Partida Rol por web

Me muevo hacia la salida, donde está Pierre, y comienzo a trepar por los salientes, todo fuerza pura, ya que no estaba versada en hacerlo.

Una vez fuera de peligro grito a Pierre. Ayuda a ellos, yo poder sola.

El barco se estaba inclinando a pasos agigantados. No es hubiese visto nunca hundirse un barco, pero le parecia que iba demasiado rápido. Apenas pudo agarrarse a algo para mantenerse y empezar a subir. Era algo extraño escalar por lo que hace unos segundos era el suelo, aunque en los mamparos habían las suficientes agarraderas.

Poco a poco fue subiendo, pero cuando casi estaba llegando a Pierre se resbaló, aunque pudo aguantarse y no caer para abajo.
Cuando miró vio como Alvaro todavía estaba allí y no conseguía subir.

Pierre. Tira la cuerda hacia abajo. Así será más facil subir.

Por su parte Mallory también estaba logrando subir, a puro musculo al parecer.

A Alvaro, quien es el que está más abajo el agua empieza a llegarle hasta la cintura mientras que Rodrigo está acercandose a Pierre pero desgraciadamente se queda apenas a unos palmos de él. Por todos lados ois el crujido de la madera al tomar el bajel una posición tan antinatural.

Álvaro con el agua hasta la cintura reaccionó rápido. Sabía que la fuerza bruta no era su fuerte, pero la destreza y habilidad sí. Raudo cortó de un golpe limpio un cabo cercano que colgaba del techo o lo que antes era el suelo o una pared; era difícil decirlo en aquella posición. El caso era que ahora disponía de un cabo que lanzarle a Pierre y que él podría atar a su cuerda, que estaba anudada al mástil de fuera. Así podrían salir de allí más fácilmente, pues Rodrigo también parecía tener problemas para salir del agua, pues cada vez que avanzaba parecía volver a retroceder.

- ¡Pierre, agarra el cabo y átalo la cuerda que llevas!

la situaci´on se esta poniendo caliente, mientras Mallory inicia la escalada y comienza a sobrepasarme, Alvaro y Rodrigo intentan alejarse por todos los medios del agua, aunque Rodrigo ya est´a a mi altura, Alvaro no consi gue la maestr´ia necesaria para agarrarse cual hormiga al tronco de un manzano y subir con delicadeza.
pero de pronto un brillo aparece en los ojos de Alvaro -eso es que ha tenido una idea, puede ser buena o mal, pero una idea, busca por la bodega y coge una cuerda que me lanza con firmeza. la cojo y la ato a mi cintura, para tener m´as resistencia.
ale chicos para arriba, que no se cuanto puede aguantar esto

Una sonrisa se dibujó en la cara al ver como Pierre cogía la cuerda que le lanzaba. Ahora esta vez sí pudo subir sin mayores complicaciones teniendo un asidero seguro y estable.

- Gracias, compadre – le agradeció con una sonrisa a Pierre cuando pasó al lado suyo saliendo al exterior.

Ayudó así mismo después a Pierre a subir de vuelta y cortar las cuerdas que se había atado para perder el menor tiempo posible en regresar a su barco. Con presteza corrió junto a sus compañeros por el inestable barco que se hundía cada vez más en el agua, aunque quizás correr no fuera la mejor palabra para definir las peripecias, saltos y agarres a las cuerdas y velámenes del mismo; incluso al final tuvieron que hacer los últimos metros corriendo por los mástiles del navío para saltar al final de allí a la cubierta de su barco, rodando al caer para amortiguar el golpe de la caída.

Una vez a salvo se sacudió un poco la ropa seca que tenía. Por suerte el calor de aquel lugar pronto secarían sus ropas mojadas.

- Por Theus, ¿qué ha pasado?

Cuando hubieron recibido las escuetas explicaciones de lo visto desde fuera, propuso empezar de una vez con su expedición.

- Bien, señores… y señorita – añadiendo un poco dubitativo al ver a Mallory, pues aún no tenía muy claro si tratarla de señora o de señor como a un compadre más – creo que ya les hemos dado suficiente ventaja a esos golfos como para que la competición sea justa. ¿Les parece si procedemos a subir a ese bella mansión de vacaciones? – comentó con cierto humor.

Más de medio camino a base de fuerza pura, ya que nunca había aprendido a trepar, y visto lo visto debería hacerlo, y luego un buen apoyo con la mano de Pierre para acabar de salir de ahí.

Esperé a que el resto subiera y negué con la cabeza a la primera pregunta de Alvaro, ya que tampoco sabía el motivo.

Despues asentí para ir a por la mansión, el camino parecía dificil, pero si planificabamos bien unas cuerdas, sería mucho más sencillo llegar.

Finalmente los tres amigos salen de la bodega del barco y despues de desatarme y guardar la cuerda, me acerco rapidamente a los restos del castillo para ver cual ha sido el motivo de extraño suceso, no ha sido normal esto, pero no veo nada que me indique que es realmente lo que ha ocurrido.
Así que bajamos a tierra y mientras cargo las dos pistolas que he usado, nos encaminamos hacia la escalera para iniciar el ascenso y aprovecho para preguntar
-amigos al final pudisteis ver lo que habia detras de la puerta y que puñetas ha pasado? No ha sido nada normal lo que ha pasado-

Tras las palabras de Pierre por instinto mirais hacia arriba. No solo las escaleras que llevan hasta ella sino toda la construcción del castelo os parece altamente inestable con varias zonas que se aguantan casi de milagro aferrandose a la pared de piedra. Mientras mirais veis caer varios cascotes de diversos tamaños, aunque ninguno tan grande como la sección que cayó sobre la goleta y que podeis intuir a través de las aguas.

La ascensión será peligrosa, pero la exploración puede resultar mortal.

La situación era complicada, pero afortunadamente Alvaro la solventó con un nuevo cabo que logró hacer llegar hasta Pierre, una vez todo atado subir fue de lo más sencillo.
Aunque volver su bajel no lo fue tanto. El barco estaba muy inclinado, y tuvieron que hacer gala de toda su maña para ir agarrandose a los cabos, madejas e incluso mastiles para acabar saltando al Aventurero.

En cuanto piso la cubierta Rodrigo se sentó un momento en un tonel a recuperar el aliento.

Por lo poco que pude ver, el barco no estaba pasando por su mejor momento. Era todo suciedad y desperfectos, y esas cosas suelen llevar al final de un barco si no se cuidan. Tampoco vi insignia o bandera alguna. Aunque eso podría deberse a que estén de incognito más que a que no pertenezcan a ninguna nación.

En fin. Tenemos una ardua tarea por delante.

Se levantó y recogió la bolsa que había preparado antes de que vinieran a saludarles.

Lo mejor será ir despacito y con buena letra. Yo me acercaría en uno de los botes. Así no arriesgamos el Aventurero. Y una vez allí usar las cuerdas que tienen colocadas e ir reforzandolas con las nuestras.

Miró la pared de roca.

Puedo ir yo primero e ir asegurando el paso.

Ante vosotros las rectas y mortales paredes de la isla Falisci. Ya habeis visto como se cobraban las vidas de tres hombres y un navío. Pero vuestro contrato con Martina y vuestra sed de aventuras os llaman a proseguir en pos de la aventura hacia nuevos peligros. Quien sabe que horrores humanos o de otro tipo os esperan en el interior de la fortaleza maldita.

Aprestando vuestro material de escalada os disponeis a empezar la ascensión.

Una vez llegaron al comienzo de la escalera para ascender, Álvaro evaluó el camino con ojo semi experto. No era ningún novato en las lides de escalar y sus reflejos naturales eran de los más agudos que había conocido. Se giró a sus copañeros.

- Permitidme que abra el camino para buscar los mejores asideros.

Se planteaba si sería capaz de escalarlo sin ayuda de cuerdas. Tal vez. Mejor no verse en la tesitura de descubrirlo, pero por si acaso se echó una cuerda enrollada en la espalda, cruzada sobre un hombro. Si debía saltar para alcanzar la cima a mano desnuda debería llevar una cuerda que lanzarles a sus compañeros para que pudieran seguirle.

Así avanzó el primero mostrando prudencia a la hora de tantear los peldaños y la pared donde había que escalar. Resistió la tentación de hacer gala de sus destreza, pues debía encontrar un camino seguro para sus compañeros.

El comienzo parecía relativamente fácil… ya veríamos si no se complicaba más adelante… 

Alvaro empezó la subida por las escaleras. Parecia el camino más fácil, al menos a priori, pues todos habían visto lo que les pasó a los bellacos que trataron de huir.
No obstante, Rodrigo prefirió utilizar las cuerdas que ya estaban preparadas. Era bastante obvio que si todavía seguían allí era porque alguién había logrado llegar por ellas. Además, en teoría habría menos posibilidades que hubiera desprendimientos de las rocas del camino.

De lo único que se tendría que preocupar es de que no se asomasen alguno de los cazatesoros que estaban arriba y cortasen las sogas.

No era un ascenso fácil. Pero al espadachín de Gallegos no se le daba mal.

Después de empezar a subir los dos castellanos, comienzo el ascenso con cuidado y afianzando los pies, asegurando que no haya nada que pueda ser peligroso para mi o para mallory que viene detras mio.
en este caso hago el mismo camino que Rodrigo, empiezo a usar las cuerdas, por que el camino me parece muy poco fiable y los cuerpos que hay abajo lo demuestran, además como no me fio por donde esta subiendo Alvaro, escojo la cuerda que menos peligro ofrezca, por si hay algún desprendimiento no me pille en su camino

Veo como todos los hombres empiezan a trepar y me preparo tras ellos. Depues del numerito de Pierre, no iba a ponerme a su enferma vista.

Poco a poco, sin prisa, me agarro fuerte a las cuerdas que habían preparado nuestros enemigos y me acerco a mis compañeros.

Mientras sube Mallory pisa con demasiada fuerza un saliente y este, ya debilitado por el paso de sus compañeros cae hacia abajo ¡hacia las escaleras por donde sube Alvaro! El castellano debe moverse con cuidado para esquivar el cascote pero no pisar en falso ¡o directamente en el vacío!

Por su lado Rodrigo que va en cabeza cree advertir algun movimiento en los bordes del boquete en el muro del castillo donde acaban las cuerdas por donde estan subiend ¿Más enemigos? ¿Una trampa mortal?