Partida Rol por web

Urik quedo sorprendido ante la visión de aquel ser. Pese a que su cuerpo blanquecino parecia ser humano, su rotro dejaba claro que era un enjendro. Así Urik se lanzo contra ella sin ofrecer cuartel.

Ashlyn grita al verse atacada por las criaturas acuáticas.

-¡Criaturas abominables!- a pesar del peligro se toma la molestia de resaltar que ella tenía razón.- Parlamentar... ¡ja!

Deja caer la ballesta, inútil ante la criatura que la tiene sujeta, y trata de desenvainar su espada y atacar con ella.

Urik se lanzó contra esa criatura cuando vio que sus compañeros eran atacados, lanzando dos estocadas sobre ella.

Sin moverme de mi lugar lanzo dos tajos contra la anguila más cercana tratando de deshacerme de ella. 

Envy se sorprende al ver salir del agua a todas esas anguilas simultáneamente. Es una suerte que en ella no se hayan fijado.

En el estremecimiento de los gritos de sorpresa y dolor que soltaban sus compañeros, su pelaje se erizo y un gruñido empezó a emerger de sus fauces cerradas que mostraban sus dientes.

Sin perder tiempo salió disparada hacia la miembro de grupo más separada y en mas desventaja que tenía cerca, lanzándose con sus fauces listas para desgarrar a esas serpientes del infierno.

Sorprendido por la presencia de esas inmundas criaturas, me doy cuenta de que efectívamente el parlamento es una idea inútil y alzo las manos a Pelor para conjurar en mi defensa.

-¡Por Pelor! - Cuando lanzo ese grito, una ola de poder del propio plano de Celestia sale de mi.

Alese lo primero que hizo fue moverse a tierra firme, detrás de Thokk, y allí lanzó una ola de energía curativa.

- Thokk, cuando acabes con tu bicho, a ver si puedes sacarme este 

Cómo no... dije mientras dejaba caer el arco, esperando poder recuperarlo, y desenfundando con velocidad el espadón. Lo hice girar varias veces por encima de mi cabeza antes de golpear con fuerza sobre esas criaturas.

Irina notó como una horrible anguila se aferraba a ella. Desenfundó con toda la rapidez que pudo el espadón y trató de atacar a la anguila.

Fisteus reacciona rápidamente contra la anguila que se ha enganchado a su compañera Ashlyn, pero entre puño y puño no solo la hiere a ella sino que también a quien trataba de defender. Wolkot se encargaba de su lucha personal y corte tras corte lograba hacer sangrar a la anguila que había decidido aferrarse a él. Quenya y Ashlyn desenfundaron sus armas, pero a pesar de que sus enemigas estaban desprevenidas no fueron capaces de encajarles ni un miserable golpe.

Irina hizo un juego de muñecas también para encajar un ligero corte en otra de las repugnantes criaturas contra las que se estaban enfrentando.

Alese trató de escapar de allí y huir de las anguilas, pero una de ellas la tenía enganchada tan fuerte que le resultó imposible moverse. Afortunadamente ninguna de las demás estaba atenta, por lo que pudo lanzar su curación a todos sus compañeros, haciéndoles que las heridas causadas por sus enemigas lentamente se fueran cerrando.

Mientras tanto, la Dama Ahogada salía del extraño círculo donde parecía estar para acercarse hacia vosotros. Ahora estabais rodeados por las anguilas, lo que le garantizaba una seria ventaja a la desagradable mujer.

Envy aprovechó también para dirigirse hacia una de las anguilas que estaban aferrando a Irina, y aprovechando que ésta ya le había asestado un golpe, trató de aprovecharse de la situación, aunque no tuvo la suerte que esperaba.

Haiayel, gravemente herido decide invocar el poder de su Dios Pelor para pedirle que sus heridas se cerraran de golpe y así fue, en cambio, el poder procedente del mísmisimo plano de Celestia no sirvió de nada, por lo que las anguilas seguían luchando sin ningún tipo de problema.

La anguila que aún no había logrado engancharse a Igor, esta vez sí lo logró y de un fuerte mordisco comenzó a succionar su energía. Lo mismo hicieron las demás, que lentamente iban tomando la sangre de cada uno de vosotros y lentamente vuestro rostro se iba volviendo más y más pálido. ¡Y encima, para colmo, las heridas que habían logrado hacer a dos de las anguilas parecían cerrarse lentamente...

A pesar de la situación, los aventureros no desistieron, Thokk trató de partir a una de ellas a la mitad, aunque no tuvo mucha suerte, Leo sí y logró encajar un fuerte corte con su espada. Don Urik, Ocaso e Igor, estaban tan asustados por la situación que estaban contemplando que no fueron capaces de reaccionar.

Esto no funcionaba, estas serpientes eran muy resbaladisas para sus colmillos. Y Envy se daba cuenta con lo que abandonando el intento de morderla, hizo un movimiento espasmodico en su columna que la llevo a terminar posandose en dos patas, mientras su forma cambiaba a la de un hibrido entre una mujer y un lobo al tiempo.

-THOKK!! Langzaa mirr cimigtarrga!!- (lanza mi cimitarra) Gruño-grito ella, sabiendo que con que la lanzara al aire, ella podria invocarla a su mano.

-No desfallezcáis, compañeros.-Grito lanzando un nuevo golpe contra mi anguila.-El fin está cerca, podemos vencer si nos lo proponemos. Los dioses del bien nos acompañan y es cuanto necesitamos.

Ni siquiera tengo tiempo de arrepentirme al golpear a mi compañera porque el combate continúa de forma salvaje y no es momento para autoflagelarse .Lo siento .es lo único que me da tiempo a decir entre golpe y golpe contarla resbaladiza anguila.

Thokk escuchó como la chica-lobo le pedía que lanzase la cimitarra así que soltó un brazo del hacha, cogió la cimitarra que llevaba a la espalda y la lanzó por los aires hacia el lugar de donde provenía la voz. Después de lanzarla sin preocuparse mucho de donde iba a caer puescreía  recordar algo de que la espada iría donde estuviese Envy lanzó un ataque contra la criatura que tenía aferrada la cintura.

Tras conseguir reaccionar, don Urik se aproximó a la anguila más cercana y atacó con su espada argéntea.

- ¡¡Acabemos con ellos cuanto antes!!- gritó Urik a sus compañeros.

Wolkot volvió a enarbolar su arma contra aquella asquerosa criatura. Poco a poco notaba como las fuerzas abandonaban su cuerpo

Alese sabía que no tenía ninguna oportunidad con su minúscula daga contra aquellos engendros cuando los fuertes golpes de los guerreros no eran capaces de hacerles daño. No había mucho que pudiese hacer por sí misma, tendría que confiar en que algún otro la ayudase. Así que miró alrededor y le pareció que Wolkot era el más dañado de los que tenía cerca, así que trató de ayudarle.

Tenía el conjuro adecuado, pero también sabía que nada podría hacer para ayudarlos a todos. Los guerreros en este momento tenían prioridad.

Seguí combatiendo mientras observaba como esa bruja se acercaba. Se pensaría que éramos tontos y no nos dábamos cuenta.

Se va a enterar... pensé mientras golpeaba a la anguila.