Partida Rol por web

Sí, sí lo oigo Lugh negó con la cabeza Pero mejor no buscar el origen. Este lugar esta lleno de trampas

Sonrió a Howard, aunque el gesto fue algo forzado, como si estuviera intentando darle ánimos a pesar de estar el mismo bastante nervioso

Además, es posible que los otros también esté aquí. Tenemos que encontrarle

Alan entrecerró un ojo.

-No voy a por Howard, voy a…no importa. Si vas a ver a Gerard él te lo explicará.

Dicho aquello, corrió hacia su destino sin esperar la respuesta del homre.

La mañana es soleada, cosa que no acompaña demasiado vuestro estado de ánimo. Os atienden a la perfección y os reservan una zona privada en la posada. Al parecer habéis tomado un protagonismo notable en la zona y los detalles de vuestra historia se han ido enlazando para tomar forma.

Habéis pasado de ser unos simples extranjeros a ser el grupo de valientes que intenta liberar a una chica que ha sido secuestrada. Por desgracia los rumores no sirven de mucho en una situación así.

El sabor agridulce de la mañana se enturbia aún más cuando os llegan nuevas noticias por parte del capitán de la guardia. Un par de horas antes del alba, el cuartel ha sufrido un ataque y tras una violenta explosión, los dos prisioneros han escapado. Han muerto varios guardias y alguno de los asaltantes. Por fortuna uno de ellos ha sido capturado con vida y será interrogado.

Cuando os cuenta esta noticia, el capitán de la guardia parece muy afectado. Sin duda alguna no es un suceso muy normal y es preocupante que una banda de delincuentes esté tan preparada y tan dispuesta. En consecuencia, el número de la guardia ha aumentado habiendo también patrullas del ejercito regular.

El capitán os deja a solas, y os informa de que esta tarde espera poder contaros más cosas sobre el ataque nocturno.

Por ahora lo que os queda entre manos en esta mañana es el funeral de vuestro compañero...

Alan bosteza tapándose la boca mientras se esfuerza por buscar una mesa vacía. Cuando la encuentra conduce a sus compañeros hasta ella y llama al camarero para que les traiga algo de comer. Una vez éste se ha marchado, mira la mesa con incomodidad. Aunque su expresión apenas ha variado una o dos veces desde que lleva con aquella gente Alan tiene sentimientos, y ahora se siente incómodo.

-Eh...¿Cómo habéis dormido?

Tose y se llena un vaso con agua, rehusando mirar a nadie a los ojos.

Lugh estaba desayunando un par de hogazas de pan y algo de arroz con sorprendente avidez, como si llevara varios días sin comer. Era sorprendente lo que podía comer ese chico, y más siendo tan pequeño y atlético. Entre bocado y bocado, miró a Alan de reojo y sonrió

De lujo. Hacía días que no dormía en una cama mullida. ¡Estoy hasta arriba de energías!

Acompañó su última afirmación con otro bocado bastante grande, metiéndose en la boca más de lo que podía abarcar

Media hora antes...

Lugh llamó a la puerta de Luz con un par de toques, aún quitándose las legañas de los ojos. No esperó ni un par de segundos antes de abrirla, sonriente

¡Buenos días!

Me muevo apenas de mi vela, al descubrir que los demás ya se han levantado.

-Yo, no he podido dormir. Tenía... tenía que permanecer en vela.

Luz te recibe también con una sonrisa. Es consciente de la tragedia ocurrida el día anterior, pero no le pillaba de cerca. por su parte te lleva junto a la cama donde está sentada "vuestra" hermana.

-¡Despertó esta mañana!.

Después de eso, un torrente de palabras te asalta por parte de las dos chicas. Ambas te cuentan lo sorprendente de ese encuentro y lo triste que es la desaparición de Rev. Se pisan la una a la otra con sus palabras en una frenética charla de datos que comparten contigo y entre ellas.

Sabes que es normal, que sin duda alguna se están conociendo y sin duda alguna son hermanas...

Cuando parece que la cosa se va calmando un poco, Luz (que siempre te ha tenido en cuenta dentro de la conversación aunque sin darte tregua para hablar) se dirige a ti.

-¿Qué haremos ahora Lugh? !Tenemos que encontrar a nuestra hermana¡ ¿por qué se la habrán llevado?-te pregunta mientras en su mirada es consciente de que ella puede ser la causa, pero si son hermanas ¿por qué ella va a ser diferente?¿serán las tres iguales?

Lugh sonrió, animado

Claro que tenemos que ir a por ella. La cuestión es, ¿por dónde empezamos?

-Pse... - Contestó con desanimo Howard. Los acontecimientos se precipitaban demasiado rápido para lo que él estaba acostumbrado.

Además ¿Que había ocurrido la noche anterior?. Miró de reojo a Lugh esperando encontrar una respuesta o algún gesto cómplice.

¿Lo habría soñado todo de verdad?

Alan carraspeó sin añadir nada más y sin mudar su expresión. Empezó a atacar su plato en cuanto el camarero lo hubo traído, asegurándose de mantener la boca siempre llena para no tener que hablar. Cuando acabó, recordó algo.

-¿Qué ha pasado en el cuartel general? Tú, eh...¡Nyphel! Fuiste allí cuando yo me iba, ¿No? ¿Descubriste algo? 

Luz se reúne con vosotros con una amplia sonrisa, aunque al observar vuestros rostros la oculta y se sienta en silencio a la mesa.

Durante unos instantes apenas os lanza cortas miradas para observar vuestro estado de animo y tras comer algo de pan de forma distraída deja salir una pocas palabras sin saber muy bien cómo hacerlo.

-La...lamento lo de vuestro compañero...y gracias por ayudarnos...

Inclina levemente la cabeza al decir esto.

Lugh tragó su último trozo de pan y lanzó un suspiro, satisfecho

Bueno, queda decidir que vamos a hacer. ¿Vamos a seguir juntos todos?

-No... no averigüe nada. Por lo demás, tenemos que apurtarnos. La muerte de nuestro hermano no será en Valde.- Digo con desición y el puño cerrado.

¿Y por dónde empezamos?

-Tendríamos que ir a hablar con el capitán, anoche pareció preocupado de verdad, quizá hayan averiguado algo con el interrogatorio al prisionero.  - Intervino Howard.

-Yo.. creo que deberìamos resolver primero el misterio de las hermanas. Mi... nuestro hermano muriò por lo que creyo justo, debemos honrar su memoria- digo apretando mis puños

¿Qué misterio? Miró a Ai ¿Vosotras no sabéis nada, no?