Partida Rol por web

Noches Venecianas

Día a día en la vida de Asenoc

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12/05/2014, 19:38
Asenoc

He oido historias sobre mendigos que utilizan grano y barro para simular las pustulas de la lepra. No obstante no voy a ser yo quien juzgue. La vida me ha tratado bien. Soy guapo, rico e inteligente. Deberia vivir para siempre. (Sonrio)

Dejo caer disimuladamente varias monedas de pequeño valor pero en cantidad suficiente para que coma al menos durante 1 mes. Si otros mendigos o ladrones mas fuertes se enteran de que tiene esa cantidad no dudaran en matarlo para robarle.

- No me molesteis leproso! Y cubrios vuestras deformidades!

Le dejo caer mis guantes. Nadie le venderá comida si a cambio obtiene monedas que ha tocado un leproso.
Le guiño un ojo y sigo mi camino.

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13/05/2014, 09:48
Narrador

Es evidente que tu gesto de generosidad ha sorprendido al mendigo, que parece quedarse sin palabras al tiempo que agacha la cabeza y se aparta de tu camino. A medida que te alejas de él, le oyes recitar sólo. Es evidente que debe estar algo tocado de la cabeza.

-Bienaventurados los humildes, porque ellos heredarán el reino de los cielos. Hoy es un día extraño... Un asesino compasivo, y un noble generoso. Vuestro padre estaría orgulloso de vos, Asenoc de Hispania.

Es curioso, a medida que hablaba y te alejabas de él, tenías la sensación de que le oías como si estuviera caminando a tu lado. Al oír las últimas palabras te giras extrañado -¿Quién es éste mendigo? ¿Qué sabe de tu padre?- pero el mendigo ya no está. Tu mirada se cruza con la de un persa que hablaba con una prostituta y parece haberse girado para mirarte.

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13/05/2014, 11:37
Asenoc

Que dia tan extraño. Creo que he tengo que dejar de beber durante el desayuno. Asenoc de Hispania... me gusta.
Deberia buscar al mendigo pero lo cierto es que no me fije mucho en el.
¿Que probabilidad tengo de encontrar a un mendigo leproso en una ciudad tan grande?
Pero el caso es que me conoce y al parecer conocia a mi padre.
¿Que ha querido decir con lo del Asesino? No puedo dejar esto asi...

- Sebastien. Que dos hombres busquen a un mendigo leproso que lleve unos guantes demasiado caros.
- Y recuerdame que cuando volvamos al castillo tengamos una larga y sincera conversacion sobre mi padre. Parece que todo el mundo sabe mas sobre el que yo y me temo que tu tampoco me lo has contado todo.

- Ahora veamos que material tienen estos mercaderes. Estoy cansado de que las espadas queden romas en solo unas horas de entrenamiento.

- Y consigueme una copa de un buen vino. ¡Estoy sediento!

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13/05/2014, 16:30
Narrador

Sebastien cumple tus órdenes, consiguiendo primero una copa de buen vino. Después, dos hombres rastrean palmo por palmo el Gran Bazar y los barrios circundantes, pero sin éxito. De tus conversaciones con los herreros locales llegas a la conclusión de que la aleación de hierro que usan tus herreros es mala. No es que sea mala la manufactura, pero la mina de tus tierras, por lo que te dicen, no da buen hierro. Es un severo contratiempo, supone depender de proveedores externos para abastecer a tus tropas de forma permanente.

Asqueado por tus conclusiones, al terminar la tarde, te encaminas hacia el palacio de Nicéforo. De camino, revisando distraído tu bolsa para comprobar que no te han robado nada, encuentras tus guantes dentro de ella. Junto con una nota manuscrita con una caligrafía exquisita y cada una de las monedas que le entregaste al mendigo.

"Lucas 16, 19-31"

 

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13/05/2014, 18:40
Asenoc

Intrigado por el significado de la nota busco una Biblia en una libreria cercana. Abro sus paginas por la cita mencionada... Todo este asunto me tiene intrigado. ¿Porque ese leproso me ha elegido a mi? ¿Y porque no ha cogido simplemente sus monedas y me ha dejado en paz? Todo esto es muy misterioso y voy a llegar al fondo del asunto.

¿Que interes puede tener nadie en que yo alimente a un pobre o no? ¿Y porque torturarme despues con mensajes ocultos en mis pertenencias?

Leo con atencion una vez encuentro la pagina adecuada...

Vaya! Asi que doy dinero a un mendigo desconocido y me responde que ire al infierno! Menudo desagradecido. Debio toparse con otro noble. Solo habria encontrado la punta de su bota. Pse... no se porque le doy importancia... sera Dios quien juzgue mis actos... eso si existe...

Sonrio para mi mismo y arrojo la biblia a algun pobre que encuentre por ahi...

Aqui tienes. Lucas dice que cuando mueras tu vida sera comoda y placentera. Quedatela y adora a Dios... o vendela y come. Tu mismo...

Continuo mi camino hacia el Palacio pensando que el infierno tampoco debe ser tan malo si al fin de al cabo esta lleno de gente guapa como yo. Haha.

Vuelvo a sonreir y miro el paisaje hasta el Palacio de Niceforo.

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14/05/2014, 09:13
Narrador

Tu y tus hombres llegáis sin mayores contratiempos al palacio de Nicéforo. Al llegar te atiende uno de sus sirvientes de confianza, que alega que Nicéforo está cumpliendo con sus obligaciones en el pueblo, y que después ha de atender los asuntos de los nobles que acuden a palacio con exigencias. Se disculpa indicando que no te esperaban tan pronto. En primer lugar, os acomoda a ti y a tus hombres y te pregunta que cosas necesitas para tu comodidad, que Nicéforo ha dicho que pidas lo que necesites.

Después, ese mismo hombre te acompaña a visitar el palacio y la armería. Te indica que aquí duermen sólo los hombres que defienden el palacio y parte de la ciudad. Te enseña los barracones e indica que Nicéforo tiene un gran castillo a un día de caballo donde tiene a los herreros y las instalaciones, así como el resto del ejército. Apostados por toda la ciudad, hay pequeños fortines que contienen el resto de los hombres que defienden la ciudad y que mantienen la ley y el orden.

Notas de juego

Me ha gustado mucho la reacción de Asenoc a la nota.

x'DDD

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14/05/2014, 09:25
Asenoc

- No querria abusar de la hospitalidad de mi anfitrion asi que ire directamente al grano.

- Desearia hablar con vuestros mejores herreros pues tengo algunos problemas que requieren de expertos en el tema.
- Por favor. Preparad una sala donde pueda hablar con ellos y llevad un buen vino y algo de picar.

Me fijo con todo el detalle que pueda en la organizacion y la estructura de las tropas. Que proporcion mantiene respecto a espadachines, lanceros, arqueros, caballeria y como los distribuye a lo largo de sus dominios.
Tambien intento percibir el estado de animo y de moral de las mismas y el modo en el que sus oficiales se dirigen a ellas.
Cualquier cosa que pueda aprender, por pequeña que sea, habra valido la pena.

Una vez tenga a los herreros conmigo les expongo el tema:

- Saludos caballeros. Permitidme que me presente. Mi nombre es Lord Asenoc. He venido a veros casi exclusivamente a vosotros debido a la fama que os precede. Ha llegado a mis oidos que sois algunos de los mejores herreros que se pueden encontrar en Constantinopla y probablemente en muchas millas a la redonda.

- No quiero perder el tiempo con palabreria tipica de nobles asi que os cuento cual es mi problema. Al igual que Nicéforo aunque en menor medida yo tambien tengo tropas. Algunas de ellas son tropas regulares mientras que otras son milicia de ciudadanos. No obstante muchos de ellos tienen una familia que mantener y quiero proporcionarles las mejores protecciones que pueda pagar. Por desgracia parece ser que el hierro que se extrae de mis minas es de una calidad pobre. De modo que ahi van mis preguntas...

- ¿Es posible crear una aleacion de ese hierro mezclandolo con algun otro metal para conseguir un resultado satisfactorio? Estaria dispuesto a subvencionar experimentos al respecto.

- ¿Se os ocurren otras soluciones para aprovechar el hierro que generan mis minas? He pensado que puesto que ese hierro no tiene la dureza necesaria para mantener un filo quizas podriamos forjar Mazas con el. ¿Alguna otra idea?

- Y por ultimo... necesito abastecer a mis soldados con armas y armaduras. Aunque este es un negocio que debo tratar con Nicéforo se me ocurren opciones. Entre ellas me gustaria que me permitiese contrataros a alguno de vosotros. Podeis enseñar a mis herreros a hacerlo mejor y le daria libertad total para desarrollar cualquier idea o iniciativa innovadora que desee.

- Os dejo aqui para que disfruteis del vino y de la comida. Os veo dentro de un par de horas y me contais que propuestas teneis.

Salgo de la sala y cierro la puerta a mi espalda. Me quedo quieto unos segundos pensando que ha ido bastante bien y de repente caigo en la cuenta del "enfasis" con el que el sirviente ha dicho "lo que necesites". Busco al sirviente y le pregunto sobre que tipo de "necesidades especiales" me puede ayudar. ¿Quizas un par de jovenes doncellas para amenizar mi espera? Aunque estoy abierto a sugerencias...

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14/05/2014, 13:47
Narrador

El sirviente te atiende al salir a la puerta y te confirma que cuando Nicéforo dice "cualquier cosa" se refiere a eso, a lo que sea. Si deseas un par de doncellas que amenicen tu velada en tu habitación mientras esperas que regrese Nicéforo y que los herreros discutan sobre tu problema, así se hará. Son sólo mirar a tu alrededor, te das cuenta de que Nicéforo es inmensamente rico, mucho más rico que tú.

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14/05/2014, 14:45
Asenoc

- Que asi sea pues. Un par de doncellas jovenes y guapas que me hagan compañia.
- Necesitare tambien una buena cantidad de vino, miel, cuerdas, pañuelos de seda y unas velas.

- Avisadme cuando pueda hablar con Nicéforo y los Herreros. Muchas gracias por todo.
 

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14/05/2014, 15:43
Narrador

El sirviente atiende tus órdenes con premura, y en menos de diez minutos aparecen un par de doncellas con lo que has ordenado en tu habitación. Tras algo más de dos horas llaman a la puerta, es el sirviente que te asignó Nicéforo.

-Mi señor, los herreros dicen que ya han deliberado y que desean reunirse con vos. Por otra parte, el Prefecto llegó hace un rato, pero no os he interrumpido porque ahora está ocupado atendiendo a los nobles que han acudido a palacio con sus exigencias.

La verdad es que el sirviente no interrumpe nada. Has dado buen uso de las dos horas a solas con las sirvientas y en este momento sólo estabas descansando, fumando en pipa mientras mirabas por la ventana pensativo el ir y venir de gente a la luz de las antorchas.

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14/05/2014, 15:50
Asenoc

Excelente. Me reunire con los herreros antes que con Nicéforo. Es mejor escuchar lo que tienen que decir sin el delante. Su presencia podria influir en sus respuestas.

Gracias caballero. No les hare esperar. Vayamos a ver que tienen para mi.

Me acerco a las doncellas y les susurro al oido...

Sois unas criaturas encantadoras. Si os place me encantaria volver a veros algun dia.

Les acaricio el rostro y les dirijo una mirada amorosa. Despues me giro y me dirijo con premura hacia la sala donde los herreros estan reunidos. Entro con un gran porte y confianza en mi mismo.

Saludos de nuevo mis señores. Me han dicho que teneis algo para mi. Escuchemoslo...

Notas de juego

Yo tambien voy a usar tu sistema para la narracion. Aunque existe la posibilidad de que al principio cometa algun error.

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14/05/2014, 17:02
Narrador

Los herreros (tres en concreto) se encuentran en la misma sala donde los dejaste. Hablan entre si con semblante serio, y al pasar tu terminan la conversación y tras dirigirte un cortés saludo, el que parece mayor de ellos te habla con sinceridad.

-Es difícil encontrar una solución a vuestro problema, Lord Asenoc. Conocemos la mina de la que nos habéis hablado, esa mina nunca se ha empleado para forjar armas por la mala calidad del mineral de sus vetas. Es probable que la manufactura tenga algo que ver, y es indudable que la calidad de vuestras armas mejoraría si mejorara la manufactura... pero el problema de base seguiría ahí. Si, es fácil realizar una aleación que mejore la calidad del mineral, o incluso clarificar el propio mineral para mejorar su calidad. Pero en nuestra experta opinión, ambas opciones encarecen demasiado el producto como para merecer la pena.

En nuestra opinión, sería mucho más acertado encargar a vuestros herreros forjar herramientas u otro tipo de utensilios que no necesiten tanta dureza como un arma. Por ejemplo, podríais encargar a vuestros herreros realizar rejas, herraduras, azadas. Creo que entendéis.

Por otra parte, la ventaja del mineral de vuestra mina es que es más maleable, lo que hace más fácil su trabajo. Si aceptáis nuestro humilde consejo, fabricad herramientas que puedan interesar a los ganaderos y agricultores. Seguro fabricaríais gran cantidad más rápido que armas, y se venderían más fácil. Con el dinero obtenido podríais comprar las armas y armaduras.

Siempre es tedioso no poder depender de uno mismo, pero en esta ocasión la alternativa es lenta y costosa. Lamentamos no poder serle de más utilidad.

Notas de juego

Yo también soy novato usando este sistema, pero creo que se hace más fácil la lectura ^_^

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14/05/2014, 19:49
Asenoc

Pese a que esa no es la respuesta que esperaba no soy de los que se rinden. Confio en vuestro criterio y asi lo hare. Voy a producir utensilios que tengan un bajo coste debido a su rapidez de fabricacion e intentare optimizar los beneficios. Con ellos comprare vuestras armas y armaduras a Nicéforo.

Muchas gracias por todo. Cuando vuelva a mis tierras os enviare un presente para agradeceros vuestra amabilidad. Ahora, si me disculpan, creo que debo tratar asuntos con Nicéforo. Que pasen un buen dia caballeros.

Busco al sirviente para que me avise cuando Nicéforo esta disponible.

Quizas deberia preguntarle a Nicéforo sobre la extraña nota del mendigo leproso. Parece ser un hombre de gran experiencia. Vaya... este asunto de las minas me ha dejado la garganta seca... ¿Donde estara la bodega?...

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14/05/2014, 23:34
Nicéforo

El sirviente te espera a la puerta. Tras tu reunión con los herreros, el sirviente te conduce por los pasillos hasta una sala donde esperan algunos nobles a ser atendidos por Nicéforo. Al menos, sólo quedan dos, los despachará pronto. Tomas asiento en un cómodo sillón con una copa de vino, disfrutando de la música que una dama interpreta en un arpa. En efecto, Nicéforo despacha pronto a los dos nobles que quedan (uno de ellos bastante airado, por cierto). Y sale a recibirte con los brazos abiertos.

-Te ruego me disculpes. Me temo que mis quehaceres diarios hoy han sido más complicados de lo habitual. ¿Qué tal la estancia? Espero que mis sirvientes hayan sabido atender tus necesidades correctamente -te guiña un ojo con picardía-, dime. ¿Que opinión te merecen mis herreros, armas y armaduras?

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15/05/2014, 08:01
Asenoc

No os preocupeis mi querido Nicéforo. Esta ha sido la espera mas agradable que he tenido en los ultimos años.

Me acerco a el y respondo a su abrazo.

La estancia aqui esta siendo fabulosa. Armas era dulce y encantadora mientras que Armadura era salvaje como una tigresa. Me han complacido completamente. Es mas... estaba valorando la posibilidad de casarme con ambas. Hahaha. (Rio)

Bueno. Dejando las bromas a un lado lo cierto es que vuestros herreros son muy competentes. Me habria gustado llevarme alguno a mis forjas pero parece que os son muy leales.

Me han ofrecido soluciones a mi problema con el hierro y parece que mi unica alternativa es comprar las armas y armaduras a un proveedor externo. Confio en que podamos hacer negocios a ese respecto.

Me pongo mas serio y camino por la sala observando distraidamente los adornos, tapices y demas objetos.

Y cambiando de tema... queria comentaros un asunto curioso que me ocurrio en la ciudad... sabeis algo sobre las escrituras de Lucas?

Le cuento lo ocurrido con el Leproso omitiendo mis opiniones al respecto.

¿Alguna vez os ha ocurrido algo parecido? No veo que interes puede tener nadie en mi persona... salvo que seas una dama que necesite consuelo claro esta...

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15/05/2014, 15:43
Nicéforo

-Me complace que mis 'armas' y 'armaduras' sean de tu agrado -sonríe Nicéforo imitando tu juego de palabras-, hablaré con alguno de mis maestros herreros para que te acompañe un tiempo, ahora mismo no necesito a todos ellos, podría prescindir sin problemas de uno.

No te preocupes, seguro que hacemos buen negocio en lo que se refiere al aprovisionamiento de tus milicianos, hablaremos de eso más adelante.

Veo que has conocido a Kothar -Nicéforo ríe a carcajadas- no le hagáis el más mínimo caso, es inofensivo. Se curó milagrosamente de la lepra hace mucho tiempo, aunque le han quedado las marcas. Desde entonces se cree una especie de profeta destinado a convencer a los ricos y poderosos de volver al buen camino. Todos los nobles de Constantinopla han tenido algún encuentro parecido al tuyo. De hecho, te he decir que si te ha devuelto la limosna que le diste es porque le has caído bien, y en cierto modo, has pasado su "prueba", quienes no la pasan acaban invariablemente saqueados.

Cambiando de tema... En realidad no te he invitado por las armas y armaduras. Nuestro encuentro anoche no fue casual. Yo sabía que estabas alojado en esa posada y quería conocerte. Nuestro encuentro con Elsh tampoco fue casual, yo le avisé y le indiqué donde y cuando debía estar. Elsh tiene una percepción privilegiada y una habilidad increíble para ver dentro de las personas, necesitaba estar seguro de que eres de fiar, Asenoc, pues lo que voy a proponerte es un asunto delicado.

Estoy desbordado de trabajo. Mi más reciente servidor fue asesinado hace apenas una semana, y no doy abasto. Llevo una semana buscando un sustituto, y ahí es donde entras tú.

Siéntate y escucha atento -por un instante, obedeces, como si tu voluntad hubiera desaparecido por completo- soy un ser inmortal, un condenado, un hijo de Caín... un vampiro. -Como dando veracidad a sus palabras abre la boca soltando un bufido y enseñando los enormes colmillos- Y quiero que seas mi sirviente. A cambio no enfermarás, ni envejecerás.

 

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15/05/2014, 16:10
Asenoc

Pese a que por alguna razon me siento profundamente intimidado e impresionado mi sentido comun me grita que debo ser esceptico en este asunto. ¿Un Vampiro? ¿Como en los cuentos de niños? Si esto es una broma todos los nobles de Constantinopla se reiran de mi durante decadas pero... ¿Y si es cierto? Inmortalidad. Belleza eterna. Poder...

Con un porte calmado como si no me sintiese impresionado le contesto...

Mi querido Nicéforo. Comprenderas que me muestre esceptico ante un asunto tan sobrenatural. Esos colmillos podrian ser falsos y esto una broma muy elaborada. De todos modos si algo asi ocurriese de verdad... ¿quien seria tan estupido como para rechazar ese regalo?

Y si me conoces tan bien como creo que me conoces sabras que no necesitaria responder a esa pregunta. Mi mayor temor es envejecer y dejar de ser tan sorprendentemente guapo.

Sonrio y tomo un sorbo de vino. A continuacion espero la respuesta de Nicéforo.

 

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15/05/2014, 23:16
Nicéforo

-Mi querido Asenoc, comprendo tu escepticismo, pero muy pronto todas tus dudas quedarán disipadas, te lo puedo asegurar...

Mientras habla, Nicéforo se pone en pie y coge un cuchillo de la mesa. Un cuchillo pequeño, destinado a pelar fruta, probablemente. Y se acerca despacio a ti mientras no deja de hablar. Sus ojos siguen fijos en tus ojos, una mirada penetrante, como mirar al fondo de un pozo tan oscuro que es imposible ver el fondo. Esos ojos... eres incapaz de apartar la mirada, eres incapaz de reaccionar, eres incapaz siguiera de pensar. Te sientes como un gatito hipnotizado por la mirada de una cobra.

-Esto es lo que va a pasar, mi buen Asenoc. Mañana por la mañana enviarás a todos tus hombres a tu palacio, les dirás que no necesitas tus servicios aquí, pues las negociaciones están siendo más difíciles de lo que esperabas, y que yo mismo he ofrecido mis hombres para hacerte de escolta a tu palacio cuando las negociaciones acaben. Durante tres días vivirás aquí, haciendo lo que te plazca en Constantinopla, pero por las noches acudirás a dormir aquí. A "negociar" conmigo. Al acabar la tercera noche, firmaremos un ventajoso tratado para ambos. Uno por el que te comprometes a proporcionar hombres de tu milicia a mi guardia de forma periódica. A cambio te nombraré mi prelado dentro de tu propias tierras y te proporcionaré armas y armaduras. Esto será suficiente para disipar dudas de los demás mortales y justificar que vengas a verme cada cierto tiempo.
Durante esta noche y la siguiente beberás de mi sangre, desarrollarás nuevas habilidades y se completará el proceso. De entonces en adelante vendrás a Constantinopla una vez por semana, y beberás de mi vitae, para evitar envejecer. Si en algún momento dejaras de tomarla... bueno... puedes imaginar los desastrosos resultados.

-Y ahora... ¡¡¡BEBE!!!

Al decir esto, corta su muñeca salvajemente y te la pone en la boca. No tienes elección, ni tan siquiera te planteas no hacerlo. Aunque deseas hacerlo, te das cuenta de que tu cuerpo no te pertenece. El sabor metálico de la sangre de Nicéforo inunda tu boca y sientes como al asimilarla todo tu cuerpo arde en llamas. Pero no es doloroso, al contrario, es el orgasmo más placentero que has experimentado en tu vida. Una sensación por la que merece la pena vivir y morir. Es la droga más poderosa que jamás has tomado, no puedes parar de tomar más y más, desearías que este momento no acabara nunca.
Mientras bebes, parte de la vida de Nicéforo pasa por delante de ti en forma de rápidas imágenes, aprendiendo cosas que no sabías y adquiriendo parte de sus conocimientos. De algún modo, formas parte de él por un instante, y esa sensación hace que le ames más de lo que jamás amaste a nadie. Darías tu vida por él sin dudar -no es metafórico, es así- y harás cualquier cosa que te diga con placer y premura, sólo por poder saborear su sangre una vez más.

Notas de juego

Si miras tu ficha, veras cosas con asterisco *

Estas cosas se han modificado gracias a la sangre de Nicéforo, si dejaras de tomar su sangre, se perderían. Tu reserva de sangre es 4+1d6 (no voy a llevar un control estricto, si pasa algo que origine un gasto de sangre, tiraremos para determinar que reserva te queda. Se gasta por si sóla al ritmo de 1 por día, hagas lo que hagas, aunque hay algunas cosas que hacen que el gasto se acelere (ya lo descubrirás poco a poco)

NADIE, ni tan siquiera los otros jugadores, debe saber que eres un ghoul, o que Nicéforo es un vampiro. Puedes preguntarle lo que desees a él, pero no te garantizo que te quiera contestar ;D

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16/05/2014, 07:55
Asenoc

Siento como la fragilidad de mi cuerpo humano desaparece. Todo parece diferente. Es como si hubiese vivido con un velo en los ojos toda la vida. Como si hubiese estado muerto y viviendo en alguna clase de sueño borroso. Ahora puede ver con claridad. He evolucionado y soy mejor. Una especie distinta destinada a gobernar.

Nicéforo me ha hecho un regalo unico. Cualquiera puede comprar mujeres, vino, joyas, propiedades e incluso la muerte de otras personas. ¡Pero nadie puede comprar la vida eterna!

Mi señor Nicéforo. Es para mi un gran honor estar a su servicio...

Notas de juego

He visto que tengo nuevos poderes.
¿Me puedes decir que libros tengo que descargar para ver que hacen?

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16/05/2014, 10:05
Nicéforo

-Sabía que te complacería el trato. Ahora puedes volver a tu palacio y a tus quehaceres diarios. Aprovecha esta semana para acostumbrarte a tu nueva situación. La semana que viene cuando vengas te encargaré tareas serias. De momento, sólo necesito que visites a un conde que se encuentra a medio camino entre Constantinopla y tu castillo, te viene de camino. Lleva atrasando los tributos mucho tiempo alegando malas cosechas, pero mis informadores me han dicho que sus cosechas son buenas. Hay gato encerrado, algo oculta ese hombre. Le visitarás acompañado de una guarnición de mis hombres, con tu nuevo estatus de prelado. Debes hacerle entender que los tributos han de pagarse.

Notas de juego

De momento no descargues ni leas nada, así será más divertido descubrirlo, jejeje... Te puedo asegurar que no vas a tardar mucho en descubrirlo.