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Monster hunter +18 (Hentai-yuri)

Campamento Norte (Radha)

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20/09/2021, 18:16
Cocoa

El ambiente se estaba tiñendo de rosa, ya no solo era el que Cocoa estaba maullando de una forma dulce, gemido tras gemido si no que todo se estaba llenando de sonidos de lo mas sugerentes. El como Radha lamia el interior de la felyne hacia que esta se estremeciera ademas de que el sonido acuoso era casi como un hilo musical para el ambiente casi amenazando seguramente a ser escuchadas ya que estaban al aire libre. El cuerpo de Cocoa se iba perlando haciendo que su cuerpo moreno estuviera de lo mas húmedo, ya no solo por el calor del vapor su no por el sudor de su excitación.

Aunque lo que mas lubricado estaba era su coñito el cual mojaba los labios y lengua de Radha mientras compartían fluidos de una forma continua, el carnoso interior de la felyne era tal como podia recordar Radha, húmedo y lleno de pliegues que acompañaban a su lengua como si hubieran varias lenguas en su interior acompañándola en todo momento. Al separarse un par de hilos de fluido acompañaban a su lengua haciendo que no solo se estremeciera si no que los rasgados ojos de Cocoa se quedaran fijos en el rostro travieso de la cazadora antes de cerrarlos en un largo maullido para seguidamente ser atacada en su clítoris.

Entonces el cuerpo de Cocoa aunque era de lo mas honesto también se puso un poco rebelde, sus piernas amenazaban con cerrarse aunque se volvían a abrir al instante intentando relajar un poco la cantidad de olas de placer que brindaba la lengua de la cazadora haciendo que los muslos rozaran de forma continua las mejillas de Radha que de tanto en tanto se podía sentir como presa por su calor y aroma antes de abrirse de una forma de lo mas sensual. Las manos y pies de Cocoa no se estaban quietas, la felyne parecía ser de lo mas sensible en esa zona y mas cuando estaban tan relajadas entre las dos, no paraba de mover los dedos de los pies y de las manos tomando la toalla todo lo que podía antes de arrancar un dulce maullido. -B...basta....vas a hacer...correr....- Maulló desesperada mientras sentía sus labios abrirse.

Era como si hubiera abierto una compuerta, sus labios morenos mostraron un rosado y carnoso interior mojado que conforme mas tiempo estaba abierto mas fluidos sacaba, mojando los dedos de Radha antes de sentir como uno de estos entraba en ella. Era difícil y fácil bucear en el interior de la felyne, Radha ya lo había probado antes, cada vez que movía los pliegues de su interior estos volvían a la posición anterior dando una sensación continua de estrechez pero que al mismo tiempo era fácil moverse por su interior de lo lubricada que estaba, toda una tentación. -Ah...no mover tanto...- Mordiéndose el labio inferior con fuerza mientras por la posición y por la fuerza de los continuos estímulos las piernas de Cocoa se quedaron arriba, temblorosas mientras sus regordetes labios rodeaban bien el dedo de Radha y su clítoris quedaba de lo mas expuesto, amenazando con correrse en cualquier momento si seguía estimulando.

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20/09/2021, 20:50
Radha

Pues eso exactamente lo que quiero, ¿recuerdas?, hoy es tu día y como tal tú eres el centro de todo, quiero que te sientas bien y que te relajes, que disfrutes y que te dejes llevar, al fin y al cabo sigue siendo parte del masaje… — sin dudarlo Radha le contestó a su compañerita, y en ese momento pudo notarse que estaba como embriagada de ese femenino néctar que no tardó en saborearse. La bárbara también se veía ruborizada, deseosa…

Pese a todo relajó bastante sus movimientos cuando la morenita se lo pidió, aunque no sacó ni un centímetro de su dedo, solo empezó a ir muy muy lento, lo que a su vez le permitió que pudiera ir sintiendo mejor cada detalle del interior ajeno y acariciándolo con un ritmo casi tortuoso. Llena de maña la cazadora incluso comenzó a soplar sobre la sensible piel húmeda de la felyne, más específicamente las ingles y su área íntima, esto mientras un segundo dedo iba buscando entrar pero sin variar el ritmo.

Estás deliciosa, Cocoa, me encantaría probar tu corrida — le dijo mientras ponía su otra mano sobre la pierna ajena más cercana, esto evitar que se cerrara, que al fin y al cabo en fuerza ella tenía una buena ventaja. En paralelo volvió a sacar su lengua pero ahora para “asaltar” esa perlita lustrosa solo con la punta de su órgano bucal, algo que requería de mucha precisión pero a la vez dejaba que la humana diese una estimulación como más detallada, directa sobre aquella redondez. Conforme la gatita soltaba humedad, Radha la sorbía sin preocuparse por el sonido, de hecho también gemía aunque con voz más grave y a menor volumen que la de su compañerita. Una vez acomodó bien la cabeza entre los muslos de color deliciosamente bronceado, la humana hizo subir su mano por el torso de la felyne en una caricia que solo detuvo sobre sus pechitos.

Allí Radha empezó a acariciar primero los pezones, pronto pasando a la respectiva base. De tanto en tanto la bárbara también ponía atención a los costados ajenos y hasta enterraba muy suavemente los dedos sobre su piel, sin embargo no se iba a quedar quieta “solo” con eso.

Dentro de la intimidad de Cocoa, eventualmente Radha comenzó a empujar con sus dedos de modo que pareciera querer presionar hacia afuera, específicamente un área que se sentía como esponjosa, suave. De su lengua la saliva escurría y mojaba todavía más aquella cuevita rosa. Poco a poco sus labios volvieron a cerrarse alrededor el monte de la gatita, y mientras Radha cerraba los ojos, manteniendo el ritmo lento de sus caricias, dentro de su boca su lengua se volvió intensa…

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21/09/2021, 20:48
Cocoa

-Día mio...- Repitió Cocoa mientras ahora el movimiento era mas suave. Al ahora no forzar tanto el orgasmo de Cocoa, aunque seguía estando en el borde del climax, se podían apreciar mas los estímulos que estaban recibiendo y las respuestas del cuerpo de la felyne. Su carnoso interior casi parecía competir con lamer el dedo de Radha, cada vez que ella apartaba buscando esa zona de as placer, su interior parecía querer guiarla haciendo que fuera mas facil el encontrar su zona de mas placer sintiendo casi como si se pudiera ver el dedo a través de su morena piel, de hecho solo por la fuerza se podía ver un ligero bultito en su pelvis donde golpeaba los dedos de Radha.

Sus pechos parecían fundirse con cada movimiento de Radha, los pezones estaban duritos pero al contacto con la yema se hundían en su piel como si se trataran de olas morenas. Entre maullidos Cocoa parecía que estaba deshaciéndose en placer, ya no maullaba de una forma tan alargada, era mas como ligeros jadeos provocados por todos los estímulos y placeres de Radha, notando como su perlita de placer estaba siendo continuamente acosada por la lengua de Radha, de forma tan directa. Los fluidos que bañaban su pelvis y sus muslos ya no solo eran suyos, eran también de la saliva de la cazadora en una mezcla de lo mas pervertida para la felyne.

Pero no pudo aguantar mas, aquella lengua la estaba volviendo loca y el como la estaba masturbando acabo con su resistencia, arañando el suelo ahora de forma mas profunda hasta el punto de que la toalla se rasgo ante sus garras mientras abría sus piernas levantando le pelvis facilitando que Radha pudiera tomar de su elixir. En un suave, agudo, largo y precioso gemido gatuno Cocoa empezó a correrse haciendo que sus fluidos bañaran ya no solo los labios si no también la boca de Radha, como si se hubiera estado conteniendo por bastante tiempo, de una forma abundante casi provocando una pequeña piscinita en su boca conforme se vaciaba de placer en ella.

Las orejitas de Cocoa se movían un momento antes de bajar del todo mientras su cola se enrollo en uno de sus propios muslos antes de bajar la cintura de golpe, sonando sus nalgas contra la piedra quedándose de lo mas jadeante, con la respiración totalmente entrecortada, sus pechos subiendo y bajando de forma continua mientras sus labios vaginales se abrían y cerraban como si tuvieran vida propia mirando a Radha con los ojos vidriosos. -N...nya...

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22/09/2021, 01:33
Radha

Al tener la boca ocupada, Radha solo se limitó a asentir para luego continuar tratando a Cocoa con el máximo cuidado posible, como si fuera una delicada flor, pero a la vez añadiendo lascivia ferviente a cada movimiento, reconociendo que la felyne también era un ser vivo con deseos a la que quería llevar hasta el punto límite por el simple hecho de darle gusto, obteniendo disfrute propio en el proceso. Huelga decir que en ningún momento la bárbara se tocó a sí misma, pues la prueba de su determinación era que le estaba dedicando todo de sí a la morenita. Eso le gustaba y a la vez también le permitía concentrarse mejor, saborear cada estímulo táctil o visual, así como los fluidos que llegaban a su boca.

Los maullidos le iban diciendo por dónde tocar, de modo que cuando los escuchaba más dulces se enfocaba en seguir estimulando e incluso cambiar, como por ejemplo de caricias a pequeños tirones, o bien a cariños con su palma. A pesar de ser pequeños, los senos de Cocoa daban para mucho debido a su sensibilidad, y la bárbara se aseguraría de explotarla por completo…

Hablando de maullidos, aquel especial que dejó salir su compañera fue sin duda aviso de lo que se acercaba, así que la humana centró sus esfuerzos donde notara que estaba más sensible y así mismo sorbió del jugo femenino ajeno cuando la morenita lo expulsó, como si fuera una viajera sedienta al encontrar un oasis. Con su fuerza la sostuvo aunque no detuvo sus movimientos, no obstante más pronto que tarde la humana se separó pero solo para ir hacia arriba, cubriendo a Cocoa con su cuerpo pero sin llegar a tocarla.

¿Puedo… besarte? Me encanta cómo te ves, cómo se escucha tu voz, cómo sabes… — y mientras esperaba respuesta la rodeó con un brazo para así estrecharla de manera intensa aunque no lo suficiente para lastima, pegándola a su cuerpo caliente y fibroso. — Me encantas tú — aseguró tratando de mirarla a los ojos.

Si no avanzó mucho más es porque no quería hacerla sentir del todo incómoda, pero Radha fue incapaz de evitar el saborearse aquellos labios pequeños y brillosos, incluso “ignoró” el hecho de que con esa posición la cola ajena invariablemente tendría contacto con su costado si es que seguía enrollada…

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22/09/2021, 12:21
Cocoa

Nya...ah...-Todo el cuerpo de Cocoa estaba de lo mas agitado, sus labios se quedaron entreabiertos con los colmillitos un poco sobresaliendo mientras que su mirada continuaba brillosa mirando a la barbara. Cuando estuvo tan cerca de esta, sintiendo casi el calor que desprendía su cuerpo Cocoa parecia de lo mas pequeñita en comparación con la constitución de Radha. Por un momento no contesto demasiado, de hecho miro hacia otro lado como si estuviera pensativa aunque mas bien estaba de lo mas avergonzada antes de tomar aire en un largo suspiro, soltando un intenso jadeo antes de recomponerse. -Tu...no estar mal...- Respondió Cocoa antes de tomar su nuca y con algo de firmeza ir acompañando el cuerpo de Radha para que acabara de tumbarse encima de esta.

El contraste entre la rudeza de Radha y la suavidad de Cocoa era palpable pero ambos cuerpos estaban de lo mas cálidos y no todo era por el calor del ambiente. Se quedo como un momento pensativa, hubo tan solo unos instantes de duda antes de que Cocoa lamiera los labios de Radha una vez, una segunda, una tercera y a la cuarta ya era un beso mas humano. Tal como podía recordar Radha aunque la lengua era húmeda, se notaba que era una lengua mas rasposa de lo normal pero no por ello era incomoda, era mas bien exótica el poder sentir como buscaba el acariciar la lengua de Radha.

Ademas por como estaban colocadas, la pelvis de Radha golpeaba el vientre de Cocoa pudiendo esta notar el calor que desprendía el miembro que por supuesto quizás por la excitación o por el veneno que se acumulaba, se encontraba de lo mas dura y apuntando al vientre de la felyne. El rozar la cola no parecía un problema, esta si que sintió que la tocaba pero enseguida se retiro, dejando un momento de suavidad en ambos muslos antes de que quedara de nuevo en la piedra. -Mmmmm...basta...- Dictamino Cocoa apartando el beso y dando un par de palmadas en el hombro de Radha, mirándola un momento antes de indicar que quería levantarse. -Dejarme mover...no gustar tanto tiempo encima...-

Dejara o no, Cocoa se deslizaría por el cuerpo de Radha para poder salir de su abrazo, quedándose un momento sentada en la caliente piedra mientras miraba a la barbara, sacudiendo su cabeza de lado a lado mientras tanto sus orejitas como su cola se balanceaban una en pequeños espasmos y la cola en ondulaciones en el aire. Era un momento intimo, Cocoa se habia corrido y se la notaba visiblemente activa, incluso su mirada parecía mas felina de lo normal. -Mmmm...- Miro un momento al agua que parecía la superficie de un espejo reflejando los ultimos rayos de sol, hundiendo primero su mano y luego su brazo hasta que, colocándose en cuatro por unos instantes, mostrando bien tanto su anito como sus labios vaginales húmedos, se deslizo por el agua hundiéndose en esta emergiendo a pocos metros de Radha.

El cuerpo húmedo de Cocoa ganaba mucho, era como una belleza de ébano ahora decorada con perlas preciosas, la felyne se fue acercando a la cazadora y en vez de tomar su mano, fue hacia su miembro, tomándolo con firmeza para medio guiarla hacia el agua como si se tratara de una correa. -Ahora tu turno...-

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24/09/2021, 01:07
Radha

Debido a la cercanía la bárbara tenía su atención bien fija sobre la morenita, tan era así que fue notando cada pequeño cambio en ella, delineando con sus ojos cada detalle, como si la acariciara con la vista, y es que en ese momento la felyne parecía de lo más indefensa y pequeñita por el contraste, alguien a quien debía de cuidar, o al menos así lo dictaron sus instintos de guerrera. Escuchar aquella respuesta la hizo sonreír de manera más que notable…

Aun así la primera lamida la hizo estremecer, pero solo esa, ya que para las subsecuentes la cazadora había entendido de qué iba el asunto y así para cuando llegó el beso Radha no tardó en corresponder con similar pasión a cuando estaba entre las piernas ajenas, solo que pese a su vehemencia ella de hecho dejó que Cocoa llevara el ritmo del beso. La bárbara se centró de atesorar esa sensación, deleitarse sintiendo la humedad en la boca contraria y en estimular a la ajena con su lengua, así mismo también acariciaba esa piel morenita que tanto la encendía, y claro, se estremecía por el contacto de su inflamada intimidad latiendo y deseando cada vez más unirse de una manera más profunda con Cocoa. Ese pequeño vientre era una fuerte tentación. La retirada de la cola felina la hizo estremecer por un instante.

Vale… — a pesar de lo mucho que estaba disfrutando el compartirle su sabor a la gatita, la bárbara no rechistó cuando esta se quiso apartar, es más, ante las palmaditas suaves que sintió sobre su fuerte hombro, Radha dejó ir a la felyne. Aun la imagen de Cocoa sentadita mirándola fue capaz de hacer aumentar el rubor que mostraba la bárbara, pero así también de sumar al calor que la embargaba. Sus reacciones provocaban mimarla o incluso ser más intensa, pero con la curandera todo debía ir poco a poco, o al menos eso estaba confirmando la bárbara ese día.

La felyne se notaba como más animal, pero incluso Radha estaba despertando cierto instinto salvaje gracias a ella…

Así pues, cual criatura que acecha, la mujer miró cómo la felyne se sumergía por voluntad propia, dándole tamaño espectáculo antes y después, ya que su cuerpecito era una tentación completa y más aún al brillarle la piel gracias al agua remanente que escurría acariciándola, motivo de total envidia hacia el líquido por parte de la cazadora, vale aclarar.

Aah… — apenas se sintió tomar así, obviamente la humana reaccionó pues estaba tan dura y húmeda como sensible, pero también sin dudarlo avanzó detrás de la gatita, a su paso. — ¿Qué planeas, Cocoa? — le preguntó traviesa, juguetona y es que la gatita obviamente estaba pensando en algo. De esa manera, tal y como sucedió antes pero al contrario, Radha se dejó guiar, dándole libertad de acción a la felyne…

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24/09/2021, 11:41
Cocoa

En esos momentos, Radha estaba siendo guiada por Cocoa, esta agarro firmemente el miembro de la cazadora pero no lo hizo con fuerza mas bien sus dedos pasaban por su base agarrándola en esa zona mientras el resto de su miembro reposaba en mano y muñeca. Entonces fue tirando hacia atrás, mirando como paso a paso la propia Radha entraba en la cálida agua. -No planeo gran cosa...pero ya que tu hacerme correr a mi...yo corresponder...siempre estáis poniéndoos encima y...follando como locas...- Empezó a decir Cocoa recordando las veces que Matcha y la propia Radha habían sometido a la felyne. -Ahora quiero...mover yo...-

Fue casi como un paseo en el agua, por mas que Cocoa se moviera llegaba un punto en el cual el agua no iba a cubrirlas mas, aquello era un onsen no un lago, el nivel del agua era por lo general igual en todas partes como mucho mas en el centro el agua cálida llego a tapar la cintura de Radha llegando mas alta en Cocoa que casi llegaba por debajo de sus pechos. Pero Cocoa se tomo su tiempo, tomando el miembro como correa paseandola de una orilla a otra hasta que fue guiando a Radha a que se sentara mirando hacia la puerta como si fuera un escenario perfecto de todo el onsen.

Estando asi, las piernas de Radha y parte de su pelvis estaban en el agua mientras que gran parte de su cuerpo se sentaban en la piedra, por fortuna hacia el suficiente calor como para no notar nada de frio o incomodidad ademas de que el ambiente era de lo mas cálido. Con la misma suavidad, Cocoa fue deslizándose por las piernas de Radha, arrodillándose en el onsen haciendo ahora que por altura el agua cubriera parte de sus pechos pero que quedaran visibles ante Radha mientras se apoyaba en la pelvis de la cazadora, tomando el miembro con dos manos apoyándolo en el pecho de Cocoa.

El sonrojo de la felyne se hizo palpable en ese momento, Radha se podía sentir grande al estar sentada y Cocoa arrodillada tomando su miembro, por un momento parecía que Cocoa se había quedado como parada por la vergüenza al menos eso podia indicar sus mejillas pero eran mas bien un rubor de excitación. Ambas manos empezaron a masturbar el miembro, la derecha jugaba con el glande pasando la palma de forma continua, agarrándola con todos los dedos de su mano mientras que con la izquierda iba mojando con la cálida agua haciendo que quedara lubricada y cálida de forma continua sin dejar de mirarla. -Gustar?

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24/09/2021, 21:25
Radha

Ciertamente el agarre de Cocoa lo último que le inspiraba a Radha era dolor o incomodidad, ya que sí, la felyne tenía fuerza al menos como para cargar el instrumento que usaba para curar, pero ahora sentía más bien una estimulante suavidad que por un momento la hizo cerrar los ojos mientras avanzaba. Poco a poco el calor del agua fue sumándose al de su cuerpo, destensándola más, aunque la bárbara tenía “curiosidad” escrito en el rostro dado lo que le provocaba su compañera.

Hmph, me parece muy bien, ¿tú también enloquecerás? — preguntó sonriente a la morenita, y es que no se estaba burlando de ella ni nada, pero la bárbara se encontraba muy divertida con la situación, como una cría que esta curiosa de todo. Casi hasta parecía Mochi.

Huelga decir que se dejó guiar impulsada por la ya mentada necesidad de saber lo que haría su compañerita, y así su duro cuerpo fue “partiendo” el agua a su paso, provocando que el húmedo calor le acariciara la piel, aunque la principal sensación allí era sin duda el agarre de Cocoa. El paseo parecía una especie de ritual, o al menos así lo sintió ella, por lo mismo cuando su compañera le indicó sentarse, la cazadora asintió. La vista era hermosa.

Ya bien sentada suspiró como para dejar salir el cansancio, de hecho relajó su cuerpo, pero eso hizo que su hinchado clítoris diese un respingo incluso bajo el agua. No tardó en notar que Cocoa se acercaba, y entonces pasó de su cara relajada a una expresión más traviesa. Una vez se acomodó la gatita, Radha se volvió a estremecer por todo lo que le hacía sentir, pero no la interrumpió en lo más mínimo, de hecho se mostraba cooperativa.

Cuando parecía que la morenita estaba avergonzada, la bárbara no pudo evitar acariciarle la mejilla con el pulgar, pero fue solo por un momento, ya que luego se vio movida por cómo su compañera la masajeaba, cosa que enseguida le sacó un par de jadeos. — Me gusta bastante — respondió, siendo que sus ojos estaban sobre la ruborizada carita ajena. Ahora bien, la mujer seguía teniendo el impulso de acariciar a Cocoa, pero para evitar que fuera a molestar por ello, Radha optó por extender sus brazos hacia los lados y recargarlos sobre rocas cercanas, así de paso la felyne tenía más espacio.

Tus manos son muy suaves… mmm… se sienten muy bien — la humana se mordió el labio inferior para reprimir una vez más sus instintos de acariciar a la felyne, pues  el calor la impulsaba…

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26/09/2021, 23:11
Cocoa

-Yo no voy...a enloquecer...- Mirándola fijamente con sus ojos felinos antes de sacar un poco los dientes y acercarse al miembro para “morderlo” suavemente apenas sin presión pero notando un poco del afilado de sus colmillos. -No molestar cuando tengo...tu juguetito entre las manos...- Amenazo de forma algo pervertida antes de volver a masturbar el miembro a modo de masaje para que se relajara un poco. El sol seguía en su descenso hasta el punto en que ya la luz no golpeaba del todo en la parte del onsen, ya empezaba a esconderse detrás de las vallas lo que hacia que el ambiente fuera un poco mas oscuro, solo un poco, pero ni por asomo era desagradable. El cielo de color anaranjado iba perlándose de estrellas y se podían escuchar las voces de las clientas al menos distantes al otro lado, pero lo importante era lo que pasaba delante de Radha.

Cocoa volvió a bajar sacando de nuevo los dientes pero cuando estuvo casi rozando el miembro, sacudió un poco la cabeza como para que sus dientes se apartaran un poco haciendo una expresión mas suave, entonces empezó a lamer. Desde la base, hizo una larga lamida pasando cerca de sus labios vaginales hasta el glande, recorriendola entera, nuevamente Radha podía comprobar que la lengua de las felynes era mas bien rasposa pero no por ello era desagradable, casi lo contrario, tenia relieves en la lengua que se sentía de lo mas bien cada vez que recorría su miembro, como si quisiera extraer lo que tenia dentro.

Se distrajo lamiendo varias veces todo el grosor del miembro antes de ir hacia el glande, apartando bien toda la piel y dejándolo de lo mas brilloso antes de, literalmente, escupir encima de este, pasando los dedos por el glande como si fuera un juego, esparciendo bien la baba por toda la carnosa punta para finalmente apoyar los labios. -Mmmm...mhmmm...- Cerro los ojos unos instantes antes de sacar la lengua de nuevo, era casi como si le hubiera dado un beso y ahora su lengua era mas babosa, mas lubricada, volviendo a bajar y subir, entreteniéndose en la punta para describir suaves círculos alrededor de esa enorme perla de placer para ir jugando con esta. Cocoa era sorpresivamente delicada con lo que estaba haciendo, su lengua parecía masajear el miembro con perversión mientras que sus manos mantenían bien recto el miembro para que no molestara. De tanto en tanto, conforme lamia sobretodo el glande, se podía escuchar una especie de suave maullido por parte de Cocoa la cual parecía de lo mas concentrada con lo que hacia.

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27/09/2021, 21:34
Radha

¡¡¡…!!! — Radha se estremeció como pocas veces al sentir los colmillos de Cocoa. No era que tuviese miedo o que en ese momento pudiera decir que le dolía, más bien se sintió de forma muy curiosa, como al filo del peligro pero a la vez excitada. Mientras miraba directamente a la felyne, Radha tragó saliva. — Vale — luego dijo con una sonrisa traviesa, curiosa, positivamente emocionada por ver ese lado de la morenita que le era hasta cierto punto nuevo.

El masaje sin duda la ayudó a relajarse pero también le sacó varios jadeos de gusto pues lo que podía hacer la felyne con sus pequeñas manos era algo digno de disfrutarse. A esa hora todavía era fácil ver, y si no, las luces del onsen ayudarían, pero es que además la iluminación agonizante de los alrededores daba a la piel de Cocoa un tono muy agradable y seductor. A ella no le daba vergüenza ser escuchada, como ya otras veces había quedado claro, entonces realmente no cambió sus reacciones incluso cuando escucharon a las ajenas a lo lejos.

¡Ah!, C-Cocoa… mmm… — gracias a la excitación acumulada así como a la técnica de la gatita que se combinaba con su peculiar lengua, la bárbara no tardó en mostrarse indefensa al sentir con gran intensidad todo lo que su compañerita le hacía. Tuvo que presionar la roca bajo sus manos con fuerza, y por suerte debido a sus costumbres no se lastimaba, porque el impulso de tomar a su compañera era muy fuerte. Solo así podía contenerlo un poco. Al mismo tiempo su hinchado clítoris di un respingo notable y comenzó a ponerse progresivamente más húmedo y pegajoso por el hilo de miel que escurría. La hinchazón en dicha zona provocaba un contraste peculiar entre el tamaño de Radha y la gatita.

Verla así tenía la bárbara extremadamente caliente, y no ayudaba a mantenerse clara el hecho de que con la delicadeza ajena el disfrute de la humana iba en alza. Los gemidos de Radha se unieron a los maullidos suaves de Coca, y afortunadamente esta estaba sosteniendo su falo, pues de otro modo seguro se habría movido de más, separándose. Tanto placer se vio reflejado también en su vagina, pues con el hacer de la morenita el sexo femenino de la bárbara iba palpitando y humedeciéndose debido al estímulo que le tocaba. Un tanto ansiosa, la humana incluso comenzó a jugar con sus propios dedos separándolos y presionándolos, haciendo círculos en ellos, mientras que con la otra magreaba sus pechos, sin embargo pronto no pudo más y al tiempo que sentía una nueva ola de placer, la mano en sus pechos se desvió hacia la mejilla gatuna que no tardó en acariciar…

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28/09/2021, 10:23
Cocoa

Las reacciones por parte de Radha eran bien captadas por Cocoa la cual lamia pero sus ojos no abandonaban demasiado la figura de Radha, como mucho cerrándolas un momento para disfrutar del sabor meloso de su liquido preseminal. Al notar la mano en su mejilla, Cocoa sacudió un poco su cabeza pero no aparto del todo la mano de la cazadora, mirándola fijamente antes de separarse del miembro. -No aguantar? Solo empezar...- Advirtió la morena la cual trago saliva haciéndose con el sabor de Radha antes de volver a atacar. Ambas manos se colocaron en la base del miembro, presionando bien fuerte hacia abajo dejando el miembro totalmente expuesto hacia la felina, la cual observo detenidamente el hinchado clítoris, volviendo a lamer de abajo a arriba con delicada y lenta ascensión hasta llegar al glande.

Entonces hubo un cambio en la postura de Cocoa, alzo mucho la pelvis, tanto que parecía estar en cuatro estando sujeta por sus manos mientras que sus nalgas se podían ver sobresaliendo por encima del agua como dos pequeñas montañas morenas perfectamente brillosas mientras que la cola se arqueo hacia su espalda, reposando en esta en forma de gancho. Era como si se estuviera preparando, soltando un maullido como si se tratara de una especie de bufido antes de abrir bien la boca. Por un momento podia haber unos instantes de temor porque parecia una depredadora, con los colmillitos sobresaliendo apuntando hacia el glande, pero en cuanto los rozo, los labios taparon esa parte ocultándolos y solo dejando suavidad conforme iba bajando la cabeza.

En este caso no fue tan lento como antes, Cocoa hundió la cabeza todo lo que pudo en el miembro de Radha, haciendo que al tocar su garganta hubiera un momento de incomodidad por parte de la felina, retrocediendo y volviendo a hundir un par de veces antes de ya conseguir tragarla en su totalidad. Al ser el miembro mas grande que su boca, se podía ver un pequeño bulto en su garganta, pequeño pero palpitante conforme pasaba por esa zona, mientras que Cocoa disfrutaba de ir moviéndose libremente. Su boca era pequeña, babosa y la lengua de Cocoa era rasposa por lo que todo estaba estimulando el miembro siendo rozado una y otra vez contra esta, incluso llego un punto en que miro a Radha y juguetona como buena felyne coloco la cabeza de lado haciendo que el miembro golpeara la cara interna de su mejilla, abultándose perfectamente, llevando una mano a la mejilla para abofetear suavemente su propia mejilla para mandar vibraciones al miembro de Radha. -Mhmmm....

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28/09/2021, 21:44
Radha

Eres buena pero… nunca dije que un aguantara — contestó Radha que al fin y al cabo tenía cierta resistencia, esto mientras sonreía traviesa, pues ya que no notó total desacuerdo en la felyne comenzó a acariciar un poco más su rostro, pero poco a poco fue acercándose a la base de su oreja más cercana, a su nuca y a su hombro. La piel de Cocoa era suavecita y estaba tan tibia como húmeda, así que era un goce sensorial para la bárbara… ya no digamos cuando la gatita fue un poco más allá con sus mimos sobre una parte tan sensible de la humana como lo era su hinchado sexo, pues entonces Radha tensó un buen tanto su espalda y gimió fuerte.

No recordaba haberla visto tan salvaje antes, ya que por lo general Cocoa era como más seria y diligente, pero ciertamente no le desagradó a la humana el hecho de se pusiera así. Por un momento, no obstante, llegó a ponerse nerviosa al creer que utilizaría directamente sus colmillos sobre una zona tan sensible. Ella sabía que la morenita no era tonta y que podía medir sus reacciones, pero a la vez, supuso, aquello podría ser alguna especie de proceso para las relaciones felyne… aunque al final parecía que no se daría el caso. Ahora bien, por un momento Radha intentó alcanzar esas nalguitas que se veían más allá, pero tuvo que desechar su idea pues implicaba moverse demasiado y no quería que su compañera pensaba que lo que hacía la estaba molestando, pues era todo lo contrario…

¡Ahhh e-es delicioso, Cocoa…! — ya al ver desaparecer su miembro la bárbara se estremeció de gusto, pero más aun con la visión de una juguetona y hasta suavemente lasciva Cocoa. Se notaba que la morenita estaba disfrutando, obviamente la bárbara también. Ahora que estaba tan cerca, la humana pudo estirar sus brazos un poco y por impulso comenzó masajear de manera directa sus orejitas, siendo que ahora sí buscó jugar con las puntas de las mismas.

Desde su asiento miraba a Cocoa con gran deseo, de hecho se la saboreaba — E-estás hermosa… — le confesó antes de suspirar fuerte para dejar salir un gemido. En su interior la felyne podría sentir cómo el dulzor de la miel aumentaba al crecer esta en cantidad, aunque no se había corrido ni nada, pero casi, ya que estar dentro de ella se sentía demasiado bien. Radha estaba como ebria de placer pero luchaba por aguantar…

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29/09/2021, 11:28
Cocoa

La figura de Cocoa era hermosa, medio hundida en el agua, dejando que Radha pudiera ver como sus nalgas asomaban por el agua mientras que cabello empapado cubría su espalda y sus orejitas se movían en el aire, todo mientras en los labios de Cocoa se enterraba el miembro de la cazadora. Era una visión de lo mas pervertida y cuando dijo que estaba hermosa, Cocoa volvió a soltar ese bufido extraño que había soltado anteriormente pero no dejo de moverse pasando la mano por su mejilla para seguir estimulando el miembro antes de moverse de nuevo hacia el centro, colocando el miembro en su garganta y continuar tragando.

Las orejitas eran una de las zonas mas sensibles para la felina, solo de sentir como acariciaba la base, se notaba que sentía placer por como movía su cuerpo, balanceando un poco la pelvis de lado a lado y apretando sus piernas pero no solo fue eso. La boca de Cocoa se iba llenando de mas baba conforme mas la acariciaba, era una mezcla pervertida entre su baba y el liquido preseminal meloso lo que hacia que el sabor de la cazadora impregnara cada parte del paladar de la ya sensible felyne. Al intentar tocarlas se movieron un poco para intentar evitarlo, como si quisieran asustar a los dedos de la cazadora pero al ya tocarlos un suave gemido ahogado salio de los labios de Cocoa apretando aun mas el miembro contra sus labios mirándola con los ojos de lo mas rasgados casi como si estuviera cazando para hundir un poco mas el miembro en su boca.

Era casi como una tentación, cuanto mas la estimulaba Radha mas buscaba estimularla en respuesta casi como si estuviera combatiendo por el control de la situación, al punto en que la suave boca de Cocoa reposo en la base del miembro, rozando sus labios vaginales mientras su nariz se quedaba pegada a su pelvis, soltando una buena arcada de placer dejando que su saliva empezara a gotear en el agua antes de ir retrocediendo suavemente y volver a hundir, haciendo una garganta profunda para que se corriera directamente en su estomago si lo deseaba.

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29/09/2021, 17:13
Radha

Los dedos de la bárbara podían ser toscos y acostumbrados mayormente a portar objetos grandes y duros como sus armas, así pues, a Radha se le hacía natural el poner fuerza o hasta cierta agresividad en sus movimientos, no obstante ahora estaba demostrando que también podía tener cierta suavidad si quería, todo gracias a lo que le inspiraba su compañerita.

Cocoa tenía una manera muy peculiar para tentar, pues con su aire tan salvaje como tierno y su forma de reaccionar, tenía a la humana encandilada, eso sin contar la provocación que eran sus nalguitas al aire, la piel que le acariciaba su cabellera y claro, el modo en el que reaccionaron sus orejas. Inicialmente Radha batalló un poco para poder atrapar aquellas puntitas huidizas, sin embargo apenas lo logró, utilizó sus pulgares para masajearlas mientras el placer de las atenciones dadas por la gatita seguía resonando por todo su cuerpo.

Cada que la morenita tragaba o acariciaba indirectamente con su mano, el clítoris de Radha daba un respingo o bien latía; la boca ajena era caliente y muy viscosa, lasciva, lo que mantenía a la bárbara con el deseo por las nubes. En un momento dado sostuvo la cabeza de su compañera contra su pelvis, pero no la forzó a quedarse pegada más que un par de segundos. La mirada ajena provocó que se mordiera su propio labio inferior.

Realmente no fue difícil darse cuenta de que la felyne buscaba un control de lo que sucedía, por eso Radha se estaba midiendo a la hora de darle placer, de modo que pudiera provocarla un poco pero a la vez terminara “perdiendo” ante Cocoa, cosa no muy difícil teniendo en cuenta lo bien que se sentían los mimos de la felyne. Conforme el placer fue aumentando, la gatita tenía más ventaja pues la bárbara cada vez pensaba menos y sucumbía en mayor medida al placer, cosa que se podía medir a través de sus gemidos. Al pegarse la ajena a su pelvis, estimulando a su manera ambos sexos de la bárbara, esta se estremeció más fuerte que otras veces y sin poder evitarlo dejó que su manos resbalaran por toda la espaldita de Cocoa, directo hacia sus nalgas, como si aferrándose de estas quisiera aprovechar el reducido tamaño de la felyne para mantenerla bien pegada… aunque visto lo visto no sería necesario.

Con la saliva ajena escurrió también “líquido preseminal” de Radha, esto al tiempo que la mujer movía un poco su pelvis de manera instintiva. En ese momento ninguna estaba hablando pero la invitación se entendía. — Ahh… C-Coco…ah… no puedo… más… — entonces avisó a la par que sus caricias aumentaban su efusividad por casi toda la parte trasera del cuerpo ajeno, pero finalmente terminó centrándose en su cabeza, sus orejitas y entonces con un gemido más delicado de lo habitual, la bárbara vio superado su aguante por el placer, derritiéndose tanto con su clítoris como con su vagina en presencia de la morenita, incluso la abrazó con sus muslos que para nada apretaron a la ajena, pero sí rodearon su cabeza.

Tu boca… ahh… se siente… mmm… — la bárbara duró un rato en ese estado tan sensible, sonriente pero ruborizada al mismo tiempo, y sin dejar de acariciar a la felyne…

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30/09/2021, 11:35
Cocoa

El agua caliente hacia que el cuerpo de Cocoa estuviera de lo mas suave y se noto sobretodo cuando Radha paso la mano por sus nalgas, estaba firmes calientes y de lo mas suaves al tacto, Cocoa se la quedo mirando parando un momento de tragar como si la estuviera una vez mas desafiando antes de volver a tragar el miembro hasta la base haciéndose con su sabor y aroma. Todo se estaba intensificando entre ambas, Cocoa notaba el orgasmo de Radha acercarse conforme el miembro palpitaba, coloco una mano en sus labios vaginales para abrirlos y asi el orgasmo fuera mas intenso y apretó de mas los labios antes de notar tanto la presion en su cabeza aunque fuera de forma ligera como el ser atrapada por los muslos.

El sabor del semen era dulzón y la presión era agradable para la felyne, al haber esperado todo el día para correrse había acumulado bastante veneno por lo que era casi como una fuente de un postre dulce. Cocoa no pudo ser mas lasciva con el miembro y el clímax de este, el primer disparo fue directamente a su estomago, notando el pegajoso liquido pegarse en su garganta mientras iba retrocediendo haciendo que la segunda descarga fuera en su boca, dejando el glande en esta antes de abrirla y dejar que todo el semen recorriera el miembro como si se tratara de cera. La lengua de Cocoa no recogía, esparcía mas bien, hacia que cada vez estuviera mas pringoso y a cada descarga, tomaba con su mano el semen y empezaba a masturbar para ordeñar bien el veneno de Radha, tanto que hasta podía notar por unos segundos una extraña sensación como de vaciado, pero aun tenia mucho veneno en su interior.

Lamida tras lamida el miembro mas que rojo empezo a tener un tono ocre bastante bonito como el color del ámbar de tanto semen que tenia encima, Cocoa jugaba, palmeaba incluso el glande para que continuar escupiendo semen hasta que finalmente el momento del orgasmo se diluyo dejando unas perladas gotas de semen en la punta que no tardo en recoger, esta vez si para ella, con la lengua.

-Mhmmmm...dulce...y pegajoso. -Abriendo los dedos para mostrar lo pegajoso que era el semen de Radha dejando hebras entre sus dedos. Trago con gesto de delicia antes de volver a palmear el glande como si lo estuviera castigando por travieso. -Aun energía?- Pregunto mientras apoyaba la mejilla en uno de sus muslos mirándola con los ojos bien rasgados, pero ya no tenia una mirada tan afilada. -Haber descargado suficiente veneno?

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30/09/2021, 21:05
Radha

El hacer de la felyne fue definitorio a la hora de empujar a Radha hacia el placer, ya que Cocoa era la que la había provocado, excitado y hecho sentir tan bien que llegó a ese punto. Sí, conscientemente retó a la morenita pero, fuera de lo dicho, conforme su excitación aumentaba directa a la cima la bárbara fue perdiendo terreno y quedando a merced de la gatita que no se doblegaba en su hacer. El contraste entre la más pequeña imponiéndose a la más grande era tan hermoso como la comparación entre sus pieles, aunque allí la naturaleza de ambas no estaba tan lejana. Así pues, gracias a esos mimos sobre sus labios íntimos la bárbara perdió el último resquicio de aguante que le quedaba…

Mientras ella se estremecía vio el espectáculo que ofreció su compañerita, algo que sin duda era provocativo pues tragó un tanto de su corrida, sí, pero luego jugó con ella de forma que aprovechó lo sensible que estaba la bárbara para prolongar su clímax todo lo posible… y eso funcionó de forma excelente, pues Radha no terminaba de sacudirse de placer cuando ya estaba empezando de nuevo, con su clítoris escupiendo melosa corrida, pero la explosión no se limitó allí, ya que su coño se mojó a su modo, de forma menos pegajosa pero con una intensidad tal que provocó varias onditas en el agua que estaba cerca, asemejándose al efecto de una fuente…

J-joder… C-Cocoa… tu lengua… mmm… — la bárbara quería hablar pero apenas si podía, así que tuvo que expresarse por medio de gemidos que alternaban entre lo intenso y lo dulce, entre lo grave y lo femenino mientras que toda el área de su pelvis y piernas literalmente temblaban de goce. Aun así la cazadora trató de no perder detalle de lo que hacía su compañera, a la cual no había visto tan diligente en cuanto a lo sexual. El hecho de que se saboreara esas últimas gotas impulsó la temperatura de la humana hasta un nivel donde ni el haberse acabado de correr la tranquilizaría…

Mientras todavía jadeaba vio aquella demostración por parte de la morenita, misma que la hizo sonreír pervertida, hasta que la palmada le sacó un quejido pero no de dolor precisamente. — ¿Te gusta? — inevitablemente preguntó. Una vez Cocoa se apoyó en esa parte, Radha no tardó en tomarla por debajo del mentón y acariciarla con cariño, de ahí separó un poco su pierna contraria para así tener acceso a la otra mejilla de la felyne y poder acariciarla. La manera en que se estaba comportando aquella le era muy provocativa a la bárbara.

Descargué bastante, sí… pero aún me queda deseo, estás muy hermosa — dijo con voz más sensual que traviesa, inclinándose un poco para hablarle como con más intimidad, incluso buscando un beso si veía que Cocoa la dejaba — ¿Quieres seguir, sentirnos bien juntas? — propuso.

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01/10/2021, 12:23
Cocoa

Había diferencias notables en el comportamiento de Cocoa, diferencias positivas ya que todo lo que estaba haciendo la felyne era mas natural. Por lo general Cocoa siempre se había visto “forzada” a cooperar con la cazadora o con Matcha a la hora de estar con ellas, incluso había estado drogada por las sensaciones de la Kirin dejándose llevar por sus mas bajos instintos, pero en esta ocasión estaba incluso melosa. Quizás era el carácter de Cocoa, el carácter de ver a Radha tener sexo y simplemente marcharse de la sala, el de observarla cada vez que estaba claro que Radha había tenido un momento de pasión, ahora era diferente porque Radha se tomaba su tiempo en atender a Cocoa que aunque tenia un carácter difícil y no se sabia muy bien lo que pensaba, parecía estar aceptando esos cariños por su parte.

El agua había calentado bien a la felyne, el acariciar sus mejillas daba una sensación blandita mientras Cocoa se quedaba mirando, Radha ya no sentía esa forma afilada a la hora de recibir la mirada, pero aun con todo seguía siendo una mirada felyne de estar pensando en mil cosas a la vez y no adivinar ninguna. La cola de Cocoa se deslizo por su propia espalda, acariciando su piel hasta pasar por su cintura, empaparse en el agua y hacer un sonido mojado a la hora de volver a descansar en la espalda de esta mientras sus orejitas tenían leves espasmos. De forma algo traviesa, Cocoa abrió la boca mostrando colmillitos, haciendo el amago de morder la mano de Radha pero solo haciendo presión no hundiendo sus colmillos, como siendo aun rebelde dentro de que estaba visiblemente caliente.

-No estar mal...- Fue su alago antes de dar otra palmada al miembro como si se tratara de un juguete. -Aun quedar veneno...siempre estar caliente...estar bien...aun querer yo.- Dio una ultima palmada al miembro antes de tomar un poco de semen que quedaba alrededor de este y llevar dos dedos a los labios vaginales de Radha, abriéndolos con pulgar y meñique para hundir los dedos pegajosos de semen dentro de esta, recorriendo su parte interior de una forma circular antes de apartar los dedos y mostrar como estaba. -Cuidar esta parte también...o perderte...en la futanari...- Advirtió Cocoa dando un consejo interesante y al mismo tiempo pervertido.

Entonces Cocoa se levanto de donde estaba dejando que el agua recorriera todo su cuerpo de nuevo, sacudiéndose un poco salpicando a su alrededor antes de quedarse mirando a Radha por unos instantes, entonces se coloco a su lado, con los brazos entrecruzados en la piedra y su cabeza reposando en ellas, al igual que había estado en sus muslos, mirándola desde un lateral. Suavemente fue subiendo su cintura hasta que Cocoa misma se puso en semi cuatro, alzando bien su culito y dejando ver como sus morenos labios vaginales se quedaban medio tapados por el agua dando una especie de sensación exótica, como si el agua quisiera entrar dentro de ese carnoso y húmedo interior aunque por la posición su anito parecía también de lo mas apetecible.

-Juntas...

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02/10/2021, 00:29
Radha

Cocoa era sin duda una felyne complicada de tratar, Radha lo sabía desde la primera vez que la vio pues fue precisamente la fuerza del carácter ajeno lo que la atrajo, por lo mismo estaba bien con ello y bueno, pensar en tales cosas fue lo que la impulsó a proponer ese día especial en primer lugar, después de todo luego de hablar con Matcha hasta la bárbara comprendió que quizás estaba siendo muy desconsiderada con su primera compañera, y lo peor era que lo había hecho sin querer…

Aunque no la podía leer del todo, la humana se vio feliz con las reacciones de la gatita, enternecida por su mirada pero excitada por su cuerpo y el cariz que había tomado aquella piel de chocolate. Cada que sus ojos se encontraban con los ajenos Radha sentía como que su corazón se aceleraba. La cola de Cocoa le llamó la atención a la cazadora por unos instantes, ya que se había mantenido relativamente quieta y por tanto fuera de su alcance inmediato. La humana sintió el impulso de tomar aquella extremidad, pero por suerte su mano notó antes otra sensación, esta traída por una Cocoa peculiarmente traviesa.

La cazadora puso cara de “awww” ante las mordiditas que obviamente no le dolían, de hecho con el grueso de su piel hasta se sentían como peculiares caricias, sin embargo la actitud rebelde allí estaba, y por eso Radha usó su otra mano para despeinar un poco a la felyne. Ella seguía ruborizada y muy deseosa, por lo que la ternura desplegada la provocaba en cierto modo.

Auhm… — como estaba tan sensible no pudo evitar el estremecerse con la palmada; luego volvió a mostrar placer cuando su propio fluido le fue introducido, lo que le dio un morbo especial aunado al estímulo de tener aquello pequeños deditos acariciándola en su intimidad. — N-no puedo evitarlo… siempre he sido así — reconoció  — Ni tampoco lo otro… se siente muy bien… h-hasta podrías probar… — luego sin embargo sugirió de forma traviesa, al fin y al cabo “solo” se necesitaba el veneno vespoid para ello. A pesar de todo Radha no se había olvidado de su cuerpo, pero el hecho de que su compañera lo mencionara tan directamente la hizo ruborizar — Quizás algún día quieres que juguemos sin el veneno entonces, suavidad contra suavidad… — y hasta la instó a decir aquello.

La dejó moverse y de paso admiró sus movimientos, su porte y lo sensual que se veía en su naturaleza. Radha se tuvo que contener para no ir tras ella directamente, aunque cuando la escuchó responder, tampoco tardó demasiado… solo que primero se sumergió en el agua como gateando para dejar solo su cabeza afuera. — Me encanta la idea… — confesó aunque no era un secreto realmente, acto seguido aprovechó su posición para lamer lenta y pervertida la rajita de Cocoa desde su clítoris hasta el otro extremo, cerca de sus nalguitas, dejando un camino de saliva que continuó hasta llegar a su prieto ano, donde masajeo traviesa con la puntita de su lengua. No conforme con ello, mientras se iba levantando muy lentamente del agua, Radha subió entre los glúteos ajenos hasta rozar el área circundante a la cola ajena, y finalmente su base, aunque fue muy rápido.

Ya entonces quedó arrodillada detrás de la gatita, momento en que llevó su falo todavía lustroso y pegajoso entre los muslitos ajenos. Con cuidado la bárbara fue frotando el glande entre los labios besados por el agua, añadiendo morbo al asunto, y una vez encontró bien su camino, comenzó a moverse como si estuviera penetrando pero afuera, todo porque quería jugar un poco más. También llevó sus manos hacia las caderas ajenas, su abdomen y pechitos, repartiendo caricias similares a las del masaje pero más intensas y lascivas. Incluso se inclinó para atrapar la puntita de una oreja con sus labios, jugando a morder.

Solo tras todo eso fue que bajó una de sus manos para ir guiando la penetración con sumo cuidado, queriendo sentir cada centímetro entrar en la prieta feminidad de Cocoa…

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04/10/2021, 19:12
Cocoa

-Ser mas natural...-Respondió Cocoa a la mención de la suavidad, mirándola por un momento antes de ya mirar hacia delante, notando como la cazadora se iba acercando a esta, dejando que ahora fuera ella la que jugara con su cuerpo, pero permitiendoselo que era algo que en ese momento hacia diferente la relación de ambas.

La lamida hizo que Cocoa subiera un poco la cadera separandola mas del agua para que no tuviera que hundirse a la hora de satisfacerla pero se notaba que estaba siendo bien recibida por la morena la cual soltó un leve suspiro que se iba convirtiendo en un suave jadeo casi como si fuera un ronroneo. Con cada lamida sus labios internos se iba juntando por un momento antes de separarse invitando a la cazadora a que continuara lamiendo, moviendo ligeramente la pelvis de abajo a arriba haciendo un pequeño chapoteo antes de soltar un “nya” suave moviendo la cola un poco erizada cundo rozo su base antes de tranquilizarse, sonrojándose como podía moviendo de nuevo la cola a un lado mirándola con sus ojos afilados pero volviendo a acomodarse, era como si esa parte era de lo mas sensible para esta pero no se lo estaba impidiendo para nada.

-Deja de jugar...- Un poco temblorosa ahora sintiendo el miembro pasando por sus labios, era un juego morboso y lascivo, primero el miembro dejo pintada en su muslo su recorrido antes de ser bien acogida entre los calientes labios vaginales de Cocoa la cual separo un poco de mas las piernas mostrando bien su culito mientras era avasallada por las caricias de la cazadora. Sus pechitos eran suaves y estaban calentitos, sus pezones que eran de lo mas blanditos estaban duros y ya cuando mordió la punta de la orejita con los labios Cocoa no pudo reprimir un suave gemido como si se tratara de un maullido agudo.

En esos momentos ambas se fundieron. Cocoa estaba tan caliente que el miembro prácticamente se deslizo hacia dentro dejando que se hundiera todo lo que queria mientras se iba empapando de su lubricacion, el interior estaba increíblemente caliente y carnoso pareciendo que costaba moverse pero nada impidió que Radha llegara hasta el final de Cocoa, golpeando su cervix mientras Cocoa volvía a maullar con ese gemido bastante agudo y lascivo, quedándose mas atrapada entre Radha y la piedra.

La cola fue pasando por el torso de su pecho antes de que bajara y se hundiera en el agua, curiosamente se abrazo a una de las piernas de Radha como si no quisiera que se separara mientras toda esta temblaba.

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04/10/2021, 21:14
Radha

Cuando escuchó la respuesta ajena, la bárbara no pudo evitar pensar en cómo se sentiría la intimidad de su compañerita desde un punto de vista más femenino, y es que a todas luces Cocoa tenía labios suaves y delicados, algo que le encantaría besar en más de un sentido, como lo demostró el estremecimiento que se generó en su propia vulva. Allí podría faltar la sensación de penetrar, pero la bárbara estaba segura de que con mucha lubricación y encontrando una posición cómoda, frotarse hasta el orgasmo con la felyne no era imposible… y menos ahora que había obtenido aquella respuesta capaz de hacer que su corazón se acelerara y sus ideas corrieran inquietas.

El sabor ajeno era embriagante, un poco salvaje pero agradable, sin duda la invitaba a más; que la morena moviese así sus caderas era otro fuerte motivo para verse atraída, y por último el ronroneo hacía hervir la sangre de Radha en lujuria. Consecuencia de todo aquello fue el hecho de que la bárbara sumara firmeza a su agarre y también que salivara más, al fin y al cabo el antojo era bastante grande. A Cocoa le devolvió una mirada traviesa, ligeramente cazadora pero más que nada cómplice que reforzó con una sonrisa de igual cariz.

Es que todo tu cuerpo me anima a jugar… eres tan suave y tibia que no puedo evitarlo — dijo como niña regañada que se resiste a cambiar, pero irónicamente más pronto que tarde terminó haciendo como le decía la morenita, pues ella ya tampoco aguantaba mucho y no quería simplemente correrse entre los muslos de la gatita.

Aah… — gimió a la par del maullido ajeno, maravilla por todas las sensaciones que le daba ese interior prieto y a la vez capaz de aceptar su alargado clítoris. Por unos instantes la bárbara dudó de moverse mucho, pero eso fue solo hasta que notó que de hecho podía hacerlo. Sentir a la cola enrollada en su gruesa pierna dejó ver a la humana que Cocoa estaba disfrutando igual que ella, así que no lo pensó mucho más y, aprovechando que ya había recorrido un buen tanto de camino, animosa retrocedió pero solo para luego volver a empujar con algo más de intensidad. Así varias veces dejando poco tiempo entre cada una, todo mientras sostenía firmemente a Cocoa para no impulsarla de más. Poco a poco una mano de Radha, grande en comparación, fue bajando hacia el vientre de la gatita, mismo que comenzó a magrear como buscando estimular indirectamente su interior; no mucho después su otra mano fue hacia aquellos pechitos que tanto morbo le causaban y los presionó con suavidad.

Al mismo tiempo la bárbara se quedó inclinada como si quisiera aplastar a la felyne pero lo cierto era que había un margen de espacio entre ellas más allá de donde estaban pegadas, y hablando de uniones, Radha dejó su falo totalmente dentro de Cocoa, pues entonces comenzó a hacer una especie de movimientos circulares con las caderas con tal de estimular los puntos sensibles de su compañera y hasta los propios pero desde distintas perspectivas. Todo esto hacía que su húmedo glande se frotara intensamente con entrada al cérvix de la morenita…

Aah… C-Cocoa… — Radha le daba lamidas y besos que cubrían desde la nuca ajena hasta la parte trasera de sus orejitas; por momentos se ponía de lo más intensa, pero luego se relajaba para jugar con las sensaciones, manteniendo el placer en alza. Su gran cuerpo en comparación del ajeno era una fuente de calor más que notable…