Partida Rol por web

Zona de análisis - 3 Meses atrás (9:00)

Cada semana un análisis, como mucho cada dos semanas. Todos los saltadores debían de pasar por un chequeo completo, aunque aun estuviesen en entrenamiento. La sala era amplia, rectangular con sofás de cuero negro, que, contrarrestaban la luminosidad del blanco de las paredes y los rayos de sol provenientes de la pared del fondo, donde una de las ventanas doble falsa hacía su función. Haceros creer que no estabais bajo tierra. Una mesa de cristal templado y metal azulado reposaba en cada esquina, y sobre su centro un jarrón con orquídeas silvestres, dejando estas su aroma en la sala.   

Aquello mas que una sala de espera antes de adentraros por el pasillo de la derecha donde os atenderían, parecía casi como un recibidor de una clínica de estética. Una cosa era cierta, en Titan no habían reprimido en gastos, no solo de este estilo, sin duda las viviendas aunque pequeñas algunas, eran completas y bonitas. Por no hablar del material de entrenamiento o las zonas comunes. El mero hecho de pertenecer a ese mundo, significaba aumentar la calidad de vida en todas sus vertientes. 

Zona de análisis - 3 Meses atrás (9:00)

Llegue temprano a mi analisis, mas que nada porque habia pedido un cambio de cita debido a motivos personales, lo minimo que podia hacer es no retrasarlos mas, por si habia creado algun tipo de conflicto en su agenda. Me acerque a la puerta, vestido para luego acercarme al area de entrenamiento. Una camiseta de deporte ceñida, de manga corta y unos pantalones algo mas sueltos y largos, junto con unas zapatillas rojas y negras, de las que se ceñian al pie. Las habituales para los que hacian ejercicio de contacto fisico. La puerta se abrio sin problemas y entre en la sala, ya la conocia de otras veces y sin duda era un lugar tranquilo donde esperar a que te llamaran. La luz que aparecia era buena, quizas algo demasiada para la hora pero no molestaba y el olor de las flores sin duda le daba un buen toque.

Me acerque al sofa que dominaba la estancia, el que me permitia ver tanto la salida como la entrada de la sala, sin necesidad de hacer muchos movimientos de cuello. Suponia que era por defecto profesional, pero lo preferia asi. Me apoye contra el respaldo habianedome colocado en el centro del mismo sofa y extendi los brazos por encima de los demas cojines. Ahora solo faltaba esperar a que llamaran...

Zona de análisis - 3 Meses atrás (9:00)

Odiaba los putos análisis... putos análisis... adoraba el resto de cosas, a su manera, pero lo hacía. Pero los putos análisis... putos análisis, putos análisis, putos análisis... farfullaba durante el camino, como si estuviera invocando a su madre para que apareciera echándole la bronca, y es que los añoraba, pero se había prometido no ponerse sentimental con eso. Volviendo al tema que le ocupaba: odiaba los putos análisis, eran una pérdida de tiempo, por supuesto era su opinión, la del resto del complejo, salvo contadas excepciones, los consideraban imprescindibles.

Suspiró cuando entró en la sala de espera, por llamarla de alguna manera, desde que había llegado cada cosa le parecía más cara e innecesaria que la anterior en lo respectivo a la decoración, pero también había decidido no quejarse por ello, era más sensato aprovecharlo, para que no la consideraran un bicho raro, y porque, en el fondo, molaban. Y en la superficie también.

Sólo había una cosa que odiara más que los análisis, y era el hecho de que, en las malditas consultas médicas se sintiera como en casa. La del doctor Odden no se parecía en nada a esta, aunque al final siempre era lo mismo... o no...

En la del doctor Odden no solía haber tíos buenos como ese sentados esperando. Mentiría si dijera que no se había fijado alguna vez en él durante los entrenamientos, un par de veces, tres como mucho un poco mayor es lo que se decía siempre.

El gesto enfurruñado se relajó mientras se alisaba la camiseta que llevaba. Muy similar a la de él en cuanto a la funcionalidad, aunque esta era de color negro y manga larga, de su talla, ni muy ajustada ni muy suelta. También los pantalones eran parecidos, nuevamente cambiando el tono y el hecho de que los de Hilv fueran más pegados. El calzado tampoco defiría en exceso, ella lucía unas zapatillas de deporte negras con los motivos de la marca en color celeste, un poco chillón.

Tendría que preguntar como hacen para que parezca que hay sol y todo ese rollo, le parecía increíble, casi más que los saltos.

Ehm... ¿ehm? ¿en serio? Quiero decir... deberías dejar de mirarlo, la regla de los tres segundos, ya sabes Buenos días es que es grande, se necesita tiempo para verlo entero, obviamente.

Se apresuró a sentarse, no demasiado lejos, ni demasiado cerca, no quiera parecer una idiota adolescente porque no lo era, aunque allí abajo había demasiado pocos de su edad. De manera inconsciente, echó mano a su bolsillo, buscando su amado reproductor de música, mientras que con la otra mano buscó los auriculares, poniéndoselos alrededor del cuello, dispuesta a darle al play. ¿Has pensado que por eso a lo mejor no te habla mucha gente?

¿Llevas mucho esperando?

También odiaba que la voz de su propia cabeza tuviera razón. 

Mi mente no estaba ni siquiera en la sala, aunque mis ojos no perdieran de vista el lugar, era capaz de desconectar para pensar en mis proias cosas, como un regalo que debia hacer... bueno, no era un regalo era mas una sorpresa pero venia a ser lo mismo. Seguramente le pillaria por sorpresa y no habia nada mejor que ver como su sonrisa se ensanchaba. Con mi mente vagando entre las diferentes opciones, escuche como la puerta se abria.

Involuntariamente me puse algo menos comodo, puesto que la postura era demasiado informal y mientras estuviera solo no habia problema, pero aqui habia mas de uno con un problema con las formas. Mi cuello se giro tranquilamente, mientras mis ojos azules se fijaban en la joven chica que cruzaba la puerta. Sus vestimentas era muy similares a las mias, pequeños detalles probablemente mas por gusto que otra cosa, aunque sin duda parecian tener su funcionalidad. Probablemente me la quede mirando durante mas tiempo del que se consideraba "educado", pero me importaba poco... habia algo que me sonaba, aunque no sabia el que. Enseguida cai, su rostro, estaba seguro de haberla visto con anterioridad en las zonas de entrenamiento militar.

Mi sonrisa asomo y asenti levemente con la cabeza, cuando de pronto ella parecio balbucear algo. Parpadee un par de veces hasta que asomo el saludo tipico a estas horas. - Buenos dias. - Estaba dispuesto a hablar algo mas pero vi como sacaba uno de esos reproductores de musica y los auriculares por lo que aun con la sonrisa, comence a ponerme como antes, para asi volver al mundo de las opciones de regalos, en un lugar con demasiadas cosas para elegir. No entendia como lo hacia tan rapido. Mas la joven me sorprendio, con su siguiente pregunta. Volvi a mirarla con la misma sonrisa, calida y agradable. - No que va, apenas un par de minutos. - Me acomode mejor, bajando mis brazos de los cojines del sofa mientras la miraba. Si tenia que calcular por las veces que me la habia encontrado, debia llevar aqui maximo dos meses, probablemente algo mas de uno. - Perdona la indiscreccion pero eres nueva ¿verdad? - Esperaria a su afirmacion, algo que era obvio a todas luces y entonces alargaria mi mano mientras me levantaba. - Marko Deus, encantado.

Zona de análisis - 3 Meses atrás (9:00)

¿Qué?¿Nueva? ¡¡Llevo aquí tres meses y nos hemos cruzado unas cuantas veces!! ¡Chúpate esa Lucy Frey, te dije que algún día conseguiría superpoderes!: Invisibilidad ante los tíos buenos… puede que ya lo tuviera latente.

La cara de la chica apenas varió, no sonreía con la misma facilidad de la que él parecía hacer gala, tenía ganas de contestarle en plan… joder, tío, tengo tres putas medallas olímpicas y llevo un arco enorme, pero claro, entonces el diría algo así como, y yo he estado en varios universos, y entonces, yo le diría… he nacido en Wrangell, y ganaría la conversación, ¡porqué nada es comparable a haber nacido allí! Se quedó mirando la mano que le tendía, y alargó la suya, la derecha, la que todavía era la de una chica de dieciocho al tacto Hilv Larter joder, se veía un poco ridícula en comparación, y el brazo era como la pierna de la chica ja, como tú pierna cuando te la escayolaron más bien cesó pronto el contacto, no era de las que se sintiera muy cómoda en ese aspecto.

Ah, vale, ¿y no me han llamado verdad?

Esperaba que si, y sino estaba allí, no era culpa de ella, y no podrían hacerle los análisis… puso cara de resignación, fue como si por un momento, se ausentara pensando en sus cosas, pero enseguida recuperó un gesto más amable. Pero justo a continuación, se levantó y se dirigió a la ventana…

Esto es la hostia… en serio sonrió por primera vez todo aquí es la hostia en realidad ya está, tenía que decirlo, si, le flipaba toda la tecnología que había, y si, puede que la consideraran una pueblerina y tú acento no ayuda cariño pero ¿qué más daba? ¡Iba a ir a otros universos! ¡Una chica de Wrangell!  No terminaba de asimilarlo.

Y no puedes contarlo…

Maldita voz, siempre le gustaba aguar la fiesta. 

La chica debia tener un serio problema con lo de mostrarse sonriente, la gente solia al menos sonreir cuando yo lo hacia, pero aqui estaba ella igual que si un arbol se le hubiera puesto en medio del camino. Si era militar, de eso no habia duda por la zona de entrenamiento, pero no parecia tener la edad suficiente como para haber pasado por la suficiente mierda como para no recordar como ser amable. Bueno, aqui habia de todo y la mayoria ni llevaban una sonrisa, no sabian como llevarla en la mayoria de las ocasiones. Al menos se presento, lo justo pero lo hizo e incluso apreto la mano durante el tiempo justo. Habia usado su mano no dominante, algo que era obvio porque la habia visto usando un arco y la mano que me apreto era suave y tierna, no pegaba con lo que habia visto y oido de ella. Asenti sin variar mi sonrisa, volviendo a sentarme algo mas informal, al menos ya conocia su nombre... no era mucho, pero al menos no tenia que aparentar como si me importara mucho lo que la gente pensara de mi.

Sonrei ante su repeticion de la pregunta, por las formas casi parecia que queria librarse de los analisis. Cuando puso esa cara de resignacion quedo claro que no le molaban los analisis, aunque claro ¿A quien si? - No, no te han llamado tranquila... y esta claro que odias los analisis. Creo que hay un club referente a eso... - Sonrei algo mas, denotando que era una broma, por la forma de hacerlo.

Nada mas acercarse a la ventana, solto lo que todos los novatos soltaban tarde o temprano, al menos, los mas jovenes, los mas viejos solian gruñir levemente mientras miraban la ventana, como si fuera algo demasiado raro para dedicarle un momento de atencion. Rei levemente, una risa con una spocas carcajadas de esas que habitualmente se contagian, y aunque intente reprimirlas no pude. La sinceridad en su voz era mas que palpable. - Si, si que lo es... aunque por lo que he visto en algun entrenamiento, tu punteria con el arco lo es tambien. - Si hacia alguna mirada, levantaria las manos declarandome culpable. - Somos una comunidad cerrada, cuando alguien destaca como tu lo haces con un arma no convencional... la gente habla. - Hice un leve movimiento de hombros como dando a entender que era de cajon. - aunque debo admitir que te he visto disparar y entiendo los rumores...

¿Un club antianálisis? Oh, era una broma, una pena, porque por un momento, se vio por los pasillos, ondeando alguna especie de bandera y seguida por una turba enardecida gritando enérgicos ¡!No a los análisis!! No es una mala idea… tendría que darle un par de vueltas.

No supo como interpretar su risa, ¿se estaba riendo de ella? Lógico, seguro que le había parecido una pringada con lo que había dicho. Por supuesto, iba a decirle que, por mucho que su risa no estuviera nada mal, no tenía derecho a reírse de ella, ya estaba levantando el dedo amenazador… ¿Qué? ¿Ahora resulta que si que se había fijado en ella? O sea, en lo que era capaz de hacer estaría feo echarle la bronca después de que te elogiara Si… bueno… la ventana era ahora el objeto prioritario de su atención ¿en serio te estás poniendo roja? Es por el sol que entra, está todo bastante logrado, ya deberías saberlo se me da bastante bien, tengo buena puntería la modestia en este caso estaba fuera de lugar, si estaba en Titán era por esa capacidad.

Volvió a sentarse en el mismo sillón en el que había estado hace unos instantes, bueno, más bien se dejó caer en él de una manera poco educada ¿Y qué dice la gente? Le preguntó con una media sonrisa, irónica aparte de que soy la friki del arco se había acostumbrado a eso en el ejército, había aprendido a ignorarlo y el lo había expresado ya de una manera mucho más educada.

La forma de repetir lo del club tuvo su gracia, pero ya cuando comento que no era mala idea, casi me di cuenta de que podia verse quizas asi misma, abanderando uno. Lo que le faltaba a Titan, una revolucionaria, por su bien esperaba que no le diera por hacer semejante locura. Negue lentamente mientras seguia sonriendo... - No te lo recomendaria la verdad, por gracioso que pudiera llegar a ser. - Los jefazos tenian muchas cosas, pero el humor no solia entrar dentro de esa larga lista... y si habia entrado aqui por meritos, mas le valia no fastidiarla.

Con la mano a medio levantar, se detuvo cuando la elogie, mientras el tono de interrogacion denotaba mucha sorpresa. Vale, ¿no estaba acostumbrada a que la elogiasen? Lo cual sin duda no tenia sentido, visto lo que podia hacer con un arco. Tras eso llego la modestia, una infundada e innecesaria. Mi risa se habia detenido, pero mi sonrisa seguia alli, mientras ella seguia de espaldas mirando por la falsa ventana. - No seas modesta, estas aqui dentro... asi que es algo mas que simplemente buena punteria.

Por fin se dio la vuelta mientras yo por contra ya no me apoyaba contra el respaldo, sino que habia adelantado mi cuerpo, apoyando mis codos sobre mis rodillas mientras seguia mirandola. Su forma de responder, de preguntar por lo que decian resultaba extraña... casi como si esperase un insulto o similar. - ¿Friki del arco? - Ahora si me rei, pero no de ella, sino con ella. Era una risa calida y amigable. Negue con la cabeza antes de hacerlo de palabra. - No, no. ¿En serio? ¿Friki del arco? No, no es asi como te llaman, estan mas por el estilo de Robin Hood u Ojo de Halcon... y no como un insulto, no al menos a los que yo he escuchado. - Sonrei levemente mientras las risas ya habian escapado. - No eres la unica que usa un arma diferente. En mi caso me especializo en el gladio. - No dije nada, pero lo decia todo, no era la unica con gustos diferentes... y eso no lo hacia rara o extraña. Solo diferente, y eso solia ser valioso alli donde yo ya habia estado... y donde ella deberia ir en un futuro.

Vale, soy la puta hostia con el arco reconoció ampliando la sonrisa desde que era una criaja seguía usando palabras propias del sitio donde había pasado casi toda su vida y con los dardos ya ni te cuento ya puestos…

Había que reconocer que el tipo le estaba resultando mucho menos estúpido de lo que había imaginado en su cabeza, y es que era demasiado dada a formarse ideas sobre los demás cuando se aburría. Y que menos que el tipo fuera guapo pero idiota, sería mucho más justo para el resto del mundo.

Por supuesto te vas a callar lo que tú has oído de él, por mucho que estés más que de acuerdo con ciertas opiniones. ¡Eh! Qué tengo un poco de educación…

¿Robin Hood? Parpadeó con extrañeza ese no me suena de mucho, y, admitámoslo, Ojo de Halcón es el pringado de los Vengadores ella siempre había sido una ferviente admiradora del señor Banner siempre he pensado más en misma como un elfo, rollo Legolas si, Legolas era insufrible, guapo pero insufrible, y… espera, espera, ¿le acabas de decir que habías pensado más en ti misma como un elfo? Dios, genial, eres muy lista Hilv, ¿en serio? ¿un elfo? Se acarició el flequillo, de arriba abajo, para luego soltar un resoplido…

Pues de ti dirán que eres el friki del gladio mejor centrarnos en él aunque, siendo sincera, no tengo ni la menor idea de lo que es un gladio la joven parecía más relajada, bueno, a ratos, pero lo cierto era que no había tenido muchas conversaciones que no trataran sobre el entrenamiento o que no fueran con los médicos, y es que echaba de menos la camaradería que había en el equipo con el que se había preparado para las competiciones.   

Cuando lo reconocio y de esa manera, no pude mas que sonreir para mi mismo, sin dejar de mirarla. Habia que admitir tus fortalezas y tambien tus flaquezas, era la unica manera de avanzar y aqui habia mucha gente buena en lo suyo, por decirlo de alguna manera. La falsa modestia podia molestar a los veteranos, casi tanto como fliparse demasiado, pero era mejor dejar claro lo que eras y que luego... bueno, luego limar un poco eso. Aunque por lo que habia visto con el arco dudaba que hubiera muchos que pudieran discutirle que era la hostia con él. - Mucho mejor... y es bueno saberlo, nunca apostar contra Hilv a los dardos. - Me rei de nuevo. La chica tenia caracter, eso estaba bien.

Rechazo el titulo de Robin Hood y de Ojo de Hlacon para verse mas a si misma como Legolas. La mire con mi sonrisa y los ojos ligeramente acusosos por la risa. La verdad es que tenia conocimiento muy basico de la mayoria de ellos, pero era gracioso que se viera como un rubio de larga melena y orejas puntiagudas... aunque habia que admitir que ese tambien tenia buena punteria. - Legolas... bueno, supongo que puedo comentarlo en voz alta en algun momento y ver si pega. - Era una broma por supuesto, no era fan de los chismes, es mas en cuanto habia oido hablar de ella, habia rpeferido ir a verlo por mi mismo y sin duda no habia defraudado.

Me la devolvio directa y mis ojos se abrieron, dandome cuenta de que era la primera vez que se lanzaba desde que habiamos empezado a hablar. La mire enarcando ligeramente la ceja y sin dejar de sonreir. - ¿El friki del gladio? - Lo repeti para ver si sonaba bien y no, realmente no lo hacia, aun asi me encogi de hombros pues me resultaba indiferente un mote u otro, no solia hacer caso de ellos. - Un gladio es una espada, con una longitud entre los 50-70 cm aproximadamente y una hoja recta y ancha de doble filo. - Habia con algunas variaciones mas, pero con esa definicion debia serle suficiente apra entender el concepto basico. - Si quieres mas tarde puedo enseñartelo, por tu vestimentas tienes la pinta de ir a entrenar y yo igual... - Me señale de manera poco ostentosa, como si no le diera tanta importancia a mi cuerpo.

Sin duda apostar contre ella a cualquier juego de puntería sería de no ser muy inteligente, como tampoco lo era ir pregonando por ahí lo buena que era, sino, nadie jugaría con ella.

Si, puedes comentarlo en voz alta dijo mirándolo y alzando ligeramente las cejas y yo puedo fallar la próxima vez que tire y andes por allí cerca, esas cosas pasan sonrió de manera un poco maliciosa encogiéndose de hombros.

Escuchó su explicación sobre el gladio, y no pudo evitar que se escapara una risita cuando le propuso enseñarle el gladio señalándose el cuerpo… mira Lucy, el tío bueno quiere enseñarme su gladio, vale, no tiene esas intenciones, creo, pero hay que reconocer que ha quedado un poco así en plan peli porno mala ¿hay buenas? Joder, pasé demasiado tiempo con Henrik en la villa, todo el rato mal pensando chorradas de esas tuvo que hacer un esfuerzo para volver a ponerse seria.

Por mi vale total, no conocía prácticamente a nadie, y no pasaba nada por perder un poco de tiempo de entreno, en realidad se sentía más en forma que nunca pero tendrá que ser después de los putos análisis sus palabras confirmaron lo mucho que le gustaban.

Oye, ¿Cuánto tiempo llevas aquí? Le preguntó afilando la mirada sobre él ¿Has saltado muchas veces? ¿Cómo es? Impulsiva y curiosa cuando hablaba, y es que había tantas cosas que deseaba saber, tantas cosas que deseaba hacer…pero era lo que había, lo asumió mucho tiempo atrás.   

La mire, sonrei y me rei mas fuerte cuando dijo que esas cosas pasaban. - Vaya, vaya amenazando a los veteranos, con tiros errados a conciencia. Desde luego, a este paso tendras que invitarme a muchas bebidas por cada uno de esos tiros que me de, si es que consigues darme. - Estaba de broma y esta joven sin duda sabia como hacer pasar un buen rato. No tenia claro si ella se daba cuenta, claro esta. - No te preocupes, no dire nada... pero sin duda me reservo del derecho a llamarte asi. - Rei algo mas mientras miraba al suelo, intentando en cierta forma contenerme la risa. Si todos los nuevos eran como ella, sin duda seria una buena remesa.

Su risa, corta pero precisa, cuando me señalaba el cuerpo me dio un ataque de risa incluso a mi. Si, la verdad es que habia sonado un tanto raro... al menos no se habia puesto roja, ni habia hecho aspavientos. La verdad es que me estaba cayendo bien la chica.

Acepto entrenar tras los putos analisis. Si definitivamente le gustaban tan poco como a mi... decidi contarle algun secreto, pero no. Esperaria a que volviera de su primera mision, antes de preguntarle sobre que le parecian los analisis tras esas inspecciones rutinarias. Sin duda seria muy gracioso verle la cara, si se ponia asi por unas agujas. - Si claro, el deber siempre primero... no te recomiendo que faltes, suelen ponerse mas detallistas en sus busquedas. - La mire dejando claro a lo que me referia con detallistas, mientras me reia por lo bajo. Era y no era una broma, pero eso ella no lo sabia.

Entonces hizo la pregunta que todos hacian a los veteranos. Era casi como de cumplido rigor. - Demasiado. - Me rei levemente. - Una decada aproximadamente, mes arriba, mes abajo. - Eso solia dejar a al gente mirandote raro. No habia mucha gente que no estuviera en las altas esferas que llevara tanto tiempo, no habitualmente, aunque habia de todo... pero claro eso era basicamente haciendo referencia a los militares que saltaban. - Tengo bastantes saltos a mis espaldas... y es dificil de describir. ¿Seguro que quieres saberlo? Muchos prefieren esperar a saborearlo sin que nadie les de opiniones, por aqui es casi como perder la virginidad. - La mire y sonrei, sin poder aguantarme. Aunque era bastante cierto.

En ningún momento he amenazado a nadie, sólo he dicho que a veces ocurren accidentes puso su mejor cara de inocencia, que, sinceramente, no era demasiado convincente, quizás por la forma que tenía de mirar era por lo que no colaba y ¿Un momento? ¿Eso había sido una especie de invitación velada para ir tomar algo? Alguna vez, no ahora claro, ufff, debería haberte comprado un par de amigos y traértelos Hilv, con lo que pagan aquí ahora tienes pasta para eso no me refería a que quiera ser Legolas buen cambio de tema sólo había hablado de los elfos porque tienen buena puntería, son ágiles y viven mucho por un instante el rostro de la joven se contrajo de manera casi imperceptible, apareciendo enseguida una sonrisa socarrona bah, ni siquiera me prestas atención… desistió de sus explicaciones, no iba a hacerle caso, ya la había cagado.

No faltaré, sé que son obligatorios

Era responsable, sino lo fuera seguramente no estaría en aquel lugar. Aún así el deje de resignación siempre estaba ahí al nombrarlos.

¡¿Una década?! Dijo sorprendida, pero la verdad es que no tenía demasiado claro si eso era mucho poco tiempo, supondría que dependiendo de con quien se comparara, pero por la forma en la que lo había dicho, creyó conveniente parecer asombrada. Sus siguientes palabras la hicieron pensar la verdad es que no lo sé… no parecía dubitativa a pesar de lo dicho lo cierto es que tengo muchas ganas de salir ahí fuera el brillo de sus ojos lo confirmaba este sitio… creo que es lo que he estado esperando siempre quizás fuera el clásico ardor novato, no tenía ni idea, pero seguía hablando sin pensar demasiado puede que tengas razón y sea mejor ir sin nada preconcebido se acarició de nuevo el flequillo, empezando por la parte más alta, hasta la inferior aunque no sé como interpretar esa risita del final… frunció el ceño, más suspicaz que enfadada, ya había pasado por suficientes “bromas de novatos” para el resto de su vida. 

Cuando dijo lo de que no habia amenazado a nadie un largo suspiro salio de entre mis labios mientras negaba con la cabeza, como siguiera asi se la iban a comer viva en cuanto intentara relacionarse con alguno de los de ahi fuera. ¿Contigo no? Yo paso bastante... ¿Lo haces? Habitualmente si, hoy es un buen dia. ¿Le vas a decir eso a ella? Que mas le dara, ademas no es de su puta incumbencia. Entonces empezo con una larga explicacion sobre que no se veia como Legolas, solo que se habia fijado en los elfos porque tenian muchas cosas que ella tenia, aunque no lo dijera en voz alta, menos lo de vivir siglos. Se estaba haciendo un lio ella sola... y al final acabo recriminando que no la estaba escuchando. Negue con la cabeza mientras volvia a apoyarme contra el respaldo del sofa, mirandola un momento, planteandome si le habian enseñado educacion basica, sobre no recriminar a nadie que esta con su mirada fija en ti mientras dices tonterias. Supuse que era mejor dejarlo pasar... despues de todo.

La vehemencia de esa frase, me hizo volver a mirarla y asentir quedamente. - Es la mejor forma de verlo. - Aunque todos odiemos los putos analisis.

¿Sorprendida? Suponia que si, sobretodo con lo joven que era ella, aun asi no habia motivos, no es algo que la gente se colgara chapitas... no al menos, que yo supiera. Mas cuando le hable sobre el primer salto, dudo. Obviamente no era algo que tomarse a broma y era una prueba en si misma, ser enviada a la primera mision. Mas entonces llego el enstusiasmo por saltar, las ganas de estar aqui "porque es donde pertenecia" o "lo que habia estado esperando siempre" y mi mirada se volvio algo mas fria mientras determinados pensamientos pasaban por mi mente. Mire al suelo un instante, la sonrisa se habia borrado... ¿Cuantos de los que decian eso volvian con vida de sus primeras misiones? - Un consejo, cuando te llegue el momento no te hagas la heroe, ni el elfo, elige misiones de nivel bajo hasta que te acostumbres... - o acabaras muerta antes de lo que crees. Mi tono era mas serio ahora, no tanto como parecer la orden de un veterano a un novato, pero si un consejo de esos que deberia tener en cuenta.

No tienen ningun significado, es simplemente gracioso como la gente extrapola unas cosas a otras. Nada mas... prefiero dejar las novatadas a los demas. - Titan era enorme, habia de todo. Desde gente que se le acercaria, a gente que mientras siguiera siendo una novta que no habia probado lo que era saltar, probablemente ni la mirarian por muy buena que fuera con el arco. Mostrar las habilidades esta bien, ser capaz de usarlas cuando mas se necesitan es donde muchos de los novatos pecaban... por esa necesidad de ser exploradores de mundos.

Zona de análisis - 3 Meses atrás (9:00)

No pudo evitar sentirse como una idiota cuando le dio ese consejo eso te pasa por bocazas, ¿qué esperabas? Fue incapaz de mantener la mirada que Markus le brindó al hablar ¿estos sillones no tendrán un botón para hacer desaparecer? Se sentía como si hubiera retrocedido en el tiempo unos cuantos años y fuera de nuevo una niña pequeña.

Seguiré tu consejo, gracias…

Al menos había conseguido hablar algo, pero la vivacidad que pocos instantes antes era toda una evidencia, había desaparecido totalmente. Estaba segura de que él la veía como una niñata sin experiencia ninguna, y su comportamiento no había ayudado en absoluto a ello, mostrándose totalmente ilusionada en algo que era enormemente peligroso y hablando de chorradas como si fuera una adolescente…

Bien, ya lo averiguaré por mi misma.

Fue consciente de la tremenda diferencia entre ellos, mucho más allá de la edad. Y no se trataba de lo guapo que era  ni nada de eso, no iban por ahí los pensamientos de Hilv ¿Ahora no tienes nada que decir estúpida voz?...

Por suerte para ella, la puerta de la consulta se abrió, y alguien llamó a Marko por su nombre estoy segura de que han terminado con el paro de la profesión de médico ¿cuántos habrá aquí abajo? No les hagas esperar o seguro que usan otra aguja más grande Dios Hilv…patético… calla…

No tardó ni un par de segundos en ponerse los auriculares y conectar la música.  

Zona de entrenamiento - 86 dias atras (7:00)

La unica forma de acceder a la sala era una pesada puerta doble de metal, casi como si el mismo hecho de entrar alli dentro fuese una prueba en si misma. Una vez dentro de la misma lo primero que resaltaba a la vista, eran los diferentes tipos de escenarios que se presentaban. Una zona de cesped artificial, o eso parecia a simple vista, una zona que asemejaba un barrizal y por la pinta de algunos de los que alli entrenaban sin duda manchaba igual y por ultimo una zona de atletismo, al mas puro estilo de las olimpiadas. Mas aun asi un poco mas apartada habia una pista de obstaculos, por llamarlo de alguna manera, puesto que ni una sola de las zonas estaba hecha para blandengues y mas valia tener una buena resistencia fisica para atreverse con ella.

Empezaba con una escalera de cuerdas de unos cuatro metros de altura, cuyos enganches estaban ligeramente sueltos para que con cada peso que soportara, se volviera mas inestable y mas dificil de escalar. Una vez alcanzada la cima, habia un puente de vallas de distintas alturas y relativamente juntas que en lugar de terminar en una buena zona de descanso, lo hacia casi un metro por debajo de la zona inicial para ir directo a un poste de equilibrio donde con mala suerte, o mas bien mal equilibrio, caerías desde casi tres metros de alto al suelo y que para mayor diversion iba aumentando la altura segun avanzabas en direccion a uno de los mayores enemigos de los novatos. Un muro macizo, completamente liso, de cinco metros con una cuerda sin agarres adicionales, ni los tipicos nudos que terminaba con una suave bajada hasta un corredor con las paredes de alambre de espinas que era sumamente estrecho y donde algunas de ellas repicaban como si estuvieran ligeramente electrificadas. Para aquellos que lograran pasar esta primera etapa les esperaba un recorrido por debajo de alambres en plena zona de lodo, de esos donde todos disfrutaban de acabar con barro hasta la misma coronilla pues la densidad del lodo parecia variar con el tiempo. Tras eso se llegaba a una tirolina cuyo recorrido iba variando a lo largo de cuatro puntos den engache, en este caso unos enormes arboles, y que ademas parecia que de manera aleatoria soltaban mas obstaculos u objetos que debian ser esquivados para asi acabar en una zona con un montón de fosos consecutivos, de diferentes tamaños y formas, donde solo había una pequeña superficie de madera que no parecía muy estable, para pasar por encima de salto en salto y por último el favorito de todos, un muro de escalamiento sin cuerdas de seguridad.

Recien salia de la pista, habiendo conseguido completarla con algunos problemas tirando hacia el final, pues ya llevaba un buen rato con ella. Ella y yo nos habiamos vuelto buenos amigos desde hacia mucho tiempo, cuando la primera vez que nos vimos me acabo mandando a la enfermeria. Con el cuerpo parcialmente lleno de barro, dejando unicamente bien limpias las zapatillas, me acerque de nuevo a la zona de inicio. Dispuesto a encarar de nuevo la pista completa. Habia conseguido completarla varias veces ya, el sudor corria por mi rostro y sobretodo dejaba brillante mi pelo con la iluminacion del lugar.