Partida Rol por web

- Sabemos dónde no debemos volver a darnos un baño... - Dwama resopló. - Más cuando has sido invitada por una empleada y luego te lo cargan en la cuenta... - Miró a Maridosen con desaprobación. - Que feo está eso... - Negó con la cabeza mientras miraba con resignación a la semielfa. - Pero de todo, lo peor sin duda ha sido la mala educación que usted ha mostrado. Llamar gañanes y hideputas a los clientes, desde luego no es una práctica muy aconsejable. ¡Presentaré mi queja al dueño de esta casa de usura! ¡De eso no le quepa la menor duda! - Y con eso pagó la cuenta y se marchó en busca del dueño de la que se suponía la mejor posada de Hommlet.

Problemas del tercer mundo.. No os preocupéis, (dirigiéndome al grupo) no es algo que repetiremos muy a menudo.

Pago mi parte y me retiro a mi habitación, no me apetece discutir tonterías..

Buenas noches caballeros.

Pasáis una muy buena noche, descansáis como nunca habíais descansado, gracias en parte a las cómodos catres que tiene este lugar, sin duda ahí se nota la diferencia con otros lugares mas baratos.

Uno a uno os vais despertando todos, aunque vuestra intención era partir con la primera luz del alba, lo exhaustos que estabais ha provocado que despertéis casi al medio día, con el olor de guiso preparado a postas para la comida.

Os reencontráis en la posada, con mas gente que ayer, volvéis a ver a Vesta, la camarera, y al posadero que vuelve a encontrarse limpiando jarras de cristal con un paño y su desmesurada sonrisa. Por contra, en un rincón, veis a la guardia de seguridad apoyada con cara de desgana en una pared.

Veis en el resto de mesas a los mismos del día anterior, y a parte veis a un hombre (humano) con una armadura de cuero de gran calidad tomando una cerveza,  a un gnomo y en una mesa, alejado de todo el mundo a un mediano muy extraño, con la piel de un color verde oliva de haberse mezclado sus antepasados con otra raza.

-Oh! buenos días dormilones! ya pensaba que debería mandaros a Maridosen a despertaros, jajajaja. Como han descansado los Señores y las Señoras? Os dice la camarera recién os habéis sentado.

-Me temo que es tarde para llamar a esto el desayuno, pero tentenpié de media mañana me parece un buen nombre, que puedo serviros? huevos? cerveza? vino? el plato del día es codorniz con puré de zanahoria y salsa de ajo, muy rico! Que tienen pensado hacer por nuestra buena ciudad? No duden en preguntarme si tienen dudas de a donde ir, tenemos un plano de la ciudad por cortesía del gremio de Comercio, el mejor lugar donde comprar! esto último os lo dice del tirón, como si repitiese un eslogan y ella fuera una comerciante.

-¡Posadera! ¡este buen sueño me ha avivado el apetito! ¡Portad presto una buena hogaza de pan! ¡Uvas con un buen queso curado y aquesto que denomináis codornices, pues suenan apetitosas!- golpeó la mesa con entusiasmo.-Regad la mesa con una buena hidromiel, puesto que pese a que es bebida de villano, es dulce y me regala el gaznate,¡ Recojones! ¡Que la bebida de la mesa corra de mi cuenta, más hoy me siento generoso!- Gritó lleno de energía.

Parecía indiscutible que descansar en una cama similar a la de su castillo le había subido el ánimo desmesuradamente, puesto que tras pedir, empezó a entonar una canción típica de su feudo.

-¡Le daremos mucha caña como al duque de champaaaañaa al que rajamos con sañaaa y ahorcaaamos con mucha maaaaña!-moviendose al son de su tonadilla.

-Ajajaja! bien dicho! marchándo! dijo la camarera volviendo a pasar la comanda y esperando que los demás compañeros decidieran que comían.

-Ahora le preparan su comida Señor! aquí les traigo una jarra de buena y fresca hidromiel! Si se la acaban sólo indiquemelo y le traeré mas! En la mesa os coloca una jarra de cristal enorme y 4 jarras de cristal, de esas que habéis visto al posadero limpiar insistentemente.

-Y bien el resto?

- Una buena trampa me hiciste con lo del baño... - Dijo la enana muy seria. - ¿Una moneda de oro por un baño? - Sonrió. - ¡Vaya con el baño! ¡Ni que me preparases una bañera con fondo de diamante y me bañara en leche de camella con virutas de platino! - No pudo esconder su sonrisa. - ¡Pero valió la pena, diablos! - Exclamó con una risotada. - ¡Pan, queso y embutido para mí!

-Jajajaja Dwama! no te podrás quejar del baño! el precio es bastante normal creo yo! si lo que querías era un tonel lleno de agua fria con el que limpiarte un poco haberlo dicho, por 5 piezas de cobre te hubieramos servido! No te puedes imaginar lo caro que fue instalar todo el sistema para transportar tantos cientos de galones de agua para calentarlos en cada baño! Ya quisieran los pobres campesinos poderse dar baños de ese estilo! La semielfa rie demostrando que no se toma a mal vuestras palabras, da por hecho que bromeáis ya que no se cree que nadie vaya a una posada de buena calidad y se queje por pagar una pieza de oro por estar una hora en remojo en agua bien caliente.

En poco tiempo vuelve con la comida del conde y una gran fuente con varias piezas de embutido y queso para ambos.

-¡Ahhh! ¡Aquestas viandas son dignas de mi condado, mesera! ¡Brindo por vuestra hospitalidad, gentil dama! gritó alzando el vaso repleto de aguamiel, derramando parte de su contenido debido a los bruscos movimientos.

-¡Regálate el gaznate con este vinazo, tabernera! ¡Y tú, buena mujer, sírvete también a mi salud por las molestias que te causaron mis compañeros de viaje ayer noche!- Gritó en dirección a la guarda de seguridad del local.

-Ja ja ja! de que buen humor nos encontramos Señor! claro que tomaré un trago a vuestra salud, con Dios! dijo mientras cogía una jarra y daba un trago de aguamiel.

-Dulce bebida de dioses! 

-Dudo mucho que Maridosen se acerque, es un poco arisca y lo mas probable es que nos mire mal. Dijo con la boca chica, como si temiera a su empleada.

La guardia que os estaba mirando con mala cara, al escuchar el comentario de su jefa y tu ofrecimiento se levantó haciendo un gesto un poco violento, sin duda era una mujer de carácter muy duro.

La mujer se acerca a vosotros con cara de pocos amigos, veis a Vesta que cierra los ojos y se encoge como esperando una regañina de su empleada, y de pronto coge una jarra, ser sirve y grita: Por Kord! y da un trago a la rica bebida.

-Gracias por el ofrecimiento humano! cuesta encontrar gente digna y de buen humor por estos lares. y acto seguido se sirve otra copa.

-¡Ahhh!- gritó con aire complacido. -Seguidora del dios de la tormenta, según veo. Un dios severo pero justo, buen aliado del Castigador... ¡Salud pues, buena mujer!-tras lo cual entrechoca su jarra con la de la mujer y la vacía de un largo trago. -¡Por Sant Cuthberto!- gritó alzando su jarra vacía

-Por Sant Cuthberto clérigo! gritó mientras chocaba su jarra con la tuya en señal amistosa, todo con la mirada atónita de Vesta que nunca había visto así a la guardia.

-Y cuénteme hombre de Dios, para que ha venido a esta insignificante Villa, su armadura no la porta un simple viajero, usted es un acaudalado y parece competente!

-Santo peregrinaje, gentil dama. Provengo de un lejano condado, más la búsqueda de descendencia me ha traído hasta aquesta villa- dijo en tono solemne.

-Más creo no haberme presentado como debiera-Dijo agarrando la mano a la guardia, con el dorso de la mano hacia arriba- Godofredo el Audaz, Conde de Miramonte y de Papaencourt, vasallo de Luis VI el Gordo nuestro Rey y humilde siervo de Sant Cuthberg el castigador. A sus pies, buena mujer.- Dijo inclinando su cabeza simulando el bersarle el dorso de la mano.

-De descendencia? esa parece una gran historia! permitame que me presente yo también! Maridosen Altojardín, hija del príncipe Lothril Altojardín de Veluna, para servirle Conde. Dijo haciendo una reverencia con la mano, como dejando claro que dispone de modales pero que los formalismos no van con ella.

-Estoy de paso en esta Villa intentando encontrar mi camino en este mundo, hace 10 años que no vuelvo a mi tierra, he luchado en incontables batallas por Kord para diversos ejercitos, el último a las ordenes del mismísimo Rey Ku-Thu*kya en una ofensiva contra el Semidemonio Iuz en el Norte, de ahí bajé al sur para proseguir mi marcha.

Aquello empezaba a parecerse a un buen banquete enano. Por desgracia, no es que Dwama hubiera estado en ninguno. Su estúpido padre había dejado el calor de la ciudadela enana de Karak-Zulvor, por la apestosa y fétida Rastor. Por suerte su abuelo le había contado acerca de esos grandes festejos de antaño.

A decir verdad, hasta la estirada e insípida semielfa que estaba a cargo de la seguridad de aquel antro, parecía más simpática esa mañana. El conde estaba alegre. Godofredo le había invitado a beber y ella no lo había rechazado.

Posiblemente el conde había soñado con una buena prostituta con la que desposarse. Cuando eso pasaba su generosidad duraba todo el día y a medida que bajaba su bolsa de monedas sus lengua se estiraba y sus melodías sonaban más desafinadas y obscenas.

- ¡Ese es mi conde! - Dwama alzó su jarra y brindó con Godofredo y hasta con Maridosen. - ¡Vamos Jack, súmate al festejo!

A Sheiland no le iba a decir nada. Que se uniera al brindis si le placia. Aquella enana era bastante más seria y reservada que el resto. Buen, quizás Jack también lo era, pero también era más fácil de emborrachar.

- ¡Yo brindo por mi abuelo, Gralick aliento de ajo! - Chocó de nuevo su jarra. - ¡Espero que estés orgulloso de mí allí dónde estés!

Godofredo abrió los ojos de par en par ante aquella revelación que acababa de hacer aquella mujer que acababa de descubrirse como miembro de la alta nobleza.

-Disculpad a aqueste humilde servidor, mi señora, pues no alcancé a ver vuestra sangre real, si bien es indudable  por vuestro porte que por vuestra sangre ha de correr la mesma que la de un bravo guerrero.

Por un momento pareció que aquello incomodase al clérigo, si bien lo que le había incomodado había sido más el hecho de no haberla tratado como una semejante desde el principio que otra cosa.

-El tiempo que pase en aquesta villa os ruego que me busquéis si puedo hacer algo por vos.