Partida Rol por web

El joven demonio blanco recorrió las calles en silencio sin conseguir presentir nada que le llamara realmente la atención, en un lugar donde lo humano y lo divino se juntaba, era un lugar demasiado lleno de matices que podían dar lugar a falsas pistas de lo que él buscaba, por suerte o por desgracia no consiguió encontrar ningún rastro de sus objetivos lo cual le hizo sentir un poco más tranquilo, por el momento parecía ser que no se habían extendido demasiado por un lugar como aquel.

Finalmente suspiro pesadamente mientras su expresión se relajaba mientras seguía andando la tenuemente iluminada ciudad de la religión mientras aprovechaba para pensar un poco sobre toda la situación, cuando se encontraba solo era los únicos momentos en los cuales no sentía la necesidad de tener que mostrarse calmado y inexpresivo, sobretodo la oscuridad de la noche le ayudaba a relajarse teniendo en cuenta que el podía ver en la oscuridad sin ningún problema.

Sus ojos se cruzaron con múltiples templos de todas las posibles religiones, incluso le llamo la atención tanto el templo de Miyu teniendo en cuenta que su destino actual tenía alguna relación con ella y también se fijo en el templo de un archidemonio, sin duda aquel lugar parecía acoger la mayoría de religiones, resultaba extraño pensar que eran capaces de coexistir en un solo lugar, algo cansado levanto la mirada hacia el cielo cuando alguien le hablo por detrás.

Reaccionando bruscamente se giro hacia aquella persona mientras recuperaba de nuevo su inexpresividad habitual, tal vez lo hacía como algún modo de protección contra los demás, simplemente era natural para él, parecía ser algún tipo de sacerdotisa... ¿Que querría de Belyye?

"Si, ese es mi nombre ¿Que es lo que necesita de alguien como yo?"

-Eso es bueno. La magia elemental es liviana y liberadora. A veces leo libros de ella solo para distraerme un poco. Mi magia es poderosa, pero a la vez es una pesada carga. -pareció sumirse en sus pensamientos- La magia oscura es indudablemente mas poderosa que la magia elemental, o eso creo. Pero a diferencia de la anterior, se alimenta de energías negativas. Entonces, para usar mi magia debo aceptar el mal que esta dentro de todos, en concreto dentro de mi misma. Haciendo esto y usando la magia de esta forma, la tentación de dejarse seducir por el poder de la oscuridad es grande...de hecho le ganó el pulso a uno de mis primos.

Hizo una pausa algo tétrica.

-No existen garantías de que no acabe asi...es algo que me asusta a veces. Sin embargo, tengo que ver el lado oscuro. La curiosidad me puede. Será mi perdición algún día.

Sacudió la cabeza, notando que estaba hablando demasiado.

-Disculpa, creo que a veces me voy por las ramas y profundizo en cosas que no son necesarias.

Tan blasfema afirmación hace que la indignación se refleje en mi rostro un instante, antes de poder evitarlo. Padre siempre decía que no era cortés mostrar el desagrado de una forma obvia. Y que en esas situaciones era cuando más importante es sopesar las palabras.

No hay magia más poderosa que la elemental -Digo con una sonrisa de condescendencia, armándome de paciencia. Despues de todo, solo es una humana- Ni menos. La magia es magia. Hay magos más poderosos que otros, si alcanzan mayor conocimiento de su "arte", y magos más peligrosos que otros en función de las aplicaciones de ese "arte". Pero no hay magias más poderosas que otras. -Eso dicen los maestros de mi nación, y es de sobra conocido que no hay pueblo más ducho en la magia que el de los Elfos Dorados- Más peligrosas puede ser, eso te lo concedo. Tanto en su uso ofensivo como para el propio mago, como bien dices. Pero pocas cosas hay que consuman y devoren más que el fuego, y mi alma siempre estará a salvo de él. Espero que puedas mantener la tuya bien segura, pequeña, de todo corazón.

De algún modo, hablar de teorías mágicas hace que me sienta más tranquilo y seguro. Mis problemas quedan atrás, y agradezco que Scire vaya a acompañarnos. El camino será más liviano conversando con ella.

Scire sonrió al advertir la mueca momentanea de su interlocutor.

-Creo que los elfos se llevan mejor con la magia elemental, no esta mal, pero hay campos que les son mas desconocidos. Te aseguro que La oscuridad devora a la magia elemental, asociada con la magia de la naturaleza. Es tan simple como el hecho de que la magia sagrada aunque es fuerte contra la oscuridad, es bastante débil contra los elementos. Es la teoría del triángulo de energías mágicas que me enseñó mi padre. La oscuridad vence a lo elemental o bien, lo natural...y esta vence a la luz. La luz es fuerte contra la oscuridad, y asi la cadena se repite. Desde hace muchos años y generaciones estudiamos nuestro campo, asi que puedo fiarme de mis referencias.

Pese a las diferentes opiniones, hacia bastante rato que Scire no tenía un debate sobre magia, y aparentemente lo disfrutaba bastante.

Sí, he oído hablar de esas teorías contraposicionistas -Digo sorprendido por el nivel de conocimiento teórico que parece manejar. Ahora disfruto aún más la conversación, puesto que tengo un contertulio a mi altura- Sin embargo eso es válido solamente para magos que se refieren a la magia como poder bruto, las escuelas energeticistas. Los moldeacionistas, en cambio, sugieren que la energía mágica es tan solo una herramienta en manos de un artesano. Cada herramienta tiene su función y cada una su mejor aptitud, pero al final no deja de ser tan eficaz como la mano de quien la emplea. Te lo diré de otra manera... -Cojo un cuchillo de la mesa y se lo tiendo, esperando a que lo coja antes de seguir exponiendo mi teoría- ¿Que arma es más poderosa, tu cuchillo o mi espada? -Señalo la cimitarra que cuelga de mi cinturón- Muchos responderían que mi espada sin dudarlo. Es un arma pensada para el combate, de gran peso y filo. Ahora bien... ¿has visto a que distancia estamos? ¿Crees que podría blandirla, levantarla y descargarla sobre ti, adecuando mi distancia de corte, antes de que pudieras clavarme el cuchillo? Entonces... ¿Que arma es más poderosa?

Sonrió, volviendo a dejar el cuchillo sobre la mesa.

-Entiendo a lo que te refieres, pero el ejemplo ha sido muy bueno. Estoy hablando en terminos meramente de "fuerzas". Es obvio que la magia es mas que una simple arma. Realmente, intento evitar tener que usarla con un fin bélico, me parece un poco ofensivo para una herramienta tan maravillosa. Sin embargo también es un uso al que aplica bastante bien de forma innegable.

Parpadeo.

-Realmente conoces mucho, creí por tus atuendos que te dedicabas solo al uso de la espada.

Sonrio al oirla hablar, pues comparto parte de sus ideas. En efecto, los fines belicos no hacen justicia a la esencia de la magia. Muchos creen que el fuego es simple destructor, usado para devorar bajo sus llamas, y pocos recuerdan que también proporciona luz en la oscuridad y calor en las frías noches. Todos creen que para apagar un incendio, por ejemplo, es necesaria magia del agua, y olvidan que el poder sobre el fuego también sirve para controlarlo o incluso extinguirlo. Quien confunde la magia con un simple arma no comprende su esencia.

No obstante, mi sonrisa desaparece ante el comentario sobre mi aspecto. Viejos fantasmas regresan a mi mente, mientras compruebo el traje ceremonial que llevo puesto y acaricio la empuñadura de mi cimitarra.

Ese se suponía mi destino, me temo. Soy el segundo hijo de una de las familias más importantes entre mi pueblo, la Casa Lionforge. Me correspondía el camino de la espada, y entrar a formar parte de la muy honorable Orden del León de Fuego, rindiendo honores a mi familia al servicio de los Reyes Eternos. No obstante, entre mi pueblo es costumbre que incluso los hombres de armas aprendan los rudimentos mágicos elementales. Mi padre se ocupó de que contara, no solo con los mejores maestros de esgrima, sino también con la adecuada formación mágica. -El ya escaso orgullo que acompaña mis palabras desaparece ya por completo, reemplazado por una melancólica sonrisa de resignación- Es curioso, el destino se oculta en un laberinto en el que, creas o no conocer el camino, es él quien te encuentra a tu pesar.

-Creo que es suficiente de revivir malos recuerdos para ti. No te preguntaré sobre lo que sucedió, pero si algun día sientes la necesidad de hablar, puedes contarmelo.

Miró las manchas que habían quedado de la comida en su plato vacío. No sabía exactamente que decir para no tocar zonas desconocidas que aparentemente no eran muy agradables para Saryllion.

-Deberías ir a dormir también, no sea que mañana el sueño te gane a la hora de comenzar la marcha.

La idea de acumular cansancio por falta de descanso nocturno hace que esboce una cansada sonrisa. La muchacha no debe saber demasiado de nosotros, los elfos, y de nuestro metabolismo. Apenas necesito unas pocas horas de descanso para despertar relajado y vigoroso, cinco a lo sumo. No obstante, sí que lleva razón en una cosa: los dolorosos recuerdos de mi pasado no tan lejano se han apoderado de la velada, y le han arrebatado cuanto tenía de interesante y agradable.

Sí, en efecto, el día ha sido largo y algunas cosas están aún demasiado recientes. Te agradezco que me dispenses de continuar con la velada. Supongo que llegará el día en que sea capaz de hablar libremente acerca de… –Se me atraganta el final de la frase- bueno, de mis asuntos personales y familiares. –Me pongo en pie y me despido con una afectada reverencia- Buenas noches, dama Scire.

Scire se inclinó levemente por acto reflejo como era correspondiente para aquella clase de despedida.

-Solo Scire, estoy muy lejos de casa como para pretender algun título. Descansa.

Ella también decidió buscarse una habitación para pasar la noche.

La mujer sonrie y se quita al tunica de un rapido movimiento dejando ver un voluptuoso cuerpo, la mujer con una daga en cada mano se lanza a por Bellye mientras dice:

- Me alegro asi no me confundire, ahora muere

El ataque de la mujer es extremadamente rapido y es dirigido hacia el cuello de Belyye sin duda es una profesional

El tiempo habia pasado y cuando ambos se disponian para irse a la cama se dan cuenta que estan pracitcamente solo en la taberna, a parte de ellos solo el tabernero que esta recogiendo y un hombre rubio el cual al ver como se disponen a marcharse se pone en pie y se acerca a la mesa:

- Buenas noches, mi nombre es Jaime Krock y como soy un hombre de honor les avisare, a partir de mañana señorita le recomiendo no viajar con ese elfo

Mira de reojo a Saryllion:

- De hecho le recomiendo no viajar con un asesino como el ya que si se interpone entre ese elfo y yo mismo me vere obligado en actuar contra usted, cosa que no deseo hacer.

Se agacha para saludar  a modo de despedida y dice:

- Le ruego señorita atienda a mi advertencia

Mira a Saryllion y sonrie:

- Ahora si me disculpan

"¡!" A causa de todo lo que habia pasado los ultimos dias, Belyye se habai relajado ligeramente y habia bajado la guardia en el peor de los momentos, aun asi lo que mas habia sorprendido al joven es el hecho de la persona que le atacaba, normalmente su vida siempre estaba en peligro por seres monstruosos o algun exorcista demasiado ruidoso en la mayoria de ocasiones en los que se lo habia encontrado, asi que no esperaba un ataque de ese tipo.

Belyye reacciono tan rapido como pudo mientras forzaba su cuerpo a moverse para esquivar aquel ataque, aprovechandose de su agilidad propia sin depender de magia incialmente, era demasiado arriesgado intentar conjurar nada con tan poco tiempo, el joven se movio de forma lateral con un buen juego de pies intentando evitar el mayor maximo de daño posible aun que sin separarse de su agresora.

Me quedo petrificado al escuchar al desconocido nombrar la palabra “asesino”. Me giro y le miro, con el rostro desencajado, incapaz de reaccionar. No es un elfo, eso es evidente. ¿Un caza recompensas? No encaja con alguien que presume –y no me ha dado motivos para dudar de ello, después de todo no es muy práctico darse a conocer de este modo- de honorable. Obviamente tampoco es un asesino. ¿Un galante de la Ley? Los Reyes Eternos y su justicia ya dictaron su pena sobre mi persona, hubo un dictamen, reflejado aún en la marca mística de mi cuello, que solo aquellos con sangre élfica pueden vislumbrar.

Poco importa quien sea, y no es su identidad lo que más me preocupa. Con un nombre u otro, con un origen u otro, es un hombre que ha depositado su honor en mi captura o mi muerte –poco importa la diferencia-. Eso le hace doblemente peligroso, pues no desfallecerá en mi persecución, no vacilará en la lucha, y no habrá manera de hacerle desistir.

¡¡No, no le disculpo, caballero!! –Exclamo, con los ojos desorbitados, presa de una desesperación muy alejada de la rabia violenta, más cercana al dolor interior- ¿Cómo se llamaba la víctima? –Pregunto de improviso, con la mano izquierda en la empuñadura de mi espada, pero sin hacer el menor gesto de pretender sacarla. Nunca llegué a conocer su nombre, la de aquel pobre desgraciado que falleció ante mis ojos en una esfera de fuego- El hombre a quien se supone que he matado. Dice usted ser un hombre de honor, ¡¡honre al fallecido, diga su nombre!!

El ataque de la mujer es rapido y certero, sin embargo en el ultimo segundo Belyye se hecha a un lado haciendo que unicamente sufra un corte en la cara, la herida es superficial y apenas le escuece aunque sangra un poco. Sin perder la sonrisa la chica dice:

- Vaya, no me esperaba eso, parece que eres mas que un mago

"Las apariencias engañan y sobretodo las de los magos" Dijo mientras Belyye se colocaba a una minima distancia de la que posiblemente era una asesina, sin duda habia estado cerca pero por suerte habia conseguido reaccionar a tiempo evitando el mayor de los riesgos, aun asi era posible que la confrontacion solo acabara de dar comienzo teniendo en cuenta como le habian atacado, la mujer era posible que no se rindiera con facilidad.

Aun asi tras ser atacado, Belyye parecio reaccionar ante el estimulo y dejo atras aquella apriencia pasiva mientras una ligera sonrisa aparecia en su rostro, siempre que sabia que tenia que luchar su personalidad cambiaba ligeramente tal vez representando la parte mas oscura del joven demonio.

"Disculpa por mis preguntas, madame, pero seguro que tiene algo de tiempo para responderme mientras me intenta asesinar ¿Quien le manda o al menos me gustaria saber a que viene este intento?" Dijo mientras parecia bastante seguro de si mismo, por el momento lo primero que queria saber el joven era que era lo que sabia realmente la mujer de el.

"In nombrus di antikas benditias, me yaro e skidos qui protectos di chelo, skido celestias" Con una rapida entonacion el joven recito un pequeño y escueto conjuro de magia blanca, mientras lo hacia con enorme facilidad tiro de algunos de los hilos de su magia interior, la reserva calmada y clara que formaba su magia blanca para intentar formar una pequeña barrera alrededor de su cuerpo, para protegerlo de futuros ataques.

Scire se quedó sorprendida, no por la intromisión del hombre o su advertencia en si, sino porque percibió (y casi palpó de lo denso que era) el ambiente de acoso que eso generó en el elfo. Combinado con la poca y sombría reaccion anterior, comenzaba a comprender lo asfixiante que debía resultar el tema. ¿Asesino? No sonaba bien. Pero se rehusaba a creer de momento que estaba ante alguien como aquel tipo que recordaba que estaba con Eliza, que no había dudado en destrozar a una joven por sus causas tontas y faltas de sentido. De a poco iba juntando piezas, con lo que había escuchado del contenido de la carta y esto, pero seguían estando demasiado sueltas para ella.

¿Como se sentiría siendo expulsada de su casa y siendo hostigada con cartas y cazadores...

Cerró los ojos con el ceño fruncido, imaginándolo.

-Entiendo su advertencia -dijo neutralmente- Actuaré en consecuencia.

El hombre sonrie levemente y con voz calmada responde:

- No es algo que me corresponda saberlo realmente, yo solo se que alguien ha ofrecido una recompensa por entregarle vivo o muerto y que le busca por asesinato, no es mas de lo que necesito saber

El hombre hace un saludo cortes a Scire y añade:

- El aviso tiene validez desde mañana y como persona de honor he venido a comunicarselo ya que no me place contar con mas ventaja de la adecuada, lo que si puedo deciros es que debeis ser mas peligroso de lo que aparentais o vuestra victima ser mas importante de lo que planteais pues vuestra recompensa no es nada desdeñable ya que es de un millon

Un millón...

Mis pesquisas se van al traste. Sí que es un simple caza recompensas, un asesino contratado, alguien que irá tras de mí por simple codicia. Dinero, vil metal, tan frío como sucio. Se las da de honorable, pero el honor es mucho más que eso. Nunca lo comprendí, nunca supe actuar como se esperaba de mí, pero Padre sabía perfectamente lo que era el honor, y supo mostrármelo con cada uno de sus actos.

Se las da usted de hombre de honor, desconocido... -Digo con gesto serio y un aire de desprecio- Pero lo único que tiene contra mí es una bolsa de dinero. Ni siquiera conoce a la víctima a la que pretende dar justicia, o los detalles del crimen. A buen seguro ni tan siquiera sabe que el caso ya fue juzgado, ni cual fue la pena impuesta. -Por supuesto, por eso no ha contratado a un elfo para acabar conmigo. Vería la marca mística y sabría que ya pesa sobre mí una condena- Usted no sabe nada, caballero, ni siquiera sabe lo que es el honor. No busca justicia, solo busca un puñado de monedas. Bien, pues acabemos con esto cuanto antes, salgamos fuera y dirimamos esto en combate singular -El desprecio hace que diga cosas de las que me arrepiento al instante. De repente viene a mi mente el duelo con aquel hombre, durante la ceremonia de acceso a la Orden, y el modo en que fui superado a pesar de creerme preparado. ¿Y si todo se repite?- ¿O acaso prefiere acecharme desde las sombras para clavar por sorpresa un puñal en mi espalda? Después de todo, no es usted más que un vulgar asesino...

Belyye no tarda mas que unos segundos en conjurar una proteccion magica a su alrededor, el mago siente como la energia magica esta a su alrededor consiguiendo que sea ams dificil golpearle, sin embargo la mujer simplemente sonrie de nuevo, y ante los comentarios del hombre dice:

- No forma parte de mi forma de trabajar el dar explicaciones a las victimas, como comprendera no da buena publicidad el ir nombrado a los contratistas cierto

La mujer que estaba algo alejada de Belyye guiña un ojo y se desvanece, es entonces cuando Belyye siente algo sobre si y al mirar puede ver como la mujer esta justo encima suyo boca abajo con las armas preparadas dispuesta a asestarle un mortal golpe, sin embargo, Belyye ha reaccionado muy rapido y se aparta rodando hacia la derecha para ver como antes de tocar el suelo la mujer vuelve a desaparecer y reapareciendo en el mismo punto en el que habria caido pero de pie en el suelo:

- Parece que tus sentidos son mas agudos de lo que pensaba, tendre que ponerme algo mas seria