Partida Rol por web

No parce, digo algo triste, buste no esta loco, aunque buste lo diga no lo está. Añado. Igual  eso  de que se enrabone con migo por mis cagadas no es locura, es razón, es distinto.

Pos las  viejas estan bonitas, es la primera vezz que entiendo lo que dicen. sonrio aunque para mis adentros, no estoy muy feliz por muchas pastas que me haya tomado. Cuando me sienta mejor me voy a dar una vuelta, aunque las cosas por acas son algo distintas.

Parce, siga adelante, que de ahi buste sale, tenga fe.

 Gracias por tenerme tanta fe parcero, ojala y sea asi y yo logre recuperarme. Pero bueno, ya le queda mas facil levantar a punta de palabras jajaja. Es obvio que las vainas son diferentes, dígamelo a mi, pero yo se que usted se adapta con la velocidad del rayo. Y todo bien que las pastas se demoran, pero le hacen efecto, pere y lo verá. 

Pero me alegra mucho verlo bien hombre. En serio que si, esta mucho mejor que como lo veía antes.

Esta mucho mejor desde que dejo de andar a mi lado.

Parce. digo pensando en "¿este de que me esta hablando?, el siempre estuvo fijo en sus problemas, nunca noto que yo estaba deprimido, si el doctor no se lo dice"... No diga nada, que yo no estoy tan bien. Digo pensativo. Lo de la hembra ya se verá, y cuando por fin comience a trabajar le contare, por ahora no estoy haciendo nada útil, por lo menos la gente habla los españoles parcero, por lo menos entiendo algo... ya le contare.

Paisita, lo vuelvo a llamar en otro momento, si no buste me llama a mi, por allá tiene el tel de donde estoy... perdoneme, hago un gesto de tristeza, siento sintiendome muy mal por todo.. hablamos parcero.

Necesito dormir. pienso

Justo en ese momento se abre la puerta del consultorio del psiquiatra, y sale ese hombre que al parecer es nosferatu, Everet, según recuerdas. Lo miras sin ningún tipo de asco, llevas mucho tiempo entre los no vivos para rechazar a alguien por su apariencia. El hombre sale del consultorio del psiquiatra pensativo, no puedes evitar mirarle, mientras sientes algo de pena y preocupación.

 Al verlo, no puedo evitar sonreirle a manera de saludo, no con lástima sino como quien saluda a un vecino más, o un compañero del trabajo; para luego volver a mis pensamientos. Definitivamente todos los que estamos aca tenemos un problema serio, todos salimos igual de cabizbajos. Me pregunto si alguno de los que entramos volverá a salir. 

Con esto en mente, me dirijo a mi cuarto, pero doy primero una vuelta por el hospital.

Atesorando el cuaderno bajo mi brazo miro con cierto recelo al tal Diego dispuesto a ignorarle de camino a mi habitación

Entonces recuerdo porque estoy ahí, y se me ocurre que tal vez yo debería ser parte de mi recuperación. Acaricio la cubierta del cuaderno recordando algunas de las cosas que se me han ocurrido escribir. Y no es que tenga miedo a los demás, o que odie sus reacciones al hablar conmigo. Ellos no tienen la culpa de que todos seamos monstruos.

"bueno, yo tampoco tengo la culpa, pero lo soy"

Ya he empezado a dudar, dudo demasiado, igual por eso pase tantas noches en el cementerio sin hacer nada

"hablar con alguien mas no va a cambiar nada, sobretodo si no hablamos de mi"

Decido arriesgarme ya que al menos su primera reaccion al verme ha sido bastante normal, y parece triste

Cuando acaba de hablar por teléfono le pregunto -¿malas noticias?-

 Al escuchar que me interrogan, me detengo y me giro hacia Everet.

Algo así, es duro saber que un amigo mío tiene problemas, técnicamente por mi culpa, y que está mucho mejor sin mi. Pero al menos está bien, y eso es lo que importa. Veo que también sale con un cuaderno, por lo visto ya somos dos los que tenemos tarea. Creo que no nos hemos presentado, soy Diego, ¿Cómo es su nombre?

Le sonrío con algo de tristeza. El tres-se esta mejor sin mi, le va a doler al hombre aprender a no andar a mi lado, pero es por su propio bien.

Atiendo a lo que me dice aunque no significa nada para mi, y me alegro de que no me pregunte mi opinión o algo así, soy el último al que alguien debería pedir consejo, pero llegada la hora de las presentaciones no resulta tan complicado, tal vez por la expresión de tristeza del otro

-soy Everet. Así que el doctor tambien le dio un cuaderno-

Por un momento pense que era algo especial, pero supongo que es un tratamiento habitual.

Sin embargo pasadas las presentaciones no se bien que decir, hasta aquí llega mi experiencia social, y doblo el cuaderno entre mis manos esperando que Diego diga algo

Justo en ese momento ven que vienen  por el pasillo Eduardo y Andrew (el cual se ve mas tranquilo), parece que Eduardo le esta hablando de un secreto, pero cuando los mira se rie y les dice.

Camino de reojo bajando la voz, lo que menos quiero es problemas con ese sujeto. Es un tramposo... es de cuidado, luego te cuento. Cuando camino por el pasillo veo a esos otros dos en el pasillo hablando, el especie de nosferatu y el chico de gafas, Diego. Hey muchachos, me voy con Andrew a tomarme un trago al Bar.... jaja sin alcohol, ¿nos acompañan?, digo invitandolos a una charla.

 "¿un trago en el bar?" tal vez sea socializar demasiado, aunque recuerdo las Vaulderie con la manada, tampoco va a ser para tanto, en los últimos años me he aislado demasiado y supongo que eso es parte de mi problema

-vale- respondo simplemente aun retorciendo el cuaderno entre mis manos

 ¿Un trago en el bar? No puedo evitar sonreír al acordarme del problemático regalo del Tres-se. Bueno, vamos, no creo que hablar me haga daño ahorita. Podría incluso ayudarme.

Vale, vamos. Y me uno al grupo que va al bar.

 Los cuatro comienzan a caminar hacia el salón común.

Después de ese extraño momento te diriges a tu habitación confundido, notas que curiosamente  de vecina tienes a la suicida Emma, quien al parecer como tú también trató de  quitarse la vida..

Qué mala suerte la de los dementes que quieren morir, y el destino no se los permite...

Posible sea eso, posible lo que ocurre es que  las vueltas del destino son para sufrir más, te es difícil comprender el dolor ajeno, ni siquiera comprendes bien ese dolor de los más cercanos a ti, pero en poco tiempo, en este lugar has visto un poco de ese dolor danzar, una y otra vez. ¿será que sentir el dolor de los demás es bueno o es malo?, o es una pesadilla peor.
Luego de leer el libro (o tratar de leer) caes dormido con la misma ropa que tienes...

Abres los ojos estas en la cama del hospital, estas acostado, mirando el techo, pensando que te tienes que despertar, y de repente,  sientes un sonido sordo extraño, miras a tus pies y unas enredaderas, o especie de enredaderas salen de debajo de la cama, como grandes raíces vivas que te aferran  y te asfixian.  Sí, no respiras, pero sientes que no puedes respirar. Tratas de zafarte de esas cosas,   raíces enormes que te atrapan, y de repente, notas que no son raíces, es una serpiente gigante que te ata. Sientes terror y gritas, pero de tu boca no sale sonido.

Tratas de salir, de zafarte, y la cama se convierte en un hueco que te va tragando, lentamente, hacia un espacio vacío.

Despiertas.

Sientes que aún es de día, debes volver a dormir.

Me despierto, pero no me muevo sino que me quedo mirando al techo. De nuevo...¿cuando podré dormir tranquilo? Yo creo que mejor no me hago expectativas. Entonces nos dejaron a todos los suicidas juntos, claro, para podernos vigilar más fácil y evitar que lo intentemos de nuevo. Pero esa chica lo ha intentado mas de una vez aquí, por lo que veo. Obviamente no van a permitirlo. Deberían dejarnos morir de una vez, un mal menos en el mundo. Estaría mejor en ese mundo, en ese vacío de mi sueño. 

Cierro los ojos otra vez, intentando buscar algo de paz y tranquilidad mientras puedo. En la noche todos despertarán, van a gritar, van a pelear, y yo estaré despierto para verlos y oirlos otra vez. Es mejor que intente descansar, si es que puedo. 

Desearía estar dopado hasta las orejas, a ver si puedo escapar aunque sea un poco de las pesadillas.

Te sientes algo frustrado, pero aunque crees que no dormiras bien el resto de la noche, simplemente cierras los ojos y todo se vuelve negro. La desesperanza desaparece, y comienzas a escuchar unas risas infantiles....

"Diego ¿vos donde estas?" dice una voz infantil, luego escuchas que te pasa de largo, y dice "1, 2, 3 por Sofía, detrás del aparador". A tu prima la han descubierto. Tu estas escondido  tras una mesa, te asomas, tu hermano te da la espalda, sonries y corres, estas feliz, "Salvo patria". Sientes una sensación de exito por haberlo conseguido.

Abres los ojos, haces una leve sonrisa... qué bonito cuando uno es niño, no tiene preocupaciones, y solo juega.

Pero de repente escuchas a alguien gritar de manera escandalosa dentro de su habitación, reconoces que Andrew le ha pasado algo.

Al despertar no puedes dejar de escuchar algunas cosas que ocurren en el pasillo, es más de repente, de manera extraña, se te activa el Auxpex y eres capaz de escuchar, murmurllos del resto de las habitaciones.

Escuchas la voz de la mujer que tiene un hijo imaginario.

- Hola, yo soy Eduardo, ¿eres nueva verdad?, no te había visto.

- Kendra -... Ahora ya me viste y ya puedes olvidarme.

- Bueno, no importa... me rio... te olvidaré, pero no tienes algo de tu medicina que me regales?

Los gritos de Andrew se calman, es más escuchas que habla con alguien " - Ya somos dos que no podemos dormir... - suspira,  - Me llamo Andrew... Y si estoy en este basurero, supongo que tendré algo en común con los que aquí residen... Ser más elegante no te hace menos vulnerable..."

Puedes oler el olor putrido de una especie nosferatu, y escuchas a Everet que dice "-monstruo, monstruo, monstruo...." de modo muy traumatizado.

Entonces escuchas la voz de Julio, quien grita como demente. - ¿Humanos? ¿HUMANOS?... - JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA, Hace muchas décadas que me di cuenta que lo único que queda humano en mi es el recuerdo. El recuerdo del pasado que interfiere en el presente como un fantasma que sólo pretende asustar a los vivos por envidia de no poder compartir sus mismas vivencias. Pero no, doc. Le aseguro que no hay ya nada de humano en nosotros, más que las apariencias... y quien crea lo contrario es digno de estar aquí, pues su locura es evidente,  ¿Es eso, verdad doc.? Es eso lo que le hace haber elegido pasar la eternidad tratando enfermos mentales, pasarla recluido como ellos en esta colmena de sinsentidos. ¿Me equivoco? Usted lo que desea es volver a ser humano y lo que intenta es rescatar el resto de humanidad que pueda haber en nosotros y así encontrar un camino para lograrlo. - ¡Pobre infeliz!

Reconoces que esta hablando con el psiquiatra, parece que él no tiene pelos en la lengua para enfrentar al medico, ¿tendrá razón?

Al mismo tiempo, escuchas pasos por los pasillos, el telefono, como las gotas del agua caen en el baño, y te sientes con dolor de cabeza. Tienes que concentrar para alejar todos estimulos de ti..

Carajo...¿porqué cuando tengo un sueño medianamente bueno no dura y me despierto fácil? Ley de Murphy...

Me acuesto boca abajo, intentando desactivar el Auspex. No quiero enfocarme en la miseria que me rodea, por algun motivo siempre que recuerdo algo bueno, la vida me devuelve al agujero donde estoy de un martillazo en la cabeza. Que mal que a pesar de que todos estemos metidos en la misma trinchera, nos disparemos los unos a los otros. No se Julio en vez de dejarse ayudar pelea más...no me agrada ese tipo. Bueno supongo que el orgullo de algunos llega hasta la locura jejeje. 

y Kendra...es hermosa, no cabe duda, que triste es su caso. Los vampiros no podemos tener hijos por algo...ya tenemos bastante con ver morir todo lo que nos rodeaba y todo lo que éramos. Como yo, cuando me abrazaron tuve que dejar atrás todo lo que tenia y todos mis sueños. Desearía haber muerto antes de que llegara mi sire. Julio tiene razón, ya no somos humanos, y no volveremos a serlo. Sólo somos imitaciones de humanos. 

Ya tuvo que haber llegado la noche para que todos estemos despiertos. Mejor hago algo.

Me levanto y busco el cuaderno que me dio ayer el doctor, y lo abro en la primera página. Es hora de que intente responder la pregunta.

El cuaderno se te presenta en blanco frente al escritorio, mientras poco a poco, tus sentidos agudizados se van calmando. Miras el papel rayado simple al frente tuyo, y varias preguntas entran a tu mente, ¿qué escribo?

Ese cuaderno por una u otra razón te recuerda las clases de inglés que le dabas a Miguel, y que él bueno trataba de aprender, por lo menos aprendio cosas simples, pero nada complicado, y eso que pasaron dos años en paises donde el idioma más hablado era el inglés.

Tratas de concentrarte y dejar al brujah de lado. ¿cómo era la tarea?... oh ya, una era los motivos para estar vivo, y lo otro... ah si, ¿qué me hace feliz?

Parece tonto escribir sobre eso, recuerdas como preguntaste al psiquiatra tu temor de que eso hiciera que te deprimieras más.

Bueno, parece que nada más queda, qué ponerte en acción... escribir... aunque duela.