No eres la única en acudir al origen del grito. Subes con varias chicas delante y varias detrás, más las que os encontráis en el pasillo y las que están entrando a los aposentos de Claudine. Meretriz de categoria media/baja que tenía, en consecuencia las su respectiva proporción de "comodidades" en el burdel: un cuartucho con un simple jergón, sin ventanas. Pero eso no era lo importante ahora. Lo importante es que, al entrar a aquella estancia, el aire viciado te golpe la nariz y la visión de Claudine cadáver y tendida sin ropa en la cama, otra.
La muchacha luce un mortecino color de piel, sus ojos petrificados miran con horror al techo y tiene en el cuello las marcas de un estrangulamiento.
Contesta en el siguiente capítulo.