Partida Rol por web

Decidí ayudar a mi amigo, pues así llegaríamos mas lejos.

- Defodio-conjuré.

Habíamos entrado en la batalla, había intentado resistir hasta el último momento para meterme pero no había más remedio. Irina y Dean ya habían atacado a Anne y Aelia, pero me interesaba que Ryan siguiera atacando al otro equipo, si les hace perder tiempo eso que ganaremos.
Preparé mi varita y apunté a la ropa de Anne:
-REDUCCIO!
Me sentía confiado y vi que Aelia estaba distraída con Irina, así que también fuí a por ella:
-Lacarnum Inflamarae!

Sin ni siquiera mirar atrás, centré mi ataque en Dean, atacándolo con un hechizo de ráfaga. Lo hice por tres motivos: El primero, porque Dean me parecía un adversario bastante más peligroso que Irina; el segundo, porque estaba ignorando a la metamorfomaga a propósito, pues parecía que tenía algo contra mí y aquello no me sentaba bien, por lo que iba a corresponder a sus gestos; el tercero, y más importante, porque Ryan y Anne habían atacado al grupo que más cerca de la puerta estaba y si no atacábamos también al grupo que nos seguía podíamos salir mal parados.

El ataque de Anne golpea a Ellen quien, recuperandose del salto desde el agujero, no tiene tiempo a protegerse. La chica cae hacia atrás y casi al instante se gira hacia un lado y empieza a vomitar babosas. Sus compañeros se detienen y se giran para ayudar a su compañera en lugar de seguir con la carrera.

La ropa de Anne* se empieza a encoger al instante y es realmente molesto. Si no detiene el hechizo o se deshace de la ropa probablemente no podrá respirar. Además, empieza a cortársele la circulación de las extremidades.

El protego de Aelia ha sido tan increíble que una potente luz le cubre mientras realiza su siguiente ataque. Es también tan fuerte que el ataque de Donnie se disipa.

La batalla sigue. Los espectadores ven los carteles con los nombres moverse por el mapa, algunos haciendo movimientos extraños: sin duda siendo afectados por hechizos. Algunos nombres están extremadamente cerca de las puertas, dónde accederán al campo, y en su centro encontrarán la meta.

Severus corre junto a vosotros y al parecer nadie al otro lado consigue hacer nada al fuego, ya que sigue tal y cómo Zane quiere que esté. Zane que ha esperado en la puerta ya ha visto antes que sus compañeros que en el centro del campo hay un pedestal con al parecer una copa encima, la cuál Saverus y Debbie ven al alcanzarle. 

- Déjalo Zane. - grita Severus mientras corre - No puedes correr y controlarlo.

Al llegar al linde, cuándo Debbie y el lo cruzan y están ya en visión del centro y la copa, Severus apunta con la varita**

Estáis bajo tierra, y avanzáis a buen ritmo. Por un momento notáis un calor demasiado intenso y teméis que estáis bajo el fuego y este traspasará... Pero tras el hechizo de Mia podéis avanzar más y dejáis atrás el calor. No sabéis que ocurre afuera, ni tras vosotros ni delante.

- No salgamos aún, sigamos un poco más bajo tierra para intentar evitar a Zane. - dice Diane mientras corréis.

Dharma y su grupo corren e intentan parar a todo el mundo. Dharma intenta desarmar a Ryan, quien lo evita justito. Sean intenta lo mismo con Donnie y el tercero en discordia ataca al grupo de Ellen, que aunque hayan parado, siguen armados, y se protegen a tiempo. 

Mientras tanto, en el equipo de Ellen intentan parar la vomitera, pero no saben como, así que desesperados y tras evitar ser desarmados, deciden abandonar. No van a poner la seguridad de una compañera en peligro por la competición. Ya remontarían. Lanzan unas chispas al cielo mientras dicen que se retiran y casi al instante una burbuja los rodea y son sacados de la arena.

Por fin el combate había empezado, antes o después teníamos que entrar y quería conocer como se defendía nuestro grupo antes estas situaciones. Si no eramos rivales, más vale abandonar pronto y no cuando aumente la tensión. Confiaba en Irina y en el golpe de suerte de Donnie, al que creía mejor mago de lo que el resto creía.

Cuando al lanzar mi hechizo ante Anne, no ocurre nada, me desespero un poco pero más aún cuando el protego de Aelia no me deja ver, aunque al escuchar su hechizo inmediatamente grito:

Protego Horribilis

Por fin habíamos conseguido traspasar la puerta y, ante nosotros, se veía un pedestal con una copa. Ese sin lugar a dudas sería el punto al que tendríamos que llegar para ganar la prueba.

- Zane, será mejor que cierres tú la puerta y yo haré un hechizo para protegernos a nosotros en esta zona. Venga... Lo podemos conseguir.

Moví mi varita murmurando el hechizo para abarcar toda la zona que quería que nos protegiera de los hechizos del resto de participantes que llegaran a las puertas.

Dean sale disparado varios metros hacia atrás dando vueltas. 

Subestimar a un oponente es un gran error, un error que acabo de cometer. Me distraje unos segundos observando mis resultados con Ellen y bastaron para que Donnie me fastidiara.

Con dificultad, consigo levantar un poco mi brazo para apuntarme la ropa con la varita. Con apenas un susurro, pronuncio la mágica palabra para liberarme de esta prisión de tela. 

-Engorgio.

Uffff

Tras un corto suspiro de alivio, apunto a Donnie sin dudar.

-Conjuntivitis.

Mientras Severus hacía el incendio yo apagué el fuego demoníaco y cerré la puerta con un fermaportus muy potente. No había tiempo que perder y por eso, cuando Debbie había terminado de hacer el hechizo protector la cogí de la muñeca para correr hacia la copa que había en el centro, la cual parecía ser nuestro objetivo.

A pesar de que llevábamos bastante ventaja, y aunque a los demás aún les quedaría abrir la puerta a la que primero tendrían que llegar, no quería perder ni un sólo segundo.

Me parecen bien las palabras de Diane. De echo, no es en absoluto mala idea. Por lo que hago dos nuevos conjuros excavadores. Uno recto para alrgarlo más, el otro ya inclinado hacia arriba para salir. A fin de cuentas tenemos que saber a donde vamos.

-Mia, si te queda humo sería ideal para cubrir la salida. Sabrán que salimos pero no exactamente por donde.

Sino, que improvise. Se le da bien.

Sigo corriendo hacia la puerta, pero entonces veo que mis compañeros no lo hacen y están combatiendo, así que me pongo a su lado y apunto mi varita hacia el suelo, justo por donde nuestro grupo se separa del de la rubia tonta. 

- Deprimo. 

Ahora me giro y apunto detrás de nosotros, al suelo que va desde donde estamos hacia la puerta.

- Espongificación.

Les susurro en el oído a mis compañeros algo y después voy saltando en dirección a la puerta. 

- Ahora el suelo rebota y podemos ir hacia la puerta brincando... Yo de ti me protegería e iría brincando hacia la puerta.- Le digo. - Aunque siempre puedes impedir que ellas nos ataquen de alguna manera... - Entonces caigo de golpe en Dean. No me había fijado que había sido lanzado por los aires y me maldigo por no haberle ayudado a tiempo.