Partida Rol por web

Cuando ella lo observa desconfiada, el redobla la apuesta, y la mano de el se apoya en la cintura, al tiempo que la otra la hace levantar el brazo, y acaricio el mismo, de forma descendente, bajando el dorso de la mano por sus costillas, imitando la película.
- ¿Que es la vida sin riesgo, Srta Stark? ¿No es infinitamente aburrida? Hacer estos movimientos con alguien que me puede volar la cabeza hace que todo valga el doble, al menos. Además, si ya me has visto sin nada y no te has horrorizado, no hay nada más que hacer.
La giro, de forma repentina, de forma que encarasen y la hizo bailar un lento, bien pegada a a el.
Si después me vuelas la cabeza, hare que valga la pena cada segundo.
Y en un momento del baile, bajo la cabeza, para besarla.

Normalmente no se dejaba manejar con tanta facilidad. Pero al ser una habilidad en la que ella no tenía ni idea y tenía entendido que eran los hombres los que marcaban el paso, se dejó hacer. La cercanía del chico no la preocupaba, desde muy pequeña había tenido contacto cercano con hombres en los entrenamientos y así se lo estaba tomando. Hasta que llegó el beso. Jamás pensó que el piloto se atrevería a hacerlo. Pensaba que cuando hablaba de volarle la cabeza, era porque la estaba tocando un poco de más, pero el beso no entraba en sus planes.

En el momento en el que sus labios se rozaron los ojos de Nikkie se abrieron de golpe y se quedó algo paralizada. No era su primer beso, algunos deslices había tenido durante su época en la Alianza, pero nada serio ni importante que la distrajesen de sus misiones. Cuando consiguió reaccionar, no sabía cuanto tiempo había pasado.

De un empujón le separó y se quedó algo apartada aún con la respiración agitada. ¿Qué... qué haces? Obviamente no era parte del baile y no entendía a qué venía. Jamás le confesaría que el condenado besaba bien. Dependía mucho su siguiente movimiento de la respuesta que diera el chico, porque jamás permitiría que la viese y la tratase como a una facilona o a una cualquiera.

El empujón lo saco de su ensimismamiento, estaba disfrutando del contacto con la chica, cuando esta lo cuestiono. No solía ocurrir que cuando besaba lo empujaran a modo de rechazo. No entendía, pensaba que la chica lo estaba pasando bien, como él.
Lo siento. dijo el piloto, ligeramente confundido. Sentí el impulso, y lo hice. Extrañaba el calor de sus labios, y no quería conformarse con eso, pero tampoco quería forzar las cosas. Pensé que estabas disfrutando también…
Además, lo había rechazado tras cuatro o cinco segundos, no de inmediato…

Nikita se le quedó mirando dubitativa. Pensó que iba a reaccionar peor, pero hasta pidió perdón. ¿Pasarlo bien? No sabía si definirlo así, pero desde luego hacía mucho que no desconectaba de pelear y disparar. Eso no quitaba que se hubiese sentido... rara. Se quejaba de que ella le había visto desnudo sin haber bebido antes, pero él se había lanzado a besarla así porque sí. El piloto parecía el típico hombre sobrado de mujeres y eso a Nikkie no le gustaba.

No soy como esas a las que engatusas con una sonrisa y cuatro bailoteos. Valgo mucho más y no voy a permitir que me rebajes a ese nivel. Sabía pasárselo bien y no tenía inconveniente en que fuera con él, pero necesitaba ver que ella le interesaba de verdad. Al fin y al cabo, iban a tener que estar en la misma nave y trabajar juntos. No necesitaba lazos ni seriedad, tan solo... ver algo más que esa fachada, si es que la había. ¿Hay algo más ahí dentro?

Finalmente no se fue, tan solo apartó la mirada brevemente esperando ver su reacción.

Le devuelvo la sonrisa, al igual que el vago gesto con los hombros.
-No, xie xie. ¿Es esto todo lo que deseaba decirme? Me parece loable por su parte el interesarse por la tripulación. Trataré de ayudarles, en la medida de lo posible.

Me pongo en pie con movimientos pausados, antes de sacudirme la falda del vestido por pura costumbre.
-Señor Faraday... -Titubeo, antes de marcharme- ¿Desea mucho esta nave?

Por los reclamos que le hacía, parecía que aprovecharse de ella de la peor forma, y no que había intentado darle un simple beso.
¿Rebajarte? dijo, de nuevo sorprendido. ¿De qué hablaba? Beso, si te gustaba la cosa avanzaba, si no funcionaba, y era rechazado, bien, hasta ahí llego todo. ¿Pero rebajarla? En el peor de los casos quería bajarla, subirla, agarrarla de los cabellos, pero lo más cercano a rebajarla que pretendía el era darle algunas nalgadas si era el rollo de ella. Tampoco mas. En todo caso, el ambiente se había enfriado, de modo que se cruzo de brazos y se apoyo contra la pared, similar a como hacia ella. Tu creíste que porque nos besamos, puedes meterme en el saco, ¿es eso? negó con la cabeza. Despreocúpate. Vas a tener que remar mucho más si quieres hacerme groserías en tu habitación. Le guiño el ojo, y busco su camiseta, dándole la espalda y colocandosela.
- No estoy pilotando, ni entrenando, por lo que si me apetece un trago. paso por al lado, sonriéndole. Pense que aprovecharías tu oportunidad para ganarme a algo. dijo para provocarla, cuando paso cerca. ¿Te apuntas?

Faraday pareció sorprendido ante la negativa de ella a aprender a pilotar. ¿Además, se incorporo, quizás quería irse?
- Quizás sea complicado y todo, pero en realidad soy un sujeto sencillo, Srta Vasilis. Uno cuida el equipo con el que viaja, para que todo marche bien. No hay mucho más que ver, es auto preservación. Si mi artillero un día decide desparramarse por la pared y a la hora tengo reavers persiguiéndome, pues se acabo Faraday.
Penso la pregunta, llevándose el puño al mentón y mordiéndose un dedo por unos instantes.
– Deseo Volar, Srta. Un piloto clase AA, puede encontrar vuelos en todas partes, volar toda clase de aparatos, excepto cuando fuiste un miembro de la alianza y estas vedado en las listas de pilotos. Esta belleza dijo, golpeando una de las paredes metalicas de la nave. Me mantiene a flote, libre, ¿me explico? Tenemos un trato, yo la cuido y ella me cuida. Yo cuido a la tripulación y ella vuela para mi…

¿A ganarte a algo? Siempre. Dice finalmente con una sonrisa. Era mejor no hacer la situación más rara o darle más importancia. Quizá ella le había metido en un saco, pero él yendo tan directo sin unos previos flirteos o roces tampoco es que le hubiera dado mucha opción. Es decir, sí, habían estafo bailando.. pero no todos los que bailan se besan. En fin, daba igual. Había que dejar que la cosa fluyese sin forzar nada.
Voy a tomarme un whisky..¿te pongo algo? Pregunta algo maliciosa mirandole de reojo con una pequeña sonrisa.

Tenemos un trato, yo la cuido y ella me cuida. Yo cuido a la tripulación y ella vuela para mi…

Mi ceño se frunce durante unos instantes, y aprieto los dientes antes de hablar.

-¿Tiene un trato con la nave o con alguien más? -Replico- No me quedaron claros sus motivos para enrolarse en la Constanze, señor Faraday. Si no tiene deudas con Sugar, ¿qué hace aquí? Por mucho que desertara de la Alianza, siempre hay demanda de pilotos con experiencia. 

El piloto sonrió. Whisky también. dijo, sentándose en las sillas de cabina. Era muy temprano para beber, o aun tarde, pero no tenia tareas programadas ese dia Solo quería aclarar que sea lo que hayas visto o no visto, hacia frio en esa cabina. dijo, mirándole el trasero mientras ella buscaba de espaldas las botellas.

Faraday sonrio, pues la mujer parecía esforzarse en descubrir cualquier clase de secretos que tuviera el o no.
Tengo un trato con la Constanze, por supuesto. dijo, mirándola por encima de la taza de café. No crea que hay tanta demanda, lo intente, vuelo por unos meses y luego alguien me dice, “mira, chico, no vuelas mal, pero no puedo seguir empleándote” Y así. Lo intente muchas veces, y termino en tierra. “Temas del Seguro”, “nada personal”, parece que a quien le deje el ojo roto tenía una familia influyente. Además, las nuevas naves de la alianza se vuelan casi solas. En realidad no necesitan pilotos, necesitas informáticos. Solo tienes que decirle al algoritmo que ruta tomar y la toma. Es mucho más fácil que los años de entrenamiento de combate. Por lo que aquí estoy.

Se gira con los tragos ya preparados justo para verle mirándola. Ella se le queda mirando con una ceja levantada y una sonrisa de medio lado. Se la deja justo delante y se inclina a modo de decirle um secreto.
¿Qué estarías dispuesto a hacer para que sea muuuy generosa cuando cuente la anécdota? Sonríe. Era más bien una broma, pero no estaría mal oír la respuesta.

¿Te refieres a “que mas” estoy dispuesto a hacer? Gracias a mi puedes ir a cualquier lugar y tener como moverte, al menos lo básico. Pues…
Pareció pensarlo, o lo pensó por unos momentos. No sé. Puedo dejar que venga a entrenar conmigo a las mañanas… o.. no se. …Se cocinar, se hacer masajes en su cuello, espalda o tus pies. O … podemos compartir el desayuno en tu cabina. le devolvió la sonrisa… y si todo eso no alcanza, pues no se… ¿dejarte con vida seria suficiente agradecimiento?

Así como el piloto iba pasando de cosas obvias como su trabajo em la nave que era pilotar, a una proposición indecente y finalmente una vacilada de haberse crecido, los ojos de Nikita fueron pasando de una mirada de decepción por decir una obviedad, a una sonrisa traviesa y finalmente a unos ojos en blanco.
Se volvió a inclinar hacia él. Me gustas más cuando eres pícaro que cuando te crees superior y eres prepotente. ¿En serio me matarías? Pregunta cerca de él con una ceja levantada.

Faraday sonrió, pícaro, cuando ella le pregunto si la mataría…
Por supuesto… Hizo un movimiento rápido, luego de advertir que no tenía nada en las manos con lo que pudiera caerse, o ensuciarse … que no.
Cuando termino de decirlo, ella se encontraba en el suelo, el cabello desparramado y el encaramado encima de Stark, sonriéndole como si la hubiera atraído hacia una trampa y el fuera una araña. Agarro el vaso con whisky, y bebió un poco, y le dijo Aunque puedo matarte a cosquillas, si lo deseo y no cumples mis deseos…inclino un poco el vaso de whisky para que fuera ella la que bebiera ahora. Claro que podía hacerle una contratoma y ponerse arriba de el, o beber del whisky que le ofrecia, u, por supuesto, ofenderse con el.

Examino la línea vertical que se forma entre las cejas de Faraday al hablar. El tamaño de sus pupilas. Su postura despreocupada y el tic que le hace golpear el asa de la taza con el pulgar. Exhalo un quedo suspiro por la nariz, antes de retirar mi mirada de la suya, y descenderla hasta mis pies.

-Siento que su carrera se viera truncada por ese puñetazo. Es un piloto excelente, se merece trabajar en un lugar mucho mejor que en una simple nave de contrabando. Aunque debemos agradecer el tenerle aquí.

Faraday se cruzo de brazos, y le sonrió, había solo una conclusión para una observación tan detallada como la suya luego de la comprometedora pregunta que le había hecho.
- ¿Ya pase su prueba? dijo divertido. ¿Le pareció que sirvo a otro señor? Fui piloto de combate de operaciones negras, Señorita Vasilis, me condicionaron a resistir interrogatorios, tal vez me estoy mordiendo el interior de mi mejilla, o presionando fuerte la mano no visible para no mostrar gestos de ansiedad.
El tono de voz del piloto no era irónico, ni sarcástico, ni burlón. Parecía realmente contento con ella.
- Si fue capaz de interrogarme a mí de esa forma, de seguro tendrá una conexión con aquellos que lo necesiten. se apoyo las cercanías de ella, y saco su pesado revolver de su espalda, dejándolo cerca de ella, de forma que pudiera tomarlo si lo deseaba, y apuntar con el al piloto. Déjeme ser ratificadoramente claro. Apoyo ambas manos en la mesa, donde fueran visibles y desde un metro la miro a los ojos. No soy un espía. No soy un traidor. No tengo ningún trato con nadie ajeno a esta nave, al momento de ahora. No tengo alguien que me este chantajeando, a mí, a algún miembro de mi familia o a ningún ser querido. No tengo animosidad alguna contra nadie en esta nave. Bueno, no al momento de ingresar en ella. Algunos se la vienen ganando a pulso. Si tiene alguna pregunta que hacerme, dispare*, se la responderé de forma directa sonrio de lado. pero luego tocara algún instrumento para mi.

No soy un espía. No soy un traidor. No tengo ningún trato con nadie ajeno a esta nave, al momento de ahora. No tengo alguien que me este chantajeando, a mí, a algún miembro de mi familia o a ningún ser querido. No tengo animosidad alguna contra nadie en esta nave. 

-Muy rápido ha llegado usted a la conclusión de que estaba buscando algún traidor -comento, mientras observo con recelo cómo saca su arma para depositarla sobre la mesa.

Por un instante me siento tan tentada de contarle... 

Aprieto la mandíbula. No, aún no. No puedo.

Si tiene alguna pregunta que hacerme, dispare*, se la responderé de forma directa. Pero luego tocara algún instrumento para mi.

-Señor Faraday... ¿viernes de teatro? ¿Tocar instrumentos a cambio de preguntas? -Relajo los músculos del rostro, y destenso los puños. Me estoy alterando por algo que ni siquiera sé si es cierto. Ensayo una breve sonrisa, para desviar la conversación del peligroso camino que estaba tomando- Si lo que desea es que realice una actuación para usted, pídamelo directamente. Todos los días practico en mi habitación, no me importaría hacerlo en la cocina. Aunque soy mucho más diestra con la danza que con el shamisen.