Partida Rol por web

Interrumpo al detective, no pienso ponérselo facil.

- Señor detective, estoy seguro que mañana será un momento más apropiado, para que usted siga con su trabajo- hago una pausa- las damas han sufrido mucho y es un poco tarde, por favor retiren el cuerpo y vengan mañana por la mañana.

Intento ganar tiempo para aunar un discurso común, seguro que tiene ganas de dormir, uanque por su actitud parece que tenemos a uno de los pocos profesionales que queda en el cuerpo, espero que sea sólo fachada y que ante la perspectiva de irse a la cama no la acepte.

El Doctro Jhon Moore encendio su pipa dando una larga chupada al aromatico tabaco holandez. Cerro los ojos para deleitarse con su aroma y luego observo a sus compañeros. Algunos parecian nerviosos y se podian notar ciertos rasgos de inopinada culpa en las maneras de responder ¿Acaso eran culpables de algo?

No se había detenido a pensar en las posibles implicaciones de su respuesta y ahora, como era de esperar, el detective estaba interesado en saber cómo tuvo conocimiento de una información que se suponía era desconocida. La intervención de Lord Winston le proporcionó algunos valiosos segundos que le sirvieron para ordenar ideas y sopesar las posibles repercusiones de su respuesta.

Mentir estaba del todo descartado, cualquier falsedad que dijera iba a quedar al descubierto aún antes de terminar de decirla, pero nada de malo había en omitir, al menos mientras fuera prudente, algunos detalles.

-Por una nota que traía John, estaba en su puño cuando lo encontramos.

Ya está, no diría más. De seguro el detective se iba a mostrar interesado en saber por qué ella lo recordaba mientras que los demás no y ante esa pregunta su respuesta no sería más que una: tenía una memoria privilegiada y recordaba con facilidad hasta los detalles más inverosímiles.

Sacando la nota y la llave del interior de su chaleco el Dr.Moore se acerca al detective.

En efecto, he hallado esto en el puño del occiso al revisarle

-¡LA LLAVE NO! -gritó en silencio. Entregarle la nota al detective no implicaba pérdida alguna, ya conocían el contenido de la misma, pero la llave era cosa muy diferente y el detective no podía quedársela. Esa llave debía ser importante, por algo John, con su último aliento, se había aferrado a ella. No importaba que la llave se mencionara en la nota, si les preguntaban por ella bien podían decir que no la traía consigo, que no la habían visto, lo que fuera, pero no perderla.

-Querido doctor Moore -dice adelantándome y quitándole la llave como si tal cosa-. Veo que ha guardado consigo la llave del mueble bar. No debería haber hecho eso, el servicio la ha estado buscando durante la cena como locos. Estimado detective -se dirige hacia él con los modales firmes y educados de un soldado-. Todos conocíamos ese nombre de la nota escrita por nuestro difunto amigo. 

El Dr Moore, mira asombrado el comportamiento inopinado del Almirante Sin dudas, el hecho de la muerte de nuestro comun amigo ha afectado de manera notoria.

Creo que hay alguna confusion Almirante dando una larga chupada a la pipa Tal vez los nervios de las ultimas horas le hayan traicionado. Ratifico lo dicho, esa llave le he encontrado en el puño cerrado del ociso mirando al Almirante No es de caballeros acusar a alguien de una sustraccion como de la que usted me acusa. Espero una disculpa.

Escuchar que volviese al día siguiente no hizo ninguna gracia al detective. Miró gravemente a Lord Wiston Charlton durante un par de segundos hasta que la baronesa aclaró la situación y el Dr. Moore presentó la nota. Se disponía a cogerla cuando el almirante retira la llave. Luego la ràpida respuesta del médico le sorprende todavía más.

La cara del detective Barlow muestra entonces una terrible gravedad. Suspira largamente y mira uno por uno a todos los de la sala. Sigue con la mirada la llave que sostiene el almirante. Parece divertido.

Me alegro que tengan todos las ideas tan claras. Comenta. Duda unos segundos, pero finalmente parece tomar una decisión y escribe unas líneas en su libreta. Toma finalmente la nota del Dr. Seward y la lee atentamente. Toma algunos apuntes más.

No cabe duda que dejarles reflexionar por la noche podría permitirles ordenar las ideas. Pero en Scotland Yard sabemos que los testimonios recogidos lo antes posible son más fiables, pues con el tiempo las personalidades de cada uno los deforman añadiendo detalles que a veces no existían antes. Creo que eso entra dentro de la psicología, ¿ no es cierto ? Y mira al Dr. Moore.

Reflexiona unos segundos. La tensión parece ser capaz de cortarse con un cuchillo.

Además, la especial situación del Señor Kensington me obliga a tomar acciones rápidas. No puedo esperar hasta mañana. Les diré lo que vamos a hacer.

Se para una vez más. Le sabe malo tratar a tan distinguidas personas de este modo, pero una vez se ha decidido el detective James Barlow coge velocidad.

Van ustedes a dirigirse a sus cuartos. No hablen unos con otros hasta que les dé permiso. Mientras tanto nos haremos cargo del cuerpo. Mañana, lo antes posible, se efectuará una autopsia. ¿ Examinó usted el cuerpo, Dr. Moore ? ¿ Alguna conclusión ?

Espera la respuesta del doctor.

Tengo entendido que hay algún herido más, por lo que me ha dicho el servicio. ¿ Está en condiciones de que le llevemos a un hospital en la city ? Una vez más esperó la respuesta del Dr. Moore.

Antes de marcharnos tendré una pequeña entrevista con cada uno de ustedes por separado donde relatarán lo que recuerden de las últimas horas. Les ruego no abandonen esta propiedad a menos que tengan asuntos urgentes y si lo hacen encárguense de tenerme al tanto.

Sacó una tarjeta profesional que dejó encima de la mesita.

Ahí tienen mi número.

Titubeó una última vez, mirando al almirante y termino por decidirse.

Creo que me haré cargo de la llave. Tal vez tome una copa antes de dormir. Y la cogió de las manos del almirante.

Ya pueden dirigirse hacia sus habitaciones.

Detective, creo que el Scotland Yard tiene profesionales mas que capacitados para llegar a la misma conclusion que yo, sin embargo os dare el resultado de mi revision llevandose la mano a la nuca Las cervicales están luxadas o fracturadas, el atlas ha sido completamente movido de su posición normal, lo que ha provocado una hemorragia interna masiva de la vena carótida señalando el lugar donde se formo el hematoma Aqui esta el hematoma, el cuello ha quedado bloqueado por tanto en una posición antinatural y no permite la movilidad de la cabeza limpiandose una inexistente pelusa de su saco Por la acumulacion de sangre, llevaba entre veinte minutos y una hora muerto. Nada se pudo. Evidentemente mi amigo Steward, ha sido asesinado y el actor de esa muerte era alguien grande y con una descomunal fuerza. Espero con ansias que vuestra institucion se aboque con especial ahinco en el hallazgo de tal criminal

-Estimado doctor, no se olvide del cochero.- Reacciono al ver que el no habia respondido la pregunta del detective -El se encuentra con una fea herida en la cabeza que el doctor trato, no se mucho sobre esto, pero creo que llevarlo a un hospital asegurara su supervivencia.- Suspiro -Antes que lo pregunte, tratamos de hablar con el, pero estaba delirando asi que no logro decir nada coherente.- Aparentemente el almirante no creia que la entrega de la llave seria buena idea, sin embargo la llave ya habia cumplido la funcion para la que estaba hecha, y ya no era necesaria. -El que le mientan y se contradigan ante un detective solo aumentara sus sospechas.- Penso para si misma, tambien se encontraba pensando que iba a decir en su interrogatorio ya que ella no tenia planeado mentirle a la policia.

Sonriendo a Lady Milles

Gracias por recordarmelo my lady. No recomiendo que el herido sea trasladado, si que sea atendido

La tensión generada por algunos de los invitados saca de su ensimismamiento al profesor, que ve crecer la sospecha en la cara del detective. Definitivamente no estábamos sino cavando nuestra propia tumba con declaraciones así. De ser él el detective, los haría encerrar a todos, pero esta claro que la influencia de Lord Winston no es poca para evitar una noche en la cárcel.

Cuando el detective vuelve a hablar el profesor escucha con atención, buscando la manera de retener algo que nos permita seguir investigando. Y al escuchar como se menciona al cochero ve su oportunidad.

-Detective, es cierto que el cochero esta herido, pero no creo que sea recomendable transportarlo. Además antes de sumirse en la inconsciencia, mencionó algunas cosas que podrían llevarnos hasta el asesino. Se lo que debe de estar pensando ahora “más motivo para llevármelo” pero resulta que soy un gran hipnotizador, y tal vez podría obtener mas información del cochero de la que él mismo pueda recordar conscientemente debido al trauma y el nerviosismo. Además el doctor Moore podría atenderlo para que su recuperación no sufriera percance alguno. ¿Qué le parece?- sugiere el profesor Klassen con toda la diplomacia que puede reunir en estos momentos de tensión.- y con respecto a la llave, da acceso a unas cintas fonográficas que el Sr Seward dejó para nosotros, por lo que agradeceríamos, muy especialmente Lord Winston- tirando una clara indirecta de que la nobleza esta de nuestra parte- que nos permitiera retener la llave para poder escucharlos en la intimidad que proporciona una amistad como la que teníamos con el fallecido- termina el profesor tendiendo una mano a la espera de que el detective devuelva la llave.

Master, he declarado que hacia un molde de la llave pero no me has dicho que resultado he obtenido, si la hice o no.

Vaya, es que no creí que fuese necesario tener una copia de la llave, pero vistas las cosas sí, tienes un molde de la llave en jabón. Mientras no lo mojes mantendrá la forma con bastante fiabilidad.

Elizabeth escuchó atenta la exposición del detective y, posteriormente, las conversaciones de los doctores. Había dejado de llorar por lo que se dispuso a devolver el pañuelo a la baronesa, pero aún seguía en un estado de semi shock. - Tome baronesa, muchas gracias -le dijo ofreciéndole el pañuelo. Después se quedó esperando a que la gene se empezara a marchar a sus habitaciones para obdecer las recomendaciones del detective.

La situación que acababa de vivir fue bochornosa para todos y en especial para los implicados. No era culpa ni del Almirante Happel ni del Dr. Moore ya que uno quería mantener en secreto la información que nos dejó John y el otro no quería mentir. Si hubiesen preparado lo que que iban a decir a la policía esto no habría ocurrido, pero todo se había desarrollado muy deprisa. Ahora lo más sensato era contar todo lo que había ocurrido esa noche en el interrogatorio individual.

Antes de subir a su habitación y esperar a hablar con el detective le preguntó. - Detective Barlow, usted nos ha preguntado nada más llegar por ese tal Sr. Kessington, que como podrá comprobar sólo conocemos por la nota que nos dejó John. De modo que usted ya le conocía de antes, ¿nos podría informar quién es esa persona, a qué se dedica y qué relación tiene con el Sr. Seward?

-Bueno, si ellos dos dicen que no hay que transladarlo, es por que es asi.- Se rio disimuladamente de su ignorancia -No creo que nuestro amable detective aqui piense el llevarselo verdad?.- Dijo colocandose cerca del el -Despues de todo, es muy dificil interrogar a alguien en su estado.- Rodeo al detective, y luego volvio a dirigirse hacia el Dr. Klassen -Respecto a la llave.- Hizo una pausa, pensando que el profesor habia hablado demas en aquella situacion, mentir y luego ser extremadamente honesto no arreglaria el asunto -Ya la usamos verdad? No he oido de cerraduras que vuelvan a cerrarse solas.- Finalmente, camino para dirigirse hacia su habitacion como se habia acordado, saludando cordialmente a todos con la cabeza.