Partida Rol por web

La mujer se mantiene en silencio pero sin perder detalle de lo que hablan unos y otros y lanzando de vez en cuando miradas hacia Andrea como si quisiera averiguar si aquello le afectaba o el muchacho era capaz de asimilarlo sin salir corriendo pues las palabras pronunciadas por tritón y humanos parecían sacadas de una fábula o de una película de ficción

Sus ojos tampoco pierden de vista a Eneas en ningún momento y su voz sólo se deja oír cuando Enna se acerca a ella para presentarse.Lejos de parecer incómoda por la desnudez del hombre Mónica le mira apreciativamente y sonríe poniendo una mano en su pecho también

-"Mónica"-se presenta antes de coger la mano extendida del joven-"Entonces ¿eres un...tritón?"-mira hacia Ronan y Mike esperando confirmación a su suposición-"Entonces entre los humanos hay un híbrido o más de sirena y hombre?"-mira hacia Eneas y alza una ceja-"Y es de suponer que su belleza será extremadamente sobrenatural ¿no?"- 

Azariel y Ligeia vuelven a irse juntos,esta vez hacia la cocina dejandoos en el salón con miles de preguntas sin respuesta sobre lo que el tritón acaba de soltar

-Los tres son tritones -dije, señalando con un gesto de cabeza a Eneas, Enna y Azariel, que ya marchaba hacia la cocina junto con Ligeia-. Pero nosotros no sabíamos nada sobre un híbrido entre las dos especies, al menos hasta ahora.

La hibridación entre especies era algo que siempre me había fascinado, encontrándose en algunas especies como los asnos y los caballos, aunque siempre solía suceder entre especies muy similares. Que pudiera producirse entre humanos y tritones implicaba que éramos bastante iguales.

Observé a Mónica y nuestras miradas se encontraron, la contemplé durante un rato, como si esperase que dijese algo en especial antes de que Enna y ella compartiesen un momento de presentación y Ronan confirmase lo que ya nos habían dado a suponer momentos antes.

Agaché la mirada ligeramente pensativo, estaba emocionado pero también algo preocupado -viendo como de fácil es que se mezclen entre nosotros no me sorprende tanto que existan híbridos, mientras la biología lo permita...-  expliqué en señal de que aquello no me inquietaba especialmente -sin embargo... esa bruja del mar de la que han hablado, entiendo que es la que está detrás de esos "accidentes"- fruncí ligeramente el ceño al decirlo -y que esté entre los humanos me da que pensar... de primeras creía que, de ser sirenas quienes los probocaban podía deberse simplemente a un acto de defensa o algo así, pero sabiendo todo esto...- hice una pausa antes de suspirar -no descarto que tenga algo en contra de los humanos ¿pero que necesidad tendría de venir y mezclarse entre nosotros? ¿busca a estos tritones o a los mestizos? ¿tienen esos híbridos algo tan especial o simplemente no puede soportar la idea de que ambas razas se mezclen?- expuse en voz alta.

Asintió ante la presentación de la mujer, escuchando con atención. Aunque había hablar humánido, no comprendía todos los giros y menos con la velocidad con la que lo hacían.

No todos sirenas tiener belleza... so-bre-na-tural -intentó explicar-. Especies se atraen, ser normal. Curiosidad. Hijos. Pero no bruja. Creer que bruja no ser quien busca...mos.

Asintió nuevamente, satisfecho por la traducción que acababa de hacer.

Uno de los chicos con cuatro ojos hablaba muy rápido y sólo había entendido la mitad.

Quizá Rey de Mar.

Meditó en voz alta.

Al menos parecía que Azariel tenía algo en mente y eso de hacer un plan me sonó muy bien. Necesitábamos un plan y no que cada uno fuera por su cuenta.

No pude negar la evidencia a Mónica y asentí con la cabeza a su pregunta. Y luego enarqué una ceja cuando Andrea dijo la palabra "accidentes"

- Tal vez nuestro plan ha de ser "acabar con ella" - Dije a colación de las palabras del chico - Muerto el perro, se acabó la rabia. Al fin y al cabo no somos nosotros los que empezamos esta guerra. 

Enna, el que si no había entendido mal era un híbrido, me sorprendió con la última frase - ¿Quién es el rey del mar y qué pinta en todo esto? ¿Está con la bruja o contra ella?

-No sabemos si nosotros los humanos empezamos esta guerra -le indiqué a Mike, puesto que podía haber muchos motivos por los que una especie marina inteligente nos declarase la guerra, el primero de ellos la contaminación de las aguas-. Realmente no sabemos nada. Puede que la Bruja del Mar ni siquiera sea la responsable de lo que está pasando, o que quien lo sea tenga motivos de sobra para querer venganza contra la humanidad.

Realmente la información que teníamos para avanzar era muy escasa. Si podíamos solucionar aquella situación de una forma pacífica, había que intentarlo.

-¿Quién es ese Rey del Mar? -le pregunté a Enna, extrañado. Era la primera vez que oía ese nombre.

-Tienes toda la razón, espero que puedan aclararnos algo más pronto- Respondí al escuchar a Ronan hablar a cerca del conflicto y la posibilidad de que lo empezásemos los humanos mientras trataba de procesar lo último que Enna nos había dicho, no estaba seguro de que nos estuviésemos entendiendo completamente así que lacé un par  de preguntas -¿entonces vosotros buscáis a los mestizos pero no creéis que la bruja tenga especial interés por ellos?- pronuncié haciendo una pausa antes de seguir -¿y también buscáis al Rey de Mar?- finalicé, parecía esforzarse mucho por comunicarse, cosa que apreciaba, pero era mejor no lanzarle demasiadas preguntas de golpe.

En ese momento Eressëa se asoma desde la cocina y ve allí reunidos a conocidos y desconocidos pues un nuevo chico que no ha visto antes se ha unido a la reunión con el resto de humanos

-¿Eneas? - miró hacia el comedor, buscando la presencia del tritón. -¡Qué bien que viniste! ¿Puedes ayudarme un segundo? έχουμε ένα πρόβλημα

Sin más la sirena vuelve a meterse en la cocina segura de que Eneas iría hacia allí

La doctora chasqueó molesta la lengua ante tanta ida y venida y sin demasiadas ceremonias carraspeó y alzó la voz para que los de la cocina la escucharan 

-"¡EH,LOS DE LA COCINA,VENID DE UNA PUÑETERA VEZ Y HABLEMOS,HAY QUE IDEAR PLANES,HACER CONJETURAS Y VER QUIÉN COÑO ESTÁ ORGANIZANDO LA DE DIOS EN ESTA ISLA"-sonrió a los del salón con dulzura y de un tragó se bebió una copa que había sobre la mesa y que a saber de dónde había salido

La reacción de Valeria definía un poco lo mismo que estaba pensando. Unos y otros iban y venían de la cocina y no había mucha coordinación entre nosotros ni se ponía en común lo que cada uno parecía saber. Confiaba en los tres tritones, que habían demostrado ser buenas personas, pero aún no sabía si podía fiarme de Erëssea, pues a la vista de lo que había dicho Azariel, podía saber más de lo que decía.

-Yo acabo de enterarme hace literalmente unos minutos que los mestizos entre sirena y humano existían -le indiqué a Andrea, encogiéndome de hombros, haciéndole ver que estaba casi tan perdido como el muchacho-. Y tampoco sé si la Bruja del Mar es o no la responsable de las desapariciones, por ahora parece una pieza importante más en todo esto. -Ni siquiera sabía quien era el Rey del Mar, por lo que miré a los dos sirenos presentes con la esperanza de que uno de ellos tuviese la respuesta.

Debía de controlar mis impulsos, la muerte de Bianca me había afectado más de lo aparente, pero tenía que hacer un esfuerzo y ser más sensato.

La exclamación de la doctora me hizo sonreír, la entendía perfectamente. 

Me puse a pensar tratando de recapitular, tratando de aportar, lo hice en voz alta - La inmersión por nuestra cuenta resultó un fracaso e ir armados hasta los dientes no suele ser buena idea si se busca la paz. Tengo la impresión de que dependemos de sirenas, tritones o mestizos... Y en mi estado... no me siento muy útil, la verdad.

Desde la muerte de Bianca me había sentido fuera de lugar. Y por fin dije lo que me venía rondando la cabeza desde hacía un rato.

- Chicos, acabo de decidir que acompañaré el cuerpo de Bianca de vuelta a nuestro país. Le fallé en vida, de algún modo siento que se lo debo y también a sus familiares. Quedarme aquí sería como esconderme y... podría arrepentirme en el futuro. Que tengáis suerte con la investigación - Me levanté y fui a recoger mis cosas, ahora que lo había decidido sentí que me quitaba un peso de encima.

Eeh! - no esperaba la maniobra de Azariel.  Antes de darme cuenta estaba en mitad del comedor, alzada del suelo por los fuertes brazos del tritón. ​​​​​​-​​​​​​Una cosa es no tener tiempo y otra... Ésto!

Alejada de la dignidad y elegancia con la que solía desplazarme, me solté como pude de su traicionero abrazo y a punto estuve de caer sentada sobre la mesa del comedor.

Miré furiosa a mi amigo, una mirada que habría hecho retroceder al mismísimo Kraken, antes de recomponerme.  

-​​​​​​En eso estábamos, Valeria - intenté suavizar mi gesto, Valeria no tenía la culpa. - pensando y conjeturando.

Cuando Valeria llamó la atención a los de la cocina tuve que contener una ligera risa, parecía que estábamos todos igual de perdidos, entonces Ronan y Mike lo admitieron en voz alta -Sí, está claro que no es algo que podamos hacer sin ellos- coincidí ante la conclusión de este último, quien justo después expresó su deseo por volver a su país para velar por los restos de la chica recientemente fallecida, no encontraba las palabras adecuadas así que solo asentí en señal de que comprendía su decisión, tratando de hacerle saber que tenía el poco apoyo que podía darle. Y entonces, de pronto, los de la cocina hacieron una entrada triunfal.

Esbocé una ligera sonrisa para ellos, todavía me resultaba sorprendente estar tratando con tritones y aunque había muchas cosas que me gustaría descubrir de ellos estaba claro que ahora habían algunas prioridades -entiendo que tenéis muchas cosas de las que hablar- pronuncié después de Eressëa -y que muchas de ellas sean privadas...- añadí en señal de que entendía que hubiesen ido a charlar en privado hace un momento -pero aquí estamos muy perdidos y queremos ayudar a que la situación se calme lo antes posible- le expliqué antes de hacerle una petición -¿podrías ayudarnos?-

En cuanto soltó a Eressëa y vió que no salia corriendo de nuevo de vuelta a la cocina, sus ojos sondearon la estancia en busca de la tal Mónica. Su amiga habia dicho que no había podido, pero él tenía que intentarlo. Aún así, antes escuchó a aquel joven que hablaba preocupado. Llevaba también cristales en la cara como Marc, pero estos erán distintos.

- Si. Todos juntos trabajar. Importante - Se habia inclinado para mirar directamente a aquel chico, con apenas unos milímetros de distancia - tú no preocupar. Pero... ¿todos fiar de todos? - alzó una ceja de forma incosciente, pero que dejaba patente su atractivo. Y lo dijo así sin tapujos, sin dobleces. Sinceridad pura y dura como siempre.

Cuando se alzó, si habia localizado a la susodicha comenzó a cantar.

Mientras sus ojos sondeaban los de ella, se habia colocado de manera que la puerta de salida no fuera muy accesible para la fémina. Su cuerpo esculpido avanzó con confianza pero con suavidad, intentando ver si iba surtiendo efecto su voz, modulada y entonada de forma que pudiera acceder a su interior.

Cuando Azariel comienza a cantar todos calláis mientras un nudo se hace en vuestro estómago y contenéis la respiración extasiados ante lo que escucháis,sin embargo es Mónica quien resulta totalmente subyugada por la melodía y se muestra incapaz de reaccionar cuando Azariel se mueve,ella simplemente le sigue con los ojos llenos de adoración pareciendo olvidar al resto de los presentes

La canción de Azariel era poderosa, sincera.  Al contrario que mi débil y susurrante intento, no había dudas, dobleces ni miedo en su voz.  Tuvo éxito donde yo había fracasado, pero me alegré enormemente al ver la mirada de Mónica, su sumisión.  Pensé por momentos que ella era la mismísima Bruja del Mar, que habíamos metido bajo el mismo techo opresivo y artificial al ser responsable de gran parte, no todo, del conflicto.

-​​​​​​Que nos diga quién es, Azariel. Sus intenciones.  - sugerí. Deseaba que la posibilidad de estar trabajando junto a un posible enemigo desapareciese como las pisadas en la arena, barridas por la fuerza de las olas.

Su andar era masculino y atrayente incluso sin pretenderlo, y cuando llegó hasta Mónica, colocó ambas manos sobre los brazos de la mujer. Podría parecer que era un gesto cercano, de afecto, pero en realidad quería evitar que hiciera movimientos extraños pues no se fiaba del todo. Quizás por un sexto sentido o... a saber.

- ¿Cual es tu verdadero nombre?¿Quien eres en realidad y porque estás aquí?¿Que intenciones tienes? - su voz se habia modulado de modo que aunque no estaba cantando, casí parecia que seguía haciéndolo

Observé con tristeza cómo Mike anunciaba que se marcharía y abandonaría la investigación para llevarse el cuerpo de Bianca, o lo que quedara de él, de vuelta a su país. Tal vez fuera lo mejor para él. Desde luego debía haber sido de lo más dramático haber visto a su alumna y pareja ser devorada por unos tiburones.

Por otro lado, los de la cocina regresaban y Azariel entona su bello cántico, extasiándolos a todos, pero sobre todo acaba subyugando a Mónica, algo no muy diferente a lo que había hecho Eneas cuando estabámos en la playa para comprobar si se trataba de la Bruja del Mar. Era humana, o al menos eso había demostrado Eneas, aunque bien podría haber engañado al sireno rubio con sus capacidades. Desde luego no terminaba de fiarme de ella.

Entraba en el comedor con una sonrisa al ver como Azariel llevaba en peso a Eressëa, se puso al lado de ella cuando Azariel comenzó a hablar y al oirle cantar por segunda vez la respiración se le entrecortó por unos segundos, la melodía lo invitaba a seguirle con la mirada pero no pudo evitar coger de la mano a Eressea, la melodía era preciosa pero nada comparada con ella, escuchó atento a las preguntas que este le hacía a la mujer que hace poco había hecho que la sirena temblase y se pusiera nerviosa, tenía ganas de ver como sentía lo mismo y sobre todo saber como habían terminado allí. 

Acariciaba con su pulgar la mano de Eressëa a la vez que esperaba, ese día había comenzado mal y no parecía mejorar.

Sigo a la sirena y a Azariel hasta el salón, con una sonrisa, mucho más alegre al verlos de nuevo tan bien. Parecen ambos preocupados por Mónica ¿Y si es ella la famosa bruja? La verdad es que me he abstraído pensando en mis cosas, lo que sí ha quedado patente es que el sireno no se ha fiado de ella en ningún momento, algo no encaja aquí.

En eso estaba pensando cuando escucho cantar a Azariel, es la segunda vez, sonrío mirándole, la sensación que me embriaga ahora es la que siempre siento cuando le miro, pero ésta es algo extraña, es infundada y es más intensa. Qué bonito es escucharle cantar de nuevo. Me acerco despacio a él cuando toma a Mónica de los brazos, quiero estar cerca.