Partida Rol por web

El bardo tomó su mano y ella lo ayudó a levantarse, parecía algo mejor y eso reconfortó un poco su corazón. Cada uno llevaba las pérdidas a su modo, y ella, había decidido llevarlas en un silencio tortuoso, dedicado a ayudar a sus compañeros. Sí, la mejor forma de no notar el dolor de su interior era mirar a los demás, apartar la mirada de lo que le producía aquella angustia. Quizá la incesante palabrería del enano no fuera tan mala, después de todo. Podía utilizarla como vía de escape.

Los mismos compañeros a los que quería ayudar, empezaron a hablar de buscar al demonio. Se ve que no podían simplemente "dejarlo estar". Podía entenderlo, pero cuando las palabras "Magia de sangre" aparecieron en la conversación, la elfa arrugó la nariz y el ceño, hizo una mueca con los labios y luego respondió:

-Claro... porque lo que necesitamos justo ahora es meternos con más demonios...-La respuesta fue seca, había girado la cabeza para mirar a Enansal y seguía agarrando la mano de Jarlath-Porque justamente eso es lo que...

Un crujido extraño llegó a sus oídos, un sonido que la alertó e hizo que llevara la mano que tenía libre hasta su arco, unas criaturas estaban allí... ¿Más demonios?

-Se acabó el descanso... ¡Hora de quitar a esos bichos de en medio!

El primer ataque no se hizo esperar y fue concentrado; dos de los cadáveres andantes se avalanzaron hacia vosotros entre gruñidos guturales, ansiosos por la calidez de los vivos. No teniais ni idea de cómo era posible que pudieran moverse tan rápido ya que cargaron contra Lynariel, adelantando uno incluso al otro y propinándole un mazazo a la elfa que hizo crujir varios huesos.

Mientras tanto, en el fondo, un par de esqueletos se arrancaban sendas saetas del cuerpo, las mismas que en su día les habían matado a ellos, las encajaban en los arcos y las enviaban también contra la dalishana que agachó la cabeza para esquivar una, aunque la otra le pasó rozando.

El cadáver 3 corre hasta J16

El cadáver 4 carga contra Lynariel y le hace 8 puntos de daño

Los esqueletos 3 y 2 disparan a Lynariel pero fallan.

Mapa grande

Iniciativas

Cadáver 3
Cadáveer 4
Esqueleto 3
Esqueleto 2
Elietta y Enansal
Hroldar
Esqueleto 1
Cadáver 5
Cadáver 2
Selene
Cadáver 1
Paexter
Lynariel
Jarlath

¡Turno de Elietta y Enansal! (en cualquier orden)

_{Nota: el ataque que pone "Lynariel" entre paréntesis tendría que poner "Cadáver 4", lapsus.}

La elfa tenía su arco agarrado, pero tuvo que gastar un momento para descolgarlo de su espalda y prepararlo. Esta vez no iba a cometer el error de intentar ataques cuerpo a cuerpo, al menos no sin la garantía de que podía realizar un daño real. Tensó la cuerda de su arco y contuvo la respiración mientras apuntaba al cadáver que acababa de atacar a su compañera elfa. Por lo que había visto en el anterior combate, no parecía necesitar la ayuda de nadie para defenderse, pero a nadie le venía mal un poco de apoyo.

Soltó la cuerda, determinada. Planeaba darle en medio de los dos ojos, para soltar su frustración y luego se quedó mirando la trayectoria de la flecha.

Lo que sea necesario, se disponía a replicar cuando los cadáveres se alzaron. Varios fueron rápidos como liebres, abalanzándose sobre Lynariel.

Enansal gritó las incomprensibles palabras de un conjuro, levantó la rodilla y pateó el suelo con fuerza. El impacto abrió una grieta en la tierra del suelo, que zigzagueó apenas perceptible hasta detenerse entre los cadáveres animados. Bajo sus pies, a su alrededor, el suelo de la caverna comenzó a temblar y romperse, como si hubiera sido poseída por espíritus tan inquietos como los que habitaban en las momias.

Acción estándar: Conjuro impeding stones en el área de la imagen. TS Reflejos (o prueba de acrobacias) CD 16.
Acción gratuita: Mueve a O18.

pg: 43/45.
pc: 15/34.
FUE -2.

Hroldar abrió el extremo superior de su bastón huesudo para extraer de él un ovillo de telaraña. Pero cambió de opinión al ver los efectos del conjuro de Enansal y devolvió la teraña a su colección de guarrerías. 

El augur avvarita hizo un sólo gesto con la mano y de sus dedos extendidos brotaron cuatro dardos de energía pura que cruzaron la estancia para impactar con violencia a uno de los esqueletos arqueros. El muerto viviente trastabilló y apunto de estuvo de caer al suelo por la potencia de los proyectiles.

Hroldar Torvaksen lanza proyectil mágico al esqueleto en H5.

Varios de los cadáveres vivientes perdieron el equilibrio y se cayeron al suelo, otros no, y uno incluso echó a correr alocadamente hacia adelante, ululando, cimbreándose, y apañándoselas para no tropezar a saber el Hacedor cómo. Al parecer la idea de que ahora fuese más difícil alcanzar su objetivo le resultaba bastante frustrante.

El Cadáver 2 se mueve a I17

Mapa grande

Iniciativas

Cadáver 3
Cadáveer 4
Esqueleto 3
Esqueleto 2
Elietta y Enansal
Hroldar
Esqueleto 1
Cadáver 5
Cadáver 2
Selene
Cadáver 1
Paexter
Lynariel
Jarlath

¡Turno de Selene!

Selene observó los gestos de la extraña dalishana y la forma en la que el suelo de la caverna comenzó a agitarse con una patente admiración. La joven, a pesar del tiempo que había pasado en Tevinter y en el Círculo, jamás había visto nada parecido a la manera en la que la elfa controlaba las hebras de la magia para alterar la naturaleza e incluso su propio cuerpo. ¿Cuántos conocimientos más habrían quedado vedados a los humanos por culpa de su soberbia?

Sin embargo, no era el momento a ponerse a divagar. Por mucho que el temblor de tierra les hubiera dado unos segundos de ventaja, los cadáveres seguían cercándoles. Expiró, con el corazón latiéndole muy deprisa dentro del pecho, y se acercó todavía más a Paexter y Elietta, buscando la confianza que le faltaba en la cercanía a sus compañeros.

Se mordió los labios un momento, recordando los conjuros que había aprendido desde su infancia, y finalmente canalizó el calor a través de su bastón para lanzar un rayo de fuego hacia delante, buscando el cuerpo del esqueleto que se encontraba frente a ella. Decididamente, nunca alcanzaría a comprender como podía haber personas que realmente disfrutaran de la tensión del combate.

El rayo de Selene impactó en el cadáver animado y este apenas pareció darse cuenta. Mientras tanto, uno de sus congéneres se puso en pié y comenzó a avanzar lentamente por el tembloroso suelo hacia vosotros, emitiendo un prolongado gruñido gutural.

El Cadáver 1 resiste 10 puntos de daño del Rayo Abrasador de Selene. Sufre 3.

El Cadáver 4 (el de E10) hace doble acción de movimiento: Una para levantarse y otra para avanzar a F12

Mapa grande

Iniciativas

Cadáver 3
Cadáveer 4
Esqueleto 3
Esqueleto 2
Elietta y Enansal
Hroldar
Esqueleto 1
Cadáver 5
Cadáver 2
Selene
Cadáver 1
Paexter
Lynariel
Jarlath

¡Turno de Paexter, Lynariel y Jarlath! (en cualquier orden)

Paexter no se podía jactar de ser un tipo que gestionará bien la frustración cuando esta crecía dentro de él, como la roca burbujeante en las entrañas de un volcán antes de la explosión de la erupción, y este parecía tratarse de uno esos casos, pero si que era un experto en usar esa frustración contra cualquier objetivo que pudiera encontrarse alrededor, así que, cuando aquellos cadáveres, tras siglos de reposo, en sus grotescas posturas, se levantaron, entre traqueteos de huesos, largo tiempo muertos, y tintineo de herrumbrosas armaduras, no lo dudo: - Jodidos siervos del Demonio!! Venid a mi, que tengo un mensaje para vuestro Señor!!, gritó, con los dientes apretados, y la cara congestionandose por momentos.

Las criaturas se movieron raudas, y mientras él dudaba sobre a cual tumbar en primer lugar sus compañeros empezaron a usar su magia, incomprensible para Paexter para hacer que la misma caverna se quejase de la presencia de los no muertos. Su frustración, su enfado por haber perdido un recuerdo, por doloroso que fuera, le pedía a gritos que se dejara llevar, pero los años de paz y sosiego junto a Elain le permitieron recordar que ahora formaba parte de un equipo, su nueva familia, así que, dando unos cuantos pasos decididos, que resonaron por la sala junto al ruido de lucha, se colocó, codo con codo con Lynariel, esa elfa de pocas palabras, pero que "los tenía cuadrados", y con un golpe descendente de su gran hacha, trató de quitar la presión que uno de los cadáveres mantenía sobre ella, pero, en su afán de acabar con la criatura rápidamente, tropezó contra un saliente de la roca, y se zarandeo peligrosamente, mientras la presa de sus manos sobre el mango del hacha amenazaba con no aguantar!!

Lynariel gruñó y apretó los dientes ante el mazazo del cadáver. El doloroso golpe casi hizo que perdiera el equilibrio, por suerte sus piernas reaccionaron con la misma rapidez que los cadáveres andantes se habían acercado y pudo esquivar las saetas que se dirigían peligrosamente a su corazón.

La dalishana notó que todos los muertos vivientes se habían fijado en ella para ser su primer objetivo. Excepto el que le había atacado y los que lanzaban flechas desde la distancia, el resto se acercaba con ansias de sangre.

"Genial…".

Por suerte, la magia de Enansal consiguió detener su avance. Unos pocos cayeron, el resto resistía y seguía su incansable avance. El rayo de Selene impactó en el cadáver, aunque sin demasiadas consecuencias. La mala fortuna quiso que el hacha del enano no golpease la bolsa de carne andante. Olvidándose del dolor, Lynariel asió con fuerzas su Dar'Misaan y dirigió ascendentemente su filo contra el muerto, para luego volver a hacerlo de forma descendente.

Inmediatamente después de pronunciar sus palabras de advertencia, Jarlath vio cómo se desataba el caos. Los muertos avanzaron implacablemente, con una pavorosa determinación, inexpresiva e inánime. De pronto, toda la caverna empezó a temblar violentamente. Grandes rocas se desprendieron del techo, e incluso el suelo se vio surcado por grietas que, como relámpagos, se extendían y ramificaban por la pétrea superficie. El bardo tardó unos instantes en percatarse de que era Enansal quien había obrado tan devastador terremoto, que arrojó por los suelos a la mitad de las criaturas. Un latido después, el entrechocar de las armas comenzó, y Lynariel y Paexter se enzarzaron en mortal refriega contra los furiosos cadáveres andantes, al tiempo que un rayo de fuego surgía, como la estela de una estrella fugaz, del extremo del báculo de Selene, iluminando de rojos y naranjas la tintosa oscuridad de la cueva. Pronto, el tumulto de la escaramuza inundó toda la zona en la confusión.

Y entonces, de repente, el grave son de un cuerno de guerra retumbó con fuerza, alzándose por encima de todos los demás sonidos.

Una nota sostenida se prolongó en el aire durante varios segundos, para posteriormente caer de forma dramática, creando una sensación de urgencia. Jarlath despegó sus labios de la boquilla del cuerno que acababa de tocar, mientras su oscuro y ominoso sonido resonaba por toda la estancia, atrapando aquel momento en un lienzo con una cualidad vasta, grandiosa.

Eterna.

Quienes la libertad para vuestros hijos ganarán,

seréis los libres soldados que reinos defenderán.

¡Y vencerán!

Con grandes fortunas el señor os recompensará.

Blandid vuestras grandes armas, el enemigo caerá.

¡No triunfará!

Tras declamar con poderosa voz estas enardecedoras palabras, Jarlath volvió a hacer sonar el cuerno, que estremeció de nuevo los cimientos de la tierra. En el momento en que lo hizo, una inmensa corriente de vigor y euforia se desplegó desde el trovador, como las aguas de un torrente en plena crecida, y arrastraba emotividad, camaradería y pasión con ella. Los guardas grises experimentaron un incremento tangible en sus fuerzas mientras continuaban combatiendo.

El cadáver recibió el espadazo de Lynariel pero ninguna sangre fue derramada, más que nada porque ésta ya se había podrido mucho tiempo atrás. No obstante, aquello no quitó que la hoja del Dar'Misaan provocase daños; en represalia, volvió a descargar otro mazazo contra la elfa. Lynariel también pudo ver de soslayo como otro de aquellos engendros se ponía en pie y se le acercaba.

Mientras tanto, uno de los esqueletos también se puso en pie y descargó una flecha contra Paexter aunque el proyectil rebotó en el casco del enano. Por desgracia, uno de sus congéneres que había mantenido la vertical, se aproximó al borde, apunto, y disparó certeramente a Selene, dándole de lleno.

El cadáver de L15 recibe 17 puntos de daño de Lynariel. Luego le pega y le hace 9 puntos de daño.

El cadáver de J16 hace doble acción de movimiento: Una para levantarse y otra para moverse a L7

El esqueleto de H5 se levanta y le dispara a Paexter pero falla.

El esqueleto de E7 se mueve a F7, le dispara a Selene y le hace 9 puntos de daño.

Mapa grande

Iniciativas

Cadáver 3
Cadáver 4
Esqueleto 3
Esqueleto 2
Elietta y Enansal (Infundir Valor +3)
Hroldar (Infundir Valor +3)
Esqueleto 1
Cadáver 5
Cadáver 2
Selene (Infundir Valor +3)
Cadáver 1
Paexter (Infundir Valor +3)
Lynariel (Infundir Valor +3)
Jarlath (Infundir Valor +3)

¡Turno de Elietta y Enansal! (en cualquier orden)

Protegida por una muralla de compañeros, Enansal se mostraba impávida ante el avance de los cadáveres poseídos.

Mientras la tierra temblaba frente a ellos, la dalishiana no dejó de entonar y escarbar en el Velo con sus manos, encadenando las palabras y gestos del primer conjuro con los de un segundo, como si ambos no fueran más que partes de un mismo todo.

Enmudeció entonces súbitamente y miró fijamente a los arqueros por encima de la cabeza de Paexter. Las grietas del suelo de la caverna empezaron a expulsar bocanadas de humo acre que formaron una espesa pared entre ambos grupos.

Acción estándar: Conjuro wall of smoke en la siguiente área. Dura 6 asaltos.
Acción movimiento: Ñ16.

Criaturas en el área de impeding stones, TS Reflejos (o prueba de acrobacias) CD 16 para evitar caer.

pg: 43/45.
pc: 14/34.
FUE -2.

Su primera flecha había fallado, pero no se culpaba a sí misma, sino a la frustración que sentía por lo que había pasado poco antes.

Concéntrate Elietta. No es momento de vacilar.

Se movió unos pasos rápidos, preparando su arco para el disparo. Respiró hondo y se concentró para disparar una flecha, esperaba que aquella vez, certera.

Hroldar fue a reanudar su ataque contra los esqueletos cuando la pared de humo de Enansal se levantó entrambos. El avvarita lanzó un gruñido bajo y, en lugar de eso, envió una andanada de proyectiles mágicos contra uno de los cadáveres que tenía más cercanos. Los dardos arcanos chocaron en silencio contra la criatura, sin provocarle ningún daño. 

Cosa que provocó un segundo gruñido en el guarda senior.

Cadáver es inmune a proyectil mágico.

La flecha de Elietta se incrustó en el enteco cuerpo del cadáver viviente pero no saltó una sola chispa. La criatura soltó un rabioso gruñido gutural, se arrancó el proyectil del costado y lo tiró al suelo. De hecho, hasta lo pisoteó en represalia.

Por detrás de la nube de humo que había creado Enansal los tres arqueros se habían caído al suelo como si de una coreografía se tratase por culpa de los temblores del suelo aunque uno se ponía en aquel momento en pie. Mientras, de la vaporosa cortina surgió uno de los cadáveres avanzando pavorosamente hacia vosotros.

Finalmente, en la vanguardia, uno de sus congéneres encontró su camino hacia Elietta y cargó contra ella blandiendo la herrumbrosa maza  que terminó pro descargar un doloroso golpe sobre la elfa.

El disparo de Elietta acierta al cadáver de L17 (Cadáver 3) haciéndole 10 puntos de daño físico que queda reducido a 6. Es inmune al daño eléctrico.

El esqueleto de G6 (Esqueleto 1) se pone de pie.

El Cadáver de I9 (Cadáver 5) se mueve a J11 (Actualizado en M13, mirad el Off para más info)

El cadáver de I17 (Cadáver 2) carga contra Elietta y le hace 11 puntos de daño.

Muro de Humo 6/6 asaltos

_{Nota: La tirada del cadáver 3 ignoradla, que está fuera del area. Lapsus (Os vamos a empezar a nombrar entre paréntesis el nombre de la casilla de los bichos, que por 1, 2, 3, 4, etc os va a costar más identificarlos)}

Mapa Grande

Iniciativas

Cadáver 3
Cadáver 4
Esqueleto 3
Esqueleto 2
Elietta y Enansal (Infundir Valor +3)
Hroldar (Infundir Valor +3)
Esqueleto 1
Cadáver 5
Cadáver 2
Selene (Infundir Valor +3)
Cadáver 1
Paexter (Infundir Valor +3)
Lynariel (Infundir Valor +3)
Jarlath (Infundir Valor +3)

El fuego no solo no causó graves daños en su objetivo, sino que en apenas unos instantes, un intenso dolor se extendió por su hombro, haciéndole soltar un gemido mientras una flecha perforaba su carne. Los gritos, los improperios de Paexter, la canción de Jarlath, y el desagradable sonido de los huesos entrechocando, se mezclaban en una cacofonía infame. Nuevas manchas de sangre se acumulaban sobre la túnica ya llena de negruzcos coágulos.

Se esforzó en concentrarse, en mantener la cabeza fría, mientras recordaba su entrenamiento en Perendale. Allí había aprendido mucho acerca de los muertos, debido a la influencia que los mortalitasi ejercían en la región. Había aprendido a venerarlos, y también a combatirlos. Solo tenía que acordarse, que dominar la magia.

Clavó su báculo en el suelo, como si acaso fuera un bastón, puesto que el temblor de su brazo izquierdo herido y su debilidad le dificultaban cada vez más el mantenerlo en alto. Sin embargo, la magia seguía fluyendo a través de él límpida y cristalina, engarzándose como una cadena que se enredó alrededor de los cadáveres más adelantados.

El hechizo de Selene dejó paralizados a dos de los no-muertos que lo único que hicieron al respecto (o más bien lo único que pudieron hacer) fue continuar gimiendo y gruñendo de aquella espeluznante forma gutural, inmóviles en el sitio.

No obstante, sus compañeros continuaban acercándose...

El cadáver de L15 (Cadáver 4) y el cadáver de L17 (cadáver 3) están paralizados. El cadáver de N18 (cadáver 2) salva la tirada.

El cadáver de F12 (Cádaver 1) hace doble acción de movimiento y se mueve a H15

Muro de Humo 6/6 asaltos

Mapa grande

Iniciativas

Cadáver 3
Cadáver 4
Esqueleto 3
Esqueleto 2
Elietta y Enansal (Infundir Valor +3)
Hroldar (Infundir Valor +3)
Esqueleto 1
Cadáver 5
Cadáver 2
Selene (Infundir Valor +3)
Cadáver 1
Paexter (Infundir Valor +3)
Lynariel (Infundir Valor +3)
Jarlath (Infundir Valor +3)

¡Turno de Paexter, Lynariel y Jarlath en cualquier orden!

Las horribles criaturas no muertas desafiaban la serie de trabas que sus compañeros, usuarios de la magia, les habían puesto, hurgando en ese "Velo", tal y como lo llamaban.

Tal y como lo veía el rudo enano, todo el condenado grupo estaba siendo útil... menos él, y eso le enfurecía. No porque se creyese imprescindible, ni mucho menos!! Si no porque, a su entender, se estaba perdiendo la "fiesta", pues su error de distancia con su golpe, a punto había estado de hacerle perder la presa sobre su hacha... aunque, pensandolo bien, eso tampoco hubiera sido un problema para Paexter, acostumbrado, como estaba, a luchar usando su cuerpo, cortando piel, carne y hueso en un abrazo mortal, con las puas de su armadura. - Puagh!! Esa carne debe llevar muerta siglos, asi que, ni por todo el "Lirio" del mundo me abrazaría a vosotros, cabrones!!, pensó, esbozando una sonrisa, cuando por fin fue capaz de controlar el peso de su enorme doble filo.

La tonada de Jarlath había inflamado su ya de por si enorme espiritu de lucha, y, al son de la tonada del bardo, se dispuso a poner un poco de "salsa" al combate. Viendo que la magia de Selene se había encargado, de alguna manera, de paralizar a los muertos vivientes que hostigaban a Lynariel, y sabiendo que la elfa podía encargarse de ellas, echó un vistazo hacia atrás y, rapidamente, decidió que proteger a la maga, a todas luces mas vulnerable que el resto, era su mejor baza, así que, aun sin fiarse de que el cadaver al que se enfrentaba no tratara de aprovechar su maniobra evasiva, se colocó bloqueando el paso a la tevinterana, a la vez que soltaba un hachazo lateral, a media altura, contra el no muerto que trataba de rodearles por el sur de la poza subterranea. Esta vez midió bien la distancia, imprimiendo al golpe la fuerza justa, sobre todo, y de una condenada vez, para empezar a mermar a estas criaturas, cuyo descanso no debía haberse perturbado.

Esos malditos engendros estaban resultando ser mucho más duros y persistentes que los arácnidos del anterior enfrentamiento o al menos así le estaba pareciendo a Lynariel, quien veía cómo su incansable avance parecía no tener fin. Los gruñidos y gemidos inundaban la caverna, mientras la elfa luchaba para alejar el dolor producido por las armas de los muertos.

Una vez más, se vio asediada por dos criaturas: la misma que le había golpeado segundos antes y una nueva, en cuya mirada brillaba el deseo de la sangre dalishana. Sin embargo, no tuvo miedo. Sonrió. Las palabras del bardo le infundían coraje, la necesidad de mantener la posición y detener el avance de los monstruos, que se convirtió en realidad gracias a la magia de Selene.

El enano se apartó de ellas, para contener a una tercera que se acercaba peligrosamente, dejando a la elfa sola para batirse contra ellas. Volvió a sonreír. Sentía que su propio dolor se convertía en energía. Se dejó llevar por la fuerza de las palabras. Las dos criaturas estaban a su merced. Notaba que su Dar'Misaan pedía atravesar la putrefacta carne y devolver a los muertos a las profundidades de donde habían venido.

La elfa concentró sus ataques en la criatura con la que había estado intercambiándose varios golpes. Con suerte, el cuerpo caería desplomado al suelo para no volver a levantarse.

PG: 45/62

Ataque Asalto Completo a Cadáver L15.
1º Ataque:29 ; Daño: 13
2º Ataque: 10; Daño: /

Elijo al Cadáver H-15  para tener un +2 a la CA por la dote "Esquiva".