Partida Rol por web

Es una mañana algo más agitada de lo usual en el gimnasio de la mansión, donde un grupo de alumnos se ha reunido para participar de un torneo extraño que tendrá lugar hoy mismo. Varios han aparecido solo de espectadores, mientras que los que planean participar están planeando estrategias en parejas y calentando.

Por un lado están algunos de los gamberros del grupo de Víctor, bien tranquilos, metidos en sus asuntos, nadie los molesta. Belita no puede verse en ninguna parte, no debe haberse recuperado todavía. Momohime tampoco.

Algunas de las parejas son más que evidentes que están ahí para pelear, llaman demasiado la atención por más que quieran pasar desapercibidos.

Un par de chicas de la clase de Yuri, Kotor y Keira también se apuntó con la finalidad de ver si podían usar sus hechizos en combate de manera efectiva, es probable que no se esfuercen demasiado y solo estén aquí para probar a ver qué tal.

...

—Buena suerte Yuri! te estaré animando —Pi Meng saluda al muchacho chocándole la mano, trae una bolsa de cacahuates con chocolate.

—Oye, Espada de Madera, seguro que te has recuperado del todo? ayer apenas podías ser persona.

Wil aparece junto con Sveinn y otro más, en lugar de traer los uniformes escolares, llevan puesto los tres el conjunto de la policía de Tol Rauko.

...

—Ánimo a los dos! —Héctor apoya cada mano en los hombros de Keira y Demetrio, con una sonrisa que intenta levantarles la moral.

—Seguro! —Funciona con Demetrio, que desde ayer estaba medio cabizbajo, pero ahora parece que viene a darlo todo.

...

—Eeeh? En serio te lo has pasado durmiendo? Y qué hay de tu arma? —Kaoru está alarmado por algún motivo, se acerca corriendo a Kotor mientras le reprocha —Rápido, vamos a los dojos a ver si nos prestan algo!

—Todavía tienes tiempo, es bien temprano.

Lyon está más pálido que de costumbre, y respira con dificultad. Se sienta en el suelo para sentirse mejor mientras Elicia le masajea los hombros.

...

—Los de la clase 1-C vengan un momento! —aparece el tutor de la clase de nuestros protagonistas, Osvaldo, con una caja de cartón bajo el brazo —no, me refiero solo a los que van a participar —aclara cuando ve que se le viene encima un montón de gente. El grupo que queda sigue siendo relativamente numeroso.
—Necesito que saquen una bola de esta caja —dicho objeto tiene un agujero para que se pueda meter la mano —están numeradas, y con ellas designaremos el orden en que irán y contra quién les tocará pelear.
El perro gigante llamado Tobe que siempre lo acompaña está parado en las patas traseras con un letrero en alto que dice "1-C" y ayuda a formar una fila para sacar los números de la caja.

Pasada la noche ya me encuentro en perfectas condiciones. Mi energía espiritual está completamente restaurada y solo me queda algún que otro moratón en el cuerpo a causa de la pelea del día anterior. Ni siquiera es algo a tener en cuenta para el torneo que me espera hoy, por el cual me levanto con total entusiasmo yo solo, por primera vez en la historia desde mi nacimiento.

Una vez llegado a la academia, lo primero que hago es asegurarme que mi prima Hanako se encuentra bien. Parece que todavía está con fiebre desde el día anterior, pero según el señor Kamigawa parece que está estable y debería despertar pronto, así que me quedo más tranquilo y me dirijo con toda calma hacia el gimnasio, saludando sonriente a la gente que me voy encontrando por el camino, incluso a los desconocidos. Entrando en esta ansioso por ver a quienes se han apuntado a esta competición, suponiendo ya que hay varias de las implicadas ayer que no van a poder estar y, tal y como suponía, así ocurría. Al entrar le choco la mano a Pi Meng.- Gracias! Espero estar a la altura de las expectativas, aunque la que consideraba más peligrosa parece no estar.- Comento observando que Momohime todavía no se ha debido recuperar del todo y no participa.- Y a la mayoría no le conozco de nada, así que voy a ciegas.- Estallo en una gran carcajada mientras este se aleja y mi compañero de equipo aparece por detrás, hablándome de la misma forma de siempre.- No te preocupes.- Le respondo sonriente y dando algún que otro saltito a forma de broma.- He dormido como una marmota toda la noche y estoy en plenas condiciones. Tu estómago está en condiciones, no?- Bromeo, recordándole "sutilmente" lo ocurrido el día de ayer por la mañana, aunque era obvio que después de pasar por las manos de Taisei-sensei iba a estar perfectamente.- Anda mira, compañeras de clase!- Exclamo felizmente, ignorando a Wil durante unos instantes.- Perdona, hablamos de la estrategia cuando sepamos a quién nos enfrentamos, vale?- Termino con él, dirigiéndome hacia mis compañeras.

- Hey, Natasha!! Corentine!!- Saludo desde lejos a mis compañeras de clase. Por si no se nota, no hay absolutamente ninguna presión sobre mí, como si me encontrase en mi propia casa.- No sabía que os interesara este tipo de eventos! Qué alegría tener a gente conocida por aquí!- Termino llegando a ellas son una gran sonrisa en mi rostro.- De verdad espero que tengáis suerte, aunque no os lo pondré fácil, vale?- Se nota a la perfección que no hay ningún tipo  de malicia en esa frase "desafortunada" por mi parte, sino que realmente piensa que se va a enfrentar con todas sus fuerzas a quién le toque enfrentarse a él.- Cómo os dio por apuntaros entonces? Si no recuerdo mal... vosotras sois más bien hechiceras, no? No será complicado siendo las dos así cuando os enfrentéis a alguien que luche rápido?- La verdad, tengo curiosidad acerca de eso. Tengo entendido que los hechiceros tardan cierto tiempo en poder realizar sus hechizos y sé de primera mano que no son tan rápidos como la mayoría de guerreros, pero puede que esté equivocado. Después de todo ellas están aquí.

Pasado un rato, el profesor nos pide que nos acerquemos para sacar lo que parece que será el número por el que tendremos que luchar. Así que el director no pensó en ninguna burrada en principio, así que será completamente aleatorio. Por lo tanto me acerco el primero a la urna y meto la mano en la caja para sacar el primer número y es el 8!! Esto es perfecto. Si vamos por orden numérico podré ver cómo luchan todos los que pasarán a la siguiente ronda y tendré más tiempo de plantear diferentes estrategias para ellos.- Hey Wil! Somos los últimos!!- Estallo en otra carcajada mientras me voy alejando, pero me paro un segundo para hablar con Olvaldo.- Por cierto, habrá descansos entre rondas? Más que nada por no perder la ventaja los hechiceros y usuarios de ki después del primer combate... Principalmente los hechiceros, que se cansan muy rápido!-Pregunto. Realmente no tengo muchas intenciones de gastar la mayoría de mi ki en lo que parece que serán como máximo 3 combates, pero mis compañeras de clase son hechiceras y tendrán muchas dificultades si pasan la primera ronda utilizando sus reservas de lo que llaman Zeon

Al ver al pequeño Kaoru acercarse a reprochar, me rio un poco

-¿Dormir todo el dia? ¿Yo? ¿La vispera de un torneo importante con un premio en metalico en juego?-sonrio de forma picara-No he estado durmiendo, he estado entrenando.-viendo la enorme duda que se refleja en el rostro de mi compañero, me explico-Existe un complejo entrenamiento que muy pocos logra dominar eficazmente, un proceso mental donde, concentrando tu imaginacion, puedes ver a tu rival y plantearte todo un combate en tu mente. Yo lo llamo visualizacion, pero ignoro si existe un nombre para esto. Gracias a este entrenamiento tengo varias estrategias que podemos poner en practica y, aunque quede feo que yo lo diga, son la mayoria bastante buenas

Mientras hablo, escucho al profesor llamarnos. Al girarme para ir hacia él, señalo el paquete de tela que llevo al hombro

-Y no te preocupes por el arma, hable con la subdirectora, a fin de cuentas, fue ella quien me dio la primera, y me dijo que esta encajaba bastante en lo que describí: un arma ligera, de una o dos manos, de una longitud similar a la bastarda, y cuya fuerza no sea mala-le digo confiado. En realidad, no se si esta es o no "mi" arma, pero seria bastante divertido que asi fuese

Tras sacar la bola, veo un lindo 4. Si esto va a ser como yo creo, nos tocara luchar contra quien saque el 3, y eso significaba salir en el 2º encuentro, el 1º paso para llegar al premio

-Kaoruu, nos toco el cuatrooo-de forma infantil y alocada, mientras agito la bola en lo alto, informo de nuestro puesto. No es mi numero favorito, pero si el de la suerte, asi que estoy bastante contento con el resultado

Por fin había conseguido una noche de descanso completo. Aún no estaba completamente recuperada, pero el entrenamiento de respiración de Lord Rondinelli me había ayudado a tranquilizarme pese al continuo riesgo de secuestro. Ya no me sentía inagotable, pero para cuando desperté me sentía mucho mejor.

Finalmente llegué al instituto, esta vez teniendo que salir bastante más pronto. El torneo empezaría pronto, y ya estaban la mayoría ahí. Me junté con Demetrio y Héctor, y miré a mi alrededor. Johnny parecía tener ganas de volver a la enfermería, y como suponía Momohime y la enana no estaban en condiciones para presentarse.

El torneo no me hacía particular ilusión, pero dado que mi participación era obligatoria no había más remedio. Empecé a hacer estiramientos mientras Héctor le levantaba los ánimos a Demetrio, y entonces llegó el profesor con el método de selección. Dado que aquello era por el espectáculo, que menos que dar un poco ya para coger la bola. Un aplauso, vuelta completa y sacar la bola mientras doblo mi espalda hacia atrás para mirar el número. Volví entonces a una posición normal antes de dirigirme a Demetrio.

- Número 7 - dije con total naturalidad, a diferencia de la emoción que parecían haberle dado el resto de mis compañeros.

—Yo qué sé. Por las dudas no te consumas del todo en la primera ronda. —No hace más que chasquear la lengua con tu comentario de su estómago y mirar hacia otra parte.

...

—Esa es una muy mala excusa para decir que estuviste vagueando, Kotor!

...

—Aah, esto no me gusta nada, creo que somos los únicos que vamos desarmados.

...

Corentine y Natasha se habían quedado distraídas mirando a Yuri entrar, levemente ruborizadas al haberse dirigido a ellas directamente. Son las únicas que quedan de la clase 1-C y posteriormente pasarán a buscar su número el resto de la gente.
—Es un seis! —levanta la bola enseñando el número y regresa con su amiga.

A continuación se aproxima Ganaha y saca... —dos —dice con calma y vuelve a su lugar.

El siguiente en pasar es uno de los vestidos de ninja de las tierras orientales. Pone una mano contra su pecho con los índice y medio hacia arriba mientras retira su número. Enseña en alto una bola con el número 1 y finalmente regresa junto con el otro.

Y luego Johnny, que va caminando muy seguro de sí mismo para sacar un —tres!  —y le entrega la bola a Osvaldo.

—Bueno, parece que a nosotros nos toca el cinco, Elicia.

—Sí.

Una vez todos tienen su número, Osvaldo presenta una gran pizarra con un árbol de eliminatorias en él, y escribe los nombres de los participantes correspondientes a cada número, que están ordenados en el origen de cada rama.

—Bueno, permítanme que les explique —cuando habla la mayoría de los presentes callan para escucharlo —como podrán ver, tenemos ocho parejas, y habrá tres rondas, los perdedores son eliminados y los ganadores pasan a la siguiente.
—Solamente hay un par de reglas que les debo recordar, la primera es que todo el gimnasio será el campo de batalla, pero está prohibido salir de él, quien lo haga quedará descalificado.

—Eh? Todo? Y dónde nos metemos los espectadores?

—Los dos miembros del equipo deben estar hábiles para pasar a la siguiente ronda, si uno solo queda KO o se rinde, ambos quedan descalificados y le darán la victoria al rival.

—Entonces, sin más que decir...
Va a seguir hablando, pero el perro Tobe lo mira. Se cruzan las miradas un momento y Osvaldo asiente.

—Es verdad, gracias por recordármelo. El premio para el ganador será un viaje all-inclusive de una semana para seis personas a la isla Paradis Paradis durante las vacaciones de verano.

—Muy bien, el torneo comenzará exactamente en media hora —son las ocho de la mañana —sin ninguna clase de retraso ni prórroga. Buena suerte.

- ¿Es que crees que necesitas algo más que tu propio cuerpo? Confía más en tus capacidades.

La verdad es que no estaba muy segura de nuestras opciones en el primer combate. Contra Momo, Yuri había acabado completamente agotado antes siquiera de terminar el combate, pero por otro lado fue capaz de vencer al que estuvo a punto de secuestrarme. Jugar a la larga me podría dar la ventaja, pero de entrada era más fuerte que yo. Por otro lado, no sabía de las capacidades de Wil. Sin embargo tampoco me importaba tanto ganar, el premio no me motivaba especialmente, salvo que tuviera la opción de revenderlo luego.

- ¿Que sabes sobre el estilo de combate de Wil? - le pregunté a Demetrio, en voz lo bastante baja como para que quedara entre ambos -. Creo que podremos ganar si somos capaces de aguantar lo suficiente, por lo que he visto Yuri se quema muy rápido en combate.

—Hmm... su nombre es Wilfried von Aichberger y es el vicecomandante de la división de Tol Rauko de Dresden, es todo lo que sé de él, nunca lo he visto pelear.

Pasada la media hora, aparece de nuevo Osvaldo tocando un silbato para llamar la atención de todos.

—Muy bien, daremos inicio a primer combate del torneo, quiero que se acerquen aquí Kagemaru, Kagenosuke, Ganaha y Drache.
El profesor está parado en el centro del gimnasio, mientras que su perro está abriendo espacio movilizando al resto de la gente para que haga un gran círculo alrededor.

Las dos personas vestidas de ninja, y las dos muchachas de aspecto intimidante están en el centro del gimnasio aguardando a que Osvaldo de la orden de comenzar.

No se ven las armas de los ninjas, naturalmente deben llevarlas escondidas, mientras que Ganaha porta su enorme martillo y Drache lleva una espada enormemente ancha, posiblemente se trate de una quebradora o rompearmas, como comúnmente la llaman.

—Bien, pueden comenzar —alza la mano y la baja, para después dar un salto sorprendentemente ágil hacia atrás y ar espacio para que se batan los contendientes. Nadie se esperaba un movimiento tan veloz por parte del tan tranquilo profesor Osvaldo.

En eso los dos ninjas desaparecen al instante en una nube de humo y las chicas se quedan mirando en todas direcciones, esperando claramente un ataque sorpresa por parte de ellos.
Y aparece uno tras Ganaha, que la golpea en la nuca con el canto de la mano. Sin embargo, la jayán ni siente el golpe, y sonríe con gracia al ninja, al que le aparecen gotas de sudor nervioso por encima de su máscara.

Pronuncia entonces unas gruesas palabras en un lenguaje incomprensible para algunos —Ima da, aniki! —pero para los que saben yamato entienden un "hermano, ahora!"

De entre los espectadores surge saltando en el aire el otro, que produce velozmente sellos con sus manos y al aterrizar golpea el suelo con el puño —baku'en ryuu! —exclama con una voz también gruesa y tosca y una bola de fuego surge del impacto de su mano, que va rebotando por el suelo hasta las muchachas.

—Agh! fuego otra vez... Drache!

La otra aparece velozmente delante de Ganaha y maniobrando con su espada que parece demasiado pesada como para su constitución hace un corte de abajo hacia arriba, partiendo la llama en dos.

—Nani?! Baku'en ryuu ga...!

—Malditos otaku, hablen en cristiano! —Ganaha avanza a grandes zancadas para hacerles un barrido con el martillo, que los ninjas son capaces de esquivar tranquilamente. —Tche.

...

—Esto va para largo, la jayán es demasiado lenta, menos mal que traje más cacahuates.

—Ey, convídame alguno.

—Vale —Meng le acerca la bolsa a Wil y tanto él como Sveinn cogen algunos.

Observo el combate con atencion. Viendo como se esta desarrollando la lucha, parece que el bando de las chicas tiene mayor posibilidad de ganar, aunque los "ninjas" siempre deben tener uno o dos trucos bajo la manga, no seria de extrañar que pudieran darle la vuelta al combate

-Mmmmm... Kaoru, tu que piensas? -le pregunto a mi compañero-¿Contra quien preferirias luchar despues? Creo que el grupo de chicas seria mas facil de enfrentar, usan tacticas simples, del tipo frontal, mientras que los chicos parecen ser del tipo de combate de acrobacias y tacticas ocultas, molesto de lidiar con ello

—Pues... no lo sé, ambos dan miedo. Por alguna razón siento que esa chica Drache es muchísimo más fuerte de lo que aparenta, ella sola está defendiendo a la otra de los ataques de los dos ninjas.

—A mí tampoco me gustan las tácticas cobardes, preferiría no tener que tenerlos de rivales.

El combate se alarga minutos mientras los ninjas prueban una y otra manera de acercarse a Ganaha y Drache, pero todas sus técnicas son fácilmente rechazadas. Al final ya están empezando a agotarse, y a quedarse sin trucos.
—Qué pasa? cansaditos ya? —Drache lleva su enorme y gruesa espada al hombro como si fuera liviana como de cartón.

El ninja hermano menor lleva una mano atrás y saca un tanto que manipula con destreza, y se pone a correr a toda velocidad.

Mientras que el hermano mayor saca varios shuriken que empieza a cargar con su ki.

—Drache, se gentil con ellos —Ganaha ya está sentada en el suelo viendo el combate, sabe que es demasiado lenta como para sus enemigos así que no puede hacer mucho.

Y todo lo que hacen es inútil, los shuriken son rechazados por la enorme espada de la muchacha, a la vez que parte en dos el arma del otro como si fuera de manteca.

—No, ahora empiezo a sentir más miedo de ellas, y algo de pena por los ninjas.

—Ya acabemos con esto —Drache clava la espada en el suelo, rompiendo el parquet barnizado del gimnasio, y apoya la espalda en ella cruzando los brazos —Nothing Else Matters!

Los capaces de ver matrices pueden notar aparecer una bola verde con miembros que está dividida en dos como si tuviera una gran boca, que abre y empieza a acumular electricidad dentro, la cual es perfectamente visible para todo el mundo.

Antes de que los ninjas puedan prepararse, les dispara una tremenda descarga que baña por completo a uno de ellos.

—Anikiiii!!

Sin embargo, cuando el rayo se disipa, en lugar del cuerpo carbonizado del sujeto hay un grueso tronco de árbol en el aire, que cae al suelo.

De debajo del suelo de parquet aparece la figura del supuesto malherido, sin ningún rasguño, y atrapa a Drache, abrazándola fuertemente por la espalda.
—Ninpou Shin Mozu Otoshi!

—Drache! cuidado!

Drache no se altera ni se inmuta —pff... mala idea.
Entonces se ve como el brazo de su matriz se superpone con el de ella, y ambos agarran de la muñeca al ninja, oprimiendo con una fuerza tan exagerada que se quiebra y se dobla de una manera en que no debería.

—AAAAAAGH!!! UDEEE!!! UDE GAAAA!!!!

—Estúpido, acaso no te llamaba la atención que pudiera levantar una espada tan pesada? Nothing Else Matters tiene la fuerza de diez mil gorilas, te será imposible atraparme.

—B-baka na... Aniki...!

Ganaha acaba con el ninja del brazo partido dándole un gran martillazo en todo el cuerpo, que lo lanza varios metros y rueda por el piso hasta la pared, quedando inconsciente.

—Las ganadoras son las señoritas! —aparece de la nada Osvaldo a anunciar a las victoriosas —felicidades, lo han hecho bien, pero tengan más cuidado de no romper a sus compañeros.

—Es un torneo de combates, qué esperas que suceda?

Sin responder a Drache, Osvaldo hace unas anotaciones en una libreta que tiene y hace sonar de nuevo su silbato —Muy bien, ahora Johnny, Thurrul, Kotor y Kaoru, favor de acercarse!

—Oh sí! finalmente llega nuestro momento!

—Vamos, Kotor, que suceda lo que tenga que suceder...

Y ganaron las chicas. Bueno, el lado positivo es que tocara luchar contra alguien que ataca de frente, el lado negativo es que es como "un millon de gorilas"... Creo que la espada bastarda hubiera sido mas practica, esta arma parece mas fragil, no creo que sea buena idea que reciba un golpe directo, si no puedo devolverla entera ¡Me podrian hacer pagar el coste entero! A veces odio ser pobre...

-Si, como dices, que sea lo que tiene  que ser-le digo a mi compañero mientras abro el paquete de tela que portaba, revelando asi dos katanas. Tras colocarme una en la cintura, avanzo con la otra en la mano, sujeta por la funda, hasta llegar al punto de encuentro. Dirigiendome a mis adversarios, sonrio-Tengamos un combate divertido, si?

—De seguro lo será, amigo!

Johnny y Thurrul se acercan a Osvaldo a la vez que lo hacen Kotor y Kaoru.

Kaoru aspira hondo intentando calmarse —bien, demos lo mejor, Kotor.

—Comiencen.
Osvaldo suena el silbato y salta ágilmente de nuevo para dar espacio a los contrincantes.

—Ghost Raider! —Johnny hace un par de ademanes en el aire, canalizando magia, mientras que Thurrul permanece inmóvil en su lugar, con una postura encorvada, observando en todas direcciones.

—Stayin' Alive! Prepárate! —exclama Kaoru mientras que su matriz escorpión se empieza a materializar.

Tan pronto como dan la señal de comienzo, me lanzo de frente contra el enmascarado. Esa mascara... me fascina, quiero una igual, a ver si logro quitarsela y quedarmela de trofeo

-El primer golpe decide la victoria-proclamo mientras trato de golpear a mi rival con el arma, funda incluida

Tras un rapido movimiento, procedo a dar un paso lateral, un buen ataque es bueno, si, pero mejor que no el no logre darme a mi

Sin embargo, apartarme no es lo unico que hago, aprovechando la distraccion, trato de meterme en su mente. Si logro ver a tiempo real lo que va a hacer, contraatacarle sera mas facil.

Thurrul se inclina hacia atrás, casi tocando el suelo con la cabeza, mientras la katana filosa de Kotor pasa horizontalmente por encima suyo. Sin volver a enderezarse apoya las manos en el piso y camina con ellas hacia atrás para alejarse.

Y junto a Johnny, que está acabando de lanzar un conjuro, aparece una enorme motocicleta de aspecto violentísimo, con cuernos y pinchos por todos lados, una calavera furiosa en la parte delantera y las ruedas envueltas en llamas, que solamente Kotor y Kaoru pueden ver y es completamente invisible e intangible para el resto de las personas presentes.

Thurrul se pierde de vista entre el grupo de espectadores y desaparece.

La motocicleta ruge con potencia y embiste directo a Kaoru.

—Esa cosa está viva!! —la matriz de Kaoru se prende de su espalda y juntos desaparecen en una luz pixelada que los engulle, y vuelven a aparecer escasos metros a la izquierda.
—Por poco...

Sientes que tu matriz intenta ingresar a la cabeza de Thurrul, pero él se resiste a ser invadido.

-Tsk, otra vez se resiste...-comento, al tiempo que pierdo de vista a mi adversario. Como cabria esperar de alguien con una mascara tan bonita, va a lograr que me ponga serio

Y entonces el otro sujeto realiza su tecnica

-Wooooooow-me emociono todo al "ver" algo que los demas no ven-¿Como haces eso? ¿Me enseñas? Es genial esa cosa, yo quiero una

Tratando de ser serio, miro entonces al arbitro

-Esto...-señalo la multitud donde se fue el enmascarado-¿Eso no cuenta como abandonar el combate? Bueno, da igual...

De forma algo desconcertada, cambio entonces de objetivo. Si el enmascarado no quiere luchar, pues que no luche, vamos a por el otro entonces. Con una nueva carrera, cargo contra el rubio, apuntando al pecho, no creo que le haga gracia que accidentalmente le corte el pelo, ese peinado no lo tiene alguien quien no se preocupe de él

Nuevamente, tras el camino de mi espada, va mi matriz, una linda cadena de color purpura, hacia la mente de mi rival, tratando de entrar en su interior y contarme asi sus pensamientos

- Ya veo, no había pensado en eso.- Comento pensativo con una sonrisa a Wil cuando veo que el enmascarado se mezcla entre nosotros- Todo el gimnasio es territorio de combate, nosotros somos... posibles víctimas de un ataque?- Estallo en una carcajada mientras sigo mirando el combate en lugar de seguirle la pista al encapuchado. Después de todo, si lo sigo con la vista le daría ventaja al otro equipo y podría hacerle perder su escondite para hacer alguna cosa de las suyas

—Jeh, estás como a quinientos años de que te enseñe!
Pese a esto, el espadazo de Kotor no es esquivado y hace un limpio corte en el pecho de Johnny, que es inmediatamente partido en dos. El pedazo superior sale volando por el aire en cámara lenta mientras se derrite, revelando poco a poco la máscara de Thurrul, y finalmente ambas mitades se evaporan convirtiéndose en polvo gris que desaparece.

El verdadero Johnny está evidentemente mezclado entre los espectadores al igual que su compañero.

En el centro del gimnasio sigue la enloquecida motocicleta, dando vueltas en círculo para atropellar a Kaoru, que sigue usando su matriz para teletransportarse justo en cada instante antes de ser golpeado.

—Hay que hacer algo con este monstruo, Kotor, no me deja prepararme para apuntar bien!

El chico tensa el arco y dispara, pero la flecha traspasa la moto como si no hubiera nada allí —caray! —y en efecto, para los demás que están mirando, es como si Kaoru hubiera disparado al aire, ya que no ven a lo que se están enfrentando.

Entonces, sin previo aviso, mientras están todos distraídos con la moto rara, de entre la gente empiezan a llover Thurrul.

Primero saltan dos, luego cuatro, cinco. Kotor los ve y hace un esfuerzo brutal para no desmayarse. Hay en el campo de batalla unos diez Thurrul, todos encorvados y con la cabeza que no para de mirar en todas direcciones y moverse de forma extraña.