Partida Rol por web

Interrumpir un momento así merecía la más cruenta de las represalias, siendo sangre de su sangre aquella drow conocería el dolor que sólo se reservaba a traidores y a la familia más próxima. Anazareth recogió escudo y lanza del suelo para perseguir a la carrera a Viltur, sus ojos inyectados en sangre anunciaban un terrorífico final si el tributo del distrito 6 no les mataba cuanto antes.

- ¡Vestiré tu rostro! ¡Alimentaré a mi lobo con tus entrañas en vida! ¡Suplicarás la muerte! -aullaba en un idioma incomprensible que sonaba a los cánticos dementes de un aquelarre*.

El drow camina hacia vosotros, se pone a la defensiva cuando esta a 35 pies de Villtur que ha dejado atrás a Anazareth, por mucho que corra la drow sus zancadas no son tan rápidas como las del lobo

Anazareth continuó a la carrera pues sólo avanzando sin parar podía llegar hasta donde Viltur y el drow se encontraban. Ver que el muy insensato se acercaba hacia ellos en lugar de huir le hizo feliz, no quería que escapase quien se había atrevido a interrumpir lo que para ella era un momento de triunfo.

    Quien les amenazaba había decidido avanzar hasta su encuentro, el lobo no dejaría que tal acción quedase sin castigo, su enemigo le había atacado y lo había herido, ahora era su turno de devolverle el favor. En una exhalación recorto la poca distancia que los separaba con sus fauces abiertas y lanzó una poderosa dentellada de la que difícilmente podría escapar aprovechándose del impulso que su salto le había concedido. Combatiría una vez más, si debía de morir en aquel lugar olvidado, que así fuera, pero no caería sin luchar por los suyos.

Villtur corre hacia la drow, de un fuerte mordisco en el cuello de la drow acaba con ella, no era ninguna amenaza para alguien como él. Delante vuestra encontráis la salida de ese nivel

Para cuando Anazareth llegó hasta donde se encontraba la drow la vida ya se había extinguido de su cuerpo, lo cual le enfureció instintivamente; sin embargo el tornar la mirada hacia Viltur suavizó aquel sentimiento tornándolo en otro muy distinto. Convencida de la lealtad del lobo su mano fue a posarse sobre su lomo para hacerle un mimo, digna recompensa por tanto que había hecho y oportunidad para comprobar el pelaje de su bestia.

- Muertos en vida, es lo que son los del Distrito 6, -comentó antes de bajar a registrar el cuerpo- criaturas débiles con gusto por los estupefacientes y alucinógenos -comprobó interior de ropa y vació todo bolsillo, pues no sólo quería las cosas útiles sino también las drogas por las que eran famosos-. Dime una cosa, Viltur, ¿deseas salir ya o buscamos a ver si encontramos a Lidar y le damos muerte? El favor de los patrocinadores puede hacer de nuestro secuestro en la cosecha una estancia aceptable; indícame como creas que sabré entenderte.

Anazareth sonreía, segura de que nadie podría con ellos. Sabiendo además que Viltur no disfrutaba de muerte y sangre como ella algo le empujó a dejar su escudo cóncavo en el suelo, a modo de palangana, para luego hacer brotar agua cristalina del aire hasta que regó el suelo.

- Permíteme que te limpie y bebamos, que has de estar sediento -ronroneó, feliz de limpiarle las manchas de sangre de las víctimas de su Alpha.

Anazareth comienza a registrar el cuerpo expectante, esperando encontrar veneno o drogas, pero su decepción se maximiza al darse cuenta que aparte de 5 monedas de oro solo lleva encima un estoque y la ballesta de mano que no ha llegado a usar, en el carcaj hay 10 virotes para la ballesta

    El lobo relajó las mandíbulas haciendo que el cuerpo inerte de la drow golpeara contra el suelo con un sonido seco. La sangre inundó su garganta y para su sorpresa, aquel sentimiento le resulto en cierta forma placentero ¿Era aquella reacción producida por la piel que vestía o en verdad comenzaba a querer decir algo más? Sabía que inicialmente había corrido de un modo tan desesperado para evitar que los hiriesen de nuevo, para evitar morir allí presa del olvido, un pensamiento de lo más lógico, como lo habría hecho cualquiera de los animales con los que tanto tiempo había convivido en el bosque y, sin embargo ¿Por qué se sentía así de culpable?

    Lo sabía, en el fondo lo sabía desde un instante antes del salto... Sentir la presión en el lomo lo hizo salir de su ensimismamiento de golpe y por muy poco no estuvo a punto de clavar sus colmillos en el antebrazo de Anazareth de no haber recobrado el control en el último instante. Escuchó sus palabras y levantó el hocico vacilante, salir les facilitaba el llegar antes a la siguiente fase pero al final la prueba solo la ganaría el último hombre en pie, por lo tanto quizás lo mejor fuese eliminar a aquellos que podrían amenazarlos más adelante mientras tuviesen ventaja sobre ellos. El lobo giró sobre sus patas y cabeceó en dirección opuesta a la salida antes de inclinarse a beber del agua estancada tiñéndola al momento de un vivo color carmesí ¿Sentiría cuando ella lo traicionase?

Las criaturas se arrastran hasta el interior, solo me queda una oportunidad, así que reúno de muevo fuerzas y golpeo con el hombro la puerta....

Golpeas la puerta con fuerza, con tanta que esperas ver como cae pero no sucede, se ha movido un poco pero no lo suficiente y la plaga de araña está a 10 pies de ti, preparada para acabar contigo

- ¿Crees que alguna de estas será el arma buscasangre? - enumeró las que tenían mientras contaba con los dedos de una mano- Una lanza, un mangual con bola extraño, un martillo de guerra, un estoque y esta ballesta de mano.

Satisfecha con la respuesta del lobo la drow se sanó de sus heridas antes de comprobar las armas con detenimiento, sopesándolas en sus manos y examinándolas con cuidado.

- Cargando con tantas espero alguna lo sea- dijo mientras se echaba el carcaj al cinto, la lanza a la espalda, el estoque al cinturón y cargó la ballesta-, espero haya algún objeto mágico para lobos.

La idea le hizo sonreír y avanzó hasta la zona que no habían visto todavía, lista para disparar al primero que se les cruzase, en especial a Lidar. La caza continuaba.

Viendo que esa puerta le resistia cualquier intento, lidar decidió que iba a probar suerte con otra. En un movimiento inesperado, giro sobre sus propios pies y emprendió una veloz carrera alejandose de la plaga

Consigues esquivar a la plaga, vas hacia la otra puerta pero está cerrada, tienes algo de tiempo para intentar echarla abajo antes de que la plaga llegue a ti

Lo primero que intenta lidar cuando llega a la habitación es aprovechar el impulso para tratar de atravesar la puerta embistiendola con el hombro. La puerta resiste el empuje, pero la plaga viene justo detrás, parece que la oye arrastrarse hacia el, asi que la golpea una y otra vez, antes de desplazarse hacia la cortina para esquivar la plaga

Anazareth curó sus heridas, aunque en ese momento se fijó en que Villtur tenía algunas en su lomo y patas, nada demasiado grave, pero si se lo veía algo adolorido.

Avanzáis hacia la sala más próxima, una de ellas al sur, cerca de la puerta por la que habéis entrado y la otra al este. De repente, de la nada, una plaga de ratas cae encima de Anazareth, la drow siente como las heridas recientemente curadas vuelven a abrirse, siente los mordiscos en su piel

Los incisivos de aquella plaga perforando su cuerpo hicieron gritar de rabia a Anazareth, curada de espanto para estos sustos pero frustrada sobremanera por tener que aguantar aquella agonía de trampas. Con los dientes apretados se zafó lo mejor que pudo y se preparó para acabar con las alimañas.

- Miserables criaturas sin conciencia de ser, vuestros insignificantes quejidos poco me servirán de consuelo -se lamentó con los dientes apretados por la rabia.

En el último golpe contra la puerta te haces daño en el hombro, pero la puerta sigue sin moverse ni un ápice. Al ver que la plaga se acerca corres hacia la otra puerta

    Villtur arrugó el hocico al ponerse en alerta ante el repentino ataque, en esta ocasión fue la elfa la primera en sufrirlo cuando un enjambre de alimañas cayó de manera precipitada sobre ella chillando y atacando sin sentido alguno, atacar en esa forma entrañaba el riesgo de herir a su compañera por lo que debía esperar ya que parecía que ya había comenzado a liberarse de la mayor parte de ellas. 

Apareces en una mazmorra que ya conoces, has vuelto atrás en vez de avanzar. Delante tuya ves una nota:

Mata a Lidar. Sudrak

Pero apenas miras donde estás ves que no estás solo, en esa pequeña habitación donde hay dos puertas y la del norte ves que está algo rota aunque no del todo, en el centro de la habitación hay un gnomo vestido con una cota de bandas y un broquel, en su mano lleva un pico pesado y puedes ver que en el cinto le cuelga una pequeña bolsa de monedas