Partida Rol por web

Habias salido esa mañana del ludus para hablar con uno de tus conocidos. Quinto Marco Tulio, un letrado que pensabas que podria ayudarte mucho con algunas ideas que tenias en tu cabeza.

Su oficina estaba algo lejos del ludus pero el camino no era tan largo. Pudiste ver como estaba roma esa mañana, con su habitual transito de gente que no se comparaba a otras ciudades, si bien era uno que olia fatal podias ver tambien que esto era lo que en parte permitia a Roma vivir. Obviamente los patricios eran los importantes porque ordenaban a esa plebe como correspondia.

Cuando llegaste al edificio de Quinto y cuando tus guardias tocaron la puerta, este fue quien respondio. Mirando extrañado a los guardias para luego sonreir grande al ver a Elia. "Querida señorita Elia, a que debo su agradable visita?" pregunto con una inclinacion.

-Quinto Marco, que los dones de Mercurio te sigan siendo favorables. Tengo que hacerte un encargo- Saludo al abogado con una sonrisa coqueta cuando entro en la casa. Doy una indicación a los guardias para se queden fuera. 

Espero que me lleve a una sala adecuada para tener nuestra conversación. Una vez alli, me siento comodamente. 

-Necesito que hagas unas indagaciones por mi, algo discreto. Estoy pasando una temporada con mi amiga Camila Donicus.. Hay una esclava en su Ludus, una tal Livia Octavia Prima. Quiero conocer los detalles de su caso, sobretodo los turbios. Fue condenada por el asesinato de su marido y su hijo por la familia de este, aunque intuyo que hay algo podrido en todo ello-

Quinto sonrio grande. "Seguro que sera asi, con mi señora rezando a mi favor." comento el hombre pidiendote que entres, ambos sabian que no eran temas para tratar en la calle. Rapidamente te llevo a una gran sala con una mesa en medio y varios pergaminos. Habian unos cuantos sillones contra la pared pero Quinto se apuro a acercarlos a la mesa.

Luego se te quedo escuchando mirandote con seriedad y se le noto cierto asco cuando nombraste los crimenes por los que se le acusaba. "Un relato horrible, aunque si mi señora cree que hay algo podrido ahi entonces investigare. Necesitaria saber si el crimen fue aqui o en otra provincia, dependiendo de eso me llevara tiempo mi señora." comento el hombre.

Quedo pensativa un rato, tratando de recordar si se mencionó ese detalle. -No recuerdo si se menciono.. tienes razón, es importante.. Lo averiguaré y te lo haré saber. Por si acaso empieza por Roma. No ha de ser difícil, debio ser un caso con cierto eco.. pero la discreción es importante, por eso recurro a ti. La familia Cornelia ha de quedar al margen-

El abogado asintio. "Mi confidencialidad siempre sera absoluta."

"Buscare el caso. Con el nombre de ella y siendo patricia posiblemente aparesca algo aunque sea de la familia de ella. Lo demas es ver donde me guia." comento este anotando en su mente el nombre de la mujer. "Hay algo en especial que busque. Digo a demas de que se la haya inculpado injustamente." dijo por si ella queria saber mas, tal vez mas de su vida pasada.

-He de suponer que cualquier cosa pasada sería utilizada en el juicio, aún así indaga a ver que descubres. Los jueces.. Si la causa fue turbia serían sobornados o al menos incentivados.. Ya se como funcionan los tribunales..​​​​​​-En Roma, la riqueza siempre es un atenuante y acostumbra a decantar la balanza de la justicia hacia el que pone la bolsa con más monedas. 

-Destapar un juicio amañado contra un ciudadano siempre proporciona fama y votos entre la plebe- La insinuación es clara para Quinto, hacerse un nombre como defensor siempre ha sido del agrado de los votantes. 

Quinto volvio a asentir. "Es sabia mi señora, si los jueces y abogados seguramente habran tenido una razon menos legal para acabar el caso de esa forma." comento dispuesto a ver cada uno de los indicios de algo raro. Sonrio grande ante el comentario sobre su posible premio si lograba el cometido. "Seguro que la plebe estara contenta, pero que hay de los patricios que aruinaron la vida de la mujer? Esos no veran muy bien nuestros movimientos mi señora." le aviso.

-De ahí la discreción y la precaución. Inventate algo si es preciso, una tía lejana que ha muerto y le ha dejado una pequeña herencia. Los esclavos no pueden heredar, y es preciso demostrar su condición para hacer el papeleo.. Que se yo.. Tú eres la estrella de los tribunales Quinto - me recuesto en el sofá bastante satisfecha de mi ocurrencia.

Quinto sonrie tal vez porque le acabas de facilitar el trabajo. "Claro, es buena idea. Probare con esa historia y cuando tenga el asunto claro ire a buscarte para decirte todo. Cuenta conmigo." dijo el hombre servicial.

-Enviame un mensaje, sin detalles, y vendré a verte. Creo que es todo- Me levanto para dar por acabada la entrevista. -Cuento contigo, se que mi padre confía en ti y eso ya es garantía suficiente para mi-

Tras eso te despediste del hombre, paso un par de dias pero te llego un mensaje de quinto. Como le dijiste no habia nada especifico en la carta, solo una coordial invitacion a merendar con èl. Mas alla de todo no habia razon para no ir.

Cuando llegaste al lugar sentiste una sensacion rara, mas cuando terminaste de tocar la puerta. Pronto la puerta se abrio con Quinto invitandote rapido adentro y cerrando la puerta. "Señorita Cornelia, encontre unas cuantas cosas de la mujer que me pidio que investigara. En principio no es de aca sino de Liguria, al norte de aqui." comento mas para ubicar donde habia ocurrido su juicio.

"De cualquier forma como el poder esta en roma no costo conseguir que mandaran informacion aqui." comento con una sonrisa invitandola a sentarse.

-Bien Quinto, no esperaba menos- Algo extrañada por la actitud del abogado, le sigo y tomo asiento donde me indica. -Liguria esta algo lejos para acabar aquí.. Te escucho con atención - 

Los notas y ves escondidos. Hay guardias de la ciudad cerca de ahi y mirando a la casa de Quintos. No hay entrado ni se han acercado cuando apareciste. Por otro lado estas casi segura que el abogado no tiene idea que tiene a guardias de la ciudad vigilando su casa.

"Es mas complejo de lo que pensaba y no te digo por la lejania. Al parecer el padre de esta mujer si se pueden creer los informes, estuvo en contra del actual emperador. Conspirando. Aunque las pruebas creo que han sido plantadas pero dejaron una mala vision de la familia de esa mujer." comento en un principio como dato importante a tener en cuenta.

"Respecto al caso particular de ella, en los papeles dice que se volvio loca. Que mato a su hijo y a su marido." simplifico para resumir rapido pero seguro sabia mas.

-¿Y eso porqué? ¿Quien puede tener interés en desprestigiar a esa familia? ¿Tenían enemigos? ¿No habría sido más simple ejecutarla? Necesito nombres Quinto, alguno habrás encontrado- Me levanto y paseo por la sala. Esto está resultando más espinoso de lo esperaba. De momento no mencionó la presencia de los guardias, a la espera de tener más datos del abogado 

"Lo digo por investigue al padre servia como senador al imperio. Pero a pesar de eso era un hombre poco importante." comento no con mucho respeto pero parecia querer aclarar algo importante. "Creo que bien pudo ser el esposo. Digo el hombre era menos importante para la familia pero igual livia se caso con este. Aunque tal vez estoy mirando de mas." comento concentrandose en sus papeles queriendo dar una respuesta. "No creo que tenian enemigos. ademas de los habituales."

"El juez penso que los dioses le castigarian todo lo que que viviera como esclava por el pecado que realizo con estos asesinatos. Que luego en muerte seguiria sufriendo mas." comento como si lo leyera de un documento.

"El nombre de su esposo puede dartelo. Marco Flavius, un comerciante mediocre."

-Extraño sentido de la justicia- digo con evidente sarcasmo -Mañana mismo podría ser liberada y nuestro juez quedaría como un patán irresponsable - 

Vuelvo a sentarme en sofa, aunque está vez me reclino hasta quedar apoyada en un codo. -No es habitual que la hija de un senador se case con un mercader.. Y uno mediocre además.. ¿Me ves a mi en un caso así? - hago un gesto de la mano que parece indicar que no necesito respuesta. 

-Aún así hay algo muy turbio en este asunto. Porque a no ser que hayas te hayas insinuado a una Vestal, no se porque están vigililando tu casa-

Quinto rie ante el comentario del juez. "No creas que es el unico que hace eso." comento dejandote ver que era uno de unos cuantos y se encogio de hombros.

Nego con la cabeza. "Por eso te digo que sospecho que aca paso algo raro y que el marido o su familia estan metidos."

Entonces parecio extrañarse por tus palabras pero unos fuertes golpes a la puerta de su hogar lo hicieron asustarse y pararse enseguida. Pronto volvieron a golpear la puerta como si fueran a derribarla, avisando esta vez que eran la guardia romana y que mejor abria rapido la puerta. "Voy!" grito quinto y te miro preocupado antes de ir.

Cuando abrio, le entraron rapidamente los guardias. Uno de ellos empujando sin mas al abogado. Luego parecieron revisar el lugar rapidamente con la vista, tal vez buscando a alguien mas pero se centraron en ti.

Pronto llego un hombre vestido con un uniforme de la guardia, pero los detalles de la vestimenta lo dejaban como el capitan de esta. "Disculpen la intromision ciudadanos. Quinto Marco Tulio..." dijo mirando al hombre y luego vio a Elia. "Elia Cornelia Plancina." dijo de forma formal.

"Me han mandado a hablar con ustedes. Por suerte los dioses han elegido que los vea juntos." comento el hombre buscando una silla donde sentarse. "Quiero tranquilizarlos que no estan en grave problemas, sino los habriamos sacado fuera de aqui."

Más acobardada que sorprendida por la interrupción, me siento con toda la dignidad que puedo reunir, mirando con frialdad a los guardias. Confío en mi condición de patricia y sacerdote como mi mejor defensa.

-No sabía que reunirme con mi abogado es asunto de la guardia, así que entregad vuestro mensaje y el nombre del que os envía-

"Cayo César Augusto Germánico. El emperador Caligula de roma es quien me manda." le respondio rapido sin demora. "Su reunion con su abogado no es un crimen, como dije antes no estan en problemas."

Entonces miro a Quinto que hacia su mejor para no verse temeroso, que no lo lograba tanto como vos. "Su abogado investigo a una familia que fue declarada como traidores al emperador. Esperamos que haya sido por curiosidad y nada mas. Pero el mensaje es que lo dejes estar." le dijo como casi pareciendo una advertencia sus ultimas palabras.

Tras eso miro a Elia. "Disculpeme que no me presente. Soy Servius Pollius Valgus, estoy aqui para buscar su cooperacion para indagar una posible conspiracion contra el emperador. conoce a Flavius Carvilius Donicus, cierto?" pregunto aunque la pregunta no parecia necesaria ya que era el padre de tu amiga y el hombre debia saber que lo conocias.