Partida Rol por web

El noldo le respondió en privado al silvano diciendo:

-Creo que Liam también se dedica a la venta, ¿no recuerdas como se interesó en los porcentajes de las ganancias? alguien que sólo almacena no muestra tanto interés, de todas formas, puede que haya otros vendedores con sus almacenes de contrabando, pero eso habrá que irlos destapando poco a poco -concluyó el eldar teniendo claro que de momento poco más podían hacer.

Finalmente me sume a la conversación para dejar claro que habíamos hecho nuestra parte.

Como ve, hemos hecho lo que nos pedía...en una noche es imposible recabar mas datos de los que le acabamos de entregar...

Ya tiene usted la base de la infraestructura criminal...y no me cabe duda que dispone de los medios, para con esta información, apresar a los involucrados y tirar del hilo hasta llegar a quien se encuentra detrás de todo esto.

Ahora bien, si pretende que sigamos adelante con la farsa y nos encontremos con los bandidos, me temo que deberíamos ajustar la tarifa al riesgo que eso supondría.

A partir de aquel punto las cosas se pondrían mucho más peligrosas si los bandidos sospechaban lo más mínimo de nuestras intenciones...y teniendo en cuenta que nuestro negocio solo se sostenía en base a una serie de patrañas y verdades a medias, aquello era lo más probable.
No habíamos viajado a Tharbad para hacer el trabajo de los Guardias, sino para averiguar que había de cierto en las palabras de Turlin...y de momento nada habíamos descubierto al respecto. Ni Orcos ni extraños hechiceros...tal vez aquella trama de delincuencia estuviese relacionada con el apocalipsis que Turlin había vaticinado, pero de ser asi, de momento nada parecía indicarlo.

¿Han tenido noticias sobre Orcos en las inmediaciones de Tharbad , por casualidad?

Sabia que mi cambio de tercio seguramente sorprendería al enmascarado, pero era una pregunta que debíamos hacer, y probablemente nunca seria buen momento para hacerla.

 El emmascarado escuchaba con atención todo lo que los aventureros le contaban. A veces en silencio, a veces maldecía por lo bajo, como hizo al mencionarse a Hallas.

 Esa vil rata traidora... casi parecía a punto de escupir Supe de sus métodos... de cómo él y sus hombres aterrorizaban a la mitad de mercaderes del puerto. Pero siempre pensé que era leal a la corona... maldito sea.

 Negó con la cabeza al mencionarse al piloto.

 ¿Lorindel? ¿Lorindol? No, no me suena... debe ser de fuera de la ciudad. reflexionó en voz alta. ¿Liam? Sí, a ese sí lo conozco... ¿el vendedor? Pensé que era rudo, pero honrado... ¿chicos decís? Es una inominia.

 De hecho, el norteño de noble porte parecía cada vez más decepcionado y frustrado, a pesar de que esa era justo la información que había solicitado. Finalmente escuchó sorprendido el relato de la anciana y la pregunta sobre los orcos. Aqui decidió volver a encauzar la conversación.

 El trabajo no está terminado ni mucho menos. Sí, alentad ese encuentro dentro de dos noches. Yo mañana alertaré a la guardia y la prepararé para la emboscada. A la medianoche siguiente quedad con ambos en la Augon Vin. Hagamósle el trabajo fácil a los sepultureros. al no ser de la ciudad nadie entendió tan jocosa referencia Hay alguien moviendo grandes cantidades de Gort en el Barrio de los Ladrones. Es a él a quien quiero, ¿recordáis?

 Los aventureros no tuvieron otra que asentir. Era cierto que había pedido la identidad concreta de este personaje la noche anterior.

 El rey murió combatiendo a los orcos, bajo el mando de un oscuro hechicero. Si a eso os referís. contestó a Ragnar Lo lamento, pero no puede ser. Todos los guardias disponibles y no disponibles estan protegiendo la ciudad. Si hubiese mercenarios como vosotros, los contrataria en el acto. No podemos cubrir la ciudad de las chabolas, aqui al lado, cuanto menos emprender un viaje como el que describís. 

 Apoyo una mano en el hombro del noldo y con gesto apenado le dirigió unas palabras en sindar.

 El hombre habló en la lengua de los elfos grises con el alto elfo.

 Si en verdad deseáis ayudar a esta anciana... debéis recomendarle que se quede entre los muros de Tharbad. Tan sólo así podrá ser protegida. En cuanto atraviese los muros está en peligro... y vos lo sabéis.

 Después del consejo se separó del elfo y miró a los demás como esperando nuevos comentarios o preguntas.

El noldo esta vez se apresuró a intervenir, pues había varias cosas que no le cuadraban, así pues dijo con voz serena:

-Antes de proseguir, debéis tener en cuenta que hemos acordado, al menos con Liam, que le llevaremos un carromato de alcohol, por lo que si deseáis que sigamos con tal trato debemos tener dicho cargamento, o al menos uno similar que se asemeje al mismo desde fuera -expuso esperando que el enmascarado les ayudara en tal tarea- además os recuerdo que en dicha entrega puede que Liam no aparezca, aunque sería extraño, y aunque capturemos a sus hombres, seguro que lo ponemos sobreaviso y cambiará la ubicación de su almacén, no es algo seguro pero debéis tener en cuenta dicha posibilidad; en cuanto al Gort, en el barrio de los ladrones vi varios adictos que ansiaban en demasía lo que los chiquillos tenían que ofrecerles, no sé exactamente que es el Gort, pero le puedo asegurar que el muchacho que nos llevó hasta Liam estaba distribuyendo sustancias adictivas por lo que me atrevería a aventurar que es el propio Liam quien se encarga también de ese lucrativo negocio -concluyó esperando que aquella declaración lo sacara de dudas y diera por sentada su aportación en aquella misión, pues como bien decía el silvano rarito, habían sido contratados para eso, si necesitaban de sus habilidades de lucha, eso ya se costearía a parte...

En cuanto a lo que le susurró aquel noble, poco más añadió, pues le había dejado claro que no podía contar con ninguna fuerza extra.

El silvano creyó que debía intervenir por una vez, no era de decir mucho, pero a veces era necesario.

- hay varias cosas que aclarar, si necesitas acercarte más a Gort, puede que sea una persona o algún tipo de agrupación, sabemos que tenéis que poseer mercancía confiscada, si necesitas que nos adentremos en las sombras de un barrio corrupto primero deberás estar dispuesto a provocar un efecto placebo,... Para ello, en lugar de atrapar a nadie, y que sospechen de nosotros, deberás darnos credibilidad,...

Algunas cosas deben tenerse en cuenta, cuando se trata con gente mala o corrupta, tienden a creer que los demás también son como ellos - por nuestras acciones, puede que desconfíen en unos extraños, eso es bueno si mostramos que nuestros actos estan destinados a obtener beneficios a cualquier precio. Podemos justificar estar dispuestos a jugar sucio muy fácilmente gracias a cierta manipulación que ya hemos ejercido, nos falta la veracidad. Si no te basta lo que tenemos ahora, que es lo que podemos obtener tras exponernos a un sinnúmero de riesgos, en vez de acordar una emboscada en Augon Vin, lugar que por supuesto no conocemos - resaltó esa última frase - debemos facilitarles un primer botín, en botellas sin marcar, si poseen polvo mejor que mejor, hay que convencer a algunos para llegar a otros. Sin trampas ni detenciones, solo un beneficio nuevo puede llevar a los más antiguos a fijarse en unos extraños que normalmente serían ignorados.

Dicho eso, tocaba acordar los medios - si necesitas más, deberemos: - pasó a enumerar sus peticiones - 1. Disponernos un carro vacío fuera de la ciudad, en un lugar que quede bien oculto, 2. Que en pequeñas cantidades, para no llamar la atención, lo carguéis con botellas sin marcar que saldrán de las más antiguas que poseáis incautadas, esto lo harán solo entre dos o máximo tres personas de tu máxima confianza, que sepan no llamar la atención, por tal de evitar filtraciones, y 3. saber que aun y así nada asegura que este primer trato tenga éxito.

La respuesta del enmascarado había sido clara. No merecía la pena seguir malgastando el tiempo en peticiones que no llegarían a buen puerto. Al menos eso era lo que pensaba.

Nuestro siguiente paso era descubrir quien estaba moviendo el Gort en el barrio de ladrones...y eso seria en lo que debíamos centrar nuestra atención la próxima jornada.

Muy bien, pues eso haremos entonces...¿algún consejo sobre por donde deberíamos empezar?

Empezaba a molestarme la pragmática actitud del enmascarado. Alguien que no muestra su cara a sus aliados no inspira mucha confianza.
Estaba claro que sabia más de lo que nos contaba. Muchas de las cosas que le habíamos contado no lo habían tomado de imprevisto...y después estaba el tema de la emboscada...si pretendía empujarnos a una reyerta con los bandidos para que le hiciésemos el trabajo sucio...entonces es que todavía no sabia con quien se estaba jugando las alubias...pero si esa era su intención, pronto lo averiguaría.

Fjalar miró con desconfianza a su interlocutor. No tenía ganas de iniciar un enfrentamiento y hacer el trabajo de la guardia de la ciudad.

- El caso de Liam sería posible pero Hallas tiene varios guardias en su oficina. No creo que enfrentarnos a varios hombres a la vez sea adecuado y, una vez cortado el grifo de las drogas, las revueltas serán constantes por lo que el jefe del puerto podría ser destacado en otro puesto menos relevante- dijo el enano mirando fijamente a su invitado-. No me opondré a lo que decida la mayoría pero quiero saber todo lo que se nos requiere ya que parece que cada vez pide más.

En su raza siempre cumplian con sus compromisos pero parecía que el humano pediría nuevos compromisos siempre que fuera necesario para sus intenciones y eso le enfadaba. Con toda la información reunida la guardia de la ciudad podría acabar con todo de una forma menos peligrosa, o eso pensaba el enano.

 Si el grupo estaba molesto con él, el emmascarado no parecía darse cuenta.

 El Gort no es ningún grupo ni nada por el estilo. Es una hierba prohibida en la ciudad, como ya os indiqué anoche. Sí, es posible que Liam esté detrás, pero también puede ser que no. Debemos estar seguros. respondió a ambos elfos ¿Un carro en las afueras? ¿Con botellas de licor? No duraría ni dos horas. Os recuerdo que fuera de los muros los bandidos campan a sus anchas.

 Entonces se centró en el tema de la emboscada.

 No, no... Hallas es cosa nuestra. No voy a ofrecerle ningún puesto más. Sera ajusticiado con todos los demás. negó con la cabeza. Parecía muy molesto con la actitud del capitán del puerto. Si no sabéis donde está Augon Vin, buscadlo. Es una plaza aqui, en la ribera norte. Mañana os conseguiré un carro... con cajas vacías... para el intercambio. Como acabo de mencionar, prepararé la emboscada con la guardia de aqui a dos noches.

 El hombre repetía una y otra vez sus instrucciones, sorprendido por tantas dudas y preguntas.

 No pretendo que combatáis a los hombres de Hallas, pero sí que averguéis quien mueve el Gort y que testifiquéis en la corte. Ese fue el trato, ¿no es cierto?

 Miró a todos los presentes por si había más dudas antes de marcharse.

El silvano que si bien hablaba poco, se molestaba menos, estaba viendo puesta su paciencia en juego.

- creo que el que no entiende nada eres tú, refiriéndome a "quien es Gort" me refiero a quien está detrás de él, si haces esa emboscada las tapaderas creadas quedarán destapadas, y nos cerrará tantas puertas que te quedarás con lo que ya hemos averiguado ni más ni menos. ¿No cobraremos por ello? Me da igual, no me importan demasiado esas monedas por las que muchos se obsesionan, más allá de las que necesite para el día a día - Miró un instante al Noldo - al menos nuestra tapadera no se vería afectada, pero si paralizas la entrada ilegal de mercancía, frenarás el flujo de información y solo lograrás que el Gort y otras mercancías desaparezca por unas semanas hasta que hay en otra forma de introducirla.

- y no me importa donde esté Augon Vin, porque si se supone que somos nuevos en este lugar, tal y como acuerden un supuesto trato en un lugar que parece ser bien concreto, sabrán que pasa algo, que van a una trampa y por tanto puede que la trampa te la tiendan a ti, y por consiguiente a quien esté en medio, ¿tu lo has dicho verdad? Ese no es el trato, no tenemos porque intervenir en ese intercambio, y tirar por tierra los rumores que se formen en torno a "los nuevos".

- Resumiendo, nos desentendemos de Hallas, dado que ya hemos descubierto que es corrupto, hacemos que el contrabandista se eché al río y pierda 4 días en ir y volver de buscar una mercancía que no existe y, en ese lapso de tiempo, hacemos una emboscada a Liam y le sonsacamos quién es el que trae la droga a la ciudad- dijo el enano pensativo-. Seguramente sea Lorindel el que introduce esa mercancía y se la entrega a Liam para que la venda pero estará bien confirmarlo, supongo. Nos dijo que normalmente se echaba a navegar hacia el sur así que es posible que obtenga allí el contrabando.

Fjalar veía ahora el cuadro más completo y dudaba de que hubiera alguien más involucrado. El piloto había demostrado ser una buena pieza y no creía que nadie más intentara introducir mercancías, sobretodo una vez que se hubiera ajusticiado a los tres responsables de esta trama.

El noldo se quedó atento al tensamiento que estaban sufirendo las negociaciones, eso no les convenía, pues quieran o no, era ese tipo el que debía pagarles, y no era bueno que se llevara una mala imagen de ello. Así pues, aprovechando el resumen que hizo el enano, respondió diciendo:

-Está bien, intentaremos buscar mejor quien mete el Gort -expuso mirando con incredulidad a Elendorn pues no entendía por qué decía que Gort era una persona- no obstante, lo que dice mi compañero es cierto, la entrega del cargamento es algo bastante peligroso, y en el que nos jugamos no sólo nuestra tapadera sino el tipo, pues si le dan por registrar las cargas que transportamos antes de que llegue la guardia, tened por seguro que nos matarán -concluyó dejando claro que eso no era lo estipulado- así pues, si nos vais a pedir que nos expongamos tanto en primer lugar, en el carro necesitamos que haya botellas de color negro, para que no se vea su interior y rellenas de agua aunque sea, excepto una que sí será de alcohol de gran calidad, que será la que demos de muestra, por otro lado, no os preocupéis en donde dejar el carro, escondedlo en algún lugar y al instante que vuestros hombres lo suelten, lo cogeremos nosotros, y no se preocupe que los dunlendinos no nos supondrán un problema, y por último, cuando todo esto acabe, si nos hemos visto obligados a pelear, espero que acepte cierta "gratitud" por su parte, ¿le parece? -concluyó esperando que el trato le pareciera justo y pudieran dejar las cosas claras.

El enmascarado parecía tener prisa por forzar el encuentro...solo dos noches... Eso nos dejaba con apenas dos días para averiguar quien estaba moviendo el Gort y de esa manera evitar el riesgo de un posible ajuste de cuentas con los bandidos. Llegado el momento, el grupo estaría preparado. Bien, pues si eso es todo, con su permiso regresaremos a nuestras habitaciones. Es tarde y mañana nos espera otro día atareado parece... Salude educadamente e hice ademan de abandonar la habitación aunque esperé por si alguien tenia algo que añadir.

Elendin estaba callada, pensativa, y no dijo nada. Había mucho que hacer, y la idea de los barriles de alcohol estaba siendo demasiado compleja como para ponerse a resolverla esa noche, por lo que callada, esperó a que la reunión se disolviese por fin y poder tener algunas palabras con Tirlindë.

 El hombre emmascarado se quedó perplejo ante la reacción del grupo, especialmente de los elfos.

 ¿Que yo no entiendo...? le dijo sorprendido a Elendorn cómo si sus palabras fueran ofensivas en sí mismas No, deberían conseguir que el piloto se reuniese con Liam. No se preocupen tanto por el cargamento, la cuestión es que la guardia los encuentre con las manos en la masa. 

 Insistió, respondiendo a la suposición de Fjalar.

 Me alegro de que esa chusma dunlendina no sea un problema para ustedes. dijo encarándose entonces con el noldo Un primer nacido con sus cualidades... sin embargo para los edain sí son un grave problema. Uno de los más graves que tiene esta ciudad.

 Tras esto, respondió en general al grupo,  ya despidiéndose.

 De momento, nadie les ha pedido que usen las armas caballeros. Sin embargo, creo que en todo momento me he mostrado generoso con ustedes... de ser así, tampoco sería un excepción.

  Y sin aclarar demasiado nada más, se fue de la habitación, arrebujándose en su capa.

 Poco a poco, los aventureros se retiraron a dormir.

Tomé las ultimas palabras del enmascarado por una despedida y me dispuse a abandonar la habitación.

Quedemos para mañana en el desayuno. Les dije a todos...allí podremos planificar nuestra próxima salida. Quien sabe, quizás Rudigar pueda aportarnos alguna información de valor...después de todo el ya esta en contacto con el gremio de comerciantes y es posible que su Maestro sepa más sobre el tema.

Dando por buena mi propuesta me despedí del resto y me fui a mi habitación a meditar sobre lo que había ocurrido.

El silvano no quiso decir más, por la mañana hablarían, sentía un considerable desagrado por aquel humano que se creía que todo era decir "oye que no conozco el lugar pero quedamos en el cementerio que aunque ni lo conozco ya he muerto 3 o 4 veces y he paseado por ahí 8 más"... No sabía que pensar de aquel enmascarado, ¿no sería el Gort su contra oferta de mercado negro y por ello le prestaba tanta atención? Por costumbre nunca era bueno confiar en enmascarados, por eso quienes jugaban con cosas desagradables tendían a cubrirse como criminales.

- voy a descansar también, por hoy ya he alcanzado mi límite de paciencia con desconocidos que "no nos piden coger las armas, pero pretende meternos entre lobos".

El silvano necesitaba pensar, la ira o la rabia nunca eran buenas consejeras, necesitaba relajarse.

8 de Girithron
9:00

 Comenzó un nuevo día. Rudigar desayunó con ellos, pan, tocino, manteca, gachas, leche y queso. No había mucho más dónde elegir. No sabía nada de dicha trama y si bien trabajaba, los asuntos del gremio quedaban muy lejos de los quehaceres diarios de un simple aprendiz.

 El grupo encaraba el segundo día de investigación con algunas cosas claras, pero todavía algunas incognitas que despejar. ¿Cual sería el siguiente paso? ¿Debían dividirse o actuar coordinadamente esta vez?

 Sopesaban opciones frente a unos humeantes boles de gachas.

¿Y bien? comenté nada más sentarme a la mesa.

¿Que tal si vosotros os encargáis de cerrar ese encuentro que teníais previsto con el dueño del almacén...y arregláis el asunto de la anciana...mientras nosotros vamos al barrio de ladrones a indagar sobre el Gort? continué dirigiéndome a los elfos.

Parecía que el Montaraz y el mago habían dejado algunas cosas pendientes en su anterior salida...mientras que nosotros ya habíamos cerrado nuestro encuentro para dentro de dos días y por lo tanto estábamos plenamente disponibles para seguir haciendo constar nuestra coartada.

Esa noche Elendorn meditó como siempre su tiempo necesario y tras ello se sentó al lado de la ventana a intentar observar la luna y las estrellas en busca de relajar su mente y apaciguar su corazón. Sacó la daga que por algún motivo había quedado atrás en el viaje de cierta muchacha y suspiró, sin tener ocasión de ver el techo estrellado con demasiado detalle. No solo era limitado lo que se veía desde su ventna, la luz de algunas lámparas y alguna que otra antorcha menguaba su brillo.

Entonces pensó, que no estaban contemplando todas las estrellas, aquella detención iluminaría un cielo nocturno ofuscando las luces ocultas en las sombras... Cuando bajó a desayunar, lo primero que hizo como siempre fue pagar sus 5 monedas de cobre, antes de dirigirse a la mesa en la que se encontraría con sus compañeros de viaje.

No sabía que hacer, era difícil trazar planes, y más cuando sentía que pretendían cortarles la libertad de averiguar más antes de un plan en su opinión, molesto.