Partida Rol por web

Una vez pareció la doctora satisfecha con el electro, te quitó las distintas ventosas que cubrían tu pecho. Guardó la máquina y se acercó nuevamente. Cogió un esfigmomanometro y te tomó la tensión con él y con un fonendoscopio te tomó el pulso.

Terminadas estas pruebas mínimas, cogió una linternita y revisó tus oídos, ojos y garganta. Finalmente la dejó y apuntó unas cosas en el portafolios.

- Ahora levántate de la camilla y quitáte los calzoncillos. - Te dijo corriendo un poco la cortina para que tuvieras algo de intimidad ante el guardia.

 Leo se queda un poco cortado ante ella...

-De...de verdad?

Su fanfarroneria se habia quitado tras la cortina pero tenia que hacer caso a la doctora, a saber para que queria que se quitara todo. Al quitar su ropa interior, mostro que no estaba mal dotado. Pero seguramente no seria eso lo que la doctora buscaba.

La doctora, al ver lo cortado que te habías quedado sonrió sin decir palabra. Viste como miró fugazmente tu aparato sin hacer comentario alguno y se colocó detrás tuyo.

Pegó su cuerpo al tuyo y con la mano empezó a palpar tus huevos, con suavidad pero a la vez con firmeza, primero cogió uno y después el otro...  No pudiste evitar empalmarte un poco al sentir el contacto suave de su mano. Al terminar de palparlos bien, te cogió la verga y también empezó a tocarla con suavidad. Te cogió del pellejo, estirando y tensándolo. Una vez tenso acarició con cuidado el prepucio un par de veces con el dedo, soltando un ligero Aha... Justo antes de terminar.

- Bien, todo perfecto. - Te dijo suavemente cerca del oído, sentiste su cálido aliento rozándote. La doctora finalmente se separó de ti y poniéndose delante tuyo te sonrió... - Ahora iremos a hacerte unas radiografías. -

 -Ajam....

Suspira ante tanto magreo sin censura, su aparato empalmado estaba palpitante tras el tocamiento y su respiracion algo entrecortada, coge sus calzoncillos y los coloca bien, sin hacerse daño tras el empalme.

-Co..como diga doctora....hagamos esas radiografias.

Mientras me tomaba la presión y el pulso, algo más acelerado de lo normal ya que me estaba sonriendo, no paraba de mirar su sonrisa.

- ¿Enfermedades? mmm yo tengo alergia, alergia al instituto.- me río.- es broma tengo alergia a la graminia y al pelo de los animales, en cuanto a mi familia sólo un tío murió de un ataque al corazón.- me pongo a pensar.- ¿fumar y beber? pues lo normal si me pasan droga y beber en las fiestas pero no me compro bebida ni tabaco sino que me invitan siempre.- sonrío.- ¿y tú guapa?

Entrasteis en la otra sala, que al igual que la primera tenía una puerta al fondo.

En medio de la sala había una máquina con una especie de tabla/camilla. - Estírate allí. - Te dijo la doctora señalándote la fría tabla. Sentías tu piel de gallina, llevabas rato completamente desnudo y el frío había ido calando en ti.

- Yo estoy muy sana, cielo. - Te dijo mientras empezaba a mirarte los oídos y la garganta con una pequeña linterna. Apuntó unos datos en el portafolios y se acercó a una máquina, cogiendo unos cables terminados en ventosas. La acercó a la camilla y empezó a colocarte las ventosas por tu pecho, habiendo limpiado la zona previamente con alcohol.

- Bueno, vamos a hacerte un electrocardiograma, a ver como te funciona el corazón. - Te dijo guiñándote un ojo. Tocó algo de la máquina, la cual empezó a dibujar unas líneas discontinuas en un papel...

 A Sebastian no le parecia el momento ideal como para entablar una conversacion. Estaban haciendo el proceso para entrar al reformatorio. Y realmente no le gustaba mucho la idea de tener que darle razones a la gente para que lo golpeara. Se decidio en hacer caso omiso a la charla de ivan.

-Me parece Ivan, que no somos muy de charlar... Es normal en éstos casos, nadie esta aqui por gusto, a todos nos han pillado de una forma u otra... Supongo que las habitaciones serán individuales dado el nivel de éste reformatorio, pero si son compartidas, tened cuidado con vuestro compañero....- Les digo a modo de consejo, sé que no lo han pedido, ni yo quiero ser el abuelo cebolleta de las historias y con paternalismos de hermano mayor, pero cuando entras por primera vez en un sitio asi, es normal que entres achantado, y eso es un craso error aqui....

Leo siente el frio de la camilla en su espalda y sonrie a la doctora:

-Hey doc, luego podrias calentarme un poco no? solo haces enfriarme

Le sonrie levantando rapido las cejas con una solo movimiento, esperando que quizas captara su propuesta, realmente estaba buena, y ¿porque no? estaba necesitado y con ganas de marcha. Su miembro bien lo hacia ver ante la doctora de cara bonita.

Dios! relamente esta buenisima!

Aunque se queda quieto despues para no hacer mal las radiografias. 

La doctora te miró divertida.

- Cuando te avise aguanta la respiración... - Te diste cuenta que mientras hablaba parecía estar mirando tu pene. La mujer recorrió tu cuerpo desnudo con la mirada y negando con la cabeza se colocó detrás de un panel de protección.

Pasaron un par de minutos, que a ti se te hicieron eternos. Finalmente escuchaste su voz amortiguada.

- Venga, aguanta la respiración... -

La puerta se abrió nuevamente, y el hombre de antes miró a David...

- Venga chaval, te toca.. - Dijo señalando hacia la puerta abierta.

 Leo aguanta la respiracion abedeciendo ala Doctora, pero con mas frio que otra cosa. Y espera a que las radiografias esten hechas para salir de alli.

O quizas para algo mas, quien sabe, la doctora estaba para hacerle algunos favores...pero si ella no queria...no tenia nada que hacer.

Miré los aparatos que me medirían cómo funcionaría mi corazón, nunca antes me habían hecho pruebas tan exhaustivas por lo que parecía que todo lo que hacía ella, nuevo para mí, me ilusionaba mucho. Miré las líneas discontinuas que se dibujaban en un papel.

-Me alegro de que estés muy sana, cuando quieras salimos a correr o a jugar a algún deporte, siempre me han gustado. Por cierto, ¿qué significan esas líneas?

Ya voy. Digo de mal modo y sigo.

Al entrar en la consulta, viste a una doctora bastante atractiva sentada tras una mesa. Parecía estar leyendo algún informe. La puerta se cerró tras de ti. Al mirar hacia atrás viste al guardia apoyado con los brazos cruzados. La consulta parecía bastante completa. Había una camilla y varios aparatos. Además de vitrinas con varias clases de productos. Al fondo se veía una puerta.

- Buenas noches, David. Soy la doctora Estévez. - Dijo levantando la mirada de los papeles que estaba observando. - Cualquier cosa que tengas metálica quítatela y déjala sobre esa bandeja. - Al decir ésto la doctora señaló una bandeja de aluminio. - Después quítate la ropa y túmbate sobre la camilla. -

- Me alegro de que te gusten los deportes, pero lo siento, cielo, no tengo tiempo ni ganas cuando acaba mi jornada de salir a correr. - La doctora en ningún momento ha dejado de sonreir. - Estas líneas me dicen que tal está tu corazón. - Dijo mientras te quitaba las ventosas del pecho.

Una vez las hubo quitado, te tomó la presión y midió los latidos de tu corazón. Después, con una linterna miró el interior de tus oídos y garganta. Satisfecha la doctora apuntó varias cosas en el informe.

- Bien, ahora levántate de la camilla y colócate allí. - Te dijo señalando un punto mientras corría la cortina para que hubiera algo más de intimidad.

Pasó bastante rato, hasta que la puerta se abrió nuevamente. El mismo hombre de antes miró esta vez a Alex.

- Chaval, es tu turno. - Dijo mientras le franqueaba la entrada.

La doctora tras hacerte un par de radiografias sale nuevamente de la mampara de protección.

- Ya puedes vestirte... - Te dice mientras se queda apoyada en la misma mampara, con los brazos cruzados y observando tus movimientos.

-Mmmmm... Ok....- Digo estirandome y crujiendo mi cuello. Sigo al agente hasta la enfermeria.