Partida Rol por web

Héroes y Profecías

Milagros del Bien.

Cargando editor
21/01/2010, 22:57
Director

En el centro del valle, los líderes humanos dan unas últimas órdenes destinadas a perseguir a los orcos supervivientes a la fuga. En medio del vasto claro en medio del bosque, los cadáveres alfombran el suelo y la majestuosa presencia de Hagen de Carcassone está acompañada de Diana, Derek y otra media docena de guerreros. Pronto se acercan el bárbaro Vanth, el nigromante Arkaeron, y Orphen seguido por su guerrero guardaespaldas. Hagen aún observa a su alrededor, buscando señales de peligro, cuando ve acercarse a Bohemond de Shurlav, la figura embozada en la armadura negra que le da la apariencia de un demonio.

Antes de que se puedan intercambiar palabras entre ambos líderes, un semielfo vestido con una coraza y fuertemente armado se acerca al grupo de jefes, escoltado por una decena de caballeros. Uno de los guerreros susurra unas palabras a Hagen, a modo de explicación.

Cargando editor
21/01/2010, 23:18
Hagen

El apuesto hombre de armadura plateada dirige un vistazo a los tres compañeros humanos, como instándoles a esperar mientras él resuelve el asunto apremiante.

El caballero, que se comporta como líder de todos los hombres a la vista, lleva una bella coraza decorada con el dibujo de varios dragones metálicos, grabados con tal acierto que parecen auténticas - aunque diminutas - sierpes reales. La mano enfundada en un guantelete se posa en la hermosa espada, envainada, y solo ahora el guerrero echa a la espalda su enorme escudo pavés, que tiene clavados multitud de pergaminos, cintas representativas de rangos militares y una gran pluma dorada. Tanto la coraza de su armadura como el escudo presentan el dibujo de armas del comandante, un león rampante rojo en fondo blanco.

Con una mirada intensa escruta al semielfo antes de hablarle.

Mi nombre es Hagen de Carcassone, comandante de los Caballeros del Gran Reino y general en jefe de este ejército. Con su mirada engloba al millar de hombres armados dispersos por el valle.

Parece que tenemos enemigo común pero... correspondedme diciéndome quién sóis y qué hacéis en este bosque.

Cargando editor
22/01/2010, 17:48
Kurgan

El semielfo al que se dirige Hagen viste una armadura completa de un tono gris acerado, de un material de calidad, mithril seguramente. Como armas lleva una cadena armada rodeando el peto de su armadura, quedando esta integrada en un mismo conjunto, como si la cadena fuera una especie de arnés unido a la coraza. La imagen final viene a ser la de una armadura completa con púas en el torso y la espalda. También carga con una espada larga colgada del cinto, situada junto al muslo izquierdo. A simple vista y fijándose en su empuñadura, parece una arma de una manufactura muy elaborada y de estética algo pérfida, no parece el filo que llevaría un paladín.

El guerrero no se ve intimidado por la intensa mirada de Hagen ni por los innumerables ojos de sus seguidores que le escrutan. Mantiene una pose confiada, como si no le importase la alta posición del comandante, ni entendiese de jerarquías caballerescas, tratando al general de tú a tú.

Mi nombre es Kurgan, y no soy mas que una espada de alquiler que anda buscando trabajo. Salí de Scornubel por que escuché el rumor de que hacia el este había batallas donde podría encontrar trabajo. En el camino me topé por casualidad con una patrulla de orcos y trasgos y conseguí interrogar a uno de ellos. Me dijo la posición exacta donde se encontraba el ejercito que acabáis de destruir, y decidí comprobar si me había dicho la verdad. Luego aparecisteis a la carga y me vi inmerso en la refriega... y eso es todo hasta este momento.

El semielfo habla con seguridad y rotundidad, dando la sensación de que esta diciendo la verdad en todo lo que dice o por lo menos en su mayoría, aunque para alguien con buena intuición, también sentiría que el guerrero esconde mucho mas de lo que dice.

Cargando editor
25/01/2010, 19:41
Bohemond

El hombre de armadura negra se quita el casco, de aspecto demoníaco, dejando ver un rostro de rasgos duros y una barba profundamente negra. El guerrero porta un escudo forrado en piel roja, y una terrible garra adorna el hombro derecho de su coraza oscura. Porta una gran cadena - símbolo de su orden - armada con púas y que maneja a una mano con ayuda de un mango de hierro, que hace al arma parecida a un largo y pesado mangual sin cabeza. En su escudo puede verse la enseña de su orden - que tambien ondea en algunas banderas cercanas -: una garra rodeada de cadenas. Dejando su arma, el hombre clava los ojos marrones en el semielfo.

Una espada de alquiler tiene mucho trabajo en estos tiempos. Si nos acompañas de vuelta a Berfôska podremos concretar algun pago por tu esfuerzo al decir esto mira a Hagen, que confirma sus palabras asintiendo, y luego a Arkaeron, Orphen y Vanth, como si también hablara para ellos y buscaremos un buen uso para tus servicios.

Cargando editor
26/01/2010, 17:44
Kurgan

Esta vez los profundos ojos verdes de herencia élfica de Kurgan se clavaron en el hombre de la armadura negra. Algo diferente había en esta mirada, el semielfo perdió algo de la relajación que había mostrado con Hagen, un ligero toque de tensión apareció en la cara del guerrero.

Bien....en ese caso os seguiré, pero antes....tengo una pregunta que despierta mi curiosidad....¿sabéis quien es el líder que manda sobre todas estas tribus de alimañas?, hay pieles verdes, trasgos y otras cosas en un mismo ejército, ¿sabéis quien los ha reunido?, ¿lo habéis capturado ya?.

El semielfo se quedó mirando fijamente a Bohemond esperando la respuesta. Se notaba que la pregunta había sido lanzada con una intención desconocida, y no solo por el mero hecho de recabar información.

Cargando editor
28/01/2010, 21:08
Director

Bohemond y Hagen comienzan a negar con la cabeza, dispuestos a dar una explicación, pero la llegada de un pequeño gnomo vestido de negro interrumpe la charla.

Cargando editor
28/01/2010, 21:12
Kandalian

La alegría desborda al gnomo. Aún está tremendamente excitado por la batalla. Ha sido rápida y limpia. Pero toda batalla se cobra un precio, que a veces puede ser alto.

¿Verdad, Finrod?

Cuando el jinete se acerca al grupo de líderes, y sin bajarse de la grupa del caballo, el monje se anuncia.

- Eh! Amigos! Me alegra veros a todos sanos y a salvo! - Como siempre, una amplia sonrisa adorna la cara del gnomo al saludar a sus compañeros.

Cargando editor
31/01/2010, 19:59
Director

Notas de juego

Movimiento o penejotizo sin compasión. =) Recuperamos el ritmo de post cada 2-3 días.

Cargando editor
01/02/2010, 12:11
Orphen

Hola Kandalian, dice secamente. Sin duda aun recuerda cosas del pequeñajo que no le gustan ni un pelo.
Orphen parece algo mas abatido...el combate sin duda no le ha aportado ni mucho menos que el anterior.
Despues le viene la idea, se gira hacia su compañero de viajes, Y el mago lagarto?

Cargando editor
02/02/2010, 19:16
Kandalian

Kandalian gira la cabeza hacia el mismo sitio hacia donde mira Orphen.

¿El mago lagarto? ¡Por San Culthbert que nunca he conocido a uno! ¿Dónde está el mago lagarto?

Sus ojos chisporroteantes buscan con ansiedad...

Cargando editor
04/02/2010, 15:08
Vanth

El joven sonrió al oir a Kandalian otra vez. Lo cierto es que se alegraba de volver a estar ante sus compañeros, pero el bárbaro no solía expresar esos sentimientos con palabras.

Creo que se refiere a ese mago tan raro que vino con él.

Apuntó, antes de echar un vistazo a los hombres importantes que tenía ante él. La batalla había ido mucho mejor de lo esperado, pero de alguna forma el bárbaro no creía que esto fuera el final.

Notas de juego

PNJ

Cargando editor
04/02/2010, 21:02
Kurgan

Kurgan ve como el recién llegado gnomo saluda alegremente a varios de los presentes. El semielfo muestra una total indiferencia por los desconocidos que se tratan con cierta cordialidad. Permite que se crucen unas pocas palabras entre ellos por cortesía y luego vuelve a tomar la palabra, dando poca importancia a lo que se tuvieran que decir los que se reencuentran.
Se dirige exclusivamente a Hagen y Bohemond, que son evidentemente los que ostentan el poder entre los caballeros, despreciando claramente a todos los demás.

Bien....y superada esta corta interrupción, creo que estabais a punto de responderme a una pregunta, caballeros....y espero que podáis hacerlo antes de que llegue otro mediano efusivo.

Cargando editor
04/02/2010, 22:50
Kandalian

Por San Culthbert! No me digas que hay más de mi raza. ¿Dónde? Hace meses que no me cruzo con ninguno.

A Kandalian el desaire que le hace el elfo le pasa desapercibido debido a la efusividad de la vistoria y al reencuentro con los compañeros.

Cargando editor
06/02/2010, 14:34
Bohemond

El hombre de armadura negra observa al gnomo antes de contestar la pregunta que quedó sin respuesta.

No tenemos idea de quién puede ser el líder de un ejército así, y me temo que no hemos dado con él.

Cargando editor
06/02/2010, 14:44
Hagen

El comandante de armadura plateada toma la palabra.

Me temo que su ausencia no promete nada bueno. De la misma forma, me preocupa no haber visto ni un gnol entre estas alimañas, cuando solían ser las bestias más activas. Creo que no será lo último que sepamos de este ejército.

Paseando su mirada por los presentes, parece recuperar el optimismo.

¿Qué me decís? ¿Nos acompañaréis a Berfôska? Tenemos unos magos rojos que interrogar, y por primera vez estamos en condiciones de tomar la iniciativa.

Cargando editor
07/02/2010, 09:58
Kandalian

Kandalian mira a cada uno de los interlocutores que intervienen en la conversación. Altos humanos de armaduras impresionantes que parecen decidir sobre el destino de todos los habitantes de la tierra.

Los gnomos no son una raza guerrera. O al menos no tan guerrera como los humanos. No obstante no puede negarse que son ellos los primeros en responder a las amenazas de las razas más belicosas: orcos, gnolls y ogros.

¡Nunca he estado en Berfoska! ¡Sería estupendo poder ir!

Cargando editor
07/02/2010, 19:58
Director

Notas de juego

Sigues disponible?

Si pensabas escribir pronto tal vez te interese recordar algo que Arkaeron sabe: el mapa que os hizo encontrar Aristeo marcaba un lugar que estaba muy cerca de donde estáis ahora; en el Bosque Extenso.

Cargando editor
07/02/2010, 21:24
Kurgan

Kurgan mantuvo silencio pues ya había dado su contestación a esa misma pregunta anteriormente. Se dedicó a esperar las respuestas que iban dando el resto de los presentes, y aprovechó para observarlos a cada uno de ellos por separado. Pasó la mirada de uno a otro con rapidez, y solo se detuvo a mirar con cierto interés a aquel que por su aspecto se adivinaba que practicaba la nigromancia.

Cargando editor
08/02/2010, 12:30
Orphen

Claro, ya estamos en marcha, y apunto, por mi podemos tomar rumbo a Berfôska de inmediato.

Cargando editor
10/02/2010, 21:31
Arkaeron

El mago se acomodo un poco en la silla de su caballo y lo dirijio hacia sus compañeros.

Chicos, creo recordar que me habiais comentado algo de un mapa, uno que recuperasteis de un grupo que perseguiais, el que os mando perseguir el mago Aristeo, no indicaba una zona cerca de aqui. Podriamos ir a investigar, podriamos reunirnos despues en Berfoska, lo cierto es que me intriga demasiado como para dejar pasar esta oportunidad, si a nuestros capitanes no les supone mucha molestia.

El nigromante mantiene su rostro impasible, como siempre, y erguido observa las reacciones del resto a la espera de una respuesta.