Partida Rol por web

La Clepsidra

La Camella Preñada, la mejor taberna de Agavé

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13/10/2013, 01:45
Director

Tras varios días nublados e incluso algunas lluvias, había amanecido completamente despejado, y muchas caravanas de comerciantes se apresuraban a comenzar muy temprano su viaje hacia donde quiera que fueran, llevando con ellos su mercancía por la que con toda seguridad sacarían un buen pellizco. El negocio que Melek había montado hacía años iba estupendamente, ya que lo había emplazado justo en medio de donde se cruzan las rutas comerciales de los principales pueblos de Agavé**. Esto sumado a la excelente comida que servían y al buen servicio había resultado en un lugar de visita obligada a todo el que pasara por las cercanías de Nar.

Notas de juego

** He decidido cambiar la localización de tu taberna a un lugar cercano a Nar, ya que es donde confluyen las rutas comerciales de Uru, Arna, Tao y Aku. Me parece que tiene más sentido que todas las caravanas de comerciantes paren allí, a ponerla en un extremo del mapa por donde nadie tiene que pasar. Además, de este modo todos los personajes pasarán por allí obligatoriamente en algún momento. De todos modos, esto lo podemos hablar, de momento sólo puedes leer esto tú :)

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13/10/2013, 02:04
Zoulaima

—¡Melek! ¡Melek! —llamó Zoulaima—. ¡Acaba de llegar una paloma! Creo que viene de Aku, seguramente de Maba Gathra. Trae un mensaje escrito en papiro, y viene codificado.

Notas de juego

El mensaje no viene realmente codificado, sino que está escrito en tu lengua del año 3121.

Ayub debería estar en La Guarida enseñando a Yuna y Andrew lo básico sobre Agavé. Les puedes enviar una paloma. Tú eres bastante bueno en criptografía, pero Ayub es un verdadero experto en ese tema.

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13/10/2013, 08:49
Melek

Melek estaba limpiando un cuenco, ayudado por Shemei. -Vamos a ver, pequeña...- le explicó pacientemente.- No se trata solo llevar la bebida a una mesa. Tienes que aprovechar para preguntarles sus nombres, sus destinos, sus historias... ¡Todo! La gente quiere contar qué hace y le gusta que le escuchen.- Le dijo sonriéndole, a la vez que le ponía el trapo juguetonamente en la cara a la pequeña picaruela.- Y a nosotros nos gusta escuchar, porque las historias que nos cuentan pueden valer su peso en grano para alguien. ¿Vale?-

Shemei le sonrió con sus ojitos brillándole y se abalanzó sobre Melek, abrazándolo por la cintura.- Veeenga, ves a "jugar" entre las mesas, a ver que encuentras hoy.- Claudicó Melek, devolviéndole cariñosamente el abrazo. La niña se alejó correteando entre las mesas de los pastores que estaban cerca del abrevadero. Suspirando, Melek sonrió, pensando que la pequeña le tenía conquistado el corazón hasta que, instintivamente se llevó la mano al zurrón. -¡Oh! ¡Pero será...! ¡JA!- El comerciante no pudo evitar soltar una carcajada al notar que en el abrazo Shemei le había birlado el juguete que le había confiscado antes. La pequeña Shemei era buena. Muy buena.

Entonces escuchó el grito de Zoulaima desde las cocinas.-¡Voy!.- Dijo dejando el trapo sobre la barra. Una vez allí la joven le mostró el mensaje.- Gracias Zoulaima.- le agradeció, mientras cogía el trocito de papel.- ¡Ah, por cierto! Nuestro viejo amigo Sul ya está bastante borracho, habla un rato con él, puede que suelte la lengua y sepamos exactamente qué diablos lleva en la caravana. Últimamente viaja mucho a Tao y nunca lleva grano...- La joven Zoulaima le sonrió, entendiendo perfectamente a qué ser refería Melek.

Iba caminando hacia la parte trasera de la taberna, mientras leía y descodificaba mentalmente el mensaje.- En la parte posterior estaba Misei, colgando mantas recién lavadas, la cual, al ver la cara de Melek le preguntó. -¿Malas noticias?.-

-Mmmm... no... creo que no.- Dijo inseguro Melek.- Pero deberé ausentarme unos días. La vieja Mazra me reclama de nuevo, pero antes debo encontrar a Ayub. Si por mi fuera me qued... ¡AUCH!.- La vieja Fadoua, que estaba sentada junto a la puerta desgranando higos secos le acababa de arrear un bastonazo en la espinilla.

-Si Mazra te llama es porque ya deberías estar allí y no aquí.- Le espetó, amenazándole con el temido bastón. Para tener la edad que tenía Fadoua se conservaba fuerte y agil. Tenía la mente muy despierta y la mirada de una víbora del desierto. Además, su puntería con ese bastón... Melek todavía recordaba los gritos de dolor y agonía de un joven que intentó propasarse con Misei hacía unos días. Ese joven tardaría varias semanas en poder mear sin problemas.

-Pero bueno, ¿Y que iba a saber yo?.- Se quejó, mientras se frotaba.- Solo decía que...¡AUCH! ¡AU! ¡Vale, Vale, ya me voy!.- Dijo protegiéndose de la lluvia de bastonazos, retirándose hacia las habitaciones. De fondo pudo escuchar las risas de Misei, diciéndole alegremente a la vieja.- Algún vas a sacar el ojo a alguien, yaya...-

Aunque rara, a su manera eran una familia. Eran su familia.

Notas de juego

Pues eso. Desconozco si tengo que esperar a Ayub en la taberna. Si no es así cojo los bártulos y a mi camello y me voy para Aku.

De la localización de la taberna, me parece perfecto. De hecho como bien dices tiene más lógica.

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13/10/2013, 10:29
Director

Notas de juego

Me encantan los post de Melek, siempre me sacan una sonrisa, y si no una carcajada:D

Para avisar a Ayub debes enviarle una paloma, a menos que quieras ir personalmente a La Guarida, que tardarías entre 1 y 2 días. Él iría a La Camella Preñada y ahí tú le esperarías. (Lo pongo todo en condicional porque cada uno es libre de decidir qué hace y qué no hace). Si le escribes una carta, yo me encargaré de hacérsela llegar a La Guarida.

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13/10/2013, 18:26
Melek

Notas de juego

Ok, pues para no alargar escenas en solitario supón que le envio palomaemail a Ayub. Mientras tanto (los dos días que supongo que tardaría Ayub en llegar a La Camella Preñada) me dedico a preparar el petate, camellos incluidos, tanto para mi como para Ayub, de manera que, si quiere, puede descansar un día, y luego partir inmediatamente hasta Aku.

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13/10/2013, 19:42
Director

Notas de juego

Muy bien, me he tomado la libertad de enviar una carta en tu nombre :P    No sé si hubieran sido tus palabras, o si esta sería tu letra, pero como he enviado también la que te llegó a ti, consideré que era mejor hacerlo así.

 

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14/10/2013, 11:25
Melek

Notas de juego

Perfecta, gracias ^_^

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15/10/2013, 20:43
Director

El viaje había sido duro. A veces había hecho mucho calor, a veces mucho frío, y el viento había molestado bastante, pero afortunadamente no habían sido asaltados por bandidos. Desde la distancia, desde una pequeña montaña, Andy y Yuna habían visto por primera vez el pueblo de Nar en la distancia, el primer pueblo que veían con sus propios ojos en aquel lugar.

Pero no tenían tiempo de parar por allí. Debían llegar cuanto antes de La Camella Preñada, pues Melek saldría al día siguiente por su cuenta si no lo hacían. No tardó en aparecer un lugar con un considerable tráfico de comerciantes con sus dromedarios, y en ocasiones también llamas. Era el lugar que estaban buscando.

Notas de juego

Se supone que llevas la paloma de Melek de vuelta, y si quieres también alguna paloma que tengas en La Guarida, para que la alimenten allí.

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15/10/2013, 20:47
Fadoua

Al llegar a La Camella Preñada, una señora se acerca a Ayub y lo golpea con su bastón en la cabeza.

—¡Menudo sinvergüenza estás hecho! —gritó enfadada—. ¡¿Cómo te atreves a estar tanto tiempo sin pasarte por aquí?! ¡Vergüenza tendría que darte, Ayub! —dicho esto deja caer el bastón al suelo, agarra a Ayub la cabeza y le da un beso en la mejilla—. Anda, no te entretengo más porque Melek te está esperando ahí dentro, ¡pero que sea la última vez que te pasas tanto tiempo sin visitarnos! Habráse visto... menudo sinvergüenza estás hecho. ¿Y esos que vienen contigo quiénes son? El chico es guapo, pero la muchacha tiene una cara un poco rara, ¿no? —se acerca a Yuna y le agarra la cara con las dos manos, mirándola de frente y moviéndole la cabeza de un lado para otro para ver mejor sus ojos—. ¡Chica! ¡Qué ojos más raros tienes!

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15/10/2013, 22:54
Yuna Iseki

Aquel lugar era bonito, todo había que reconocerlo, pero claro, sería bonito para estar de vacaciones, no para hacer lo que teníamos que hacer nosotros y menos, disfrazados con túnicas, sin luz... El infierno tenía que parecerse a este sitio. De todas maneras, no era de esas que se están quejando todo el rato por todo aunque pensaran que tenían motivos para hacerlo, así que simplemente fui una buena chica y guardé silencio.

La señora echándole la bronca a Ayub me hizo sonreír, aunque intenté no soltar una carcajada para no llamar la atención. Seguramente la mujer fuera menos vieja de lo que parecía, que lo parecía mucho, pero con tanto sol y un clima tan árido... lo raro sería que no estuviera como una pasa y con la piel en aquel estado.

- ¿ Cómo?

Borré mi sonrisa de repente mirando de reojo a Andrew.

- ¿ Que tengo la cara rara?

Tardé un poco en darme cuenta de que Ayub me había dicho que no habían visto una japonesa en su vida, aunque no hubiera nacido en japón, en apariencia como si lo hubiera hecho.

No tardó en agarrarme la cara y en comenzar a movérmela, como si fuera un animal que estudiar.

- Podían ser más raros y ser naranjas... - Respondí tratando de hacerme la tonta.

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16/10/2013, 18:47
Melek

La Camella Preñada, como siempre, estaba a rebosar. El trasiego de entradas y salidas de caravanas y demás comerciantes hacía bastante difícil moverse entre las mesas. El humo, las risas y el bullicio de las terrazas no ayudaba precisamente a un ambiente relajante, pero la taberna, aún así, estaba llena.

-El cordero para la noche, muy hecho.- De una cortina trasera apareció la espalda de Melek. Su cabeza seguía metida en lo que parecía ser la cocina.- También me han pedido que sazonemos la carne sobrante para que puedan llevársela para el viaje. ¡Ah! Y a Miurlel aguadle el vino, que lleva varios días sin pagar la cama...- Saliendo totalmente, Melek vió a los tres recién llegados, iluminándosele  la cara con una radiante sonrisa.

-¡AYOUB!- Gritó alegremente, a la vez que salió con los brazos totalmente abiertos. En pocos pasos se plantó frente a su amigo y le abrazó efusivamente.-¡Bienvenido! ¡Bienvenidos!.- Saludó Melek a los tres.- ¡Andrew, Yuna! ¡Pasad, por favor! A partir de ahora esta es vuestra casa. Mi taberna es vuestro hogar. Pasad, pasad...- les indicó para que entrasen a la parte trasera.-Fadoua, Miurlel sigue sin pagar. Encárgate de recordárselo, por favor. Y deja los ojos de Yuna en p... ¡OUCH!.- Melek no se libró del bastonazo antes de la vieja se fuera hacia una de las mesas, farfullando y murmurando. Una vez lejos de los oídos de la vieja, Melek confesó.-Si existe infierno, el demonio en persona se encargará de que esa vieja no entre en él... ¡Le quitaría su trabajo!.- dice guiñándoles un ojo.

Dentro de la cocina hacía calor. Dos hornos de ladrillos estaban a pleno fuego, mientras que otras tres ollas grandes cocían lo que parecía ser unos guisos que olían a gloria. Una chica joven sudada y vestida con lo que parecía ser un sari oscuro cortaba rodajas de pan y las colocaba en un cuenco.-Os presente a Zoulaima.- dijo Melek. Mientras, de la cortina que habían atravesado, apareció otra joven, ligeramente mayor que la anterior y un poco más rellenita, portando una bandeja de mimbre cargada de cuencos.- Y esta es Misei. Son como si fueran mis hijas.- Presentó con orgullo Melek. Después, mirando a su alrededor, como buscando a alguien más, finalizó.- No veo a la pequeña Shemei, pero seguro que está entre las mesas, ayudando. Si perdéis algo, preguntadle a ella.- les advierte alegremente.

Tanto Misei como Zoulaima sonrieron cálidamente a los tres. Misei se acercó a Yuna, y cogiéndole cariñosamente de las manos le miró fijamente a la cara.- A ver, déjame verlos.- Le dijo a Yuna, mientras le examinaba atentamente los extraños ojos.- No dejes que Fadoua te asuste. Tienes unos ojos preciosos.- Concluyó, mientras su hermana desde el fogón sonreía y asentía energicamente.

Melek, por su parte, había ya colocado unas sillas de mimbre y una mesa de cañas en la terraza trasera, sirviendo varios vasos de vino y platos de frutos secos con carne curada.- Venid, por favor, sentaos conmigo a comer algo. Así podremos hablar tranquilamente, y luego si queréis, podremos ir a la fogata a bailar con los caravanistas o bien a dormir, que mañana tendremos que partir a Aku. Ya tengo vuestros petates preparados con comida.- Melek se sentó cruzando los pies, a la vez que les hacía aspavientos con los brazos para que se sentaran. 

Notas de juego

Bueno, ya conocéis a Fadoua... manteneos lejos de su bastón XDD

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16/10/2013, 23:55
Ayub Essoh

El recibimiento por parte de la vieja Fadoua fue el esperado, ya estaba acostumbrado a ello cuando sus visitas se espaciaban demasiado en el tiempo, por lo que aguantó estoicamente sin perder la sonrisa esquivando el palo de la mujer, y luego girándose para observar el tratamiento que recibía Yuna, apartando a la vieja antes de que a la chica le diera por enfadarse o algo, pero no hizo falta, se quitó solita.

No le hagas mucho caso, pero tendrás que acostumbrarte, como yo hice, opté por el negro simpático en lugar de por el negro tenebroso sus blancos dientes se hicieron más visibles y ten cuidado con lo que les dices, suelen tomarse las cosas bastante al pie de la letra.

Colocó una mano en la espalda de Yuna para indicarle que pasaran un poco más adentro, pues ya había visto acercarse a Melek, al cual devolvió con la misma efusividad el abrazo y dejó que hiciera... bueno, que hiciera de Melek, no había una definición buena para describir a su compañero y amigo.

También saludó a las “hijas” del posadero con cordialidad y familiaridad, instando a la joven pareja de recién llegados al desierto a sentarse a comer en la mesa de Melek.

Sentarse con el dueño viste mucho por aquí comentó alegremente, aunque una vez estuvieron acoplados, se puso un poco más serie mirando al hombre es un poco pronto para ellos todavía, apenas he tenido tiempo de instruirles y conocen el idioma de forma rudimentaria voz baja y asegurándose de que solo él lo oía, algo no muy complidado debido al perenne bullicio de la posada.

Que decidan ellos lo que quieren hacer, tal vez divertirse un poco sea una buena opción antes del viaje.

Comentó ante la sugerencia.

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17/10/2013, 23:29
Yuna Iseki

A mí esa vieja me había dado bastante miedo y aunque había intentado no ofenderla, puesto que siendo una rancia seguro que llamaría la atención de la gente, es difícil saber qué responder cuando te dicen que eres rara.

- No me sale eso de sonreírle a la gente que me dice que soy rara... - Al menos, no me salía así de primeras, pero estaba claro que tenía que practicar un poco con eso de intentar ser agradable. Yo era médico, no un político ni una relaciones públicas.

- Hubiera sido más grosero mandarla a la mierda o no decirla nada ¿ no? - Repliqué mientras caminaba detrás de Ayub que era el que más hablaba de mis compañeros, porque Andrew no solía estar demasiado de cháchara y yo no llevaba muy bien eso de estar todo el día " conmigo misma ", era aburrido.

Al ver aquella posada recordé su nombre y se me pasó un poco el " susto " tras el asalto inicial de la vieja.

- La Camella Preñada... - Negué con la cabeza. - Desde luego se lleva el premio a la originalidad con este nombre...

A parte de un halago, era claramente lo que pensaba, por lo que lo dije para Melek, antes de que empezara a presentarnos a todo el mundo y darnos la bienvenida.

Fui saludando a sus " hijas ", quizás preguntaría después al respecto de esto a Ayub, pero cuando no estuviéramos con Melek, pues no quería que pensara que era una entrometida o que le estaba faltando al respeto en su casa. Era cosas de esas que simplemente llaman la atención de una.

Una de aquellas chicas se acercó a mí, aunque desde luego, de manera menos invasiva y me quedé mirándola cuando se puso a observar mis ojos. Uno de esos momentos incómodos en los que una no sabía si parpadear o no.

- Gracias... - Respondí un poco cortada.

Yo para comer siempre estaba dispuesta, aunque fuera difícil imaginar que alguien tan delgado como yo era capaz de tener tan buen apetito.

A mí eso de ir a bailar no me apetecía. Era más, no sabía bailar y para mí que aquí lo que se llevaba era eso de la danza de los siete velos...

- Creo que deambularé por aquí hasta mañana.

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18/10/2013, 00:28
Dr. Andrew Black

Según llegamos a la taberna, vimos a una anciana, que lo último que pensaba era que fuese tan energética. Lo primero que hizo fue echarle la bronca al pobre Ayub y no se cortó en expresar sus primeras impresiones que obtuvo de mi y Yuna .

Espero que no se fije mucho en mi, cuanto menos llame su atención mejor, no querría probar su bastón muy a menudo. Pensé.

Crucé la vista con Yuna y me entró una risita interior.

Acto seguido llegó Melek y soltó su discurso. La verdad es que me alegraba de verle, aun sabiendo que solo nos habíamos visto un par de veces, veía a los de mi época en las pocas personas en las que podía confiar, aunque supiese que eso no tenía mucho sentido. Empezó a presentar a todo el mundo, Andy saludó educadamente pensando:

Vaya negocio que se ha montado, desde luego es un buen hombre de negocios.

Tras esto se sentó en la mesa con Melek y el resto de grupo tenía ganas de hablar de lo que iban a hacer. Aunque pensó que lo del baile y la fiesta quizás sería más apropiado para cuando conociera un poco más las costumbres, porque las posibilidades de cagarla, sobre todo con unos cuantos vinos encima sería bastante alta.

 

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18/10/2013, 02:22
Director

Notas de juego

A la mañana siguiente saldrán temprano hacia Aku. ¿Les parece bien que cuando escriba mañana empiece con esto? ¿O hay algo que quieran hacer en La Camella Preñada antes?

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18/10/2013, 10:30
Melek

Melek sonríe animadamante. Tener invitados en su casa y volver a encontrarse con su amigo Ayub le alegraba enormemente. Pero estaban allí por "negocios". No eran negocios monetarios, si no negocios de supervivencia. La supervivencia de la raza humana. Todos los de la mesa conocían la Clepsidra y todos sabían cual era su misión.

-Comed, por favor, coged fuerzas. Mañana será un día duro, pero no os preocupéis, los camellos están frescos y tendremos comida más que suficiente.- Les dijo mientras cogía un dátil y lo mordisqueaba distraídamente. Entonces, el ruido de unos pasitos cortos precedió la llegada de una niña pequeña y risueña. Vestía una simple túnica sucia y tenía una mirada y una sonrisa dulce, pero la palabra que la definía a todas luces era picaruela. Shemei correteó hasta Melek y se le lanzó a los brazos.-¡Eh! ¡Shemei, cuidado!- gritó, mientras cogía a la niña en brazos y se la sentaba entre la piernas cruzadas. -Mira quien ha venido, el viejo Ayub.- Le dijo a la niña mientras esta sonreía tímidamente y le saludaba con su pequeña y adorable manita.- Ha venido con unos amigos míos, se llaman Andrew y Yuna. Son amigos ¿vale? Así que lo suyo es mío y lo mío es suyo. Nada de encontrar sus cosas ¿de acuerdo?- le dijo a la niña en un lenguaje que parecían compartir ambos y que, seguro, significaba mucho más.

La pequeña Shemei asintió enérgicamente, entonces se fijó en los extraños ojos de Yuna, quedándose con la boca abierta y sin pestañear, observándola todo el rato sin apartar ni un momento la mirada. Quedándose sentada entre las piernas del comerciante, con la mirada fija en la japonesa, empezó a jugar distraídamente con la barba de Melek.

-¿Recibiste la carta de Aku entonces? Parece ser que la vieja quiere vernos, y pronto. Dijo a Ayub. Después, girándose hacia Andrew y Yuna, se disculpó.- Siento que no hayáis tenido más tiempo para adaptaros, pero parece urgente.- Señalando con un brazo la posada, les dijo.- Esta es vuestra casa. Yuna, tú dormirás en la habitación de las mujeres, junto con Misei, Zoulaima y mi pequeña Shemei. Fadoua también tiene cama, pero suele preferir dormir junto al fuego. Puedes confiar en ellas, saben porqué estamos aquí, y yo les confiaría mi vida.- Girándose hacia Andrew, le comenta.- Nosotros tenemos otra habitación. Ayub ronca un poco, aunque no lo quiera reconocer, pero cabemos cómodamente los tres.-

Mientras, Shemei seguía con la boca abierta y la vista fija en Yuna. Cuando se cruzaron sus miradas, la pequeña iluminó su rostro con una sonrisa radiante.

Notas de juego

Por mi parte nada más. Solo pasarles el mensaje de la Maba Gathra. Cuando queráis podemos partir.

Cargando editor
18/10/2013, 11:02
Director

Notas de juego

He puesto de momento el mensaje para que sólo tú puedas leerlo. Todavía lo estoy leyendo yo, pero ya he visto que has puesto el mensaje de Maba Gathra. He hecho como que la paloma que enviaste a Ayub tenía los dos mensajes, el tuyo y el escrito por Maba Gathra. Disculpa por no haber avisado :S

Leído: vale, creo que en general ser puede quedar como está, sólo cambiando un poco lo de la carta. ¿Te parece bien? 

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18/10/2013, 11:08
Melek

Notas de juego

Como quieras. Ahora ya no puedo editar el mensaje. Si quieres puedes borrarlo o modificarlo según creas conveniente, más que nada era para presentar a la pequeña Shemei, cerrar la escena de la taberna e irnos a dormir. ;-)

Cargando editor
18/10/2013, 11:12
Director

Notas de juego

Listo ^^ Apenas he borrado unas pocas palabras y he cambiado un par más. Esta tarde me pongo con la siguiente escena.