flotaron lentamente hacia el suelo brillando y disipándose a tiempos irregulares.

La expresión en el rostro de Balakia al ver el resultado no parecía satisfecha ni nada que se le asemejase, de hecho torcio el gesto de medio lado y entornó los ojos.

"De risa..."

  La mano de Adirael seguía en posesión inequivoca de su maestra, algo que a pesar de que podría haberlo hecho en otra situación no le intimidaba ni le avergonzaba, le resultaba gracioso pensar en ello y no dudaba en ocultar su sonrisa, una sonrisa que dedicó sin cobro alguno a Elene. Puede que sacase algo de pecho, inspirando a modo de respeto, pero no me cuadré ni hice ningún tipo de saludo militar. Enarqué una ceja ante sus comentarios pero guardé silencio...yo apreciaba el silencio, sólo esperaba que una mujer que hablaba tantisimo lo apreciase también...

  Seguro que sí, mientras más cayen los demás, más puede hablar ella.

 No le había caido mal, y sus formas habían sido buenas desde el principio, pero...percibía algo en ella, en su comportamiento que no la hacían alguien de fiar. Ahora más que nunca tenía que estar atento a este tipo de información...Observé de reojo, interesado, lo que hacían aquellos que llamaban "Evocadores" ignoraba si la compañera que había compartido convoy,el fourhope, conmigo sabía hacer ya esas cosas antes, pero si no era así, para ser el primer día, había avanzado demasiado, mucho más de lo que él había avanzado...desde luego.

  Brutal.

 Saludé con la cabeza, por no perder un mínimo de la poca educación que he mantenido a lo largo de mi vida, no diría que era dura, ¿Para quién había sido fácil? Nisiquiera para todos estos...

 Me dejé llevar por la mano y los pasos de Eva, incluso alegre. Encogiendose de brazos una vez propuesta la tarea sonrió con picardía.

 - ¿No se supone que tendría que hacerlas levitar o algo así? - Casi rió ante su propio comentario. No buscaba ridiculizar a su maestra, y lo hizo en un tono cálido, divertido y bastante bajo, no tenía intención de que Elena le oyese. - Bien - se encogió de hombros nuevamente - Supongo que eso viene luego...

 Se veía muy motivado...

  Por instinto cerró los ojos, no necesitaba ver con ellos, enmudeció y apretó los labios, que tardaron en acostumbrarse el uno al otro hasta quedar inmoviles. Agachó el mentón y apretó los puños. Estaba tenso, quizás demasiado. Comprendió su propio cambio de temperamento, y relajó los dedos que cayeron flexionados, como sus brazos, tomó aire por la nariz y se concentró en las cajas...tratando de dejar la mente en blanco.

 Es sólo Debussy...fue lo último que oyó en su mente antes de conseguirlo...

Observo los resultados en mi PDA la cual está conectada a los muñecos y me revela información bastante precisa. Para ser principiantes no está nada mal.

-Bien recordar siempre que un hechizo elemental bien realizado puede alcanzar una potencia devastadora, con el tiempo y practica aprendereis a acumular energía mas rapido en vuestras manos, de esta forma el hechizo será mas poderoso antes de que esté terminado, sin embargo esto tiene otro inconveniente, los hechizos de gran escala requieren cantidades ingentes de energía, si se abusa de ella en un corto periodo de tiempo, vuestro cuerpo dejará de responder y en algunos casos, si el agotamiento es total, podeis perder la consciencia.

Por eso es importante que tomeis medidas para que esta reserva no se agote, o almenos no lo haga mientras la necesiteis, una de las formas mas simples de recuperar energía es creando una "Carga Virgen", es decir, una cumulación de energía no transformada.

Alzo la mano derecha y en ella se crea una pequeña bola de energia azul.

-Esta bola de energía flotará alrededor de la fuente de energía mas cercana, en este caso yo misma...

Arrojo la bola por encima de mi hombro y esta comienza a rotar a mi alrededor.

-Esta carga puede mantenerse bastante tiempo, pero conbiene consumirla antes de que desaparezca, para ello basta con interponer la herramienta por donde canalazais la energía de salida, es decir, las manos.

Pongo la mano en el camino de la carga y esta se introduce a traves de la piel desapareciendo.

-De esta forma podeis canalizar la energía para que entre en vosotros. Bien, hacer la prueva.

Espero de nuevo a que todos ellos realicen el hechizo y lo consuman.

Adirael, pasados unos segundos pudo notar 4 auras rokizas en aquellas cuatro cajas, una en cada una, yo miro hacia las cajas y hablo.

-Debes saber que la intensidad del aura determina cuanta energía corre por su cuerpo, en este caso, el aura es rojiza y su intensidad es normal. Sería precipietado decir que la cantidad de energía que posee un demonio va directamente ligada a su poder, aunque en muchos casos es asi tambien puede haber casos en que signifique algo distinto, o simplemente, un mero engaño.

Disimuladamente doy dos pasos hacia atras, de forma que sigo a su lado, pero su cuerpo tapa el mio.

-Es conveniente que mejores y te familiarices con la habilidad de "Sentir vida", siempre va a ser mas fiable que un sónar. Sin embargo, hay habilidades (sobretodo las de telequinética), que a la mente le cuesta mas llevar a cabo, y esto es debido unica y exclusivamente a la incredulidad, mucha gente a pensado en algun momento en mover cosas con la mente pero siempre en su subconsciente aceptan totalmente que eso no es posible, por tanto, aunque realmente pudieran, no lo lograrían jamas. Tu si puedes hacerlo y la capacidad de hacerlo mejor o peor consiste en cuanto eres capaz de dominar tu propia mente para aceptar que algo asi es completamente posible. Desgraciadamente, este es un proceso que puede llevar años, y nosotros lo vamos a conseguir... ya.

Alzo ligeramente la mano hacia la primera jaula metalica, y el primer cierre de seguridad salta, acto seguido el segundo y fue cuando comenzaron a oirse gruñidos desde el interior, y finalmente el tercero, fue entonces cuando la jaula se abrió de golpe y de ella salio una criatura que había estado mas que presente en las pesadillas de los presentes los ultimos 10 años.

Los mas cercanos a él son Adirael y Eva, y tras acechar unos segundos no dudó en correr hacia Adirael para atacarle. Entonces fue cuando decidí hacer la sugerencia.

-Detenlo...

Señalo con el dedo al demonio (por si acaso no lo ha visto).

-Paralo o te va a matar.

Balakia observó primero como la maestra de Evocadores husmeaba un trasto extraño, debía de estar midiendo el resultado de los disparos de cada uno o algo de eso... era la primera noticia que tenía de que algo así podía hacerse.

La tal Eva y el chico al que por lo visto habían catalogado de "Psíquico" estaban cuchcheando algo sobre unas cajas que tenían delante, al parecer inmersos en su propia clase.

"Esto es la leche... jamás creí que me vería "recibiendo clases" de una total desconocida para luchar por... unos totales desconocidos. Creo que voy de mal en peor"

Elena creó una esfera flotante y explicó de lo que se trataba, si podía almacenarse energía nunca lo había intentado pero no era mala idea. Por supuesto la mujer demandó que ellos hicieran lo mismo.

"Aunque también tiene sus ventajas"

Volvió a levantar la palma de la mano y se la quedó mirando unos segundos tratando de pensar en cómo lo había hecho ella. Era facil acumular energía pero el quid de la cuestión debía radicar el concentrarla y compactarla en lo que Elena había denominado "Carga Vírgen" en lugar de electrificarla... Es decir, energía propia suya sin mezclar con la energía natural del ambiente que era lo que la transformaba en electricidad.

Entrecerró un poco los ojos con gesto concentrado y al segundo formó una esfera blanca en la palma que creció hasta volverse del tamaño de una pelota de tenis, la lanzó al aire y ésta comenzó a flotar girando a su alrededor.

"Vaya, me ha salido y todo"

El sonido de un "click" le llamó la atenció y pudo ver como la Maestra de Psiquicos hacía algo extraño con una de las cajas, ¿se estaba abriendo sola? lo demencial ya fue cuando lo que salió de dentro fue un demonio que enseguida se lanzó contra Adirael... y lo bizarramente demencial fue la lacónica reacción de Eva que simplemente se quedó mirando "a ver qué pasaba". Balakia enarcó ambas cejas con una mezcla de incredulidad y extrañeza.

"Que sentido del humor más cachondo tienen en este sitio..."

- ¡No! ¡Quieto! - El sonido desgarrador de su garganta golpeó sus cuerdas vocales, vibrantes, fueron segundos lo que tardó aquel demonio en libertarse, había comprobado como Eva liberaba la jaula, como, sin más decidía entregarle a una muerte segura. ¡Pero Adirael no estaba dispuesto a perecer allí! Por un momento creyó que la idea más sensata sería correr hacia Elena y esconderse detrás de ella.

   Y una mierda...

 Pero después, más profundo que esa, una nueva idea, más remota, mucho más descabellada surgió en su mente. Aún tenía la mente de un niño, siempre la tuvo, siempre soñó con los cambios, con lo que hay ahí fuera, no fue crédulo pero le gustaba soñar...y aquello no era un jodido sueño, lo había visto, joder, no podía tratarse de un truco con hilos.

  Eva confiaba en que Adirael podía hacer algo...¿Por qué no lo hacía sin más? Que ella confiase en él...que él confiase en ella...

Respaldó la idea de poder detenerlo con esa confianza, con la fe, la mayor de las confianzas, creer en lo que no se ha visto, en lo que resulta imposible para los demás.

  Tu nunca fuiste como los demás, idiota. Se dijo, su mente procesaba datos mucho más rápido que el tiempo que tardaba en hacerse cualquiera de sus funciones vitales dentro de sus células. Estuvo tentado a cerrar los ojos, a negar y cubrirse con los brazos...pero mantuvo los ojos abiertos, encaró el peligro, y aunque alzó las manos para cubrirse, con las palmas abiertas, acabó reafirmandose.

  ¡Quieto!  ...¡Joder!

 Una gota de sudor frio recorrería su sien...no consideraba el fallo, simplemente, no consideraba nada. Creía en Eva, creía en si mismo...

Aquel demonio corría a una velocidad increible y a unos cinco metros de Adirael, brincó para embestirle, sin embargo, como sostenido por alguna fuerza invisible, quedó inmovil flotando en aire sin mover un solo músculo de su cuerpo, apenas podía enfocar son sus ojos al joven psiquico.

-Eso es, debes recordar este momento, ya no vuelvas a creer que algo asi es posible, sabes que lo es, tenlo siempre presente, esto puede salvarte la vida.

Mi mano se apoya en su cintura, poniendome de nuevo a su lado.

-Todos lo demonios tienen algo parecido a un cerebro que a menudo no se encuentra en su cabeza, y como tal es tan vulnerable a los ataques psiquicos como cualquier otro ser vivo. Tambien sus cuerpos son tan vulnerables a la telequinesia como cualquier otro cuerpo físico.

Me acerco al demonio y me coloco ante él, mirandolo muy de cerca, él tambien me mira.

-"Lo mejor que puedes hacer para exterminar a los humanos es volver a esa jaula."

Luego hablo a mi único alumno.

-Ya puedes liberarle...

Me quedo mirandole, no quisiera tener que repetirle que se fiara de mi. Una vez liberado el demonio, no sin multiples gruñidos y amenazas caminó sin darnos la espalda hasta la jaula, luego las cerraduras volvieron a moverse para sellar la jaula de nuevo. La lección acabaría con lo mas importante.

-Tengo hambre...

Observo a todos los evocadores, ninguno parece tener problemas para crear la carga de energía.

-Bien, recordar que es conveniente crear una carga antes de cada combate en previsión de que se alargue mas de lo debido.

En ese momento la jaula número uno se abre, ¿vaya, tan pronto le está probando? no puedo evitar observar el desarroyo de los acotecimientos, al fin y al cabo nadie en la base esta acostumbrado a "ver" los poderes de un psiquico, realmente son intrigantes, pero yo prefiero freir un demonio antes que hacerlo flotar en el aire.

Me giro de nuevo a mis alumnos, mostrandome satisfecha por los progresos.

-Bien, ahora pasaremos a la instrucción comun que se llevará a cabo en la sala de entrenamiento dos, cerca del ala de los cazadores, por supuesto la encargada de su formación militar básica sera la maestra de la escuela de cazadores Nathalya Brightman...

Me quedo mirando a la otra "maestra" ahi presente.

-Maestra Eva, usted tambien debe asistir con su alumno.

Dije a proposito de su ultimo comentario, como era de esperar, aquella criaja se limitó a poner morros.

-Bien, en marcha.

Dicho esto comienzo a caminar para guiar a los presentes hasta la ultima parte de la instrucción de hoy.

Balakia levantó una mano a su derecha para interceptar la esfera que enseguida se esfumó mientras miraba al "demonio flotante".

"No me jodas... ¿piensan despeñarlos de los edificios o algo así?" pensó levantando una ceja algo incrédula "...porque si es así me va a dar la risa cuando nos topemos con uno de esos que miden diez metros"

Lo cierto es que no conocía mucho de los poderes psíquicos, parecían potencialmente interesantes pero de momento no le llamaban mucho la atención... elena habló acerca de moverse a otra sala, esta vez con los Cazadores.

"Oh, todos juntos en amor y armonía... que bonito" pensó girándose hacia la puerta con un deje socarrón "Bueno, a ver cómo se las gastan los de la brigada tirachinas..."

- Yo también... - Musité en mis propios pensamientos después de mi maestra, enarcando una ceja ante lapomposidad política de Elena. No estaba para muchos juegos, aún respiraba con cierta agitación por el encontronazo directo con el demonio y tuve que parpadear más de diez veces para empezar a creer lo que había sucedido. Era extraño, como cuando abres una puerta oculta en tu mente y descubres un nuevo mundo...bueno, deacuerdo, supongo que eso solo me pasa a mi y a unos cuantos más en la galaxia, no es un buen ejemplo...

 Me acaricié la boca del estómago y sonreí mirando a Eva. Si ganarse mi confianza significaba intentar que me matasen no estaba mal del todo, quizás me diese un ataque al corazón y abandonase el mundo antes de ser devorado por un jodido demonio, por otro lado...era como vivir fuera pero en un entorno cibernético medioambientalmente regulado en el que es complicado que te pase nada malo, vamos, que era como saber de antemano que vas a poder hacer algo que no habías hecho nunca. Este jodido lugar era una fuente de esperanzas para cualquiera...

  - Tienes que enseñarme todo eso. - Reconoció interesado, se refería a mover cosas con la mente y a afectar los pensamientos y la percepción cognitiva de un individuo, más, si era un demonio. En su mente planteaba hipótesis bastante simples y erróneas de como sería posible, dado que lo planteaba desde una física y matemática bastante infradesarrollada en comparación con la actual en aquella base era muy posible que su sistema hipotético-deductivo crítico y científico fuese como hablar de sumas y restas de números enteros en la teoría de la superposición cuántica...

 No pasó por alto el hecho de que después de haber usado sus capacidades, tanto ella, como él, habían sentido hambre...se encogió de hombros aceptando la "realidad" si es que aquello no era un sueño.

 - ¿Habeis comprobado que los demonios no han desarrollado capacidad telepática? Quiero decir, un demonio en la base podría transmitir una señal de ondas alfa al exterior y enviar las coordenadas de su posición, si bien, cabe la posibilidad de que no conozca su ubicación actual si que podría hacer la función de un emisor. Sólo necesitarían la capacidad de rastrear la señal y...

  Bueno. Eso.

 Sonrió al borde de una leve carcajada. Debía de sonar como un inepto dado los avances tecnológicos que tenían allí, de los demonios sólo sabía que estaban por todos lados, que había de todos los tamaños y conocían cientos de formas de destruir a un humano...

Quizá la respuesta la encontrase inquietante, pero no tenía intención de ocultarle nada, no almenos a él.

-Date tiempo, Elysium no se conrtruyó en un dia.

Demasiado metafórico quizá... odio tener que esperar para comer.

-Los demonios han llevado las capacidades telepaticas a puntos inalcanzables (de momento) por el ser humano, asi como habilidades psiquicas de un poder inimaginable, se han conocido reportes de batalla de otros paises en los que batallones enteros que no estaban en combate, se han fusilado en perfecto orden unos a otros, reportes de soldados con el cerebro lavado que causaron muiles de bajas entre nuestras propias filas, ejercitos de demonios que se mueven al unisono guiados por algun tipo de telepatía, suponemos que de algun demonio mayor, tienes donde elegir...

Aquel demonio es una de las razas mas simples de las fuerzas demoniacas, poco mas inteligente que un perro con rabia con un gusto especial por la carne humana. Sin embargo eso no quita para que un demonio con capacidades telepáticas lo suficientemente potentes en efecto, sepa mas o menos su ubicación, es por eso por lo que no los mantenemos mucho tiempo, como comprenderas no suelen sobrevivir a un entrenamiento.

Señalo disimuladamente a Elena.

-De todas formas si un demonio mayor nos buscara, nos encontraría, recuerda que Elysium fue puesta en marcha tras la caída del Vaticano, desde entonces no se ha sabido nada de ellos. Las legiones campan a sus anchas por este mundo sin orden ni concierto, al fin y al cabo, no les hace falta. Es por esto por lo que el sigilo en cualquier operación fuera del geofrente es tan importante.

Al fin llegamos a la sala dos, entre antes empecemos, antes nos iremos.

A la mañana siguienteel despertador sonó a la hora y tanto Max como Ryan se levantaron con tiempo mas que suficiente. Ryan había descansado en paz por primera vez en años, almenos por aquella noche, las pesadillas no le atormentaron, dando como resultado un sueño reparador que le prepararía para el intenso dia.

La sala de entrenamiento numero dos estaba al principio del ala de cazadores (fuera de la escuela), por el camino el ex-capitan del ejercito de tierra pudo ver de nuevo a mas soldados con el traje de combate, tambien a otro con un traje algo mas pesado y con muchos mas "complementos", ingenieros probablemente. Una vez en la sala Ryan descubrió que noe ra el primero en llegar, pero tampoco sería el ultimo.

La sala de entrenamiento era enorme, mas parecía un hangar vacio o un gimnasio olimpico. Nada mas entrar en una especie de campo de tiro con dianas desde unos 30 metros hasta mas de 50. Muchos soldados esperaban en corros hablando, por lo visto la sargento aun no había llegado, pero el ocio no les duraría mucho, pronto apareció Nathalya por la puerta y directamente dijo con voz contundente...

-¡A formar!

Todos los soldados formaron filas y quedaron firmes esperando instrucciones.

Me coloco delante de ellas y observo sus caras.

-Hoy repasaremos todo lo referente a su equipamiento y armamento, sin embargo tendremos invitados especiales, recuerden que cuendo salgan ahi fuera no estan solos, lucharán codo con codo con soldados que capaces de lanzar potentes hechizos con una capacidad destructiva equivalente a un lanzacohetes, tambien otros serán capaces de detectar al enemigo mejor que el sonar estandar, otros practicamente invencibles en el combate cuerpo a cuerpo e incluso otros capaces de invocar demonios y formas humanoides de energía capaces de luchar de nuestro lado, deben aprender a luchar todos juntos si quieren sobrevivir. Me importa una mierda sus diferencias ya sean religiosas, ideológicas o meramente competitivas, cuando salgamos ahí fuera no voy a tener problemas en pegarle un tiro al que desobedezca y dejarle para que lo despedacen esas bestias... Espero haberme expresado con claridad.

En ese momento la entrada de la sala se abre de nuevo, justo a tiempo.

Al entrar ya había un pelotón formado, parece que llegamos justo a tiempo. Tras de mi entran diez evocadores y los dos psiquicos, en primer lugar me dirijo a Nathalya (la tipa dura) mientras me coloco a su lado. El resto de evocadores se colocaron en fila al lado del peloton de cazadores.

-Todos suyos sargento.

La maestra psiquica había ido a sentarse en las sillas de la entrada no es una mala idea.

-Estaremos ahí, observando si necesita algo.

Con un caminar sutil y femenino, e apoyo en la apred al lado de la "niña del pelo blanco" parece que de momento su alumno no se ha quejado, a ver lo que tarda.

No se porque me cae tan pedante esta tia.

-Gracias, maestra Sunfury.

Se me escapa un leve suspiro y comienzo con un repaso.

-El equipamiento que llevan y llevarán ha sido analizado y decidido por sus respectivos maestros, los trajes de combate estan diseñados en tres grandes grupos, ligeros (10kg), medios (15kg) y pesados (20kg), como podrán imaginarse esto es referente a la movilidad y protección ademas del peso. Todos los evocadores portais en este momento un modelo ligero de combate pensado para otorgar movilidad y facilitar la canalización de energía a traves de las manos, aparte, portarán un amplificador en sus antebrazos, por encima del guante tambien con este fin. Se les hará entrega de del modelo de pistola Kata 01.

Desenfundo la pistola y la muestro a los presentes.

-Su retroceso es practicamente nulo, ligera, con alcance medio y precisión total a 30 metros, y lo que es mas importante...

Me giro y disparo a la diana mas cercana, el sonido era poco mayor que el de un tirachinas.

-... muy silenciosa. Tiene un cargador estandar de quice balas.

Luego miro a mi pelotón.

-El equipamiento de cazador que llevan ustedes ahora es Medio, es la combinación mas balanceada, no ofrece la movilidad del ligero pero les permitirá manejar su arma con bastante libertad.

Alzo el fusil y lo muestro a los presentes.

-Este es el fusil de asalto modelo Sting, ligero y compacto, precisión total a cien metros, la mejor novedad respecto a los modelos utilizados durante la guerra es que cada fusil lleva un microchip integrado que comprueva el acceso de la bala a la recamara, asi como la salida del casquillo, esto disminuye la cadencia pero baja drasticamente las probabilidades de que se encasquille, yo por lo menos no he visto nunca un Sting encasquillado.

Una vez mas me giro y disparo a la misma diana una rafaga de cuatro balas. El sonido es poco mayor que un M4 con silenciador, solo que en este caso, el Sting parece no lleva.

-Como podeis comprobar el sigilo es la caracteristica mas acentuada de estas armas. Tiene un cargador de 45 balas de calibre 5-56, sin embargo la munición que utilizaremos es bastante distinta de la que conocen hasta ahora.

Saco la bala de la recamara y la muestro.

-Cada bala tiene un sencillo sistema que al impactar, se abre de atras a alante como una flor, esto no impide que la bala entre, pero si que salga, esta medida se tomó tras comprobar la capacidad regenerativa de los demonios, que eran capaz de extraer las balas de su cuerpo y curar las heridas en 15 minutos, o en algunos casos menos. Estas balas entran, pero no salen, no almenos sin graves desgarros.

Alzo un mando a distancia y la diana se acerca, detras del papel del dibujo, hay una placa metalica especial donde las balas quedan parcialmente clavadas, y en efecto se pueden ver como pequeñas flores metálicas.

-Bien, es el momento de las preguntas inteligentes.

Me quedo mirando al pelotón, y particularmente al nuevo psiquico, el cual no lleva el traje. Aunque por alguna razon estoy segura que no es su culpa. Le señalo con el dedo, en parte comprendo su situación.

-Soldado, tienes en el vestuario el traje para los psiquicos em una armario cerrado...

Le tiro las llaves, esperando que tome aquellas atenciones como un privilegio.

-Ve, cambiate y vuelve, tienes 2 minutos.

Lo cual implicaba que corriera... mucho.