Partida Rol por web

No es nada agradable para un elfo ir por cuevas angostas. Y más desagradable aún por el cieno. Con ligera inclinación hacía abajo, la cueva torciendo a la izquierda... Te cuesta mantener el equilibrio.

De pronto se te encienden las alarmas. No puedes descartar que sea casualidad, pero esto tiene pinta de ser una trampa. Un resbalón por parte de alguien y se irá deslizando por la cueva hacía lo que haya delante.

Aquella cueva daba una sensación totalmente diferente a la anterior, el espacio abierto de su predecesora hacía contraste con el angosto camino que se adentraba en la roca de la segunda cueva.  El grupo se decidió por la senda de la derecha pero no hizo falta avanzar demasiado para que el estrecho camino se convirtiera en un camino angustioso.

Tras avanzar por el pasadizo, el suelo pareció cubrirse de una especie de lodo o fango, algo más sucio que peligroso si no fuera porque una pendiente cada más pronunciaba acompañaba a la viscosa sustancia.  El bello del elfo se erizo por unos instante con una sensación que le apremiaba a salir de allí.

Alto, esto me da mala espina... no se lo que puede haber más adelante pero algo me dice que puede ser un conjunto de estacas para recibir al primero que de un mal paso, miremos el otro camino no creo que merezca la pena el riesgo.

- Buenos ojos Naowën, que los dioses te guarden la vista. Gracias por verlo...- le agradezco que nos haya salvado de una trampa, las cuevas empezaban a ser algo peligrosas y eso no me gustaba. - busquemos en otra cueva a ver si tenemos más suerte, de todas formas si no siempre podemos esperar a la noche y sorprenderlos cuando salgan a tomar el aire...mejor ser los cazadores que los cazados...

Caminando por el túnel el ambiente se hacía opresivo. No me gustaban los ambientes tan cerrados, no me sentía cómodo. Mi lugar era el campo y los espacios abiertos, sentir el viento en mi cara y las estrellas sobre mí.

La opresión de la cueva y el humo de la antorcha me recordaban a cada paso que nos adentrábamos más y más en ella. 

Y la repentina apreciación de Naowën me hizo ponerme aún más sobre alerta.

-No, amigo. No merece la pena el riesgo, es verdad. Quizás no sea nada, pero si nos encontramos con trampas es que algo defienden. No descartemos este pasadizo, y vigilemos lo que puede surgir de él. Por mí vayamos a ver el otro, mientras, pero no descuidemos éste. 

La piedra me da suficiente información como para suponer que estas cuevas podrían adentrarse hasta el mismo corazón de la mesa. Si las cavernas fueron horadadas a la largo de tantos años, quién sabe los secretos que pueda esconder.

Habiendo dejado atrás el cruce, comenzamos a movernos hasta que el suelo empieza a sentirse extraño. Al igual que algunos de mis compañeros, trato de restar importancia al cieno y me dispongo a continuar, pero la voz de Naowën hace que me detenga al instante.

"- Muchas gracias, compañero- le digo al elfo, asintiendo con la cabeza luego del aviso que nos brinda-. Los mejor será ver qué nos espera en el otro camino y, como dice Axe, mantenernos prudentes en caso que surja algo extraño- agrego y doy la media vuelta para volver hacia el otro camino".

Naowen 20SA 25/24 PV: Coscorrón pierde 1 PV

Axe 0CM pierde 50/47 PV: Tajo estalactita Pierde 3 PV

Naowën alerta de la característica tan extraña y peligrosa de esta cueva y de que podría tratarse de una trampa. El grupo se detiene no queriendo arriesgar más y decide intentarlo por la bifurcación derecha.

Con cuidado pues el suelo es resbaloso, se da media vuelta y se deshacen los diez metros andados.

Como ya habíais visto, este otro túnel o cueva es más estrecho. Mut pasa el primero. La cueva además va haciendo recodos por los que los componentes del equipo de más envergadura tienen problemas para pasar. Una estalactita rasca el pómulo de Axe produciéndole un pequeño tajo. El elfo, seguramente por temas de altura se da un coscorrón en la cabeza.

Cuando parecía que seguir este camino no tiene más sentido, de pronto se termina la estrecha gruta y se abre ante vosotros una amplia cámara. Una grieta profunda (no se ve el fondo) la cruza por el medio. Y hay un puente de cuerdas y tablas de madera para cruzarlo. Al otro lado de la cueva (y de los 30 metros de puente puente), la gruta, esta vez más ancha, parece proseguir.

Parece que por fin dimos con un camino correcto, esto sí que parece la entrada de algo habitable. Examino desde mi posición la estancia, sobre todo el puente ya que será nuestro punto de acceso a la siguiente parte de la cueva ya que parece proseguir a lo lejos.

- Creo que de esta acertamos...si queréis puedo pasar yo primero, peso poco y así compruebo si están bien las tablas. Si llevo una cuerda atada a mi cintura es posible que pueda atarla a algún saliente y ayudaros a cruzar por si no fuera demasiado fiable el puente...

Lo que al principio parecía una cueva sin estrecha y sin muchas espectativas acabo siendo todo lo contario, quizá aquella aparente estrechez era el principal motivo de elegirla por parte de quien estuviera detrás de todo aquelllo.

Naowën examinó la gruta viendo el otro extremo del puente sin dejar de pensar que pudiera tratarse de una nueva trampa.

Esta bien, pero ten cuidado. Ya hemos identificado dos posibles trampas en estas cuevas, quien quiera que este detrás de todo esto se ha tomado muchas molestias. nosotros sujetaremos la cuerda mientras avanzas para tenerte asegurado. Fijate bien donde pisas, si hay una trampa en esta escalera probablemente se trate de algunos tablones falsos.

El elfo tomo uno de los extremos de la cuerda mientras le pasaba la cuerda sobrante a Axe y Angainor. Una gota de sangre se apostaba en la mejilla del elfo, el estrecho camino había tomado la primera sangre.

Sentí el golpe de la estalactita traidora e inesperada, pero no parecía grave. Le quité importancia al golpe más por orgullo que por dolor, hasta que noté la sangre humedeciendo mi mejilla. La limpié, pero el dolor se hizo más intenso, recordándome a cada paso lo que había ocurrido.

Antes de darme cuenta, otra decisión se nos avecinaba. La solución del mediano parecía la más sensata, ya que él pesaba menos y sería más fácil rescatarlo en caso de problemas. 

Cogí la cuerda que Naowën me tendía recordando que yo también llevaba una, y me preparé para proteger a Mut en caso de alguna caída en falso.

La llegada al puente nos supone la posibilidad de hallarnos en el camino correcto. Mut se lanza presto para pasar al otro lado y la verdad que su consideración me resulta irrefutable... siendo probablemente el más ágil y seguramente el más liviano, sus posibilidades para cruzar exitosamente al otro lado son en verdad mayores.

Visto que mis otros compañeros se han dispuesto a sujetar las sogas para ayudar al mediano, me mantengo apostado en la retaguardia y atento en caso que la suposición Axe haya sido acertada y tengamos visitas inesperadas.

Me ato la cuerda a la cintura con un buen nudo de remate, y me aventuro por el puente de tablas con sumo cuidado para evitar tropezar y caer al vacío. 

- Tendré cuidado...los Lanudo solemos tenerlo aunque claro no solemos dedicarnos a la aventura, lo nuestro es más bien el pastoreo de ovejas... - digo sonriendo mientras pienso: Pasito a pasito y con cuidado...

Comenzáis a pensar que se puede haber dado con la cueva correcta. Si lo es, desde luego que está bien camuflada entre una maraña de cuevas, seguramente usando esto como protección.

Ahora frente al puente de madera tomáis las debidas protecciones, parece muy buena idea la de que primero cruce el mediado, así además en caso de caída es el de menor peso. Naowën saca su cuerda, Mut se la ata a la cintura con un firme nudo y el otro extremo lo sujetan el elfo y el dunledino mientras el enano protege la retaguardia.

El hobbit empieza a cruzar, el puente, por lo pronto es más sólido de lo que aparente. Eso si, como cualquier puente colgante, se mueve de modo que puede dar impresión a los no acostumbrados. Y más con un fondo que por la profundidad y oscuridad, no se ve. Pero surge un pequeño contratiempo, la cuerda mide 15 metros, lo que solo le permite llegar hasta la mitad. Ha de decidir si se sigue sin cuerda, se ata otra a continuación o cualquier otra cosa que se os ocurra.

El peso del hobbit no era demasiado, pero la tensión de no dejarlo caer si algo pasaba y el temor a que la cuerda resbalase me hacían sufrir de mala manera. Cuando la cuerda realmente escaseó, hubo que tomar una decisión.

-Yo tengo otra cuerda -les recordé-. Antes de que termine ésta podemos hacer un nudo con ella y que Mut siga cruzando. A mí me parece la mejor opción, ya que hemos empezado de este modo. Creo que debemos atarla y que siga cruzando el puente.

- Atarla firmemente...un buen nudo para que resista vuestro peso...con el mío no creo que tenga problema. Veré si encuentro un saliente donde atarla para que os sirva de guía ya que mi peso no creo que sea suficiente a pesar de que hago esfuerzos por aumentarlo... - digo con una sonrisa. Luego me vuelvo a concentrar y en cuanto esté todo atado y bien atado continúo avanzando para cruzar el puente.

Mientras avanzo busco un sitio donde atar la cuerda firmemente y de paso un sitio donde cubrir a mis compañeros cuando pasen.

Todo parecía ir bien, el mediano había llegado hasta la mitad del puente cuando se acabo la cuerda, por suerte Axe saco otra que rápidamente anudo en el extremo que los tres compañeros tenían. El puente era muy largo, demasiado como para alcanzar uno de los extremos corriendo, hasta entonces Mut no había encontrado problemas pero era mejor no confiarse demasiado pues podía ser precisamente lo que esperaría alguien que hubiera diseñado una trampa.

Esta bien, continua y ten cuidado.

Mut siguió avanzando y parecía que todo marchaba bien aunque era mejor esperar a que llegara al otro extremo

"- Con lo que comes no sé cómo no aumentas, mi buen amigo. Creo que ya te he dicho que me encantaría visitar tus tierras, entre otras cosas, para poder apreciar la buena comida y bebida- comento de espaldas y riendo, sin quitar la vista del pasaje por el que llegamos hasta aquí".

La posibilidad de encontrarnos alguna trampa no se aleja de mi mente. Con los sucesos del túmulo, mis ojos continuamente buscan cualquier cosa que llame la atención y no dejo de sentirme intranquilo a cada paso que doy.

"- Ten cuidado, mediano. Si necesitan más cuerda, yo también tengo una de la que servirnos- expreso".

Mut: 30% + 50% = 80% + 50% = Pasado

Axe Escasa Dif: 70% + 50

Angainor: 20% + 20% + 20 + 40 = Pasado

El fallo de previsión inicial al no contar con los metros se subsana rápidamente. Mut no tiene ni que regresar lo andado. Simplemente, Axe ata fuertemente su cuerda a la que estaba siendo usada.

El hobbit por fin puede continuar. Al principio el puente se zarandea bastante. Pero el mediano reduce el paso y el zarandeo se reduce. A paso reducido consigue cruzar. Asegura la cuerda al otro extremo por si le sirve de apoyo a alguien.

El siguiente en cruzar es Axe, quizá el menos hábil de los cuatro. Pero la cuerda le sirve de ayuda y cruza sin dificultad.

Luego cruza Naowen, se muestra muy hábil y cruza directamente sin que el puente se zarandee apenas.

El último es Angainor. Que tendrá que atarse es extremo final de la cuerda y esta no le servirá de apoyo para cruzar. Es poner un pie y el puente comenzar a moverse. Desde luego que sus movimientos no son gráciles y ligeros. Su paso es lento, hasta que se desespera y comienza a caminar indiferente a los zarandeos, al final consigue cruzar.

Estáis todos al otro lado, incluidos los Uncas y recupera cada uno su cuerda. Un momento de respiro antes de proseguir el viaje. Os metéis en la nueva gruta. Más ancha que la de las estrecheces anteriores. Da un giro a la izquierda y a unos 20 metros parece desembocar en una gran caverna. No solo eso, hay luces de antorchas y escucháis voces…

Susurrando les indico a mis compañeros:

- Me acercaré a echar un vistazo, mi pequeño tamaño debería ayudar a no llamar la atención...si alguien quiere acompañarme que camine un par de metros detrás mía...

Dicho y hecho. Camino en silencio y con sumo cuidado de no pisar nada que pueda hacerme tropezar, incluso me agacho y recorro a gatas los últimos metros para evitar ser visto y menos ser oído. Mi idea es poder escuchar lo que dicen y comprobar cuántos son y qué armas llevan consigo.