Partida Rol por web

23:00, Puerto de Ciudad V.

La noche es magnifica. El cielo despejado os deja ver las estrellas con la luna nueva. Hace algo de frio, aumentado por la brisa del mar.

Habeis llegado al lugar de donde sale el barco con las provisiones. Podeis verlo desde vuestro escondite. Hay bastante espacio para esconderse entre las cajas de madera y los dos marineros que lo ocupan no parecen estar muy serenos...

Dejo los prismaticos a un lado y miro a mis acompañantes ¿preparados?, creo que el profesor deberia ir detras de mi no espero y salgo del coche mientras miro el camino que hay que recorrer hasta el bote buscando el sitio mas seguro para llegar a el. Me deslizo pegada a las sombras mientras procuro que no me vean y cuando veo un hueco en su zona de vision me deslizo al bote tapandome con una lona a mi y al profesor mientras espero al resto que traigan el equipo.

Usando mi sigilo, me aproximo lentamente hacia el bota, intentando alejarme lo más posible de los vigilantes, hasta que aborde la embarcación. Una vez dentro, si es posible, busco algo de interés (armas, munición, planos, ordenadores, alarmas, etc etc)

Durante el trayecto, intento adecuarme al rifle laser que Elfred me ha proporcionado, con el fin de sopesar el cambio de volumen, peso, retroceso... con mi anterior arma. Cualquier pequeño fallo puede costarnos la vida, así que no está de más revisarlo todo.

Una vez llegado al puerto, utilizo mi poder para fundirme en las sombras y permanezco estático, cubriendo los movimientos de mis compañeros. Cuando estén todos, iré a su encuentro.

Mientras cubro a mis compañeros, no dejo de pensar en lo ocurrido en la habitación, y mi misteriosa recuperación. Me distraigo intentando ponerle cara a la silueta que vi o me pareció ver, pues ya tampoco estoy seguro de lo sucedido.

Sigo a mis compañeros moviendome sigilosamente de cobertura en cobertura.

Subis al barco y os camuflais entre las cajas sin mucho problema. Los marineros no se preocupan en absoluto de mirar por alli y se quedan en el puente de mando bebiendo y fumando mientras rien a carcajadas.

Poco a poco os vais acercando al un enorme buque mercante. El Esperance. Por lo que veis no tiene casi nada fuera de la bodega, solo el puente de mando y algun que otro barracon para los marinos.

Despues de acercarse por el flanco izquierdo, los marineros empiezan la maniobra de aproximacion. Veis una especie de montacargas metalico sobre vuestras cabezas...

El viaje ha sido tranquilo y calmado. Al llegar miro el barco buscando una manera de subir sin que nos vean mucho, ni a nosotros ni al profesor. Me quedo quieta y sonrio al pensar en algo.
Creo que podriamos subir si nos agarramos a la parte de abajo del montacargas y luego subimos cuando llegue arriba, con esta oscuridad y con lo borrachos que estan dudo que se den cuenta de un grupo de locos colgados de una plancha y la oscuridad es nuestra amiga

El montacargas llega a su destino y los marineros empiezan a mover cajas mientras vosotros os moveis ayudados por las sombras nocturnas. Desde vuestros escondites, podeis ver a dos androides haciendo la ronda. Al fondo, el edificio donde esta el puente de mando.

-La entrada a la bodega esta a la espalda del puente de mando. Debemos movernos con cuidado.

Asiento al profesor mientras me deslizo en las sombras con mucho cuidado de no ser vista. Los androides me preocupan pero no hay nada que un buen disparo no mejore. Me quedo parada contra la pared buscando la ruta mas segura para el profesor, hago una señal a Wakizashi mientras hablo sin voz. Techo sala de mando podras vigilar desde alli por si hay alguien

Me dirigo hacia el lugar que me ha indicado Amanda e inspecciono la zona

Mientras Wakizashi alcanza la zona indicada por Amanda, cubro con el rifle fundido en las sombras, a la espera de cualquier improvisto.

Avanzais sigilosamente hasta la torre donde esta el puesto de mando. Los androides estan mas atentos a las torpezas de los marineros por lo que llegais sin problemas.

Cuando dais la vuelta, veis a dos marineros armados con rifles laser apostados junto a la puerta donde esta el escaner de retina. Estos parecen estar mucho mas serenos que los que os trajeron al Esperance.

Es interesante, dos marineros alli apostados en la puerta. Ideas para pasar por la puerta susurro a mia acompañantes aunque tengo una en la mente solo si tuvieramos un uniforme seria mas facil pero si...Miro a la puerta, es la unica manera de entrar, si tuviera algunos dardos para noquearles pero no habia pensado esa posibilidad en la casa. Miro a nuestro androide tal vez podria funcionar si...
Podiamos usar a nuestro Evo particular para entrar dentro, si le acompañas con tu carisma metalica hacia la puerta y nos dejas algo de tiempo para noquearlos podriamos pasar todos. La otra opcion es que nuestro teleportador me lleve al puente de mando y mande un mensaje a los de la puerta para que se vayan a dar una vuelta

La segunda opción me parece la más viable, aunque desconozco hasta que punto llegan las aptitudes de Wakizashi.

Descarto su primera sugerencia pues no pertenezco ni al mismo modelo ni a la misma compañía que creo a los androides del barco. Si me aproximara levantaría sospechas, es más, estimo que el procedimiento de actuación estandar sería abrir fuego sobre mi.

- Lo que hagamos ha de ser rápido a la vez que silencioso. Podemos aprovecharnos de mis habilidades y las de Wakizashi para emboscarlos, pero siempre puede salir mal. Aun así, si el se teleporta para coger a uno y yo avanzo entre las sombras para encargarme del otro, siempre podeis aparecer a la carrera por si algo saliese mal.

Estoy de acuerdo con nuestro amigo Jack, la emboscada me parece lo más factible. Además, si podemos de alguna forma dejar la zona con poca visibilidad (romper focos o luces que haya en los alrededores) tendremos más posibilidades. Mis dotes de teleportación no me permiten portar a personas ni acceder a lugares que no tengo a la vista, podría ser fatal.

Bien, pues entonces es la hora de movernos, chicos. miro a los soldados de la puerta y asiento Ocupaos los dos de los soldados, pero dejad a uno consciente aunque incapacitado para que me cuente que narices hay tras la puerta por si hay sorpresa alguna y no mancheis sus uniformes, los usaremos para entran dentro con mas seguridad.