Partida Rol por web

Una mañana más amanece en el Mercadona de la calle Prosperidad. Y una mañana más son los pasos del Bulldog los que os despiertan, ya que la megafonía no ha vuelto a funcionar. El encargado se presenta ante vosotros y una mañana más pone la urna sobre una de las cajas. Apoya las manos en ella y os contempla uno a uno, como si estuviera haciendo algún tipo de recuento para al final soltar una risita cruel.

- Os estáis quedando en nada, eh... Con la de gente que había hace cinco días y mirad ahora. - Chasquea la lengua mientras niega con la cabeza. Os enseña un cartel y su expresión va cambiando hasta que sus ojos se inyectan en sangre y sus labios dibujan una mueca de desprecio. - Y sin embargo, esos bastardos siguen actuando cada noche sin que hagáis nada. ¡Mirad lo que han hecho hoy, vagos! ¡Drogadictos!

- Y por supuesto, hay nuevos despedidos sin autorización. Faltan el de mantenimiento y el tío de los hongos. - Se encoge de hombros. - Ya se ha tramitado su despido. Pero nada, vosotros seguid a lo vuestro, inútiles. ¡Panda de zarrapastrosos, que eso es lo que sois! - Y cuando miráis a vuestro alrededor podéis constatar que efectivamente Manuel y Alberto han desaparecido.

En ese momento empiezan a oírse golpes en la zona de los almacenes. El Bulldog frunce el ceño y hace un gesto a uno de los armarios para que vaya a ver qué sucede y éste obedece con premura. Los golpes se hacen más frecuentes y de repente se escucha un griterío lejano, como una extraña ovación. Los golpes y los ruidos se suceden hasta que de aquel pasillo aparece un carrito, moviéndose a toda velocidad como si lo hubieran impulsado entre varias personas y con alguien subido encima: Pascual. El hombre trae cara de velocidad y un papel en la mano que entrega a Enrique cuando el carrito derrapa y se detiene frente a él. 

El Bulldog coge el documento y lo estudia en silencio mientras el griterío y los golpes se van desvaneciendo y el armario vuelve a entrar. El 4x4 se acerca a Pascual con obvias intenciones expulsatorias cuando Enrique levanta una mano y lo detiene. - No, espera. Esta carta de readmisión está en orden. - Mira con ojos aviesos a Pascual y se cruza de brazos. - Pues nada, estás aquí otra vez, con el resto de vagos y perroflautas.

Señala la urna y vuelve a miraros a todos uno a uno, con la mirada entrecerrada y un deje de desprecio en la comisura de los labios. - Ya sabéis lo que tenéis que hacer. ¡Vais a seguir votando hasta que no queden infiltrados aquí dentro! Volveré por la tarde a ver a quién habéis votado. 

(Ruido de ronquidos horrorosos)

(Competición de Ruido de ronquidos horrorosos)

(Nos coordinamos para que se oiga un ronquido constante)

A ver Asun. Tan infiltradas que somos la Sholi y yo. Nos has visto esta noche poniendo una carta de despido sobre las manos de Manuel o el seta?. Di di. Que estoy impaciente por saber si tienes ovarios de mentirme en la cara. Ya puedes ponerte un punto en la boca tu y todos los que han dudado de mi palabra cuando dije que Pascual iba a volver con ayuda. Ha vuelto con una carta de readmision suya. Ahora ya entiendes porque quería que este hombre entrara y no tu?. Porque sabia que tenia cartas. Lo que no sabia era si podría utilizarlas porque la Sholi gasto una trayendote a ti de vuelta, desagradecida. Yo a diferencia de ti pienso en todo el grupo. No soy tan jodidamente egoísta. Que eres una pieza fundamental para ayudar lo eres pero hay otros iguales que tu, a los que también les importa su curro y quieren ayudar. No eres la única que recaba pistas tenlo en cuenta. Y si vas a seguir con esta guerra que sepas que no me va a temblar el pulso si te tengo que votar. Asi que tu veras si quieres que nos matemos entre nosotras o nos centremos en expulsar a los infiltrados que quedan.Dicho esto me voy para el cuarto de mantenimiento a rebuscar entre las cosas de Eva igual que hice con las de Pascual cuando fue despedido. Si Eva no es una infiltrada yo misma le pediré a Pascual que utilice una carta para readmitirla si puede y esta conforme claro.

Asunción había pasado una no muy buena noche y parecía verse afectada por la frustración, así que, antes de que todos se levantaran, juntó unos cuantos inciensos, buscó música de relajación hindú en su reproductor y recordó su terapia años atrás. Aunque la ropa que llevaba puesta era más que injustificable, su actitud Zen parecía fidedigna.

Mira a Lourdes y con una forma de hablar atípica en ella, le dice - No mames, güerita. ¿A poco no está apenas el sol saliendo? Lo que necesitas es amor, guarrilla. Amor, amor, amor... - aspira profundo y mira a la Sholi.

- Debes atender sus necesidades sexuales. Una relación disfuncional sexualmente no prospera, te lo digo yo que lo viví - deja su posición de yoga por un momento para ponerse de pie y se enfrenta a Lourdes.

- Creo que hay algo que no ves. A ver, relájate, respira - alza las manos y respira profundo - y luego exhala... - baja las manos. - Te caería bien un saludo al sol, ¿Sabes? - hace una vuelta hacia atrás pero no pasa la cabeza y dice - Ya, ahora mis chakras se han estabilizado -.

Se palmea la cara y dice - Crees que sospecho de ti solo por lo de Pascual, pero no es así. Lo que digo es que convencieron a los de afuera de votar a la Eva para ser expulsada y eso no estuvo nada en onda... Que mala vibra la que tienes, deberías relajarte un poco. Además Sara puede ser un poco lenta, testaruda, mal hablada, fumeta, pero es una buena chica. Claro que nos obstaculizó la eliminación de Iker pero de resto, es buena chica y sigo creyendo que es inocente. Porque creo en ella y en Eva es que creo que sí querían robar las órdenes de despido del Iker. ¿Cómo puedes probar esto? Pues no lo sé, pero si sigues metiéndote con mi onda zen, tendré que darte tus palmaditas también, chulis. Eres ruda pero yo lo soy también. No eres mi sospechosa primordial, sino aquel que vive haciéndose el interesante con los embutidos, ese es mi sospechoso número uno - ríe y vuelve a su círculo de inciensos para hacer la posición del loto. 

Te parece extraño que haya votado por la persona que nos saco del Mercadona?. Yo se que Sholi es inocente. Intente explicarle a Eva cuando uso una carta contra ella. Si mintió con lo del walkie diciendo que hablaba con Manuel pero era porque quería sacar una verdad de una mentira. De ahí que la votaramos. No voy a ser tan gilipollas de no votar contra la tía que nos echo de aquí sin nigun miramiento cuando encima le deje en sus manos un poder que si lo llego a saber se lo dejo a otro. No hemos actuado por venganza. Creíamos que es infiltrada. Pronto averiguare si es asi o no. Si resulta que lo es tendrás que volver a tragarte tus palabras Asunción. Lo que tu ni Sara parecéis querer entender es que Sholi roba las cosas para que no queden en desuso. Lo hace para ayudar. Si toma los papeles de alguien los utilizara con cabeza si hay un infiltrado claro.

Sara se había despertado muy temprano aquella mañana. Así que cuando el Bulldog se presentó, ella volvía del vestuario con el pelo mojado, tras darse una ducha. 

¿Dos expulsados esta noche? Se preguntó mientras paseaba su mirada entre la gente que quedaba. ¡Mierda! ¿Esto no acabará nunca o qué? Se mordió el labio y se fue a buscar un yogur para desayunar, mientras el encargado seguía gritando. A medio camino se giró al escuchar alboroto y vio aparecer al Pascual sobre un carrito. Estuvo a punto de sonreír, ya que la escena era bastante graciosa. Pero entre el dolor de cabeza que tenía y la mala leche que todavía guardaba dentro, sus labios tan sólo dibujaron una pequeña curva. 

Cogió un yogur grande y, tras comprobar que ya se había ido el Bulldog, regresó a donde estaban todos. Se sentó en el suelo, con las piernas cruzadas y empezó a comerse el yogur, mientras escuchaba a la Lourdes de fondo. Levantó la mirada, clavándola en los ojos de la frutera y entrecerró los párpados.

- Estás perdiendo el tiempo, la Eva no era una puta infiltrada - . Le dijo mientras la señalaba con la cucharita de plástico. Su rostro mostraba seguridad en sus palabras. - Si lo hubiera sido, me lo habría dicho. Ella sólo quería ayudar - . Llevó de nuevo la cucharita al yogur, cuando sus ojos se abrieron como platos al escuchar sus últimas palabras. - Joder, ¿veis? Hostia puta, tanto llamarme mentirosa ayer y mirad como está confesando la muy guarra. ¿En qué más habéis mentido? Como para fiarnos de vosotras. Me cago la puta las tías estas. Pues sí, por eso os echó la Eva, porque sois unas mentirosas y unas liantas de mierda - . 

Ha sido un viaje duro. Han sido unos días de lucha constante, casi sin dormir acampando delante de un supermercado, combatiendo contra empresarios ávidos de poder, con no más compañía que unos cuantos periodistas, feministas de femen medio desnudas y los cuatro currantes despedidos que se han quedado en la puerta del Mercadona a ver que pasa. Para Pascual, ha sido el momento álgido de su carrera como sindicalista. Ha organizado desde el primer momento una huelga para recordar. Ha llamado la atención de los medios, y con su buen hacer ha conseguido que hasta las altas esferas del sindicato intervengan en el conflicto, si bien no han tenido en cuenta para nada su opinión. Y ahora estaba reincorporándose al interior del edificio, dispuesto a llevar la huelga también a puertas adentro.

- ¡Allá voooooooy! ¡Apartao' que ze abre pazo la claze obrera en movimiento!- El carrito aparca justo en frente del Bulldog, que examina con suspicacia la carta de readmisión.- Po' claro que eztá correcta. ¡Como que mi dezpío fue improcedente de primer orden! Pero bueno, dejemo' ezo de lao que eze ez el menor de nueztro' problema. ¡Compañero' y compañera! ¡Trabajadore y tranzeunte! ¡Traigo un menzaje de rebelión contra la' e'fera dirigente' de ezte zupermercao! ¡Afuera, todo el mundo eztá atento de nozotro'! ¡La reziztencia activa de ezte Mercadona e' un ejemplo de lucha obrera! ¡Debemo' encontrar a lo' traidore' de claze que eztán jugando con nueztro' trabajo, a la' órdene de la oligarquía emprezarial! ¡Loz dueñoz del Día y del Mercadona eztán jugando una partía de parchí' con nuestro' puezto' de empleo! ¡Ahora mizmo voy a e'cribir pa la readmizión de otro' trabajadore' honrao!

Con la mayor presteza que el sindicalista puede sacar, se mete en la sala de personal y pasa un par de minutos rebuscando papeles. En el proceso suelta algún que otro improperio, y vuelve con dos hojas de papel en la mano.

- ¡Me caguën quien me ha robao una de la' carta de re-admizión de mi cazillero, que la' fotocopia de ezo cueztan dinero, y zuztituir a un trabajador zindicao e' un delito! Ahora ya na ma' que puedo meter a do' pa dentro. De aquí a na' tenemo de vuelta al Joel y al Manuel, y a ver zi con zu ayuda podemo dezentrañar ezte confábulo de infiltaó zionizta' menchebique'.- Y sin más dilación entrega las cartas de re-admisión al Bulldog.

El Bulldog sale de nuevo con cara de hastío al escuchar los gritos de Pascual y se acerca a él para coger el papel que le tiende. Lo revisa con cuidado y después pone los ojos en blanco mientras le ofrece el documento a uno de los armarios. - El cansino del sindicato tiene razón. Está en orden. - Y sin decir nada más se acerca a la urna y echa un vistazo a su interior antes de alejarse y meterse otra vez por la puerta de "Privado".

El guardaespaldas coge el papel y se mete por la zona de los almacenes. No tarda mucho en aparecer de vuelta acompañado de Joel, que es quien lleva ahora el documento en la mano. Lo deja junto a vosotros y sigue los pasos de Enrique hasta que lo perdéis de vista.

Los comentarios de Asun hacia Lourdes sobre la Sholi  y su disfuncionalidad sexual hacen que Shakiro, una vez más, se eche a llorar virilmente.  Todos sus sueños de paternidad  aleatoria sobre Xékspir se deshacían como hielo en garrafón del malo. ¿Quizá debería enfocar sus ansias de pasión hacia otro individuo? El lejía tenía su aquel, un aquel sórdido como un glory hole de diseño.

Examinó cuidadosamente al ex-legionario. ¿Cual sería su mejor plan de aproximación? Necesitaría un felpudo marrón y dos croissans. Con eso podría improvisar un disfraz razonable de cabra.

Confirmado. Eva es una infiltrada. Concretamente del Lidl. Y no es la única sorpresa desagradable que hemos averiguado. Mi voto no irá para Damián tal como pide Asun. Irá para Sara. Ha mentido encubriendo a Eva y a Iker, ambos infiltrados. Ha mentido diciendo que Sholi iba a robar sus papeles. Aqui la única que utiliza papeles de despido eres tu. Gente honrada que quede aqui pido el voto para la pelo chicle.
Afortunadamente Pascual utiliza las cartas que quedan para traer de vuelta a dos inocentes. Menos mal que has podido utilizar el resto. Una carta la utilizo Sholi para hacer el bien y vaya tela.

Al ver a Joel tras tantos días, Sara le miró y le sonrió. Aunque no fue una sonrisa muy amplia, cansada como estaba de todo aquello, aún así se alegraba de volver a verle por ahí. 

Pero su rostro se ensombreció al escuchar a la Lourdes.

- Eres una cerda mentirosa - . Le espetó, encarándose a ella. - Yo no he ocultado a nadie porque es mentira lo que estás diciendo. No hace ni diez minutos que has confirmado que estábais mintiendo y ya te estás inventando otra cosa. Mentisteis con lo del puto walkie, queríais robar los papeles del Iker y ahora te inventas esto. Eres lo puto peor que me he echado a la cara - . Sara dejó el yogur a medio comer a un lado y se levantó para encararse a la frutera. - Eva lo único que hizo fue descubriros ante todos. Y te recuerdo, hija de puta, que cuando el Iker me lo contó dejé de protegerlo... Me das asco -. 

Asco me das tu. Que estás mintiendo como una descarada para salvar los infiltrados que quedan del LIDL en este supermercado. Eva es una infiltrada del LIDL, digas lo que digas pero mira, no soy la única que lo sabe. Tu amiguita no va a volver, y tu te vas a ir a la puta calle tarde o temprano, detrás de mi o antes. Los infiltrados del dia ya saben lo que eres, te van a quitar del medio en cuanto puedan. Saca un papelito de despido anda, asoma la patita. Ah no, que lo haces de noche igual que los otros sinvergüenzas. Lo que tengas que hacer hazlo ya y no me sigas taladrando la cabeza. En la urna está mi voto, vótame o utiliza el papel de despido para sacarme de aquí.

Joel lo había pasando tan mal... Pasó frío, luchó contra feminazis pro-abortistas y señoras que buscaban ofertas de maquinillas de afeitar a las puertas del Mercadona. Fue la peor experiencia de su vida pero por fin estaba de vuelta. Cuando el gorila del Bulldog le habló fue como el abrazo de un ángel que le rescataba, estuvo a punto de llorar de alegría. Podría pagar el Subaru, y no tendría que volver a pedirle dinero a su vieja. - Joder Pascual... eres el amo tio, te quiero, en serio.

- ¡Papi ha vuelto chicas! - Dijo mientras entraba con los brazos en alto como un triunfador. Los ánimos fueron calmándose en cuanto escuchó como todos se estaban echando los trastos los unos a los otros. - ¿Eh? ¿Qué pasa? A Sara y Lourdes solo les faltaba tirarse de los pelos. 

- Vale... No sé mucho de lo que ha pasado aquí pero voy a exponer todo lo que yo sé, y juro por mi Subaru que todo es verdad. - dijo tratando de calmar los ánimos. - Sara no es ninguna infiltrada, de hecho lo confirmé los primeros días. Yo mismo la espié y supe que ella simplemente tenía las llaves de algunas habitaciones. - Miré a Lourdes con el ceño fruncido. - Así que no entiendo porque estas diciendo todas esas cosas Lourdes. Eva tampoco es ninguna infiltrada del LIDL, lo mismo ocurrió cuando la espié a ella. Pude confirmar que no era ninguna infiltrada de nada, de hecho su rollo era ser rebelde e ir por su cuenta. Incluso vino a vernos cuando despidieron a Manuel y nos ofreció ayuda.

El reponedor empezó a atar cabos y golpeó ambas manos en gesto de eureka. - Lo que si que hay es algo seguro, la Sholi y tu podéis robar las pertenencias de una de las últimas personas que hayan expulsado. Y seguramente os hayáis hecho con las cartas de alguno de los últimos infiltrados, como Paquito o Saray. Además os inventasteis que estabais hablando con nosotros cuando no era cierto, todo mentira.

- Voy a votarte Lourdes, y espero que el resto haga lo mismo. De esa manera os expulsaremos de nuevo a ti y a la Sholi. ¿Por favor podemos acabar con esto cuanto antes? Son unas mentirosas asquerosas, y lo único que están haciendo es confundirnos.
 

Sara arqueó ambas cejas y se mordió el labio. Paso de discutir con esta imbécil. Ignorándola, se volvió hacia los otros.

- Es mentira que seamos unas putas infiltradas - . Empezó a explicar y suspiró. - Votaron a la Eva por venganza y ahora se están inventando todo esto porque quieren joderme. Hostia puta, acabáis de escuchar como confesaba que toda la mierda esa del walkie era mentira y también que querían coger los putos papeles del Iker - . Miró al Joel y una sonrisa de alivio se perfiló en sus labios. - Tío, joder, menos mal que has vuelto y puedes explicarle a todos lo mentirosas que son estas tías. Ahora se están inventando todo esto para echarme porque saben que puedo espiarlas. No paran de tramar cosas - . Se volvió a mirar a la Asun. - Y después irán a por ti, ya lo están planeando - . Le explicó y una mueca se formó en sus labios. 

Se había levantado, un día más, con los gritos de Enrique. Por lo que somnolienta se había acercado a las cajas y sentado de nuevo en la silla donde ayer estuvo todo el día. Escucha a la Asún y Sara discutir con Lourdes, como van gritándose entre ellas y culpándose unas a otras. Entonces aparece Pascual con una carta de re-admisión, y al momento saca otra para meter a Joel. Y tras una pequeña pausa con la llegada de estos dos últimos, de nuevo a gritarse las demás. 

-Joel, aye no se quin di'o que tu había dixo que te habían cambiao el voto, ¿no? Eso quiee deci que tolos que han votao a la Eva, son infiltraos. Por lo que para mi no hay duda. -mira a Lourdes y Sholi- Pa mi soy vosotra la infiltrá... Y me sabe mal poque confié en ti, Lourde. -se levanta de la silla y se acerca a la urna para votar- No vi a mentir, te voy a vota a ti Lourde, si al final si que soy inocentes, lo siento muxo, pero ahora mi'mo son muxa la mentira que ha dixo. 

La entrada de Pascual al supermercado me deja boquiabierto y con ganas de aplaudirle. Que entrase alguien de los "buenos" era muy buena noticia, y más aún cuando quedaban más infiltrados en el súper.

Tras su discurso sobre los jefes del Mercadona, no me queda otra que asentir.

— Muy cierto: me estoy cansando ya de que nos estemos jugando el puesto con la tontería de los infiltrados. A ver si termina todo pronto y podemos volver a la normalidad...

De repente, la entrada de Joel da otro atisbo de esperanza. ¡Bien, dos más! Esto va mejorando. Una leve sonrisa de felicidad asoma por la comisura de mis labios.

Sus palabras son muy contundentes, y puede que arrojen algo más de luz a la situación.

— ¿Así que Lourdes nos ha estado mintiendo todo este rato? —la miro— Cada vez estoy más confundido... Pero la verdad es que me fío de Joel...

Joel adoptó una pose triste y asintió lentamente a Maricarmen - Si... - Suspiró - Querían echar a Eva y alguno de ellos estaba lo suficiente desesperado como para hacer trampas en la votación. - Se giró hacia Pascual y prácticamente le suplicó que trajese de vuelta a Eva. - ¿Pascual podrás traerla de nuevo por favor? Es una buena amiga y todo lo que ha hecho ha sido para defendernos de los infiltrados.

A continuación paseó hasta plantarse frente a la Sholi y Lourdes con la mirada llena de odio. - Pero vosotras, vosotras en cambio sois los peor. Confié en vuestra palabra cuando estaba ahí fuera y ahora me doy cuenta que sois el cáncer de este lugar. No hacéis más que mentir, mentir y volver a mentir. Levantó la mano y señaló con el dedo a Lourdes. - Dices que Sara es una infiltrada únicamente porque puede espiaros en el cuartito donde habláis tu y la Sholi en privado. ¿Es un inconveniente que alguien pueda escucharos como planeáis los despidos verdad? ¡Iros a cagar anda! A ver si os echan ya rápido, mentirosas del carajo. 

- Gracias Damián. - Le saludó con un gesto de cabeza y se esforzó por sonreír. - ¿Todavía te queda algo por ahí que pueda llevarme al buche? Lo único que he comido ahí fuera han sido perritos calientes que robó el chino de los congelados antes de que le echaran.