Partida Rol por web

Historias de Horror I.

SA: 6- La Pesadilla Interminable.

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06/06/2018, 18:14
(CC) Velkan Matacambiantes.

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.

Negó ante las palabras de Dyonisius con pesadumbre.

He escuchado ese nombre antes de boca de Alexei en una ensoñación mas no tenemos evidencia alguna de que la muerte del profesor Lorrimor tuviera algo que ver con esa persona. Lo que sabemos es que el profesor intentó evitar que un culto sacara a los fantasmas de los presos de la prisión de Piedra Alzada y ellos lo mataron pero no hemos encontrado ninguna relación con vosotros. ¿Recordáis ya algo de vuestro pasado? Creo que la expedición que todos hicimos junto al Profesor es la clave del vínculo entre los dos grupos pero... no recuerdo mucho de ella.

Tras esas palabras volvió a guardar silencio recabando toda la información que pudo acerca de su situación actual. Conocía poco de las nieblas que lo envolvía pero creía que comenzaba a entender el funcionamiento de éstas. Por ese motivo se atrevió a hablar de nuevo con su habitual franqueza.

No sé si estaré mucho tiempo en este lado o no. La última vez me marché al dormir pero en esta ocasión eso podría tardar más. Mis compañeros no pueden dormir o los espíritus que derrotamos volverán a aparecer. Pero si queréis enfrentaros a una criatura que es capaz de mover la tierra o tenéis intención de asaltar un campamento por la fuerza estoy seguro que yo seré más útil que Alexei así que contad conmigo.

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06/06/2018, 21:54
SA: Hombro Izquierdo.

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.

- "Estoy de acuerdo con Pie Izquierdo, y no porque nos una un vínculo místico especial, sino porque es lo más sensato. Ante una criatura capaz de causar terremotos lo mejor es siempre huir." -

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08/06/2018, 21:31
(SA) Nigromante (Dyonisius).

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.


Tras esperar a que algún otro se pronunciara, el mago dio un largo suspiro.

- No podemos seguir regresando sin avanzar, o cuando volvamos, encontraremos cadáveres y nuestro refugio habrá desaparecido. Por lo que ya dije antes, no podemos tampoco luchar contra alguien capaz de provocar terremotos. No aun, al menos.  Por tanto... sólo queda volver sobre nuestros pasos e intentar atravesar la zona de los guardias. Como ya dije, propongo tratar de acercar a los guardias e ir eliminando uno a uno, usando para ello la espesa niebla a nuestro favor. No podemos dejar nuestro equipo atrás, y el riesgo de ser descubierto y atacados por todos los lados en una posición desfavorable creo que debe dirigir nuestros movimientos. Pero sea como sea, debemos tomar una decisión ya.

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08/06/2018, 22:15
[RIP] (CC) Buscador de la Verdad (Gabriel Alarico).

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.

El Buscador de la Verdad miraba absorto el negro y profundo agujero del pozo, calculando mentalmente la distancia recorrida por el pequeño foco de luz por el Enterrador. En las profundidades de la tierra habitaba algo… Algo que les superaba. Algo que le aterraba.

Después, su mirada pasó por cada uno de sus compañeros. Una mirada furtiva, llena de dudas y de sospechas. Respiró hondo y se centró en las palabras del Nigromante.

Atravesar la zona de los guardias…

Por eliminación, parecía sin duda la mejor opción. Los dedos del detective recorrían el bigote mientras permaneció atento a las reacciones de los presentes.  

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11/06/2018, 14:58
[RIP] (CC) Buscador de la Verdad (Gabriel Alarico).

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.

Las hojas de las dagas devolvieron el reflejo de sus ojos al Buscador. Estaba situado junto al bárbaro, justo detrás del Nigromante. Cada músculo de su cuerpo estaba en tensión, y las dudas y las elucubraciones de su mente se habían disipado de forma momentánea. La cercanía de la muerte y la adrenalina del combate inminente le daban un sentido a su existencia inconexa y sin arraigo, pues cuando su vida peligraba no le daba tiempo lamentarse por el pasado que no recordaba. Y aunque su mente no recordara casi nada, resulta que su cuerpo sí. Recordaba cómo empuñar el arma, cómo atacar los puntos débiles, cómo moverse con sigilo. Recordaba cómo matar. En esos instantes de lucha descarnada, Gabriel Alarico se sentía vivo, completo. Lo sentía, porque actuaba por impulsos sin darle tiempo a su mente crear realidades para llenar el desconsolador vacío que sentía en su interior.

-Vamos. Todos juntos, dijo a nadie en particular, tal vez a sí mismo. Su primera opción había sido correr y buscar evitar otro enfrentamiento. Desde que se habían despertado en este maldito sanatorio, no habían dejado de luchar contra enemigos. Puerta tras puerta, sala tras sala. Ahora comprendía que la única realidad que todos ellos recordaban eran estos días de terror y de lucha continua, de horrores sin nombre y de una lenta caída hacia la locura.

Así que agarró con fuerza las dagas y se aferró a la cordura inherente en el frenesí del combate. Trató de controlar su respiración mientras tomó posición. Era una formación de tres filas de dos, con Tormento y Enterrador delante, y el Anciando Sabio acompañando al Nigromante en el centro. A su derecha tenía a Velkan. Estaban preparados, y comenzaron a cruzar el jardín pendientes de la acción del Ángel Descarnado de la Noche.

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14/06/2018, 16:03
(SA) Anciano Sabio (Sebastián Moro).

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.

Cuando por fin volvieron al edificio, Sebastián Moro buscó un lugar donde sentarse y descansar. Su débil y anciano corazón parecía a punto de estallar. Respiraba agitadamente a punto de asfixiarse pues su vieja sangre era incapaz de llevar aire a su cuerpo a un ritmo suficiente.

Una vez se sentó en el suelo, se llevó las manos a la cabeza. Había leído en historias de mitología y de teoría mágica del cosmos y los planos paralelos sobre criaturas como la que acababan de ver. Pero nunca creyó que realmente aquellas pesadillas existieran. Era un hombre de fé, de eso no había duda. Pero había ciertas cosas que uno no termina de creerse y sin embargo ahora había visto aquella maldad inhumana inexplicablemente reflejada en el rostro negro como la noche y sin facciones. Y allí abajo había algo aún peor.

Sebastián Moro se sintió pequeño, muy pequeño, una mota de polvo diminuta en una inmensidad de horror de una transcendencia incomprensible para la mente humana.

- Solo hay horror, solo hay horror.

Murmuró sollozando durante un tiempo. Poco a poco se fué serenando y se incorporó de nuevo al grupo. Puede que su existencia, tanto la del grupo como la de los refugiados, fuese insignificante, pero era necesario luchar de todos modos. No podían flaquear.

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14/06/2018, 20:42
(CC) Velkan Matacambiantes.

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.

No conocía la localización en la que se encontraba más allá de lo poco que había podido ver en los últimos tiempos, desde que aterrizó en ese lugar de mano de las nieblas amarillas. Sin embargo tras cruzar el patio y evitar el ataque de la criatura alada Velkan estaba expectante por saber a qué lugar se tenían que dirigir.

¿Dónde está el campamento ese que tenemos que asaltar?

Al preguntar eso el bárbaro balanceó el hacha de forma involuntaria, como un ejercicio previo al combate, su mente ya estaba focalizada en el próximo conflicto y no quería esperar mucho para que éste tuviera lugar. Sin embargo desconocía por completo el camino que debía seguir así que estaba a expensas de sus compañeros.

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14/06/2018, 21:16
(SA) Enterrador (Anselmo Paddock).

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.

A Enterrador se le daban bien los números y los cálculos. Él no lo recordaba, pero llevar registros con nombres, fechas y secciones de los diversos nichos y panteones del enorme cementerio de Karkau, le confirió cierta orden y capacidad de actuación metódica. Al igual que las autopsias y embalsamamientos que con tanta frecuencia había tenido que practicar. Al igual que sus rondas de vigilancia, precisas, para que por la noches nadie entrara en el camposanto ni "nada" saliera de él.

Por ello, cuando llegó el momento de abandonar el cobertizo, sabiéndose vigilados por el infernal ser desde las alturas, convino junto al resto que correr al "sálvese quien pueda" significaría que cinco lograrían su objetivo y el sexto desaparecería elevado por aquel monstruo que cazaría a su objetivo como un certero halcón a una liebre. Y el resto de conejos que corran, ya serán cazados otro día. Ni hablar, irían todos juntos, en bloque.

Formación cerrada, en dos columnas. Tres filas, siendo Nigromante y Anciano Sabio, las presas probablemente más predilectas de aquel bicho, los ocupantes de la fila de en medio. Custodiados por delante y por detrás. Si el demonio descendía a por alguno de ellos, el resto del grupo se interpondría. Desfilaron al paso, con sumo cuidado, Enterrador en cabeza. Si en el pasado Anselmo tuvo instrucción militar, no la recordaba. Pero en aquel momento el grupo daba el pego como legionarios de Medev en formación, salvando las distancias.

Las columnas avanzaron con cautela hasta la zona derrumbada, pero en vez de enfilar la salida Enterrador sugirió posicionar el centro de la formación frente a la abertura, pasando su fila un poco de largo de la salida. De lo contrario los dos últimos de la última fila en entrar, teniendo que esperar a los otros cuatro compañeros que maniobraran por los cascotes, corrían el peligro de ser atacados por detrás en el último momento.

Repentinamente la fila central con los conjuradores se adentró en la abertura. El resto mantuvo la formación y terminó por juntarse rellenando el espacio dejado por los evacuados. Nada había cambiado para el vigía de las alturas en cuanto a buscar un flanco débil, habiendo perdido de golpe a los dos objetivos más fáciles.

Los cuatro restantes, poco a poco, retrocedieron por la abertura sin ser molestados, dejando atrás a la criatura infernal. Una vez dentro el enterrador suspiró sonoramente descargando la tensión, pero satisfecho del éxito de no haber sido atacados por el monstruo.

- Solo nos queda el campamento de cultistas. Que sepamos no podemos seguir avanzando sin evitarlo - comentó. Entonces Velkan preguntó su ubicación y con un gesto marcial dejó claro su proceder -. No es tan sencillo, Velkan. El desaparecido Requiem nos comentó que hay un gran número de gente allí congregada, pero beligerantes y violentos solo ocho. Si pudiéramos atraerlos y neutralizarlos de uno en uno, todo sería más fácil y la muchedumbre no se alzaría contra nosotros al no vernos como enemigos. Por tanto no creo que entrar a sangre y fuego sea una opción viable - le explicó -. El acceso a ese campamento sito en una enorme sala está todo al norte desde aquí. No tiene pérdida - le indicó.

Vio entonces a Anciano Sabio y su lamentable estado. Lógico y normal, después de todo lo que estaban viviendo. Sin embargo, aunque no lo recordara, las vivencias y convivencias de Anselmo con el terror natural y sobrenatural, en el día a día, al parecer habían logrado cierta resiliencia en él, cierto aguante a lo macabro que, si no lo inmunizaban, al menos sí que lograban impermeabilizarlo sensiblemente a toda aquella atmósfera.

- Vamos, Padre Moro. Sois más fuerte de lo que pensáis y os sobrepondréis. Ademas, ahora os necesitamos entero para salir de aquí y terminar con todo esto. Porque vamos a acabar con todo esto - lo confortó, tratando de animarlo.

Cuando el anciano pareció superar la crisis, Enterrador volvió a tomar el farol y encabezó la marcha hacia el campamento de los sectarios.

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15/06/2018, 16:47
(SA) Nigromante (Dyonisius).

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.


El nigromante (después de todo, ¿podía llamarse Dyonisius? ¿tenía derecho a ese nombre? Por unos segundos la duda le hizo guardar silencio, cortando toda posible conversación o reflexión que fuera a compartir. ¿Qué era, después de todo, un nombre? ¿cómo podía él tenerlo, reclamarlo...?) miró unos segundos, envuelto en sus pesarosas reflexiones, a Tomás Moro. No podía, por supuesto, leer la mente del sacerdote, pero lo comprendía bien. Y sin embargo...

Ante las palabras de Anselmo, asintió, pero antes de pasar a reflexiones sobre el plan de batalla, puso su mano con suavidad sobre el hombro del sabio sacerdote.

- No solo hay horror. Es cierto, lo cubre todo. Y es cierto, estamos en un lugar que juega con nuestros terrores, y que hace que nuestra mente- había estado a punto de decir alma, pero cierto prurito intelectual le hizo preferir un término menos grandilocuente- flaquee. Sin embargo, al menos dos seres cuya condena ascendía a más allá de su muerte descansan, en parte, gracias a vos. Gracias a todos. No, no sólo hay horror. Y, tal vez, podamos ser capaces de salvar a los restantes residentes del asilo. O a nosotros mismos. No voy a pedirte que tengas fe, tan sólo que recuerdas la fe que tienes. Y precisamente para salvar a los residentes, y a nosotros mismos, debemos pensar en qué hacer ahora. Anselmo opina que debemos hacer una emboscada... tal vez. Pero no podemos limitarnos a desearlo. No podemos negar que todo acto tiene sus consecuencias: simplemente desear que salgan uno a uno no va a funcionar. Mi propuesta: que aquel mejor de nosotros para fingir ser quien no es, o para disfrazarse, se vista como uno de esos sectarios, y se asome a la puerta de la entrada, pidiendo refuerzos a los sacerdotes cercanos. Esperemos que eso sea suficiente para que vayan hacia nosotros. Porque, si no, deberemos ir hacia ellos. Sencillamente, esperar no es algo que podamos hacer.

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17/06/2018, 23:04
[RIP] (CC) Buscador de la Verdad (Gabriel Alarico).

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

El Buscador se preparó el disfraz. Se puso la túnica y se comprobó rápidamente en un cristal roto. Por un fugaz instante, creyó ver un rostro que no era ni Gabriel Alarico ni el sectario que estaba intentando crear, pero pensó que debía ser su agotada mente jugándole malas pasadas. Se centró en la tarea, y entró en la sala.

-¡NOS HAN ATACADO! ¡AUXILIO!, comenzó a lanzar gritos. En los primeros instantes, el engaño parecía funcionar. No obstante, la situación se descontrola por momentos, y antes de que pudiera reaccionar o alejarse del lugar, se vio enfrentado a una turba. Sus compañeros se encontraban ahora con él, pero antes de que la cosa fuera a mayores, un hombre ataviado con una bata de doctor les dio una salida inesperada. Primero anunció  en voz alta que eran seguidores de los cultos de Zandalus, y acto seguido les susurró…

"Asentid y seguidme si queréis vivir". -

Realmente no tenían opción.

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18/06/2018, 20:45
(CC) Velkan Matacambiantes.

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

El peso del plan no recaía en sus capacidades así que Velkan estaba todo lo tranquilo y relajado que podía estar en la incómoda situación en la que se encontraba. Atento a cada paso que daban, el bárbaro avanzó junto al resto del grupo mientras confiaba en que las habilidades del detective Gabriel Alarico fueran suficientes para permitirles dividir a sus enemigos y acabar con ellos. 

Sin embargo el plan no salió como ellos tenían en la cabeza y en no mucho tiempo el grupo se encontró rodeado de posibles enemigos que no parecían muy peligrosos salvo por su abrumante superioridad númerica. El bárbaro no estaba preocupado, enseñó los dientes y agarró su hacha dispuesto a hacer trizas a cualquiera que tratara de atacarlo, cuando un hombre vestido como un doctor se acercó a ellos y trató de echarles una mano. Como él era el último en llegar a ese plano de la realidad, pensaba que su conocimiento de la situación era muy inferior al del resto. Por eso mismo optó por guardar silencio y actuar como sus compañeros. Para el combate siempre había tiempo y si tenían opción de evitarlo estaba bien. Velkan no tenía problemas en matar cambiantes, esqueletos o seres monstruosos pero siempre que podía trataba de no matar seres humanos.

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18/06/2018, 23:17
SA: Doctor Wren Elbourne.

LA PESADILLA INTERMINABLE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

El "hospital" al que os conduce el hombre de la bata blanca es una tienda grande. Es en este lugar donde el Doctor Elbourne trata a casi una docena de hombres y mujeres que resultaron heridos por el colapso del piso de arriba o por la violencia de los matones de Zandalus. La tienda se apoya contra las escaleras del norte parcialmente colapsadas que una vez condujeron hacia el ala femenina. Las escaleras, ahora sin salida, han permitido al Doctor Elbourne crear un lugar privado para él, e incluso los más fervientes seguidores de Zandalus ven la sabiduría de no hacer daño a su único sanador, por lo que le dejan bastante en paz, pese a que no le consideran suficientemente devoto del Oropimente.

El Doctor os conduce a la zona más privada de su "hospital". Una vez fuera de la vista de la multitud se presenta:

- "Soy el Doctor Wren Elbourne. Apenas tengo suministros, pero podéis descansar aquí si lo necesitáis. Bueno, si a esto se le puede llamar descansar, hace días que nadie puede dormir bien en este lugar...

Quedé atrapado aquí cuando Ulver Zandalus provocó un motín y los temblores causaron que varias partes del asilo se colapsaran poco después. Conseguí la tolerancia de Zandalus, aunque no su confianza, tratando a los heridos en este rincón reconvertido en hospital improvisado.

Llevamos dias así. He hecho lo que he podido para que los heridos estén confortables y procurando no llamar la atención hasta que surja la ocasión de escapar. Está claro que vosotros no formáis parte de este maldito culto, aunque dos de vosotros vayáis disfrazados con esos ensangrentados ropajes amarillos. Tranquilos, no pienso delataros. Estoy de vuestra parte.

Aunque tampoco es que tenga prisa por unirme a los muertos que cuelgan con bolsas de tela en la cabeza de los muros del Este, os ayudaré en lo que pueda y responderé lo mejor que pueda a vuestras preguntas. Lo que sea si ayuda a desbaratar la obra del culto." -

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19/06/2018, 16:04
(SA) Tormento de Tinieblas.

PESADILLA INTERMINABLE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

Aquel hombre había acudido a su rescate evitando un primer enfrentamiento que quizá hubiera acabado con sus mermadas fuerzas antes siquiera de poder proseguir camino. Un resistente que llevado por su vocación, ayudaba a cuantos podía, poniendo en peligro su propia vida y que se ofrecía a ayudarles en la medida de sus posibilidades.

-Eres un hombre valiente, doctor. Estas listo para dar respuestas. Mi pregunta es, ¿sabes dónde está Zandalus y cómo podríamos llegar hasta él?

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19/06/2018, 16:14
SA: Doctor Wren Elbourne.

PESADILLA INTERMINABLE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

- "No, no soy valiente. Me temo que los valientes son los que ahora adornan los muros, ahí clavados tristemente, con bolsas en la cabeza...

Sólo estudio y trato las enfermedades de la mente. Apenas llevaba una semana trabajando en Briarstone y estaba entusiasmado por haber conseguido el trabajo... Aunque ahora cuesta de creer.

Ulver Zandalus es el líder de esta gente y el responsable de todo esto. He oído que solía ser simplemente un artista tranquilo que padecía de malos sueños. No sé de qué otro modo explicarlo, pero es como si algo hubiera liberado sus malos sueños. Convenció a un puñado de pacientes de que él es alguna clase profeta y que puede coducirlos a la tierra de los sueños. Eso fue suficiente para empezar una revuelta. Poco después, esas extrañas nieblas se alzaron en el axterior, y un terremoto derrumbó buena parte del asilo. Hemos estado atrapados aquí desde entonces.

Zandalus y sus seguidores más cercanos ocupan lo que queda de la planta superior, hacia el Oeste. Allí no se permite el paso a nadie. Los matones de Zandalus montan guardia, pero es peor, esa extraña niebla se acumula allí como una serpiente en su madriguera. ¿Quién sabe lo que hacen en esa niebla? Pero todos oímos los canticos y los gritos... incluso aunque intentemos no hacerlo." -

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19/06/2018, 20:03
(CC) Velkan Matacambiantes.

PESADILLA INTERMINABLE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

El bárbaro había escuchado muy atento las palabras del doctor y éstas le ayudaron a conocer la situación en la que estaban embarcados. No le costó deducir que ese tal Ulver Zandalus era el foco principal del problema y que de alguna forma él era el responsable de las nieblas amarillas que tantos problemas les estaban causando.

Debemos ir a por él, pero si de alguna forma ha sido capaz de convocar a las nieblas, significa que es poderoso. Hay que buscar la forma de llegar hasta él sufriendo el menor desgaste posible.

Para él la idea era ya muy clara: subir, combatir a los matones y abrirse paso hacia Zandalus para acabar con el y la niebla amarilla. Si ayudaba al grupo de ese lado podría volver a reunirse con los suyos y ayudar en la investigación de la muerte del profesor Lorrimor. Habló de nuevo dirigiéndose al doctor.

—Si puedes dejarnos algún útil de sanación, nos vendría muy bien a todos como puedes imaginar.

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19/06/2018, 21:34
[RIP] (CC) Buscador de la Verdad (Gabriel Alarico).

PESADILLA INTERMINABLE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

El Buscador escuchó las palabras del Doctor. No dejaba de darle vueltas al fracaso de su disfraz, pero de nada servía lamentarse ahora. Necesitaban centrar su atención en acabar con Zandalus.

- ¿Cuántos matones son? - preguntó. -¿Hay algún modo de subir a la planta superior sin ser visto?

Trataba de recordar las ventanas que había visto.

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19/06/2018, 21:41
(SA) Nigromante (Dyonisius).

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.


Dyonisius guarda silencio mientras observa el lugar y escucha al doctor. Tras lo que el doctor afirma, y tras las intervenciones de Tormento de Tinieblas y de Velkan, se mesa la perilla, mirando a uno y otro.

- Lo primero, doctor Wren, gracias por su ayuda. Pero es verdad que la situación es desesperada. Poco importará el legítimo deseo de no morir como los muertos del este... la falta de suministros y lo que oculta la niebla nos matará a todos igualmente. Salvo que eliminemos a Ulver Zandalus. Y para eso tenemos que poder subir al piso en donde se encuentra. Por cierto, cuando salió en nuestra ayuda, habló del oropimente. ¿Quién o qué es?

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19/06/2018, 22:06
(SA) Anciano Sabio (Sebastián Moro).

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.

Sebastián Moro sumó las suyas a las palabras de agradecimiento de sus compañeros. Ulver Zandalus no andaba demasiado lejos entonces. Estaba bien protegido y era poderoso. Podía convocar una niebla de pesadilla a la que probablemente no se podía burlar. Sebastián Moro sabía que hay cosas de lugares y tiempos remotos que son capaces de percibir a través de sustancias como la niebla que envolvía el sanatorio como una araña percibe lo que roza su tela. Y una vez fuern detectados, ya no habría posibilidad de escape.

-¿Se deja ver Zandalus en algún momento? ¿Hay algún lugar al que acuda con frecuencia o que acuda solo? En definitiva ¿Algún lugar o momento en que quede expuesto?

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19/06/2018, 22:51
(SA) Enterrador (Anselmo Paddock).

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.

Todos expresaron su gratitud al Dr. Elbourne. Les había sacado indemnes de una situación muy complicada. Tras explicarles este, en privado, la situación del entorno y los acontecimientos que habían tenido lugar, los miembros del grupo le realizaron diversas preguntas y comenzaron a dar opiniones sobre qué hacer, esperando así encontrar respuestas de ayuda por parte del sanador para llevar con éxito sus futuras acciones.

- El oropimente es un tipo de azufre, Nigromante - explicó al arcano gracias a sus conocimientos de alquimia -. Su color es amarillo y de ahí, presupongo, que viene el nombre del culto y su indumentaria, en honor al dios Amarillo - especuló, aunque miró al doctor para ver si corroboraba o desmentía sus suposiciones.

- Es exactamente como tú dices, Velkan - asintió con la cabeza a las intenciones del bárbaro -. Aunque acabar con Zandalus, tal vez, solo sea el primer paso. Después tendríamos que vérnoslas con el Andrajoso, la entidad que habita en el plano de los sueños, dando muerte y transformando en monstruosidades a aquellos que se duermen en este infierno y caen en sus manos - advirtió -. Acabar con Zandalus, algo así como el profeta del Andrajoso, invocaría a este ser a nuestro plano, haciéndolo temporalmente vulnerable. O algo por el estilo.

Tras aclarar la situación, Enterrador esperó a que Elbourne contestara a las diversas preguntas de sus compañeros, no teniendo él nada más que añadir por el momento.

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20/06/2018, 12:49
(SA) Tormento de Tinieblas.

JARDÍN INTERIOR ESTE:

INVIERNO, AÑO 4711 RA.

QUINTO DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR. FECHA PROBABLE: 8 DE ABADIO.

POR LA MAÑANA.

No tenía intención de discutir acerca de lo que era el valor o la temeridad. Era precisamente esa última la que había acabado con aquellos cadáveres expuestos de forma admonitoria como castigo ejemplar de cualquiera que se atreviera a contradecir la voluntad de los nuevos déspotas que gobernaban aquel miserable y ruinoso reino de nieblas amarillas. 

Ahora sabían cómo localizar a su enemigo, solo faltaba poder sortear los peligros que dificultaban su camino.

-¿Azufre? -no sabía de sus propiedades aunque reconocía la sustancia-. Pareces conocerlo bien, Enterrador. Si esa niebla se halla en nuestro camino y cada vez mas densa, será peligroso avanzar por ella. ¿Hay alguna forma de que pudiéramos estar en ella sin vernos afectados? Algo que impida que al respirar seamos víctimas de su carácter nocivo.