Partida Rol por web

Star Wars - Un Nuevo Orden

Capítulo I - La Orden Gris

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02/06/2018, 14:01
Glein Saaris

Glein la interrumpe un instante. Parece percibir la rabia en las palabras de Kai, y trata de calmarla. 

- Cariño, los chicos no dicen nada tan disparatado - susurra en una voz suave, mientras le pone la mano en el hombro.- Solo tratan de ser prudentes, es lo que les hemos ense... 

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02/06/2018, 14:04
Kai Saaris

Kai le aparta de un manotazo. Tiene la mandíbula crispada en pura tensión, los puños apretados. Da un paso hacia delante, hacia vosotros, y notáis inmediatamente una sensación de tensión. Casi de peligro. Los pelos se os ponen de punta, y sentís un temor profundo ante vuestra madre. Ante su ira.

- Y da igual lo que se os dice, continuáis insistiendo sin hacer caso. No sé si sois unos niños, pero si que sois mis aprendices. Y los aprendices deben obedecer a sus maestros. Y en cambio... Vosotros.

Avanza aún más. Se planta delante de Syraan, que por primera vez en su vida, siente miedo de su madre.

- Sois unos arrogantes. Presuntuosos arrogantes con más fe en sueños y susurros que en lo que vuestra maestra os dice... ¡Después de lo que ocurrió! ¡Solo os pedí una cosa, UNA! - señala a Syraan, poniéndole el dedo en el pecho - Os advertí de los peligros de ese lugar, y tú, en tu certeza y tu sabiduría, decidiste que la mejor idea del mundo era bajar esas escaleras. ¿Quieres que te cuente más cosas? Ese lugar te desbordó. Te transformó. Te inundó de lo que rezuma, que es corrupción, ira, odio. Trataste de asesinarme, y hubieras matado a todos los que estábamos en casa. Estabas poseída, dominada... Y cuando por fin te recuperas, cuando por fin parece que vuelves a ser tú, ¿tu primera idea es volver allí dentro? - hunde el dedo en su pecho-. Niñata arrogante y estúpida. Tu hermano casi muere por salvarte. Yo... Yo misma casi no puedo sacaros de allí dentro... Yo, yo...

Se aparta. La tensión desaparece de pronto de su cuerpo. Da varios pasos atrás. Jadea incluso. 

- Lo siento... Lo siento de veras... No es momento de discutir estas cosas, no... Quienes vienen no son enemigos. Hace horas activaron un pequeño comunicador que hacia veinte años que nadie activaba, es una señal de que son aliados. Alguien cercano. No son hombres de gris ni enemigos... Yo... Lo siento. Cuando esto termine, hablaremos de todo a fondo. De verdad. Pero confiad, por una vez...

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02/06/2018, 14:15
Glein Saaris

Observa toda la escena en tensión. Como si en parte, al menos, supiera lo que está pasando. Y no separa la mano derecha de su blaster. Cuando Kai respira por fin, le da un abrazo leve, aunque tiene el ceño fruncido desde que esta mencionó el comunicador. Parece apesadumbrado.

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04/06/2018, 11:31
Syraan Saaris

Syraan bajó la cabeza ante el recuerdo de lo que ocurrió en el templo, aun sentía vergüenza por haber caído presa de lo que fuera aquello. Pero a la vez algo ser removía en ella y quería saber qué era aquello, qué pasó exactamente. Pero sabía que no era el momento de reproches y quejas. Si su hermano tenía razón debía estar atenta y preparada para la posible lucha que se avecinaba, aunque esperaba que no fuera así. Porque según su madre por fin les explicaría algo y aunque no lo había dicho quizás fuera el momento de salir de allí de conocer otro lugares. Lo que si iba a pasar por primera vez en muchos años, para bien o para mal, es que iba a conocer a alguien nuevo y tenía que reprimir una sonrisa a ese respecto.

Acarició el hombro de su padre en señal de apoyo y se acercó a su hermano, le sonrió un momento y señaló a su mano sobre el blaster para que viera en que confiaba en lo que decía. No dijo en nada en voz alta porque su madre se estaba calmando y no quería volver otra vez a reproches que no resolverían nada.

-Al menos, ¿podemos saber quiénes son nuestros invitados? -Esperaba que no fuera una pregunta peliaguda, pero relacionado con el pasado de su madre creía que todas lo eran.

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04/06/2018, 16:09
Nihal Saaris

Cuando Kai comienza a hablar, Nihal estuvo a punto de interrumpirla, pero una súbita intuición hizo que guardara silencio. Y estuvo en lo cierto. Con una extraña furia creciente, su madre cargó contra ellos, recriminándoles toda clase de cosas. En algunas tenía algo de razón, pero en otras casi parecía que su rabia nublaba incluso su juicio. Y cuando apartó a Glein de un manotazo, Nihal sintió miedo.

Fue un miedo extraño, frío, nacido de recuerdos borrosos en su mente. Nacido de la figura de su madre envuelta en luz azulada emergiendo entre las brumas del pasado. Hermosa, pero terrible, como una diosa envuelta en un halo de poder. Y por un momento, Nihal temió que ese poder se volviera contra ellos. Pero sólo duró un instante, y pronto Kai volvió a ser la de siempre.

Lentamente, con cuidado, el chico avanzó hacia ella y la agarró de la mano. Sin saber muy bien cómo hacerlo, trató de proyectar hacia ella sentimientos de calma y equilibrio. De ahuyentar al espectro de la ira. Y de recordarle que, a pesar de todo, ellos seguían siendo sus hijos.

-No pasa nada, madre… Recordamos todo lo que nos has dicho… Y también te hacemos caso. –Nihal comenzó a hablar en tono conciliador. Su voz, tranquila a pesar de lo que había pasado, parecía tener un cierto toque anestésico. -Y no pensamos en emboscar a todos los que lleguen… sólo queremos tener cuidado. No vamos a disparar a alguien que no nos ha hecho nada. No somos asesinos, madre.

-Tal vez… tal vez mencionar demasiado ese templo haga que todos nos pongamos más nerviosos. –A pesar de que había dicho “todos”, Nihal era consciente de que, de algún modo, él mismo parecía inmune a la influencia oscura del templo. Lo que no era capaz de saber era el motivo de esa resistencia. -Deberíamos dejarlo a un lado por el momento. Pero confía también en nosotros. No puedo estar seguro de que lo que haya visto sea real… pero de nada nos dañará estar alerta, ¿no? Alerta… y todos juntos.

Sin llegar a soltar la mano de Kai, Nihal sonrió ligeramente en dirección a su padre, tratando también de aliviar su propia tensión. Era obvio que la reacción de su madre también había sido una mala sorpresa para él.

Asintió levemente al gesto de su hermana. A pesar de que iba a permitirse dudar acerca de su sueño, el conflicto podría ser una verdad, y no prepararse para él sería una inconsciencia. Si fuera necesario, estarían listos para pelear por sus vidas.

Notas de juego

He puesto "madre" porque no sé si es más adecuado eso o "mamá". ¿Que opináis los demás?

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05/06/2018, 21:51
Director

Iodarka-3 no es una misión normal, sabes que no lo es. Tu madre apenas te dio explicaciones, pero insistió una y otra vez en la importancia de convencer a esa mujer llamada Kai Saaris de que volviese. Nunca antes habías oído hablar de ella, pero la forma en que tu madre habla de ella te sugiere que ella tampoco es una mujer normal.

Hace horas te pusiste en contacto con ella usando un comunicador que tu madre te había entregado. Tenías instrucciones muy precisas de cuando usarlo. Al activarlo, por un momento temiste que nadie contestaría, pero pasados unos minutos obtuviste como respuesta unas coordenadas dentro del planeta. Un punto de encuentro. Hacía allí es donde os dirigís.

Estás terminando de prepararte en el pequeño camarote en el que Lev, M1 y tu os habéis alojado en la Rayo Azul. La puerta está cerrada. Lev y M1 están allí contigo. Pronto estaréis en tierra. Muy pronto estarás cara a cara con Kai Saaaris. Muy pronto tendrás respuestas.

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05/06/2018, 21:54
Director

Al fin vais a tocar tierra. Tras varios días encerrado en aquella nave, teniendo que aguantar los pitidos de ese droide día y noche, al fin vas a poder respirar aire limpio y tener un cielo sobre tu cabeza. No entiendes muy bien que hacéis en esa roca perdida en el borde exterior, pero al menos es un lugar donde el Nuevo Orden no ha llegado. Nicoda, el capitán de la Rayo Azul, hizo honor a su fama y consiguió que pasaseis desapercibidos durante todo el trayecto. Si todo va bien, podréis hacer lo que sea que vais a hacer allí y volver a Idarian, sin cruzaros en vuestro camino a ninguna de las patrullas del almirante Thrawn.

Estás terminando de prepararte en el pequeño camarote en el que Kara, M1 y tu os habéis alojado en la Rayo Azul. La puerta está cerrada. Kara y M1 están allí contigo. Pronto estaréis en tierra.

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05/06/2018, 21:55
Director

 

Un ligero bamboleo anunció que la nave había entrado en la atmósfera del planeta. El viaje hasta Iodarka había sido largo, pero al fin se había acabado. La Rayo Azul había partido de Nar Shaddaa días atrás. Tomando una ruta larga, siguiendo el borde exterior, evitando detenerse en puertos muy transitados, donde alguien pudiese reconoceros, o lugares donde pudieseis encontraros con alguna patrulla del Nuevo Orden.

La pequeña tripulación de la nave, formada por el capitán, su segunda al mando y un droide de protocolo, se había mantenido distante, ocupada en las tareas de a bordo, y no os había dado demasiada conversación. Teníais un camarote para los tres, la primera puerta a la derecha tras abandonar la cabina. Suficientemente cómodo, pero sin lujos ni demasiado espacio.

En ese momento el camarote tenía la puerta cerrada. Nicoda, KP y Red se encontraban en la camina, guiando la nave hacia las coordenadas que algunas horas antes les había dado Kara. Dentro os preparabais para el aterrizaje en Iodarka 3. Apenas podían faltar unos minutos para llegar.

Notas de juego

Estáis juntos en el camarote. Muy pronto aterrizareis.

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05/06/2018, 21:55
Director

 

Al fin estáis en Iodarka. El lugar del que, si todo va bien, podrías salir con tus deudas saldadas, y la oportunidad de acabar con Blackblood de una vez. Estás seguro de que hay algo extraño en todo esto, Bowwa se ha mostrado demasiado generoso con su oferta, pero también crees que difícilmente se presentará otra oportunidad similar. Red y KP no saben nada sobre este negocio. No estás muy seguro de que estuviesen del todo de acuerdo, especialmente Red.

Sentado en la cabina de la Rayo Azul, ves ante ti un mar de nubes ocultando la tierra que hay debajo. Solo algunas formaciones montañosas parecen asomar por encima de la frondosa capa de nubes. A tu lado se encuentra Red, y en el asiento de detrás KP. Diriges la nave hacia las coordenadas que antes te ha dado Kara. Parecen llevar a un claro en un bosque, o algo así. Esperas que sea cierto, no te gustaría estrellar la nave en medio de un bosque.

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05/06/2018, 21:56
Director

 

Nunca habías estado en aquel lugar. En realidad nunca has estado en muchos lugares, en la mayoría de lugares. No importa, eso no evita que sientas cierto entusiasmo cada vez que llegas a un lugar nuevo, pese a que la mayoría lo sean. Es una de tus partes favoritas de trabajar en la Rayo Azul, os movéis mucho por el borde exterior, a través de muchos lugares a los que no mucha gente va. En aquel viaje en concreto habéis pasado por un puñado de lugares donde no crees que reciban siquiera naves de transporte todos los días. Es emocionante.

Aquel trabajo debería ser sencillo. Traer a la chica y su guardaespaldas, y llevarlos de vuelta. La mitad estaba ya hecha, y había ido perfectamente bien. Un dinero fácil nunca venía mal, en especial si no tenían que hacer daño a nadie, ni perjudicar a nadie en el proceso. Solo lamentas que te haya impedido seguir investigando acerca del paradero de esa persona que algunas personas recuerdan haber visto y que confunden contigo.

Sentada en la cabina de la Rayo Azul, ves ante ti un mar de nubes ocultando la tierra que hay debajo. Solo algunas formaciones montañosas parecen asomar por encima de la frondosa capa de nubes. A tu lado se encuentra Nico, en el asiento del piloto, y en el asiento de detrás KP. Nico dirige la nave hacia las coordenadas que antes os ha dado Kara. Parecen llevar a un claro en un bosque, o algo así. Esperas que sea cierto, no te gustaría que la nave se estrellase en medio de un bosque.

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05/06/2018, 21:57
Director

 

Los recuerdos no han cesado. Cada vez son más claros. Cada vez más largos. Al principio intuías un paisaje. Ahora ves una pista de aterrizaje junto a una cascada, rodeada de bosque, bajo un cielo de tres lunas. Al principio veías algo descendiendo. Ahora ves que es una nave blanca, reluciente, que se posa con elegancia en el centro de la pista. La compuerta se abre y una trampilla se extiende. Hay alguien, pero no llegas a verlo. El recuerdo se acaba. Un ligero bamboleo te devuelve a la realidad. Estás en la cabina de la Rayo Azul, sentado en la segunda linea de asientos. Delante de ti están sentados Nicoda y Red, dirigiendo la nave hacia el lugar donde más tarde aterrizareis. Ellos no saben nada de lo que te está ocurriendo. No sabes si sería prudente decírselo. Aun no ves el suelo de Iodarka, un inmenso océano de nubes lo oculta. Por un momento piensas que podría ser el lugar que recuerdas, pero el cielo es diferente.

Aquel trabajo debería ser sencillo. Traer a la chica y su guardaespaldas, y llevarlos de vuelta. La mitad estaba ya hecha. Un dinero fácil que sabes que le viene muy bien al capitán, para afrontar parte de sus deudas. Es una lástima que te haya alejado tanto de Nar Shaddaa. Allí habías conseguido una pista sobre donde buscar información sobre lo que te ocurre. Esperas que ese rastro siga allí una vez que vuelvas.

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05/06/2018, 21:57
Director

 

El viaje hasta Iodarka había sido largo, pero al fin se había acabado. La Rayo Azul había partido de Nar Shaddaa días atrás. Tomando una ruta larga, siguiendo el borde exterior, evitando detenerse en puertos muy transitados, donde alguien pudiese reconoceros, o lugares donde pudieseis encontraros con alguna patrulla del Nuevo Orden.

Habíais alojado a vuestros pasajeros en uno de los camarotes, La primera puerta a la derecha tras abandonar la cabina. Al otro lado, en el mismo pasillo, estaban los camarotes del capitán y de Red. La ruta elegida no fue sencilla, os mantuvo ocupados casi todo el tiempo. No quedó demasiado para charlar con vuestros pasajeros, aunque ellos tampoco parecieron echarlo en falta.

Os encontráis en la cabina, guiando la nave hacia las coordenadas que algunas horas antes les había dado Kara. Dentro os preparabais para el aterrizaje en Iodarka 3. Apenas podían faltar unos minutos para llegar.

Notas de juego

Estáis juntos en la cabina. Muy pronto aterrizareis.

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05/06/2018, 23:27
Kai Saaris

Vuestra madre no dice nada más durante un momento, excepto para apartar la mano de Nihal con un gesto rápido, casi violento. Tarda en hablar, pero al hacerlo, su voz vuelve a sonar tensa.

- Hay ciertas cosas que quizás no seas consciente de ellas, Nihal... - trata de explicarle-. Pero eso que acabas de... Intentar hacer es terriblemente peligroso. E intrusivo. No juegues con los sentimientos ajenos. Cuídate mucho de a quien... Influyes

Luego esboza un atisbo de sonrisa.

- Sé que no intentáis nada malo. Lo sé. Y sé que teneros aislados aquí no ayuda... Pero nunca os he enseñado a usar ciegamente la fuerza para todo. La sobrevalorais y la sobreutilizais. La fuerza... Debéis tener cuidado con ella. Pero seguiremos en otro momento.

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05/06/2018, 23:35
Director

Podéis observar por fin la nave. Un carguero, relativamente nuevo, que ha pasado por varias modificaciones, cruza entre las nubes y los inicios de la lluvia y ya toma tierra en el claro cerca de donde os encontráis. 

Desciende con parsimonia. Los kiragin y los draglegk se alejan de entre los árboles ante el zumbido de la nave. Aún no ha aterrizado, pero no queda nada. Y sea quien sea quien pilote, ya os habrá visto, pero la torreta ventral de la nave no os apunta en su descenso. Glein apoya la mano sobre su blaster, y Kai cruza los brazos a la espalda, mientras respira para terminar de calmarse.

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06/06/2018, 02:22
Red

Red miraba el mar de nubes desde su puesto de copiloto en la cabina, buscando que se despejara lo suficiente como para ver dónde se dirigían...o aunque solo sea algo más que nubes. A pesar de que los sistemas de la nave advertían de la presencia de elevaciones montañosas, estas parecían querer esconderse de su vista.

A su lado Nico parecía tranquilo, como si la cosa no fuera con él, aunque realmente aquel era el trabajo fácil, pues tenían las coordenadas. Lo difícil había sido calcular la ruta hiperespacial, un salto complicado que había llevado al límite a Red...que no a Nico. La mujer odiaba que pudiera mantener la calma en aquellos momentos o por lo menos que no se le notara. Aunque realmente lo que sentía era envidia de su "socio" de nervios de acero y lengua de plata.

A su espalda KP permanecía callado y sentado. Si todo acababa como debía seguiría mejorando el rendimiento y las características de aquel droide. Pero de momento debía esperar.

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06/06/2018, 09:44
Syraan Saaris

La joven se extrañó ante el comentario de su madre, pero lo atribuyó que a pesar de tratar de mostrar calma estaba mucho más nerviosa que todos los allí presentes. Tenía que enfrentar un pasado que les había ocultado hasta sus propios hijos. Una parte de ella la compadecía, pero otra se alegraba porque por fin sabría algo más.

Syraan se acercó a su hermano y le cogió la mano con suavidad para apoyarle, mientras que la otra, al igual que la de su padre seguía descansando en el blaster. Según se iba a acercando la nave su nerviosismo crecía, ese gesto de calma para su hermano también lo era para ella misma.

-¿Entonces van a bajar de ahí unos seres verdes pequeños de gran cabeza, o tipos altos de orejas puntiagudas y gesto ceñudo? -Bromeó para relajarse y esperando que su madre o su padre respondieran a su anterior pregunta.

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06/06/2018, 13:43
Nicoda "Nico" Ecto

Estiro los brazos y emito un pequeño ruido gutural al desperezarme, como si hubiera estado viendo mi programa favorito en vez de cruzando media galaxia, empujo el asiento del piloto hasta que este protesta y miro hacia mi tripulación.

Vaya Red parece molesta de nuevo. Disculpa Red, ¿podrías escanear este sector a ver si encuentras algo contra lo que no deberíamos chocar? Ya sabes, para dar buena imagen a nuestros clientes, como arboles, edificios ¿ruinas?

KP parecía estar en modo ahorro de energía por lo que opte por no molestarlo, al fin y al cabo es un droide asesino, quien en su sano juicio molestaría a un droide asesino... Una leve sonrisa apareció en mi rostro mientras alargaba mi mano para posarla sobre el hombro de KP, cuando el asiento cedió y evite por los pelos caerme de bruces al suelo, me recompuse con un gesto "señorial" y volví a sentarme en el asiento del piloto. 

Y revisa este asiento cuando tengas tiempo, creo que esta un poco suelto. 

Termine la frase con un poco de sorna, seguramente me ganaría alguna reprimenda, pero las peleas en la nave me hacían sentir como en casa y con sonrisa de oreja a oreja volví a posar mis manos sobre los mandos de la rayo azul y acelerar hasta el lugar de encuentro.

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06/06/2018, 19:14
Red

-Mmmmmmmmmm- fue la escueta respuesta a la orden de que escaneara todo. De hecho lo hacía cada poco, controlando que no se encontraran con algo inesperado. Sin siquiera mirarle, Red siguió interactuando con los scaneres y controles de la nave.

Pero lo que terminó de molestarle fue cuando Nico casi se va al suelo por estirarse en el sillón y luego pedirle que lo revisara. Red lenvantó lentamente la cabeza y le dedicó una mirada fría a su socio. Sus ojos emitieron un brillo característico en la mujer, mientras su rostro parecía una máscara marmorea tallada en hielo.

-Lo que voy a hacer es reprogramar a KP para que te arranque la cara y te la ponga en el culo.

El contraste entre su aspecto corporal, con su cuerpo escultural, su pelo rubio platino, casi blanco, su tez blanquecina y sus ojos verdes que le hacían parecerse a una tierna adolescente bella y frágil, con su caracter hosco, frío y calculador, que con una mirada bastaba para fulminarte, era tan abismal como perturbador, que descolocaba al más estoico...a todos excepto a Nico, él parecía vivir en una balsa de aceite.

La mujer volvió a girarse sin esperar respuesta. Sabía como era Nico y realmente estaba acostumbrada a esos chascarrillos sacados de un caracter completamente opuesto al suyo, quizás por eso funcionaba su relación y su negocio.

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06/06/2018, 19:13
Kara d’Asdria

Allí estaba de nuevo aquella sensación en el estómago de Kara, un nudo que se le ponía cuando salía lejos de su planeta natal. Durante toda su vida había disfrutado de las comodidades y seguridad de su planeta, todo lo contrario de lo que encontraba en aquella desconocida nave.

Las comodidades eran claramente austeras, en una nave de mercenarios no había espacio para grandes comodidades pero al menos su querido androide le hacía las cosas más fáciles. Su seguridad estaba a cargo de Lev, quien llevaba mucho tiempo protegiendo a la familia, sin duda era fuerte y con destreza pero no dejaba de ser un único hombre.

La misión tenía un aura de misterio, misterio que rodeaba a aquella mujer que debía encontrar. Su madre no había entrado en detalles y Kara sentía curiosidad por lo que iba a encontrar.

Parece que hemos entrado en órbita pronto aterrizaremos, M1 quedate cerca no queremos otro incidente con ningún bantha dijo con una graciosa risita.

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06/06/2018, 23:48
Nihal Saaris

Mientras la nave comenzaba la parte final de su aproximación, la propia jungla parecía retirarse, dejando paso al coloso de metal y plástico que descendía sobre la superficie. Al igual que su hermana, Nihal observaba la nave mientras meditaba sobre el significado de su llegada. Fundamentalmente, cambios, pero no sólo eso. Noticias del exterior. Y es que, aunque a menudo lo disimulaba, el joven era consciente de que él había tenido una vez un pasado muy diferente a su vida actual... y una familia, aunque no fuera capaz de recordarlos. Una vida de la que no sabía nada, y que bien podría revelarse gracias a esa nave. Cuando Syraan acercó su mano a la suya, la agarró con fuerza, sintiendo el calor y la vida de ella que palpitaban bajo la piel. Se sentía mejor así, rodeado de su familia. Pero tampoco podía obviar la forma en la que Glein y Syraan acariciaban la empuñadura de sus bláster. Él no los imitó. Tenía el presentimiento de que el conflicto con el hombre de gris aún no iba a llegar... y la sospecha de que, cuando llegara, un bláster no sería suficiente. -Serán todos androides cabeza de lata, estoy seguro. -Bromeó, siguiendo el juego a su hermana para tratar de alejar esos pensamientos de su cabeza.