Partida Rol por web

La cara de Luca era un espectáculo, en vivo y en directo. Un rostro que, sin articular palabra grita al universo las palabras "¿¡Que narices te pasa conmigo!?, ¿¡Era eso verdaderamente necesario!? y ¡En serio,¿Cual es tu problema?! era, al fin y al cabo, un espectáculo digno de ver.

Sin embargo, tras esa manifestación de creatividad facial, no se dirigió a la niña para cogerla y zarandearla mientras le preguntaba amablemente si tenía alguna clase de problema o cuestionaba su inteligencia comparándola directamente a la que poseen diversos animales de granja. Dios, como le apetecía hacerlo. Pero no.

Lo que hizo fue mas bien distinto, desenvainó su espada. Retiró la lubina medio aplastada de la mano de la loli joven y cortó los cachos que no tenían esperanza. Mas de media lubina desperdiciada. Se volvió a replantear lo de zarandear a la niña y cuestionarla pero algo le dijo que seguramente no fuera muy buena idea.

Tras este ejemplo de autocontrol y lucha interna, Luca preguntó:

-Era mia, pero no te preocupes.-La mirada de Luca en cambio decía algo similar a "Quiero pegarte en la cara."-¿Estas bien?, ¿Te has hecho daño?

E intentando disimular sus impulsos, hizo un esbozo de sonrisa. No era una sonrisa genial, pero se podría decir que daba el pego... mas o menos.

Tras entrar en la oficina de Ykki y observar todo a su alrededor, puedo determinar que no es una persona a la que le falte trabajo. Mi intuición sobre aquel hombre había sido certera, así que podía asegurar que tenía la capacidad de resolver mis dudas. - Mire señor Shio... o maestro Shio... o dime cómo quieres que me refiera a ti. Hace relativamente poco que decidí acercarme a la Academia, en busca de más aventuras y experiencias- mientras digo esto, busco una pared en cuál apoyarme. - He estado entrenando con mi padre la gran parte de mi vida y hemos estado de acuerdo en que era momento en el cuál yo pudiese aprender más de otra gente para después volver.-

- Al verle a usted entre el grupo de personas que estábamos antes reunidos, he podido comprobar que todo el mundo le conoce y que, por lo visto, usted es muy conocido por la zona, lo cuál me hace sospechar que puede ser Maestro de la Academia o algo parecido- Comienzo a deambular un poco por la oficina, sin intención de parecer aburrido ni irrespetuoso. - Si es así, me gustaría saber si usted podría ayudarme en mi entrenamiento junto a tus otros alumnos y comenzar lo antes posible. Creo que he tenido el placer de presentarme a un de tus alumnos. ¿Sora, puede ser?-

Como solía pasar siempre que se hablaba de temas que no entendía muy bien me entró el sueño, y era tal mi desconocimiento sobre la magia que hasta me quedé dormido de pie. Me desperté al de un rato, cuando escuché un gran golpe y vi que había una chica tirada en el suelo, al aprecer todos se habían marchado ya, o casi todos.

- ¡¿Mierda, donde están mis compañeros?! ¡Seguro que ha vuelto el tío ese que para el tiempo y los ha movido de sitio! – dije mientras me estiraba un poco y seguido salía corriendo por la puerta. Tenía que encontrarlos si quería que el maestro Ykki no me culpase de su desaparición.

Corrí en dirección a la salida para empezar mi búsqueda, aunque esta vez andaría con más cuidado para no perderme.

Shael sabía que el epicentro de la conversación estaba siendo el pez, y sinceramente, pobre pez, a veces incluso muerto, pasado el umbral apto para el consumo, te caen descaros, en otro contexto hubiese sido algo totalmente trivial, pero la mirada de Luca expresaba algo similar a sentarse en una pila de estiércol, respirar profundamente, fingir que todo está bien e intentar no vomitar. Y como Shael no iba a dejar que la felicidad de su querido amigo fuese engullida por la situación, fue en su rescate.

- "Luca es raro a veces, pero se le quiere", piensa Shael esbozando una melancólica sonrisa - Luca, no hagas caso, te creo. ¡Esa lubina tiene cualidades excepcionales!, cualquier otro pez, después de haber caído y ser pisoteado, estaría destrozado o al menos deformado, pero... ¡fíjate!, está casi intacta. - exclama mientras levanta con delicadeza el animal acuático, con intención de ponerlo en las manos de su amigo - La verdad, estoy sorprendido.

El sol del mediodía no daba tregua en su camino por avanzar, y eso significa hora de comer, y las tripas de Shael no iban a dejar pasar una oportunidad de demostrar que con la hora de comer no se juega.

- "brrrrrrrhg" suenan con la intensidad de un volcán los entresijos de Shael. - Vaya... Una cosa Luca, ¿Te importaría ir conmigo al gremio de combate?, seguro que el cocinero nos hace algo de comer, y e incluso puedo pedirle que te haga esa lubina, o que te la cocines tú, lo que prefieras. Además, por el camino me puedes contar que te trae por aquí, no vendrías a la academia sin un buen motivo. -

Prácticamente olvidando el tema de la lubina (aún le dolía un poco desperdiciar casi la mitad del pez pero eso es inevitable.) Luca recuperó su actitud jovial al escuchar las palabras de su amigo.

-Si, vamos. Te cuento por el camino.

Y así, comenzó a andar, no tenía muy claro el camino pero estaba casi seguro de que Shael le adelantaría y guiaría.

Me quede viendo como los pocos que quedaban se iban. La verdad tenía intención de invitar a los dos muchachos a comer a mi casa, que aunque no era muy grande podría haberles dado algo para comer por haber pisado la lubina, pero al parecer ya tenían planes. Me giré a aquella rafaga de viento humana que salía corriendo a la salía.

-La chica de pelo azul esta en el gremio de magos, si es a quien buscas-le dije antes de comenzar a andar hacia mi casa a paso tranquilo. Tal vez era hora de volver a dormir.

Hubo un corto silencio entre las dos mentes tras la respuesta de Vand.

Buscas conocimiento, y la magia es para ti una compañera inseparable...

Es una respuesta a esperar de un aprendiz, el cual todavía no ha adquirido el conocimiento suficiente sobre la hechicería para escoger un objetivo dentro de ésta.

Muy bien, seré tu maestro si así lo deseas. Trataré no sólo de transmitirte conocimientos, sino también de despertar tu curiosidad, tus ganas de experimentar con la magia y el mundo a tu alrededor. Estoy seguro de que dentro de un tiempo tendrás más objetivos que sólo adquirir conocimientos.

Ahora, vamos a husmear un poco en el gremio de hechicería. Tengo ganas de ver qué se comenta sobre el trozo de máscara del intruso, y de paso me puedes ir contando qué hechizos conoces por ahora.

Estaba tan tranquilo escuchando las palabras del joven cuando me había dado cuenta de algo. No sé si por nerviosismo, falta de educación o simplemente las prisas, pero el chaval se había olvidado completamente de presentarse y decirme su nombre. - Oye chico, no es por mal, pero si quieres que sea tu maestro, como se supone que tengo que llamarte?.- Le espeto con tono gracioso para que se note que no estoy enfadado en absoluto. Soy el menos indicado para tener esas cosas en cuenta, sobre todo cuando soy el primero en ir directo al grano muchas veces sin llegar a presentarme... no, espera... yo siempre me presento, aunque solo sea para que sepan quién soy.

 - Entiendo que quieres un maestro y mejorar en tus artes marciales o tu camino como domine, no? La verdad es que me das poca información, ya que no conozco tu estilo, preferencias u objetivos, por lo que deberías ser un poco más explícito- Me levanto de mi silla y me acerco tranquilamente a un doomy de madera que tengo en una de las esquinas de la oficina.- Primero de todo necesito que sepas que soy uno de los maestro más... versátiles. Si, esa sería la palabra en cuanto a artes marciales, pero que mi punto fuerte no está en la fuerza física, sino en la espiritual. Además de que soy un luchador completamente defensivo... Soy más de contraatacar cuando me esquivan que no atacar a la primera de cambio.- En ese momento y con un rápido golpe que ni siquiera llega a impactar en la estructura de madera pensada para el entrenamiento, esta estalla en miles de pedazos, como si un gigante le hubiese dado un golpe directo.- Puedo enseñarte a utilizar tu fuerza también, por supuesto, pero por eso necesito más información acerca de tus objetivos.- Continúo mientras vuelvo a sentarme en mi silla tranquilamente.- No te preocupes, cuando te vayas limpiaré un poco la cosa para que mi hermana no intenta matarme... no será la primera vez.- Espeto con una gran risotada a continuación

- Así qué dime? cuáles son tus intenciones?.- Pongo mis manos entrelazadas enfrente a mi rostro mientras me apoyo en la mesa.- Un maestro que te enseñe a dominar tu cuerpo? Venir conmigo en mis misiones, aunque suelen ser de categorías altas? o algo más concreto como un arte marcial específico?.- Me echo un poco hacia atrás y continúo.- También te aviso... hay dos artes marciales prohibidas que no pienso enseñarle a nadie que no se considere un verdadero heredero y, aunque no sé si serán de tu estilo, ya te aviso. No será tarea fácil.

Tras escuchar las palabras del veterano, comienzo a meditar mi respuesta. La verdad es que no le había dado mucha información con la que jugar, así que tenía sentido que como maestro le resultase difícil evaluarme. En verdad estaba muy entusiasmado por comenzar esta nueva vida, pero al mismo tiempo debía parecer tranquilo y mostrar confianza, ya que esta oportunidad podría no volver a ocurrir. - Tienes razón, no me he presentado de una manera apropiada. Me llamo Kalirath Gail y he vivido la mayor parte de mi vida alejado de la Academia- tras decir esto, le tiendo la mano. - Un placer conocerle, maestro Shio.-

Una vez hecha mi corta presentación, vuelvo a mi sitio y encuentro la silla más cercana. A primera vista, Shio parecía un hombre que te iba a decir las cosas claras y las verdades a la cara, sin complejos. A su vez, podía intuir que poseía conocimientos muy valiosos y que estaba dispuesto a enseñarlos, lo cual me alegraba profundamente. Tras pensar un tiempo mi siguiente frase, le comento: - No te voy a mentir. No soy un genio en presentaciones breves. Me gusta más conocer a la gente detenidamente, procurando ser honesto y amables con ellos. Por lo tanto, ¿qué le parece si vamos a tomar algo antes del anochecer? Tengo entendido que hay una zona de bares cerca de aquí- al decir esto coloco mis manos detrás de mi cabeza, mostrando una sonrisa, - así te podré comentar todo lo que necesites sobre mi entrenamiento, mis motivaciones y mis aspiraciones.-

-Perfecto, vayámonos pues.- dijo Vand en voz alta, tras la breve conversación con el maestro. Necesitaría unos minutos para explicarse ante su nuevo tutor, más que nada para que supiese a qué atenerse, pero suspiró cuando recibió su aprobación. No albergaba esperanzas de que fuese todo tan fácil, aunque solo había superado una pequeña barrera, la guerra aún estaba por librarse.

Se colocó al lado de Balander y ambos empezaron a caminar al unísono, aparentemente en silencio, hacia el Sector Oeste.

Ya veo, eres de los que se toma las cosas con calma...- comento pensativo.- Yo soy más de quienes hacen las cosas por instinto y sin pensar mucho, pero podemos tomar algo sin problema para charlar.- Hago una pausa para reorganizar algunos papeles que tengo sobre la mesa y continuar hablando con Kalirath.- Solo hay dos problemas... El primero es que ya ha anochecido.- Sonrío abiertamente.- Que un meteorito tuviese la osadía de iluminar el cielo no quiere decir que tarde más en anochecer.- Estallo en una gran carcajada que probablemente se puede escuchar a varias habitaciones de distancia.- El segundo es que MM me ha pedido que no me aleje mucho. Supongo que tendrá algún informe o misión para mi, así que me será imposible hacerlo ahora mismo. ¿Qué te parece si vas yendo a  "El dragón de plata" en el sector Este?- Cojo un pequeño mapa de la ciudad y le señalo la localización exacta de la taberna en si.- Como puedes ver está al lado del gremio de combate, así que no tendrás muchos problemas en localizarla. Cuando MM se presente y me dé el informe iré a verte allí y hablamos. Ok?

Tras analizar brevemente el mapa y ubicar la zona que me indicaba, me fijo en la proximidad relativa entre el local y el gremio. Como bien indicaba Shio, no se encontraba lejos del conocido gremio de combate, lo cual me daba un punto de referencia con el que guiarme. Tras escuchar todo lo que tenía que decir, asiento con la cabeza ligeramente. -Muy bien, maestro. Me alegra que te tomes tu trabajo con tanta responsabilidad y honradez. Estaré encantado de poder charlar contigo cuando vengas.-

Al decir esto, me dirijo a la salida de la oficina, pero antes de salir, anoto finalmente, - Si no es demasiado pedir, también me gustaría hacerte unas preguntas más tarde. Como no se exactamente cuánto tardarás, estaré dando vueltas por la zona del gremio. ¿Alguna cosa más antes de que me vaya?-

Responsabilidad y  honradez dice... La última vez que ignoré a la jefa me pasé 1 mes hospitalizado.- Espeto con una risa melancólica en la que se puede notar algo de miedo.- Y créeme, nuestros hechiceros de curación son de lo mejorcito que te puedes encontrar en el continente.- Con esta frase le hago entender que no es precisamente que sea una persona a la que le guste tanto la responsabilidad, sino que la responsabilidad le quiere a él y no le queda mucho más remedio que obedecer las órdenes.

No creo que te haga esperar mucho, pero te buscaré. No ocultes tu ki en la ciudad y te localizaré sin problemas, ya te tengo fichado.- Comento sonriendo.- Y claro que me puedes preguntar lo que quieras. Si no es información restringida no tengo problemas en contestar lo que sea. Ahora puedes irte si quieres.- comienzo a recoger algunos papeles y me sitúo en el mapa del continente que tengo en uno de los laterales de la oficina, con varios lugares marcados con diferentes hilos de colores y casi todos los idiomas conocidos, así como mucho que pocos humanos serían capaces de reconocer.- Esperaré por las órdenes de MM y me encontraré contigo. No te metas en demasiados problemas

-Por fin nos dejan solos-dice una voz muy familiar a tu espalda-Ya pensaba que iba a pasarse aqui todo el dia*

Al girarte, la misma entidad acusada de lanzar el meteorito se encontraba sentada en el marco de la ventana. Todavia tenia medio rostro arrancado, pero no parecia darle mucha importancia.

-Ykki Shio, eres un sujeto muy interesante ¿te importaria hablar un rato conmigo?-aunque esta siendo cortes y educado, la sensacion de que no tienes alternativa es la unica que recibes.

Ya somos dos. Me ha costado echarlo de aquí sutilmente.- Le espeto tranquilamente mientras giro mi asiento para estar de frente a él. No me esperaba que continuase en la ciudad, todavía menos en el castillo, pero tampoco es algo que me extrañe en demasía.- Es que los jóvenes de hoy no conocen los modales? Porque ya eres el segundo de hoy... Tu conociendo mi nombre y aún así sigues sin presentarte. Empieza una conversación como es debido, por favor- Le sonrío. No quiero parecer en absoluto hostil y menos todavía temeroso, pero tengo mi cuerpo preparado para esquivar cualquier ataque que intente. Las variables son demasiadas, pero ha demostrado tener la fuerza suficiente para enfrentarse a la jefa, no sería buena idea empezar un combate así por las buenas. Además, MM había quedado en verme pronto... con un poco de suerte puede que gane suficiente tiempo como para que aparezca.

Ya sé que soy interesante, al menos eso intento.- Estallo en una gran carcajada.- Pero dime.- intentando reducir mi risa, inútilmente.- de qué quieres hablar?,. Cojo uno de mis puros y lo enciendo con calma mientras acerco uno de los ceniceros a mi lado para no manchar el suelo.- Te preguntaría si te molesta el humo, pero estás en mi despacho y la verdad es que me la trae al pairo.- Le espeto finalmente mientras le echo una calada al puro y echo el humo en su dirección

-¿Quien soy? Esa es una excelente pregunta, llevo años tratando de recordarlo-te dice el desconocido mientras se encoje de hombros-Haber contraido la inmortalidad puede ser divertido los primeros siglos, pero cuando uno lleva "vivo" varios miles de años uno empieza a aburrirse y olvidarse las cosas ¿Os parecieron bonitos los fuegos artificiales? Antes no pude preguntarlo, siento curiosidad. Y no te preocupes por el humo, este cuerpo no respira, no lo notare

Me alegra saber que no te molestará el humo.- contesto tranquilamente ante su comentario... hay muchísimas explicaciones para que un cuerpo tanto haya conseguido la inmortalidad como no necesitar respirar...- Pero no se... referirme a ti como "el tío feo de la máscara aún más fea".- Espeto divertido.- No me parece la forma más adecuada de llamarte... no sé, si te llamo "el mascaritas" te vale? Así al menos podré recordarte sin tener que explicar cada vez quien eres...

Y los fuegos artificiales... que quieres que te diga, te los podrías haber currado un poco más, no? No se... me parecieron algo sosos. Si hubieses avisado un poco antes, podríamos haber hecho un espectáculo en vez de improvisarlo así. Después de todo.- Continúo después de una pequeña pausa.- Si lo que querías era información para quien te paga... que por cierto, si eres inmortal ya me dirás para qué demonios quieres trabajar... yo preferiría vaguear todo el día.- Desvarío antes de volver al tema en cuestión.- no se... haría cosas más productivas que tocar la moral de esa forma.

-¿Mascara? Yo no llevo mascara, este es mi rostro actual-te explica algo sorprendido.-Salvo por hechizos de ilusion, no se de ninguna mascara que mueva los labios al hablar, pero seria interesante encontrar alguna

-Y, por si no lo sabias, nada en este mundo es del todo inmortal, en mi caso, me puedo morir de aburrimiento, por eso realizo "trabajos", no por el dinero, si no por hacer algo, mantenerme ocupado, vamos. Y tienes razon, estuve tentado de enviar unos 12 simultaneamente, pero de hacerlo, seguro que Yashi se hubiera enfadado un poco, ya viste lo que hizo con mi cara, ¿verdad? Pues menos mal que iba de buenas, tendrias que haberla visto hace un siglo, cuando carecia del autocontrol que tiene ahora, en aquel tiempo si era merecedora del titulo de Mugen Maou...

Apoyando un par de dedos en su sien, proyecta una imagen en tu mente mediante telepatia

-Descenso Inverso, su forma oscura y desatada. Cuando nos vimos por primera vez, digamos que "accidentalmente" mate a uno de los suyos, creo que era el 1º portador del titulo GoY Tigre, y no le sento muy bien que digamos ¡Destruyo mi cuerpo enterito! Creeme, si ves ese rostro alguna vez, sal corriendo, no se controla en absoluto, es una voragine de destruccion y caos, y te lo digo yo, que he visto muchas cosas a lo largo de mi vida

- Los disfraces por magia de ilusión siguen siendo disfraces, así que seguiré considerándolo una máscara.- Le espeto, contrariándolo.- Así que no se por qué me dices que sería interesante conseguir alguna forma... o si no artefactos. Para qué demonios se experimentan con artefactos si no puedes hacer algo que te guste?.- Me quedo un rato pensativo en algo que ha dicho en este momento.- Mira, ya tienes trabajo para mantenerte ocupado y no morir de aburrimiento. Busca como hacer una máscara molona que también mueva los labios!!

Y si sabes cómo se pone, para qué demonios la tientas?.- Pregunto sin pensar en absoluto mis palabras.- Si lo que quieres es morirte otra vez pídelo de buenas formas, que me ahorras el disgusto de tener que aguantarla después, por dios!!.- Si, sé que no pensé mucho en mis palabras, pero me salen del alma. Viejo conocido, trabajando para alguien que probablemente sea otro viejo conocido y tiene problemas con nosotros. Cae de cajón que el que va a llevar el sermón y la misión de investigar soy yo... y eso da mucha pereza.- Y vaya, qué educación la mía!.- Me doy vuelta rápidamente hacia la mesa y cojo una de las bandejas que siempre está en esta, por alguna razón, siempre a la temperatura adecuada cada una de las cosas que hay en ella.- Té? café? no se... eres más de Whisky? Sé que no las necesitas, pero nunca está de más disfrutar un poco, no?- Le sonrío. Pero donde demonios se metió MM? No suele tardar tanto en presentarse cuando dice que tiene algo que decirme, pero la verdad es que me lo estoy pasando bien mareando a este sujeto. Y dudo que a él le importe mucho tampoco

-Bueno, eso seria si yo usara ese tipo de magia, pero no es el caso-despreocupado, se acerca y agarra la botella de wishky y un vaso-Y estas en lo correcto, aunque no lo necesite, recordar los sabores es algo entretenido... lastima que no tengas algo mas fuerte, como el aguardiente-tras llenar el vaso, lo vacia de un trago... aunque parte del liquido se pierde por los agujeros de su rostro

-De todas maneras, ya dije que tenia ganas de hablar contigo-sentado de espaldas a ti, sobre tu mesa, mueve el vaso, distraido-¿Que te pareceria abandonar este sitio y venirte conmigo? Te puedo prometer riquezas, poder, titulos nobles, si asi lo deseas. Hay gente interesada en tu singular linea de sangre y que estaria dispuesta a aceptar tus condiciones con tal de que les sirvas.