Partida Rol por web

Más que humanos

.: Capitulo 1: H.U.M.A.N.S. :.

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16/12/2009, 00:41
Director

 

Algunos os vais despertando lentamente sobre unos colchones duros. A medida que abrís los ojos, podéis ver vuestro alrededor. Las celdas en las que estáis prisioneros están completamente cubiertas de una especie de plástico blanco sobre las paredes, el cual parece resonar de vez en cuando con un zumbido extraño. Las rejas son de metal, pero lo que a simple vista parece un metal común y corriente, también resuena en una frecuencia extraña cada cierto tiempo.

Por no hablar de que todos los cuartos dónde os encontráis parecen moverse como si de un terremoto leve se tratara.

En ese momento, podéis ver a dos personas vestidas con monos blancos y con el logotipo de HUMANS en sus pecheras. Llevan a una chica ( Alejandra ) que no para quieta. Es una pelirroja con el pelo corto, vestida con uniforme de algún instituto de alguna parte del mundo. La chica lucha contra los hombres pero al parecer aún está aturdida y la arrojan dentro de una de las celdas con fuerza.

Al cabo de un rato, también traen a un chico desmayado. El chico ( Edie ) lleva ropas formales, las que puede llevar un tio normal y cuando llegan a su celda, también lo echan al suelo, dejándolo allí mientras poco a poco se despierta.

Las celdas tienen esta forma, de manera circular, se agrupan en dos pisos. Podéis veros unos a otros en cada piso, ya que en las paredes hay ventanucos con las mismás rejas vibrantes de la entrada. Son celdas bastante amplias dentro de lo que cabe, o por lo menos, mucho más amplias de las que podéis ver en las peliculas. Cada una tiene un catre embutido en la pared, una mesa y una silla de plástico y un vater pequeño para hacer vuestras necesidades, claro, a la vista de todos.

En el centro de las celdas, colgando desde el techo, hay una especie de pantalla hexagonal, la cual también podéis ver todos desde la entrada de las celdas. En la pantalla se puede ver el logotipo de HUMANS en rojo, sobre un fondo negro.

 

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16/12/2009, 00:53
Salamandra

 

En ese momento la pantalla titila hasta que de repente, aparece un rostro desconocido para todos vosotros.

Bienvenidos a H.U.M.A.N.S. Dice el hombre de la pantalla esbozando una sádica sonrisa. Estamos muy contentos de teneros entre nosotros y como veráis, podéis encontrar todas las comodidades en vuestras celdas.

El hombre se aleja un poco de la pantalla y se sienta en un sillón realmente futurista en donde toca unos botones de uno de los apoyabrazos y continúa hablandoos.

Las celdas están programadas para resonar con vuestros poderes, por lo tanto, vuestros poderes no funcionan dentro de esas celdas. Por supuesto que no. Además, si queréis escapar, os advierto que las rejas están cargadas con una especie de campo electromagnético, el cual no es letal, no, pero os aseguro que quema y además, aturde como si un caballo os pateara en la nuca. Continúa el tío, ahora serio. Pero podéis hablar entre vosotros, claro, no somos tan malos. Como cada uno ha llegado de una parte distinta del globo, bueno, podéis conoceros si queréis o quedaros en vuestras celdas calladitos. Mi jefe vendrá a veros enseguida y a saludaros. Disfrutad de la estancia.

Y la pantalla se vuelve al logo del principio.

 

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16/12/2009, 00:53
Director

Notas de juego

[MdM]

Estais todos en el mismo piso, por lo que podeis veros y hablar tranquilamente.

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16/12/2009, 12:51
Lily Evans

Lily se levanta un poco mareada aún. Se lleva una mano a la cabeza y poco a poco va despertando. Lo primero que ve es como meten a dos personas en una especie de celda que....¡Ella también está en una! Malditos cabrones.

No le da tiempo a quejarse, ya que nada más levantarse, en la pantalla aparece un hombre extraño. ¿Poderes? ¡Ahora va a resultar que en realidad sí tiene poderes! ¡Pues menuda gracia!

No se ve, pero por dentro está maldiciendo a toda la família de ese hombre, aunque por fuera se ve a una niña delicada y mona sonriendo, dando vueltas por la celda. Encontraría una manera de salir aunque fuese lo último que hiciese, que probablemente así sería.

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16/12/2009, 14:00
Edie Crawford

Crawford creía que le iba a estallar la cabeza en mil pedazos. Aquel dolor se concentraba en la base de la nuca y se convertía en una balsa de lava candescente que le quemaba por dentro.
Joder... Intentó hablar pero las palabras se perdían en el camino. No alcanzaba a articular ningúna de ellas.
La luz parpadeante le asaltaba a los ojos como multitud de punzas que insistían en desgarrarle las córneas. Realmente estaba jodido. Aquella mierda que le inyectaron le dejó peor que un yonki al borde da la sobredosis de haco.
Tardó un largo rato en poder fijar la vista en aquella pantalla que destellaba un extraño fulgor monocromo. O almenos aquello era lo que le parecía a Edie. Poco a poco aquella balsa de lava se fué transformando en una de aceite mas liviana y tranquila. Aún no se atrevía a ponerse en pié, por lo que se quedó sentado contra la pared de aquella celda.
Entonces aquel tipo cerró la comunicación.
-¿Poderes...?- Preguntó para si mismo en voz alta. -Mierda... ¿Que significa todo esto? ¿Donde estoy?...- Edie se tambalea con una mano en la cabeza y un gesto de punzante dolor.
Se esperaba lo peor. Haber caido en manos de una sécta. O incluso de traficantes de órganos... -Jodidos tarados...!- Exclamó

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16/12/2009, 15:51
José Luís Torres

Cuando oigo el puto zumbido resonando en mi cráneo, me hago un ovillo en la cama.

- No. No. Cinco minutos más. Otro puto lunes más, no - murmuro. Y de repente, recuerdo. Pego un bote que ni los olímpicos y me siento bruscamente sobre el colchón. Mala idea. La cabeza me zumba como las maracas del Machín, como cien indios bailando la danza de la lluvia, como mil jodidos enanos pegando martillazos contra mi sesera mientras gritan como cabrones. A punto de echar la primera papilla, entierro la cabeza entre mis rodillas, esperando a que la cosa se me relaje un tanto. Pero no resulta demasiado sencillo, porque parece que estoy montado en un vibrador gigante, y la habitación tiembla más que la cintura de la Vanne cuando me dice que quiere ponerse arriba.

A pesar de todo, el dolor de cabeza acaba disipándose un tanto al cabo de un rato y me permito el lujo de mirar alrededor. Una habitación blanca que saca más ruidos que una jaula de grillos. Un televisor de plasma para ver la superbowl y un cagadero. ¡Vaya! Me he muerto y esto es el paraíso. salvo por las rejas, es casi perfecto. Me pongo en pie y me acerco a los barrotes. Justo entonces veo llegar a un par de gorilas cargando con una nena que arrojan como un fardo a una celda igual a la mía. Y sin transición, se van para traer a otro fulano que sigue el mismo camino que la colegiala. Pero ese logo, ¿de qué me suena?  Vaya, parece que se despiertan.

Y justo entonces empieza la transmisión pero, por desgracia, no se trata de béisbol. Un macarra amariconado empieza a soltar gilipolleces con voz de vicetiple. Lo malo es que tiene la sartén por el mango y si lo que dice es cierto, lo tenemos chungo. Cuando se calla, la pantalla se cubre con la palabra H.U.M.A.N.S. la he visto antes. ¡Coño! El estadio, la carpeta, la furgoneta, LA AGUJA. Todo me vuelve rápido a la cabeza. Este puto día infernal, este jodido lunes de mierda. ¿O será ya martes?

No tengo ni zorra idea de lo que pinto aquí. Pero me huele fatal. Tengo grabadas a fuego las palabras "Capturar o eliminar". ¿Hablar? ¿Con quién? ¿Para qué? Tengo un agujero en el estómago de dos hectáreas y estoy cagado de miedo. Menos mal que tengo dónde tirar lo que me sobra sin necesidad de hacérmelo encima. Así que vamos a sentarnos con calma y a ver qué mierda nos cuentan. ¡Mierda, mierda, mierda! Para qué cojones me habré levantado hoy de la cama. Si ya digo que no hay lunes bueno.

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19/12/2009, 22:55
Carcelero H.U.M.A.N.S.

 

¡Hora de comer! Gritó un hombre jóven, de unos veinte años que se acercaba a cada una de las celdas con un carro con bandejas.

Paraba en cada una de las celdas para dejar una bandeja por una abertura entre las rejas al ras del suelo y continuaba su camino hacia la siguiente para repetir el proceso de dejar la bandeja.

¡Vamos! ¡Despertad y comer! Mi jefe os quiere con fuerzas para cuando él llegue, así que no le hagáis asco a la comida que está muy rica.

El chico se retira y os acercáis a ver que hay en la bandeja. Cuando la abrís, veis un plato con una especie de sopa pastosa blanca con grumitos blancos, que os recuerda mucho al suplemento de proteínas que comían en Matrix, y un vaso de agua de medio litro. Tenéis cubiertos, sí, son de plástico. Una simple cuchara y nada más.

El tío raro que os dejó la comida se retira silbando bajito una cancioncilla.

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20/12/2009, 03:31
Alejandra

Poco a poco empiezo a percibir sonidos muy difusos, trato de levantar la cabeza pero parece que me pesa mucho ¿Que ha pasado?... en ese momento recuerdo el pinchazo en mi cuello , cuando trato de moverme me doy cuenta de que me están llevando a algún lado Dejadme.... digo apenas susurrando.

Tras el golpe con el suelo de la celda tardo un par de minutos más a reaccionar ¿QUE HAGO AQUÍ?, SOLTADME , NO, QUIERO IRME SOLTADME grito mientras me acurruco en una de las esquinas más alejadas de la celda

¿Poderes?, ¿pero que esta diciendo? digo tras escuchar el mensaje del hombre en la pantalla. Cuando se abre la ranura y dejan la comida me quedo observando el mejunje desde mi esquina Quiero irme a casa... pienso mientras una lagrima empieza a recorrer mi mejilla

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20/12/2009, 21:46
José Luís Torres

Cuando el bocazas de turno empieza a gritar diciendo que es la hora de tapiñarse algo, es cuando me siento verdaderamente en una cárcel. Con resignación, me incorporo de la cama y me acerco a la bandeja que me han plantado, como si esto fuera una jaula enorme y yo el hámster con el que van a jugar. Le pego un vistazo al pienso y reconozco que tiene mejor pinta de lo que yo puedo llegar a cocinar, cosa no muy difícil por otra parte. De hecho, se nota que está hecho con amor, pues veo que tiene grumos, igual que la comida casera de mi madre.

En ese momento, una de mis vecinas empieza a pegar unos gritos de loca necesitada de camisa de fuerza. Vale, lo reconozco. Mi sentido del humor no es sino una válvula de escape para intentar sobrellevar esta mierda lo mejor posible. Le pego un vistazo a la nena. Tiene unos extraños pelos rosas, supongo que algún experimento con los tintes, aunque le aconsejaría que no lo volviera a repetir. Nadie va a tomarla en serio con esas pintas.

- Chist, pelorrosa, no grites - digo -. Perdona, pero te han encerrado y no creo que vayan a tomarse la molestia de soltarte después del curro que se han pegado para traerte aquí. Así que relájate y difruta. ¿Alguno de los presentes ha probado el engrudo este? - digo a mis vecinos, mientras remuevo la cosa esta con la cuchara. Tiene un aspecto de lo más guarro, lo cual quiere decir que probablemente esté bueno y todo. Lo cierto es que a pesar de todo, tengo hambre, pero esto de comer pienso de quien te tiene en una jaula, violando de paso tus derechos constitucionales, no es lo que más me pone. Me llevo la bandeja a la cama. Si a alguno de mis colegas secuestrados le apetece responderme ya lo hará y le oiré perfectamente, sin estar pegado a esas rejas que me dan tanto yuyu. ¿Será cierto lo que han dicho? Será cosa de probar. Con la cuchara cojo una ración de pasta viscosa y como si fuera una catapulta, lanzo la cosa blanquecina contra las rejas.

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21/12/2009, 00:43
Edie Crawford

Vamos Edie... L'audace, encore de l'audace... Tojours de l'audace... Se repetia a si mismo mientras intentaba ponerse en pié. Curiosamente solía pensar en aquellas palabras de Danton elogiando la audacia... de bién seguro la guillotina fuera un final preferible.
El mundo aún le daba vueltas a su alrededor. Apesar de ello consiguió llegar hasta el plato de comida que le dejaron hacía tansolo unos instantes. Observó a aquel chaval alejarse y, poco a poco, fué recordando lo ocurrido aquel nefasto día.
Maldecía mil veces el momento en que decidió comprar aquellos perritos calientes.
Se frotó los ojos y echó una ojeada a sus compañeros de celdas.
Aquel chicano parecía tomárselo con mucha calma. En cambio, la niña del pelo rojo sollozaba fuera de control.
En las celdas mas alejadas se encontraban otra niña, que se dedicaba a dar vueltas dentro de su celda como un animal enjaulado, y un tipo alto de rasgos eslavos.
Crawford apartó el plato de un manotazo. No fué más que un gesto de resignación. Apretó los dientes y tensó los puños hasta que los nudillos se le pusieron blancos.
No podía hacer nada por el momento. Se encontraba encerrado y solo disponía de una cuchara de plástico. No podría escapar de allí.
Nisiquiera me han dejado la tompeta... Edie suspiro profundamente. ¿Como puedes pensar en eso ahora...? Sonrió levemente y levantó la mirada hacia aquel chicano.
-Eh! Tú, chaval! Pareces americano.- Le dijo tras analizar su acento. -Te veo muy tranquilo como para haber sido raptado... Yo de tí no comería esa mierda...-

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21/12/2009, 11:28
Lily Evans

Lily se acerca a la bandeja gateando. La abre y una mueca de asco se dibuja en su boca. Repasa los cubiertos. No eran tontos. Tal como la ha abierto la vuelve a cerrar. Puag, era pero que la badofia del instituto.

Observa a sus compañeros que han empezado a hablar.

Se enfurruña, se tumba en la cama boca arriba con las manos detrás de la cabeza y empieza a tararear una canción (la que había oído al carcelero). De momento no podía hacer nada por huír de allí. Se iban a enterar cuando la sacasen de ahí... eso si alguna vez lo hacían. Antes se moriría de hambre seguramente como le siguiesen trayendo ese puré.

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21/12/2009, 15:26
Carcelero H.U.M.A.N.S.

 

Al cabo de un rato, el chico vuelve a pasar a recoger las bandejas. La única que ha comido ha sido Lucy María, la cual dejó limpia la bandeja y se bebió todo el vaso de agua.

El joven pasa con su carrito recogiendo todo y mirando con tristeza a los que no han comido.

No entiendo por que no habéis comido, no está mala la comida. Yo mismo la he preparado. Tiene todo lo que podéis necesitar para tener energías para las pruebas. Pero bueno, allá vosotros. Dice mientras sigue con su trabajo.

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21/12/2009, 22:08
Edie Crawford

-¿Que coño pasa aqui?- Exclama Edie juesto cuando aquel tipo pasó a recogerle su plato de comida. -¿Que quereis de nosotros? ¡Contesta!- Apremia con desprécio.
Crawford se mostraba visiblemente irritado.

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21/12/2009, 22:29
José Luís Torres

La única respuesta que obtengo viene de un tío que parece que se peina con una batidora. ¿Es que estos tipos tienen algún problema de personalidad capilar? Que si la una de rosa, la otra de más rosa si cabe, el otro que parece que le han centrifugado... ¡Impresionante! Y encima me dice que estoy muy tranquilo para haber sido raptado. Ya. Claro. Si quiere me empiezo a pegar contra la pared hasta que me se me desparramen los sesos por las orejas o grito hasta que se me salga la campanilla. Como si alguien fuera a hacernos caso en este puto agujero. Pero en fin, es hora de socializar.

- Sí, soy americano - le digo por fin -. Y por la comida no te preocupes. Mister camarero me la acaba de quitar. Una pena, porque tenía un aspecto innoble.

Y es decir esto, y el tipo se pone a pegar gritos. ¿Que qué quieren de nosotros? Chico, diría que es evidente.

- Me da que te vas a quedar con las ganas de saberlo, hasta que no venga ese supuesto jefazo que ya nos dirá algo, si es que le da la gana de hacerlo. Pero si no sabes tú por qué estás aquí, yo no te lo puedo decir. No sé, tal vez no les guste tu pelo - digo con una sonrisa grande. A ver si con un poquito de humor, lagente se relaja un poco. Hay crías demasiado niñas en las otras celdas, y la histeria no es buena para ellas. Probablemente, ya estén bastante asustadas como para que nadie se ponga a gritar y exigir. Estamos en el cazo, y ese cazo lo maneja alguien. Veamos qué ocurre con el tiempo -. A todo esto me llamo José Luís. ¿Y vosotros?


 

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21/12/2009, 22:38
Evgeny Osipovich Karev

Evgeny recupera lentamente el conocimieto solo para encontrarse atrapado en un celda el algún lugar y no, como debería ser, en el hospital de San Pertersburgo. ¿Que diablos había pasado? No estaba seguro pues apenas recordaba algo luego de que le Centro Oktha se le vino encima cuando se derrumbó

Pero apenas pudo elaborar un poco esas ideas cuando escuchó una voz de hombre que provenía de algún lugar de ahí. Levanta la cabeza y ve, desde la celda, una pantalla gigante donde un hombre habla de algo llamado "Humans" (o al menos eso creyo oir) y menciona, como al pasar, que las celdas estan hechas para resonar con "vuestros poderes".

- Poderes... ¿que poderes? - fue lo único que dijo, casi susurrando. A pesar de si mismo estaba un poco asustado y no volvió a abrir la boca. Todo esto le hacía acordar lo que hacían antiguamente los Órganos, en su país, durante los 30s y los 40s. Cosas que su padre le contó, metodologías que habían sido abandonadas por otras mas sutiles en los 70s.

Trató de reponerse, de convencerse de que esto no era Lefortovo o Lubianka y con el paso de los minutos lo consiguio. De hecho no podía ser tan malo dado que algo de comida les habían traido.

Pero no tenía hambre.

¿Como tenerla en un circustancia así?.

Solo sabía que lo habían sacado de una posición donde el era el amo indiscutible y lo habían depositado en esa celda. Era eso mas que la lección de historia paterna lo que lo incomodaba, aunque el no se daba cuenta.

Una ves tranquilo se dio cuenta que algunos de los otros parecián estar discutiendo acerca de la comida, mientras una de las mujeres (muy joven al parecer) estaba fuera de control con una ataque de nervios.

Todo esto era casi un circo y ahora decidió concientemente, mas que llevado por el miedo, y limitarse tan solo a escuchar.

Escuchar y esperar...

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21/12/2009, 23:35
Doll

El chico parece no escuchar, o simplemente no responder y se retira tranquilamente de la sala por la planta baja de la especie de carcel futurista dónde estáis metido.

En ese momento, la pantalla vuelve a titilar y el logotipo de HUMANS se disipa para dar paso a un rostro angelical, que os mira desde todos los ángulos posibles con una feliz sonrisa.

¿Así que vosotros sois los nuevos? ¡Doll tiene nuevos juguetes par jugar! ¡Y también nuevos juguetitos para mostraros! He estado trabajando mucho mientras os vigilabamos y he descubierto muchas cositas para probar con vosotros.

La chica comenzó a saltar de un lado a otro de la pantalla, con las manos entrelazadas sobre el pecho, y levantando los pies doblando las rodillas en cada uno de los saltos.

Después, volvió a acercarse mucho a la pantalla para dejar un primer plano de sus labios dándole un beso a la lente y regresó a su posición.

¿Querréis jugar conmigo? Os prometo que os trataré bien, como mis juguetitos.

 

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22/12/2009, 01:46
Edie Crawford

El joven músico asintió ante las palabras de aquel muchacho. Al fín y al cabo estaban juntos en aquello y, en el fondo, siempre venía bién algo de apoyo.
-Puedes llamarme Edie.- Se presentó escuetamente. Quizá aquella situación había apagado un poco el salero del chico. Se esforzó en ser amable y dibujó una sonrisa en su semblante.
Crawford resopló después de que aquella imágen se apagara.
-Estupendo... solo me faltaba que un chimpancé me adoptara como su juguete...- Suspiró Edie casi para si. -Esto es de locos...- Negó con la cabeza.

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22/12/2009, 20:15
José Luís Torres

- Muy bien. Entonces, Edi - digo justo un instante antes de que la pantalla se ilumine.

Y siguen sin echar béisbol. En su lugar me sale un zorrón, un pendón desorejado con pretensiones de ama que busca víctimas a las que les ponga el sadomaso. ¿Juguetitos? Pues ya se los puede ir metiendo por... Mejor me callo. Puajjj. Ha puesto los morros para dar un beso a la pantalla. ¡Será guarrilla!

- Pues sinceramente, estoy ya mayor para ser el juguetito de nadie - digo -. Aunque si en vez de Doll, fueras Dolly Barton, tendrías dos poderosas razones hasta para replanteármelo. Bueno, Edie, ¿tú también eres de los Estados Unidos? - digo pasando olímpicamente de la muñeca saltarina y calientapollas - ¿De qué parte?

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26/12/2009, 20:25
Alejandra

Trato de calmarme un poco y limpio las lagrimas de mis ojos ¿Poderes, pero de que diablos habla? pienso. Me acerco hasta la verja para observar al resto de prisioneros, puedo ver que son tres hombres y dos chicas contándome a mi

¿Como es posible que estén tan tranquilos en esta situación?, si van a hacer experimentos con nosotros

Miro asqueada el plato de comida que han servido Que asco, creo que casi puedo vomitar solo con mirarlo cojo la cuchara y tiro 1 poco al suelo Si viene aluna rata y no se lo come seguro que lleva algo raro aunque es mas que evidente.... me quedo apoyada contra la pared cerca de la puerta para tratar de ver lo que ocurre en el exterior y a la espera de si algún roedor aparece para hacerme compañía