Partida Rol por web

La mirada con la que Dacen le responde al joven cabreado solo hace que este se enfurezca aún más pero por suerte para vosotros y para vuestra misión, al final el investigador decide no recurrir a la violencia y se limita a replicar con un claro gesto de desprecio para luego volver a centrarse en la conversación con sus compañeros. Con la situación solucionada y mientras esperáis a que llegue la comida, os dedicáis a examinar los alrededores aunque no notáis nada interesante ya que la mayoría de los presentes solo están ocupados comiendo o hablando de asuntos personales o de trabajo.

Al cabo de un par de minutos, uno de los droides camareros se acerca a la mesa de los investigadores portando cuatro platos, uno en cada brazo, y los va dejando frente a ellos. Por lo visto, todos han pedido algo elaborado con excepción de la zeltron ya que desde lejos se puede notar que su almuerzo es de los caros.
Aunque todos alcanzáis a ver que ha pedido cada uno de los investigadores, solo Blake logra a escuchar que después del almuerzo el líder del grupo y la mujer rubia se retirarán a la sala de estar, la estancia contigua al comedor y a la cual se accede por la puerta del sur, para hablar sobre el traspaso del mando.

Cuando Kimbria regresa con las bebidas, todos los investigadores las aceptan aunque el duro se limita a dejarla en la mesa, por lo visto todavía sigue molesto con vuestra presencia. Mientras veis como el bith comienza a beber, el informático continúa hablando con Nina.

-Es una verdadera pena, sacar provecho a veces hace las cosas más interesantes -bromea el hombre y al ver como vuestra compañera comienza a bailar, acerca el vaso a sus labios.

-Esto es un transporte de pasajeros, no un puñetero crucero, si queríais diversión os habéis equivocado de nave -os dice el duro con un tono de desprecio en su voz, luego centra su mirada en Nina- Y yo diría que tu especialidad es hacernos perder el tiempo, porque eso es lo que habéis hecho desde que llamasteis a la puerta.

-Tranquilo, no hace falta ser grosero -le responde el informático a su compañero mientras deja el vaso sobre la mesa sin haber llegado a probar ni una sola gota.

-Si tú quieres perder el tiempo, vete a almorzar con ellos pero no nos lo hagas perder al resto -replica el duro.

Mientras los dos investigadores discuten, vosotros podéis notar como al bith le empieza a dar sueño. Por lo visto, el somnífero no es de acción instantánea aunque solo es cuestión de tiempo para que a este empiece a dar cabezadas y termine dormido sobre la mesa.

Mientras observa cómo el informático parece entregado a Nina, Kimbria se coloca discretamente cerca del duro y trata de hacer un gesto con la cabeza a Gor y Ray para que también se pongan donde consideren necesario. Con uno y medio fuera de combate, reducir al renegón no será un problema, pero no quiere hacer ruidos.

Con el rabillo del ojo Nina observo como sus compañeros se colocaban para incapacitar a los técnicos, pero aún tenia unos segundos para intentar una última jugada.

- Mirad está claro que queréis que nos marchemos, pero al menos podemos despedirnos de buenas maneras con un brindis, o ni eso te vas a permitir? - hablando hacia el duro - me gustaría pensar que mis nuevos compañeros no tienen tan malas maneras...- con fluidez eleva su vaso - por un buen viaje y un trabajo seguro- mientras no aparta la vista del duro.

ya estábamos dentro, y uno había conseguido beber el somnífero, por lo que quedaba el informatico, ya que el otro no parecía tener ganas de beber, "¿Me permiten?" digo y cojo un vaso, "Se que mis compañeras pueden ser un poco pesadas, pero si es verdad que pararse a disfrutar de la vida de vez en cuando es algo muy útil, tampoco pasa nada por pararse unos minutos a conversar con los compañeros, aparte, si hay un buen ambiente de trabajo, los jefes están contectos, y tampoco vamos a estar mucho rato, nosotros también tenemos cosas que hacer" le digo al duro, y me pongo cerca suya, entre los dos podríamos reducirlo sin problema "¿entonces, te he convencido para el brindis?".

Más por hastío que porque le hayáis convencido, el duro agarra el vaso y se une al brindis junto con su compañero aunque lo hace en silencio y manteniendo su ceño fruncido. Sin embargo, mientras que el informático bebe, el duro vuelve a dejar el vaso sobre la mesa.

-¿Ya estáis satisfechos? Ahora largaos -os dice mientras se pone de pie y señala la puerta.

Antes de que podáis hacer nada, todos escucháis un golpe seco y al giraros veis que el bith se ha desplomado sobre la mesa y que ahora está sumido en un profundo sueño.

-¡Malditos desgraciados! ¡Sabía que no eráis de fiar! -exclama el duro mientras lleva rápidamente su mano hacia la empuñadura de su blaster.

Casi con pena Nina desenfundó su pistola, habían hecho todo lo posible por evitar esto, pero al duro no le había dado la gana colaborar.

- Tuviste que complicar las cosas querido!- apunto al duro esperando dejarlo fuera de combate.

Observo la escena. Parece que no vayamos a sacar nada de ellos. Esperemos que al otro grupo les vaya mejor, porque lo que es a nosotros...

¿Vosotros llegáis a escuchar qué dicen? susurro.

- Parecía que tenían una conversación bastante banal, decían que después el líder y la rubia hablarían sobre el traspaso de mando, pero poco más. O al menos lo que he podido oír. - dijo Blake - Tal vez deberíamos cambiar de estrategia e intentar acercarnos más. Necesitamos alguna excusa para entablar una conversación más profunda con ellos...

El duro no había bebido del brevaje, por lo que saco mi pistola, con las mismas y sin dudar un solo segundo, disparo contra el duro.

Viendo que sus compañeros parecían haber dado buena cuenta del duro Kim sacó su pistola de la amplia manga y disparó contra el informático, siempre en modo aturdir, claro. No tenían la culpa de nada los pobres.

Sin embargo la duda se reflejaba en su rostro y se extendió a su disparo que salió desviado y simplemente dejó una mancha oscura en una pared.

 - Yo puedo intentar el querer un acercamiento más intimo con la Zeltron, pero necesitaría que vosotras mantuvierais al margen al que la ronda. - Respondí. - Esa podría ser nuestra estrategia de entrada: Que yo quisiera ligar y vosotras, como mis compañeras de viaje, al venir conmigo, encontrarais una manera de entablar conversación con el resto.

Reaccionando antes que los investigadores e incluso que sus propios compañeros, Gor desenfunda rápidamente su pistola y abre fuego contra al duro. Aunque en otras condiciones el disparo hubiera sido letal, al usar el modo aturdir el daño se ve atenuado y por eso el investigador continúa de pie, sin embargo todos podéis notar como este ahora se mueve con mayor dificultad a causa del efecto aturdidor.
Imitando a su compañero, Nina también le dispara al duro y aunque consigue alcanzarle, solo resulta ser un impacto superficial que apenas le afecta. Por último, Kimbria abre fuego contra el informático pero su nerviosismo le juega una mala pasada y el disparo sale bastante desviado.

Sin amedrentarse a pesar de ser superados en número, los investigadores contraatacan pero al estar afectados por el somnífero o por el aturdimiento, ambos disparos terminan fallando y pasando lejos de vosotros.

A pesar de haber reaccionado con mayor lentitud que el resto, Ray no tarda en unirse al combate haciendo que el duro caiga inconsciente luego de un preciso disparo.
Con un investigador menos, Gor y Nina centran su atención en el informático y de dos certeros disparos ambos consiguen reducir al último enemigo, quien termina cayendo al suelo sumido en un profundo sueño causado por la combinación del somnífero y el efecto aturdidor.

Ahora que los técnicos están inconscientes, dos bajo el efecto del somnífero y otro solo por el de los disparos, podéis apropiaros de sus cilindros de códigos. Sin embargo, antes de hacerlo os dais cuenta que hay otro asunto que debéis resolver: donde esconder a los investigadores para que no los encuentren sus compañeros ni la tripulación de la nave cuando hagan la revisión antes de que ésta zarpe de Nyriaan

Mientras planeáis que hacer a continuación, uno de los droides camareros, probablemente el que había tomado vuestra orden, se acerca a vuestra mesa y deposita frente a cada uno de vosotros el almuerzo que habéis pedido con su correspondiente bebida.
Luego de que el droide se marcha pero antes de que podáis empezar a comer, notáis como la zeltron levanta la mirada de su plato y revisa sutilmente con la vista lo que habéis pedido. Sin embargo, antes de volver a centrarse en su almuerzo, os dais cuenta que mira fugazmente a Dacen con ¿desilusión? No estáis seguros pero diríais que la zeltron ha encontrado algo decepcionante que su “pretendiente” pidiera el plato más común y corriente del menú…