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Matagigantes I: La Batalla de Colina Marcasangrienta.

2. - ¡Trunau bajo asedio!

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30/06/2019, 20:00
Dagfinnr el Vikingo.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR.

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Los primeros orcos de la nueva oleada ya habían llegado, y el vikingo blandía su espada para atacar a diestro y a siniestro. Sin perder la posición, aguantaba la llegada de los enemigos. Pero eran pocos luchando contra muchos, y dependían de la terrible fortaleza y los ataques letales de Win, convertido en un gigantesco titán que protegía el último bastión de la defensa de Trunau.

La oscuridad era otro inconveniente. Costaba distinguir a los enemigos en la penumbra.

-¡POR TRUNAU!, gritó Dagfinnr y golpeó nuevamente. -NECESITAMOS CURACIÓN. Y LUZ. ¡SEGUID LUCHANDO!

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30/06/2019, 23:27
Tronquito.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR.

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.


Tronquito, empeñado en hacerse con aquellas redomas promesa de curación, no fue consciente de cuanto ocurría en su derredor. Solo cierta insistencia a sus espaldas, le hizo volverse y ver la varita que le tendían. Asintió en silencio mientras un grito desgarrador, procedente de una garganta que hubiera reconocido entre un millón, le provocó un temblor que recorrió su cuerpo de parte a parte.

Se alzó, a tiempo de ver a caer a Momo a manos de un orco exultante. Su cabellera se volvió repentinamente mustia, pero la mano aferró con más fuerzala varita. No lo dudó. Recogió su ballesta y avanzó con paso decidido al corazón de la batalla. A salvar a su amiga. A salvar a sus compañeros.

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01/07/2019, 16:10
Ekaterina Illhart.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR.

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Ekaterina volvió a sentir el dolor de la carne abierta y la humedad de la sangre mezclándose con el sudor del esfuerzo. El orco causante de aquello sintió a cambio la satisfacción de haber causado un daño que no le fue devuelto, porque la muchacha a pesar de sus intentos falló por dos ocasiones al intentar cobrarse  la sangre con sangre. Por suerte sus fracasos no duraron y al hacer uso de la otra mano sus garras se hundieron en el enemigo congelando en sus ojos el brillo de la victoria.

Pero no era tiempo de regodearse. Las oleadas de orcos parecían inacabables. Si seguían llegando a ese ritmo terminarían por barrerlos por completo por mucho que las bajas enemigas fueran superiores, porque ellos, al contrario que los orcos, carecían de refuerzos infinitos.

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01/07/2019, 20:58
Dragos Florescu.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR.

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Si antes la cosa ya pintaba mal, ahora, tras esforzarse mucho todos, especialmente los orcos, todo había ido a peor. Heridos agonizantes, si no muertos, por doquier. El levemente tentador aroma de la sangre derramada embriagando el aire. Y, lo peor de todo, una bestia pielverde peligrosamente cerca de su posición, tras haber derribado a la gnoma. Aquello tenía que ser anulado, y Dragos lo sabía. 

Por eso hizo uso de sus poderes de nuevo, intentando hacerle perder tiempo, para que alguno de sus compañeros aprovechara esos valiosos segundos. 

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01/07/2019, 22:39
Willbur Cole.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

El combate se complica cada vez más. Ahora los orcos han llegado a mí. Antes de reaccionar, tengo a uno encima. Saco nervioso la daga, intentando atacarle, pero no es mi fuerte.

Un grito a mis espaldas hace que se me hiele la sangre. Me hundo entre mis compañeros, buscando su protección para seguir usando aquello con lo que sí mato.

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01/07/2019, 22:57
Win.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Win destripó a dos nuevos orcos con un barrido de su arma, limpiando más la zona de enemigos... o ensuciándola más con cadáveres, sangre y vísceras, según se viera.

Escuchó el grito agudo y moribundo de Momo y advirtió cómo un orco se había colado por esa zona, atacándola y abatiéndola. Apretó la mandíbula de rabia, con la intención de retroceder y ayudarla, pero la nueva oleada ya estaba llegando y él debía ser el principal muro para intentar contenerlos.

Murmuró una plegaria a Iomedae esperando que la pequeñaja sobreviviese y que alguien la auxiliase, mientras que él alzó su montante, dispuesto a descargarla contra los nuevos orcos que se aproximaban.

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02/07/2019, 04:52
Peludo.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Los orcos saltan la barricada para continuar con su invasión mientras que los héroes se oponen a ellos como si fueran los únicos en Trunau haciéndolo. Uno de los orcos se acerca a Peludo y él sabe que eso es peligroso pues no podrá utilizar sus poderes psíquicos sin provocar que sea atacado. Es por eso que decide alejarse un poco de un ágil salto.

Cuando ya está a distancia segura, se concentra en sus poderes psíquicos y apunta a uno de los orcos más cercanos. Un golpe en el cerebro del piel verde hace que su nariz sangre un poco y se nota que parece un poco aturdido en sus movimientos. El gato sabe que no es mucho, pero es el pequeño grano de arena que puede aportar en esta lucha que no tendrá tregua ni siquiera por los diminutos mininos.

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02/07/2019, 10:18
Tronquito.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR.

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.


El ghoran avanzaba al máximo de su velocidad, la mirada fija en el cuerpo tendido de Monique. Incluso se hubiera dicho que jadeaba si tal cosa hubiera sido posible en un ser fotosintético. Pero no. Su boca entreabierta tan solo reflejaba el diálogo que mantenía consigo mismo en plena carrera.

-Pe...pe... Pero será inconsciente. Dijimos de estar juntos. Todo el tiempo. Y mírala. En el otro extremo. Y encima la han herido. Y mucho. Si sale de esta, la mato. Darme estos sustos -barbotaba nervioso y en un murmullo, sin saber siquiera lo que estaba diciendo-. Por las bellotas de Iomedae y las calabazas de Shelyn, cómo es posible ser tan pequeña y tan testaruda. 

Metro a metro la distancia iba reduciéndose, y con ello mejorando la visión de la terrible realidad. Vio la pierna prácticamente salada, la sangre, el rostro pálido de Monique.

-Ya llego, pequeña. Ya llego. 

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02/07/2019, 16:55
Ekaterina Illhart.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR.

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

El ciego que no parecía tal por la forma en la que se desenvolvía en combate, consiguió acabar con la vida de otro de los asaltantes y Ekaterina se vio en un instante obligada a dar media vuelta para enfrentar a los enemigos que rodeándolos se habían situado a su espalda. De allí había escuchado varios gritos agónicos que le habían hecho temer lo peor en cuanto al destino sufrido por sus aliados. Entonces con gusto se hubiera girado para poner fin a sus dudas, para ver, muy a su pesar, quién había sido el desdichado y la magnitud de la desdicha que le había llegado, pero hasta entonces le había resultado imposible hacerlo.

Ahora sí podía, y al hacerlo vio el cuerpo de Momo en el suelo. No se detuvo a pensar lo peor ni a preocuparse por su estado porque hasta el más leve descanso podía dar ventaja a los orcos para acabar con lo que esperaba que no hubieran acabado. Así pues avanzó hacia el más cercano y descargó un golpe que si bien no le mató al instante, le causó suficientes daños como para que poco después cayera desangrado.

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02/07/2019, 18:27
Orco.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR.

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Más y más orcos rebasan las defensas exteriores de Trunau y se internan en la ciudad. Los gritos y aullidos, sumados a algún que otro tambor de guerra que resuena de forma esporádica parece que sumen a los pieles verdes en una especie de ansia asesina. Un ansia que les nubla la mirada y les impide ver las pérdidas que están sufriendo a manos de los Trunauanos. 

Alguno de sus mejores soldados ya han caído, pero los orcos no parecen darle importancia, pues más y más de ellos continúan avanzando por la ciudad. ¿Qué puede temer un enemigo que parece infinito? ¿Unas hordas por las que, por cada individuo que cae, lo suplen otros tres? ¿Qué puede hacer retirarse a un enemigo que no tiene nada que perder salvo su vida? Y más aún... cuando esas vidas no les importan.

Uno de ellos observa a los escasos humanos que continúan tratando de hacerles frente. Siente lástima por ellos, pero se merecen ese destino. Brama un grito de guerra y se lanza al ataque junto a los demás.

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02/07/2019, 22:45
Peludo.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR.

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

La batalla es más encarnizada que nunca para el pequeño gato, que ha atacado alejándose de un orco pero pareciese que siempre hay un nuevo orco para llegar a hostigarle. El felino no sabe qué más hacer pues su poder no es suficiente para derrotar a un feroz orco y no tiene los músculos y la fuerza de los humanos para poder combatirle. Lo suyo son los poderes psíquicos pero casi se le han agotado y no tienen la potencia para eliminar a los enemigos como los espadazos de Win o las flechas de Willbur.

"No sé cuanto más podré resistir."

La fractura en su columna, en el inicio de la cola, le duele constantemente y le incapacita para moverse con soltura.

"Necesito protegerme más."

Planea usar uno de los pocos restos de energía psíquica que le quedan para aumentar sus defensas pero debe alejarse para hacerlo pues el orco a su lado podría aprovechar su concentración para atacarle, por lo que decide realizar un salto para esquivar el arma del piel verde y poner tierra entre ambos.

Lamentablemente, justo cuando sus pequeñas y peludas patas le impulsan, un fuerte dolor le recorre desde la cola a la cabeza, volviendo su movimiento torpe. El orco aprovecha el instante para lanzarle un corte con su cimitarra, rajando al gato en las costillas con profundidad.

El felino cae en su lugar, inconsciente y moribundo, mientras la mancha de sangre a su alrededor comienza a crecer.

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02/07/2019, 23:53
Win.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR.

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

A penas había derribado a dos oponentes, otros dos volvían a ocupar su lugar. Aquella batalla parecía no tener fin aunque... realmente se acercaba a él. Por un lado no sentía ni escuchaba más atacantes que los que asaltaban la barricada o el que se desviaba hacia su derecha con algún tipo de criatura reptiliana. Por otro, sus compañeros caían. Primero Haluk, luego Momo... incluso su fiel amigo Peludo.

Aquello último apuró enormemente al ciego que trató de acudir en auxilio del felino, más nuevas amenazas lo rodearon, no pudiendo abandonar su posición. Win rugió enfadado y exasperado, impotente de no poder ayudar a su compañero, con quien compartía cierto destino impuesto por Iomedae. Su arma empaló a otro piel verde y mutiló a un segundo que trataba de subir por los parapetos.

- ¡Garinya, Ertiznao... tratad de auxiliar a Peludo! - rogó a la mujer alada y al goblin, conocedor de sus capacidades sanatorias, tratando de abatir a todos los enemigos que era capaz de sentir para que estos tuvieran la seguridad de curar a todos en general y a su gato en particular. Querría hacerlo él mismo. Podía hacerlo él mismo, pero en aquel combate había quedado bien claro cual era su papel. Debía cumplirlo y confiar en que los demás harían el suyo.

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03/07/2019, 23:20
Willbur Cole.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Las flechas vuelan, mientras el arco sigue cantando. Veo como una flecha vuela contra un Orco, clavándose en su cuerpo. Veo su estúpida cara girarse para mirarme, antes de que el vikingo lo ensarte como una fruta en una brocheta.

Pero no hay tiempo de celebrar. Un grito de agonía a mis espaldas marca la posible suerte de otro de mis compañeros. Y, por su voz... No, aún hay enemigos. Hago un gesto a Dagfinnr hacia atrás, mientras el arco inicia una nueva tonada.

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04/07/2019, 15:33
Win.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Un nuevo orco comenzó a subir por la barricada y tras un tajazo de mandoble del ciego, que lo destripó, volvió a bajarla rápidamente. Mientras se sucedía la lucha, Win escuchó los ruidos de trabajo de la milicia en la barbacana oeste, tratando de taponar el rastrillo. Hubiera preferido que les ayudaran a exterminar a los orcos, pero algo es algo. Si ellos lograban acabar con los últimos orcos y los milicianos taponar los agujeros del rastrillo, los defensores tendrían unos momentos de respiro más que necesarios y merecidos.

¿Aun tenemos que ir a encender alguna almenara más?, se preguntó mentalmente el invidente. Iomedae, danos fuerzas, imploró el iomedano, muy cansado. En ese momento notó el gemido de Piero y supo que había caído a manos de un oponente. También advirtió de una criatura cuadrúpeda que reptó a gran velocidad contra él. Atacó al bicho, dándole un buen tajo, pero no lo suficiente como para abatirlo, sintiendo sus fauces morder su pierna, provocándole una seria herida.

Win se sintió agotado y no sabía cuanto más podría aguantar.

Ampárame, Heredera.

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04/07/2019, 22:22
Haluk Molok.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

¿Derrotado por unos viles Orcos? Si te presentas ante Asmodeus de ese modo, serás flagelado por toda la eternidad. ¡No puedes consentirlo!

Los ojos verde amarillentos del hobgoblin se abrieron de golpe, como un resorte su propia mente fue tomando el control de todas las extremidades, el dolor fue perceptible pero la sensación era agradable ya que si sentía ese dolor significaba que estaba vivo y podía seguir luchando.

Con gran esfuerzo se incorporó sujetando la maza con una mano y el escudo con la otra, pudo ver a su anterior rival, el que lo dejó fuera de combate, muerto en el suelo. Apretó con rabia la empuñadura de la maza y la sujeción del escudo. Alzando más la vista pudo ver como alguno de sus compañeros seguían luchando, sus ojos se encontraron con el cuerpo tendido en el suelo del granjero, ellos habían seguido luchando mientras él había estado tumbado, no se lo podía perdonar, debía de luchar hasta que el último suspiro saliera de sus labios.

<< Mierda… la cosa esta complicada, malditos pieles verdes de mierda. Lo están complicando, pero debemos de aguantar. Win sigue en pie, pero puedo ver sus heridas no sé si aguantará mucho y los enemigos… >>

Pudo ver uno cerca de Piero, entablando combate con una persona que no conocía.

<< Esto tiene que terminar pronto, parece que Piero esta fuera de combate. He de hacer algo, pero  he de ser cauteloso, no puedo dejar que vuelvan a derrumbarme. >>

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04/07/2019, 23:47
Peludo.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Peludo se ve a sí mismo rodeado completamente de sombras. Recuerda el corte en su lomo y el enorme dolor pero ya no lo siente, solo es capaz de percibir la soledad. No le gusta esa sensación pues detesta estar del todo solo. Es cierto que los gatos son muy independientes y a veces parecen querer la soledad, pero solo es momentánea. En el fondo, aman la compañía y temen a la absoluta soledad.

Solo una vez antes en su vida sintió eso y fue cuando recién murió su familia. Ahora, sabe que no volverá a ver a Win si muere y no puede permitir eso.

"Ya no es solo Win. He hecho muchos amigos en Trunau y quiero volver a verlos."

Una enorme corriente de energía comienza a circular por su mente y siente como le eleva, haciéndole volar a gran velocidad desde ese oscuridad que le oprime, hasta sacarla a una superficie de brillante luz que le ciega. Es como un fuego, un sol que tiene frente a sus ojos. De pronto, al abrirlos, entiende que aquel resplandor no está frente a sus ojos sino dentro de ellos.

La batalla por Trunau sigue en curso y él a vuelto a ella, aunque ahora lo hace con más energías que antes.

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05/07/2019, 06:39
Willbur Cole.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Mis compañeros siguen luchando y cayendo. Sé que yo estoy teniendo suerte, hasta ahora sólo he recibido un ataque. Pero eso puede cambiar en cualquier momento.

Un Orco intenta saltar la barricada, por el extremo de ésta. No, amigo, no, pienso. Le apunto y ya la primera flecha vuela y cargo la segunda cuando veo que sangra por la nariz. Aún así, la segunda sale también, pero me ha resultado tan extraño eso. No comprendo qué ha pasado.

Pero aún estamos combatiendo. Temblando ligeramente, me giro para buscar mi siguiente víctima.

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05/07/2019, 09:53
Rabus Clarenston.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Rabus manipulaba angustiado la pesada ballesta, sin dejar de levantar la cabeza cada dos o tres latidos. La batalla seguía su curso a pocas brazadas de su posición. La guerra suena como una canción de borrachos, entonada a fuerza de gruñidos y gemidos, pensó el tabernero. Sin saber muy bien cómo lo había conseguido, Rabus logró al fin encajar el pesado virote en su riel. Inspirando profundamente, se incorporó y partió calle abajo, hacia la pequeña plaza que servía habitualmente de antesala al Barrio Interior y que en esos oscuros momentos se había convertido en el cuello de botella que impedía que el ejército orco alcanzara el corazón de Trunau.
—Y nosotros somos el corcho... Una banda de descastados, cada uno de una madre. ¡Y un posadero! —masculló para sí.
Al desandar el camino hacia la Puerta Occidental, el rumor de la contienda ascendió en un crescendo agudo, mudando a un estruendo doloroso e incómodo. En la penumbra reinante todo eran figuras desdibujadas, entrecruzándose en una caótica danza de sombras. Era difícil distinguir entre amigo y enemigo. Entrecerrando los ojos y basculando la ballesta de un lado a otro —ahora apuntando a una silueta de anchas espaldas, para pasar al instante siguiente a otra más achaparrada, pero de grácil movimiento—, el tabernero no se decidía a disparar el arma.
Dos contendientes se encontraban trabados a pocos pasos de su posición. Cuando a punto estaba de apretar el gatillo contra uno de ellos, la ventana de una casa cercana vomitó una llamarada que iluminó brevemente la zona. Reconocería ese sombrerucho de paleto en cualquier parte. Era Piero, bailando contra el acero negro de un orco de aspecto feroz.
Aunque el granjero le sacaba una cabeza, el piel verde lucía una abultada musculatura en brazos y pecho. Sus hombros, cubiertos por unas charreteras de apelmazada piel, eran anchos y sólidos. El trunauano intentaba mantenerse cerca de su oponente, lanzando cuchilladas con una daga, mientras el orco trataba de ganar espacio para poder voltear su enorme hacha de dos filos. Rabus no se atrevía a disparar, temiendo errar el tiro y herir a su amigo. Tras unos angustiosos segundos, el piel verde lanzó un codazo al pecho del labriego, apartándolo de él. Rabus vio su oportunidad y apretó el gatillo con un grito de furia; aunque el virote sajó media mejilla al incursor, no logró detener la cruel oscilación de su hacha.
Piero se dobló por la mitad como un junco en una ventisca cuando recibió el hachazo en el vientre, desplomándose a los pies de su atacante. El posadero, atónito y horrorizado, quedó congelado con la boca abierta en un grito sordo de terror. Antes de que pudiera reaccionar, ya tenía al orco encima. Consiguió hacer funcionar sus piernas para salir huyendo, intentando adentrarse en la densa humareda y escapar de una muerte segura, pero antes de dar el primer paso recibió un potente tajo en la clavícula que a punto estuvo de arrancarle el brazo. Gravemente herido y terriblemente asustado, se perdió con paso trémulo entre el humo, rezando a todos los dioses que conocía para que ese depredador no lo persiguiera para terminar el trabajo.

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05/07/2019, 10:14
Win.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Win se sintió más torpe y lento conforme aquel lagarto gigante le mordía, comprendiendo que algo le inoculaba. Sus brazos entumecidos, de segar y descuartizar tantos cuerpos, los sentía cada vez más débiles. Afortunadamente la camarera Ekaterina, mucho más que una simple camarera, llegó a tiempo de rematar al bicho. Asintió con la cabeza a la mujer en reconocimiento y gratitud a la par que se concentró en sentir presencias enemigas y amigas. Solo dos pieles verdes en pie, uno abatido a flechazos por Will y otro, el dueño del bicho, que se acercaba al cuerpo a cuerpo y al cual el gigantón recibió con un suculento mandoblazo. Aunque no llegó a matarlo sus gemidos de dolor guturales le hicieron comprender que estaba mucho más muerto que vivo. Ese orco tenía los segundo contados.

Mientras enarbolaba su montante para enviarlo junto al resto de congéneres, cuyos cuerpos diseminados por doquier formaban un segundo parapeto, el ciego fue consciente de que Peludo estaba activo de nuevo. Que Momo estaba otra vez en pie. Que Haluk se había reincorporado y ayudaba a Piero. El grupo de defensores perduraba y eso generó cierta euforia en el invidente, cuyas ideas pronto fluyeron claras en su mente al comprender la situación.

- ¡Registremos los cadáveres! - exclamó el gigante iomedano, sabiendo que algunos compañeros lo habían hecho, obteniendo cosas útiles de ellos -. Momo, a ver si disciernes algo sanador entre las pertenencias orcas - sugirió a la pequeña alquimista. Tenían que avanzar al siguiente barrio, a la siguiente almenara y debían curarse primero.

Pero antes..., se dijo girando su atención sobre el último orco y alzando su arma, con la intención de despedazarlo.

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05/07/2019, 16:33
Ekaterina Illhart.

PUEBLO DE TRUNAU: BARRIO INTERIOR

AÑO: 4715 RA.

ESTACIÓN: INICIO DE LA PRIMAVERA.

MES: FARASTO.

DÍA: 6, DÍA DEL FUEGO.

HORA: MÁS DE MEDIA HORA DESPUÉS DEL OCASO.

Junto a ella sintió que al gigante Win le empezaban a fallar las fuerzas. Algo no iba bien, algo más además de todo lo que ya iba mal. Un lagarto acababa de hundir sus colmillos en su carne de donde la sangre manaba a borbotones. Cierto que los esfuerzos y las heridas se estaban cobrando un gran precio en todos, en algunos demasiado alto, pero en aquel preciso instante el ciego parecía que estaba ya al límite y a punto de pagarlo todo.

La camarera acudió corriendo a sabiendas de que a su espalda quedaba el orco al que había herido con la daga, pero confiaba en que sus compañeros podrían encargarse de él sin problemas. Volvió a hacer crecer sus garras mientras avanzaba lista a usar el ímpetu de la carga para atravesar con ellas las duras escamas.