Partida Rol por web

El día había sido duro para los alumnos, demasiada información y esfuerzo, pero así era la vida de un héroe, necesitaban sacrificarse para cumplir su sueño. Los aspirantes se retiraron a sus aposentos tras la cena y en poco tiempo estaban ya en sus camas soñando con la fama y la gloria que algún día conseguirían.

Me desperté, teniendo todo el cuerpo sudado. Había sido una pesadilla horrible y todavía notaba la sensación de esa mano acercándose hacia nosotros y el calor que producía toda aquella escena. Miré a ambos lados, después de soltar un grito, pensando en que alguien aparecería por esa puerta y con miedo de que esa persona fuera la mujer que había escuchado tiempo atrás.

Al ver que nada ocurría, me levanté de la cama. Me limpié el sudor y me coloqué bien el pelo, al igual que la camisa larga que usaba para dormir. Quizá mi grito no había sido tan alto y por eso nadie se había levantado, pero tenía tanto miedo que pensé que lo mejor sería ir a comprobar que todo estaba bien.

Salí de la habitación y cerré la puerta al hacerlo.

Aunque todos los alumnos se habían despertado por culpa de la terrible pesadilla que acababan de tener, sólo uno de ellos se atrevió a salir de su cuarto. Todos oyeron como una de las puertas se abría y, acto seguido, todos escucharon ruido en el piso de abajo. Sonaba como a ruido de metal contra metal y metal contra piedra y provenía casi con toda seguridad de la cocina. Si la pesadilla tenía algo que ver con aquello, la respuesta estaba sin duda en la cocina.

Se incorpora alarmado al oir el ruido, se viste raudo, convoca a su familiar y baja a la cocina corriendo.

Mientras Sylvana decidía si bajaba o no a descubrir el origen del ruido otra de las puertas se abrió de repente. Del interior de la habitación salió rápidamente Cornelius, que sin duda había escuchado también los ruidos procedentes de la cocina y se disponía a investigarlos.

salgo de mi cuarto lentamente, tenia que comprobar si era un sueño o no y quien mejor para eso que el profesor any o el profesor kent, ese habia sido un sueño muy extraño, sobre todo tomando en cuenta el hecho que hacia años que no soñaba.

noto el ruido de los metales chocando y bajo lentamente para no recibir un golpe perdido

Me desperté, sobresaltado por la pesadilla. Esta no había sido tan placentera como la otra, que para mí, no fue una pesadilla. Escuché ruidos procedentes de la cocina, parecía una lucha con espadas o algo parecido. La cosa se estaba complicando cada vez más, y parecía que los instructores estaban dejando de lado las advertencias que hicimos Sylvana, Cornelius y yo.

Incorporándome en la cama, busqué mis pantalones y mis sandalias. Después de ponérmelas cogí una camisa que cerraba el cuello con una cinta de tela que en ese momento estaba desabrochada y bajé con rapidez hacia la cocina. Más vale que vea a Keyleth allí, sino le voy a cantar las cuarenta. Para algo es una paladina, yo no tengo ese tipo de responsabilidades...

Miré de un lado a otro, asustada. Quizá eso fuera más que una pesadilla y el oír ruidos que provenían de otro lugar no hacían más que alertarme. Entonces se abrió una puerta y sentí la necesidad de soltar una de esas patadas míticas que has visto hacer a alguien en un torneo, pero que ni de broma te saldría a ti. Frené mi impulso al ver a Cornelius - ¡Ey! Siempre nos encontramos de noche, ¿no?- le dediqué una sonrisa al mago. Llevaba un pijama muy parecido al que llevé la noche anterior que nos encontramos, una camisa larga que cubría lo justo, si estaba parada.

-He escuchado unos ruidos muy raros e iba a bajar para ver qué ocurría...¿vienes?-sonreí.

A eso iba Syl. Apresuremonos!! Convoca a su familiar y se dirige a él. Ei, no te importará echarme un cable ¿verdad? La noche es tu elemento. Acto seguido y tras distraerse un segundo con el atuendo de Silvana sale como una celeridad hacia la cocina.

Scarecrow y Marcus Kromen se unieron a Sylvana y Cornelius para investigar los extraños sonidos que procedían de la cocina. Juntos bajaron las escaleras con cautela pero rápidamente, podía haber alguien en peligro. Cuando llegaron al vestíbulo los sonidos cesaron y llegó de nuevo el silencio, fuera lo que fuese lo que había estado ocurriendo había terminado.

Los cuatro alumnos cruzaron el vestíbulo para llegar a la cocina. No estaba claro lo que había ocurrido allí, pero el suelo estaba lleno de cacerolas, sartenes y demás enseres de cocina, de ahí aquel ruido misterioso de metal contra metal. La escena daba a entender que se había producido algún tipo de enfrentamiento, nadie era tan patoso como para provocar aquel estropicio.... o quizás si?

Un rápido vistazo de la escena permitió a Marcus percatarse de que no todo eran cacerolas y sartenes. Cerca de la puerta trasera de la cocina, que conducía a la despensa, había una manchas de sangre oscura en el suelo. Despúes de todo parecía que efectivamente se había librado un combate en la cocina.

Mientras todos examinaban las manchas de sangre, Cornelius se percató de que una de las cacerolas se movía levemente y una vocecilla salía de su interior. Era imposible descifrar lo que intentaba decir la vocecilla, pero curiosamente a todos les resultó familiar aquella voz.

Se dirigio a las cacerolas y las levantó para ver de quien era esa voz.

He hecho bien en no esperarte para la tirada XD ves menos que un gato de escayola jaja

Nah ponle el nombre que quieras, al fin y al cabo es tú familiar!! por cierto, que es?