Partida Rol por web

(traducción)

Sé lo que es mi hermana ahora. Mi don se ha intercambiado con el de ella, y las palabras de Erial no pueden sino ser una tapadera, así que ya no importa que sepan la media-mentira sobre Prue.

En realidad no les mentí, una parte de mi creía que lo más probable era que ella fuese la nigromante, realmente lo creí hasta que ella me acusó, aunque nunca dejé de sospechar sobre el don de Alexandra. Tan solo... omití esa parte.

No quiero faltar a mi palabra, pero tampoco quiero que mueran más inocentes innecesariamente y... obviamente tampoco quiero morir. Si traicionase ahora al Emperador, sin duda me mataría. Probablemente eso ha querido decir con la amenaza velada al hablar cobre el ataque a su hija. Ya no importa. La opción de la rendición es la que más se ajusta a la situación actual.

Es la mejor salida. Necesitamos a un grupo fuerte y cuantas más personas dignas mejor para reconstruir lo que se ha perdido con los reinados de Gala y Naivé. Hace falta un liderazgo fuerte para levantar muros de prosperidad. 

Ya no se trata del odio centenario entre casas, ni se trata de la voluntad de un solo hombre. Se trata del Reino.

Por su bien, haré lo que esté en mi mano para salir adelante. 

Me pregunto si podré encontrar a alguno de mis antiguos compañeros esta noche... o si podré saludarlos desde la distancia. 

No será un encuentro agresivo, bastará con saludar con una inclinación respetuosa. Qué demonios ¡Si lo que querría es que me vieran, no esconderme! Si todo va como espero, las cosas se solucionarán pronto. 

Y quien sabe, quizás pueda besar la mano de Ankara, si realmente ella es una de las tocadas por la luna...

Puede que fuera la inexperiencia o que fuera el temor a las represalias pero esta noche poco viste además de tus temores hacerse realidad al amanecer...