Partida Rol por web

Ánima:Más allá del bien y del Mal II, Un reino de Pesadillas

3.1 No es fácil huir.

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29/10/2012, 17:03
Director

Conrad fue a abrir la puerta de la casa en la que había caído, pero de pronto unas voces que venía de detrás de la habitación que había a su lado rompieron el silencio. Era una voz de mujer, dulce y suave, acompañada por otra de hombre, y por lo que parecía joven.

La mujer, al parecer se quejaba.

-No... para... ya sabes que no... puedo.

-Tranquila-decía su compañero.-No voy a hacerte daño. Ya lo sabes...

-Pero... no, de verdad, ya te he explicado la situación, vas a tener que esperar...

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29/10/2012, 17:11
Director

El pueblo quedó ya más conforme, gracias a las palabras del rubio que ahora aparecía vestido con una sotana. El poder convincente del sacerdote seguía patente, y alguien que por ahora parecía ser su devoto, o al menos alguien elegido daba crédito a las palabras del que el día anterior no era más que un hereje.

Poco a poco, el pueblo se empezó a disgregar, mirando de reojo a los recién llegados, como si no se explicaran muy bien qué había sucedido, pero tampoco se atrevieran a preguntar. Algunos, los menos, seguían protestando, alegando que eran unos mentirosos y unos farsantes. Pero sus propios compañeros se los llevaban a tirones.

Parecía que todo estaba mucho más tranquilo...

Andrei se acercó a Faliar y a Quint, al parecer a agradecer lo que había sucedido.

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29/10/2012, 17:14
Andrei Vlas

-Yo... muchas gracias. En serio. No sé cómo explicar lo que sucedió anoche y todavía no sé siquiera distinguir lo que era real y lo que fue un sueño.

Acarició la cabeza de Stefanía y la abrazó con fuerza.

-Gracias por hacer lo que quiera que hiciérais...

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29/10/2012, 17:16
Director

El pueblo quedó ya más conforme, gracias a las palabras del rubio que ahora aparecía vestido con una sotana. El poder convincente del sacerdote seguía patente, y alguien que por ahora parecía ser su devoto, o al menos alguien elegido daba crédito a las palabras del que el día anterior no era más que un hereje.

Poco a poco, el pueblo se empezó a disgregar, mirando de reojo a los recién llegados, como si no se explicaran muy bien qué había sucedido, pero tampoco se atrevieran a preguntar. Algunos, los menos, seguían protestando, alegando que eran unos mentirosos y unos farsantes. Pero sus propios compañeros se los llevaban a tirones.

Parecía que todo estaba mucho más tranquilo...

Andrei se acercó a Faliar y a Quint, al parecer a agradecer lo que había sucedido.

Sin embargo, sus palabras ya no eran dichas en voz alta, así que para escuchar su conversación tendría que salir de su escondite. 

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29/10/2012, 17:16
Stefanía

La niña, sin embargo, trataba de esconderse en los brazos de su padre, evitando en todo momento la mirada con el cazabrujas. Él le había lanzado una daga, la había apuñalado a distancia al tiempo que atacaba a su captora. No lo entendía, pero le daba miedo. 

De hecho, se había sentido morir, una experiencia que no olvidaría nunca. De hecho, si no hubiera sido por Faliar, ahora mismo no estaría entre ellos. 

Por eso, se despegó un momento de su padre y abrazó al mago, casi llorando entre sus piernas.

-Gracias... dijo con una vocecilla a mitad de camino entre la adoración y la felicidad.

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29/10/2012, 17:21
Faliar

Eso fue inesperado, pero Faliar respondió sonriendo y acariciando la cabeza de la pequeña, antes de devolverla a su padre

- No se preocupe, Andrei. Me temo que suelen ocurrir... cosas raras a nuestro alrededor. Cuide bien de la niña. En cierta manera, si que es un milagro que esté bien...

Luego hizo caso al gesto de Quint y se alejó de la plaza con él. Antes de detenerse, murmuró algo por lo bajo

- Escucha Quint... Antes de nada, tienes que saber algo, pero no se muy bien como decírtelo...

Su tono de voz se había vuelto grave, casi solemne.

Notas de juego

Por cierto, creo que Rafa no te lo ha puesto en la descripción del encuentro, pero Faliar ya lleva su escudo y su hacha, por si te parece relevante :p

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29/10/2012, 17:28
Quint

-Perdona por no haber podido sacar a tu hija indemne.

Mientras se iba con Faliar, le recordó al alcalde que no fuera a su casa por el momento. No fue hasta que su amigo se detuvo a susurrarle que se percató del hacha y el escudo que portaba.

-Espera... ¿De dónde has sacado tus cosas? ¿Ha llegado Julius?

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29/10/2012, 17:43
Faliar

El rostro de Faliar adquirió un gesto sombrío; se pasó la mano por la frente mientras buscaba las palabras adecuadas. No iba a ser fácil.

- Julius... El cochero de Konrad me dijo que, en Karlsrude, otras dos asesinas le siguieron la pista tras lo sucedido en el baile. Julius apareció justo a tiempo para sacarlo de la ciudad junto al carruaje y el equipo, pero las asesinas salieron tras ellos y los emboscaron. Julius consiguió salvar el carruaje y al cochero, pero...

Tragó saliva, y le puso una mano sobre el hombro

- Pero... el no tuvo la misma suerte, y le alcanzaron con un disparo... Lo... siento.

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29/10/2012, 17:53
Director

Los ojos hinchados y rojos de François, el hombre que estaba en el pescante del carro daban bastante credibilidad a la noticia. Y por el tono... no era una broma.

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29/10/2012, 17:56
Alice
Sólo para el director

Alice se encogió de hombros, conforme

Mira que listos, saben resolver sus problemas ellos solitos

Decidida, se encaminó hacia la iglesia, camuflándose entre la gente como mejor sabía

Notas de juego

La idea es esperarles dentro de la iglesia. Observando alguna vidriera o algo

Lo sé, lo sé. No he podido evitarlo. ¿Tiro? :P

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29/10/2012, 18:00
Director

Cuando la chica estaba avanzando entre la multitud se fijó en la expresión de estos. Faliar habló con Quint y éste pareció... sorprendido, con lo que le contaba. El hombre sobre el carruaje vestía una ropa bastante elegante, y Alice hubiera jurado que lo había visto antes. Pero era curioso el hecho de que estuviera casi hecho jirones. Le faltaba una manga y algunas vetas de sangre reseca le caían por el brazo.

El carruaje tampoco estaba en el mejor de los estados, tenía marcas de ataques, cortes finos, punzadas... y hasta orificios de bala.

 

Notas de juego

No tires... eso sí, quizá decidas cambiar de camino... xD

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29/10/2012, 18:01
Quint

Algo dentro de Quint estalló en pedazos como una vidriera al desprenderse del marco y tocar el suelo. Su mente estalló en cientos de miles de recuerdos, todos distintos, que formaban para él la imagen de su amigo Julius, y contempló impotente cómo cada uno de esos pedazos pasaba ante él y se hacía pedazos contra el suelo.

-¿Qué...? -Su voz se quebró en la primera sílaba. En ese momento se dio cuenta que que el mago había sido mucho más importante para él de lo que recordaba. Estaba en prácticamente todos los recuerdos felices que tenía con Selten, y siempre que visitó a su mentor tras partir por su cuenta él estaba por allí, estudiando sus libros, preparando la comida, limpiando, correteando de un lado a otro detrás de ellos o simplemente escuchando.

Miró de nuevo al cochero, y luego a Faliar, y al cochero de nuevo. Luego trató de agarrar a Faliar por las solapas de la camisa.

-¡¿Qué has dicho?!

La ira comenzó a aflorar en su interior. Una sustancia negra, viscosa, que empapaba el suelo de su mente y ocultaba poco a poco los cristales rotos del recuerdo.

-Eso... No puede... Haber... ¡Pasado! ¡Él sabía defenderse!

El rubio empujó a Faliar lejos de él con todas sus fuerzas. Trató de recordar las habilidades mágicas que Selten intentó traspasar a su discípulo, pero había algo que no cuadraba. Selten nunca usaba su magia para matar, solo para inmovilizar o derrotar causando el menor daño posible. Y Julius era aún más pacífico que su maestro si eso era posible. ¿Podría Julius negarse a matar incluso si su vida dependiera de ello?

Oh... Dios... ¿Por qué era tan estúpido? ¿Por qué no huyó? ¡Su vida era más importante que un par de armas, monedas y ropa!

En su mente, la imagen de las dos asesinas que les atacaron en la fiesta se formó lentamente, como nacidas de la oscuridad que la inundaba paulatinamente. Entre ellas, un muchacho rubio, el Julius que conoció por primera vez, se encontraba desnudo e indefenso, con las manos en alto y negándose a combatir. Las asesinas le atacaron con todo lo que tenían, y el sacerdote levantó sus escudos mágicos, sus lazos para apresarlas y su voz para calmarlas. Una a una, y a cámara lenta, vio como las agujas superaban su defensa y se hundían en su cuerpo, profundas, letales, y como la afilada ropa le hacía tajos que cortaban hasta el hueso. La sangre salpicó las paredes y fue engullida por la oscuridad a partes iguales, y su amigo se mantenía en pie mientras más escarlata teñía su cuerpo. Finalmente los ataques terminaron, las asesinas comenzaron a reír, y el destrozado cuerpo de Julius se desplomó sobre los cristales rotos.

Los ojos de Quint se llenaron de lágrimas. Y las dagas salieron de su ropa para posarse en sus temblorosas manos. ¿Cuanto hacía que no sentía semejante dolor?

-¡Tú! ¡TÚ! -En un primer momento, Faliar pudo tener un dejavu de su primer cruce de armas, pero en seguida Quint se giró hacia el cochero.- ¡Cómo...! ¡¿Cómo pudiste dejarlo atrás?!

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29/10/2012, 18:47
François

-Nunca... lo dejé atrás.

Sus ojos se convirtieron de nuevo en presas desbordadas al ver la reacción del rubio. Así que se limitó a señalar el interior del carruaje. No hizo nada más, ni siquiera podía. No tenía fuerzas para hablar, ya le había contado a Faliar la historia, no podía volver a contarla...

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29/10/2012, 18:49
Director

Alice llegó ante la puerta de la iglesia, pero antes de entrar escuchó al rubio chillar.

-¿Qué...?

Cogió a Faliar por las solapas.

-¡¿Qué has dicho?!

-Eso... No puede... Haber... ¡Pasado! ¡Él sabía defenderse!

-¡Tú! ¡TÚ!-señaló al cochero- ¡Cómo...! ¡¿Cómo pudiste dejarlo atrás?!

 

Notas de juego

Que conste que sigo diciendo que NO te estoy diciendo que vayas, sólo estás en el mismo punto que ellos, y sus reacciones tienes que saberlas, sobre todo si son "audibles" ^^

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29/10/2012, 18:51
Faliar

Las cosas se precipitaban y parecía que Quint se fuese a lanzar sobre el cochero

- ¡Quint, espera! ¡Él no tuvo la culpa! ¡¿Que podía hacer?!

Intentó interponerse entre él y el cochero

- Y además... no lo dejó atrás... Julius le dio... una última voluntad. Y bueno... -recordó la carta que Julius aún sujetaba- creo que tenía un mensaje... Será mejor que lo veas tu mismo... -dijo señalando a la puerta del carruaje

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29/10/2012, 18:59
Alice

Una voz sonó detrás de ellos

Creo que no todo el pueblo tiene por qué enterarse

Alice hizo un gesto vago hacia la iglesia, como si hubiera estado allí todo el tiempo

Podemos discutirlo dentro, sea lo que sea. No hace falta llamar más la atención, y al fin y al cabo, allí es donde hemos quedado, ¿no?

Notas de juego

Al final me lías, mamón ¬¬

Pónselo a los demás si procede

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29/10/2012, 19:13
Faliar

No sabía de donde había salido Alice, pero no era el momento para ponerse en plan reina de hielo

- No necesitamos tus réplicas agudas ahora, ¿vale?

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29/10/2012, 19:18
Alice

No era una réplica. Tenemos a medio pueblo mirando en esta dirección. Y creo que vuestros emotivos discursos no han calado tanto como para permitirnos esa clase de atención

Hizo una pausa, y miró a Quint, que parecía estar a punto de estallar

Venga, vamos a la iglesia. Aquí estamos expuestos

Notas de juego

A la iglesia, niños...

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29/10/2012, 19:22
Faliar
Sólo para el director

Notas de juego

Se que Quint es mucho más rápido, pero si tengo que hacer alguna tirada para evitar que alcance a Alice o al cochero e interponerme la hago.

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29/10/2012, 19:33
Quint

Faliar podía sentirse orgulloso. En menos de 24 horas había salvado la vida de Stefanía al curarla, la de todos los habitantes de Koven al darle tiempo a Quint para que nadie fuera contando que había demonios sueltos por allí y la Inquisición viniera a hacer un camping con ellos, y ahora posiblemente la de François al cortarle el paso al cazabrujas.

- ... -El rubio alternó la mirada entre el carruaje, el cochero y Faliar. ¿Qué querían mostrarle? ¿Acaso el cuerpo de su amigo estaba ahí dentro?

Respira. Suelta el arma y párate a pensar. Los sentimientos te hacen débil. Tú ya no tienes sentimientos. -Una voz hablaba dentro de su cabeza otra vez. Pero esta vez, ya no sabía a quién pertenecía esa voz. Sonaba demasiado distante, demasiado débil y apagada.- Tienes que concentrarte en tu misión. -Pero la misión había quedado de lado en ese momento. Todo había perdido el interés para él, salvo una cosa: La oscuridad que bullía en su interior y que crecía para ahogar el dolor.

-Que... ¿Qué hay ahí dentro? -Dijo mientras la parte de su cerebro que aún funcionaba guardaba una de sus dagas en la cintura. La otra permaneció en la mano, temblorosa, amenazante.

Pero no hubo tiempo para que se calmara. Otra voz, esta vez conocida, le atacó desde atrás. Xerine, Alice, o como quiera que quisiera llamarse. Otra asesina. Y el objetivo de aquellas que le habían matado a él, y luego habían matado a Julius.

-¡CÁLLATE! ¡TODO ESTO ES POR TU CULPA! ¡TÚ ERAS SU MALDITO OBJETIVO!

La daga salió desprendida de su mano hacia los pies de su compañera. ¿Era un aviso? ¿Un desafío? ¿El combate le había pasado factura?

Eran las lágrimas de sus ojos que no le dejaban apuntar.