Partida Rol por web

Emplea su turno en recuperar su cuchillo del moribundo Bandido 2.

Orden:

Bandido 7  Revolcándose en el suelo

Aitor (declara qué haces)

Iñigo(declara qué haces)

Bandido 4 Ataca y Ataca

Bandido 8 Ataca y Ataca

Bandido 9  Costillas rotas, no puede respirar

Bandido 1 desarmado

Beltrán desarmado

Alonso (declara qué haces)

Nada, nada, sin cuartel. Ataco y ataco.

¡¡Nooo!! -grita la única esperanza de Alonso en batalla. ¿Godoy muerto...? ¡Muerto!

Ataco y Ataco

TURNO 4

Bandido 7

Como si de alguna manera fuese consciente de la gravedad en la que se encuentran los bandidos, el hombre quita una mano de su estómago y la apoya en el suelo, intentando levantarse, hace fuerza y se coloca de rodillas en el suelo , pero el dolor es demasiado y al bandido no le queda otra que dejarse caer y seguir revolcándose en el suelo.

Aitor avanza despacio intentando no resbalar en los charcos de sangre que se están formando, al bandido que se le aparece delante le recibe con un débil tajo en el brazo derecho, y con el movimiento de retorno golpea también sin fuerza a otro bandido en el brazo izquierdo.

Como si fuéramos un monstruo de cuatro brazos sigo los movimientos de Aitor golpeando con mi espada más abajo que él, alcanzando a ambos rufianes en el torso y provocando sendos tajos, profundos y sangrantes.

El golpe de Aitor al Bandido 4 le deja el brazo derecho herido, en su segundo golpe alcanza al Bandido 8 también en el brazo derecho, pero éste bandido lleva gambesón y la armadura detiene el golpe.

Iñigo da un tajo perfecto al Bandido 4, a la altura de la baja espalda, el arma casi le parte en dos....el Bandido 4 está muerto antes de caer al suelo. En su segundo golpe, estrella su espada contra el pecho del Bandido 8 hundiendo el acero en el pecho y dejándole malherido, a pesar de que el Bandido 8 calce Gambesón.

Bandido 8

Con un agujero en el gambesón y el pecho abierto ataca a Iñigo enrrabietado con su hacha en su primer ataque y en su segundo ataca  a Aitor. El hombre golpe a a Iñigo en en el abdomen hundiendo su espada hasta el fondo, eso es todo lo que Iñigo puede soportar, y su cuerpo cae fláccido al suelo. Después golpea a Aitor en el brazo izquierdo, pero su armadura detiene el golpe.

Bandido 9

Sigue sin poder respirar y no atina a hacer nada, por lo que se queda quieto e intentará huir en el siguiente turno.

Bandido 1

Se acerca al cuerpo inconsciente del Bandido 3 a recoger su hacha que yace clavada en el brazo de su compañero como si de un tronco se tratase. Vuelve a ponerse en posición para el siguiente turno.

Una vez demostrada mi destreza con las armas, decido retirarme del combate, esperando ser útil en algún otro sitio, a ser posible muy lejos de ahí, aunque no pierdo la esperanza y miro el desenlace del combate.

Acto seguido, en un desesperado intento de venganza, cogí la espada de mi fiel siervo, que se hallaba tumbada en el suelo y procedí a atacar a uno de los bribones (bandido 1). Sin embargo, no era yo precisamente ducho en tales cuestiones de sangre...