Partida Rol por web

Para sorpresa del fotógrafo, no sería otra que la propia Lizz quien conteste la llamada. Él no estaba preparando para ello, pero de todas formas tenía que ponerse en contacto con ella.

-Sí, soy yo. Cuánto tiempo sin hablarnos... Oye, Lizz, escucha. Necesito hablar contigo. He reflexionado mucho últimamente, y creo que es hora de que nos veamos. ¿Crees estar disponible, quizás te pueda invitar a cenar o quizás a tomar algo en la disco.- Su hablar parecía nervioso. No se sentía realmente a gusto de hablar con ella después de todo lo pasado, pero era necesario. -¿Estás disponible?

-¿De verdad?- La voz suena aún más sorprendida, y no tarda en continuar. -También yo he pensado mucho... Si, si, estoy disponible. Puedo pedir algo a la casa, abrimos un vino... Como los viejos tiempos.- Escuchas en su voz acariciante.

Ian estaba más sorprendido de lo rápido de su respuesta positiva. -De acuerdo. En una hora estoy por ahí. Quedamos así.- Dicho esto, cuelga el teléfono y suelta un largo suspiro.

-Creo que tengo una cita para esta noche. Sugiero que nos separemos por un rato. Será mejor que vaya solo.- Dicho esto, mira hacia otro lado con cierto desánimo y espera la contestación de los otros.

Las siguientes acciones sucedieron demasiado rápido. Salida del hospital, el cabrón para fumar e Ian para llamar por teléfono y concertar una cita...¿una cita? ¿en qué estaba pensando?....

- No..., no entiendo nada..., ¿qué información te guardas Ian?.... ¿Cómo que te vas a cenar?..., joder..., no basta lo conseguido para hacer un artículo decente, con esto la revista no sacará la esclusiva, nos falta información, quién demonios es la gata, porqué en el hospital saben que es ella, el tatuaje..., qué significa..., nos falta mucho por hilar..., ¿y tú vas a irte de fiesta?.... - desde luego aquello era decepcionante a todos los niveles, en el campo profesional y personal, no se esperaba la dejadez del muchacho

- Mike..., te necesitamos para seguir esta investigación..., no te vayas... - le dijo al otro varón, y es que parecía querer ir cada uno a su bola y Nat no tenía ni puñetera idea de como continuar esa búsqueda, les necesitaba, pero uno parecía pasar del tema y el otro actuaba con la entrepierna, ¿por qué diablos estudió periodismo?..., mejor le hubiera venido hacer oposiciones para bibliotecaria....

-Nadie hablo de dejar el caso, chica - Aclaró poniendose el pucho en la boca, y mirando con el ceño fruncido al fotografo - Pero no es mi estilo colaborar con alguien que no comparte información, no he vivido tanto por confiar en idiotas - Metió las manos en su bolsillo y las sacó rapidamente - Tienes fuego? - Preguntó a la periodista, apretando el puro entre los dientes. Antes de que pudiera responderle paso un tipo fumando y le procuro lo que pedía - Podemos seguir trabajando juntos, tu y yo, pero este - señalo despreciativamente con la cabeza hacia Ian - Se queda lejos hasta que mejore sus modales - Si había algo que lo cabreara eran ese tipo de estupideces.

Nat escuchó a Mike y comprendió su enfado. Si los tres se habían metido de lleno en esta investigación lo normal sería colaborar juntos. No podía negar que opinaba como el más cabrón de los tres. Cuando el detective le pidió fuego ella negó con la cabeza, no solía fumar ni tampoco beber, había sido siempre una ridícula niña buena, y tras ver el cadáver entro de la morgue se replanteó que cojones estaba haciendo con su existencia, cuando acabara ese caso debía salir a divertirse más.

- Ian... por favor..., debemos seguir juntos..., cuenta lo que sabes.... - le dijo mirándole con una seriedad evidente, y es que separarse en aquel momento era ridículo -... necesitamos que nadie descubra antes que nosotros esta historia o todo se irá al infierno... Si nos cuentas qué te ronda por la cabeza podemos ayudarte, tres cerebros piensan más que uno... y que dos... - miró a Mike, estaba claro que si ian se quería descolgar, ella seguiría con el detective, sola tenía menos posibilidades de encontrar información que una rata estudiando ingeniería informática.

Ian comprendió lo que le estaban diciendo sus compañeros, estaba siendo poco comunicativo; pero es que estaba nervioso, lo que vió en la morgue le obligó a tomar medidas de forma acelerada antes el nerviosismo de que podría verse inesperadamente implicado de alguna manera. Y aunque había hecho todo lo posible por evitarla hasta ese momento, ahora se vería obligado a enfrentarla de nuevo para desvelar el misterio.

Ian suelta un suspiro. -Miren. Es mi ex. Y no voy a tener relaciones. Ella podría estar implicada en todo este asunto y quiero descartar el hecho antes de avanzar. Pero si quiero sacar esto adelante, debo hacerlo solo o no nos dirá nada.

Terminado de decir esto, se puso las manos en los bolsillos y marchó hacia la calle. -Les escribiré si descubro algo. Ustedes también hagan lo mismo. Nos vemos.- Y con estas palabras, Ian sale de escena.