Partida Rol por web

Kislaya habia convivido con los demonios pero esta vez dejo que se acercara... lo deseaba en el fondo... Y le dijo - puede que tuviera curiosidad... Y aproveche eso de verdad pero... confieso... que no fue mi primera intención... No lo busque... fue inocente.. - pongo una mano en el corazón... en un gesto sentido.

Entonces, acorralada pero deseosa veo que se acerca como un felino acechante el mediodemonio ... todos estos dias le observe y desde que miramos de trazar el plan senti que el y yo eramos como el agua y la arena...y cuando su mano toca mi barbilla... acercando mis labios a los suyos... miro sus labios tan cerca...que...No puedo resistir...Y al ver sus ojos me quedo mirandoles perdiéndome en ellos...atrapada por su seductor atrevimiento...reflejada en su magnética mirada...una chispa se había desatado... Y cuando me pregunta...termino su duda con una palabra... llena de fuego en mis ojos verdes hipnóticos que entrelazan mi mirada con la suya igual de hipnótica... - amo...

Enarqué una ceja ante la insólita escena, carraspeando un par de veces y dando un golpe con los nudillos en la pared más cercana para llamar su atención. No tenía nada en contra de los enlaces humanos, pero no mientras estábamos en mitad de un trabajo.

Abajo encontré una especie de dispositivo, pero no sé qué he accionado. ¿Habéis visto algo raro? – Me crucé de brazos, intentando volver a la investigación.

El rostro de Ratko parecía inquebrantable, los pensamientos del demonio solían estar bajo control, era como una especie de autodefensa o quizás una de sus características, sin embargo cuando Kislaya dijo la palabra amo, el nigromante tardó unos segundos en reaccionar, en aquella ocasión no llegó a decir nada simplemente respiró con profundidad para a después rodear con sus brazos a la muchacha y besarla con más intensidad de lo que en principio había previsto, como si la estuviera saboreando, entrelazando su lengua con la suya... Disfrutando de aquel instante de descubrimiento e intimidad.

- No sabes donde te metes... - le dijo al apartarse de ella pero sin dejar de abrazarla, con una sonrisa pícara dibujada en sus labios

Ratko se sobresaltó al descubrir a Earendil en la habitación, aquello era una interrupción de lo más inoportuna pero aún lo fue más el echo de que Kislaya en aquel momento se desmayara, por suerte Ratko fue lo suficientemente rápido para evitar que cayera sosteniendola entre sus brazos.

- Kislaya... - Le dijo preocupado mientras la depositaba con cuidado sobre la cama- Kislaya... - insistió sosteniendole la mano- Creo que necesita un poco de aire... Ver... No hemos visto nada raro... Ahora reviso la planta, si lo que dices es cierto algo ha debido de ocurrir, quizás algún compartimento secreto... - apuntó sin apartarse de la princesa

Tras el beso de Ratko ella efectivamente perdió el equilibrio...sus piernas le fallaron...era un momento muy intenso para el corazón de Kislaya...un corazón que nunca había sido amado... y queda como dormida en los brazos de Ratko y ante la mirada de la chica azul.

Mientras Ratko aguardaba pendiente de Kislaya a que esta se recuperara al apartar sus ojos de la muchacha, algo le llamó su atención.

- Earendil... Mira- señaló el cabecero de la cama, a la especie de botón que había visto, el demonio quiso apretarlo y alargó el dedo para hacerlo pero se detuvo a unos centímetros

No entendía el desmayo de Kislaya, pero viendo que Ratko la cuidaba decidí pasarlo por alto, negando con la cabeza por la alocada juventud que me había tocado custodiar. Aprovechando que la depositaba sobre la cama, no pude evitar percatarme del relieve que hace unos minutos había visto y rozado, estando ahora un botón que antes no vi.

El demonio se adelantó para pulsarlo, esperando entonces cualquier cosa que cambiara.

De repente, un sonido provino de la planta inferior. Rápidamente el grupo se reunió allí para comprobar estupefacto como de debajo de la entrada principal se reveló una trampilla que estaba oculta con un mecanismo bastante complejo, incluso las mentes más ávidas podían predecir que esos sistemas no son humanos ¿geotónido quizá?

Ahora pensar eso era lo de menos puesto que la trampilla podía ser abierta con total comodidad, lo cual daba a pensar que esta revelación podía significar solo dos cosas: o que allí vivía alguien que escondía algo, o que esa casa era realmente un refugio para ladrones.

Siendo lo más sigiloso posible, decidisteis adentraros por esa trampilla para encontrar respuestas, y el primer hallazgo fue una escalera que descendía varios metros hasta lo que sería un túnel. Dicho conducto estaba reforzado con madera, el olor a humedad era bastante intenso pero al menos contabais con algo bastante necesario: luz.

Cada tramo del pasillo estaba adornado con antorchas que al estar encendidas os hacía pensar que allí podía haber alguien. Os preparasteis para lo peor, quién sabe si os teníais que enfrentar a una guarida de ladrones sanguinarios.

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Seguisteis avanzando por el túnel con cuidado hasta que finalmente se desveló una puerta redonda que tras girarse mostró una cámara también circular junto con una imagen impactante: allí había una mujer de ropajes ajustados que estaba moviendo o buscando cosas de un gran baúl que estaba arrinconado en la pared.

En el momento que os detectó su tez se tornó blanca y salió corriendo por un nuevo pasillo que había al fondo. ¡El momento era crítico!, ¿qué debíais hacer?

Tras el momento con Kislaya, la aparición del botón y el instinto irrefrenable de apretarlo y ver que pasaba... Los tres mercenarios bajaron a la primera plata de donde parecía proceder el ruido, una vez que la princesa se recuperó.

El demonio caminó todo lo sigiloso que pudo al lado de la muchacha, dedicándole alguna mirada furtiva acompañada de su intrigante sonrisa.

Cuando descubrieron a la mujer, Ratko lo tuvo claro había que ir detrás de ella y capturarla con vida para ser interrogada.

- ¡ESPERA, NO VAMOS A HACERTE DAÑO! - aquella frase nunca funcionaba pero por intentarlo, pensó mientras salía corriendo detrás suya.

Medio despertandome como de un sueño extraño... de la cama observé a Ratko y a la chica azul y cuando percicí que algo habian descubierto una trampilla activada en el suelo de la planta baja con un interruptor justo en el cabecero de mi cama, corri tras ellos escuchando a Ratko que gritaba a una persona pero no me habia fijado bien quien era... aun algo cansada del desmayo por la emocion del abrazo tan apasionado del semidemonio, asi que corri sin parar para atraparla bajando por la trampilla del suelo en ultimo lugar.

Cuando lo apretó agudicé el oído, aunque ni era necesario ya que el sonido se escuchó prácticamente por toda la casa. Seguida del grupo bajé las escaleras para ver la trampilla, ¿cómo pudimos dejarla escapar antes? Nos habíamos confiado y pasado por alto demasiadas cosas, acabando por echarle la culpa al poco discreto amorío de mis compañeros. Si tuvieran los ojos donde tienen que tenerlo, habríamos descubierto esto antes.

Tenía claro que luego hablaría claro y tendido con ellos, establecer un mínimo de normas con tal de ahorrarnos futuros disgustos. Sí, eso es lo que haría cuando termináramos de encontrar todo.

Bajé las escaleras con cuidado de no hacer ruido, sorprendida por la profundidad de éste escondrijo. De vez en cuando echaba un leve vistazo hacia atrás, por si alguien nos seguía o iban a encerrarnos, una posibilidad remota que no podíamos descartar todavía. Cogí una de las antorchas que adornaban los pasillos para iluminar mejor mi camino, alzándola en alto para no quemarme con la llama y enfocando los puntos clave que más interesante veía.

Tras llegar a la puerta esperé unos determinantes segundos para prepararme a lo que hubiera dentro, incluso a alguna trampa que se activara con movimiento. Lo que no esperaba era encontrarme con una mujer rebuscando en un baúl, huyendo poco después al detectar nuestra presencia.

A diferencia del resto, quienes decidieron ir tras ella, decidí no correr, simplemente quedarme quieta para inspeccionar el baúl y custodiar la entrada, convencida de que ellos se encargarían de atraparla.

Además, si ya había entrado una persona, no podía descartar que entraran más.

No podíais perder ni un segundo, esa mujer tenía respuestas a muchas de vuestras preguntas así que la única opción era ir tras ella haciendo alarde de vuestra velocidad.

Empezasteis a correr por los túneles intentando seguirla, pero ella era endiabladamente rápida.

Tras un par de minutos conseguisteis llegar al final del túnel donde una escalera ascendía hasta lo que podría ser el exterior.

Subisteis también para intentar acortar distancias pero no estaba poniendo las cosas fáciles.

En cuestión de segundos llegasteis a la salida de aquel refugio secreto, se trataba del pozo del pueblo y aún ella seguía a vuestra vista. Había que realizar un sprint para conseguir alcanzarla.

Sin perder tiempo, decidiste registrar el baúl para intentar encontrar lo que había en su interior. Tal y como dijo el Sr. Roger había muchas joyas, pero también había un pergamino que tras desenrollarlo mostró justo lo que andabais buscando.

Dicho papel contenía las escrituras de la mansión prímula ubicada en Villa Risueña. ¿Las escrituras pertenecían a esta misma casa? ¿este era el bien tan codiciado del Sr. Roger?

Técnicamente si llevabais esas escrituras a vuestro contratista habríais completado vuestra misión con éxito...

Ratko corrió tras la chica tratando de no perderle el rastro, en realidad el semidemonio era más bien de costumbres sedentarias, lo de hacer músculos era más bien cosa de soldados rasos o héroes aguerridos... Pero el caso es que ahí estaba él en plan caballero andante seguido por su princesa y tras una dama. La pregunta era, ¿aguantaría el ritmo de la olimpiada o terminaría resollando por el cansancio en una esquina?

Segui el ruido de los pasos que resonaban en el tunel...perder tiempo, era perder a la que tenía respuestas... así que corrí como si mis pies fueran mis alas... que solo el sol podia despertar...y asi continué corriendo veloz.

Empecé a correr por los túneles sin saber de Ratko y dejando atrás a la chica azul, al ver que ella aceleraba yo corría aún mas.

Tras un rato vi luz al final del túnel donde una escalera ascendía y subí los escalones de dos en dos.

Al fin vi donde mis pies me habían llevado... a una salida de lo que parecia un pozo del pueblo y en un ultimo sprint acelere para alcanzarla...la agarré al caer sobre ella en un salto y al tocarla active mi don sin soltarla.

Me agaché para quedar a la altura del baúl, mirando sin demasiado interés algunos de los objetos que había. Joyas de distinto tipo y colores, posiblemente perteneciente al botín de algún buen ladrón y, al fondo, escondida, un pergamino. Me incorporé mientras lo desenrollaba y echaba y leve vistazo tanto al camino por el que habían huido como a la entrada, pendiente de si había más movimiento, cuando comencé a leer.

Te tengo.- Había una posibilidad de que fuera lo que le habían mandado buscar, la cuestión era ¿qué hacía aquí y quién era esa persona? ¿Tal vez uno de los mercenarios anteriores que contrató?

Volví a enrollarlo con cuidado mientras lo guardaba, caminando hacia mis compañeros.