Partida Rol por web

En Búsqueda de la Razón (No concluida)

Preludio: Diego García

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18/12/2010, 21:36
Director
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18/12/2010, 21:44
Director

Estas conteniéndote. Sientes un vacio en el pecho y una ansiedad que recorre todo tu cuerpo. Es cómo electricidad. Tienes que poner las manos dentro de tus bolsillos para evitar que los demás vean que estas temblando. Tu rostro permanece quieto y sin emociones. Todo parece un sueño ... ¿o una gran pesadilla?.

Sabías que ese momento llegaría, sabías que tarde o temprano te tocaría enfrentar juicio, sabías que no podías escapar..

Sí lo intentaste, y fue un periodo de transición, pero ahora las cosas han cambiado.

El destino (hechos que el máster se negara a comentar) hizo que tuvieras que enfrentar de nuevo a los tuyos. Duraste más de dos años sintiéndote abandonado por los que considerabas familia, y ahora tu familia sólo  es tu mejor amigo y tu.

Ni siquiera ahora,  que al parecer la situación te ha cambiado, sientes lo que sentías antes por tu clan. Todos parecen tan extraños, tan ajenos, tan impetuosamente fríos.

Te reencontraste con tu sire al  que siempre  respetaste y  apreciaste, a pesar de que él te quito tu existencia.  Lo viste en la asignación de cargos en Fortschritt. Verlo de nuevo te causo estupor.

Curioso, te convirtió en lo que eres ahora, y a pesar de que quisiste ser distinto, y no llegar al límite de la bestialidad, "la bestia te ha encontrado". La has tenido controlada, pero no por mucho tiempo.

A tu sire, lo aprecias, fue tu guía y amigo por diez años. El sabía que vendrías a Viena, fue bien informado. Después de tanto tiempo,  lo sientes como alguien ajeno a ti y a tus problemas. Tal vez resientes que cuando lo necesitaste en Bogotá no estaba. Qué cuando supo de tu desgracia, no hiciera mucho para apoyarte, qué supiera que habías sido elegido para esa misión esclavizarte y no hiciera nada al respecto.  

El único que estuvo y está a tu lado es Miguel, él  ha tenido que afrontar tu desesperanza. Sabes que ha sufrido moralmente mucho. No entiendes como puede él acompañarte con tanta renuncia. En oportunidades sientes que no mereces tenerlo a tu lado, eres un monstruo al fin y al cabo. El pareciera ser un regalo no merecido por tus acciones, lo sorprendente es que a pesar de todo, y a pesar de que lo hayas hecho pasar muy malos momentos el siga ahí. Posiblemente, él sea algo masoquista al continuar con tigo, posiblemente, en realidad  él sí cree lo que tanto te ha repetido, "que eres bueno y que vale la pena luchar", pero al fin y al cabo en un brujah... aunque el clan parece no tener nada que ver con esto.

Sientes ese dolor en tu alma cada vez que piensas en eso, en realidad cada vez que piensas en todo.

Cuando te reencontraste con tu sire,  en las noches cuando estabas en la celda, él noto que habías cambiado, y sí, te cuestionó lo que ocurrió en el pasado. Nadie pareciera comprenderlo. El hombre estaba en un dilema complicado, te acompañaba, pero no estabas seguro sí te apoyaría o defendería, por lo menos parecía que lo haría. Parecía estar decepcionado, pero aún así te apoyó a pesar de que tú no querías ayuda.  

Pero ah sorpresa, de alguna forma se contacto con Miguel en ese tiempo y mantuvo  contacto con él mientras estabas en la cárcel. Te hacía sentir tristeza pensar que todo por lo cual lucho  Miguel se iria al bote de los desperdicios. Igual te ejecutarían.

Sabías lo que pasaría, era algo que ya lo habías hablado con otro tremere, te entregarías voluntariamente y te encerrarían. Posiblemente te ejecutarían en cualquier momento.  

Habían viajado hacia Viena y se habían quedado en un hotel económico. Lo tenías planeado, sabías que era el fin para ti, descansarías y te irías al infierno, lugar donde tu alma merecía estar. Recuerdas esos momentos melancólicos donde al lado de un buen licor hablaste y te despediste de Miguel. Todo el dinero (que era poco) que habías ahorrado era para que él saliera de ahí y se fuera donde gustara. Es más, le pediste que una vez ingresaras a la Fortschritt  se fuera del país, pero sabías también que él no te haría caso.  Las lágrimas de ambos brotaron en la despedida, y pudiste sentir  el miedo que tenía Miguel frente a todo esto. El hombre tenía el alma destrozada. Miguel también creía que ibas a morir. Se abrazaron fraternalmente antes de que salieras por la puerta del hotel y le dejaras ahí. Sólo podías desearle buena suerte.

Las miradas de repulsión te calaron los huesos cuando entraste nuevamente a una capilla tremere. Te pusieron esposas como si fueras un perro y te encarcelaron. Luego vinieron distintas entrevistas, indagaciones y maltratos emocionales (y uno que otro físico).

Estabas confundido, los alastores habían prometido eliminarte, es más, algunos hasta establecieron una tortura inhumana para hacerlo. Los castigos posibles eran miles, pero en cierta forma se haría justicia. Tu pusiste al clan en peligro y estableciste un grave antecedente. Profanaste una capilla e invocaste a un demonio... mataste a muchos, mataste a una inocente, te convertiste en un ser corrupto. Eres un maldito.

El dolor emocional que sentías, la culpa y el miedo se te acumularon. Por las noches tenías horribles pesadillas, y hasta podías ver el fantasma de la niña torturándote. Pobre alma, tu le quitaste su vida, y ella no se merecía eso. No hablabas en la celda, es más, estabas absorto en tu dolor.

Sin embargo, frente a los alastores y jueces  no era momento de mostrarse débil, podías estar nervioso y destrozado moralmente pero  tenías orgullo. Te defenderías y harías todo lo posible por defender la situación a tu favor. No valdría de nada, pero lo harías, no eras tonto. No morirías como un cobarde.

Las indagaciones fueron largas, y todo parecía no tener fin. Cuando te regresaban a tu celda, justo cuando la luz del día caería por los tejados pensabas en todos los que habías amado, recordabas a tu familia, a tu padre y a tu madre, A tus hermanos y hermanas.  No era la familia perfecta, pero era una buena familia. Recordaste a los curas del colegio que te reprendían por travieso. A Laura, la niñita que te gustaba de chico, a tus amigos del colegio y universidad. Recordaste a las pocas mujeres que pasaron por tu cama en tu juventud. Ninguna llego a conquistar tu corazón como Esperanza, la mujer que amaste en secreto y que nunca tuviste el valor de invitar a salir. Hubiera sido tu esposa sí lo hubieras hecho.  Recordabas a tu sire, a Radu el regente que murió, a algunos compañeros de clan, y a Miguel.

No podías evitar llorar pensando en todos los que dejarías. Ni en espíritu te los encontrarías de nuevo, pues las almas buenas no van al infierno.

No querías hablar, no querías beber vitae, no querías hacer nada. Era el fin.

Cuando fuera el momento, te conectarías telepáticamente con Miguel , te despedirías, y sería todo. Sabías que ni tus cenizas se las entregarían, seguro las botarían como excremento.

¿valió la pena vivir?. No estás seguro

Pero justo cuando pensaste que ibas a morir, que te ejecutarían, que todo terminaría los jueces determinaron que podías continuar con tu existencia.

Estabas ahora frente a ellos.

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18/12/2010, 21:45
Michael Vögele

Un hombre lee de manera automática lo siguiente.

Teniendo en cuenta los deliberaciones establecidas en el caso 67899767 de Diego Garcia Vargas.  Dice un hombre en alemán. 

Cargo 1. Traición al clan tremere.

Cargo 2.  Infernalísmo

Cargo 3. Violación de la sexta tradición.

Hemos determinado  acorde a las pruebas y testigos anular los cargos  al considerar que el señor García no fue directamente responsable de los eventos establecidos dado que creyó obedecer a un superior.

Sin embargo el jurado ha determinado que al acusado requiere  castigos menores por las actuaciones posteriores a l incidente en Bogotá, dado que desobedeció  y evadió la ley tremere por dos años.

La comisión de condenas menores citará al acusado para establecer los procedimientos disciplinarios pertinentes, sugiriendo trabajos de alta exigencia para el clan. El acusado deberá tener un tremere que le de amparo mientras se dicta la cita para la diligencia . Mientras tanto el acusado queda libre.

Se cierra la sesión.

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18/12/2010, 21:46
Director

¿libre?... acaso habían dicho, libre. Tu mente está confundida, ves que tu sire te observa desde el fondo y  unos guardias te quitan las esposas. No sabes que pensar o hacer. No tienes claro ningún sentimiento o pensamiento en estos momentos. En estos momentos estas en estado de shock.

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18/12/2010, 22:48
Diego

 Miraba al miembro del jurado, mientras leía el fallo. Pero no pensaba en eso, pensaba en cosas mas grandes que mi mismo. Pensaba en ella, en Esperanza. No, su nombre es muy puro, yo no puedo mancharlo. Ella es feliz, y que mejor, no esta asociada con alguien como yo. Pero si pudiera devolver el tiempo, le hubiera dado ese beso...pero como decía mi sire, los hubiera, los pudiera no existen. Mas le hubiera valido a mi sire dejarme morir, en vez de darme la no vida. Solo espero que esto no tenga repercusiones para el. Pero no entiendo porqué el no me aviso de lo que iba a suceder. En fin...los hubiera no existen. Estoy aquí, y hasta aquí llego el bus. Dios, si es que estas ahí, y si es que escuchas a alguien como yo, cuida a Miguel, el es un buen parcero, se merece lo mejor. Si alguien se merece la golconda, es el. Por favor, si Espe...si ella está viva, dale salud, y si no, tenla en tu gloria, si alguien se merece el cielo, es ella. Y por favor, acoge el alma de esa chica, con gusto iré al infierno si le permites descansar. Y mucha suerte, Alex. Me pregunto cómo me van a ejecutar, los alastores se explayaron en eso en las sesiones de tortura...cuantos años pasarán antes de que me permitan morir. Eso es lo malo de ser inmortal. Se divertirán...los Tzimisce quizas sean más humanos que los que me esperan. 

Sin embargo, algo pareció rechinar en mis oídos. La muerte se había enseñoreado de mi ánimo, cuando algo la hizo retirarse bruscamente. un rayo de luz, pero no de esperanza...

Cita:

 anular los cargos

¿Que? ¿Anular? Cómo lo van a anular, ¡son los 3 cargos más graves que hay en las normas de la Casa! No puede ser verdad, ¡tiene que ser una tortura mas!

Un guardia me quita las esposas, inútiles si las comparamos con los hechizos de protección de la capilla, una mera formalidad. Alguien me palmea en el hombro, felicitándome. De seguro, mientras duraba el juicio era de los que más abiertamente hablaba en mi contra. Miro a mi alrededor, confundido. Los alastores están divididos, gestos instantáneos, pero que decían mucho. Unos se alegraban, sabían que era inocente. Otros, los que me interrogaban, los que tanto se divirtieron torturándome, dificilmente podían contener a sus bestias. Algunos se retiraron enfurecidos. Mi sire venía hacia donde estaba, de pie, tal y como se me había pedido cuando se leyera mi fallo. Miré a Etrius, ¿acaso era satisfacción en su mirada? ¿habría intervenido el? ¡Imposible! ¿Acaso pretendía algo? el que se interesara en el juicio de un simple aprendiz...algo más tenía que haber ahi. Debieron ser impresiones mías, el no ha movido un músculo, aún cuando lo estoy viendo con descaro. 

Mi sire está a mi lado, me abraza. ¿Porqué en este momento se preocupa por mi, y no cuando todo empezo? Algo dice, y se acerca al escritorio del juez, que habla con Etrius y otros pontífices. Luego vuelve. Me quedaré en su mansión, mientras me definen la condena. De muerte, de muerte, esa condena era de muerte. ¿Porqué no estoy muerto? 

Sigo de pie, en silencio. No me muevo. Ni un músculo. Mi sire me abraza, me felicita. Otros lo felicitan. Otros nos dedican miradas duras, de las que recibí cuando cruce el umbral de la capilla. 

Por un instante, vuelve a mi mente una imagen. La noche que decidí poner fin a mi huida. Me había despedido de lo único que tenía, mi mejor amigo, mi parcero, el ancla que me mantenía en este mundo. Había cruzado el umbral, y no había cerrado la puerta, cuando un hechizo me golpeó. Había caído al suelo, y sin que yo lo supiera, una estaca había atravesado mi pecho, paralizándome. Muchos sabían quien era, y sabían qué había hecho. De Cincao había entregado su informe, y desde ese día me buscaban, me conocían, me esperaban. Y los que me veían, me miraban con odio. Los aprendices de primer nivel eran los únicos que me miraban con estupor. Pero la furia y la indignación eran el común denominador. No sabían lo que había pasado. Ni siquiera De Cincao lo sabía. 

Entonces recuerdo a Miguel. Estoy vivo, ¿volveré a verlo? Lo dudo. Dudo ser yo mismo. Dudo de que esto sea real. Mi sire me mueve, me toma del brazo y me saca. Camino como un autómata. Cruzamos la capilla, llegamos al parqueadero, y subo a un auto. Me suben, más bien. El auto arranca, y con gran rapidez nos dirigimos al refugio de mi sire. El me entrega un celular, me dice que llame a Miguel, que está en San Esteban, que lo vamos a recoger. No me muevo. El lo llama, y en minutos lo recoge. No entiende porqué soy amigo de un Brujah, y tampoco entiende porqué no estoy feliz.

Hemos llegado, es en el norte de Viena. Me bajo, en silencio. Miguel salta encima mío, me abraza, me palmea la espalda, habla, pero no le escucho. Mi sire, mas calmado, me habla, pero no le escucho. Solo son ruidos. Me mira a los ojos, pero no lo veo. Me conducen a una habitación, Me dejan allí un momento, y salen. Ninguno sonríe. Vuelven. Miguel se va a quedar conmigo, mi sire ha vuelto a sentir miedo. No hablo, no me muevo. Me acuesto con los ojos abiertos. Intento entender.

¿Acaso es posible, que no merezca ni la paz de la muerte? ¿Porqué estoy vivo? ¿Será que esta es la condena, aquella con la que me amenazaban en los interrogatorios/sesiones de tortura?

Los Tzimisce son más humanos. Solo puedo sonreir, pero no de felicidad. Algo se rompió. La no vida es una farsa, y yo soy el divertimento de los dioses. 

Notas de juego

 Perdón el tochopost, me inspiré

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21/12/2010, 00:46
Director

Todo parecía sonidos sin conexión e imágenes de personas que no parecían reales. En tu interior sentías que estabas preparado para morir, no para vivir. Justo cuando estas a punto de salir de la capilla un hombre al que reconoces como un Alastor te dice al oído, “aún yo creo que eres culpable, sí comentes una sola equivocación estaremos encima de ti como zorros”.  Tu no respondes nada, ni positivo, ni negativo,  esa amenaza te sonó igual como sí te hubiera preguntado la hora, igual  te pasó con los hipócritas que te felicitaban. “!¿Por qué me felicitan!?”, no puedes dejar de pensar.  No tienes ninguna reacción ante ellos, ni siquiera la respuesta de "gracias". Cuando tu sire te saca de la capilla y te ayuda a entrar en el auto, te sigue hablando pero tu no  respondes, él parece animado, contento por el resultado pero tú no. 

Fue una injusticia, el alastor tenía razón, eras culpable y te merecías morir. ¿Por qué no te dejaron descansar?, ¿porqué?

No reaccionas, ni siquiera a la idea de llamar a Miguel a comentarle que te han liberado, tu sire habla por ti, y luego tras unas pocas calles recogen a tu amigo quien esboza una sonrisa cuando te ve.

Le observas fuera del auto, sus ojos están cubiertos por esos lentes que evitan que los demás se den cuenta de sus sentimientos. Nunca conociste a alguien que comunicara tanto con su mirada, crees que por eso Miguel esconde sus ojos a los demás.  Cuando ingresa al carro el trata de expresarte su alegría, y nuevamente habla de Dios, y todas esas cosas que para ti en esos momentos no tienen importancia. Puedes oler su vitae, sabes que ha estado llorando, pero en ese momento parece que eso no importa. 

Es en ese momento que llegan a la mansión, y la cara de alegría de tu sire y de Miguel cambia.

Entran a un mini apartamento dentro del edificio.

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21/12/2010, 00:47
Miguel

Parce, venga para acas y se recuesta. Digo mientras trato de la mejor forma que se siente en la cama y se acueste, el man esta como pasmado, hay Diosito , ¿y ahora?. Hermano, yo se que esta  sorprendido pero las cosas salieron bien. Sonrió demostrando un gesto nervioso, mis  ojos se humedecieron. Todo va estar bien.

Me levanto dejándolo en la cama y me dirijo a la pequeña salilla de la habitación. El señor Von, que se yo,  sire del paisita está ahí. Me sorprende cómo de repente se muestra preocupado.

¿Me podría explicar qué pasó? Lo miro a los ojos, ¿por qué el paisita esta así?

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21/12/2010, 00:48
Alexander Von Stauffen

Me siento alentado por el resultado de todo, sabía que había una posibilidad y las cosas sucedieron tal como pensaba. Diego volverá a mi cuidado y superará esta situación. Siempre fue un hombre muy valiente. Mientras que estuvo en prisión estaba realmente deprimido y ahora esta un poco paralizado por las circunstancias, pero está bien.

Me volteo al escuchar unos pasos y percibo  la voz de Miguel mientras sale tras atender a Diego. No comprendo como mi chiquillo se buscó un amigo como él, siempre pensé que se relacionaría con personas que mantuvieran su nivel intelectual, pero parece  que su vida cambio radicalmente, y comenzó a relacionarse con otras personas.... no las mejores.

Anularon los cargos. Lo miro al rostro  sin explicar mucho más que eso.  No confió mucho en este hombre aunque debo aceptar que ha estado al pendiente de la condición de mi chiquillo y que Diego lo aprecia, los secretos del clan deben mantenerse. Me asignaron a mí como  su custodio, y el deberá permanecer con migo por un tiempo. Lo miro de manera tranquila y de manera amable añado. Yo cuidare de él y usted podrá volver a Colombia  sí lo desea.

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21/12/2010, 00:49
Miguel

¿qué carajos está diciendo este man?, ¿acaso me esta echando?.  Ah que belleza pues. Pienso indignado. No estuvo pendiente de él cuando lo jodieron, y ahora que la cosa se le puso fácil ahí si recuerda que tiene chiquillo. Pues con respeto señor, yo no me moveré de acá, y pues considero que Diego debe decidir también que es lo que quiere.

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21/12/2010, 00:50
Alexander Von Stauffen

Miguel, eres un hombre bueno, agradezco mucho que hayas acompañado a Diego estos años, aunque creo que huir empeoró las cosas. Lo miro directamente. Debes comprender que es casi un milagro que le hayan perdonado, pero el circulo interno quiere ponerlo a prueba, y es muy posible   según los rumores  que se tenga que quedar en Viena por un tiempo, y sí es así yo lo cuidare. ¿Este hombre no se que está pensando que va vivir en la capilla?. Debes comprender que este país no es para ti, y Diego estará bien.

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21/12/2010, 00:50
Miguel

Miro al señor guardándome mis sentimientos. Me acomodo los lentes y trato de calmarme. Miguel debes recordar que es el sire del paisita, no puedes putearlo... calma, calma. Escucho lo que tiene que decir y  el pecho comienza a dolerme, tal vez tenga razón. Pero no está bien ahora, buste me dijo que estuvo muy bajo de ánimo, pero ahora esta cómo raro. Yo se que mi parce no está bien ¿qué le pasa a este sujeto?

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21/12/2010, 00:52
Alexander Von Stauffen

Noto que no le ha gustado lo que le he dicho, sé que estima a Diego pero también quiero evitar que se aproveche de las circunstancias. No sé que pretende. Sí, estuvo muy deprimido en las celdas, cómo es lógico. Respondo de manera simple pensando en la racional causa -efecto.  Pero ahora él está libre y se recuperara. Lo miro a los ojos. No puedo negar que me preocupa un poco su estado, pero a Diego, lo conozco desde hace más tiempo que tú y sé que puede superar esta situación.

Me levanto. Dejare que descanse y mañana volveré para hablar con él cuando este calmado. Me acerco a la habitación miro a Diego que permanece acostado con los ojos abiertos mirando el techo. Debe estar en estado de shock por esta sorpresa, pero sé que lo superaráDiego. Digo al acercarme. Debo irme ahora, trata de relajarte y vendré mañana a conversar con tigo.. te felicito, sabía que podías lograrlo.

Noto que no me responde nada, ya esto se ha vuelto algo usual desde que estaba en las  celdas.

Hasta mañana Diego. Digo de manera cariñosa.

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21/12/2010, 00:53
Miguel

Observo como el sujeto se levanta, se despide y se va, escucho como se cierra la puerta. Aprieto los puños y trato de calmarme. Camino a la habitación donde esta  Diego. Mi parce está en la misma postura de cómo lo deje.

Me siento a su lado, y cierro los ojos evitando que él se dé cuenta que las noticias de su sire no me han gustado.

Sabía que en algún momento esto iba a pasar, el paisita iba a estar bien y cada uno cogeríamos caminos distintos. Por lo menos no está muerto, aunque, lo que yo quería es que no muriera sintiéndose tan mal consigo mismo, pero creo que eso no ha sucedido.

Me siento mal, quisiera llorar pero no puedo hacerlo al frente del paisita.  ¿qué haré ahora?, no quero dejarlo, pero... parece que su sire  cree saber qué es lo mejor, y este pecho no está seguro. Debo decir que el sujeto es amable, y me informó  cómo estaba él, pero siempre mantuvo su distancia. Es tan típico..., qué bueno que mi parce no es así. Él cree que puede encargar de mi parce como si fuera un bebe... Parece que no conociera al Paisa, y pa más colmo me dice que él lo conoce desde antes y que tales.  No creo que lo conozca tanto, pos no sabe lo que el paisita tuvo que vivir,  esto le pareció caldo de pollo, fácil... no lo conoce, aunque diga que sí. Sí me toca irme, pos, será volver a Colombia, se que el Piraña va ha matarme, pero...posible pueda ayudar a los sin clan antes de que me claven el cuchillo, por lo menos podre morir en mi tierrita.

Toco al paisita por el costado.

¿Parce, y sí se ducha?, vea que el agua es buena pa despertarse.

Le sonrió mientras me quito mis gafas oscuras.

Mire que en esta casota tienen mini piscina.. jeje digo tina...

Noto entonces que se le escurre una lagrima y hago un gesto de preocupación, usualmente se ríe de mis chistes tontos.

Parce, no llore, todo estará bien.

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21/12/2010, 01:06
Diego

 Mi sire me habla, pero no oigo. El tres-se me habla, pero no oigo. Solo hay ruido. Y dolor. Aunque aún no entiendo lo que sucedió, entiendo una cosa con claridad: no merezco ni morir con dignidad. La bestia me destruirá antes de que alguien ponga fin a mi sufrimiento. Este, con seguridad, es el precio del que habló el demonio. Alguna vez dijo Conan Doyle, que la peor de todas las ruinas es la de un alma noble. Y yo alguna vez lo fui...o eso creí.

No siento fuerza ni para moverme, solo para llorar. El tres-se quiere animarme, pero no hay luz en este tunel. Estoy cansado e intento dormir, a pesar de que solo es media noche. Sin embargo, no puedo, estoy cansado. Al parecer, Miguel y mi sire no se llevan bien, se toleran, pero no se entienden. Mi sire no entiende porqué el tres-se es mi amigo. Mi sire no entiende, pero quizas entienda más que yo. 

Sire....Sire...Sire, Alex. Me siento repentinamente asqueado, nauseabundo, pero no puedo moverme. Y no tengo nada que vomitar, ni siquiera he comido. Hace tanto que no como, pero mi bestia no se había manifestado. Creo que estaba igual de confundida a mi. Ahi vuelve, pero aun si quisiera comer, no podría, lo vomitaría de inmediato. Todo esto me da asco. Llevado por no se que instinto, llamo a mi sire, pero no responde.

Alex....Sire....Mi Sire...por favor...por favor...Sire...por favor, Alex, te lo suplico, hablame...

Mi voz es un hilo, dificilmente audible. Sin embargo, lo intento, aunque me corta la voz una que otra arcada. El asco crece, pero hago un esfuerzo por controlarme. 

Tres-se...Alex...Tres...se...Radu...hablenme, alguno. palabras escasamente audibles, solo el auspex les da claridad. Intento entender, pero no lo logro. No entiendo que sucedió. Y el mareo...muy sutilmente esta ahi.  Sin embargo, no me muevo. Todo pareciera un sueño. Sin embargo, no puedo evitar pensar en mi encarcelamiento, en las torturas, en mis años de huida, en Japón, en Madeleine, en la loca, en Bogotá, en el combate, en el demonio, en el ritual y el asesinato más vil jamas cometido por vampiro alguno, en Radu, en la maldita princesa, en mi sire, en mi muerte, mi abrazo, en Ella. Ella, inalcanzable, pura, limpia, para siempre en el extremo opuesto al mío. Ella en el cielo, y yo condenado al infierno en vida. En no vida jajaja. 

Si hacemos balance, ha sido mas que lo bueno, todo lo anterior, comparado con Ella...y el tres-se. Pero lo malo es más...¿Será que es real? ¿Será que no es un sueño? La vida es sueño, dijo Calderón de la Barca. La última vez que me lo leí, era....era....¿1989? ¿1999? ¿2009? no recuerdo con precisión. Recuerdo un 9. Segismundo creyó soñarse príncipe, y despertó en una celda. Yo me sueño libre, y despierto en una celda. O ¿me sueño en una celda y despierto libre? las torturas...esas fueron reales. Y los alastores. Las marcas en mis muñecas son reales...y las del cuello. Y las de las piernas. Y las de la espalda. Y las de los tobillos. Aun me duelen. Y el dolor es real. 

El pecho me duele. La estaca...las sucesivas estacas me dejaron resentido. Si eso hubiera sido real, no me habrían estacado. Eso, entonces, no fue real. Solo el dolor es real. 

Y el asco. Mi vida, desde que morí, ha sido una sucesión de dolor, de torturas, de inhumanidad. Cualquier rastro de felicidad se fue con la posibilidad de casarme y vivir con ella...el amor se fue, y con el lo demás. Solo quedo el odio, el dolor. Y el asco. Las nauseas vuelven.

Sire...Sire...papá...

Al morir, la felicidad se fue. Solo quedó sufrimiento, y todo fue una cadena de eventos que desembocó en un asesinato. Y el autor fui yo. Perdí todo, mi humanidad, mi capacidad de amar, mi salud mental. Pesadillas, recuerdos distorsionados. Un fantasma que me atormenta, y aunado a los recuerdos me imposibilita vivir. Por no hablar de la bestia que cabalga en mi interior.

Si estuviera vivo, tendría fiebre, deliraría, estaría debil, conectado quizas a una bolsa de suero, más cerca del mundo espiritual que del material.

Alguna vez fui un alma noble. Pero ya no. 

Alguna vez tuve fuerza, pero ya no

Alguna vez tuve libertad, pero ahora soy un esclavo. 

Estoy solo, los llamo, pero son ilusiones.

Y en medio de todo, solo hay una pregunta, dibujada con mis labios resecos, brillando en mis ojos enfebrecidos.

¿Porqué? ¿Porqué? Alex, tu sabías, ¿porqué?

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21/12/2010, 05:13
El fantasma de Lisa

De repente mientras piensas y no piensas ante ti, en el techo de la habitación se abre un hueco, y de ella sale una figura conocida. Puedes recordarla asustada cuando le diste muerte, ella no tenia porque morir, y tu no tenias porque matarla. Le fallaste, te dejaste llevar  y te equivocaste.

La observas mientras te señala desde el techo.

Maldito, no eres inocente. Su voz suena como un eco. Tú me mataste, nunca podré ir... por tu culpa, nunca podré llegar...

Sientes que se te acerca lo suficiente  se rasga la camisa y muestra la herida que tu le propinaste.

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21/12/2010, 15:05
Diego

 Aterrado, me muevo por primera vez en mucho tiempo. Instintivamente me empujo hasta una esquina de la cama, mientras la veo con rostro desencajado. Aun cuando llevo viéndola desde hace tanto, no logro dejar de sentir pavor ante su presencia.

Escucha, escucha. Lo se. Tu muerte es el peor error que he cometido. Vine a Viena esperando redimirme, pero eso no fue posible. Las torturas, las cicatrices, todo lo soporté, porque lo merezco. Solo yendo al infierno podré pagar una parte del daño que te hice. Pero no morí. Estoy condenado al infierno en vida, antes de siquiera poder ir al real. No soy inocente, soy un monstruo. Las heridas en mi cuerpo nunca van a compensar la que tienes en el pecho. Ni siquiera las de mi alma podrían. Volvería a pactar con ese ser, si eso representara tu libertad. En las noches pido a Dios, si existe, que te permita ir a su lado. No mereces estar atada a un ser como yo. Tu muerte pesará eternamente en mi conciencia, estes o no estés. He de morir, lo se bien, pero no sin antes descender en la espiral. Aunque para eso no falta mucho. Yo....perdi la razón...el día en que te maté. La conclusión está próxima. 

Sin darme cuenta, estoy respirando entre palabra y palabra. Las cicatrices aumentan su dolor, y siento que mi mente empieza a fracturarse. 

Solo vas a descansar...el día en que muera...y mi alma vaya a donde pertenece...ese día...ora por...los que alguna vez me amaron...

Me encojo en la cama. La espalda me duele horriblemente, y el pecho. Cierro los ojos, pero sigue ahi. No esta lejos...Sire...no esta lejos...lo siento...con toda mi alma...lo siento. 

Mis manos se aferran a las almohadas, con tanta fuerza que se rompen. La cabeza me da vueltas, y el dolor sigue en aumento. Mi voz se hace más audible con cada momento. Abro los ojos de nuevo, y la observo con fijeza. Jamás me perdonarás...aunque vaya...al infierno...donde debo estar.

El dolor aumenta. A mi mente vuelven las torturas, y todos los errores que cometí desde que tome su vida. No está lejos. 

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22/12/2010, 06:14
El fantasma de Lisa

Te retuerces en la cama hacia una esquina y por primera vez hablas desde que saliste del juicio, le explicas y le ruegas a la joven que te perdone, ella te mira con dolor y puedes observar como una lagrima se escurre por tu mejilla. Su luz de repente se apaga.

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22/12/2010, 06:25
Miguel

 

Oh mi Diosito., ¿y hora que le está pasando al paisita?. Abro mis ojos asustado y me le acerco. Paisita, parce, ¿a quién le habla?, ¿Por qué está diciendo todas esas vainas?.

Noto que le hablo y no reacciona frente a lo que le digo

¿ Porque está hablando de que se va al infierno?, ¿qué ta pasando por Dios?. El parce está raro, lo sé, siento su sufrimiento... he sentido su sufrimiento por semanas, es como un dolor que no se me quita.

Miro hacia el techo, lugar donde fija la mirada aterrado y recuerdo de los sustos que ha tenido antes... el espíritu de esa mocosa lo está molestando de nuevo.

¡DEJALO EN PAZ!- le ordeno aunque no veo lo mismo que él. Veo  que al momento se calma, aunque sigue nervioso.

Lo observo  con dolor, y de repente noto que mientras se revolcaba en la cama uno de los botones de su camisa cedió y pude ver su pecho. Mis ojos se abrieron horrorizados cuando vi que estaban sanando unas horribles heridas circulares. Inmediatamente palidecí y me toque la boca. Oh Parce, ¿que hijueputas fue lo que le hicieron?. Me acerco para detallar esas marcas, sé de que se tratan.

Me acerco hacia él y trato de tranquilizarlo aunque yo no lo estoy. Me doy cuenta que nuevamente lo han jodido.

Cuando él me dijo que estaría bien me mintió, esos hijueputas lo torturaron, ese dolor que sentí todo el tiempo era cierto, llevo días sin dormir y noches rezando para que le dejaran en paz, pero nunca pensé en mi corazón que su gente fuera tan cruel. ¡Malditos!.

Una lágrima larga se escurre por mi mejilla. No pude estar ahí para protegerte, le he fallado hermano, perdóneme. Murmuro sintiéndome mal. Me acerco a él y le tomo del brazo para acomodarlo en la cama, la idea es que vuelva a acostarse.

 No sabía qué hacer o que decir, pero sabía que nadas de lo que dijera le afectaba.

Pronto va amanecer parce, le arropo cómo sí fuera un niño.  Cierre las vistas y duérmase... yo tare por acá por si me necesita.

No era la primera vez que hacia eso, en las Suecias tuvo momentos así, pero la mayor de las veces era porque estaba borracho, pero es la primera vez que lo veo tan mal.

Me toco la frente sintiendo como sí un enorme peso me aplastara el corazón. Si bien el señor Von, lo que sea, me dio una habitación para mi, pos yo prefiero quedarme aquí al ladito. Posible sean los últimos momentos que pase con mi parce, luego es posible que no lo vuelva a ver si me toca volverme pa Colombia. Me siento en una silla cercana a la puerta.

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22/12/2010, 07:06
Diego

 Veo que ese fantasma desaparece, pero no los mentales, ni el dolor. Siento que me tocan, pero rehuyo el contacto, me duele más si me tocan. Me ponen algo encima, pero me lo quito, estoy muerto pero siento que necesito respirar.

Me encojo en la cama, me acuesto de lado en posición fetal, intento encogerme lo más que pueda para ver si el dolor disminuye. Estoy muy fatigado, pero el sueño no llega. Espero que el amanecer me permita olvidar todo esto, que por un día pueda dormir sin pesadillas. Pero estoy seguro de que no será así. La ceremonia, las torturas, el pasado...¿con que soñaré esta vez? Pero el sueño no llega. ¿Soñaré con el fantasma y la niña? Maldita loca...abrazar niños siempre tiene esa consecuencia, y no es justo que yo tenga que lidiar chiquillos ajenos. El dolor sigue ahi. De esa muerte no me arrepiento. 

Me toco el pecho. Al parecer la camisa se abrio, y por instinto me toco las cicatrices. Aun no sanan. Yo use mi magia para curar, cuando era posible. Ellos la usan para hacer daño...no me merezco más que torturas, desde que cambié la vida por la muerte. Me quedará una cicatriz, al igual que en la espalda. Igual...en el infierno eso será lo de menos. No tardará el momento. Estoy bajando con cada segundo que pasa. Es horrible saber que uno esta enloqueciendo cada vez mas, ser consciente de ello. Los malkavian enloquecen de una vez, y no son conscientes...o eso creo. 

El dolor sigue. Pero ya estoy confundido otra vez. ¿Será dolor físico o mental? El que sea, no cede.Quizas, si intentara tomar algo...en Kiruna yo solía beber mucho, cuando ella venía. Nunca pensé que diría esto, pero me pregunto si la morfina me ayudarían en algo. Lo dudo. Quizas la heroína...no, si cuando duermo tengo pesadillas no quiero ni pensar que pasaría si la uso. Aunque, dicen que el primer momento es de placer...un instante de placer podría darme fuerza para soportar este dolor. Ha pasado tanto desde que....¿cuando fue la ultima vez que senti algo parecido al placer? Creo que la ultima vez que cacé...tendré que cazar mas seguido. Si es que esto no es un sueño, y resulto despertando en la celda, o en el salon de interrogatorios. Pero con este dolor, aunque quisiera, no podría cazar, no podría comer.  

Sentir cómo mi cordura se escurre de entre mis dedos es, quizas y sin contar el seguir vivo, la peor tortura de todas. Pero lo merezco. Empezo cuando mate a esa niña, esta era la consecuencia lógica. Cuando enloquezca por completo, seré libre. Ya no seré yo, será la bestia. Ella me relegará al olvido, y de ahi al infierno solo es un paso. Ojala fuera rápido. Dios, por favor, que sea rápido. Perdoname, y cuida de los que me amaron. Si hago algo, quizas pueda acelerar esto. No lo se...¿será que podré dormir? El sol sale...y mi mente se va con la noche. 

Finalmente y en medio de lágrimas de sangre, logro conciliar el sueño. El sopor que abruma a los de mi clase al amanecer me vence, aunque no puedo dejar de temer las pesadillas. ¿Que será esta vez?

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23/12/2010, 04:20
Director

 Te duermes y todo se vuelve negro. En ese momento tus pensamientos se calman y ya dejas de ser consciente de tu entorno. Por un espacio sin definir estableciste un momento de tranquilidad, ya no estabas en esa cama, y no sentías. Era como un analgésico  mental. Tus pensamientos no fluyen como antes.

La primera imagen que tienes, es una familiar, tendrías unos diez y seis años y escuchas una  gran cantidad de personas afuera de tu habitación. Sales y escuchas a tu padre, Don Guillermo Andrés García hablando con unos tíos y presumiendo de ti.  

“Ave María, sí supieran lo orgulloso que estoy de mi muchacho, es que por la virgen sagrada, a Evangelina y a mí nos bendijeron con su presencia, imagínense, primer puesto en ciencias en el colegio”, Se ríe sonoramente, “los curas siempre son quisquillosos, pero es que mi muchacho está hecho pa ser médico, el muchacho ya me lo dijo...”

No alcanzas a ver la cara de tus padres. Deseabas ver sus rostros  y cuando abres la puerta de tu cuarto, no te encuentras con el pasillo sino con  un  espejo.

La imagen que refleja no es la del adolescente sino  la imagen de cuerpo completo de lo que eres ahora.

Estas sorprendido, la imagen de Diego Andrés García, el vampiro palido, con profundas ojeras  y signos de tristeza mira al niño que pensaba que tenía futuro en ese espejo. Una lagrima de sangre del hombre adulto sorprende al adolescente que lo mira con terror y se aleja de él.

No importa cuento te esfuerces, no importa cuánto tus padres estén orgullosos, no importa que seas el mejor en ciencias, terminarás siendo lo que soy, y peor aún.

El joven sorprendido grita, mientras su cuerpo y cuarto se parten como si fueran un vidrio. Y quedas tú en la oscuridad, llorando..

 

¿para que tantas ilusiones y deseos?

¿Para qué  soñaste?, ¿para qué?...

Para que te convirtieras en un ser macabro y violento,

Para que rompieras y destruyeras todo.

 

En un momento te agachas y recoges un poco el espejo roto de tu pasado, y justo cuando miras a la derecha, escuchas una risita infantil y sientes como se te altera el corazón, ¿estará esa mocosa cerca?

Pero cuando te giras lo que ves es una figura conocida.

El demonio te mira desde una esquina.

Es curioso, hice lo que me pediste, pero ahora quiero mi paga... ¡dame lo que quiero Diego!