Partida Rol por web

Avanzais lentamente mientras hablais cuando de golpe la brujula de un cambio drastico de dirección y la de ambas señala justo hacia la derecha de donde empiezan a veniros ruidos de juegos y musica de feria.

Era una buena pregunta, ¿Por qué iba yo a un sitio como ese?, ¿Qué me había hecho escapar de mi casa?, podría decirle que fue lo del hotel ver a toda esa gente paralizada que parecían muertos vivientes, que fue por la discusión con mis padres por el golpe que me dio mi madre, pero ni siquiera eso era una verdadera excusa, lo único que me hacia escapar de todo y buscar ese lugar era que sencillamente nunca me había gustado mi vida y para eso no tenia una razón real.

- Quiero volver a empezar en otro sitio- diciéndole eso no le estaría mintiendo.

La brújula comenzó a mover en otra dirección como siempre hacia sin previo aviso y por que le dio la gana, se empezaban a escuchar voces y ruidos quizás la feria estuviera cerca.

La respuesta no me la dio de malas maneras ni nada parecido, pero por lo escueto de sus palabras, deduje que prefería no tener que contarlo así que no insistí. Una cosa era que aquella chica me conociera y otra que así de repente tuviéramos que ser íntimas y contárnoslo todo.

La brújula había cambiado tan bruscamente que antes de seguir andando me detuve un poco y levanté la cabeza y luego, simplemente retomé, al lado de Anders y de la muchacha.

- Supongo que hemos debido de llegar casi...

Volví a acordarme del yuyu que me daban las adivinas y esas cosas y la piel se me puso de gallina, pero pensaba mantenerme alejada de quien pudiera predecir de verdad o de mentira nada.

- Espero que aquí estemos seguros de verdad.

La chica habia hablado muy bien de aquel lugar y hasta sonaba acojedor, una familia de gente con poderes que se cuidaba, lamentablemente tambien sonaba muy a pelicula de terror o a libro clasico de fantasia, porque aquello de que los monstruitos se unieran a un circo era el colmo de lo comun, pero bueno tambien era de esperar que la gente no sospechara de un topico como ese.

- Creo que escucho algo- escuchaba el sonido de la feria acercandose, parecia que al fin lograriamos llegar, incoscientemente alargue mi mano para tomar la de Emily.

Seguis caminando y ya podeis ver a lo lejos las luces de la feria.

- Estaremos seguros- aunque yo no habia pasado por lo mismo que ella asique realmente no entendia lo que era estar en verdadero peligro, solo queria encontrar una verdadera familia donde encajar donde ser feliz y olvidarme de todo lo demas.

A lo lejos ya podía distinguir la feria, solo la había visto una vez pero era como si pudiera reconocerla en cualquier parte, siempre me preguntaría como es que se desplazaba magicamente aunque eso realmente era lo menos importante.

Asentí a las palabras de la chica, pues verdaderamente ya habíamos dicho todo lo que podíamos decir al respecto y más, cuando ya escuchábamos el sonido del circo en cuestión, por lo que aparte de agarrar con un poco más de fuerza la mano de Anders no hice mucho.

Avanzar sí que avanzamos aunque no fuera demasiado rápido.

Al menos por mi parte, era como si quisiera llegar y por la otra, como si no quisiera hacerlo nunca. Es una sensación parecida a la que tienes cuando por ejemplo vas al dentista porque te duele mucho una muela. Vale, vas porque sabes que te dolerá menos luego, pero las ganas que te dan de darte la vuelta no vaya a liártela más...

Nos habían dejado aquella brújula esperaba que por invitación, por lo que esperaba algo de gente amable al fin.

A medida que avanzabais hacia el sonido podiais ver mas y mas cerla las luces la carpa del circo, algunas atracciones pequeñas casetas, aquel lugar era real, exactamente el mismo circo que habiais visto anteriormente, las 2 en zonas diferentes pero era igual incluso los arboles y la hierva que lo rodeaban eran iguales.

Cuando estais casi en la entrada veis a un hombre colgando un cartel, el Circo de los hermanos Sullivan, hasta donde podiais observar todo parecia normal no habia nada que resultara extraño ni que destara en demasia, era como un circo normal, habia parejas de enamorados paseando, niños que tiraban de sus madres para ir hacia algun sitio, animales por algunas zonas, pequeños puestos donde la gente del circo hacia sus trucos.

Solo si os parabais el tiempo suficiente para observar a algunos de los encargados de los puestos podiais observar como los trucos que hacian o los juegos que tenian no eran mas que pequeños usos de habilidades empleados con disimulo, seguramente de no saber que aquella gente tenia habilidades ni tan siquiera lo abriais notado, pero algunas señales estaban claras, una pequeña niña y su madre lanzaban bocanadas de fuego sin tomar nada ni tener siquiera una antorcha, algunos juegos parecian moverse cuando el jugador estaba apunto de ganar.

Segun avanzabais veiais diferentes carteles.

Todo era tan extraño y a la vez interesante, apartado de todo y a las afueras del circo se encontraban las caravanas de los miembros del circo donde por supuesto estaba la caravana de los dueños los hermanos Sullivan.

Aquello era un circo de verdad, tal y como habíamos visto el día anterior, pero no tardé en fliparlo con lo que podía hacer la gente, sobretodo, cuando lo primero que hacías era imaginar cómo hacían aquellas cosas sin que hubera truco alguno por el medio. Era como poco para fliparlo tanto o más como lo estaba haciendo yo.

Seguimos caminando y vimos incluso una de esas que te leían el futuro.

- No dejéis que nadie me diga lo que va a pasar en el futuro ¿ vale? - Les dije en un susurro tanto a Anders como a Katherine. - Me dan mucho yuyu las adivinas..

No quería tener que estar pensando contínuamente cuándo iba a pasar algo malo ahora que sólo pasaban cosas malas.

Así caminamos hasta llegar al lugar donde debía de estar el dueño y dejé la mochila en el suelo, que no la guitarra.

- ¿ Llamas o llamo? - Preguntaba a la chica sin decidir quién era la que debía hacerlo o quizás, con algo de miedo a hacerlo.

En toda mi vida jamas habia estado en una feria o un circo, todo era tan extraño, subrrealista montones de gente pasaban alrededor de personas que estaban haciendo usos de habilidades y demostrando que sin duda tenian alguna especie de habilidad y nadie parecia estar alterado ni sospechar nada, me habia quedado mas claro que nunca que los humanos somos veiamos lo que queriamos ver y cuando queriamos verlo.

Atravesamos aquella feria mirando a todas partes, me hizo gracia pensar que a Emily le daba miedo las adivinas sobre todo por que ya habia pensado que nada le podia dar realmente miedo, pero le haria caso y me mantendria alejado de ella - ¿Entonces llamamos? - pregunte cuando nos situamos frente a la caravana de los que suponia serian los dueños de aquel lugar.

Era tal y como me lo había descrito Samuel, una comunidad en la que toda la gente como nosotros vivía feliz y sin esconderse, la gente parecía no darse cuenta de lo que estaba pasando a su alrededor pero a cada paso que dábamos nos encontrábamos a gente que utilizaba habilidades abiertamente, familias completas, niños padres, había de todo era algo sensacional.

Apenas si escuche lo que dijo Emily estaba ensimismada mirando a todas partes sin prestar realmente atención a nada, solo cuando nos detuvimos frente a la caravana reaccione.

- Si claro, ya llamo yo – me aproxime y toque a la puerta esperando a ver si alguien salía a recibirnos.

En cuanto los recién llegados tocaron a la puerta me acerque para abrir y dejarles entrar, había esperado su llegada pero no sabia que llegaran todos juntos, aun así era bueno que estuvieran aquí y también era bueno que Samuel no lo estuviera, seguramente el los presionaría y trataría de convencerlos pero cada persona tenia que seguir su camino.

- Por favor pasar os estaba esperando -

Siempre había sido un poco rara, independientemente de que luego Anders me descubriera mis habilidades. Era normal cuando alguien se había criado en todos los sitios y en ninguno, más tiempo de viaje que en ninguna parte... pero lo que sí que había conseguido era ser una persona bastante extrovertida... Daba igual, ese lugar me amedrentaba.

Katherine llamó a la puerta, aunque desde luego tenía bastante mejor cara que yo, como si a ella sí que le gustara estar ahí y yo, me quedé en silencio, esperando a que saliera alguien que diera un poco de miedo a abrir.

- ¿ Esperando?

Me costaba morderme la lengua, pero de todas formas alguien tenía que entrar ahí dentro el primero, así que hice los honores. Si no había adivinas, a las cuales no tenía miedo, bueno sí, pero porque me aterraba conocer el futuro más que otra cosa, yo no tenía problemas para ir la primera. 

Imaginarse que te pueden decir que te vas a morir en dos días... Joooder que yuyu.

En cuanto se abrió la puerta me quede algo “cortada” aquel no era precisamente el hombre que esperaba, había imaginado que Samuel abriría la puerta y que nos recibiría con su siempre encantadora sonrisa, pero este hombre no era Samuel era mayor que el calvo y además parecía tener cara de enfadado.

Gracias a dios Emily decidió entrar antes que yo así que en cuanto ella entro la seguí, seguramente si esta se hubiera quedado parada yo abría hecho lo mismo, era una tontería daba igual que me recibiera una persona o cualquier otra, en aquel lugar no conocía a nadie pero aquel tipo calvo y serio no me daba buena espina.

La caravana no era muy grande y estaba bastante llena de trastos por lo que los 4 dentro estábamos algo ocupados además solo había 3 asientos así que uno tendría que quedarse de pie, como eran mis invitados yo mismo me quede en pie mientras sacaba una botella de agua fresca de la nevera y unos cuantos vasos, abría sido mejor ofrecerles algún refresco o algo así pero hasta la cena todas esas cosas estaban guardadas.

- Bueno permitirme que me presente, me llamo Joseph Sullivan y mi familia es la dueña de este lugar, seguramente os preguntareis como sabia que vendríais pero creo que todos sabemos como lo sabia, así que lo importante ahora es saber por que estáis aquí – ahora quería escuchar la razón por la que todos ellos habían acudido allí, no podía dejar que se nos unieran muchos sin una buena razón.

Estaba aburrida de andar y ya me dolían los pies como no me habían dolido en mucho tiempo. No es que fuera demasiado aficionada ni al deporte ni a las largas caminatas, aunque al menos, el estar de pie en un escenario y moviéndome todo el rato o tocando ayudaba a que aún pudiera andar, que era más que nada.

Como era de esperar después de eso, me desplomé en la silla y agradecí ese agua, la cual me bebí sin mi paranoia habitual de pensar que me la podían dar con alguna otra cosa rara...

- Anders porque le he convencido... - Dije con una medio sonrisa mirando a mi chico. - Yo porque estaba tan desesperada que me agarraría a un clavo ardiendo y en este caso era una brújula que nos dejaron mientras dormíamos y no sabíamos ni donde llevaba.

Esperaba que aquello le sirviera de respuesta.

Desconocia quien era el que le habia dejado la brujula y mucho menos mientras dormia pero algo me decia que tenia que ver con mi hermano - Bueno en ese caso creo que lo menos que puedo ofreceros ademas es algo de comer y mas cuando habeis confiado en nuestra brujula - mire a la otra chica esparando su respuesta.

No sabía muy bien qué decir porque al menos esperaba que me dijera algo como " sí, te la he dejado porque..." pero, no, no había dicho absolutamente nada al respecto.

- Vale, aunque esperaba algo más que una comida... No sé.

Estaba claro que estaba perdida, confundida y que la única persona en la que confiaba por el momento era en Anders y porque había conseguido que me colara por todos y cada uno de sus huesos.

- ¿ Toda esa gente hace...?

Entrecerré los ojos como si no supiera por donde empezar.

- Supongo que esperaba que nos dijeras algo así como " bienvenidos al circo donde todo es absolutamente lo que parece ".

Me abría sentido mucho mas cómoda si en lugar de hablar con el estuviera Samuel, sobre todo por que este hombre parecía muy serio y no daba demasiadas muestras de comprender en absoluto la situación que tenia delante, según decía sabia que llegaríamos pero no tenia idea de por que ni nada, desde luego no me daba confianza.

- Hable con Samuel, el me dijo que la gente como yo era siempre bien recibida aquí, que si necesitaba cambiar de vida que si quería sentirme entre los míos siguiera la brújula -

Me abria encantado decirle a las 2 chicas aquello del lugar donde todo es exactamente lo que parece, pero eso no seria una verdad, es cierto que los trucos eran exactamente lo que parecian obra de habilidades, pero en aquel lugar como en todos siempre habria discusiones.

- Bueno en parte es cierto, este es el lugar donde toda la gente como nosotros siempre es bien recivida aqui nunca se os negara la entrada, aunque no puedo prometeros una vida facil, todos aqui trabajamos juntos nos ayudamos y tratamos de levantar este lugar, pero siempre hay comida en los platos y cuando el circo esta cerrado podeis ser vosotros mismos nadie prohibe aqui que se usen las habilidades siempre que no se utilizen para hacer daño a nadie ni pongan en peligro a los demas -