Partida Rol por web

Monster hunter +18 (Hentai-yuri)

Campamento Norte (Radha)

Cargando editor
17/08/2021, 11:49
Mochi

-Mejor no preguntes...- Fue la seca respuesta de Galea mientras iba recogiendo sus cosas. El examen parecía ir bien, las compañeras felynes de Radha iban mirándola de forma distinta, Matcha parecía tranquila y Cocoa parecia como pensativa con todos aquellos temas, pero por el momento no parecía que estuviera en desacuerdo. Después de aquel examen, Baba solo sonrió divertida. -Tomatelo de descanso...yo volveré a mi trabajo...joi joi joi... -Levantándose la anciana siendo ayudada rápidamente por Galea la cual la rodeo con una mano por la espalda mientras la iba acompañando a la salida de la casa, parecía que no había pasado desapercibida el gemido de Radha pues todas las felynes estaban visiblemente sonrojadas. -Estar en recinto prey, no moverse de allí en toda la noche, si querer ir...mejor si avisar que no ser peligroso...no preocupar, no pasarle nada al huevo.- Fue la ultima respuesta de Galea antes de separarse del grupo guiando a Baba.

-Nunca un día aburrido, verdad?- Rompió un poco el hielo Matcha mientras Cocoa se desperezaba y iba entrando en la casa, la peliverde saco su arco y empezó a comprobar la cuerda con ojo analítico. -Porque no ir a ver a Mochi? Quizás echar de menos, tu tranquila yo vigilare un rato el huevo si quieres, no creo que nazca hoy pero si te sientes mas tranquila yo estar por aquí, parece que tendremos dia libre.

El recinto de las Prey se veia un poco diferente, pero no era en estructura, era mas bien en organización, la Velocidrome estaba ahora de pie delante de su cuidadora mirándola sacando los dientes mientras esta acercaba un filete a sus dientes que rápidamente fue tomado por la mayor, lo importante de ese momento era que no estaba con el antifaz puesto y podía ver, lentamente fueron abriendo la puerta del recinto y la Velocidrome fue saliendo lentamente de esta, guiada en todo momento por dos felynes una que parecía armada por si pasaba algo y la otra que iba con cuidado, detrás de la Drome iban las pequeñas Preys las cuales salían corriendo de adelante a atrás como si estuvieran rastreando el camino principal, seguramente las llevarían de caza.

-Kyummm!- El suave sonido de Tobi se hizo patente en cuanto Radha se acerco al recinto, esta estaba aun enroscada en la prey la cual se había quedado ya que la Tobi no había dejado que se marchara, la tenia rodeada con la cola haciendo una especie de ovillo en su cuerpo para que no se escapara, muy parecida a la posición que había tenido durante toda la noche, pero al contrario que una presa la Prey parecía estar cómoda donde estaba, apoyando su barbilla en la cara interna de la cola antes de ver a Radha y tensarse un poco. Desperezándose suavemente, Mochi arqueo la espalda antes de salir corriendo saltando la valla para dar vueltas alrededor de las piernas de Radha antes de subirse a la cerca para estar mas cerca de la cazadora, olfateando su cuerpo -Kyum? Kyum kyum!- antes de dar una nueva palmada, ahora en la madera y saltar hacia atrás, tomando a la prey con los dientes para que empezar a moverse hacia Radha, la cual tímida iba acercándose poco a poco, parecía que Mochi queria como presentarla de alguna forma.

Cargando editor
19/08/2021, 00:45
Radha

Radha abrió los ojos y hasta se estremeció un poco luego de escuchar a Galea, pero ya que la felyne fue tan específica con aquello, la humana decidió no indagar más. Vio entonces a las otras gatitas que a saber qué tenían en mente; muchas veces ellas eran un misterio para la cazadora, pero que de momento no dieran señales de molestia o estar juzgándola demasiado resultaba especialmente particular, sobre todo viniendo de Cocoa. Al final lo que dijo la mayor la hizo suspirar. — Supongo que eso haré, gracias Baba… — no le quedaba otra y Radha sabía lo peligroso que era salir a cazar en su estado, de modo que no sería impertinente; ahora bien, cuando notó el rubor en los rostros ajenos la cazadora sonrió con picardía instintiva…

Iré allá entonces, tengo que explicarle, sí, gracias Galea — la cazadora extendió su gratitud también a la maestra domadora antes de que esta se fuera junto con la comerciante.

Je, nunca… y pensar que yo pasé tantos años aburriéndome un día sí y un día no antes de llegar aquí, jamás hubiera pensado que mi vida cambiaría tanto — ya luego confesó a Matcha mientras veía que Cocoa se iba; definitivamente iba a hablar con ella, preguntarle lo que le sucedía, pero por como actuó la morenita supuso igual y prefería estar a solas o tranquila de momento. La arquera por otro lado demostró una personalidad muy diligente al nunca dejar de lado el cuidado de su arco. — Sí, creo que eso es lo que haré, ¿pero estás segura de que no quieres hacer algo más? Igual y no me tardaré, creo, para que también disfrutes el día libre — aseguró. Matcha era muy amable con ella por hacer cosas así, de modo que, aunque quizás dándose demasiadas confianzas, Radha no pudo evitar el extender la mano y darle una palmadita sobre la cabeza a modo de agradecimiento. Claro que si veía que se molestaba con ella se disculparía…

Llegando ya al recinto donde estaba Mochi, la bárbara se sorprendió por la nueva posición del alfa de ese lugar y lo que parecían estar por hacer. Saludó a las felyne encargadas aunque intentó no distraerlas mucho, al fin y al cabo si una iba armada igual y era un trabajo peligroso, también aprovechó para mirar el despliegue por un momento, orgullosa de las prey y de la drome.

Solo tras eso fue a ver a la tobi, guiada por su sonido. Al encontrarla la escena era de lo más dulce, pues se veía bastante acaramelada con su hembra. La bárbara casi se sintió culpable por romper esa tranquilidad, pero luego pensó que si se iban a ver seguido, lo mejor era que tuvieran ese acercamiento. Ya que se acercó la ardillita, Radha no perdió oportunidad de darle varias palmadas y caricias, incluso de jugar un poco con sus orejitas — Hey Mochi, ¿cómo están?, ¿pasaron una buena noche? — dijo traviesa. Fue entonces que notó lo que la tobi intentaba, al parecer queriendo llamar su atención — ¿Te refieres a Anko? — obviamente eso despertó su curiosidad, por eso se mantuvo quieta mientras Mochi iba a por su compañera y luego cuando esta se acercó, trató de no hacer movimientos bruscos.

Hola — ato seguido la bárbara dijo con una sonrisa orgullosa pues al fin y al cabo era una criatura que la tobi había “cazado” y “domado” por ella misma, algo que tenía bastante mérito. Pensó en acariciarla también, pero no sabía cómo le sentaría eso a Mochi, así que en lugar de eso ella también pasó a “presentar” mientras veía los niveles de confianza. — Mochi, Anko, hay un huevo en mi casa, una Vespoid, no es peligrosa, salió de mi… — dijo tanto con palabras como con una especie de lenguaje corporal que intercalaba con señas, todo esto tratando de averiguar si la estaban entendiendo o no; después de un rato así, las llamó con una señal — Vengan conmigo… — y retrocedió para intentar volver a su casa, pues quería asegurarse de haber transmitido bien el mensaje. Claro que estaría atenta y ante la mínima señal de peligro buscaría reaccionar acorde, si es que para empezar la seguían…

Cargando editor
19/08/2021, 12:00
Mochi

Al acercar la mano a la cabeza de Matcha, esta inmediatamente levanto las orejas mirando como se iba acercando, pero no puso resistencia a que acariciara su cabello. Hubo un breve, muy breve momento en los cuales los ojos rasgados de Matcha se quedaron como mirando a Radha, como si la estuviera atravesando con una de sus flechas antes de sonreír de forma gatuna y seguir examinando su arco. -Venga ve.- Animándola a que fuera a ver a Mochi, los caracteres de todas las felynes eran diferentes al igual que lo eran las personas, pero en estas se notaban mas marcadas.

Las palmadas fueron también bien recibidas por parte de Mochi la cual palmeo con su cola donde pudo mientras sentía las fuertes manos de Radha pasando por su cuerpo a modo de caricia, incluso se quedo quieta cuando toco sus orejitas notando que también la había echado de menos. La que era mas reservada era Anko, quizás fuera el hecho de que había sido derrotada, de que no estaba amaestrada ni mucho menos, de que seguia siendo salvaje o por la mirada de Mochi. En todo momento Mochi se quedo observando, estaba feliz y eso se notaba en los gestos y el como se estaba moviendo la pequeña, pero esta mirando muy fijamente lo que hacia Radha. Al presentar su mano, Anko se quedo como dudativa, ladeando varias veces la cabeza antes de sacar un poco los dientes, pero no llego a morder porque un gruñido hizo que prestara atencion a Mochi la cual si saco bien los dientes hacia la que era su pareja.

-Gr...graw...gra...- Un par de gruñidos por parte de Anko antes de acercar la nariz a su mano y empezar a olfatear, Radha podía notar que su respiración era potente y corta, como buscando ciertos aromas hacia la cazadora antes de que Anko diera un pasito hacia delante, solo uno y olfateara también el brazo y un poco el vientre de Radha por la posición en la que estaba. Sacudio un poco la cabeza hacia atrás antes de volver junto a Mochi antes de que esta lamiera un poco su mejilla como si hubiera hecho un buen trabajo. -Kyum?- Durante la explicación, Mochi se quedo sentada delante de Radha ladeando continuamente la cabeza de lado a lado como si intentara entender todo lo que estaba pasando antes de que ya le diera la orden para que volviera a casa. Al principio fue la propia Tobi la que salto la valla para poder reunirse con la cazadora pero Anko no hizo el gesto de seguirla, entonces Mochi se dio la vuelta y empezó como a empujarla para que saliera del recinto antes de que ya empezara a corretear por el camino en dirección a la casa de Radha.

-Vaya, quien tener aquí?- Pregunto Matcha que se dio prisa en apartar el arco al notar que había llegado la prey, la cual se encogió un poco al ver el arma antes de quedarse cerca de la entrada de forma algo mas tímida, todo lo contrario a Mochi la cual se lanzo contra Matcha derribandola en el suelo antes de taparla con su cola y empezar a lamer su cara. -Sssshhhh...Mochi estar tranquila...tranquila...vale vale...- Palmeando a la Tobi mientras la dirigía a que mirara el huevo de vespoid.

En ese momento hubo un momento de tensión porque Mochi al ver el huevo sus orejitas se levantaron, mirándolo fijamente antes de que empezara a sacar los dientes palmeando el suelo con su cola toda erizada al igual que su pelaje en actitud protectora, parecia que en cualquier momento Mochi se iba a lanzar contra el huevo de vespoid. -Kyum! Kyum kyum!-

Cargando editor
20/08/2021, 00:28
Radha

Radha se sintió atravesada por esa mirada, para qué negarlo, pero así como ellas tenían instintos propios, la bárbara poseía una especie de inquietud por querer sentir la suavidad ajena. Como no llegó a reclamarle, la humana solo retiró la mano tras unos segundos aunque esbozando mientras tanto una sonrisa nerviosa. — Gracias, Matcha — remarcó cuando la gatita la instó, tras lo que terminaría yéndose más pronto que tarde…

Ya con Mochi la bárbara se alegró bastante por ser recibida así, tanto que dedicó un poco de tiempo extra a recorrer las partes suavecitas que ya conocía de antemano. A comparación de las felyne, el tacto de la tobi era como más salvaje pero no por ello molesto, solo debía tener cuidado de las púas que por naturaleza eran más duras obviamente, pero en general la ardillita se le hacía de lo más adorable, tanto que podría haberse pasado largo tiempo solo mimándola, disfrutando del ruido de los palemos que daba con su cola… o eso pensaba hasta que Mochi le llevó a Anko.

A ella no la acarició, pero sí que se dejó olfatear por la prey ya que supuso era una especie de comprobación o examen, quizás con el tiempo sería más abierta, quizás no, pero en cualquier caso se notaba que la pequeña tobi tenía como cierto control sobre ella. Lo que le estuviera diciendo quedó a la imaginación de Radha puesto que no podía entender a ninguna, pero ya que terminó en lamidas la cazadora supuso que era algo bueno. Incluso les sonrió a ambas y asintió, aunque no fuera su potestad. Por otro lado otra cosa sorprendente fue cuando Mochi sacó a su compañera, pues además de que mostraba el hecho de que no quería separarse de la misma, supuso otro ejemplo de hasta qué punto Anko tenía en cuenta a la tobi. Radha estaba encantada y así las guio, aunque seguía teniendo dudas de hasta qué punto le habían entendido…

Pese a que primero ella iba al frente, Mochi y Anko corrían más rápido por naturaleza, así que la bárbara terminó más bien teniendo que seguirlas, aunque no se separaron mucho y por suerte la tobi sabía bien cómo llegar a donde iban; por eso no pudo hacer mucho cuando esta se abalanzó sobre Matcha, aunque llegó a tiempo para al menos ofrecerle una mano a la arquera para que pudiera levantarse. — Trajimos a Anko también, aunque parece que es más tímida — con la cabeza señaló a la prey. Hasta ahí todo iba relativamente bien, pero las cosas cambiaron de un momento a otro…

Mochi… tranquila — ahora era Radha quien quería calmar a la tobi, siendo que esto lo dijo en voz más o menos baja. — Ese huevo es mío, salió de mí… — trató de explicar mientras avanzaba. Sus pasos fueron lentos pero seguros, concentrados en llevarla frente a la vaina, pues ya allí se situó entre esa y Mochi, a modo de escudo, buscando la atención ajena. — Tranquila, es amiga, es amiga… no hay peligro — insistió sin mostrarse agresiva o enojada hacia Mochi, pues al fin y al cabo no lo estaba, pero tampoco podía dejar de ser firme...

Cargando editor
23/08/2021, 12:50
Mochi

-Gracias.- Aceptando la mano de Radha mientras se levantaba y se peinaba un poco con la mano. -Natural, Prey soler ir en manada y no soler alejarse demasiado de una alfa a no ser que cazar, ahora mismo Anko tener que acostumbrarse a estar mas sola y estar con Mochi, pero parece que por el momento todo ir bien.- Aseguro Matcha antes de que se fijara bien en lo que estaba sucediendo con el huevo.

-Grrr...- Las palabras de Radha parecían llegar a la Tobi pero esta no parecía llegar a entenderlas del todo, su pelaje cada vez estaba como mas erizado y mostraba los dientes como cuando iban a luchar contra alguna criatura, su cola de forma bastante nerviosa iba palmeando el suelo haciendo que un poco de polvo y tierra se levantara. Pero no avanzo, Mochi parecía esperar a que las demás se pusieran en guardia pero al ver que no lo hacían, fue como ladeando la cabeza suavemente, todo fue muy lentamente y gracias a el no mostrarse agresiva Mochi se fue medio tranquilizando pero aun se podía ver su pelaje erizado.

Encogida, se fue acercando al huevo de vespoid y lo fue olfateando, volviendo a palmear el suelo con su cola antes de ir como rodeando el huevo lentamente pasando la nariz por su superficie. Realmente era un momento critico porque en cualquier momento la ardillita podía sacar las uñas o incluso golpear el huevo con su cola y dañar a la criatura que habia dentro, pero por el momento parecía que solo estaba olfateando como si quisiera tomar el aroma del huevo. -Dejarla hacer.- Comento Matcha ya de nuevo sentada. -Tomarse su tiempo, ser difíciles estas cosas.- Pero pasaban los segundos y Mochi no parecía que estuviera dispuesta a atacarla, solo la olfateaba hasta que ya las puas se fueron poniendo normales y Mochi se alejo del huevo. -Kyum...kyum kyum?- Ladeando de nuevo la cabeza sentándose en el suelo y mirando a Radha, moviendo un poco las orejitas antes de lamerse un poco una mano y pasarla por su nariz, parecía que no le habia encantado el aroma a dulce que salia del huevo pero que lo estaba aceptando.

La felicitaras o no, Mochi dio una vuelta al cuerpo de Radha antes de salir medio disparada de nuevo hacia Anko la cual fue derribada en el suelo por la Tobi, atrapada entre sus patitas y cola, en ese momento se podía ver una imagen que podía parecer tierna y agresiva ya que Mochi le enseñaba los dientes como si fuera a morderla a Anko y esta hacia lo mismo pero aunque mordían el aire muy cerca la una de la otra no llegaban a morderse, eso si, Mochi no paraba de abrazarla y someterla estando ella encima en ningun momento.

-Parecer que bien.- Sonrió Matcha mientras tensaba su arco y lo guardaba de nuevo ya acabando las comprobaciones. -Por un momento pensar que tener que apartar a Mochi, tardara pero acostumbrarse.

Cargando editor
24/08/2021, 01:16
Radha

¿En verdad? — Radha miró a la mentada Prey y sonrió de lado, no pudiendo evitar sentir preocupación por ella, aunque fue poca, pues sabía que Mochi la cuidaba y la quería con celo, además la pequeña tobi era al fin y al cabo una alfa a su manera...

Más adelante los momentos ante la misma ardillita estuvieron llenos de tensión, pues la bárbara quería confiar en ella pero a la vez no podía estar segura de si de pronto Mochi se lanzaría al ataque, después de todo los instintos de la pequeña eran fuertes, de ello no se le podía culpar. Aun así la humana tragó saliva pero no se movió de su lugar; estaba atenta, sin embargo tampoco trató de verse amenazante porque no quería que Mochi relacionara al huevo con algo malo, de modo que luego de explicarle, cuando vio que la tobi dudaba un poco, volvió a hacerle una señala para que se tranquilizara.

Huevo — la bárbara señaló — Mío — y afirmó luego apuntándose a sí misma, eso lo repitió un par de veces al menos, para ver si así podía dejar un poco más claro el asunto.

Obviamente cuando Mochi comenzó a olfatear y a examinar aquel huevo, Radha se puso bastante nerviosa y como que quería ir detrás de su compañera para controlarla, pero a la vez sabía que eso podría ser peor, por lo mismo se mantuvo cerca pero no exactamente pegada, alerta todavía. Por suerte lo que dijo Matcha la ayudó bastante a encontrar calma, y así la ardillita también pudo proceder mejor. — Sí, me imagino… debe ser sorprendente para ella, ¿no? — comentó a la felyne para hacer plática, buscando quizás centrarse mejor en eso.

Huevo mío, huevo mío — cuando pareció que la tobi había terminado la humana se acercó para recordarle, acto seguido le dio un par de palmadas con las que llegó a despeinarla un poco, esto a modo de curioso premio por no haberse puesto agresiva. — Buena Mochi — huelga decir que para nada la detuvo de regresar con Anko, de hecho las vio curiosa mientras sentía cierto orgullo…

Sí… menos mal que no llegamos a eso, yo no podría luchar con ella, pero tampoco estaría dispuesta a dejarla hacer algo como destruir el huevo… — suspiró, no obstante acto seguido se encogió de hombros para quitarle hierro al asunto. — Supongo que es cuestión de tiempo, ¿no? — comentó — Gracias por la ayuda, Matcha, ¿ahora qué harás? — y luego curiosa preguntó. — Yo estoy pensando en que igual y es buena idea que vaya a hablar con Cocoa, no sé tú, pero yo la notó un poco rara desde anoche, como más reservada… — si le dijo aquello a Matcha fue porque sabía que habían pasado la noche juntas hasta algún punto, y quizás la gatita arquera sabía algo… o no. Dependiendo de lo que le dijera ella, Radha vería si ir a buscar a la morenita o hablar un poco más con la arquera.

Cargando editor
24/08/2021, 13:21
Matcha

-Kyum!- Las palmadas fueron bien recibidas nuevamente por la Tobi aunque ahora parecía haberse distraído un poco con Anko las cuales ahora mismo estaban como medio peleándose haber quien mordía a quien, pero no se notaba ningún tipo de agresión por parte de Mochi ni por la Prey era como si Mochi estuviera descargando de alguna forma esa adrenalina que había acumulado en ese momento por no poder atacar o haberse excitado de mas. De hecho a los pocos instantes de hacer eso, Mochi sacudió un poco la cabeza y comenzó a explorar el lugar ya que ella no había visto la casa aun mientras que Anko se tumbo cerca del huevo, no demasiado pero tampoco muy alejada, aprovechando que quien fuera que había creado eso había movido la hierba, estaba como tumbada en un colchón natural.

-Casi parecer una mami.- Riendo divertida Matcha al ver lo sobreprotectora que era Radha con aquella vaina. -Estar de lo mas tensa, relajarte un poco, no creer? Por el momento preocuparte mas por ti, no tienes buena cara y tienes que dejar pasar el veneno en tu cuerpo. Yo? No saber demasiado, quizás ir a ver a Baba, desayunar estaria bien, un dia relajado es un dia de descanso, seguramente mas tarde ir al balneario. Nunca saber cuando volver a la caza asi que mejor aprovechar estos momentos.

-Cocoa extraña eh...mmm...- Sin dejar de sonreír, Matcha subió una pierna en su asiento para apoyar ligeramente la barbilla y mejilla en esta mientras se abrazaba levemente, mirando a Radha con aquella sonrisa felina. -Ella ser reservada de por si, no hablar demasiado pero notar que quererte mucho. Después de todo cazadora y felyne siempre estar de lo mas unidas, eso siempre tener en cuenta. Pero ella verte un poco desatada, ayer durmió conmigo, somos muy agudas a la hora de escuchar por la noche y tus gemidos dejarnos esa tarea algo difícil. Según comentar, ayer pasar por casi todos recintos de criaturas y en todas ellas tu aparearte, también luego estar con humana y esta mañana despertar dando a luz a un huevo de vespoid.

-Entender que ella preocuparse, ella poder entender que cazadoras grandes tener un libido grande, nosotras entender porque parte de nuestra tarea de cazar es también atender a cazadoras, hacerlo con placer no con obligación. Cocoa ser felyne mas reservada, querer pero no hacer y ella pensar que veces que ella estar contigo quizás no dejarte del todo satisfecha, ella ser cerrada en ese aspecto por eso ultima vez yo tener que convencer, recordar?- Haciendo recordar a Radha la primera vez que se infecto con la miel de la reina y ambas felynes la atendieron, el como Matcha tuvo que forzar en cierta medida a Cocoa para que colaborara. -Pero estar bien no preocupar, de hecho yo también algo preocupada, acaso libido tan arriba? No ser bueno yacer con criaturas poder pasar estas cosas.

Cargando editor
25/08/2021, 16:53
Radha

Incluso si eso significaba verla un poco menos en su casa, a Radha le gustaba bastante la pareja que formaba la ardillita con la prey, pues tenían como una especie de química animal muy tierna a pesar de todo. Cada que se ponían a jugar así, la bárbara hasta imaginaba qué se sentiría ser como ellas, o sea más salvaje; no era que sintiera envidia, pero sí mucha curiosidad…

Cuando se separaron la humana vio intrigada cómo a pesar de todo Anko se quedó cerca del huevo, ¿acaso lo estaría cuidando de alguna manera o solo aprovechó para tumbarse sobre ese pasto donde se veía tan cómoda? Solo el tiempo lo diría, supuso.

Ja, ja, ja… sí, la verdad es que estoy un poco nerviosa… sé que les parece raro, pero digamos que no me gusta matar por matar — confesó — Al ser una bárbara tengo mayor agresividad nata que otras, pero también siento como más… ¿cercanía?, o al así, respecto a la naturaleza, por eso, a menos que sean una amenaza al ambiente, yo prefiero traer conmigo a las criaturas que derroto antes que eliminarlas… y eso también lo siento por el huevo — explicó con calma a su compañerita verde. Más allá de ello la preocupación de Matcha fue entendida sin mucho problema — Pues sí, creo que aprovecharé para descansar… aunque primero lo primero — por lo que la bárbara contestó traviesa, rascándose una mejilla mientras sonreía.

Luego la explicación de su compañera arquera hizo que la cazadora se sorprendiera bastante, pues eso explicaba muchas cosas y hasta la hizo sentir un poco culpable por no haberse dado cuenta antes; aunado a ello Radha también se ruborizó por pensar en los verdaderos sentimientos de Cocoa…

Vaya… te agradezco mucho que me expliques todo esto, Matcha, yo la verdad no pensaba que lo que hago pudiera llegar a tener tal impacto en ustedes… y sí, recuerdo cómo fue, aunque en ese momento pensé que era más una especie de juego entre ustedes, algo del momento — se excusó — Ahora estoy más segura de que tengo que hablar con ella… — agregó con una mueca levemente preocupada que luego sin embargo cedió ante una sonrisa, pues ya había pensado en qué hacer.

B-bueno… yo primero había ido a ver a las girros solo para saludar, pero las cosas se dieron y… terminamos así — enseguida se ruborizó por la pregunta de Matcha. — Ya para cuando salí de allí, pensar en lo placentero que sería tener de nuevo un miembro la verdad es que me cegó, y así fue como terminé yendo con las vespoid… en cuando a lo de Felicity, bueno, lo cierto es que con ella hay un vínculo que no sabría cómo expresar, es similar a lo que siento por ustedes, pero ni mejor ni peor… — según hablaba Radha se fue poniendo más y más roja, hasta que al final se sacudió como para sacarse de ello y carraspeó por lo mismo. — Supongo que debo tratar de controlarme, pero en verdad, muchas, muchas gracias por ser tan abierta conmigo, Matcha, significa mucho para mí — dicho eso la bárbara volvió a sonreír y se acercó. — ¿Puedo acariciarte una orejita? — esta vez sí preguntó.

Independientemente de la respuesta a la cual respetaría, el siguiente paso era ir a buscar a la morenita para así poder hablar con ella, verla con un poco de más detalle, pues si bien no tenía razones para desconfiar de Matcha, Radha creía que aquello debía ser tratado también de manera personal, al fin y al cabo eran compañeras….

Cargando editor
26/08/2021, 13:47
Cocoa

-Saludar...claro...- En todas las explicaciones que había dado Radha, Matcha solo sonrió como divertida por lo que estaba escuchando, realmente a sus ojos era adorable el ver como se iba sonrojando con cada palabra que salia. -Yo ser diferente a Matcha, ella no conocer muchas cazadoras, pero yo si, he visto mas, quizás no notar pero ser un poco mas mayor que Cocoa. -Aunque todas las felynes tenían sus curvas y cuerpos desarrollados o a veces en desarrollo, era difícil saber bien bien la edad de estas. -Cada una de nosotras ser diferente al igual que cada una de vosotras serlo, somos mas serviciales si pero eso no quita el que seamos observadoras y también tengamos opinión. Si querer hablar con Cocoa adelante pero ser suave, no brusca, ella ser cerrada en ese aspecto. Quizás no tener que bajar libido, natural después de tiempo sola, pero si tener cuidado. Criaturas ser quizás hermosas, tener por ejemplo a Mochi que ser adorable, también Kirin que ser imponente...pero tener cuidado, criaturas no dejar de ser criaturas, algunas buscar tu placer, otras buscar el suyo...pero mas de una cazadora morir devorada por confiarse demasiado, ser importante.- Advirtió Matcha mas por que Radha estuviera en alerta que por ser malvada a la hora de explicarlo, era mas una advertencia que toda cazadora tendría que tener en cuenta. -Estar bien.- Asintió mientras ella misma se ofreció a que la acariciaras la cabeza, moviendo las orejitas de lado a lado conforme pasaba la rasposa mano antes de sonreír y despedir con la mano, pero por el momento no se marcho, solo se recostó un poco desperezándose, bostezando mostrando sus colmillitos antes de mirar un poco a Anko como si la estuviera vigilando, aunque esta estaba de lo mas tranquila simplemente mirando su alrededor.

Al entrar, Radha pudo ver como Mochi estaba olfateando todo lo que habia en la planta de abajo con cierta curiosidad, pasando su cola como si se tratara de una escoba enorme por la madera sobretodo olfateando la alfombra donde la noche anterior tanto Felicity como Radha habían estado tumbadas desnudas, quizás olfateando ambos aromas, por el momento parecía distraída así que el camino hacia arriba no había demasiados problemas.

Al igual que Matcha, Cocoa estaba preparando su equipamiento, se encontraba sentada en su cama con un trapo en la mano, curiosamente el cuerno estaba como desmontado por la parte de arriba, es decir, la concha que solía producir el sonido estaba sacado y se podía ver un mecanismo de huesos que hacia el sonido. Con cuidado, Cocoa estaba metiendo unas plumas dentro como secando dichos conductos para que estuvieran perfectos a la hora de usarlos y también estaba limpiando la concha. Al estar cerca, sus orejitas se movieron un poco y se quedo mirando a Radha. -Si? Necesitar algo?

Cargando editor
27/08/2021, 01:38
Radha

— Sí… — Radha estaba acostumbrada a ser juzgada por las felyne, de hecho una parte de ella hasta lo disfrutaba, pero la sonrisa de la gatita verde le causó cierto nerviosismo que la llevó a reaccionar como ya se dijo.

— Pues, sé que Cocoa es “novata” por así decirlo, y sí, tomando en cuenta que eres más alta y todo, supuse que eras un poco mayor… — tampoco sabía si demasiado, pues para empezar no estaba segura de cómo era una felyne adulta, por ejemplo, ya que quizás las más cercanas a eso eran Galea o Vainilla, al menos haciendo una leve comparación con las humanas.

Bueno, no es que le vaya a reñir o algo así, tranquila, además esto que me estás diciendo deja muchas cosas claras… — aseguró. — Sobre lo otro… sí, creo que debería tener más cuidado, pero a veces no puedo evitarlo — suspiró al recordar casos como el de la Rathalos, la Rathian o la Legiana que muy seguramente estarían entre aquellas que no dudarían en devorarla si se ponía tonta con ellas; el consejo de la arquera no era algo para tomarse a la ligera. Todo ello llevó a que la cazadora se viera impulsada a acariciar a la gatita pues era su forma de demostrar cariño y gratitud, así como cercanía que sin duda se merecía la ajena. Con una gran sonrisa la bárbara le dedicó aquel mimo, huelga decir que muy curiosa pues generalmente esas caricias las hacía rápido y casi se sorpresa para evitarse negativas, pero ahora pudo invertir un poco más de tiempo. Matcha era muy suave…

Ya tras despedirse, mientras se iba, vio cómo se quedaba su compañera como vigilando, pero ya que le había dicho que ella encontraría su camino la bárbara decidió confiar en ella. Al entrar en la casa la humana sonrió con curiosidad al ver a la tobi; tenerla en casa era algo que siempre la animaba, y le gustaba que a pesar de haber “madurado” en el sentido de conseguir hembra, Mochi siguiera teniendo tanta energía e interés por las cosas más peculiares, como los aromas. En cualquier caso y debido a que técnicamente también era la casa de la ardillita, Radha la dejó a sus anchas pues nada la alejaría de su plan.

Cuando llegó con la morenita primero se quedó como sorprendida viendo todo lo que hacía, que no era poca cosa ni algo que pareciera fácil, de hecho daba la impresión de necesitar su buena cuota de cuidado. Solo habló hasta que su compañera preguntó. — Pues la verdad venía a verte — respondió — Hoy tenemos el día libre y quería saber si… bueno — se ruborizó un tanto — Si quieres pasarlo conmigo — finalmente pudo decir.

Sé que ayer te hice esperar mucho y te di algunos problemas, pero es que soy tonta… por eso, si quieres, mi idea era dedicarte el día solo a ti, al fin y al cabo eres mi primera compañera y-y la verdad siempre he querido que convivamos más — explicó. — C-claro que si estás muy ocupada o no quieres lo e-entenderé… — y de ahí se quedó expectante a lo que la gatita pudiera o no responder, mirándola fijamente. Solo esperaba no haber sido ruda de alguna forma…

Cargando editor
27/08/2021, 15:46
Cocoa

El estaba calentando las habitaciones por lo que la iluminación en la habitación de Cocoa era de lo mas agradable, haciendo que ambas estuvieran cómodas, ademas el que Cocoa estuviera sentada en la posición del loto mientras miraba ahora a Radha con todas las herramientas para limpiar el cuerno a su alrededor. Hubo unos segundos como de silencio antes de que Cocoa moviera un poco la orejita derecha como si fuera un leve espasmo. -Querer ir a algún sitio?- Empezó preguntando como si fuera un simple paseo para revisar las instalaciones antes de que Cocoa empezara a leer un poco el ambiente que Radha estaba intentando crear.

Lentamente fue dejando lo que estaba haciendo mientras movía las orejitas como si estuviera apartando algo en el aire antes de llevarse una mano a su nuca para rascarsela, quizás costaba porque la piel de la felyne era morena pero casi se podría decir que también se estaba sonrojando un poco. -Ser un poco impulsiva...pero nunca verte de mala forma...bueno haber estar ocupada pero creo...- Miro un momento sus cosas antes de girar un poco la cabeza. -Creo que poder acompañar si...poder dejar esto para mas tarde, darme un momento para montar. -Se sacudió un poco antes de empezar a armar el mecanismo del cuerno.

Era un mecanismo complicado pero al mismo tiempo fuerte y rígido, Cocoa tuvo que hacer bastante presión para que la concha encajara de nuevo y no era para menos ya que Cocoa balanceaba y golpeaba con el cuerno con mucha rudeza por lo que las piezas tenían que ser igual de resistentes. No tardo mas que un par de minutos antes de que dejara el cuerno a un lado, apoyado en el cabezal de la cama para dar un leve saltito y quedarse delante de la cazadora. Con las manos se limpio un poco la ropa y se la notaba visiblemente avergonzada pero su rostro intentaba ser el de siempre, impasible, con los ojos observando cada movimiento de la cazadora.

-Estar lista, donde querer ir?

Cargando editor
28/08/2021, 01:44
Radha

Quizás… — le contestó Radha recargada sobre una pared de la habitación, esto mientras alternaba entre observar a la gatita y mirar de soslayo hacia la nada, dudando de si había hecho bien. El espasmo no le pasó desapercibido, ¿pero eso era parte del lenguaje corporal de la felyne o una simple reacción sin relación alguna a lo que sucedía? En eso estaba pensando cuando notó que su compañera parecía comenzar a entender a qué se refería…

Desde su posición la bárbara no sabía si la engañaba la vista o si Cocoa de hecho se ruborizó, no obstante de lo que sí estaba segura era que las orejitas ajenas estaban de lo más inquietas, cosa que no recordaba haber visto antes. Estaba planteándose cómo preguntarle cuando la usuaria de cuerno empezó a hablar.

¿¡De verdad!? — al escuchar a la minina no pudo ni quiso ocultar su emoción, misma que además de reflejarse en el tono de su voz, se vio representada por un brillo peculiar en sus ojos y hasta un ligero rubor que en ella se notaba sin duda. — E-es decir… solo si no interrumpo lo que haces… — acto seguido se rascó la cabeza, pero ya que Cocoa misma le dijo que sí podía, Radha no insistió más en remarcar su ocupación, recordando lo que dijo Matcha. Así pues la esperó dándole suficiente espacio, aunque mientras tanto aprovechó para curiosear desde lejos el peculiar mecanismo del cuerno.

Una vez terminó y se acercó, la bárbara habría estado encantada de preguntarle si la dejaba acariciarle la cabeza como a la arquera, o bien de verla como tonta durante un buen rato, pues el semblante de su compañera era demasiado tierno. Si logró controlarse de no hacerlo, fue solo para no exhibirla y arruinar ese día que como dijo quería dedicárselo…

Pues… ¿ya desayunaste? Si no, el gremio podría ser un buen sitio para empezar, aunque también podríamos comer algo de lo nuestro — comentó, pues ella no tenía mucho de haber despertado, pero no arrastraría a Cocoa para que la viera comer si la gatita había aprovechado mejor su tiempo. — También podríamos ir a ver a las Shakalaka aunque sea de lejos, porque lo que te dije iba en serio, hoy quiero estar contigo, así que me gustaría ir a algún sitio donde también quieras estar — explicó.

Cargando editor
30/08/2021, 12:47
Shakalaka

-Si querer empezar por algún lugar...quizás campamento Shakalaka sea bien, yo ya haber desayunado...Matcha y yo levantar temprano.- Comento Cocoa y al ver el ambiente que había, ambas mirándose de forma continua, Cocoa se destenso un momento, levantando bien los brazos hasta que se escucho un ligero crujido antes de sacudirse entera. -Ir...vamos...- Tomando la muñeca pero no la mano de Radha, dirigiéndola hacia la salida de la habitación y mas o menos en la escalera soltarla pero ya había dirigido un poco y eso ya era mucho.

Mochi se estaba revolcando en aquella alfombra de piel como si fuera una especie de perrita, estaba con el vientre hacia arriba, brazos y piernas un poco encogidas y parecía estar frotando su espalda y cola contra la alfombra antes de que las chicas bajaran. Entonces se dio como una media vuelta con las orejas un poco levantadas antes de levantarse de donde estaba y correr hacia Cocoa.- -Kyum! Kyum kyum!- Dando vueltas alrededor de ambas cazadoras antes de salir corriendo hacia el exterior, parecía que al menos por un rato tendríais una acompañante mas. Fuera no estaba Matcha, ella parecía haber decidido marcharse, Anko seguía tumbada pero ante las mordidas y empujones de Mochi esta se levanto soltando un gruñidito de molestia por haber sido molestada antes de que ambas dos se pusieran a corretear por el camino del campamento.

-Shakalakas estar en afueras...ser un poco ruidosas...- Se encogió de hombros Cocoa mientras iba dirigiendo a Radha para que la fuera acompañando. Quitando el pequeño incidente de la mañana con el huevo, que no era temprano y que el cuerpo de Radha aun se sentía resentido, el dia era de lo mas hermoso, el sol brillaba con fuerza calentando el campamento pero había una brisa primaveral que controlaba el calor haciendo que se estuviera bien.

Lo mas curioso de todo era el cambio del campamento, ya no solo era el hecho de que había mas vida, pasaban cazadoras con sus respectivas felynes de aquí para allá si no que también habían algunas casas que ya eran habitables, aunque de momento permanecían vaciás, Daifuku de tanto en tanto gritaba “Gente! Gente!” pero parecía que se estaba relajando un poquito después de ver tantísimas personas a lo largo del dia. El campamento estaba vivo y mas vivo estaba el de las Shakalakas.

-AAAAAAAAAAAARRRRRRAAAAAAAAAAAAAAH!!!!- Gritando las Shakalakas a modo de grito tribal como si fueran pequeño gritos de felicidad. El campamento Shakalaka estaba vivo y habían bastantes Shakalakas, quizás una treintena de esas pequeñas personas aunque no se contaban las que estaban dando vueltas alrededor del campamento. Unas cuantas se habían quedado como con las manos arriba cuando Mochi había aparecido, mostrando sorpresa y cuidado mientras la Tobi se levantaba a dos patas y también las observaba, haciendo “kyum kyum” a cada una que intentara acercarse a Anko la cual estaba encogida detrás de Mochi.

-Oh!- Una de las Shakalakas al ver a Radha se acerco a ella haciendo un gesto de reverencia ante su presencia. -Gran guerrera de gran Melena, honrarnos con visita, también honrarnos con invitacion, matriarcas contentas.

Cargando editor
31/08/2021, 00:58
Radha

Ya, me imaginé — dijo la bárbara a la par que se rascaba la nuca, pues era entendible. — Vamos pues — lo que sí le resultó bastante sorprendente fue que luego de estirarse la felyne le tomara la muñeca, o al menos parte de esta, pues eso era algo que no había sucedido antes. Claro que a Radha no le molestó, tampoco hizo nada por apartarse, al contrario, miró curiosa y hasta sonrió, solo se aguantó de señalarlo porque supuso que si lo hacía podría molestar a Cocoa y era mejor intentar ver qué pensaba la gatita. Así pues la siguió aunque midiendo sus pasos que por naturaleza eran mucho más amplios que los ajenos. Tampoco dijo nada cuando la soltó, aunque para ese momento ya estaba algo roja de la cara…

Ja, sí que tienes energía, ¿eh? — al encontrarse con la efusiva tobi comentó la bárbara, siendo que no le molestaba ser seguida por Mochi, pero a la vez miró con curiosidad a Cocoa para ver si esta opinaba algo al respecto. De todas formas la pequeña ardilla parecía tener sus propios planes, y aunque se veía muy interesada en ellas, más pronto que tarde se enfocó en su adorada Anko cuando la vieron al salir. Por otro lado que la Prey estuviera tranquila incluso sin Matcha cerca decía mucho del entrenamiento a la que la habían sometido, o quizás de la personalidad de la criatura y de cómo interactuaba con su alfa. Verlas juntas, de nuevo, contagiaba de energías a la bárbara.

Sí, me imagino, de por sí el llamado de Daifuku es algo ruidoso… si las Shakalaka estuvieran cerca, volverían locas a las que duermen aquí, ¿no? — algo avergonzada reconoció la que tenía el sueño como roca, pues a ella normalmente esos ruidos no le afectaban tanto como había visto en otras. — Aun así, no pensé que de hecho vendrían, y menos que se quedarían a cierta distancia — comentó con cierta curiosidad a la par que avanzaba. El viento diurno movía su cabellera con cierta armonía, así también acariciaba su piel acostumbrada al sol. Se sentía todavía un poco cansada, pero por momentos se imponía la sensación agradable de estar descansando al menos por ese día. También a la par que caminaban la humana iba mirando la cabecita de Cocoa, el cómo se movían sus orejitas y cola, aunque no perdía mucho de vista a las que iban más allá, a su propio ritmo. — Me pregunto qué pensarán ellas de este lugar… — planteó.

Obviamente ver con vida aquel sitio al que llegó cuando estaba en ruinas era no solo motivador y razón para alegrarse, sino también una especie de prueba de su esfuerzo, de que con la ayuda de todas las que trabajaban o visitaban allí, la pobreza de antes iba siendo superada para dar paso a una nueva era de interesantes cambios y vida. — Al principio nunca habría imaginado que esto se volvería así — dijo honestamente.

¡¡¡…!!! — al llegar con las pequeñas enmascaradas Radha se estremeció por el grito repentino. A simple vista eran muchas, aunque quizás menos que cuando las vio por primera vez, sin embargo antes de poder relajarse la bárbara vio con cierta preocupación cómo interactuaban las ajenas con Mochi y Anko, siendo que las dos acarameladas parecían tener ciertos nervios ante la pequeña gente.

Oh, hola — dijo ante aquella que la reverenciaba — N-no es para tanto, es decir… yo también estoy feliz de que ustedes aceptaran venir aquí — agregó sin saber bien cómo tomarse esa actitud, pero estaba intentando hacerse a la idea. — Por cierto, ellas son Mochi y Anko, amigas mías… no les harán daño si ustedes no las atacan — aseguró — Esta es Cocoa, mi compañera y también amiga — luego aprovechó para presentar a la gatita, pues si bien a ella la reconocían, no estaba segura si sería igual con todas. — ¿Están cómodas aquí? — acto seguido preguntó, cuestión que solía hacerle a todas las nuevas habitantes de su campamento… o en este caso de las cercanías del mismo.

Cargando editor
31/08/2021, 13:27
Shakalaka

-Tu invitarlas...Shakalakas venir.- Se encogió de hombros mientras iban caminando hacia el campamento de las Shakalakas, las orejitas de Cocoa de tanto en tanto tenían un pequeño espasmo por el aire fresquito, pero solo era un movimiento natural de ella, lo que si se podía ver el ondular de su cola con cada movimiento que daba, en alguna ocasión Cocoa se quedo mirando a Radha con una ceja un poco levantada pero parecía ignorarlo por el momento y seguir hacia delante.

Los gritos eran una forma continua de comunicación entre las Shakalakas, los sonidos sobretodo eran tribales y no parecían que ninguna estuviera armada por lo que por el momento Radha podía estar tranquila. -Oh! Si, nosotras recordar, criatura para las niñas, no saber que ella tener hembra pero tener cuidado, mientras ellas no morder tampoco nosotras atacar.- Aseguro la Shakalaka mientras se volvía a inclinar ante la presencia de Radha, parecía que esta había causado una gran impresión al haber derrotado a la Kut-ku.

-Nosotras muy cómodas, venir? Gran honor que gran guerrera de gran melena venir con nosotras.- Ofreció con sus manos para que la fueran acompañando antes de levantar las manos y soltar un pequeño grito en su lengua. Entonces las Shakalakas de los alrededores dejaron de gritar y de moverse para quedarse mirando fijamente a Radha con un largo -Oooooooooohhhhhhhhh....AAAAAAAAARRRRRRRRAAAAAAAAAHHHHH!!!- Gritando todas al unisono mientras empezaba lo que parecía ser una melodía muy parecida a la fiesta que habian dado en honor de la cacería. Conforme la Shakalaka iba guiando a la pareja Radha podía ver que el campamento no era muy diferente al campamento que había visto en su momento. En este caso habia un conjunto de tiendas de piel alrededor del campamento provisional que centraba una especie de sala de reunión que no era otra cosa que un montón de bancos junto con la gran hoguera que en estos momentos estaba apagada por obvios motivos. Pero alrededor de dicha hoguera se podían ver a algunas Shakalakas que estaban cocinando carne y pescado en pequeñas hogueritas e incluso algunas estaban tallando huesos o creando lanzas, estaban trabajando aprovechando el día, aunque algunas se quedaron mirando a Radha con admiración.

-Estar bien, agradecer oferta de gran guerrera para que Shakalakas hacer campamento aquí, nosotras contentas.- Sonrio dicha Shakalaka como si hubieran entendido su invitación a su manera. -Algunas de nuestras cazadoras estar un poco tensas por criaturas, pero confiar en gran melena para mantenerlas bajo control, saber que ser una gran guerrera, con tiempo no temer.

Cargando editor
01/09/2021, 01:46
Radha

— Ya, pero… no estaba segura si de verdad lo harían, es decir, como parece gustarles moverse de un lado a otro… — aclaró Radha, pues ella las entendía hasta cierto punto ya que durante una parte de su vida fue más o menos así también, en cualquier caso que unas nómadas como ellas hubiesen aceptado acercarse era una gran victoria para la bárbara. De entre los movimientos de Cocoa, lo que más llamó la atención de la humana era cómo se contoneaba aquella cola, algo que no recordaba haber visto antes o al menos no tan seguido, por lo mismo de pronto la cazadora se quedaba como embobada y solo atinaba a reaccionar ante la mirada ajena…

¿Para las… niñas? — la bárbara murmuró con una sonrisa ligeramente nerviosa pues parecía que la enmascarada tenía un concepto bastante claro de Mochi, pero fijo en aquella vez que se conocieron. Rio un tanto nerviosa. — Se “conocieron” hace poco… son felices juntas pero Mochi es muy protectora con ella, no le gusta que la toque otras — advirtió solo por precaución, ya que todo parecía indicar que el par compuesto por la tobi y la prey podrían estar tranquilas allí, ahora bien, pese a que había visto varias veces esa muestra de respeto hacia su persona a la bárbara todavía se le hacía peculiar que la tuvieran en tan alta estima. Estaba por comentar algo al respecto cuando la invitación ajena la dejó totalmente roja…

¿V-vamos? — así que solo pudo decir a Cocoa.

Ya al avanzar los nervios le bajaron en cierta medida porque pudo ir viendo lo que habían montado allí, pero cosas como escucharlas cantar al parecer algo para ella o ver nuevas reacciones de admiración la cautivaba a la par que le devolvía los nervios. La sociedad Shakalaka era muy curiosa, pues como las felynes salvajes, las enmascaradas eran un tanto primitivas  pero también tenían muchas cosas organizadas a su manera. Su pequeño tamaño además despertaba la ternura en aquella que podía ser muy ruda pero también débil ante ciertas cosas, como las hogueritas. Cuando volvió a hablar la que servía de guía, Radha sonrió — Pues pueden quedarse todo el tiempo que quieran, yo encantada — y aseguró ya que le alegraba saber que esa era la perspectiva ajena. — Varias de ellas fueron invitadas como ustedes, acercarse mucho puede ser peligroso, pero mientras estén en sus recintos no hay problema, además no soy la única responsable, hay muchas felyne muy capaces que cuidan todo el tiempo — aclaró — Incluso tenemos una maestra domadora — entonces miró de soslayo a Cocoa — Y aquí tienen a la que es capaz de curarme, logrando que pueda enfrentar a criaturas que sola me vencerían — ya que estaba parada casi a su lado, Radha dio un paso hacia atrás y extendió sus brazos para señalar con ellos a la morenita, pues ciertamente tenía bastante mérito en las hazañas que las Shakalaka parecían adorar.

Así que pueden estar tranquilas, este lugar es seguro — dijo con firmeza en su tono pero una sonrisa en su rostro.

Cargando editor
01/09/2021, 10:45
Shakalaka

-Kyum! Kyum kyum! Kyum!- La Tobi estaba ladrando a su forma sin dejar de esta a dos patas mientras alguna Shakalaka se acercaba a ella pero esta advertida de esa forma que no queria que lo hicieran, Anko estaba ligeramente encogida detrás y solo fue cuando Mochi se puso medio en guardia y palmeo el suelo con la cola que las Shakalakas tomaron cierta distancia de ella, incluso alguna Shakalaka niña. No era que Mochi estuviera de mal humor, el dia que Radha conoció a las Shakalakas, Mochi estaba sola y había entretenido a las niñas dejándose pintar, pero en este momento estaba Anko y Mochi parecía estar mas sobreprotectora por lo que las Shakalakas desistieron de intentar tocarlas. En el momento en que se retiraron, Anko hizo un gorgoteo suave de lo mas dulce mientras que Mochi ladeo la cabeza y empezó a darle besitos en la mejilla antes de empezar como a lamerla como si fueran sus besitos especiales, en todo caso no fue a mas y ambas continuaron explorando el campamento de las Shakalakas a cierta distancia pero prácticamente junto a Radha.

-Oooooooooh.- Una decena de Shakalakas se quedaron mirando a Cocoa mientras Radha la iba poniendo por las nubes con el arte que tenia ella de curar. -Oye...a mi no gustar esas cosas, no querer llamar atención.- Contesto Cocoa mientras se cruzaba de brazos pero ya era un poco tarde. Al igual que con Radha las Shakalakas rodearon un poco a la pareja mientras miraban a la felyne la cual movía los ojos de lado a lado como para vigilar a las Shakalakas y movía también las orejitas nerviosa antes de que estas empezaran como a medio adorarla. -Pequeña felyne de piel morena...seguir a guerrera de gran melena....ooooooh....ella vencer grandes criaturas, gran felyne de piel morena....gran felyne de piel morena...gran felyne de piel morena.....AAAAAAAARRRRRRRRAAAAAAAAHHHHH!!! - Con cada vez que repetían ese seudónimo por parte de Cocoa sus voces se iban haciendo mas y mas estridentes hasta que todas las Shakalakas volvieron a gritar de forma tribal y ahora danzaban alrededor de la pareja.

Cocoa sacudió su cabeza visiblemente abrumada aunque su cola no parecía parar de ondular en ningún momento, una de las Shakalakas le coloco a la felyne una especie de collar de plumas, Cocoa parecía querer alejarse de ella pero como la Shakalaka había sido mas rápida quedo bien colocada en ella, lo mismo paso con Radha aunque para ello la Shakalaka tuvo que saltar. -Oooooooooh! Grandes guerreras...festejar con nosotras si!- Ofrecieron las Shakalakas por si deseaban quedarse con ellas a celebrar el nacimiento de una nueva guerrera, al menos bajo los ojos de las tribales.

Cargando editor
01/09/2021, 21:53
Radha

La situación entre Mochi, Anko y las Shakalaka mantenía a Radha con la guardia medio alta, siempre vigilante pues aunque sabía que las enmascaradas tenían buenas intenciones, también recordaba cómo fue para la tobi cuando estuvieron con ellas la primera vez, y dudaba que tuviera la misma paciencia si le tocaban a su querida Anko. Por suerte para todas las cosas se resolvieron pronto y de forma más o menos clara, bastante pacífica dentro de lo que podría haber sido, lo que permitió que la parejita formada por las dos criaturas pudiera tener algo de paz y darse sus muestras de amor. Radha suspiró como si le quitaran un gran peso de encima, pero luego sonrió.

Lo siento, pero es la verdad… — ya luego susurró hacia la gatita cuando vio no solo cómo reaccionaba esta, también las enmascaradas que parecían haber sido introducidas a una nueva heroína. Claro que notó cómo las rodeaban, pero sabiendo más o menos que las nómadas eran más amigables que agresivas con ellas, en vez de vigilante la bárbara las miraba curiosa, ¿acaso iban a bailar o algo así?, al fin y al cabo había canciones. Lo que no esperó fue que gritaran de esa manera, pero ya que estaban reconociendo tanto a Cocoa la bárbara incluso se emocionó y hasta se veía como que quisiera unirse a ellas. Allí de nuevo resonaba su alma un poco más salvaje que otras cazadoras civilizadas.

Mientras veía las reacciones de la gatita y de su cola, la humana fue incapaz de advertir que ella sería objeto de un trato similar, aunque ciertamente no le molestó, de hecho miró a aquel collar con bastante gusto. — Waa es hermoso… — dijo sin reparos, no obstante cuando la enmascarada las invitó, lo primero que hizo Radha fue ver a su compañerita. — Hoy es tu día, Cocoa… — mencionó en voz baja mientras se acercaba más a ella, incluso inclinándose un tanto para poder hablarle desde un mejor ángulo.

¿Quieres festejar con ellas un rato, o quieres seguir paseando, relajarte en silencio? — ese era un momento perfecto para acariciar su cabecita, pero no lo hizo porque no quería causarle molestia; lo que sí no pudo evitar fue que, al estar parada tan cerca, su cuerpo rozara levemente la inquieta cola ajena. En cualquier caso quería que quedara claro a la morenita que pese a todo era su prioridad.

Cargando editor
02/09/2021, 11:50
Cocoa

Visiblemente Cocoa estaba abrumada, las Shakalakas estaba festejando por algún motivo o simplemente estaban buscando un motivo para festejar, pero de todas formas estaban adorando a Cocoa y a Radha invitándolas a que se unieran a ellas. Cuando Radha estaba muy cerca, rozando prácticamente la cola, esta entro en contacto y por un momento se aparto como asustada por el contacto, pero en cuestión de segundos parecía que se estaba relajando así que suavemente se fue acercando al calor del cuerpo de Radha al ver que no quería atrapar su cola como en otras veces. -Mi dia...es difícil de explicar.- Empezó a decir Cocoa antes de toser un poco, parecía querer negarse pero la mirada de las Shakalakas era difícil de rechazar. -Estar bien...un rato...- Se dejo hacer antes de que las Shakalakas, una vez mas estallaran en gritos de alegria.

Las llevaron cerca de la gran hoguera, que ahora mismo permanecía apagada y allí dejaron que se acomodaran, colocaron lo que parecía ser una alfombra para que se sentaran y ademas sirvieron unas bebidas en vasos de madera, solo con oler la bebida se identificaba fácilmente el alcohol. -Kyum!- Mochi se acerco por detrás de Radha, olfateando la bebida un momento con curiosidad antes de estornudar fuera del vaso y balancear la cabeza como indicando que no le había gustado, antes de frotarse un poco contra Radha mirándola de tanto en tanto, pasando por entre sus piernas antes de alejarse un poco, volver y alejarse como si fuera una especie de juego, aunque en todo momento estaba mirando a Anko la cual había encontrado un rinconcito donde tumbarse y estaba tranquilamente como tomando el sol, balanceando su cola por el suelo mientras bostezaba de tanto en tanto. Se notaba mucho la diferencia entre Anko y Mochi, de una mamífero y una reptil, pero aun siendo de especies diferentes parecía que Mochi ya había escogido hembra, al menos por el momento. Pero no quería alejarse mucho de Radha como si entendiera que la había abandonado un poco, asi que estuvo medio cerca de la parejita.

Al alrededor algunas Shakalakas empezaron a sacar carnes secas con diferentes especias ofreciendoselas a Radha y Cocoa, estaban un poco duras por el proceso de secado pero estaban muy gustosas, ademas de que cada vez que alzaran la bebida una Shakalaka la rellenaría de unos odres de arcilla. -Ruidosas....pero no malas. -Comento Cocoa mientras daba un leve trago a ese vaso y pasaba la mano por la barbilla de Mochi la cual alzo la cabeza para dejar su cuello expuesto disfrutando de la mano de la felyne.

Cargando editor
03/09/2021, 01:46
Radha

Poco faltó para que Radha estallara también en un grito como las Shakalaka, esto tanto por el hecho de Cocoa no terminara de aborrecerla por tocar su colita accidentalmente y obvio también porque muy a su manera la felyne aceptó la invitación. Eso significaba no solo fiesta, sino también que no estaba del todo molesta, incluso parecía relajarse... — ¡Grandioso! — lo que no pudo evitar fue exclamar aquello mientras levantaba sus brazos a modo de festejo.

Con curiosidad siguió a la guía aunque sin perder de vista a la que era una de las razones del festejo, tampoco a las dos acarameladas. Una vez puesta la alfombra pensó en sentarse, aunque con curiosidad tocó con la punta de su bota la tierra a su alcance, solo un poco. La bebida, o más bien su aroma provocó que la más alta allí se saboreara de forma instintiva, casi como una criatura que ve algo delicioso, pues ciertamente Radha tenía una debilidad natural hacia el alcohol, muy distinta a la reacción de Mochi que la hizo reír. — Esto no es para crías, Mochi, por eso no te gusta — bromeó antes de ver lo que parecía hacer esta, o sea buscar juego.

También notó cómo veía a la prey que estaba más allá, pero si la tobi misma se había acercado, no iba a ser ella quien la corriese, es más, supuso que Mochi podría tener necesidades que con Anko no podía llenar, que al fin y al cabo no todo era estar en pareja, la tobi también era joven y quizás necesitaba la seguridad de alguien mayor, o bien otro tipo de cariño. — ¿Qué sucede, Mochi, acaso quieres jugar un poco? — se inclinó para acariciarle la cabecita, pero lejos de solo despeinarla como siempre hacía, bajó a sus mejillas y las estiró un poco como abuela, solo que con cuidado, y luego fue hacia su mentón donde rascó suavemente. Tampoco pasaron desapercibidas las orejitas ajenas. Se notaba que Radha disfrutaba mucho hacer ese tipo de cosas, así que mimó a Mochi con ganas.

Ya cuando comenzaron a servir, Radha se sentó junto a Cocoa, y aprovechando que las Shakalaka estaban de lo más generosas bebió sin preocuparse mucho, aunque midiendo el ritmo de sus sorbos para evitar embriagarse pronto. También ayudaba que tenía una tolerancia decente al alcohol.

Las carnes no fueron problema para sus dientes y para la fuerza de su mandíbula, cosa que quedó clara con lo fácil que arrancaba trozos. Como ella no había desayunado, el hambre la impulsó. — ¡Está delicioso! — dijo con ánimo a las anfitrionas. — Son como pequeñas yo… — opinó curiosa ante el comentario de Cocoa, solo entonces externando la impresión que le venían dando. Ya que la felyne acariciaba la parte frontal de Mochi, Radha comenzó a jugar un poco con la punta de la cola de la tobi pese a que sabía que no era muy sensible allí. — Me podría acostumbrar a vivir de fiesta en fiesta, aunque debo decir que también extraño estar en el campo, más tranquilas, o luchando — comentó de forma casual — Incluso me entra nostalgia a cuando solo éramos nosotras dos viajando, ¿te acuerdas?, en cuanto te vi sabía que quería que fueras mi compañera… — confesó levemente ruborizada, tal vez por el alcohol…