Partida Rol por web

Con Karizma aún en mis brazos, vuelvo a reunirme con el resto de presos para quedarme quietecito tal y como ordenan mis "superiores", mientras le digo a Giro - Tranquilo, no me moveré. Me quedaré aquí a ver como esa "sombra" nos mata a todos...

Miro mis muñequeras y con paso decidido me interno en las sobras seguido por Yunque camino de la puerta y de la cosa que ha herido a Karizma. Es inútil decir a Yunque que Karizma pueda significar algo para mi, así que me abstengo de ello.

Tienes razón...siempre hay de sobra para gozar a cambio de un paquete de cigarrillos. Vamos a descuartizar a ese cabrón...tengo ganas de darle de ostias a alguien. Desactiva las muñequeras, no quiero que me pille con el culo al aire.

Me debato en el límite entre la razón y la inconsciencia, pero puedo captar algo de lo que ocurre a mi alrededor. Los putos polis van a dejar que me muera. Tal vez esto termine de abrir los ojos del grandote.

Haciendo un enorme esfuerzo, cuando Maxwel se aleja de Giro, le sussurro unas palabras.

-Gracias... por... inten...tar...lo. Dile... a Tank... que no... se... pu...dra... aquí... adentro.- El aire quema en mis pulmones, cada ¡nspiración es una tortura, pero aún me quedan unas palabras más. -Él... enten... derá.-

Luego, vuelvo a semi-desvanecerme, intentando conservar las pocas fuerzas que me quedan para vivir.

Observo como la situacion se va poco a poco de las manos de los guardias, y del Ece, pero sea lo que sea que este pasando, no parece haber sido lo que tenian planeado entre todos, y ahora estoy mas seguro de que entre Tank, las mujeres, Maxwell, y los del ECE, tramaban algo... Y no creo que este entre sus planes evitar que algo me pase.

Ya habia visto que alli habia varios "seguidores" de cuervo. Me gustaria saber que tiene ese contra mi, pero ahora poco podia hacer para averiguarlo. Y tampoco podia aceptar la propuesta de Olaffsonb en esta situacion... Asi que hice lo unico que me quedaba por hacer... Acudir a mi amigo entre las sombras... Espero que sea tan tonto como yo pienso...

POco a poco, en esa situacion, comienzo a sentir denuevo esa adrenalina que me hizo actuar diferente en el gimnasio... Quizas ahora pueda usar mis poderes... Despues de todo, estamos a oscuras...

Me acerco hasta una de las paredes, en las que antes vi las sombras como solidas, y susurro.. Hey, Shadowmancer, no se como lo has logrado... pero sacame estas cosas, y deja que yo tambien me divierta un rato... jejeje

Sientes un cosquilleo en tu interior, una ola de calor... un resabio de antes?

Tu mente se nubla con recuerdos del pasado, del grito satisfactorio del poder, de planetas explotando y el vacío del espacio.

De entre las sombras surgen unos dedos, pálidos... Szzii, amigo... todosszz deben estar conmigooo... morir... todoszz moriran? Estarásssz conmigo??

De los dedos surgen pequeñas cintas, volutas de sombras que acarician tu muñeca...

Escuchas a los guardias parlotear, sobre que la Enfermería está cerrada por las puertas, y no pueden acceder a ella... y que no pueden contactar a los guardias de allí... y piensas: Down.

Observo a Karizma, apesadumbrado. La muchacha parece estar ya en las últimas...

Tranquila, todo saldrá bien... Vas a salir de esta... Tank no se pudrirá en esta carcel... y tu tampoco...

¡Tank! - grito con fuerza. Necesitaba hablar con el hombre metálico lo antes posible - Ven aquí, por favor - al decir esto no paraba de mirar a Karizma, que permanecía en mis brazos, como para darle a entender a el y a todos los "mirones" que Karizma le necesitaba cerca, que aunque no era algo que fuera muy desencaminado, Maxwell también necesitaba hablar con el hombretón de otros asuntos...

Sientes el poder bullir dentro de tí... miras las esposas con desdén, a los presos a tu alrededor... seguramente podrías quitártelas de un tirón y soportar su castigo, para luego desaparecer de este lugar.

O no? Valdrá la pena poner en marcha algún plan?

Crusher y Flicker no se ven en ningún lado, y la sombra parece haber matado a la chica del plateado. Merecido se lo tenía, la zorra.

Los guardias están asustados, evidentemente, y al borde de los nervios. Incluso Ráfaga parece compartir esa preocupación, esa crispación... solo Giro está sereno, bajo control.

Que todos moriran? este tipo esta loco.... Empezaba a sentir el poder que antes fuera mio... y lo bien que se sentia... Algunos recuerdos fugaces pasaban por mi mente, pero aun no contemplaba todo el panorama... Solo recordaba una pequeña parte... Y eso era suficiente como para saber que no seria digno de mi... de niuno de los de mi raza... Obedecer ordenes de alguien como Shadowmancer....

NO me puedes matar... Soy mas viejo que tu... que tus poderes... No lo lograras... jejeje

Que todos debemos morir? Estar contigo? jejeje, estas loco amigo, pero analiza esto... Pronto el ECE restablecera la energia... Pronto, lo que sea que tenian planeado se pondra en marcha... Si eso sucede, estaras solo... NO importa lo poderoso que seas. Te acabaran COmpañero.. Que si estoy contigo? claro que si... Ese era el trato.. Yo aun te soy util... y tu aun me eres util... Pero eso de morir... Me temo que todavia no, compañero... Me queda mucha vida por delante... Mucho mas de lo que te imaginas...

Y poniendo vos mas firme... Ahora, deja los juegos, y liberame... Antes de que sea tarde...

Rote asintió enfáticamente, varias veces, sin inquietarse en lo más mínimo por el cuchillo de Gear.

—Estás de suerte. Soy una niña buena desde hace más o menos cuatro minutos —se quedó pensativa un instante—. ¿Puedo irme con ustedes y ser la distracción después?

- Púdreeete entoncesszz... serászz mío de todas formassszzz... puedes escuchar de entre las sombras, mientras los dedos se sumergen en ella y desaparecen, junto con los tendones de oscuridad que se acercaban a tu muñeca.

Estás por largarle una maldición al engendro, cuando una explosión sacude el piso y hace crujir las paredes.

- Bien, dice Gear mientras guarda el cuchillo. Muévete, allí detrás.

Te conduce detrás del contenedor, con otros tres presos de mala cara. Uno es un hombre-lagarto, el otro un petiso de músculos ultradesarrollados, el tercero un hombre flaco, con anteojos y nariz aguileña. Algo en su forma de mirarte te repugna sobremanera.

- Hey, un pollito... con el hambre que tengo, dice el flaco.

Estás por largarle una maldición al engendro, cuando una explosión sacude el piso y hace crujir las paredes.

Oyes la voz de Maxwell, te vuelves y sientes la mano de Yunque en tu brazo; un chasquido en tu muñeca y una breve vibración confirma lo que ves de reojo: la muñequera está desactivada.

- Mierda, vamos, deja que el bigotes se coja a la muerta, tenemos trabajo! te insiste Yunque.

Estás por largarle una maldición al engendro, cuando una explosión sacude el piso y hace crujir las paredes.

Tank parece volverse de donde está hablando con Yunque hacia Maxwell, cuando de repente una explosión sacude el piso y hace crujir las paredes.

No te pases con la chica y vamos corriendo de una puta vez.Cuanto antes terminemos con esa cosa antes podrán ocuparse los sanitarios de Kari. Dices que hay movimiento en el primer piso?, pues cagando leches hacia allí.

Corro en dirección a las escaleras mas cercanas, con verdaderas ganas de encontrarme con ese animal.

La explosión sacude el piso, pero proviene claramente de arriba, de los niveles superiores. Polvillo de roca cae desde el techo, y las lámparas muertas se sacuden desde su posición.

Casi inmediatamente, una explosión, mucho más fuerte que la anterior, sacude el piso, desde los niveles inferiores. Las paredes se agrietan, muchos pierden la estabilidad y caen al suelo.

Flicker aparece en un relampagueo en el medio de la habitación. Su traje se encuentra ensangrentado y roto en varios lugares.

- Vamos, los evacuaré a la montaña! dice la heroina, mientras intenta levantarse.

- Ni lo sueñes, dice Giro, mientras le hace una presa con su brazo derecho en el cuello, ahogándola.

Un preso, un tipo ancho con cara felina y mala leche permanente, da un aullido y comienza a transformarse ante sus ojos... su piel se oscurece, creciéndole el pelo vertiginosamente... salta hacia un guardia y con un chasquido le parte el cuello, antes que dos disparos de escopeta a bocajarro le habran un agujero en el costado.

Un momento de silencio se produce, el silencio antes de la tormenta...

Corres con Yunque hacia el ascensor, donde unas tremendas rajaduras hacen su aparición en la pared. Incluso las temibles compuertas del ascensor se encuentran descuadradas y unos centímetros abiertas, debido a la sacudida.

- Por aquí, dice Yunque mientras te guía hacia un lateral.

Allí, bajo contra la pared, han removido un panel de mantenimiento que da a un estrecho pasillo, entre cañerías y manojos de cables.