Partida Rol por web

El Capitán Thunder se reunió con su amada esposa y acompañaron a todos los que decidieron quedarse al Salón de la Libertad. Una amplia sala, moderna y minimalista, con sofás cómodos, una gran televisión y una gran mesa donde cualquiera de los presentes podría sentarse para conversar.

- Bien muchachos. Dijo mirando a su mujer. Si finalmente estais aquí es porque habéis decidido pertenecer a la Liga de la Libertad. Son muchos los problemas de esta ciudad, y somos muy pocos los que podemos coordinarnos para acabar con ellos. La policía se encarga de los asuntos más mundanos, y somos nosotros los que nos hacemos cargo de los villanos con superhéroes. A veces ellos podrán venir a echarnos una mano, pero en estos asuntos es mejor que no se metan mucho.

De momento me gustaría que charláramos un poco entre nosotros, que nos conociéramos mejor y que explicaseis cuáles son vuestras habilidades. En el barco lo hicisteis francamente bien, conseguisteis acabar la misión con éxito, pero una buena coordinación de vuestros poderes podrá haceros ser mucho más efectivos.

¿Qué os parece si os conocéis un poquito más?

Nancy Gardener fue devolviendo una a una las sonrisas que su amado esposo le iba entregando. Se podía escuchar el comedor donde los alumnos estaban ya preparándose para alimentarse. Pero ellos estaban en un salón privado, donde podrían hablar sin que nadie les molestase. Y donde Gardener iba sirviendo los más suculentos y exquisitos platos, mientras un hombre hacía de camarero atendiendo a cualquiera de sus peticiones.

La mujer se acercó al grandullón de Ulrich, tendió una mano sobre su enorme espalda y con una sonrisa le dijo: ¿qué tal si comienzas tú? Al fin y al cabo te hemos nombrado el lider del grupo por algo. Dijo muy pero que muy sonriente, mostrando unos rasgos hermosos y una belleza que os hacía comprender la razón por la que Thunder se había casado con ella.

-Bueno, a ver, desde luego no se me escogió por mi habla en público, peroooo. Ummm. Supongo que soy el más... ¿vastberaden? Resolute. ¡Resuelto! Eso –dijo el muchachote, todavía peleándose con su idioma no materno, su acento holandés impregnando cada una de sus palabras- Pues, bueno, supongo que está claro que lo mío es lo físico. Normalmente puedo levantar unas 3 toneladas o así (un coche grande o una furgoneta) y mi récord está en unas 12 (un camión). También lanzaba jabalina, peso y disco, pero me lo prohibieron cuando comencé a pasarme de la raya, literalmente, no había suficiente campo... Hice salto, llego a unos 12 metros en carrera, el doble si corro a toda pastilla y salto empleándome a fondo; los 100 metros lisos los hago en un poco menos de 5 segundos. Ummm, ¿qué más? Hice natación, en eso no soy muy rápido, pero aguanto la respiración unos minutitos... unos 10 ó 12 –siguió comentando tratando de no sonar acomplejado- A ver, como relevante, pues hice lucha greco-romana y, no se me daba nada mal, pero nunca he hecho artes marciales, mi madre me lo prohibió –cosa que no es de extrañar imaginando los desastres que podría haber ocasionado- Oh, y nunca he estado enfermo, encajo muy bien los golpes e incluso cuando consiguen darme bien, pues se me pasa muy rápido –y la verdad es que cuesta imaginarse qué podría darle lo suficientemente bien como para que le afectara con esos músculos; ¿tal vez uno de aquellos cañonazos?- pero confieso que hasta lo del banco nunca me había puesto en situaciones de peligro y no sé qué pasaría si me pegaran un tiro. Me asusta un poco. ¿Ya? –preguntó mirando a la bella propietaria de la mano que había estado insuflándole valor para hablar.

Fran escucho con atencion a Ulrich, aunque no se sorprendio mucho con lo que conto, era bastante evidente sus capacidad y talentos con solo mirarlo. Si eso si le sorprendio un poco que a pesar de su tamaño pudiera ser tan rapido. La joven dejo pasar unos segundos tras acabar Ulrich para ver si alguien se lanzaba, pero viendo que no, decidio tomar la iniciativa.

- Si a nadie le importa, continuare yo.- Fran se levanto, observando a los presentes para asegurarse que tenia su atencion, y continuo.- Como algunos ya visteis, mis talentos son principalmente mentales. Telekinesis, ilusiones, y...- la joven hizo levitar un vaso hacia ella, en demostracion. Acto seguido continuo hablando, pero directamente en la mente de los presentes.- Y telepatia. Tambien recibi un entrenamiento intensivo en artes marciales y combate armado y desarmado...

Satisfecha con su pequeña demostracion, Fran continuo hablando con normalidad. - No se si son unas habilidades adecuadas para un grupo de superheroes, como a ustedes les gusta decir, pero espero ayudar en todo lo posible.- Como conclusion, Francesca intento mostrarles una sonrisa amable, queria caer bien a los presentes si, como parecia, iban a compartir mucho tiempo juntos. En realidad estaba bastante feliz, ya que no estaria sola al menos una buena temporada.

Jaime evitaba hacer cualquier gesto que pudiera delatar lo ridículo que le parecía esa situación. Le hubiese gustado pasarse la mano por la cabeza, pero era un inconveniente al ser calvo. Esperó paciente a que todos hablaran.
Por dios, parece una puta reunión de alcohólicos anónimos pensó con frustración.

Bueno, supongo que es mi turno no de levantó ni nada, lo veía innecesario. Supongo que mi fuerte es la cabeza, supongo. De ahí mi poder. No se si lo habéis intuído o supuesto, porque no es algo... "Visible". Se puede decir que entro en la mente de las personas, y suelen hacer lo que les ordeno. Vamos, lo que viene siendo un títere. Y, cuando les devuelvo su estado, no suelen recordad nada tomó un poco de agua Todo tiene sus limitaciones, y la voluntad de la mente aumenta si quiero que hagan algo que generalmente no harían. Pero siempre hay voluntades mayores y menores...

Recatada como de costumbre, Ikari habló con suavidad, siendo lo más clara posible. Llevaba puesto un vestido especial de su tierra, que le permitía no tener tanto calor. Era una gozada que esa vestimenta pudiera reflejar un pedacito de su país.

Abriendo y cerrando los ojos a la par que sus labios gesticulaban, comenzó a hablar:

Queda entendido lo que ustedes saben o pueden lograr.

Por mi parte, siempre que esté sosegada y nada ni nadie perturbe lo que está a mi alrededor o lo que me importa, no sufrirá. Deberían pensar que es una suerte toparse conmigo y relacionarse de un modo cordial, de lo contrario, mi estado de ira aumentaría progresivamente, logrando alterar el estado vital de uno mismo, es decir, que podría ahogar, cegar y demás cosas a cualquiera. 

Ikari realizó una inspiración profunda.

Supongo que todo queda dicho ya - concluyó apartándose.

Bien, afirmó Nancy, pues entonces ya estáis todos presentados y ya sabéis lo que podéis hacer cada uno. Llegados a este punto me gustaría pedirle a la Agente Montoya que pasara. Dijo levantándose de la mesa, saliendo unos minutos y yendo acompañada de la mujer que el día anterior había ejercido de miembro de la policía.

Buenas. Dijo la agente. Mi nombre es María Montoya. Algunos ya me conocéis del primer incidente que ocurrió en el banco. ¿Recordais? Bien, dijo sin saber muy bien por dónde empezar. Como recordais hubo un par de ataques al mismo banco muy seguidos.

Dejo unos segundos para que interiorizaran y recordaran aquello.

El segundo de los ataques lo logramos evitar, Rant y Rave fueron encarcelados así como todos sus secuaces. Pero por lo visto no trabajaban para los otros que atacaron primero. Tememos que ellos llegaran allí de casualidad, para llevarse un botín que ya había sido saqueado. Volvió a hacer otra pausa. Por eso tenemos que buscar ahora a los otros. Algunos de vosotros fuisteis testigos de lo que pasó allí dentro, mis compañeros y yo llegamos demasiado tarde y apenas pudimos ver nada. Nos gustaría que nos facilitaseis toda la información de la que dispongais. Dijo mirando a uno a uno al cuarteto que formaban aquellos individuos.

Ikari se daba cuenta de que tendrían que contarle algo más detallado de aquello.

Háganme un resumen de lo ocurrido, ¿qué personajes eran?, ¿qué habilidades tenían?

Pobres pardillos dijo Jaime, recordando a los dos que había conseguido detener dominando sus mentes. Seguro que no les había sentado nada bien llegar al banco y descubrir que ya no había dinero porque alguien lo había robado antes que ellos.

Pues a ver, si mal no recuerdo... Se llamaban así mismo Factor Cuatro recordó, rascándose la barba. El cabecilla del grupo parecía controlar el agua, o algo así, recuerdo que lanzó un geiser por la boca, noqueando al guardia de seguridad. Luego estaba el gigante, que parecía que tenía un cuerpo de granito, de hecho se llama Granito, que el líder dijo su nombre. Otra de las mutantes tenía el cuerpo como vaporoso, como si fuera aire, y el otro tenía el cuerpo rodeado de llamas. Mmm... Fuego, Aire, Tierra y Agua, como si fueran los elementos de la naturaleza.

Asintió con la cabeza, como queriendo decir gracias.

Fran saludo con una inclinacion de cabeza a la oficial de policia.- la recuerdo, oficial Montoya, me alegro de verla bien.

Jaime explico por encima a los cuatro metahumanos que habiamos encontrado en el banco el dia anterior, los recordaba bien asi que la joven intento aportar algo con lo que ayudar a la agente de policia.- parecian organizados, aunque tampoco demasiado, el mas inteligente era el cabecilla pero sus compañeros no parecian muy brillantes. Lo cual es una suerte, ya que cuatro personas astutas y bien organizadas con semejantes poderes...- no le costaba mucho imaginar que hubieran hecho sus antiguos empleadores si hubieran tenido bajo su mando a individuos asi. Un escalofrio le recorrio solo de pensarlo

-Si no hubieran tenido los rehenes les hubiéramos pateado el culo. Trasero -se corrigió el enorme muchacho súbitamente consciente de que no estaba entre amigotes, sino que había presencia femenina- No me parecieron tan duros. Escurridizos sí, duros no. Tramposos. Siempre he odiado a los que se escudan en otras personas para lo que sea... -reflexionó en voz alta, en su simpático inglés de acento extranjero.

¿Factor Cuatro? Dijo mirando Montoya a Gardener.

La mujer levantó la mano para que le diera unos segundos, sacó su portátil y comenzó a buscar información en él. Mientras sus ojos se movían a gran velocidad y sus manos tecleaban con ansias, la mujer hacía gestos de cuando en cuando para que la dieran un minuto más. Parecía que en la base de datos había suficiente información sobre aquel grupo.

El Factor Cuatro es un viejo enemigo de la Freedom City, especialmente de la Familia Atom. Son un grupo de exploradores rivales de los años 70, adquirieron sus poderes sobrehumanos empleando un juego de artefactos místicos y se han convertido en peligrosos criminales. Sus metas principales son el beneficio y encontrar un modo de controlar por completo sus poderes para poder disfrutar de sus ilícitas ganancias. Tienden al robo de valiosos artefactos, saberes arcanos, descubrimientos científicos o pueden incluso que secuestren a estudiosos o científicos. También pueden trabajar para otro tipo de supervillanos a cambio de dinero que necesiten, o robando para financiar sus investigaciones.

Como bien ha dicho el Sr.Nikols, su líder es el Profesor Fathom, capaz de alterar su aspecto, es elástico, casi insustancial, inmune a ciertos aspectos, impenetrable...  Su nombre real es Richard Calumus, se desconoce el lugar de su base de operaciones y antiguamente era arqueólogo.

De Granito disponemos de poca información, salvo que también puede cambiar de forma, puede aumentar de tamaño, es muy fuerte, dijo eso mirando a Ulrich, inamovible, y también impenetrable, es capaz de cargar con 100 toneladas, ¿Ulrich, tú puedes con tanto? Es capaz de crear terremotos e incluso ondas de choque. Un serio peligro.

La mujer se hace llamar Sílfide, tampoco tenemos mucha información sobre ella, salvo que puede convertir su cuerpo en aire, es capaz de asfixiar a los demás, inmune a los ataques de energía, su cuerpo es insubstancial y es capaz de volar.

Y por último está Jack Connors, también conocido como Pira, capaz de volar y lanzar rayos de fuego.

El problema viene del conocimiento de su base. No sabemos dónde pueden estar, ni tampoco sabemos si están trabajando para alguien o si lo hacen de forma privada. Además, está claro que robaron el banco por el dinero que había en él, porque por lo que informaron a la Agente Montoya, no había, ni faltaba ningún objeto de valor.

El líder de la Liga de la Libertad se quedó mirando a Ulrich. Y luego echó un vistazo a los demás. Quería saber qué opinaban ellos de todo aquel asunto y quería escuchar cuáles pensaban que podían ser la mejor forma de actuar.

-Pues no, señora, no puedo con tanto. Pero no creo que lo necesitara para encajarle un par de buenos puñetazos. Me preocupa más eso del cambio de forma. Si puede escurrirse de forma antinatural no podré contenerlo con una presa, por buena que sea. Lo tendría que noquear –Ulrich frunció el ceño, una actitud que aportaba arrugas a un rostro demasiado joven para tenerlas de otra manera- Supongo que tendríamos que organizarnos antes de enfrentarnos de nuevo a ellos. ¿Sugerencias?

Ulrich no era un líder experimentado, eso estaba claro, pero se estaba tomando sus responsabilidades a pecho, y de eso sí que tenía para dar y regalar. Y poco a poco le estaba cogiendo el truco a eso de charlar, seguramente gracias a toda una vida escuchando a sus entrenadores.

Un cambiante, una mole bestial, una mujer que puede resultar un problemón y un escupe fuego - mencionaba Ikari, al la par que se llevaba la mano a la barbilla.

Si aún desconocen dónde está su base, habrá que recabar información. ¿En el banco no dejaron ningún tipo de pista?, ¿algo que pueda ser analizado?

Mientras hablaba sobre este tema, su mente hurdía a la par otro plan.

Miren, lo que pienso es lo siguiente. Dado que son dados a los robos, se podría atraer al grupo a una trampa. ¿Por qué esperar a que actúen?, hagamos que vengan hacia un cebo.
 

Una trampa es buena idea, la lucha tendria lugar en el terreno que queremos y con las condiciones que nos interesa. Si, es buena idea.- Fran se quedo pensativa, ciertamente el enfrentarse a esos tipos iba a ser un reto, ella estaba mas acostumbrada a enfrentarse a humanos normales. Podia ser interesante.

- A priori sus poderes son mayores que los nuestros, pero nosotros tenemos el factor mental a favor. Si el señor Ulrich y yo consiguieramos contenerlos fisicamente, entre sus poderes mentales y mis ilusiones podriamos reducirlos sin tanto peligro. Ademas, sospecho que matando a ese Profesor- Fran se paro a mitad de frase, consciente de lo que acababa de decir- incapacitar, queria decir incapacitar! Si incapacitamos a su lider, perderan mucho potencial...- El entrenamiento le habia jugado una mala pasada, tendria que ir cambiando el chip de su antiguo trabajo.- Pido disculpas, no... no queria decir que mataramos a esas personas. No se que me ha pasado por la mente 

Jaime se encogió ante las palabras de Francesca. No le resultaría extraño tener que matar a alguien en favor de los demás.

A Granito ya le controlé una vez, su fortaleza psíquica es bastante baja, me dio la impresión. El problema es cómo contenerlo después. ¿Algún tipo de anulador? ¿Algún tipo de máquina que le impida poner los pies en la tierra para que no se mueva y genere sus poderes? Con el líder también lo intenté, pero me resultó imposible, mucho más complicado.