Partida Rol por web

El cetro de la Ola de Frío I (La muerte de Haldir)

E3.- Un éxodo para el guardián

Cargando editor
12/08/2014, 12:22
Sir Gerard LeBlanc

Las protestas de Fanel le importaban poco al bretoniano. La educación era mucho más importante y, la verdad, tampoco era que pensase entretenerse demasiado en una conversación con la dama. Además, ella misma se estaba acercando un poco, lo que iba a acelerar las cosas.

Otra cosa es que la manera de acercarse y su saludo ayudara mucho a mantener a Gerard con un color normal en sus mejillas. No recordaba nunca haber visto en Bretonia a una mujer moverse así. Pero claro, no estaba en su tierra natal y aquella mujer decididamente no era bretoniana. Al menos sabía cómo pedir un saludo adecuado. Con delicadeza, el caballero le cogió la mano y la dió un leve beso, más un roce, en el dorso.

Tampoco se estaba dando cuenta de que Leopold le había seguido.

- Lamento decir que estamos de paso, madmoiselle - dijo, ignorando lo mejor que pudo los dobles sentidos -. Tenemos intención de partir ahora mismo, prácticamente. Algunos compañeros insisten realmente en ello - le mostró una educada sonrisa -. ¿Os van bien vuestros negocios aquí? No parece que muchos en un puerta quieran comprar joyas, aunque sí pociones... según lo que puedan hacer.

 

Cargando editor
12/08/2014, 20:55
Resha Leva

Las diferentes piezas que necesitaba para mis conjuros me habían hecho ir a una armería donde puede encontrar unos dardos y a una tienda de comestibles donde pude conseguir el aceite y la mantequilla. Terminadas las compras mi grupo y yo, fuimos a reunirnos con los demás que custodiaban el carro así como al joven Leopold, el cual parecía haber recuperado su curiosidad y zascandileaba por todos lados. Sonreía ante la situación, ya que no era mi cometido su cuidado y en parte por esa inocencia que hacía tiempo había perdido.

Parece que Grii y Leopold están condenados a entenderse. En esos momentos el viejo enano intentaba amarrar al joven y extraño niño. El elfo Fanel seguía con su osco carácter pero al menos había conseguido buenos precios para nuestro pasaje. 

Notas de juego

Las compras son correctas.

En cuanto a la cronología, es como dices ahora le toca a Leopold y después a mi.

Cargando editor
13/08/2014, 04:43
Gurnik Revientacraneos

en uno de los tenderetes le falto poco para comenzar una pelea cuando le mando mano a un justillo de cuero tachonado, el maldito comerciante trataba de extorsionarlo con precios tan exorbitantes, pero al final se llevo la pieza de armadura y el maldito avaro con sus monedas.

el enano consigue llenar su barril con el preciado liquido que le mantiene el sentido común a raya, el enano estaba hastiado del bullicio de las compras, prefería mil veces el sonido de un hacha destrozando un escudo que tanto parloteo, pero esa vena degenerada le broto por un segundo al escuchar las palabras de la mujer, así que sin mucho disimulo la examino para ver si algún aguante tendría*, mientras le sonríe con algo de interes.

lo poco de valor que había visto en el mercado estaba muy por fuera de su alcance monetario, y si bien parte del botín también le pertenecía a el, era evidentes que las dichosas pociones apremiaban para la supervivencia en el campo de batalla, así que comenzó a ojear la mercancía de la mujer, mas por curosear que por desear compra algo.

Notas de juego

Dios que aqui todo esta por las nubes o la miseria es nuestra amante mas acerrima.

me compro la botella de ron (mas otra para ir consumiendo e inmediato) para olvidar que soy pobre y lleno el barril para no recordarlo en el camino estos serian algo así como 26 chelines de plata verdad.

pediría a mis camaradas 10 de la reserva común coronas para un justillo de cuero tachonado 22 co

quedaria con 2 coronas por si hicieran falta para algo.

*¿en este mundo existe algún tabu entre las relaciones entre diferentes razas?

Cargando editor
15/08/2014, 05:03
Director

-Me alcanza para sobrevivir y llevar una vida digna guapetón; aunque si te preocupas por mi, bien podrías llevarme contigo- dijo la mujer entre sonrisas, las cuales dejaban entre ver ligeramente que a pesar de su peculiar atractivo, ya estaba considerablemente entrada en años, aunque bien conservada.

Aquella mujer charló un poco mas con el bretoniano mientras este respondió con la mayor cortesía posible a todo lo que decir y se deba engatusar para comprarle una pequeña posición; quizá mas adelante le fuera útil, aunque el no creía mucho en esas cosas. Leopold por su parte daba vueltas alrededor del carromato de aquella mujer entre curioso, disgustado y asombrado al ver tantas cosas que le eras peculiares.

Llegado el momento, ya no hubo mas pendientes y todos hicieron oídos a las quejas del elfo para entonces abordar la barcaza y por fin poner rumbo rio arriba, a través del Talabec superior, hasta el puerto de la ciudad de Bechafen.

Notas de juego

Todos: Disculpen el error en la palabra Vayan, muchas veces el corrector me cambia las palabras (que tan iletrado no soy xD) y ya por las prisas y el sueño ni me doy cuenta.
Todos: Nadie se pronuncia al respecto y nadie se acerca por lo que consideraré que no compran nada mas; aunque siendo precavido, les descuento 5co +10chelines para hacer con una poción curativa para el grupo (algo es algo). Ojo que pocas veces en Warhammer tendrán chances de comprar extravagancias y cosas raras (según lo que hagan claro esta).
Gurnik: El total es de 4 chelines y 20 peniques sin contar la pieza de armadura. Supongo no habrá oposición para que tomes dinero de lo acumulado y compres una pieza de armadura. En el fondo es mejor invertir ese dinero que tenerlo allí guardado. Así, con la pieza de armadura tu gastas 12 co, 4 c y 20p, a la par quito 10co a lo acumulado.
Resha: Transacción realizada.
Todos: Dado que no creo que haya algo mas que hacer, considero que con esto acaba su aventura en el puerto y se lanzan a lo que sigue. Para el próximo turno los llevare desde el puerto hasta la torre pues supongo tampoco tienen ninguna intención particular en la ciudad de Bechafen.

Fecha actual: Una hora antes del atardecer del 6 de Sommerzeit del año 2531.

Cargando editor
15/08/2014, 14:59
Angran

Esa mujer es una bruja alcahueta y chismosa, seguramente puta en su tiempo. He conocido a muchas como tú, vendéis artefactos de bruja y pociones mágicas. Muchas no funcionan, y cuando lo hacen son peligrosas, o cómicas si es otro quien las toma.

Angran bien sabía de remedios milagrosos, una vez fue engañado para tomar una poción que le protegería del frío. resultó no haber sido más que alcohol de los más horribles y fuertes que pudieran imaginarse. Por ello ahora desconfiaba de todo brebaje exótico.

Miró la barcaza. El Imperio y sus ríos, estaban por todos lados y siempre llenos de barcos. Resultaba más caro que viajar a pie, pero los encuentros con criaturas eran menos probables y se podía descansar mientras la barca seguía moviéndose.

Cargando editor
16/08/2014, 20:05
Sir Gerard LeBlanc

La sutilidad no era una de las virtudes de aquella mujer, desde luego.

- Más que preocupación, se trataba de curiosidad, madmoiselle - respondió él con gran educación -. Estoy seguro de que sois una dama capaz de valeros por vos misma.

Eso nunca lo habría dicho Gerard en su tierra natal ni a una mujer bretoniana por el simple hecho de que así no eran las cosas en Bretonia. Con cualquier otra mujer, sin duda el caballero se habría mostrado mucho más protector y dispuesto a ayudar. Incluso inicialmente, durante los primeros días de viaje con sus compañeros, trató de hacer algo similar con sus compañeras. Pero ahora comprendía que en el Imperio las cosas eran muy distintas y para empezar ciertas no eran ciertamente las damas que pudieran parecer. En este caso, los comentarios subidos de tono sucedidos en más de una ocasión por parte de ella hicieron que el bretoniano se diera cuenta pronto de eso.

- Bueno, en cualquier caso, debo marcharme ya. Tenemos cierta prisa - la dijo pasado un poco, para luego inclinar la cabeza con respeto -. Cuidaos, madmoiselle.

Tras la despedida, regresó con sus compañeros, dispuesto a seguir con el viaje y ver si acababan pronto y con éxito esa misión.

Cargando editor
20/08/2014, 19:03
Resha Leva

Bajo las continuas quejas y presiones de Fanel, empiezo a embarcar junto con mis posesiones y mi montura. Una vez realizadas las compras, el único trámite que nos quedaba era tomar el barco que nos haría llegar a nuestro próximo destino. Algunos de mis compañeros aun estaban enfrascados en transacciones, al menos así podía llamar a la conversación que parecía tener Gerard. 

Una vez subido y colocado todo en el barco, me apoyo en la baranda desde donde observo la ciudad una vez mas. Por mera curiosidad me fijo mas afondo en la mujer que habla con Gerard, pero esta vez uso no solo el sentido de la vista.

- Tiradas (1)
Cargando editor
20/08/2014, 21:22
Gurnik Revientacraneos

Las transacciones finalizaron sin más, y antes de poder poner un pie en un hostal el viaje prosiguió a los muelles para buscar una ruta rápida a su destino final, el enano no encontró algo más para llenar su bolsa, sin embargo sus ganas de blandir el hacha para destrozar a alguien seguían latentes y frescas, cosas que en una ciudad podía significar la cárcel o el cementerio.

En ultimas el enano aborda a la embarcación con ya la mitad de una de sus botellas de ron, se sienta , el alcohol es potente pero su cuerpo ya está acostumbrado a llenarse de la nociva sustancia, sin embargo más allá de una nariz roja y una sensación de calidez el enano se mantiene como si nada.

El enano comparte un poco del alcohol con Grii para matar el rato, en la medida que la embarcación se adentra en el rio el enano, opta por buscar un buen lugar para dormir un rato y recuperar fuerzas.

Cargando editor
21/08/2014, 13:00
Grii XI Melenarroja

"Como no deje de meter caña el Fanel este le voy a quitar la presión craneal usando el viejo remedio dawi, martillazo en la cabeza. No me fío de el, no señor."

Miró al otro enano con complicidad, y tras esto se dirigió a el en su bello idioma:

-*Me sigo sin fiar de ese tipo, es como si tuviera algún interés oculto. Creo que le vas a poder dar uso a esa armadura nueva que has comprado, estate con mil ojos.*

Tras esto, y habiendo hablado en voz bajísima para que nadie se enterara, procedió a montar todo en la barcaza rápidamente, recordando el episodio que pasaron al montar en la anterior barcaza, pensando en cual pudo ser la razón por la cual esos hombres aparecieron a galope.

- Acordaos del episodio en la anterior ciudad, esos tipos que vinieron a caballo... Vámonos de aquí, seguro que hemos llamado ya suficiente la atención.

 

Notas de juego

- El escudo y el martillo siempre a mano, el hacha colgando y la armadura puesta. Por lo que pudiera pasar. Insto a los míos a cargar rápido y a marchar. Ojos en todos lados, incluida la gitana, de la cual no me fío un pelo.

Cargando editor
28/08/2014, 08:25
Director

El viaje a través del río inicio ya caída la tarde y duró largos días. Al parecer en las montañas habían caído fuertes tormentas, o al menos eso afirmaba el capitán de la barcaza, y según señalaba, era debido a ello que la corriente y el caudal del río habían aumentado severamente perjudicando con ello el avance de la embarcación.

Para los mercenarios no hubo mas remedio que esperar y aguantar las constantes sacudidas de la barcaza. Los mareos se hicieron de lo mas continuo para muchos de los pasajeros, incluyendo a varios de los mercenarios que habían llegado con Fanel. Curiosamente el elfo no prestaba atención a ellos y a lo que hacían; incluso durante todo el viaje se mantuvo apartado, viendo siempre al horizonte y sumido en sus pensamientos. Aquel elfo parecía tener un desinterés por lo que le rodeaba parecido al que mostraba el mismísimo Vlad; no obstante, en Vlad era algo natural, pero Fanel mas parecía estar preocupado o concentrado en algo especifico que solo el sabía.

Al final, tras un largo viaje de algo mas de 5 días, la barcaza al fin hizo arribo al puerto de lúgubre ciudad de Bechafen con su estrechas calles y su peculiar arquitectura en tonos oscuros. Era ya entrada la noche cuando arribaron y pudieron tocar por fin tierra firme. Sin nada que hacer a aquellas horas, el grupo, liderado por Fanel se apresuró a salir de la ciudad para dirigirse a la torre del duque Domenor, quien probablemente les esperaba desde ya días atrás.

Notas de juego

Todos: Tras un siglo de ausencia, estoy de vuelta. Disculpen que no diera detalles de todo lo que me ha estado pasando, ni siquiera he tenido tiempo para ello. Resta decir que estoy de vuelta aunque sin PC por lo que iré actualizando conforme puede durante los próximos días.
Todos: Tal como se acordó, le descuento a cada uno 2co (ustedes y el caballo) y resto otros dos co por la carreta a lo que tienen almacenado.
Fecha actual: Noche del 11 de Sommerzeit del año 2531.

Cargando editor
28/08/2014, 09:14
Director

La torre se mostraba tal como la recordaban, vieja, solitaria y misteriosa. La noche hacia que se mostrara mas abandonada aun de lo que recordaban, aunque como bien sabían, por dentro no parecía ser una torre vieja y abandonada en lo absoluto.

El primero en recibirlos fue Jaime, el mayordomo de la torre al servicio del duque Domenor. Este les informó que su señor les recibiría gustoso en el salón de la torre, pero que si lo preferían podrían reunirse todos para cenar y hablar con menos formalidades.

Fanel había despachado ya a sus hombres tras llegar a la torre y ahora ordenaba a algunos sirvientes que llevaran la carreta hasta los establos de la torre; no obstante, Leopold no parecía nada conforme con que el cadáver de su maestro pasara la noche en un establo, por mas que fuera algo temporal como argumentaba el elfo en un tono temperamental e indiferente.

Notas de juego

Todos: Ustedes deciden que hacen ahora,; se van a dormir, ven al duque en su salón, cenan con él, etc. Pueden o no intervenir en el asunto de Leopold y Fanel. Claramente estamos cerca de terminar la escena actual.

Cargando editor
28/08/2014, 13:15
Sir Gerard LeBlanc

Como todas sus anteriores experiencias en una barcaza, para Gerard aquél no resultó un viaje demasiado agradable ni cómodo. No lo pasó tan mal dado que parecía estar acostumbrándose un poco a ese estilo de viajar, pero desde luego no iba a querer repetirlo pronto y menos si no había una necesidad imperiosa de hacerlo.

Lo peor de aquél trayecto fue lo lento que resultó comparado con los anteriores. Desventajas de ir río arriba, y más si lo que decía el capitán con respecto a las susodichas tormentas. En cualquier caso, resultó muy pesado y casi hubiera podido ser motivo de celebración cuando finalmente llegaron a su puerto de destino. Eso sí, el aire de la ciudad no impulsaba precisamente a que los ánimos se levantaran, lúgubre y oscura como era. Lo mismo se podía decir de la torre del duque, aunque en mayor medida.

Una vez hubieron llegado, el mayordomo fue quién los recibió, exactamente como recordaba el bretoniano que había ocurrido cuando él llegó por primera vez. Éste les explicó que el duque podía recibirlos ahora en el salón o que podrían encontrarse con él luego más tarde, en la cena. Para LeBlanc, el protocolo era el protocolo.

- Yo preferiría reunirme con el duque en el salón - anunció -. Espero que mis compañeros compartan mi opinión.

Listo para retirarse hacia el interior, el bretoniano pudo observar la "discusión" entre Fanel y Leopold con respecto al ataúd. Sin poder negar que en ese argumento el chico llevaba algo de razón, se acercó, preguntando cortésmente al elfo:

- Monsieur Fanel, ¿de veras no hay un sitio más apropiado y decente para el féretro en toda la torre? Siendo el cadáver de un amigo del duque, no me parece correcto que pase la noche en un establo.

Cargando editor
31/08/2014, 02:09
Gurnik Revientacraneos

alcohol y embarcaciones una combinación bastante particular, el primer día Gurnik se paso gran parte de la mañana alcoholizado con sus botellas de ron y la tarde durmiendo mientras abrasaba su hacha como si fuese su mas entrañable amante, entre gruñidos y ronquidos dejo escapar el nombre de alguna vieja amante o alguna prostituta de antaño, como sea su propia carcajada lo despertó ante la mirada atónita te algún marinero curioso, sin ningún reparo ni vergüenza busco un poco de aire de fresco al tiempo que revelaba a su compañero echándole un ojo al elfo con sus hombres, un enano desconfiando vive 10 vidas humanas pensaba mientras afilaba su hacha por si hacia falta.

5 días en el río la verdad ya ni recordaba como había comenzado esto, pero algunos paisajes le resultaban familiares por momentos, trato de pesca 2 veces, pero perdía la calma con facilidad, por momentos se preguntaba lo irónico que era un barco, un enano impaciente y un hacha sedienta de sangre, pero antes de enloquecer de aburrimiento y tedio llegaron a su destino.

tenia mucha hambre cuando llegaron a la puerta del torreón así que mas que intercambiar palabras e historias con el castellano tenia mas que claro que quería vaciar su despensa llenando el gaznate.

si si, como quieras, siempre que haya comida en la mesa y bebida en la copa estaré encantado de estar presente dice un poco agobiado por el viaje, si bien le reconfortaba estar en tierra, 5 días de camino y casi una semana sin rebanar a nadie le indisponía un poco, en cuanto al cadáver, no creo que le incomode en lo mas minino y al final lo acompañaran los nobles animales, mas de lo que se puede decir de otras compañías gurnik no era en lo mas mínimo sutil y su actitud empeoraba con cada minuto lejos de un buen trozo de carne.

Cargando editor
31/08/2014, 20:42
Resha Leva

Aunque el viaje había durado el tiempo mas o menos estipulado, el trayecto movido por las fuertes corrientes que se nos habían opuesto. Al menos esto hizo algo menos tedioso el viaje. Cuando por fin pisamos tierra firme, sabíamos que nuestra misión ya estaba casi terminada. Después de un corto trayecto pudimos observar como la torre se alzaba sobre nosotros.El mayordomo de la torre, nos explico que el duque nos recibiría en el salón en ese mismo momento si así lo deseábamos. Sería buen momento de encontrarnos con el y terminar ya con la misión encomendada. 

Al igual que Gerard, pienso que deberíamos hablar de inmediato con el duque. Puede que después tengamos mas tiempo para descansar.

Dicho esto me encamino a los establos para dejar a mi montura cuando escucho la discusión entre Fanel y Leopold.

- Debería tener mas respeto con los restos del guardián señor Fanel, es por lo que hemos tenido que viajar tan larga distancia y se merece un trato mejor que guardarlo junto con los animales.

Cargando editor
01/09/2014, 01:08
Fanel

-Un trato mejor?- clamó el elfo ya molesto. -Que quieres, que le haga un funeral aquí mismo y lance lucecitas y lleve a cabo un ritual? Solo recibo ordenes, no me interesa congraciarme con nadie ni rendir tributo a nadie-. El elfo era claro en sus palabras y aunque su postura era sincera, eso no hacia que fuera del gusto de los demás. -Ademas- dijo algo mas tranquilo, -que puedo hacer yo?, donde quieren que lo meta?, no veo otro lugar apropiado mas que las caballerizas. Si tienen una mejor idea, formulénla, si no, déjenme hacer mi trabajo y consulten el problema con el duque-.

Lamentablemente, en aquello ultimo el elfo Fanel tenia razón, y Jaime, para disgusto de todos, tubo que confirmarles que así era. Por tanto, no quedaba mas que hablar con el duque al respecto, probablemente ya tendría algo pensado pues el mismo los había enviado por el cuerpo.

Por ello, dejando sus corceles al cuidado de diversos sirvientes que los atenderian en las caballerizas, dejaron el ataúd atrás para que Fanel se encargará del mismo mientras se internaban en la torre para acudir ante la presencia del duque.

Cargando editor
01/09/2014, 01:26
Director

Su ascenso por la torre fue tal como lo esperaban, confuso y mas confuso. Tal como sucediera en el pasado, la torre parecía ser mucho mas grande por dentro, de lo que parecía ser por fuera. La aparecían interior de la torre reflejaba aun mas su antigüedad, aunque también tenia cierto toque místico y elegante a la vez. Subir y bajar por aquellos malditos escalones era algo que ya de cierto modo ya extrañaban algunos, aunque mas de uno no tardo en empezar a maldecir entre dientes por aquel camino laberíntico.

Al fin, tras un largo recorrido que durase varios minutos, el grupo llegó hasta un amplio salón que ya habían visto antes. Allí, al fondo, sentado en un bello y amplio mueble de madera oscura que usaba para reflejar su jerarquía dentro del imperio, se encontraba el duque Domenor, un par de asientos desocupados había a cada lado de él, uno de ellos como bien sabían, debería haber pertenecido a su difunto hijo, quien cayera años atrás junto con otros conocidos.

En torno a las paredes del salón había finas telas, cuadros y algunos emblemas nobles. A su vez, había también allí unos pocos asientos acomodados perpendicularmente a las paredes laterales, probablemente estaban allí para su uso cuando nobles importantes acudían ante el duque.

-Señor Domenor, los mercenarios han cumplido su misión y tal como ha solicitado, se encuentran ahora ante usted-. Clamó Jaime para luego presentar a los mercenarios conforme iban entrando, no le costo mucho recordar los nombres, aunque casi seguro que lo había estado repasando poco tiempo atrás. Y esto se notaba mas que nada por que el momento de tener que presentar a Leopold simplemente no supo que decir y se lo saltó para continuar con los demás.

Cargando editor
01/09/2014, 01:34
Duque Domenor

Descendiendo de su aposento, el duque se acerco a ellos bajando el par de escalones que diferenciaban el lugar en el que se ubicaba su trono con respecto a lugar donde se postraban todos los demás. -Sean bienvenidos de nuevo a este mi hogar. Se que la misión ha sido difícil y el viaje largo. No obstante hay cosas que no pueden esperar. Entiendo que han tenido éxito en lo que les he solicitado; necesitaré que me hablen sobre eso, pero aun no. Hay algunas personas cuya presencia he solicitado también aquí y que deben estar por llegar; ya conocen a uno de ellos, el sacerdote Seiger, exmiembro también del escuadrón de la llama súbita, al igual que algunos de ustedes-. Dijo el duque dando les la bienvenida y sembrando misterios.

-Lo mejor será empezar por recuperar las fuerzas- sentenció sin explicar de que hablaba para enseguida, dirigiéndose a Jaime, le ordenó trajera vijo y algunos aperitivos para sus invitados.

Notas de juego

Todos: Aenalor y Gurnik están ausentes por vacaciones y Arianne esta desaparecida. Por su parte Angran poco activo esta intermitente en la web, le solicitaré mas compromiso pues le necesitamos. Sea como sea, queda en ustedes (los que están activos), tomar las decisiones que están por venir, por lo que les pido un esfuerzo por mantener un ritmo de al menos un post cada 3 días.
Todos: Los que tengan trasfondo de la llama súbita deben conocer a Seiger, al menos de vista. A gusto de él, alguno de ustedes lo conocerá muy bien.

Cargando editor
01/09/2014, 22:29
Sir Gerard LeBlanc

- No dudo de vuestro trabajo, monsieur Fanel, sólo preguntaba si no había un lugar mejor disponible para el féretro.- le respondió Gerard al elfo. Sin embargo, una vez el mayordomo les explicó que, lamentablemente, no había nada más que pudieran hacer por el momento, el bretoniano asintió y se disculpó ante el elfo, dejándolo correr.

Después de eso, y al haber compañeros que estaban de acuerdo con él en ir a ver al duque inmediatamente, fueron guiados por Jaime por el interior de la extraña torre hasta el salón del duque que ya conocían. Al menos LeBlanc confiaba en no haberse mareado durante el ascenso. Se quitó los guantes de su armadura y cruzó las manos a la espalda, aguardando la llegada del noble imperial con respeto.

Cuando este entró, sin hacerles esperar demasiado, el caballero hizo una inclinación de cabeza respetuosa, escuchándole. Sin embargo, antes de que pudiera empezar a contarle qué había ocurrido o algo respecto al ataúd, Domenor mencionó primero que se les iba a reunir alguien más, y luego pareció desear que antes ellos se repusieran un poco.

"¿Un sacerdote?", pensó el bretoniano extrañado. ¿Cómo es que un sacerdote había formado parte de ese grupo? Pero antes, otras cosas requerían su atención.

- Muchas gracias por su hospitalidad, duque. También debemos agradeceros que enviara a monsieur Fanel y sus hombres. No esperábamos refuerzos durante la misión.

La repentina aparición del elfo había sido una gran incógnita... ¿Se la aclararía Domenor con aquél simple comentario al azar del caballero?

Cargando editor
03/09/2014, 05:07
Duque Domenor

-Ohh, el carismático elfo, aunque no tanto como su compañero Vlad- inició el duque su respuesta en relación a lo formulado por el bretoniano. -Temí que las cosas pudieran salir mal. Recibí informes de que había una gran fuerza de orcos en la región de Stirland, por ello envié a Fanel a buscarlos, le encomendé que contratará suficientes hombres en el camino como para enfrentar batalla. Espero les haya sido de ayuda-. Tras su explicación el duque procedió a acercarse mas a ellos y solicitar a uno de sus sirvientes que colocaran una pequeña mesa en el salón con aperitivos, vino y agua.

-De todo ello era de lo que quería hablar, e incluso también el saber cual fue el resultado de su misión y cuales fueron los contratiempos que enfrentaron en su viaje. Muchas cosas se hablan a lo largo del imperio, y la información de buena fuente siempre es bien valorada. Por suerte aquí vienen ya aquellos a quienes esperábamos-. Indicó el duque al tiempo que un sirviente presentaba a un par de recién llegados que hacían irrupción en el salón.

Cargando editor
03/09/2014, 05:49
Director

Sargón y Seiger habían sido conducidos a través los laberínticos pasadizos de la torre hasta llegar al salón en el que se encontraba el duque y sus acompañantes. Desde el exterior se podía escuchar hablar al duque, aunque no era claro que era lo que decía. Probablemente no era algo de lo que debieran preocuparse, ahora que estaban allí podrían enterarse del origen de su misión.

Uno de los sirvientes que les escoltaba, procedió a entrar y anunciar a los recién llegados. -Mi señor Domenor, tal como lo ha solicitado, aquí se encuentran Seiger Kantor y Sargón-. Para el enano Sargón todo era completamente desconocido, no había allí nadie que conociera, el niño con túnica roja, el mendigo con apariencia de elfo o incluso el caballero bretoniano, todos eran desconocidos para él, aunque bien sabia que había llegado el momento de poner atención a aquellos con los que probablemente trabajaría. Seiger por su parte, habituado con su atuendo de sacerdote, con su cabeza calva como siempre y su rostro siempre entre serio y taciturno, esperaba que los allí presentes le reconocieran, pues al menos el reconocía a algunos; reconocía a la elfa del bosque que hacia llamarse Arianne, reconocía al alto elfo Aenalor, igualmente para el fiero enano Gurnik o el siempre atinado Grii, y mas aun a la bella y fría Resha. A los otros, Seiger no les recordaba, aunque bien les parecía no haberlos conocido nunca.