Partida Rol por web

Las palabras de Bofrund le hicieron ver la armadura con otros ojos. Casi estuvo por ofrecérsela a Karian, pero esa cualidad hacía que se convirtiera en un botín digno de un cazador de gigantes. Después de todo, él no había hecho nada, y parecía que la gracia de Tempus no había caído sobre él. No sería digno darle semejante botín, más acorde a un gran guerrero. Además, si comenzaba a usar esa gran hoja, tendría que protegerse con algo más que cuero, ya que su escudo quedaría colgando de su espalda hasta que se enfrentara a arqueros o ballesteros.

Luego de guardarla en un saco de su mochila, la probaría cuando pudieran descansar, se colgó la vaina del espadón a la espalda, y se acercó a la túnica que brillaba cerca de allí. La levantó, y aunque tenía algunos restos y manchas, se la acercó a Dalla.

-Toma... te la has ganado, tu padre estaría orgulloso seguramente- le ofreció casi solemnemente, intuyendo que una vestidura como aquella le sería útil.

Luego se detuvo junto a ella, con la imponencia que confiere la victoria, esperando la respuesta del Deva.

Mientras ascendían a la planta superior, el Deva al ver la insistencia de la bella maga de túnica blanca, exclamo con un cabeceo de resignación, como si lo que dijera le atormentará- ¡Estamos en los dominios de un ser antiguo! ¡Un ser de mucho poder, de cuando el Imperio Netherino estaba en su apogeo! Un "Liche".

El mismo me convoco a través de una poderosa magia a este plano y me condeno a sufrir sus torturas y ser parte de sus macabros experimentos. -señalando los muñones en su espalda como recordatorio de la perdida de sus alas. – Inmovilizado por esa poderosa esfera que portas y retenido en el círculo de convocación poco podía hacer hasta que llegasteis vosotros. Arriba en las plantas superiores hay un artilugio que se alimentaba de mi poder, lo percibo. Debemos destruirlo y frustrar los planes del Liche y luego huir muy lejos de aquí.

El semblante den el rostro de la maga cambió a blanco ceniciento.

-¿Un... liche? -dijo con voz estrangulada.

Dalla había leido sobre esas aberraciones. Aquello era aún más peligroso de lo que había pensado. Se detuvo donde estaba y, sin ningún decoro, se quitó las ropas que llevaba y se puso la túnica.  

Cualquier ayuda será poca - pensó.

-Xarak tiene razón. Cuanto antes escapemos, mejor pero antes hay que destruir ese artilugio, quizas hasta sea su filacteria y podamos acabar con él!

Kroner caminaba junto a Dalla, atento a lo que pudiera salir a su encuentro. Su mano izquierda llevaba el arco y dos flechas, mientras que la derecha estaba apenas relajada sobre la cuerda del arco largo.

Pero las palabras de Xarak Tor llegaron a sus oídos. Y cualquier en la Marca Argéntea había escuchado alguna vez leyendas sobre magos poderosos que se habían convertido en muertos vivientes, pero que mantenían sus poderes para acrecentarlos con el tiempo.

-No sé qué será esa filacteria, pero si hay que destruirla para eliminar al Nigromante, entonces hagámoslo ya y larguémonos- dijo impaciente -Guíanos hacia allí-

Que el tiempo no estuviera de su lado no le gustaba. Saber que en cualquier momento podía regresar el dueño de una torre repleta de zombies no era algo tranquilizador en lo más mínimo, mucho menos sabiendo que había capturado a un ser celestial del poder de Xarak Tor.

Las palabras del Deva y de la maga, intranquilizaron al vigía. Elden había escuchado una que otra cosa sobre aquella macabra criatura. Ni el ejército entero de Arguna podría hacerle frente a algo así.

Cuando Dalla se dispuso a ponerse la túnica, Elden hizo lo mismo con las botas que habían revelado magia gracias al ser celestial.

Al ponerse Dalla la túnica sintió un cosquilleo, como si fuera más liviana, sin duda era mágica- pensó la maga.

Por su parte Elden nada más ponerse las botas de piel sintió una sensación de calidez. El frio ya no le molestaba o parecía haber desaparecido. Al comenzar a subir los escalones se dio cuenta que no le costaba esfuerzo.

Gonkar con su bonita lanza se ofreció a proteger al ser celestial.

Kroner con su arco tenso iba junto al Deva preparado para enfrentarse al peligro

Bofrund pertrechado con la armadura de adamantina y la espada larga siguió al resto del grupo, cerrando junto con Karian la retaguardia.

Comenzaron a ascender los escalones en espiral de aquella antigua torre no encontrando peligro alguno, llegando a la altura donde se suponía que estaría la primera planta, se encontraron una puerta de doble hoja de acero finamente labrada con símbolos de demonios y criaturas del abismo. Una boca emergió de la puerta cuando los héroes llegaron a su altura, diciendo en común: “Solo pasaran aquellos que digan la oración”.

A lo que el Deva respondió alzando su maza radiante, Xarak Tor será tu perdición, descargandola con violencia sobre esta, comenzó a golpear dos veces en su primer ataque haciendo que la puerta se combara ante los impactos, pero el tercero y cuarto golpe fueron tan demoledores que arrancanron de cuajo los goznes de la misma haciendo que esta saliera volando un par de metros hacía el interior de la estancia que se abría a los héroes.

Elden tensó su arco, apenas el deva dio en primer golpe contra... Una puerta parlante? La magia era cosa que no le dejaba de asombrar al elfo. Por lo pronto, se sentía agradecido con ella, las botas que se puso le hacían sentir mucho mas confortable ante el adverso clima y por otro lado, se sentía menos fatigado ante la marcha.

Elden a la derecha del Deva, Kroner a su izquierda. Ambos con los arcos tensos y las flechas listas para ser disparadas a la amenaza, mágica o no, que pudiera esperarlos del otro lado.

Xarak no parecía ser muy sutil, y a veces estaba bien. Más cuando había que hacer rápido las cosas antes de que llegara el nigromante furioso por haber no sólo eliminado a sus esbirros, sino también liberado a la fuente de poder de su increíble maleficio.

Tempus... observa nuestra lucha... bendice nuestro arco, nuestra armadura... demostraremos valentía y te dedicaremos la gloria del combate...

Las puertas de metal cayeron ruidosamente, dando paso a una gran bóveda iluminada por unos braseros, mostrando una sala de paredes lisas decoradas con antiguos tapices que revelan la destrucción de una antigua raza y vidrieras reforzadas con acero, distinguís unos cuantos muebles repartidos por la estancia en perfectas condiciones.

En el centro de la cámara hay una estatua de tamaño grande que representa a un corpulento humano de unos 3 metros, vestido con una aparatosa armadura negra y con la cara cubierta por un yelmo que se apoya en una gigantesca espada sobre un suelo cubierto de cabezas cercenadas.

Detrás de él, un cable de color dorado asciende a la siguiente planta, calculáis que debe medir como unos 6 metros de altura, con toda seguridad comprendéis que por ahí ascendía la energía que le era arrebatada al Deva. En el extremo más alejado de la bóveda, amplios escalones ascienden en espiral hacia la planta superior.

Las palabras mágicas volvieron a activarse y más amenazas cayeron sobre el grupo. El camino estaba claro pero el obstáculo, lamentablemente, también. Dalla dijo la primera lo que seguramente todos estaban esperando a decir.

-¿Soy solo yo la que piensa que esa estatua va a cobrar vida y atacarnos?

Al parecer una nueva amenaza estaba apunto de cobrar vida y parecía realmente peligroso seguir avanzando. Si aquella cosa se estaba alimentando del poder del Deva, su poder podría igualarle o incluso superarle, por suerte, el ser celestial no estaba solo y eso hacía una gran diferencia.

No, no eres a la única que le da esa sensación. responde Elden con preocupación. Entonces, sibla destruimos, haremos que el clima vuelva a la normalidad? preguntó el Deva.

Gonkar asiendo su bonita lanza dio un paso adelantándose a los demás. Yo acabar con esa estatua. Gonkar ser invencible con nueva lanza. Veis que cuando entra en la habitación nada sucede, pero al caminar un par de pasos, unos ojos de color esmeralda comienzan a brillar con intensidad, levantando la cabeza levemente el Golem fijándose en el grupo de héroes.

Más de uno comenzó a mascullar palabras ininteligibles al ver como sus temores se hacían realidad.

Por Moradin! Exclamo el enano frunciendo el ceño con ojo calculador. -En mi vida había visto un Golem como este, es un trabajo de una calidad excepcional.

Uff, exclamo el ser celestial, pronunciando a continuación unas palabras de poder mágico -Protectum Sacrum- para invocar un escudo a su alrededor que le protegiera de los ataques del Golem. Rielando la energía dorada a su alrededor

Alzando su maza radiante dio un paso al frente para intentar salir con vida de aquella torre maligna. Vamos amigos, ataquemos a la vez. Intentare llamar su atención para derribarlo entre todos.

Enarbolando su magnífica espada bastarda forjada en Adbar, siguió al Deva para dar lo mejor de sí mismo. Intentando centrarse en donde golpear aquel pétreo bloque de piedra.

Así sea pués!

El afán del mediano nunca pasaba desapercibido, era realmente impulsivo e imprudente, pero su valor era indudable.

Elden miró al Golen y lo examinó de arriba a abajo. Era muy dudoso que sus flechas lograran hacer algo, pero, aún así, era mas tranquilizante poder atacarlo a la distancia.

Será mejor que no nos distraigamos con esas cosa. Hay alguna forma de apagar la magia que le permite moverse? Dalla, sabes algo sobre este tipo de cosa, algún punto débil? el vigía no sabía mucho de magia.

Elden tensó su arco, se movió unos cuantos pasos mas a la derecha del Deva y se preparó para soltar su flecha.

Kroner se sorprendió una vez más la fuerza y poder que tenía ese ser, lo cual le hacía temer aún más a quien pudiera retenerlo con magia o sin ella: lo había logrado.

-¿Será que esa puerta le ha avisado al dueño? Deberíamos terminar con esto y huir- dijo el explorador mirando más que nada a Dalla, que era la que entendía de esas cosas.

Y allí fue de nuevo cómo Gonkar demostró ser un pequeño mediano valiente y tonto en partes iguales.

-¡Gonkar!- exclamó cuando vio dar esos pasos que activaron la magia del gólem, mientras que él tomaba una posición ventajosa para atacar al constructo.

El iluskano escuchó el sonido metálico que realizó su brazo al tensar el arco nuevamente, y le llamó la atención. Casi se había olvidado que llevaba una armadura completa en vez de la suya de cuero. Realmente estaba muy bien hecha para casi no sentirla. Presentía que sus flechas poco podrían hacer contra esa criatura, pero si era necesario desenfundaría el espadón que llevaba a la espalda.

-Que la bendición de la espina me rodee y que los enemigos sientan su dolor...- murmuró sintiendo cómo las flechas parecían recubrirse de espinas afiladas que con su guantelete no podía sentir, pero que sabía que nunca le harían daño, sólo al objetivo de su ataque.

Soltó la flecha tensando lo máximo que podía. Tenía que traspasar esas placas de metal... aunque no sabía qué debía herir para que cayera.

-El Golem comenzó a moverse paulatinamente dirigiéndose al objetivo más cercano, siendo Gonkar piel de Oso. Al ver el mediano al enorme Golem alzar su espada para descargarla sobre él, musito una plegaria a Tymora cerrando brevemente los ojos, sintiendo a su lado como el suelo adoquinado saltaba por los aires, ante el impacto del arma. Vamos, esto esta Chupao. Es muy torpe- exclamo lleno de coraje. Alzando a continuación su lanza brillante y pulida para hundirla en el cuerpo del ser traspasando su dureza- Whoaaaa- exclamo el pequeño emocionado. Lanza ser buena.

-Dalla lanzo un conjuro de grasa y tuvo exito haciendo que la mole cayera al suelo al no poder mantener el equilibrio

-Elden disparo su flecha la cual a pesar de no ser mágica impacto en el pecho del golem incrustándose hasta el astil. Tener cerca al Deva parecía conferir a las armas mundanas ciertas proezas.

-Bofrund blasfemando avanzo escudo y espada en mano y lanzo un tajo errando su golpe. Gruñendo: La próxima vez tendre más suerte.

-Xarak Tor avanzo con un salto y se interpuso delante del Golem golpeándolo con su maza radiante en dos ocasiones haciendo saltar esquirlas y dejándole un brazo inutilizado al perder la mitad de este. El poder del Señor del Alba era poderos en su elegido.

-Kroner susurro un conjuro y disparo su mortífero arco errando su objetivo, clavándose esta en el techo de la bóveda. En ese momento sintió el impulso de coger el espadón y lanzarse sobre el constructo.

-Karian se movió por un flanco con la intención de golpear al constructo enarbolando la magnífica espada bastarda, legado de su familia, golpeando al ser y rebotando como si hubiera golpeado a un yunque, haciendo vibrar sus fuertes brazos. Profiriendo- Mierda

Elden apuntó nuevamente, pero esta vez el disparo era mas difícil. Habían muchos en el camino, así que necesitaba un mejor angulo para su próximo tiro.

Dalla observó cómo el golem cobraba vida al entrar Gronkar y maldijo la impaciencia del mediano. Con un breve descanso hubiera podido contar con fuerzas para un conjuro adicional pero ahora debía ser muy cuidadosa con sus elecciones. Sacó un nuevo pedazo de manteca mientras trataba de recordar lo que pudiera sobre golems como aquellos.