Partida Rol por web

-Por favor... Podriamos darnos prisa y hablar mas bajo.- Rogo la joven perdida, a brazo de Macario y Miriam, con los ojos entrecerrados.- No me encuento muy...

Y la joven, de repente, agacho la cabeza, notando Miriam y Macario como se le aflojaba las fuerzas, por unos segundos parecia lo peor, cuando se recupero despues de unos largos segundos y alzo la cabeza de nuevo, aunque con la mirada perdida.

-¿Uh?¿Hemos llegado ya?- Pregunto en un leve hilo de voz.

Aun no Abbie, aun no, pero ya vamos.  Listo compañeros, vámonos agarrando camino.

Macario avanzó con la chica, pero al hacerlo también puso su brazo gentilmente encima del hombro a Miriam, con cariño y agradecimiento:  Miriam, eres un ángel.  Mira que tu meterte al seto por buscarme.  ¡Eso toma más valor que el de toda una corte junta!  Dieron unos pasos.  Te lo agradezco mucho, de corazón.  Le dio un beso en la mejilla con ese cariño que sólo pueden sacar los changelings, ese cariño como jugo que se logra sacar de una fruta ya seca y exprimida, que es milagro y sabe a gloria, para quien lo bebe o lo presencia.  

- Descuidad. - le digo a Miriam. No pensaba hacer otra cosa.

- Desde luego todos los aquí presentes abandonará el Seto antes que yo. - pienso.

Dicho esto sig avanzando atento a todo lo que nos rodea. No quiero que el Seto nos ataque nuevamente.

Los cuatro volveis a la entrada, siendo el viaje de vuelta mas tranquilo y facil de lo usual de lo que suele ser, sin embargo, siendo Pietrus el primero en notarlo, este se para de inmediato e instintivamente toma refugio bajo la sombra de un arbol para ocultarse entre la maleza, al igual que hace el resto.

Lo habeis visto todos, delante vuestra hay tres figuras vestidas con armaduras y armas, verde esmeralda y azules cielo con distinguidos detalles como blasones de flores, soles y astas grabadas en el metal, Macario y Miriam pueden reconocerlos de inmediato como heraldica perteneciente a Primavera.

Entre ellas estaba Jennie, examinando y vigilando la entrada, mientras comprobaba la posicion del sol, parecia estar dando unas ordenes a sus guardias armados en voz alta y clara, pero desde donde estais es dificil escuchar mas alla de un susurro a vuestros oidos.

Bien.  Vinieron nuestros rescatadores.  Sugiero que nos revelemos, son Primavera. - les dijo Macario a Miriam, Pietrus y la chica, apenas consciente.

Recuerde Ser Xavi que yo los llamé de backup por si nos metíamos en dificultades, antes de saber nada -le dijo de manera privada a su compañero, en una de las distracciones de Miriam con los avistados.  De todas formas, si los sobreoía, no habría forma de interpretar malicia en el decir de Macario- Déjeme a mi hablar. 

Recuerde que cuando nos despertamos del sueño raro ese, una persona nos dijo que nuestro compañero Botas, a quien curábamos del evento ese del escarabajo mecánico, había huido como perseguido por alguien, como por un fantasma o así, y lo seguimos siguiendo pistas por la calle.  Con eso dimos a dar a esta entrada al Seto.  Y avisamos por respaldos, como se debe hacer siempre que uno se adentra o descubre estos lugares peligrosos.  Y pues no, que al buscar la pista, que resultó ser falsa, el camino nos llevó afortunadamente a esta pobre chica.  Bendita primavera que nos permitió rescatarla de las garras de ese seto tan agresivo que la ocupaba.  

Pobre.

- Tengo ojos en la cara. - digo a Macario. Ya veo que son Primavera. - añado con visible desprecio pues no olvido el miserable ataque a Botas.

Luego sin más me levanto y avanzo hacia Jennie dejando justo a mi espalda a Macario, Miriam y la muchacha.

Si piensa que esto va a quedar así ser Xavi, lo lleva usted claro. Nadie amenaza a Miriam White y se va de rositas... ¿Y Macario no va y me besa?

Sabiendo los propios efectos de sus habilidades y de la indiscreción de Macario supuso que mas pronto que tarde trataría de indagar en sus deseos, por lo que se esforzó en mantener la mente centrada en cosas inocentes.

Su deseo a corto plazo estaba claro que era salir del Seto, y era muy cierto le estresaba sobremanera estar ahí. Y a medio.. quería ayudar a Macario eso también era real, aunque siendo 100% sinceros se quería ayudar a si misma... No no, ¡mente centrada en ayudar a Macario!

Miriam se sonrojó al recibir el beso de Macario, debido también a las hermosas palabras que lo acompañaban, y le devolvió un cálido beso en la mejilla. Ante la incrédula mirada de Xavi que no podía ver peor momento para gestos tan inutiles.

-Macario, recuerda que aun sigo siendo tu superiora... -Dijo tratando de mantener la compostura y recuperar su pálido habitual.

A la agraciada no le sorprendió ver a los de su corte por allí, pues antes de adentrarse había dado aviso de lo encontrado y solicito ayuda, para el peor de los casos. Susurro palabras tranquilizadoras a la joven y también avanzo hacia su reina y compañeros de corte. No podía alegrarse mas de verlos.

No obtienes mucho, no porque lo hayas intentado, sino porque realmente habia poco que buscar, los deseos del Ogro olian a sangre y sudor de la batalla, tipico en los de su simiente. Parecia que la idea de provocar una pelea en un bar, le era mas atrayente que una cita.

Sin embargo, no sientes que sea realmente asexual ¿Quizas hay algo que se te esta escapando?

Cuando salis de vuestro escondite, al veros a Jennie, lo primero que hizo al instante, para sorpresa de todos, fue avanzar corriendo hasta Macario y abrazarle, levantandolo en peso mientras lo cargaba en sus brazos.

-¡Oh, gracias a Dios, que estas bien!- Proclamo la reina de Primavera, dejando en el suelo al joven artista, y llevando sus manos a su ropa y pelo, arreglandoselo y limpiandolo.- Estas hecho un desastre, cuando oi de la desaparicion de Botas y Berry, empece a temer lo peor.- Confeso, con un tono preocupado y nervioso raro en la reina, que casi costaba reconocerla.

Pero entonces, giro la cabeza, y vio la perdida que estaba en brazos de Macario y Miriam, abriendo los ojos de par en par, parecia haberla reconocido.

-¿Abbie?- La nombro la reina, casi al borde del llanto.-¿Pero que te ha ocurrido?- Su mirada bajo hasta las heridas vendadas de sus costados, y luego siguio hasta Pietrus y sus armas. Su mirada se endurecio al igual que su rostro y sus llamas se agitaron con fiereza, volviendo a ser la reina que todos conocian y temian, señalo al caballero de verano.-¡Guardias, arrestad a este asesino por atacar a uno de mis siervos, DE INMEDIATO!- Ordeno de inmediato, sin siquiera pedir una explicacion, y sin que vosotros supierais si actuaba por deduccion e intuicion o puro impulso y rabia, el metal sono cuando cada las armas salieron de sus fundas, junto el sonido de las armaduras tintinear a cada paso.

Macario se interpuso entre la mole de Pietrus y los guardias de Primavera.  ¡Antes me cortan a mi que a este caballero honrado!  

Ser Xavi lo único que ha hecho es ayudarme a rescatar a la joven perdida, Absenta de nombre, arriesgando su vida y cordura al entrar al seto.  Solidaridad entre cortes es lo único que ha mostrado.  

Reina, Jenny, -se volteó hacia la lideresa marroquí- Ser Pietrus sólo me ha brindado apoyo en todo.  Hasta entró buscando conmigo a Botas por esta entrada engañosa al Seto, en lo que fue una tontería mía, pues nada del gato encontramos.  Falsa pista, error mío, pero no hay mal que por bien no venga, y a una chica hemos rescatado.  

Volteó a ver a la chica para ver que no estuviera alterada por las confusiones ¿De donde la conoces? ¿Era, es, Primavera?

- ¿Atacar a uno de sus siervos? - digo indignado llevando las manos a las empuñaduras de mis armas sin terminar de desenfundar pues si lo hacía sin duda habría un baño de sangre y gente inocente podría salir dañada.

- Cuando la encontramos estaba siendo atacada por el Seto. - prosigo con la explicación empezada por Macario. El Seto la tenía totalmente envuelta y la liberé haciendo una buena poda.

- Su forma de agradecermelo fué lanzándose a por mi y extrangularme con una fuerza que jamás pensé que pudiera tener alguien de su constitución. - continuo. Tan sólo me defendí y luego ayudé a curar sus heridas en la medida de lo posible.

- Como bien podeis suponer si hubiera querido matarla lo podría haber hecho sin problemas pero en vez de eso os la devuelvo con vida.

- Es más de lo que vos hizo con Botas. - pienso sin pronunciar dichas palabras.

Permanezco inmóvil atento al devenir de los acontecimientos.

No soy un criminal y no pienso pagar los platos rotos de la inútil regente de primavera.

Ya sabía que Jeannie podía ser muy impulsiva, pero esta vez no había esperado ni a escuchar una palabra antes de movilizarse. El ogro se había enfadado y con razón.

-Querida, se que las cosas con la corte de Verano no están en su mejor momento, pero a pesar de ello, Ser Pietrus se ha comportado como todo un caballero y ha puesto por delante nuestra protección. No merece ser castigado, si no alabado. 

Guiño discretamente un ojo a Xavi, realmente le estaba agradecida por haberles escoltado, y mas aun por proteger a Macario, no sabría que hacer si le llega pasar algo a ese "pequeño ruiseñor".

Seguidamente se acerco a a su reina para comentarle algo mas discretamente.

Mas confidencialmente le hablo, de forma que solo las dos pudiesen enterarse.

-Si hubiese tenido algo de luces, podría perfectamente haber dejado a Macario tullido en mitad del seto y menuda cara cuando hubiese llegado el duelo... Lo que se merece mi reina es una recompensa que no pueda rechazar... Seguro que se nos ocurre algo, de hecho yo ya tengo algo en mente.

Sonrió ampliamente, era difícil descifrar si la perdida realmente queria compensar al guerrero o jugarsela.

Macario aguzó el oído para saber que le decía Miriam a Jenny. 

Jennie no parece para nada convencida ante las palabras de Macario y Pietrus, quizas por que conozca de antemano la relacion tan cercana entre Macario y la corte de Verano, pero cuando Miriam se acerca y le susurra algo al oido, las llamas parecen atenuarse y agitando la mano, obliga a los guardias a retirar sus armas y a que dos de ellos recogan a Abbie de las manos de Macario y Miriam.

-La mujer que habeis salvado, no es ni mas ni menos, la precursora de Botas como campeona de Primavera, y mi amiga, cuyo paradero desconocia desde hara años.- Dijo Jennie, sin quitar ojo de Abbie, pero aun manteniendose firme donde estaba.- Ser Xavi, pido disculpas por mi comportamiento, la desaparicion de mi antigua campeona estuvo rodeado de misterio, y hasta ahora, mis pensamientos me atormentaban por la noche pensando quien podia haber sido el responsable, temiendome lo peor, que alguna Hada hubiera querido vengarse de mi, secuestrandola.

Se acerco a Macario, y con un brazo posado en sus hombros, Jennie tomo a Macario bajo su regazo.

-Hoy es un gran dia, mi querido artista, pues es posible que hoy Primavera gane dos campeones, donde hemos perdido a uno.- Pietrus pudo notar una mirada cargada cuando menciono esto ultimo.- Y debido a que Ser Xavi ha sido el responsable del bienestar de dos de mis tesoros, queda formalmente invitado a acompañarnos a los baños Salamandra y la cena que se celebrara hoy en honor al regreso de mi vieja amiga. Miriam, te dejo a ti para que cuides y atiendas a Ser Xavi bajo nuestro techo como invitado de honor.

No sabía como tomarme ese cambio de actitud de la inepta Reina de Primavera. Asiento a sus palabras aceptando la invitación sabiendo que en caso de problemas pocos hay en esa Corte de Lameculos que puedan hacerme sombra en el Combate.

No obstante antes de seguir a mis anfitriones hago llegar un mensaje a Titania y a Lord Óxido para que sepan donde me encuentro al fin y al cabo más vale cubrirse las espaldas con estos malditos verdosos a mi alrededor.

Cuando hace el comentario de los Campeones observo la mirada que me lanza.

- ¿Que cojones hace esta gilipollas? - pienso malhumorado. ¿A son de que viene esa puta mirada de mierda?

- Macario, ten cuidado, ya sabes lo que hace Jennie con sus campeones. - pienso cuando este se aleja con la Reina de Primavera.

- Gracias. - le digo a Miriam una vez la pedante de Jennie se ha alejado com Macario. Parece que vuestra reina os tiene en gran estima.

Ey, querido Pietrus, pero en los baños Salamandra de lo que menos te tienes que preocupar es que te metan un catorrazo. -dijo Macario leyendole el ceño de piedra fruncido.  No todos son golpes de mazo, amigo. ¿Estas seguro de querer aceptar la invitación?  Di que estas indispuesto o algo.  Si tus secretos no salen violados de ese sitio me sorprendería tanto como si Costa Rica le ganara a Italia en el Mundial...  Y ahorita tenemos mucho más que cuidar que tus virginidades aun no perdidas. -dijo de una manera discreta.

Cuando Jenny se acercó Macario guardó el silencio detrás de una sonrisa suya, como de esas hechas de leche tibia.  Se dejó abrazar, Jenny era irresistiblemente maternal.  Si mi reina.  Insisto que ser campeón de Primavera no es mi meta. -caminó con ella- Quiero ser bodisatva, ya se lo he dicho.  Aunque bueno, lo que si es que se me ocurrió es que, como en el sueño raro aquel que tuve, usaré mis aerosoles como armas, ¿cómo ve?  Funcionó bien la primera vez, y así puedo usar mi habilidad artística a la ofensiva.  

Claro que...  -ponía en duda su propia estrategia- un buen bodisatva haría cosas para hacer ver al combate innecesario y de esa manera derrotar a la confrontación, convirtiendo al rival en amigo... Macario hablaba con emoción y gusto, no podía negar que le gustaba ser el centro de atención de su corte en este momento, aunque realmente quería comunicar algo para el largo plazo. Es importante que Jenny me vaya conociendo bien.  Una buena líder siempre combina los talentos para sacar el mejor provecho para el grupo...