Partida Rol por web

Temblando. Así es como se quedó Ragab ante la locura que estaba viviendo. Temblando de rabia y frustración al no haber podido separar a la mujer para salvar la vida de Nerthus. Temblando de miedo ante las palabras que le dedicaba la egiptóloga. Temblando porque la palabra traidor calaba en su corazón como una espina clavándose muy hondo. No se consideraba especialmente supersticioso, lo único que había deseado en toda su vida era trasmitir la cultura y las costumbres de su gente, su historia, sus creencias, y la palabra traidor que Nerthus le había dedicado hería su alma, planteándose si aquella mujer, la misma a la cual veía expirar ante sus ojos, no estaría diciendo la verdad.

¿Estaría marcado para el resto de su vida ante los suyos como ella decía? ¿Los dioses le abandonarían?

Escuchó la agonía de Nerthus sin poder hacer nada por ella, sintiendo la calidez de unas lágrimas recorrer sus mejillas, las mismas que no había derramado por la chiquilla muerta cerca de ellos. Pero a Nerthus la conocía, habían coincidido en más de una ocasión y siempre había sido una mujer a la que honrar y admirar, por lo menos hasta ese mismo día en que todo se había torcido, en que la sombra de la locura había sobrevolado sobre ella dominándola.

Ragab fue incapaz de pronunciar palabra alguna en voz alta pero elevando al cielo una plegaria silenciosa por el alma de las dos mujeres que se había cobrado esa pirámide durante ese día, y también por la suya y la de aquel matrimonio que, maldita la hora en la que lo habían contratado, habían perdido mucho en aquel viaje.

Todos habían perdido en esa excursión que nunca tendría que haber aceptado.

Retrocedió un par de pasos, separándose de aquellos que tantas desgracias habían traído a su vida, mirando asustado la marca que las uñas de Nerthus, con su último aliento, había dejado en la frente de Megan, desviándola después para no tener que seguir contemplando tanto horror. Fue cuando sus ojos se encontraron con los objetos que Nerthus portaba, reconociendo entre ellos dos de los medallones. Se acercó para recoger sólo uno de los colgante, el mismo que había visto colgado al cuello de Nerthus tantas otras veces, para guardárselo en el bolsillo. Del resto no quiso saber nada más.

—Tenemos que salir de aquí como sea.

Notó que incluso la voz le temblaba, pero sabía que tenían que escapar al mal de aquella pirámide cuanto antes, si no querían morir ellos también allí dentro.

Luca se arrodilló junto a Nerthus mientras se le escapaba la vida y le dijo

"Vieja loca, tu me has arrebatado mi vida y yo te arrebataré tus sueños, no eres la sacerdotisa de nadie, solo eres una loca, una vieja loca asesina que ha segado la vida de una niña pequeña y buena... Tu harás compañía a este soldado y nadie te recordará, me gastaré hasta el último de mis dolares en borrar tu legado y tu cuerpo será alimento del diablo en el infierno... Yo te maldigo por toda la eternidad. Muere asesina, deja de ensuciar este mundo con tu presencia"

La anciana murió y Luca la dejó allí sin taparla de ninguna manera. Ragab lloraba lo que no había llorado por su hija, pero les apremiaba a salir de la pirámide y muy a su pesar lo necesitaba. Luca lo miró con lágrimas en los ojos y lo único que pudo hacer es cabecear afirmativamente.

Como en un sueño nota que alguien (Ragab) intenta alejarla de su presa,separarla de ella para que no cumpla su venganza pero no lo va a conseguir,va a matarla,va a acabar con la asesina de su hija.No escucha las palabras de la mujer,no nota su odio,su locura,ni siquiera ve que Luca está también junto a ella,atacando a la mujer.Como si estuviera fuera de su cuerpo nota las garras de la mujer en su  rostro,arañándola,dejándole unas profundas marcas en la frente que apenas nota en esos momentos.Con un grito triunfal Megan estruja sus manos contra las heridas de la vieja mientras ésta cae al suelo,inerte.Con las manos llenas de sangre y la mirada perdida Megan mira el cuerpo de la mujer a la que acaba de quitar la vida,la mujer que ha matado a su pequeña.Luca habla,está diciendo algo ¿o es Ragab?Ese maldito hijo de puta llora por la vieja bruja pero ni siquiera ha mostrado un poco de compasión por su hija.Malditos sean los dos,maldita la hora en la que pisó este lugar.Cansada,como si hubiese envejecido mil años,se dirige hacia su niña y se deja caer de rodillas junto a ella,apoyando la cabeza en el pecho de la pequeña mientras las lágrimas salen de sus ojos sin que ella se percate siquiera

-"Ya está,cariño,la he matado,ya tiene su merecido,mi amor,mamá está aquí contigo,como siempre"-susurra al cadáver de su hija,cogiéndole una de sus frías manos

Luca miró a su esposa y pareció como si la viera por primera vez. Nunca desde que la había conocido había sido agresiva, más bien todo lo contrario, una damisela en apuros que reclamaba la salvación de cualquier caballero andante que entrara en su radio de acción, y ahora había matado a una mujer y había perdido una hija. Luca dudó en que hacer, si bien era cierto que quería a Rebecca no era su hija natural y cualquier comentario que hiciera podría volverse en su contra, podrían culparle de una situación que él no había provocado. Por queé demonios no le hicieron caso y se quedaron atrás? Solo habría un cadáver, el suyo,  la niña seguiría viviendo.

Luca se arrodilló al lado de Megan y tomó la otra mano de la niña, en silencio, mientras las lágrimas caían sin remisión por sus mejillas, como los ríos buscando el mar. Ella lo había amado, pero para él siempre sería su hija, pero no aquel bicho que había demostrado ser al entrar en la pirámide sino aquella niña algo distante con la que intentó cultivar una relación paterno-filial del mismo modo que plantaba las uvas en terreno poco fértil, con cariño, con paciencia, con infinita humildad.

Luca miró a Megan a los ojos y le dijo

"Amore, tenemos que irnos. Tenemos que salir de aquí. Me dejas llevar a Becca?"

Luca.

Su marido

Su amante

Su compañero

El amor de su hija

Su amigo

El hombre que había demostrado una paciencia infinita con ellas dos,el hombre que día tras día trataba de llegar a su corazón,de entenderla,de hacerla feliz,de hacer feliz a su hija.Recordó el día que se conocieron en aquella exposición,la forma en la que él se acerco y el modo en el que su corazón se aceleró cuando se fijó en él.Nunca se lo había contado,jamás le había demostrado lo mucho que su presencia la perturbaba,lo mucho que sus caricias encendían sus sentidos y cómo su acento la enternecía y provocaba en ella mil sensaciones excitantes.Jamás se lo había confesado y,sin embargo,él le pidió matrimonio y su hija se dio cuenta de la verdad aún antes incluso que ella misma.Le amaba,amaba a su marido y ahora sólo le quedaba él y quizás uno de los dos o los dos morirían en esa horrible pirámide y ella no se lo habría dicho

La revelación hizo que Megan mirase a Luca aún con las lágrimas corriendo por sus mejillas,mezcladas con la sangre que las heridas de esa mujer le habían ocasionado.Los ojos de la mujer expresaban algo que Luca jamás había visto en ellos:un cariño y un amor tan profundos que la joven parecía incluso asustada.Sin decir nada Megan se abrazó a él,besándole con pasión y desesperación,sollozando y susurrando junto a sus labios

-"Te amo,te amo,Luca,lo siento,Becky tiene razón,siempre te he amado"-le cogió la cara con dulzura,besando al hombre con todo el amor que había estado conteniendo hasta ahora-"No podemos dejarla aquí,por favor,es mi niña,no podemos abandonarla"-consiente a las palabras de él sobre llevarla en brazos.Se vuelve a su pequeña y la besa con dulzura antes de ponerse en pie y mirar con frialdad al árabe

-"Sáquenos de aquí cuanto antes"-le dice mientras Luca coge a su hija

Luca tenía el corazón roto y Megan le besó desatando una tormenta de sentimientos y sensaciones. Se sentía feliz que por fin su mujer se hubiera abierto a él, como una de esas viñas cultivadas en terreno difícil que al final acaban dando los mejores caldos, pero por otro lado su corazón estaba de luto como para responder con la misma pasión que Megan y.... sentía que estaba mal besarse delante de una niña, casi una mujer, que lo había amado, era como refregarle por la cara que el amor de Luca era para su madre mientras ella tenía que conformarse con el dulce sueño del olvido.

La miró a los ojos con los ojos anegados en lágrimas mientras le decía

"Io lo so (Yo lo sé), siempre lo he sabido.... Ahora mírame Megan" En la voz de Luca subyacía un sentimiento de urgencia "No vamos a dejar a Becky aquí, yo la llevaré, pero es muy importante que estemos juntos en esto, todos... " Dijo mirando de reojo a Ragab "Unidos es probable que no lo consigamos, pero solos es absolutamente seguro que moriremos todos..."

Luca se agachó con infinita dulzura y cogió el cadaver aun caliente de Rebecca en brazos mientras miraba a Ragab.

"En marcha, salgamos de aquí antes que está pirámide acabe con nosotros"

Era una tragedia, pero sería aún mayor si seguían lamentando las muertes sin hacer nada para salir de allí. Los siguientes podían ser ellos y Ragab ya había tenido suficientes muertos por el momento. Nunca tendría que haber aceptado aquel encargo, nunca tendría que haber cedido ante sus ansias de ser reconocido como uno de los mejores guías de Egipto, nunca tendría que haberse dejado arrastrar por la ilusión de mostrar a aquella familia una ruinas que no deberían haber profanado. Pero ahora todo eso ya no importaba, la fama y el reconocimiento eran estupideces cuando de salvar la propia vida se trataba.

Sin embargo, Ragab se prometió que, ya que no podía haberles ofrecido el viaje que esa familia había deseado, ya que no había podido salvar la vida de la joven ni de Nerthus, conseguiría sacar a la pareja de la pirámide.

—No hemos tenido suerte hasta el momento recorriendo los pasillos y las distintas salas que nos hemos encontrado. Quizás deberíamos ir hacia el centro de la pirámide, la sala central... Puede que allí encontremos la salida o, por lo menos, algo que nos indique cómo escapar de aquí.

Esperaba no tener demasiados problemas con aquellos dos a partir de ese momento ya que, como comenzaran a debatir cualquier idea que se les ocurriera entonces no saldrían nunca de allí. Sin agua, sin comida y sin nadie que supiera que habían ido a aquel lugar, no durarían apenas un par de días.

Luca frunció el ceño de forma pensativa. El centro de la pirámide la salida? No entendía mucho de pirámides pero en las edificaciones normales éstas solían estar en los extremos y nunca en el centro, pero Ragab era el experto, y si creía que lo mejor era eso podía tener razón, debía tenerla, deseaba que la tuviera.

Luca hizo un recuento mental de lo que habían recorrido y dijo

"Señor Ragab, sin ánimo de menoscabar su autoridad académica, creo que para ir a la sala central debemos volver  a atravesar los gatos. Nos quedan por probar la habitación 14....y el salto de la 10...No nos convendría explorar primero esta ala de la pirámide?. Entiendo que hacer un salto de ese tipo no es atractivo, pero si allí se esconde algo vital tendríamos que pasar una vez adicional por los gatos para volver a afrontar ese peligro.... Visitamos 14 y luego decidimos que hacer con las estacas?"

Ragab miró al hombre con gesto cansado y, encogiéndose de hombros, asintió a lo que él decía. Si quería ir a la sala catorce irían a la sala catorce, a esas alturas y después de todo lo que habían vivido no tenía pensado perder el tiempo con discusiones. Si el italiano quería arriesgarse a saltar sobre afiladas estacas, saltarían sobre las afiladas estacas aunque, desvió la mirada hacia la mujer antes de contestar, pensando si sería capaz de hacer aquel salto dado su estado de ánimo.

—Señor Visconti, ¿cree que será capaz de evitar los obstáculos que, con toda seguridad, nos encontremos cargando con el cuerpo de la niña?

El egipcio se había propuesto salir de allí con vida y junto a los otros dos supervivientes, se lo había prometido a sí mismo, pero ya empezaba a arrepentirse de tal promesa al darse cuenta de que, cargando con el cuerpo, no serían capaces de avanzar tan rápido como él deseaba. Eso sin contar con los múltiples obstáculos que aparecerían en su camino y que habría que salvar.

Pero si quería ir a la sala catorce irían a la sala catorce. Y si luego querían arriesgarse saltando sobre las estacas... saltarían sobre ellas y que Alá los protegiera.
 

Luca lo sabía pero no estaba listo para admitirlo, menos con Megan a su lado, podría cargar a la niña durante cierto tiempo y después el peso muerto de sus 40 kilos lo agotarían. Ragab lo había visto y a su manera le estaba recomendando dejar el cuerpo de la niña, y era un buen consejo, cabal, racional, pero Luca no estaba todavía dispuesto a dejarla, no mientras el acarrear el cuerpo de su angelino fuera en detrimento de poner en riesgo las vidas de los demás.

"Signore Ragab, es posible que......" Luca se encogió de hombros y simplemente dijo "Insha'Allah" (Allah proveerá o si Allah quiere)

-Parece dormir-mira la dulce cara de Rebecca apoyada en el hombro de Luca.Esa imagen la lleva a otros recuerdos más antiguos,cuando su ex-marido subía a la niña a la habitación porque se había quedado dormida en cualquier parte.La imagen era tan similar a ésta que dolía,porque ahora su hija dormía,sí,pero para siempre y su cuerpo manchado de sangre así lo atestiguaba

Oía hablar a los hombres,oía lo que decían y lo que insinuaban y sabía que tenían razón pero ella no iba a dejar allí a su hija,nunca,jamás.Si tenía que quedarse con ella lo haría,podían ir ellos a buscar la salida y quizás luego volver a buscarla...o no,realmente le era indiferente,su vida había terminado en el mismo instante en el que su hija había muerto.Miró a Luca y esbozó una triste sonrisa.Sí,estaba decidido,les acompañaría hasta donde Luca aguantase y luego...Luego las cartas ya estaban echadas

-"Me parece bien ir a esa sala pero no creo que debamos saltar esas estacas,es una locura y hay muchas otras salas que no hemos inspeccionado.Ragab,nos ponemos en sus manos"-dice ne tono cansado apoyando una mano en el hombro de Luca mientras acaricia el pelo de la niña.La adrenalina del momento ha desaparecido y se encuenta agotada,como si necesitase echarse a dormir,pero ya habrá tiempo para eso.Miró a Becky y sonrió-Pronto,mi amor,pronto-"Adelante"-indicó a los hombres

La gran sala a la que acababais de ganar acceso fue en su momento una trampa. Lo supisteis porque todo a vuestro alrededor estaba lleno de sangre y todas las puertas abiertas de par en par.

¿Habría pasado la difunta Nerthus por aquí anteriormente?

Os llamó la atención que lo único que había allí era un altar donde una daga ceremonial oxidada permanecía sobre él.

En una de las paredes había un jeroglífico, si se tenían los conocimientos necesarios se podría traducir su significado.

La sangre es la llave