Partida Rol por web

Tras diez minutos de caminata, no encuentran ni rastro del ave herida.

"Hum... Si tu fueses un ave herida y derribada ¿En que dirección habrias huido?" pondera la muchachita, sin dejar muy claro si la pregunta es a Artemis o si es a si misma.

Pues, si yo fuera un ave herida, intentaría posarme en la copa de un árbol para no ser molestado mientras me recupero.

Por cierto, ¿No sientes frío? - pregunto mientras me froto vigorosamente los brazos.

De pronto sienten que la temperatura baja súbitamente al tiempo que el bosque queda en completo silencio.

La sensación de frío es seguida por una gran sensación de vacío en su interior, como si yoda la alegría del mundo hubiera desaparecido.

"S... si..." acierta a decir Jackie, que seguía llevando en uniforme de otra escuela, que era de un clima más cálido "Mucho más frio"

Casi por instinto, se acerca a Artemis.  Casi por instinto, intenta abrazarse a él. Buscar el apoyo, buscar algo de calor en él. Pero rápidamente cae en la cuenta de lo que puede estar pasando

"¿Pueden... Pueden ser ELLOS?"
"No ¿Verdad? Se supone que desde la Umbridge, o quien-tu-sabes, no deberian de permitirles salir de Azkaban. No deberían de estar aqui ¡No!"
 

Resuelta, toma la varita, aun sabiendo que su patronus no es perfecto. Que no es corporeo.

"E... E... especto... especto patro..."
"Patronus!"

De pronto un dementor apareció ante nosotros y Jackie fue la primera en reaccionar convocando el encantamiento Patronus para mantenrlo a distancia.

Maldición esas cosas no deberían estar aquí. - exclamo mientras echo mano de mi varita y la apunto con firmeza hacia el dementor. - ¡Expecto Patronus!

De la punta de mi varita surgió un halcón plateado que atacó con ferocidad a aquél despreciable ser.

Será mejor que nos larguemos de aquí y pronto.

El inmenso demenror golpeó con rabia la bruma plateada que emergía de la varita de Jackie, mientras el patronus de Artemis impactaba contra él enardeciéndolo aún más.

De pronto la criatura lanzó un enorme alarido que hizo pedazos ambos patronus.

Niñatos tontos ¿Se atreven a encararme a mi? ¡A uno de los tres príncipes del odio! Iba a darles una muerte rápida e indolora, pero ahora los haré pagar por su atrevimiento. - dice la criatura con una voz gutural mientras avanza hacia ustedes.

"Artemis!"

"Tu lo encadenas, y yo usaré el poder del sol... REGNUM SOLARIS!"

El Patronus completo la ayuda a enfocarse, a mantener a raya el terror del Rey del Tormento y el principe del odio.

Pero Jackie no tiene experiencia en duelos, y como que no va a acertar :(

De pronto, mi varita empieza a brillar dejando a la vista diversas runas.

Es un demnio. - susurro mientras sostengo con firmeza la varita. - Jackie no uses el Regnum Solaris como ataque, úsalo para mantenerlo alejado. - digo al tiempo que apunto mi varita contra el dementor.

¡Erendil!

Los intentos de ambos jóvenes por inmovilizar al dementor terminaron en un gran desastre, pues la criatura evadió sin dificultad los conjuros lanzados en su contra, para luego lanzars en un vuelo rasante hacia los brujos.

Las garras del espectro pasan a través de la piel de los jóvenes arrancando un trozo de su alma, haciéndolos sobrecogerse de miedo, mientras un terrible escalofrío recorre sus columnas y el maligno ser ríe maníacamente.

Las garras atraviesan la blusa de Jackie como si se tratase de un escalofrio. Como si nada estuviese ahi.

Y un gélido terror hace que se estremezca. Un daño en su propia alma. Algo que la hace gritar de terror y agonía a la vez ¿Es esto lo que se hizo Voldemort para crear sus Horrocruxes? ¿Esto es el autentico dolor del alma?

Pero Artemis está aqui, y está en peligro. Ella debe de defenderlo como sea

Y como le ha instruido, crea unos anillos de llama como proteccion para ambos

"REGNUM SOLARIS!!!"

Cuando los círculos de fuego sagrado aparecieron a nuestro alrededor, una sonrisa se dibujo en mi rostro, pues sabía que eso bastaría para mantener alejado al dementor de nosotros.

Toma esto criatura. ¡Exordio! - grito mientras disparo un proyectil de fuego sagrado.

Sin embargo, el golpe del dementor dejó sendas secuelas en mi, pues mi mano no paraba de temblar, aunque poco a poco la sensación de frío iba menguando.

Al ver la barrera de fuego el imponenrte dementor optó por guardar distancia, al tiempo que lanzaba un rugido gutural.

Su barrera no podrá protegerlos por siempre, les arrancaré sus almas de a pedazos.

La chica de Ilvermorny continua dando vueltas sobre si misma, y reforzando su conjuro, su Regnum Solaris.

Entonces es cuando ve que Artemis está flaqueando
"Animo, amigo mio. Este mequetrefe no podrá hacerte daño mientras esté a tu lado"

"Porque yo te protegeré. Por ti y por todos, por este sitio lleno de magia, por esta vida"

"No dejaré que este mequetrefe te haga daño. REGNUM SOLARIS"

Mientras Jackie seguía creando aros de fuego a nuestro alrededor, yo sentía que mi cabeza se despejaba y finalmente pude concentrarme lo suficiente como para poder atinarle al dementor.

¡Ya te tengo engendro! - grito mientras afino la puntería. - ¡Iridium! 

De pronto un relámpago plateado emerge de mi varita impactando de lleno en el cuerpo del dementor, que cae al suelo rugiendo de dolor mientras se despoja de su capucha.

La furia y rabia de la criatura ante la maniobra del Gryffindor era evidente, pues el chico lo había derribado, sin embargo, la criatura aun estaba lejos de derrotada.

Tras incorporarse, el dementor se quita la capucha y ruge nuevamente, su rugido les congela la sangre.

Ahora sus almas serán mias. - anuncia la criatura, para luego abrir su boca cadavérica y empezar a succionar sus almas.

Jackie, voy a usar el Regnum Solaris a mi señal has explotar todos tus anillos de fuego, sólo debes concentrarte y con eso debería bastar. - digo mientras levanto mi varita.

Regnum solaris. - digo con la voz entrecortada al tiempo que otros tres aros de fuego se suman a los nueve ya conjurados por Jackie.

"¡Buena idea!"

Ella crea una nueva remesa de anillos, unos que se unan a los anteriores ¡Va a ser la auténtica bomba! Y como en verdad se preocupa porque puedan acabar ligeramente abrasados, Jackie no deja de estar preparada para esto.

Del bolsillo de su faldita, saca la redoma de pocion. La ultima que habían aprendido en clase ¡Poción de protección contra el fuego! Le da un trago y tras ajustarse la careta, se lo pasa a Artemis. Justo despues conjura aun mas anillos de llama sagrada

El dementor continúa con su impía labor mientras ustedes sienten un terrible dolor propio de quien le arrebatan la vida a la fuerza, el frío os atenaza.

Su corazón se ralentiza, sus manos se entumecen y sus piernas empiezan a a fallar.

Sin embargo, esa sensación no dura mucho, pues Artemis, reuniendo toda su fuerza de voluntad, levanta su varita al cielo y grita: - Ahora Jackie.

Acto seguido, una tremenda explosión de fuego sagrado sacude el bosque, seguido por un rugido de terror del demonio que es consumido por las llamas azules del fuego sagrado quedando reducido a cenizas.

Tras la muerte del dementor, el terrible frío que atenazaba a los jóvenes cesó de inmediato, pero el terrible daño en el alma de ambos jóvenes ya estaba hecho.

Artemis y Jackie sienten como sus fuerzas empiezan a abandonarlos, por lo que se ponen en camino hacia el castillo al borde de la extenuación.

La detonación es extrema ¡EXTREMA!

Pero ha cumplido su trabajo. Y lo que es más

"Artemis... ¿Hemos... hemos conseguido realmente destruir a un Demonio dementor tan poderoso?"
Es increible. El hecho de que la magia divina que nos ha enseñado sea capaz de hacer esto es increible.
"Cuando lleguemos al castillo, cuando despertemos... " dice entre cansados jadeos tengo que decirte algo... algo importante" los jadeos pierden fuerza

"Alguien quiere arrebatarte... arrebatarte este poder. Y está manipulando gente para ello" la piel en sus hombros empieza a palidecer, y el aliento se entrecorta.