Partida Rol por web

Los Dhaeva de Transilvania.

TERRITORIO 36: Sfantu Gheorghe. - Tirsa de Covasna.

Cargando editor
13/11/2008, 19:35
Director I

Notas de juego

Cita:

Cuando estén ocupados apagándolo y "llorando" la muerte de su tiránico señor saldré para dirigirme a la parte de atrás de las murallas del castillo donde había quedado Iakov.

¿Eso lo has roleado?

XD

Es que debes postear como te escapas del castillo, para que yo pueda postear lo que hacen los demás intentando apagar el fuego. Además, así metemos a Iakov en la partida y os vais donde más os plasca.

Cargando editor
13/11/2008, 21:34
Knezi Radu Szantovich el Menor. - Conde de Covasna.

El fuego ya debía estar consumiendo toda la cama y con ella el maltrecho cadáver de Braul. El humo no habría tardado mucho en inundar todo el dormitorio con su pestilente aroma a carne quemada y buscaría salida por la angosta ventana y los bajos de la puerta. Ese sería el aviso de que la habitación ardía y el que le permitiría escapar cuando toda la servidumbre y guardias acudiesen como polillas a la llama (nunca mejor dicho).

Desde una habitación a oscuras esperaba paciente a que el silencio fuese perturbado por nerviosos pasos, y no tardó en pasar. Primero un trotar metálico que se alejó hacia el dormitorio, después unas voces que no consiguió comprender, el mismo trote de nuevo bajando las escaleras y multitud de pasos acompañados de alaridos corriendo a su habitación. Con destajo se dispondrían a apagar el incendio para que no se propagase, subiendo y bajando agua. Acudirían corriendo a pedir ayuda al destartalado poblado de Sfantu Gheorghe y, si tenían suerte y no morían, conseguirían apaciguar al voraz fuego.

La cuestión era salir cuando nadie pudiese verlo, cuando se hubiesen perdido en el recodo pasillo atrás, o cuando hubiesen bajado las escaleras. Intentado darse la mayor prisa posible irían por los caminos más cortos. Por eso Radu pretendía tomar un pasillo secundario poco antes de llegar a la escalera principal y seguir por un camino más largo, pero sin ajetreo alguno. Y así lo hizo, cuando el jaleo en el pasillo en el que estaba cesó –unos debían estar apagando el fuego y los otros buscando agua que echarle-, salió con cautela de la habitación en la que se escondía y varios metros después giró a la izquierda.

Ya estaba hecho y si nadie se perdía en el castillo no tenía por qué encontrarse con nadie. Siguió adelante, girando unas veces a un lado y otras al otro, parándose y pegándose a la pared cuando creía escuchar algo y, finalmente, alcanzó una escalera. Era de retorcidos y angostos escalones pétreos, sus peldaños giraban sobre su propio eje de la misma forma en la que lo hacía la concha de un caracol. Ahora estaba en la parte de atrás del castillo, solo le quedaba recorrer un par de pasillos para alcanzar la puerta trasera del castillo y salir al patio.

El sol estaba en la parte más alta del firmamento ligeramente tapado por varias nubes que se deshilachaban con los envites del fortísimo aire que soplaba en aquellos momentos. Aunque su dormitorio no daba a aquella parte del patio, podía ver como varias volutas de humo escapaban a su izquierda difuminándose en la altura. La muralla por aquella zona estaba medio derruida y había sido por allí por donde en el combate con Bran sus fuerzas habían pretendido colarse. Schaar en aquella ocasión consiguió repeler uno a uno a todos los atacantes que intentaron acceder al patio.

Buscó el boquete en la uniforme piedra y pasando agachado consiguió salir al otro lado. Ya solo quedaba esperar a Iakov, y no disponía de demasiada paciencia.

Notas de juego

Mira lo que me hacéis escribir... Os debería dar vergüenza.
No me gusta demasiado lo que he escrito, pero si era necesario para salir ¡¡YA!! de Covasna está bien. Imagino que lo editaré mañana para que quede más bonito, aunque me extraña que sea posible modelar la mierda.
Nos leemos.

Cargando editor
14/11/2008, 12:09
Iakov el Ensartaojos

Las palabras de Radu retumbaron en la mente de Iakov, que sólo sonrió. Aún podía oler la muerte mientras el caballo corría a través de la oscuridad. Las cosas se habían puesto en funcionamiento, por fin: el bautismo de sangre estaba a punto de ser consumado, bajo la voluntad de uno. Pero eso no era lo que le importaba a Iakov; no dudaba del rumbo que iban a tomar los acontecimientos. No al menos del que iban a tomar aquellos donde estuviera involucrado. Lo que le importaba trascendía todo lo demás, empezaba en su cuerpo y terminaba en él otra vez, como una gigantesca serpiente mordiéndose la cola. Las cosas siempre habían sido así, y lo serían siempre. Si existía una naturaleza, sin duda, era aquella.

Divisó el fuego y la agitación aún a cierta distancia. Las llamas incipientes se reflejaban en pequeños puntos en sus ojos brillantes. El fuego era el asesino más bello de la naturaleza, el torturador más efectivo de las cosas sobre la superficie. El caballo bajo su peso mantuvo la dirección aún cuando el aire traía los sonidos indudables del comienzo de una catástrofe. Iakov se detuvo para admirar la decadencia, sonriendo, y permaneció en un sitio de espectador privilegiado viendo cómo el fuego comenzaba a consumir las ruinas. Le parecía una imagen espectacular.

Sólo después de unos minutos, con tanta tranquilidad como si nada pasara cerca de él, espoleó al caballo para que se acercara a la muralla que le habían mencionado.

Notas de juego

Bueno, aquí estamos!

Cargando editor
14/11/2008, 13:27
Director I
Sólo para el director

Radu, sientes la gente correr detrás de ti, pero no buscándote o persiguiéndote, sino para apagar el fuego que se ha producido en la habitación. La gente hace lo posible y lo imposible para apagarlo, sin embargo, tu cuerpo yace sin vida en la cama, totalmente carbonizado, irreconocible, mientras escapas por la muralla.

La farsa al parecer, ha dado resultado.

Cuando te asomas al exterior, ves como un caballo se acerca al galope, espoleado por su jinete, una figura conocida para ti...

- Tiradas (1)

Tirada: 4d10
Motivo: Visibilidad de Radu
Resultados: 2, 2, 9, 6

Cargando editor
15/11/2008, 17:01
Director I

Radu, sientes la gente correr detrás de ti, pero no buscándote o persiguiéndote, sino para apagar el fuego que se ha producido en la habitación. La gente hace lo posible y lo imposible para apagarlo, sin embargo, tu cuerpo yace sin vida en la cama, totalmente carbonizado, irreconocible, mientras escapas por la muralla.

La farsa al parecer, ha dado resultado.

Cuando te asomas al exterior, ves como un caballo se acerca al galope, espoleado por su jinete, una figura conocida para ti...

Cargando editor
17/11/2008, 09:09
Knezi Radu Szantovich el Menor. - Conde de Covasna.

Cuando veía a toda aquella gente correr sin orden ni concierto a causa de la desesperación, cuando unos y otro gritaban dejando escapar así su frustración, Radu sintió el irrefrenable deseo de carcajearse una vez más, como tantas otras veces había hecho, de tan patéticos seres que habían recibido como presente algo a lo que no sabían sacar provecho. Aun así, por extraño que parezca, supeditó su soberbia a la sensatez y acalló tal muestra de euforia con una retorcida sonrisa parcialmente oculta bajo la capucha que cubría su rostro.

Durante un buen rato mantuvo su vista en el castillo sumido en el caos. Bajo el denso humo negro se podía percibir un leve fulgor rojizo que oscilaba en intensidad. Parecía una puesta de sol en miniatura y se divirtió pensando que aquello en verdad significaba el ocaso de aquellas tierras que, muy pronto, se verían sumidas en la oscuridad de su gobierno. La noche se acercaban y la sombra que la traería yacía sobre la cama consumida por las llamas.

El sonido de los cascos de un caballo lo devolvió a la realidad. Iakov se acercaba a galope al lugar que habían acordado y parecía disfrutar tanto como él del escenario que tenía a su espalda. Desconocía las razones por las que aquel mortal se podía deleitar con tal espectáculo, pero de una cosa estaba seguro, eran muy distintas a las suyas.

- Qué descortés por vuestra parte presentaros ante mí montando a caballo mientras mis pies descansan sobre la tierra- alzó las manos esperando que el caballo, como todos los animales parecían hacer en su presencia, relinchase y se encabritase hasta tirar a su jinete. –Es hora de ir al lugar al que habéis pensado guiarme, Iakov. Nada hay aquí que me interese, de momento.

Cargando editor
18/11/2008, 04:09
Iakov el Ensartaojos

Fue causa y efecto. El caballo se levantó en sus patas delanteras, relinchando ferozmente hasta que su gritar desesperado se fundió con el crepitar destructivo del fuego. Iakov tiró las riendas aferrándose como pudo, frente a aquella reacción que no esperaba. Apenas supo que su montura iba a tirarle, pues bajo sus muslos se convulsionaba como no lo había hecho ni de frente a las llamas mismas, optó por saltar en cuanto pudo a un costado. Sin soltar las riendas con la mano izquierda, Iakov aterrizó de una forma muy poco ortodoxa sobre el suelo, con uno de sus pies apoyado y la rodilla de la otra pierna flexionada. El polvo de la tierra seca y agrietada, más las cenizas que del aire tendían a caer para formar una capa de suelo nuevo, se levantaron a su alrededor hablando de la violencia con la que había tocado tierra.

Iakov se irguió de inmediato, y usó su fuerza para contener lo que su carisma no había podido. Mirando con fijeza a Radu, sin decirle nada, ayudó al instinto del caballo a salir de allí y se lo llevó a una distancia prudente, quitando al otro de su vista. Ató las riendas para evitar que se fuera, permaneció mirándolo unos largos segundos, y luego volvió hacia Radu con el gesto contraído en una pregunta de la que no esperaba ninguna respuesta. Caminaba con firmeza, sacudiéndose las ropas y acomodándose la espada sobre un costado.

- ¿Es que no tienes carisma animal, Radu? - dijo, arqueando las cejas. Era un gesto de burla que obviaba notoriamente la manera en la que la montura había decidido quedarse sin jinete, y un interrogante que detrás dejaba entrever una serie de consecuencias mayores a aquella simple trivialidad - Era lo único que te faltaba. Recorrer el mundo que quieres ver, a pie.

Se pasó la mano por el pelo, y sin ningún apuro se quedó contemplando el fuego. Su perfil se dibujaba perfectamente con el refulgir de las llamas que se llevaban lo que quedaban de las ruinas del poder, que se estaba llevando una identidad, y no tenía idea qué más podía significar. No le importaba. La devastación se completaría cuando los gritos cesaran y el asesino se hubiera cobrado a una víctima inexistente. O al menos, la que Radu hubiera puesto en su lugar, pues quedaría totalmente irreconocible. Todo cuanto se quemara quedaría allí, desconocido. Todo lo que estuviera allí para quemarse. Y lo que no estaba...

La sonrisa de Iakov cuando volteó hacia Radu era inmensa.

- Me imagino que tu cadáver tendría sus ojos puestos, ¿no?

Sin esperar respuesta, dirigió la mirada hacia los caminos que ya había marcado, a vista y sangre. Levantó su mano diestra, y con el índice, apuntó al horizonte nocturno infinito, ubicando la dirección cardinal austral. De nuevo, sin esperar más, comenzó a caminar hacia allá sin dejar de sonreír. Sólo cuando pasaron al lado del caballo, Iakov volvió a hablar. Lo hizo negando con la cabeza, deteniéndose a mirar al hermoso especímen, como si pensara llevárselo de todas maneras.

- Es un desperdicio tener semejante animal, Radu, y no la capacidad de montarle.

Tras ello, dio vuelta la cara, y enfiló de nuevo hacia la dirección señalada. La dirección de la que había venido.

 

- Tiradas (2)

Tirada: 8d10
Motivo: El caballo
Dificultad: 6+
Resultados: 3, 4, 5, 4, 10, 4, 1, 3
Exitos: 1

Tirada: 1d10
Motivo: Repetir 10.
Dificultad: 6+
Resultado: 1 (Fracaso)

Notas de juego

Bueno, no es del todo importante, pero interpreto que ante lo de que el caballo se encabrita, Iakov va a necesitar tratar de calmarlo. Tiro dados por Trato con Animales y le fijo qué tal desde allí, ¿vale?

... XDDD Dioses.

CONFIRMACIÓN DEL DIRECTOR V: El caballo se encabrita de tal manera que Iakov da con sus huesos en el suelo, ante lo que los ojos del Knezi Radu centellean con demoníaca diversión...

Cargando editor
19/11/2008, 16:39
Knezi Radu Szantovich el Menor. - Conde de Covasna.

 

Observó risueño la reacción del caballo mientras deslizaba las manos bajo la capa. La sonrisa no había desaparecido aun cuando habían iniciado el camino a no sabía dónde. –Oh, sí. Radu dispone de un hermoso corcel negro, y tiene un nombre a la altura de su despreciable dueño: Mortificador- envuelto en sus ropajes negros, la oscuridad siguió los pasos del macabro caballero de brillante armadura.- Pero yo, como ya has visto, no disfruto del aprecio de las bestias de este mundo.- la sombra que proyectaba su silueta seguía adoptando la forma, ahora reconocible por Iakov, del demonio que habitaba en su interior. –Resulta cuanto menos curioso, que los animales sin un supuesto intelecto huyan de mí en cuanto me aproximo a ellos y los hombres, aun con los preceptos de una falsa religión, sean capaces de aceptar mi presencia.- con malicia pretendió observar alguna reacción en su guía, algo parecido a lo que había percibido cuando el caballo lo había desmontado.

- Respecto a los ojos a los que hacías mención antes- entrelazó los dedos a la espalda mientras alzaba la vista al cielo con pretendida inocencia. –Sería una verdadera lástima que descubriesen las cuencas del cadáver de Radu completamente vacías. Alguien muy retorcido podría llegar a pensar que Iakov “el Ensartaojos” ha vuelto a hacer de las suyas…-

 

Cargando editor
21/11/2008, 14:34
Iakov el Ensartaojos

La reacción de Iakov fue romper en carcajadas. Sus risas quedaron tapadas por la banda sonora ambiente de la catástrofe, pero agitaron el aire a su alrededor. Continuó caminando sin mirar a Radu, acompañando sus pasos con un movimiento de la cabeza que en otra persona hubiera significado una profunda negación. En él, sólo significaba una burla.

Al final, se dio vuelta. Miró a Radu con una media sonrisa, y se detuvo. Pareció ir a decirle algo: sus ojos recorrieron la armadura de su acompañante, hasta su mínimo detalle, pero finalmente no dijo nada. Se limitó a reírse nuevamente, a volver a negar, y a dirigir su mirada al sitio desconocido para Radu al cual él se estaba dirigiendo. El caballo, y todo lo otro, iban quedando paulatinamente atrás.

- Sí, a los animales no les puedes engañar con tu sarta de palabrerías. Tienen la suerte de no entender tu lengua.

Apoyó su mano izquierda sobre la vaina de su espalda.

- Mortificador... Qué nombre de mierda.

Iakov todavía sonreía, como si algo de todo aquello le hubiera producido una alegría extraña, visceral.

- Quiero llegar antes que apaguen la mitad del fuego. Apúrate, Radu.

Sus pasos eran largos, pesados y rítmicos. Marcaron el camino en dirección a la bifurcación.

Cargando editor
21/11/2008, 19:25
Director I

Notas de juego

Decirme donde viajáis, por favor...

;)

Cargando editor
22/11/2008, 17:05
Iakov el Ensartaojos

Notas de juego

A la ciudad M.

:D

Cargando editor
22/11/2008, 17:17
Director I

Notas de juego

¿A la ciudad M?

Madre mía... dime un nombre que si no no puedo pasaros de territorio...

Y no me vengas con anagramas, que el misterioso soy yooooooooooooo...

XD

Cargando editor
22/11/2008, 17:25
Iakov el Ensartaojos

Notas de juego

No, nada de anagramas. Es que teníamos a la ciudad K, y ahora a la ciudad M.

Mercurea Cuic, dirección norte, contraria a Kronstadt.

Cargando editor
25/11/2008, 13:44
Knezi Radu Szantovich el Menor. - Conde de Covasna.

 

- Encontrar un motivo de discusión en el nombre de un caballo-… Radu no se sentía ofendido en aquellos momentos por las reacciones de Iakov, es más, era una especie de aliciente. Como un sabueso buscaba a su presa, olisqueaba con la esperanza de percibir el olor de la sangre para derramar con plena conciencia sal sobre la herida. - Iakov, cualquiera que te escuchase te creería desencantado con la vida. Debéis haber padecido una juventud desdichada.- ironizó. -¿Tú padre te sodomizó?, ¿algún aristócrata abusó de ti?- seguía el ritmo que marcaba su guía, ni más deprisa, ni más despacio esperando notar una reacción a su discurso en la cadencia de sus pasos.

Era curiosa la fijación que los humanos tenían en la defensa de sus progenitores. Generalmente solían enfrentar peor una ofensa a su madre, que una a sí mismos. Jugaría un poco con aquello. -¿Tu madre fue violentada?- añadió con malicia.

- Además está esa fijación por los ojos… Os compadezco, mi estimado Iakov, realmente os compadezco.- Aun no había vislumbrado una muestra de ira clara, y esperaba conseguirlo.

 

Notas de juego

No tengo armadura Venifer :(, la reventé cuando me convertí en demonio contra mi voluntad. Solo voy vestido con unas ropas de noble, mis armas y una capa con capucha con la que cubrir la ostentosa ropa que visto.

Cargando editor
28/11/2008, 03:29
Iakov el Ensartaojos

Iakov no dio vuelta la mirada. Siguió caminando con la misma firmeza y rapidez que antes, sin variar el ritmo de sus zancadas, mientras Radu hablaba tratando de encontrar la grieta en la que meter la uña. A pesar de no dignarse a mirarlo, porque no creía que aquello mereciece siquiera un momento de su tiempo, Iakov sintió una repentina curiosidad acerca de cuál sería el motivo de semejantes declaraciones. No lograba hacerse una idea concreta de por qué se le había dado a Radu en saltar con aquellos temas, ni se imaginaba de ninguna manera qué era lo que esperaba conseguir con ellos. Entonces, una sonrisa asomó por sus labios y se extendió como veneno por su gesto. Acababa de darse cuenta que su incomprensión hacia la charla de Radu obedecía, simplemente, a una expectativa errónea: lo creía capaz de un intento más efectivo de tratar de hacerle montar en ira.

Sin dirigirle los ojos, y sonriendo de aquella manera brutal, Iakov meneó la cabeza. Había una sola cosa que le molestaba de todo lo que había dicho Radu; y luego de haberse dado cuenta de lo anterior, aquello se había tornado incapaz de afectarle.

- Espero que no pases todo el tiempo preguntando estas idioteces - respondió Iakov, mirando hacia los lados sin mover la cabeza para verificar que el rumbo fuera el correcto - ¿Compadecer, dices? - allí fue una carcajada, como si aquello más que enfurecerle le causara una profunda gracia, o lo que en una persona ordinaria hubiera sido compasión por la locura del compañero - No jodas. Hablas como si en esos jodidos tormentos eternos, que te gusta traer al recuerdo cada dos o tres palabras, te hubieran follado muy duro - la risa se le cristalizó en los labios, ausente de sonido - ¿Fuiste follado por tu Dios, Radu, o eso no fue parte de la tortura?

Notas de juego

Vale. Entonces omitimos referencia a la armadura :P

Me disculpo por el lenguaje XD

Cargando editor
28/11/2008, 18:25
Knezi Radu Szantovich el Menor. - Conde de Covasna.

Notas de juego

Acciones estratégicas de esta estación:

- Viaje a M (no me apetece mirar el nombre y no tengo memoria suficiente como para recordarlo)
- Subir FV
- Subir Resolución (por fín)

Saludos.

Cargando editor
29/11/2008, 21:33
Iakov el Ensartaojos
Sólo para el director

Notas de juego

Acciones estratégicas:

Por lo pronto, Explorar. Ya lo hizo: Covasna y alrededores, al menos todos los caminos que salen de ella.
Entrenamiento: Pelea e Intimidación.

Esas son las tres acciones.

Perdón por la tardanza.

Cargando editor
30/11/2008, 14:51
SITUACION

- El Knezi Radu el Menor y el infame bandido Iakov el Ensartaojos abandonan la Tirsa de Covasna.

Cargando editor
01/12/2008, 10:16
Director I

RESULTADOS DE PRIMAVERA: CONDE RADU EL MENOR:

- Knezi Radu Szantovich el Menor:
1) Entrena Fuerza de Voluntad.
2) Aumenta Resolución.
3) Preparar su falsa muerte y viaje a Miercurea Cuic.

- Iakov el Ensartaojos:
1) Explorar la región (y matar supervivientes).
2) Entrenar Pelea.
3) Entrenar Intimidación. Como su intimidación está al máximo entrena en su lugar expresión.

Notas de juego

- No hemos encontrado mención expresa de los escasos guardias y sirvientes que quedaban en el castillo. Entendemos que los que no estuvieran muertos, huyen de la región y desaparecen para siempre.

- El cadáver carbonizado, supuestamente del Conde de Valcea, no tenía ojos. Un investigador lo bastante bueno podría deducir que no los tenía cuando se quemó el cuerpo.

-Los caballos quedan libres y huyen de la región.

Cargando editor
01/12/2008, 12:49
Director I
Sólo para el director

SUCESOS DE VERANO: SFANTU GHEORGHE:

- Toda la Tirsa de Covasna permanece mortalmente tranquila.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: Verano
Resultado: 54